Capítulo 2:
Desafortunado encuentro
Meses antes…
KyungSoo ocupo su puesto de siempre sintiendo que algo estaba terriblemente mal al no ver movimiento alguno del moreno en el interior de la casa, al principio pensó que ya debía estar durmiendo puesto que en esos 4 meses de ausencia pudo a ver modificado su rutina diaria dándose cuenta que difícilmente sería posible por el estilo que llevaba... Preocupado al olfatear el aire y no captar indicio alguno, decidió mandar a la borda todo lo que su padre le enseño desde que era un lobezno, saltando la pequeña valla que delimitaba lo salvaje de lo domestico sintiéndose extraño, jamás se preocupó por infringir las leyes de su pueblo hasta ese momento frunciendo el ceño ¿Qué le estaba pasando? No lo sabía…
Paso a paso empezaba a tener miedo, no por él si no el pobre Jong In, con cuidado se dio cuenta que la puerta trasera no estaba cerrada, cubriéndose la nariz con la manga se introdujo en silencio viendo de maravilla entre la obscuridad guiándose mentalmente por la localización del cuarto según lo vio desde afuera, todo en esa pocilga estaba patas arriba y un ligero olor a sangre rancia permanecía impregnada en el lugar poniéndole la piel de gallina, sin proponérselo empezó a temblar al imaginarse que quizás fuera de su chico relajándose al recordar que si estuviera muerto él lo sabría, no podría estar así tan tranquilo… Solo se encontraba un poco inquieto
Como lo había intuido su habitación estaba abierta como invitándolo a pasar dándose cuenta que su olor estaba desapareciendo, con lentitud tomo la almohada del otro chico llevándosela a la nariz dejando que la dulce fragancia de Kai se grabara en su subconsciente, era débil así que él no había estado allí en mucho el tiempo preguntándose porque, a su alrededor no parecía a ver nada fuera de lo común más allá de la ropa aun tirada y algunos libros desperdigados como si alguien los hubiera tirado en un ataque de rabia, de alguna forma no podía evitar sentirse extraño al invadir la zona segura del otro aunque no estuviera presente, más que nadie sabía lo que significaba la palabra privacidad y sentía raro el invadirla de esa forma
-¿Se abra ido?- murmuro para sí alejando el objeto regresándolo a su sitio centrando sus ojos grises sobre la cama deshecha, por alguna razón no pudo evitar imaginarse a Kai despertando sobresaltado por la posición en la que se encontraban, no era un detective pero su sentido sobrenatural le decía que algo estaba muy mal. Sobre la mesa de noche se encontraba el IPhone que le había visto portar repetidas veces con los audífonos en los oídos cuando quería olvidarse de todo en ese patio testigo de todos sus lloriqueos, Kai nunca podría a verse ido sin el aparato así que estaba más que seguro que algo le había pasado… Algo demasiado grave que lo hizo soltar un ligero gruñido similar al que haría un gatito
“¿Estaría muerto?”
La ira se instaló en su estómago sintiendo la necesidad de empezar a rastrearlo para estar seguro aunque supiera que no podía ser cierto, todo eso estaba en su contra al desaparecerse por tanto tiempo
¿Desde hace cuanto estaría desaparecido? ¿Su mama estaría con él al menos...?
