No dejo que esa mujer me siga mirando como sí está batalla la hubiese ganado. Salgo corriendo por los pasillos sin importarme el fuerte dolor de mi parte trasera, y corro escaleras abajo tratando de poder llegar a la cocina, aunque claro está que no puedo evitar las lágrimas que se acumulan en mis ojos ni mucho menos como estas bajan por mis mejillas una tras otras hasta el punto que me detengo y me apoyo en la pared para estabilizarme. Mi pecho no deja de doler y sólo me maldigo por haber caído ante un imbécil y un cretino como JongIn ahora sólo me siento como un puto adolescente pero lo peor de todo es el sentimiento al pensar que ese hombre sólo me utilizo por qué ¿para que el rico y famoso CEO buscaría a un estúpido y ordinario chico como yo? No alcanzo a responderme mi pregunta porque unos pasos suenan a lo lejos, respiro y llenándole de valor bajo lo que me queda y corro hasta el mismo lugar de anoche, aunque ahora la cocina está totalmente abierta entro y veo a una señora de edad limpiando los alrededores
-Hola d-disculpe pero yo ayer vine a dejar unos postres desearía saber dónde está mi carretilla. Pregunto nervioso.
La mujer me mira y se sorprende al verme en una ropa que me queda muy grande para ser de mi tipo y después posa su mirada en mi rostro hinchado y los ojos húmedos.
-¿Te encuentras bien? ¿Quieres que llame a alguien...?
-No, por favor sólo necesito irme. Le imploro cansado de estar en este lugar.
Ella asiente y se aleja unos momentos para buscar lo que supuestamente es mi carretilla, espero unos segundos interminables y la veo llegar con ella de la mano. Trato de darle una sonrisa que más bien me sale como una mueca torcida.
-¿No quieres esperar tu paga?
-No respondo tajante alejándose casi corriendo por la puerta trasera
-No quiero nada que me recuerde a JongIn. Susurro para mí mismo caminando hacia la salida con paso rápido
Las personas me miran murmuran y se burlan pero no me importa yo sólo quiero llegar a casa y morir de pena.
Llevo horas caminado y corriendo no sé porque lo hago sin embargo ayuda a que paré de llorar, a unos metros de mi casa tiró la carretilla al suelo mientras me desplomo con ella un pequeño grito de lamento sale de lo más profundo de mi pecho y vuelvo a sentir el olor de ese hombre por todo mi cuerpo me aferro a la carretilla y lloro trato de levantarme pero no puedo ningún miembro de mi cuerpo reacciona , mucho menos cuando veo a mama en la entrada de la casa esperándome nerviosa y preocupada con sus brazos cruzados y su delantal de cocina floreado, es tarde para arrancar porque en ese mismo instante ella levanta la cabeza y me ve al inicio de la calle de rodillas y sujetado a la carretilla... Corre sin pensarlo con sus brazos abiertos para mí y yo sólo reacciono apoyándome por completo en ella.
Sus brazos me aprietan con fuerza, mientras yo no aguanto más el dolor y reviento lágrima tras lágrima sollozó tras sollozo
-KyungSoo ¿por qué lloras? ¿Qué sucedió? Me pregunta sobando mi espalda.
Lo peor de todo es que no sé cómo responderle... Lloro porque mi primer hombre mi primera vez mi primer beso mi primer todo ha sido con un hombre que sólo quería a un niño para tener sexo y después dejarlo, porque con ese hombre con el que mi mente no ha parado de pensarlo ese hombre que me tiene repleto de ira y de desdicha está casado y yo he cometido el error más infame de mi vida de meterme con el sin meditar que para él sólo era un juego ¡me he vuelto un puto! Me siento sucio de pies a cabeza hasta mi alma la ciento contaminada... Sin embargo lloro porque no he recibido la paga porque sé que tendré que dejar el colegio y no podré graduarme, porque sé que después de este episodio mi hermano no debutara y si lo hace los rumores de que su hermano se metió con el CEO casado no cesaran.
