Yami quedo petrificado como era posible que esas palabras, horribles, salieran de la boca de su aibou.
- ¿Qué? - es lo único que atino a decir.
-Lo que escuchaste necesito que me ayudes con una chica, como te diste cuenta varias chicas me buscan, pero para que las ayude a llegar a ti y yo te agradecería si me ayudas a ser más como tu –
POV YAMI
-Lo pensare- dije sin mirarlo y estaba molesto, como no estarlo, lo que me pedía era mas que una locura.
Pasaron unas cuantas horas en las que Yugi no dejaba de insistirme de que le ayudara. Quería decirle un no muy fuerte para que dejara de molestar con ese asunto, trataba de evadirlo y darle cualquier excusa para que preguntase mas tarde pero ese chico era muy terco.
Me sentía bastante frustrado, las personas que me han visto como una potencial pareja me valían un bledo, yo quería que Yugi fuera el que me viera de esa manera. Trataba de perderme en mis pensamientos mientras estaba en mi cama, pero ese chico seguía insistiendo.
-Está bien te ayudare, pero tendrás que cumplir con mis reglas y si no lo haces terminare con eso de enseñarte, ¿aceptas? –
No pude evitar sonreír ante la cara linda que hizo cuando reflexionaba si acceder o no a mis condiciones.
-Estoy de acuerdo-
-Bien empecemos, esa chica no está nada interesada en ti y la razón es que tú siempre estas a su disposición, seguro que hasta le haces su tarea. Primera regla no le vas ni a dirigir ni el saludo-
-No crees que ella me odiara si hago eso, no creo poder con eso, ella va en mi salón -
Antes de que siguiera coloque mi dedo en su linda boquita. -No es necesario que te exaltes y si no cumples con lo que digo, esto se termina aquí-
Mi hikari se sonrojo cuando realicé ese movimiento, eso me dio algún tipo de esperanza y no todo lo vi perdido, el si debía sentir algo por mi o eso deseaba con todo mi ser.
-Y como segundo requisito debemos cambiar tu estilo-
-Mi estilo no tiene nada de malo además antes parecía un esclavo sexual con tanto cuero y cadenas – dijo un poco molesto, había en ciertos aspectos en la vida de Yugi que no podía realizar comentarios y en esos aspectos estaba su forma de vestir.
-Y dime ¿Cuantas novias has tenido con tu forma de vestir de ahora? -
Eso pareció silenciarlo y con un poco de pesar accedió a esa exigencia y así con lo que nos quedaba de la tarde nos dirigimos al centro comercial.
En el camino trataba de verme serio y normal o tan siquiera tener una facción no tan emocionada, en verdad quería ver a mi hikari con esa ropa de nuevo, no sabía porque había dejado de utilizarla si le sentaba tan bien y ahora con lo que ha crecido y tiene ciertos atributos más que antes.
Pasaron unos minutos desde que entro a uno de los probadores con la ropa que escogí para él, esperaba que le quedara aquello.
Cuando salió poco me faltaba para babear, en algunos chicos le sentaban bien los años y Yugi no era la excepción, se veía increíble.
Continuara….