-¿Quién eres tú y que haces en mi casa?- escucho a sus espaldas un voz que lo saco de sus cavilaciones trayéndolo de forma ruda a la realidad cerrando los puños a los costados, al fin después de mucho tiempo tenia al causante del dolor de Kai enfrente a pintándole con un arma por el aroma a pólvora que manaba y el sonido que hizo al cortar el cartucho seguro de sí mismo, si supiera las ganas que tenía Kyungsoo de llenarse de pelo y rajarle la garganta ya estaría muy lejos de allí
-¿Donde esta?- Se giró con lentitud retándolo con la mirada, el sujeto sonrió pasándose la lengua sobre los labios
-Yo te pregunte primero pedazo de...- No fue capaz de terminar la oración por que el chico tomo el celular, el cargador con los audífonos enredador (Que el otro de seguro había juntado lo cual también le dio a entender que los tenia así por si debía huir) y metiéndolos a su bolsa se le fue encima tirándolo contra el suelo haciendo un ruido sordo que la amante debió de a ver escuchado, el instinto animal que nunca le enseñaron a dominar estaba tomando el control valiéndole que el sujeto estampara el mango del rifle en sus costillas con fuerza, esos solo lo hacía enojar olfateando su miedo, basto solo un puñetazo en la cara para que dejara de intentarlo teniéndolo a su merced, KyungSoo podía matarlo y más en esos momentos pero solo gruño de manera amenazante cogiéndolo del cuello de la camisa para erguirlo del suelo levemente, tenía otras prioridades que matarlo, ya lo haría después cuando tuviera al moreno enfrente
-No lo repetiré dos veces ¡¡Donde esta Jong In!!- el sujeto sonrió de forma cruel no dejándose amedrentar por el mocoso que, si no estuviera tan alcoholizado podría afirmar que le brillaban los ojos
-Muerto- Lo dijo con saña, lo dijo con ganas de hacerlo perder el control dándole tiempo a la policía de llegar pero eso no lo detendría al contrario, Soo solo sonrió de forma burlona dándole unas ligeras palmadas en la mejilla de forma cínica
-Si estuviera muerto... Usted ya no seguiría respirando...- Su parte lobuna pisaba peligrosamente la superficie, sería un movimiento malo para el si el sujeto lo descubría así que solo respiro profundo mandándola a dormir de nuevo, aún más molesto por tener que contenerse, le soltó otro puñetazo en la mandíbula dejándolo inconsciente, al menos en ese momento ya sabía que algo le había sucedido a su chico y debía hallarlo.- Carajo ¿Y ahora?
Saliendo al escuchar una sirena, se dirigió directo a su casa para tener un momento de calma consigo mismo y pensar en lugares donde pudiera estar el otro, ese día paso de largo el comedor con un humor de perros maldiciendo toda esa situación en la que se estaba metiendo, debía ser una broma… Lamentablemente para él, el olor a sangre de la boca del sujeto llamo la atención de los suyos que le clavaron la vista hasta verlo desaparecer con dirección a la sala
Aprovechando que todos estaban en comiendo decidió poner cargar el aparato buscando alguna a pista al prenderlo, como sospechaba, el último mensaje era de su madre y databa de hace unos 3 meses... Si no es que más tiempo atrás, también noto que el chico tenía un par de contactos pero no parecían ser personas cercanas, el pobre no tenía ningún amigo por su grotesca actitud cuando indagaban sobre su familia
Entrecerró los ojos con odio dejando el aparato sobre su muslo sobándose las sienes
Estaba como en un inicio...
Sin nada...
Guiado por la curiosidad, decidió indagar en su galería asombrándose de que, como todo adolescente normal le gustaba autorretratarse de tantas formas que se preguntó de dónde sacaba tantos gestos raros y poses extrañas, esas fotos solo relataban su solitaria vida en un ambiente terrible para un niño…
En definitiva lo encontraría, sabía que Kai era de ese tipo de personas que merecían más de lo que recibían de los demás
Por el bienestar de la sonrisa que observaba en la mayoría de las fotos con su madre, debía encontrarlo... Pero no podría si su padre seguía sobre él de esa forma...
-Quizás debería, callarlo ¿Se enojaría?- murmuro para sí sintiendo que alguien lo observaba de cerca, no podría buscarlo si aún regresaba a ese sitio después de fallar, por una parte no quería olvidarse de su familia pero por otra, su alma le pedía a gritos que no dejara a Kai solo, hasta él se sentía estúpido por desear a alguien con el que nunca había hablado
¿Estaba enloqueciendo acaso?
¿En serio estaría dispuesto a dejarlo todo por buscar a alguien que no lo conoce y que posiblemente ya no respirara?