-Vamos hijo entremos
Me levanta con cuidado y sostiene mi carretilla con su otra mano caminamos lo que queda en silencio hacia la casa, mi mama abre la puerta y entramos a la sala me siento en el pequeño sillón y lanzo un suspiro agotado, mama va hacia la cocina la espero para recibir mi merecido reto, hasta que llega con una tasa y un líquido caliente en ella
-Toma hijo para que pase el frío.
No hacía frío pero estoy seguro que lo dijo por las lágrimas mis secas.
-Gracias. Respondo con una sonrisa, mientras ella se sienta a mi lado
-¿Que sucedió?
-Nada es sólo que me perdí y pensé que no iba a llegar.
-¿Y se puede saber dónde estabas que te habías perdido?
-Fui a una fiesta con Suho. Digo tomando un poco de té para evitar su mirada.
-Y no me avisaste...
-Lo siento mama es sólo que has estado tan ocupada que no quería molestarte.
-¡Muy buena respuesta Do KyungSoo ! Eso no me lo creo para nada ¡soy tu madre y estoy completamente segura que eso no fue lo que ocurrió! Te quedaste toda la noche afuera y llevas una carretilla ¡Dímelo o iré a preguntarle a todo el mundo la verdad! Grita exasperada mientras me indique la mire.
-Mama no volverá a pasar. Respondo sin despegar mi mirada de la tasa que está entre mis manos.
-¿Qué cosa no volverá a pasar KyungSoo?
Mis ojos arden y no se sí es por el calor que emana la tasa o si es por la sensación de que algo más definitivamente no va a volver a pasar.
-E-esto no volverá a pasar.
-Por Dios KyungSoo que paso. Susurra mientras deja la tasa en la mesita y yo inmediatamente apoyo mi cabeza en su regazo como cuando era pequeño.
-C-cometí un error terrible mama. Logro decir con la garganta hecha un nudo
-¿Cuál error?
-N-no puedo decirte- logro articular nervioso y repleto de pena
-¿Fue en el colegio? ¿Peleaste con alguien?
-No
-¿Tus notas bajaron? ¡No me digas que te pillaron copiando! Grita enojada haciéndome estremecer
-¡No mama! Yo no hago ese tipo de cosas ni si quiera se lo que es copiar. Menciono falsamente
-Entonces si no es algo sobre la escuela... Debe ser sobre un alguien en especial...
Llevo mis manos a mi cara y trato de cubrirlas, siento sus propias manos en las mías quitándomelas de mi cara para agarrar las de ellas
-¿Te volvieron a romper el corazón?
Sus palabras son como un balde agua fría, tratado de incorporarme de su regazo pero ella me sostiene ahí, quiere saberlo pero yo no le puedo contar el tamaño de mi error o estoy seguro que de aquí no saldré hasta que cumpla cuarenta y con un calzoncillo de castidad
Así que sólo asiento moviendo mi cabeza levemente, ella resopla
-¿Y qué aras hijo mío...?
¿Qué aré? Esa es la gran pregunta que repleta nuevamente mis ojos de lágrimas saladas
-No lo sé - susurro quitándome las lágrimas que brotan con frenesí - no puedo terminar algo que nunca inicio, no tengo derecho a sentirme mal por ello ni mucho menos reclamarle a esa persona si en realidad ... nunca fue mío
-A lo mejor deberías hablar y q…
-No- interrumpo levantándome poco a poco de su regazo- se cuál es mi lugar mama, y definitivamente no es a su lado tengo cosas mucho más importantes de las cuales preocuparme como para estar mendigando cariño ajeno.
-Está bien pero eso no borrara el dolor. Dice limpiando mi rostro mojado con sus cálidas manos
-No, pero me ayudara a levantarme.
