Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

"The baddest female" por Pik

[Reviews - 35]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

La segunda semana de clase ya se me hizo más amena. Ya no me costaba tanto acostumbrarme al coreano y comencé a llevarme bien con varios de mis compañeros.

-¿Quienes son esos de allí? -señalé unos pupitres alejados donde había dos chicas y un chico los cuales nunca había visto en clase.

-Ah... son Kwon Ji Yong, Park Bom y Lee Chae Rin... son repetidores y vienen a clase cuando quieren. -dijo Minzy bajando la voz, como si tuviera miedo de que les escuchara- Es mejor que no te acerques mucho.

Asentí y les miré de reojo. El chico estaba sentado en una silla apoyando los pies en la mesa, tenía el pelo rubio, rapado de ambos lados de la cabeza, llevaba una gorra plana que solo dejaba ver el pelo que caía por su frente; iba vestido todo de negro, con pantalones anchos y camiseta de tirantes; llevaba varios pendientes y una cadena que enredaba una y otra vez en su dedo mientras sonreía a las dos chicas. En frente de él había una chica pelirroja teñida, de pelo largo y liso, con flequillo de lado, llevaba los ojos bastante maquillados y tenía un risa un tanto extraña. A su lado una chica rubia, de pelo liso y largo, que colocaba una y otra vez de lado, cubriendo su ojo izquierdo; al igual que la otra, llevaba los ojos muy maquillados.

De repente la chica rubia giró la cabeza y sus ojos se cruzaron con los míos. Se quedó unos segundos mirándome con indiferencia, entonces se levantó y se acercó a nosotras.

-Min Ji, ¿quién es esta? -preguntó con la voz ronca.

-La nueva alumna, vino la semana pasada... -habló con miedo.

-Vaya vaya, una nueva... -rió- Bienvenida -dijo irónica.

-Gracias -contesté con el mismo tono.

-A mi no me hables así -me amenazó apoyando las manos en mi mesa, inclinándose hacia mi.

-Has comenzado tu.

-No sabes con quien estás hablando.

-No.

-Chaerin... -escuché una voz por detrás de mi- Deja a Sandara en paz, ¿o pretendes asustarla en su segunda semana?

Me giré para ver como Dae Sung se había apoyado en el respaldo de mi silla y miraba a la chica con una sonrisa de tristeza.

-Que no me vuelva a hablar con esas confianzas -con eso se giró y volvió con sus amigos.

-Ten cuidado con esos tres... -dijo el rubio platino cogiendo una silla y sentándose a nuestro lado.

Dae Sung era un chico bastante agradable de nuestra clase, el primer día vino a presentarse él mismo con una gran sonrisa. Había venido acompañado de dos chicos más, Choi Seung Hyun (que era un año mayor e iba a otra clase) y SeungRi que venía a mi clase. Los tres habían sido bastante agradables conmigo.

-Ya me ha dicho Minzy... -contesté mirando a mi amiga, la cual bajaba la mirada sonrojada. Era más que evidente que le gustaba Dae Sung.

-Tampoco hay que tenerles miedo, se creen mejores por ser un año más mayores pero ni caso, simplemente ignorales y no tendrás problemas. -continuó.

-Gracias.

 

En clase de gimnasia, corriendo me torcí el tobillo y caí al suelo con un alarido de dolor. La profesora me dijo que fuera a la enfermería y para colmo, mandó a Chaerin a que me acompañara ya que no estaba haciendo nada.

-¿Todos los de Canadá sois así de patéticos? -rió mientras caminábamos por los pasillos.

-Déjame en paz.

-¿Quién te crees hablándome así? -dijo cogiéndome del brazo y empujándome contra una pared, haciendo que mi espalda golpeara esta de forma dolorosa.

-Me haces daño -gemí señalando mi brazo.

-Me da igual.

-Suéltame -le pedí intentando no perder la compostura. Bastante mal lo había pasado en Canadá por abusones como ella, no iba a ser igual aquí.