Era difícil decidirlo pero al parecer no tenía opción, en serio puede que Soo fuera demasiado estúpido...
…
Actualmente…
Kai permanecía quieto tumbado sobre la cama sin ganas de ponerse de pie o mínimo asomar la cabeza para sentir el aire chocar contra su rostro, desde que abrió los ojos por llamarlo de algún modo no veía nada más que oscuridad, la odiaba con toda el alma...
No tenía ninguna intención de hacer algo tan pronto la pierna terminara de sanar y pudiera caminar sin ayuda de ese par de muletas que había estado usado un par de días antes para reventar un vidrio, tan pronto se enteró que su padre aun lo quería de vuelta en casa, de todos los pacientes del piso, Kai era el único que tenía un comportamiento difícil de tratar porque explotaba hasta por lo más pequeño. Quizás el único que conseguía calmarlo en sus crisis era Kris, el hacia lo que estaba en sus manos para alejar a su padre dejándolo más tranquilo. Kai se sentía mejor si el mayor lo atendía, no toleraba que nadie más le pusiera la mano encima puesto que temía aquello que se ocultaba en la obscuridad de su mirada, se sentía tan inútil y un estorbo que poco a poco perdía las pocas ganas de vivir que le quedaban
-¿Sabes dónde estoy?-
-No me interesa volverme un murciélago, déjame tranquilo- Kris soltó un suspiro exasperado poniendo los ojos en blanco, su paciente estaba entrando en una profunda depresión al no poder hacer otra cosa que permanecer sentado temiendo por su salud mental, el menor no quería caminar, ni siquiera aprender a depender de su oído para moverse de un lado a otro como cuando estaba con vida, tampoco comía y terminaba derramando las bandejas sobre los enfermeros o enfermeras que se las llevaban si no se las llevaban a la primera, Kai estaba muy mal… Posiblemente el saber que había perdido 9 meses de su vida y a su madre le había término de lastimar, Kris no sabía qué hacer para subirle el ánimo
-Jong In...-
-Calle y mejor pásame unos analgésicos que esto empieza a dolerme...- murmuro mirando a un lado quedándose quieto pensando sobre el dolor, en alguna forma de acabar con su vida, Kris le había advertido que si intentaba morirse de sobredosis le harían un lavado gástrico con rapidez impidiéndoselo, también que no podría colgarse de ningún lado y mucho menos en cortarse las muñecas... Debía encontrar otra forma más efectiva de hacerlo que fuera efectiva
-Todavía no es la hora, tampoco queremos volverte un farmacodependiente. Te los daré cuando regrese, tengo una operación importante así que hazme el favor de no hacer ninguna estupidez en mi ausencia por favor-
-Tranquilo, vete a abrir cuerpos con calma... No me moveré de aquí por nada del mundo- sonrió forzadamente escuchando con atención como Kris salía cerrando la puerta tras de sí encargando a su problemático paciente a una mujer que cuidaba el piso que desapareció un momento de su puesto gracias a un paciente epiléptico que sufrió un ataque, Kai tardo un par de minutos en ponerse de pie con una mueca de dolor al bajar la pierna de la cama, tanteando la pared hasta localizar las muletas odiándolas tan pronto se apoyó en ellas, aun no se acostumbraba caminar con ellas levantando la pierna, de vez en cuando la bajaba dándole un fuerte golpe contra el suelo provocándole demasiado dolor
-Genial, aparte de ciego, cojo... Yo lo arreglo- murmuro con odio doblando el pie herido lo más alto que pudo poniéndose en marcha, si mal no recordaba, la primera vez que lo llevaron a dar una vuelta por el lugar, lo obligaron a contar los pasos para que pudiera andar sin problemas si es que deseaba un poco de entretenimiento. Le dolía el pecho demasiado y deseaba que todo ese drama cesara, si tan solo no lo hubieran salvado de seguro estaría con la única persona que le importaba y no preocupándose por lo que sería de el a manos de esos monstruos que tenía como padre y madrastra - Uno... dos... cinco... veintitrés... treinta y cuatro
Estiro la mano no muy seguro palpando el barandal del piso con una leve sonrisa en la cara, al menos no había sido tan difícil caminar hasta allá, tomo una gran bocanada de aire pensando en si en serio podría hacerlo, prefería estar muerto antes de volver a esa casa llena de recuerdos dolorosos con ese hombre...