Son las seis de la mañana y mi hermano se acaba de ir a la empresa, ni siquiera lo he visto para hablar de cómo le está yendo, aunque llega todos los días con una sonrisa, él es feliz y eso me hacer serlo también. Me levanto con mucha flojera porque la verdad fue que no pase una buena noche, soñar con que el señor Kim se reía de mi junto con su amada esposa me perturbo toda la noche hasta hacerme sentir la cosa más fea y estúpida del mundo. Ordeno mi mochila me alisto y voy a tomar el desayuno, mama dejo una nota indicándome animadamente que tuvo que salir antes pues debía preparar pasteles para un matrimonio que se iba a celebrar el sábado, así que me alimento de lo que me deja en la mesita y parto hacia la salida.
Voy caminando por la calle cuando mi teléfono blanco y negro suena
-Hola
-¡KyungSoo! Me tenías preocupado ¿Dónde mierda te habías metido? Pregunta Suho molesto.
-Es temprano podrías darme esta charla un poquito más tarde de verdad que no estoy de ánimos para escucharla
-Créeme Soo no me importa que estés de ánimo o no, ayer llame a tu casa todo el día ¡y toda la noche! Nadie respondía nadie... Sabes lo preocupado que estaba
-Lo se lo sé... Nos cortaron el teléfono y...
-¡No lo sabes! Me grita hasta hacerle reventar el tímpano
-¡No grites! ¡Es temprano!
-¡Para ti es temprano para mi es jodidamente tarde!
-¡Es temprano muy temprano! Grito mientras algunas miradas curiosas se posan sobre mí.
-Cuando llegues Soo te la veras con toda mi furia y tendrás que responder a todas mis preguntas.
-¿Y si no quiero? Respondo con burla
-Le contaré todo el mundo que te dan miedo las películas de terror
-Suho eso fue como a los seis años ahora soy todo un hombre muy casi grande
-Si hombre casi muy grande, pero yo tengo el video de cuando te moriste de miedo en el cine con la película el Conjuro y de paso te measte justo al final... Si Soo todavía lo tengo en mi celular.
¡Mierda! Eso fue hace un año y me prometió que lo borraría... Debo empezar a elegir mejor a mis amigos.
-Está bien- respondo resignado- te contare todo estoy a unas calles de tomar el autobús.
-¡Te espero! Grita y corta dejándome completamente sordo.
Me subo al autobús y me siento al fondo, adelante mío hay una pareja besándose y mostrando todo su amor el público... Y yo sólo los odio, porque a lo mejor esos podríamos ser JongIn y yo dejando a tras todo y sólo queriéndonos, sin embargo, recuerdo que yo no lo quiero a él y él no me quiere a mi ¿De qué sirve el sexo casual si después quedas igual de sólo? Si no hay mañanas que compartir ni mensajes mis besos que dar. Repleto en mis pensamiento me doy cuenta de que casi me paso de paradero, corro apretó el botón y me bajo, camino hacia la escuela entro y camino por los pasillos a paso lento, estoy a punto de ir hacia la sala, cuando la secretaria elegantemente vestida me llama.
-¿KyungSoo puedes venir un momento a mi oficina? Pregunta con un atisbo de cansancio en su voz
Asiento sorprendido aunque estoy seguro que me dirá que se está acabando el plazo y eso hace que me den más ganas de llorar porque por ese maldito de Kai no JongIn sólo Kai por culpa de ese hombre no pude recibir la paga… aunque la triste verdad es que todo lo malo en mi vida surgió después de a verlo conocido.
Sumido en mis pensamientos, ella me encamina hasta la misma sala vacía de la última vez, se sienta en su silla de cuero y me indica que haga lo mismo. Me siento totalmente nervioso así que decido esconder mis manos en mi regazo
-KyungSoo …
Pero yo no puedo dejar que siga porque no quiero escuchar su amenaza de cómo me quedan solos unas semanas para largarme de aquí
-Sólo espérame un poco más - interrumpo atropelladamente- sólo nos falta un poco y pagaremos todo no se preocupe de verdad.