-Hoy ya me has hablado así dos veces, ¿te crees que por ser la nueva van a tratarte diferente?

-No, y tampoco quiero eso. ¿Ahora podrías soltarme?

Me miró por unos segundos con cara de asco, yo me negué a apartar la mirada. Entonces me soltó y me empujó hasta la puerta de la enfermería, que estaba al lado. Entré y vendaron mi tobillo, no era gran cosa por lo que ni siquiera me dieron muletas. Pero lo que realmente me dolía era el brazo, me había apretado con fuerza y había dejado marca. De eso estaba segura.

 

Al llegar a casa fui directa a la ducha. Una vez entré me fijé en la marca de los dedos de Chaerin sobre mi brazo derecho. Recordé la forma en que me había tratado y no pude evitar llorar. Me sentía impotente y tenía miedo de por ser tan orgullosa fuera a pasar por lo mismo que por lo que pasé en Canadá. Aún con todo eso quise ser optimista y pensar que ahora que tenía amigos no estaría en peligro. Acabé de ducharme y llamé a Minzy, no para hablar de nada en especial, simplemente me apetecía escuchar su dulce voz.

................................................................................................................................................................

 

La semana pasó rápido, Chaerin, Bom y G-Dragon (cómo se hacía llamar Kwon Ji Yong) no asistieron a clase, por lo que, según Minzy, la clase estuvo bastante calmada.

El fin de semana Minzy me invitó a quedarme a dormir en su casa. Sinceramente nunca había pasado la noche en casa de una amiga y estaba bastante emocionada. DaeSung y los chicos nos invitaron a ir con ellos a un pub, pero decidimos dejarlo para más adelante, aquella era una noche sólo de chicas y no teníamos pensado dormir.

-¿Y qué te parecen nuestros compañeros? -preguntó.

-Pues... -pensé- Daesung y Seungri son muy agradables. A los demás apenas les conozco. Bueno... a Chaerin algo.

-¿Cómo?

-El otro día cuando me acompañó a la enfermería tuvimos una pequeña discusión.

Al recordar aquello froté instintivamente mi brazo. Minzy vio como bajé la mirada y me cogió de la mano, estiró mi brazo y levantó la manga del pijama.

-Dara... ¿Esto te lo hizo ella?

Observé angustiada como tras una semana todavía se podía observar una marca en un color morado. Miré a mi amiga y asentí con un nudo en la garganta.

-Te dije que tuvieras cuidado -murmuró pasando sus dedos por mi brazo.

-Se metió conmigo...

-Eso lo hacen siempre.

Me quedé callada durante unos segundos, dejando que acariciara mi brazo mientras yo trataba de aguantar las lágrimas.

-Antes no era así -soltó.

-¿Quién?

-Lee Chae Rin.

Escuchar su nombre completo hizo que un escalofrío recorriera toda mi espalda.

-Antes... -continuó- era una niña muy dulce, agradable y divertida

-¿Cómo lo sabes?

-Hace unos años íbamos juntas a clase de baile. No eramos muy amigas pero nos llevábamos bien, quedábamos con las demás chicas para ensayar, cenar juntas tras las clases... Pero un día se desapuntó. Repitió curso y empezó a juntarse con gente que no debía. Cuando comenzó el curso y vi que estaba en mi clase, primero me alegré, pero cuando vi su comportamiento... No la reconocía -suspiró- No la reconozco.

Intenté imaginarme a Chaerin sonriendo y siendo amable, pero a mi cabeza vinieron las imágenes de nuestro “encuentro” en frente de la enfermería y sacudí la cabeza para alejar aquellos pensamientos.

El resto de la noche vimos una película y estuvimos hablando hasta las nueve de la mañana, cuando su madre se levantó y nosotras nos hicimos las dormidas. Finalmente caímos rendidas ante el sueño.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).