¿Qué más daba si moría? De todas formas nadie lo recordaría jamás, el sonido de los teléfonos de abajo y voces lo atormentaba de sobremanera, no quería lidiar con los sonidos toda su vida, no podría soportarlo... Le asustaba la oscuridad desde que tenía uso de razón, así menos podría lidiar con ella toda su vida, no tendría sentido enloquecer en ese estado solo...
-Es tan tentador...- Susurro acariciando el metal helado de la superficie soltando un profundo suspiro
-Aquí esta, ya nos había asustado señor Kim ¿Que hace allí?-Dijo una enfermera suspirando aliviada, Kris la despediría si algo le sucedía a ese chico que por alguna razón había apreciado
-Admirando el paisaje...-espeto con sarcasmo recargando la cadera contra la baranda riéndose de su propio mal chiste, nunca volvería a ver un paisaje ni la luz del sol, tampoco a leer ni a ver televisión, se aburriría terriblemente
-Que gracioso, volvamos al cuarto-
-No quiero...- el tono cortante se hizo presente deteniendo a la chica que no entendía que sucedía, eso si la incertidumbre no se hizo esperar
-Le hará daño a su pierna el apoyarla así- Kai se burló de su tono como si hubiera dicho una estupidez, no necesitaba que le tuvieran lastima solo porque estaba ciego y no tenía familia, él era perfectamente capaz de recibir un regaño y de hasta ser tajeado para que no hiciera lo que quería hacer, estaba molesto, asqueado de todo y todos preguntándose porque demonios le habían salvado la vida y no a su madre, odiaba vivir pero nadie lo entendía
-¿Crees que me importa curarme? Yo jamás pedí que me salvaran... ¡¡JAMAS PEDI QUE ME SALVARAN LA VIDA!!-
-haga lo que haga... Quédese quietecito, no se mueva- la sonrisa cruel del chico la puso aún más nerviosa por la actitud imprudencia del muchacho
- Oblígame - y sin más uso la fuerza de sus brazos para subirse a la orilla y dejarse caer mientras todos gritaban asustados corriendo a sujetarlo…
...
-Genial, a partir de hoy tendrás una escolta ¿Feliz?-espeto Kris empezando a caminar de un lado a otro del cuarto enloqueciendo a Kai, tampoco le hacía gracia que lo hubieran salvado pero ¿Qué más podía hacer? Si seguía maldiciendo cuando fallaba posiblemente terminarían metiéndolo a un psiquiátrico de por vida
-Uy si no sabes... -
-Esto es serio, unos minutos más y no hubieran podido atraparte abajo ¿Qué demonios tienes en la cabeza?- gruño Kris molesto con el corazón aun agitado no pudiendo creerse el cinismo de su cliente, no era para nada agradable salir de una operación y toparse con que su paciente intento suicidarse de la misma forma que su hermano, ya ni su novio tao lo había asustado tanto cuando salían a cazar criaturas sobrenaturales
-Déjame en paz...- Se cruzó de brazos molesto casi lo había conseguido... Casi - Tengo sueño
-¡¡Carajo Kai!! ¡¡No puedes intentar matarte y hacer un berrinche!!-
-¡¡No es un berrinche!! En serio quiero matarme ¿No lo ves? Jamás les dije que me salvaran, no quiero esto porque de todas maneras será mi fin cuando vuelva a esa casa... A ustedes no les importa lo que pase después... Salvan vidas, me parece perfecto pero ¿Alguna vez se ha preguntado qué pasa cuando salen de aquí? ¿Se han preguntando si hicieron bien o solo prolongaron su sufrimiento? ¿No? Lo supuse... Ahora si me haces el favor de dejarme solo, te lo agradecería -y sin más se acostó volviendo a sentir que el miedo le invadía, no quería decirle eso a Kris pero había sido inevitable, era su frustración era la que hablaba en esos momentos, el otro entendía ero no podía seguir ocultando sus actos, un suicidio no pasaba desapercibido y menos en un chico con un historial médico como el de suyo…