-Me alegra oír eso. Dice con una sonrisa de disculpa que no le llega a los ojos.
-Sí, nos falta muy poco para pagar todo. Digo bajando la mirada sintiéndome fatal por la mentira más grande que he dicho en mi vida
-Me parece bien KyungSoo sin embargo- confiesa mirando unos papeles y carpetas hasta luego centrarse en mi- la escuela y el concejo han analizado tu caso y ellos han llegado a la conclusión que no pueden dejar pasar esta indisciplina que tu madre a cometido ....en consecuencia a ello y de acuerdo a la conclusión a la que se ha llegado debo solicitarte que abandones la escuela hasta que tu mama haya pagado la deuda.
¿¡Que!?
-¿¡Que!? Acaso no me escucho mama tiene el dinero- grito furioso inclinándome en el asiento- pagara la otra semana ¡no me puede dejar sin educación… por esto!
-El concejo tomó tu caso y decidió analizarlo, tu mama debe mucho a esta escuela como al banco, creemos que te estamos haciendo un favor al despojarte de aquí para así apaciguar los gastos en tu casa KyungSoo
-¡Eso es estúpido! Esa decisión la tomaron porque son unos imbéciles ambiciosos no les importa que yo me quede en la calle y sin la educación que merezco ¡la educación es un derecho! Grito sintiendo como mis ojos se humedecen y no se sí es por rabia o por la maldita pena.
-Yo no tomó las decisiones, no puedo hacer nada al respecto- dice haciendo una pequeña mueca- por lo mismo espero que comprendas...
-¿¡Cómo quiere que comprenda!?- reclamo levantándome con ira- Me están prácticamente sacando de la escuela como si fuera un criminal.
-Que tu madre no haya pagado la deuda te hace serlo sin embargo lo que culminó en tomar la decisión del concejo fue justamente una noticia que salió hoy en el periódico.
Ella se inclina y busca en uno de los primer cajones de su escritorio, hasta sacar un diario, se pone sus lentes y me mira esperándome a que me siente, incómodo repleto de rabia lo hago.
-Lo que te leeré a continuación es lo que ha salido en la mayoría de las páginas de internet sólo que esta vez ha llegado a un famoso diario y que como establecimiento nos causa mucho malestar
-"Hace unos días ha surgido el rumor, que ha acaparado la atención de toda la prensa nacional e internacional en la cual se relaciona un famoso y prestigioso CEO de la industria del entretenimiento de nuestro país con un joven menor de edad, las fuentes nos han informado que han visto al multimillonario CEO en varias ocasiones con este chico, como también en la empresa de la cual es dueño, No obstante es aquí donde precisamente los testigos han presenciado esta relación, dando a entender que están juntos. Los resultados de este rumor han tenido críticas negativas, tales como: …. ¿cómo un empresario famoso y respetable puede salir con un menor y olvidar por completo la moral? ¿Acaso abra abusado de ese menor? ¿O será que simplemente que ese chico busca dinero y fama? Algunos de los comentarios tratan al CEO como un pervertido y que mejor abandone su cargo antes de que esto se vuelva aun peor, por otro lado el nombre del chico podría ser Do KyungSoo según asistentes que bajo suma confidencialidad han podido revelar el secreto mayor guardado del querido y apreciado CEO”
Mis ojos están totalmente abiertos, mi mandíbula casi llega al suelo estoy tremendamente impactado y asustado ¿Cómo supieron mi nombre? solo hemos salidos tres o cuatro veces sin mencionar que he quedado como un verdadero timador y el como un depravado… esto no está bien no está bien ¡Mi nombre sale en ese puto diario! … ¿Qué dirá su esposa? ¿¡Porque no, no nombran a su esposa!? ¡Ella me va a matar! … aunque no todo está perdido no sale su nombre así que puedo justificarme con ello, además que mi nombre no es común ¡Oh mierda estoy muerto!