-¿Sabes que…? háblame cuando quieras hablar o el dolor sea insoportable...-
Tan pronto escucho que la puerta se cerraba con un azotan, no pudo evitar soltarse al llanto cubriéndose la cabeza con las mantas como si eso lo fuera a proteger de todo lo malo que lo estaba atacando
Se había quedado solo de nuevo pero no le importaba, lo prefería a solo quedarse allí esperando a que pudiera volver a apoyar la pierna
-Los odio... Los odio a todos...-
…
Tal como Kris le había dicho, Kai nunca fue dejado solo, siempre que sus escoltas cambiaban de turno podía saber con exactitud la hora que era sabiendo si era de día o de noche por el nombre de la persona que tenía al lado sintiéndose aún más asfixiado, empezaba a hartarse y a volverse aún más amargado llegando a compararse con un perro atado en la azotea sintiendo que ese agujero en el pecho crecía aun mas, empezaba a preocupar a todos los enfermeros puesto que no ingería alimento alguno y le valía ya si lo creían un loco o un enfermo mental si empezaba a maldecir todo a su alrededor, también aborrecía que intentaran hacerle la plática y aun más que intentaran simpatizar un poco con él
En serio estaba en su límite, tanto que cuando Kris intentaba preguntarle algo o intentaba sacarlo a caminar el otro solo se encogía de hombros diciendo que para que si al final terminaría regresando a su celda… Tampoco es que pudiera sacarlo a la fuerza porque terminaría armando un pancho enorme que pondría de malas al resto de pacientes que sentía lastima por el chico
En un vano intento de regresarlo a la vida, decidieron notificar a su padre de la caótica situación en la que se encontraba para que se pusiera en marcha, a Kris no le pareció en lo absoluto pero lo demás lo hicieron a sus espaldas pensando que si tenía un poco de apoyo podría mejorar su estado de salud…
Grave error porque nadie le creía cuando Kai decía que el hombre era un monstruo
Pensaban que esa era su opinión sobre todos los seres humanos ni siquiera avisándole que tendría visitas, casualmente ese día estuvo más tranquilo de lo normal e inclusive comió un poco de la espantosa comida que le trajo una enfermera a medio día mostrándose tan dócil como un corderito, era como si se hubiera dado cuenta que no tendría sentido ponerse a gritar de frustración resignándose a permanecer en silencio
Alrededor de las dos de la tarde el hombre llego al hospital totalmente molesto, prefería estar en otros lado en lugar de ir a ver a su hijo sonriendo pidiendo información del cuarto de su hijo, se sorprendió ante la situación que se le planteaba para ayudar a que Kai recuperara su vida, eso era perfecto porque así podría deshacerse del chico argumentando que estaba loco…
Era perfecto…
Lo llevaron al cuarto donde el muchacho permanecía quieto con esa venda en la cabeza respirando profundo tarareando alguna canción absorto en sus pensamientos olvidándose de prestar atención a su entorno, solo reacciono al oír la puerta cerrarse tragando saliva
-¿Kris?- llamo con voz ronca no preparándose para lo que escucho
-¿Kris? ¿Acaso ya olvidaste la voz de tu propio padre?- Kai sintió que la sangre se le helaba en las venas incapaz de saber el sitio del que provenía, el pánico lo invadió tanto que empezó a soltar manotazos maldiciendo la ceguera, odiaba sentirse de esa forma pero no tenia de otra
-N-No te me acerques…-
-Vamos Kai ¿Por qué tan exaltado?- Kai noto que la voz sonaba diferente desde otro Angulo, estaba solo y ese maldito se burlaba de él. El padre se deleitó del terror en su hijo soltando una carcajada – Todos sabemos que ya estás loco ¿Por qué no me haces más fácil el trabajo y enloqueces?
-No me toques…- gimió tan pronto sintió que este le rosaba el brazo divirtiéndose como si Kai fuera un perro cualquiera
-No me hagas reír, eres un inútil…. Si tan solo tu madre no te hubiera dejado todo no tendría por qué volver a verte, pero bueno ya estas con un pie en el psiquiátrico, recuerda esto cada vez que cierres los ojos ¿Cómo sabrás que no estaré contigo cuando duermas? Puedo atacarte las 24 horas del día si quiero…-
Eventualmente, Jong In se alteró teniendo un episodio de histeria peor que los anteriores sabiendo que tenía razón…
…
En lo personal, kyungsoo odiaba los hospitales pero era lo último que le faltaba revisar, había pasado tanto tiempo fuera que si alguien llegaba a reconocerlo podría informarle a su padre su paradero, el estaría más que furioso pero bueno tenía problemas más graves que enfrentarlo, nunca se imaginó que Kai estuviera tan lejos de su casa, por eso al espiar al padre y seguirlo supo que al fin había dado con su paradero, fue una verdadera proeza escabullirse de los guardias preguntándose donde estaría, su olfato estaba medio atrofiado por el olor a antiséptico que le invadía, no fue algo difícil porque mirando los pisos sobre su cabeza pudo notar un verdadero lio que, sumando la presencia del padre lo hizo saber que el chico estaba en ese sitio, maldiciendo prosiguió a subir los escalones perdonándole la vida de nuevo al hombre guiado por la preocupación, tantos meses buscándolo para que en un descuido lo encontrara no iban a pasar desapercibidos, como lo temía, el chico gritaba desesperado miles de maldiciones impidiendo que alguien se le acercara lastimando a todo aquel que entrara a su cuarto, gruño por lo bajo tan pronto escucho los planes de las enfermeras de amarrarlo para que dejara de causar problemas sin entender nada de lo que estaba sucediendo, en primera había sido su culpa por permitir que ese monstruo estuviera cerca para terminar de destrozarlo, no pudo evitar detenerse al sentir un aroma extrañamente familiar de un médico que intentaba dialogar desde afuera con el pobre chico que no dejaba de gritar que lo ayudaran, en serio no podía creer que en tan poco tiempo lo hubieran lastimado tanto, el doctor levanto la mirada quedándose estático descubriendo de inmediato la identidad del lobo, se sobresaltó porque él conocía a todos los lobos de la región pero ese no estaba en sus listas, Kris no sabía si eso era una bendición una maldición pero no hizo nada para evitar que se le acercara jadeando terminándose de arreglar la ropa evidenciando que venía de muy lejos
-Dame tres minutos para razonar con él antes de que lo seden de nuevo- Soltó en tono de súplica tragando saliva, nunca había pensado en hablarle pero la situación lo ameritaba de forma desesperada, el medico tampoco quería lo internaran en alguna clínica por algún desorden mental inexistente
-Adelante pero asegúrate de lograrlo, ellos están pensando en llevárselo de aquí... Ya después podríamos charlar un poco sobre quien eres…- Lo miro desconfiado pero era lo último que le quedaba, kyungsoo trago saliva esperando no fallar en lo absoluto…
Tomo una bocanada de aire dirigiéndose a la puerta escuchando con claridad unos sollozos sintiéndose nervioso, tanto buscar lo tuvieron tan ocupado que no sabía que le diría o si al menos podría decirle algo, dejando de pensamientos, empujo la puerta cerrándola con cuidado localizando al chico llorando en un rincón encogido sobre sí mismo abrazado a la pared, al ver la venda que aún le cubría los ojos no pudo evitar desear a ver hecho sufrir al progenitor en lugar de dejarlo con vida, ahora que tenía a Kai enfrente podría centrarse en hacer pagar al maldito hombre ese…