-Bueno KyungSoo ¿Tienes algo que decir…?
-Follamos en su auto y en su departamento y bueno casi en su oficina, pero nada más solo fue un juego el me atrajo para luego mentirme inclusive dijo que cuando todo terminara me llevaría a casa y le explicaría a mama porque cojeaba, es muy sexy usted no entiende, ¡su personalidad su cuerpo todo! y como me hizo suyo en el baño la otra noche con toda su fuerza hasta hacerme partir en dos y gemir su nombre…
-¡No soy yo!- grito con toda mi falsa credibilidad- ¿Usted cree que un CEO se fijaría en mí?
-La verdad es que no…
Aush
-Existen muchos chicos con ese nombre ¡muchos! Yo con suerte tengo tiempo de levantarme y ustedes creen que ando con un CEO- Inquiero frotándome el rostro frustrado- ustedes son un establecimiento supuestamente ejemplar, no deberían de fiarse por rumores sin fundamentos como esos… no deberían expulsarme por eso.
-KyungSoo esto solo alentó hacerlo, pero la deuda es el gran motivo, no podemos admitir deudores, lo siento de verdad que lo siento.
Mi cabeza comienza a girar y a girar ¿Qué le diré a mama? No tenemos dinero para pagar la deuda apenas alcanza para comer, la única esperanza es tener que buscar un trabajo, y conseguir dinero para así alcanzar a graduarme.
-¿N-No hay un plazo? Mis notas no son malas soy bue…
-No. Responde tajante y de repente muy enojada, toma aire como si esta situación fuera lo último de cansadora- No hay otro plazo, por tanto KyungSoo te pido amablemente que abandones el establecimiento en este momento, si sigues aquí, me temo que deberé llamar a seguridad.
Me levanto con cuidado, pero sin despegar mi vista de sus ojos, tomo mi mochila y me la pongo con rabia, todo mi cuerpo tiembla, porque solo quiero salir y llorar por la desgraciada vida que me toco llevar, camino hacia la puerta, pero sin antes decirle unas pocas palabras.
-No soy un delincuente- inquiero con mis ojos humedecidos- solo quiero terminar mi último año, mi familia es gente sencilla y honesta, mi madre trabaja día y noche para llevarnos comida a la mesa y yo me esfuerzo para ser el único miembro de mi familia con un título profesional ¿A caso usted sabe lo que es ser la esperanza de una madre que solo sabe leer y escribir? ¿A caso los del concejo saben que yo seré en los próximos años la única fuente de ingreso para mi familia? ¿A caso ellos perciben que yo no solo vengo a reírme y a pasarla bien con mis amigos? ¡Porque yo vengo para ser alguien la vida! ¡Porque eso es lo único mi mama me pueda dar! ¡Porque para mí estudiar y tener buenas notas es poder surgir! ¡Y ustedes todos ustedes me lo han quitado! ¡Me han arrebatado mi único derecho mi única esperanza! Solamente porque mi madre jodidamente no ha podido pagar una deuda… ni siquiera se han dedicado a ver mis notas… n-ni siquiera han podido concederme otra beca.
-El concejo ha dicho que n…
-Humildemente….métase el concejo donde mejor le caiga. Digo saliendo y cerrando la puerta con un portazo.
Baje corriendo los escalones, sin querer mirar o despedirme de mis compañeros, no deseo darles el gusto a los demás viéndome indefenso y miserable. Mis uñas se entierran en mis palmas, haciéndome sangrar, pero no me importa, porque solo quiero llorar y quemar o destruir algo. Me siento un poco más relajado cuando salgo del recinto, mi teléfono suena en mi pantalón, sin embargo trato de ignorarlo, no sé qué decir… no sé a quién contarle ¿A mama? ¿A mi hermano? Podría simplemente irme a un colegio público, el dilema está en que tendría que salir de la región y eso me tomaría horas de viaje… mama lo notaria ¿Y si simplemente se lo contara? Ella trabajaría el doble, ambos lo arriamos, aunque siendo realista no conseguiríamos el dinero hasta el próximo año. Podría simplemente esperar un año juntar dinero y así después ir a la universidad, aunque esa palabra cada vez suena más lejana, como si ya no fuera digna de ella.