Kai escucho algo alterándose de nuevo empezando a temblar soltando diversos manotazos tanteando el suelo por si encontraba algo que le ayudara a defenderse, kyungsoo se detuvo a una distancia prudente notándolo desesperado, odiaba verlo en ese estado casi en los huesos tan paranoico como un anciano senil con el estómago más tengo al ver que no veía…
Su chico ya no veía…
Si tan solo no hubiera sido tan cobarde y hubiera escapado a tiempo de su manada, el podría seguir con su vida de forma normal sin tener que pasar con eso
Pero eso era un hubiera, no importaba en lo absoluto nada de eso ahora
-Tranquilo, no quiero hacerte daño...- Soltó con tono neutro esperando que el otro reaccionara
-Como todos… Todos son unos mentirosos, me van a sedar si dejo que se me acerquen y entonces…- No termino la oración porque volvió a su posición de encogerse haciendo que dodo frunciera el ceño acercándose con lentitud esperando no negarla, su tono se oía bastante quebrado, ese chico no estaba loco, solo estaba asustado y podía achacarlo a su padre con facilidad
-Es su culpa ¿No? Él te dijo algo- Kai se quedó sin habla ¿Acaso sabia de su padre o solo le estaba siguiendo el juego? El lobo intuyo esa respuesta soltando un suspiro –Escucha, yo no vine a lastimarte al contrario vine a protegerte… No eres el único que huye de sus demonios
-Mientes… Solo quieres que baje la guardia como todos ellos- Ataco sintiendo como el otro se acomodaba a sus lados tomando sus delgadas muñecas con fuerza para que dejara de moverlas y lo dejara continuar, estaba tan delgado que se veía irreconocible
¿Adónde habría ido el chico que lo enamorado sin darse cuenta? No lo sabía pero lo traería de vuelta a como diera lugar aunque tuviera que llevárselo de ahí a la fuerza
-No necesito hacer eso, ellos planean llevarte a un psiquiátrico si sigues con esto, no harás que te escuchen poniéndote en este estado-
-Tampoco me escucharon cuando se los dije la última vez que estuve tranquilo, no les intereso, no le intereso a nadie y estoy harto de este teatro… Solo quiero dejar de tener miedo pero no, siempre hay algo en la oscuridad que me perturba, nadie hace nada por hacerlo desaparecer, nunca quise lastimar a nadie y no quiero hacerlo de nuevo pero es inevitable ¿No lo entienden? Claro que no porque yo soy el puto ciego esquizofrénico que odia a la humanidad… Quizás el único que hace su trabajo es Kris pero igual lo eh lastimado- Chillo causándole al otro un nudo en la garganta odiando a todos excepto al tal Kris entendiéndolo, lo había perdido todo y se sentía solo, ese era el mayor de sus problemas, el menor sonrió por debajo que las lágrimas dejando de pelear, ya ni de eso tenía ganas – Genial, creo que lograste el objetivo… Puedes sedarme todo lo que quieras no me importa…
-Te dije que no vengo a sedarte, es más yo ni trabajo en este horroroso sitio… Te propongo algo pero te necesito tranquilo…-
-¿Qué más puedo perder? ¿Acaso tengo algo que vale la pena apostar?- Kyungsoo lo ignoro
-Déjame ser tus ojos, déjame alejar aquello que te asusta para evitar que te lleven a otro sitio…- Su única defensa era el ser directo, en su estado no le convenía andarse con rodeos estúpidos como esos
-¿A cambio de qué? Eh vivido lo suficiente como para darme cuenta que nada es gratis en esta vida…- murmuro el otro sorbiendo la nariz más tranquilo, Kyung sonrió al ver que habían llegado a un acuerdo, no había sido tan difícil como había pensado en un principio
-Lo hare a cambio de que sonrías…-