Tomo el autobús, con la misma sensación de vacío que hace unas horas, pero esa sensación en mi pecho me molesta cada vez más. Pasan unos minutos y bajo con la mirada perdida no se ni por dónde empezar, camino con las mejillas un poco húmedas y enrojecidas, saber que ya no me podre graduar con mi mejor amigo es una de las razones de mi mayor vacío ¿Cómo le daré la noticia a él…?
Sumido en mis pensamientos, no noto que en la entrada de mi casa se encuentra un Audi negro reluciente, ni mucho menos como un elegante hombre de traje con corte italiano baja de este, apoyándose en el techo del auto esperándome. Mis pensamientos y mis pies se detienen cundo mi mirada choca con la de él.
Mis puños se cierran automáticamente a mis costados, mi mirada se nubla de lágrimas, un sollozo involuntario llega y esos son motivos suficientes para que él se acerque a paso apresurado y desesperado. Me hubiese gustado haber podido arrancar, o solo darme la vuelta y a verlo dejado o simplemente ignorarlo, pero no podía cada musculo de mi cuerpo parecía flojo y sin vida, de repente solo quería sus brazos cubriéndome y dándome protección, sus boca en mi oído susurrándome que todo iba a estar bien, que todo tiene solución… sin embargo esas palabras de lo dice a otra.
Llega a unos centímetros de mí, sus maravillosos ojos cafés me taladran el alma, está inquieto y molesto con la respiración sublevada, lo puedo sentir en cada célula de mi cuerpo, pero yo no despego mis brazos de mis costados, tengo tanto miedo de mi reacción de la suya de la del mundo…
Sus ojos me vuelven a recorrer, pero esta vez se detiene inspeccionando cada parte de mi cuerpo frenético, hasta detenerse sobre mis labios, duda por unos segundos y levanta una de sus manos casi con miedo y la posa delicadamente en mi mejilla, unos de sus dedos viajan hasta mis labios y lo acaricia con deseo. Todo mi cuerpo comienza a temblar, mis pensamientos junto con el tiempo se detienen de inmediato, para así dar paso a la sensación de él en mí, mis ojos se cierran automáticamente dándole la bienvenida a la calma deseada, y a su cercanía embriagadora, abro mis puños cuando percibo su aroma más cerca casi embriagándome por completo los sentidos hasta que siento su frente sobre la mía y nuestras respiraciones mezclándose. Mi pecho se agita diciéndome esto es una muy mala idea, sin embargo mi cuerpo no recibe las señales, al contrario quiero seguir así por el resto de mi vida, su cercanía es un analgésico para mis heridas y para el dolor que sin darme cuenta me estaba consumiendo… podría confesar descaradamente que yo poseo el mismo efecto en él, ya que su respiración se calma, su cuerpo y cada musculo me trasmite sus preocupaciones y su estado incontrolable. Su mano acaricia mi mejilla con más necesidad y su dedo se mueve enérgico y desesperado con un fuerte suspiro en mis labios lo siento susurrar.
-Te he extraño KyungSoo …
Y esas palabras son como un balde de agua fría, para mi estado de inconsciencia, abro los ojos y sin tomarme molestias, lo empujo fuerte. Él reacciona sorprendido, sus ojos maravillosamente café se amplían como si me reacción le hubiese quemado.
-No seas hipócrita ¿A caso te cansaste de los putos del barrio alto? ¿O como ya te los follaste a todos no es divertido? Cuestiono con mis puños volviéndose a cerrar de pura rabia.
-¿Qué…?
-¡No te hagas el imbécil!-grito sin importarme que todavía estamos en la calle- Yo no soy tu puto y ¡nunca lo seré!
-¿Qué estás diciendo KyungSoo? Cuestiona incorporándose y recuperando su postura de CEO
-No sigas con este juego por favor- imploro llevando mis manos hacia mis ojos cansados y mojados- no vuelvas otra vez
-KyungSoo- llama con su voz autoritaria, se acerca a paso seguro y su mirada dura me indica que tenga cuidado- vine porque ese día te fuiste y ni siquiera me dejaste traerte a tu casa, dije que iba a hablar con tu mama… yo nunca creí que te lo tomarías mal.
-¿Y qué le ibas a decir a mama? ¿Cómo te gusta follar con menores?
-¡No! Por Dios KyungSoo- implora llevando ambas manos a su cuello- le iba a explicar… no se le pediría disculpas iba a intentar mostrarle que soy un buen hombre para su hijo…
¿¿Qué??
-No sigas por favor- imploro con mis lágrimas inundar mi camiseta- tú me dijiste la primera vez que lo hicimos que era un puto, me dejaste claro quién era yo para ti, no vengas ahora con tus juegos.
-Sé que me equivoque, sé que actué mal hasta ese entonces yo no te conocía. Confiesa mirándome avergonzado.
-Sigues sin conocerme Kai.
-Lo sé, pero ahora es diferente.
-¿Por qué? Cuestiono cansado
-Porque ahora te necesito
Inconscientemente mi mano viaja hacia mi pecho y cubro los latidos que bombean y golpean mi pecho… yo también te necesito JongIn yo también te necesito….
-Adios señor Kai- digo en susurro quitando mi mirada de sus ojos que me imploran que lo mire- y por favor no vuelva más a mi casa no es bien visto que usted visite a un menor de edad mucho menos si es pobre.
Camino y paso de él, pero su mano agarra mi brazo posesivo hasta darme vuelta y tenerme frente a él, su mirada me busca frenética, y su respiración se acelera como si de una maratón se tratase.
-KyungSoo… sin ti no podre resistir más tiempo, estos días han sido los más difíciles de mi jodida vida, las crisis siguen aquí en mí, no sabes cuantas cosas estúpidas he pensado en hacer- dice tomándose el pelo con frustración-… sin la droga soy un monstruo y lo único que me ha frenado a cometer todas las mierdas que pasan por mi cabeza…eres tu es simplemente imaginarme poseyendo tus hermosos labios, tocando tu cuerpo blanquecino, besando cada esquina y rincón de el , recordando tus manos en mi cuello gimiendo mi nombre, como entre en ti y como tú me recibías… el cómo solo tu rostro hace que mi ansiedad se calme y que solo me replete la necesidad de tenerte entre mis brazos de acariciarte y de escucharte y de cómo tu sonrisa me da esperanzas de que soy humano ¡Tú me haces sentir más humano! Solo tu…KyungSoo
Mis palmas pican por querer tocarlo por acariciarlo, pero solo me ahogo en mis lágrimas y en mis espasmos de dolor… lo siento JongIn tú lo quisiste así.
-Entonces vete y dile a tu esposa que te haga sentir más humano, porque lo es a mí no me volverás a ver nunca más en tu vida.
Me deshago de su agarre y parto débil hacia mi casa, mi pecho duele como si lo que dejo atrás es un parte de mi vida una parte de mí. Me cubro con mis brazos para darme contención pero no sirve, porque lo que necesito está justo atrás y es prohibido no es para mí y nunca lo será.
Abro la puerta de mi casa con manos temblorosas, cuando siento su respiración en mi nuca.
-KyungSoo no es lo que crees…
Enfadado me doy vuelta, mi pecho ya no resiste tanto dolor, ¿Por qué no se detiene? Y deja esto… por no me simplemente me deja en paz con mi desdicha.
-¿A caso no es su esposa? Cuestiono molesto y repleto de una rabia que no sabía que poseía.
-Esto es difícil de decir pero yo….
-¡Responde! Grito con todas mis fuerzas
-KyungSoo… susurra con tono de desaprobación
-Responde, solo responde a la maldita pregunta. Inquiero cerrando los ojos frustrado.
Unos largos segundos pasan, hasta que decido mirarlo, sus ojos observan cada parte de mí, atento a mis movimientos esperando mi reacción, con un fuerte suspiro decide responder.
-Si es mi esposa.
-Ese es buen motivo para que te vayas de aquí.
Abro la puerta y entro apresuradamente para apoyar mi espalda en ella y derrumbarme en el suelo, mis lágrimas vuelven a salir cuando siento un auto partir, me llevo ambas manos a mi camiseta apretándola con fuerza mientras mis nudillos se ponen blancos…tiene a otra a quien besar, tiene a otra a quien cuidar él no era para mí… ¿Por qué tuve que caer justo con él? ¡Debo quitarlo de mí! ¡Debo olvidarlo! O solo voy a sufrir y seré el patético que queda solo mientras los otros tienen sexo feliz.
Mi teléfono comienza a sonar, pero lo ignoro, hasta que después de unos minutos vuelven a llamar, frustrado tomo el teléfono y atiendo.
-Hola. Respondo con voz apenas audible
-¿Usted es el joven Do KyungSoo? Pregunta una voz de mujer
-Si soy yo. Digo secando mi rostro con mis manos.
-Nosotros como congregación de una prestigiosa escuela nos hemos esterado de su lamentable caso, por ello nos hemos reunido para otorgarle a usted una beca en nuestra prestigiosa escuela Oeste de Seúl, que cubre por supuesto todos los gastos de matrícula, por lo que usted podrá terminar su año escolar tranquilo y sin preocupaciones de gasto.
¿¡Que!? Oh por Dios me levanto como un resorte comienzo a moverme por la sala como loco mi sonrisa ha vuelto aunque esta no llega hasta mis ojos, pero por lo menos algo está saliendo bien.
-Usted no sabe cuánto se lo agradezco de verdad… yo no sabía que hacer pero ustedes han sido como una luz ¡muchas muchas gracias!. Digo sintiéndome eufórico.
-De nada nosotros siempre estamos para ayudar especialmente a jóvenes como tú, debo decir que tus notas son muy buenas y eso ha sorprendido a los directores, así que esta ayuda te la mereces.
-Muchas gracias- menciono suspirando de alegría- no sé cómo agradecerles ¿Cuándo puedo comenzar a asistir? Así puedo agradecer a la persona que se enteró de m-mí… situación
-Este lunes puedes iniciar, no hay ningún problema solo trae tus papeles con tus datos personales y ¡listo!- dice la mujer con voz alegre- ahí puedes hablar con el concejo o con el director y él te recibirá feliz.
-¡Gracias no sabe lo feliz que me hace esta noticia!- grito casi saltando arriba del salón- pero… ¿Cómo se enteraron de mi situación? Pregunto confuso y extrañado bajándome del sillón de inmediato antes de que mama llegue y me vea.
- Oh bueno nos enteramos gracias al señor Kim JongIn él nos comunicó tu situación, muy enojado y frustrado nos mencionó que tu caso era urgente, inclusive hasta iba a venir para acá, pero obviamente nosotros le comunicamos que no teníamos problema de otorgarte la beca.
¡Mierda! ¿Qué JongIn hizo que...?
-Aunque- continúa la mujer con tono curioso- debes ser muy importante para el Señor Kim para incluso querer venir acá, hasta nos amenazó diciendo que si no te otorgábamos la beca el mandaría a cerrar el establecimiento, eso nos presionó un poco. Dice con tono burlón.
-M-Muchas gracias. Me despedí temblando.
-Hasta luego KyungSoo nos vemos el lunes.
-Hasta luego Digo apagando el celular y sentándome en el sillón paralizado.
Al parecer va a ser más difícil de lo que creí sacar a Kim JongIn de mi vida.