Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Casanovas de hielo por Chiaki28

[Reviews - 335]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Muchas gracias a todos por sus lindos comentarios en esta historia, de verdad aprecio el apoyo y espero que les guste y lo siento ya saben los alargo con le tiempo de hecho fue raro que el primer capitulo me quedara tan largo...

Espero que les guste

Hiroki Pov

Por algún milagro que yo mismo convoque logre obtener la habitación limpia a tiempo, juntando todas las caja repletas de mis libros en las dos esquinas del comedor con la blanca pintura ya desgastada debido a tanto roce, suspire sabiendo que no las podría dejar ahí como si se trataran de adornos.

Me senté cansado en el sofá dejando que mis músculos se relajaran, vislumbre todo el apartamento mirando con nostalgia las múltiples cajas llenas de valioso material, varias veces me han llamado hasta cierto punto obsesivo, en estos instantes me pregunto si será más fácil pretender ser alguien más.

Muchas personas ocultan quienes son en realidad o lo que les apasiona por temor al rechazo, por temor a tener que resaltar en una masa gris destacado al tener un color diferente, pienso que las personas que toman está salido son unos cobardes que no merecen disfrutar de las distintas emociones que sus delirios les producen.

Quizás yo no tenga muchos amigos ni sea la persona más sociable del mundo pero al menos me mantengo firme a quien soy y mis propias convicciones, no temo declararla en voz alta para que todos sepan lo que hay en mi interior, porque la transparencia es lo que va primero, si no puedes serte fiel a ti mismo acabas siendo un fracaso.

Es por esa razón que prefiero ser odiado por quien soy en lugar de ser amado por alguien que pretendo ser, aunque termine yaciendo aislado eso es lo que me agrada al no sentirme avergonzado por lo que tengo enfrente del espejo, no dejare que nadie me permita menospreciarme o darme un valor subjetivo.

Quizás mi manera tan rígida de ver las cosas y mis honestas declaraciones son las que terminan alejando a mis supuestos amigos, también es la razón por la que me agradan tantos los libros, siento que cuando uno ingresa en una historia es como la llave para el subconsciente de él autor al encontrarte frente a sus sueños, ilusiones, temores, sensación e incluso recuerdos expuesto en frente de tus ojos con la intensión de que otra alma atormentada sea capaz de compartir y revivir esas ardientes efusiones.

Es la única instancia en donde lo que predomina es la verdad y las mentiras se desvanecen derrumbando el frágil muro que se había construido para ocultar los detalles que nos hacen único y nos permiten sobresaltar, el único instante en donde el escritor se puede reflejar en un personaje esperando a que alguien más lo comprenda o vea una situación desde un punto de vista más objetivo, las puertas que nos enseñan la realidad a través de otros mundos, las predicciones al futuro y visitas al pasado, la llave a una infinidad de sensaciones.

Es por eso que amo tanto los libros y no me esmero por ocultarlo, prefiero la compañía de un par de páginas con leyendas transcritas en ellas a tener que sostener una conversación vacía llena de frivolidades con alguien más, la misma razón por la que no encajo en el amor, porque está lleno de mentiras y trampas, de engaños, de promesas que se rompen, de vendas que se ponen a viva voluntad en los ojos, el corazón se vuelve frágil y vulnerable ante alguien más quien tiene el poder de destruirlo.

Ese es un riesgo que prefiero evitar correr, a pesar de mis declaraciones, no es como si hubiera conocido aun a alguien que valga la pena para saltar, alguien que tome mi mano y me de la seguridad de que me sostendrá cuando mis piernas se estén destruyendo por el peso que reposa en mi espalda, que me de la mano cuando lo necesite, suspire cerrando los ojos con nostalgia sabiendo que estaba más seguro entre esas esplendidas páginas.

Aunque no lo quisiera admitir compartir la casa con otra persona me ponía bastante nervioso, me aterraba que nuestras personalidades se juntaran hasta explotar en la misma habitación, no quería tener que vivir en una zona de guerra con alguien que fuera mi opuesto, no obstante, necesitaba el dinero por lo que debería resignarme al mejor postor para pagar las deudas que yo mismo cree de manera irresponsable.

Lo único que espero es que él sea capaz de respetar las distancias que tengamos, necesito mantener las reglas en orden para que no se sobrepase y no destruya la preciada organización que he creado con su catastrófica entropía que altere mis relucientes planes arruinando el futuro por el que tanto he trabajado.

Es porque tengo las cosa claras es que soy de esta manera porque sé cuál es mi meta, a donde pertenezco, lo que quiero hacer, el período en que demorare en lograrlo, tengo todo lo que necesito planificado para poder cumplir cada una de mis aspiraciones y así a diferencia de lo que le ocurre a la mayoría me pueda sentir orgulloso de mi mismo y de lo que hice con el tiempo que estuve caminando por los distintos caminos.

Aunque suene frívolo y algo cruel para los amigos y el amor ese tiempo no existe, todos nacemos, vivimos para luego caer y morir, y depende de cada uno hacer que esos instantes valgan la pena, que esos preciados segundo marquen la historia, la diferencia, aunque suena bastante iluso eso es lo que ansió hacer con lo que me dieron a mí, explotar todos mis talentos para inspirar a los demás a que pueden llegar a amar tanto algo como yo lo hago, que sientan la desesperación y el éxtasis que esto conlleva.

El sonido del timbre me saco de mis pensamientos fruncí le ceño al notar como la persona a quien voy a entrevistar llego más tarde de lo que me aviso por teléfono, es un irresponsable que no tiene interés por como sus acciones pueden llegar a alterar el orden que existía en mi vida hace un par de minutos, espero equivocarme en la primer impresión.

Camine con pereza hacia la puerta intentando acomodarme los mechones rebeldes que se levantaban en mi cabeza dando la imagen de que me acababa de levantar, cuando estuve ordenando muchas cajas pesadas por horas para que el lugar se viera decente atrayendo a posibles inquilinos.

Abrí la puerta encontrándome con un chico de ojos verdes, cabellos castaño y alborotado, una camisa celeste mal abrochada y un pantalón de tela, en su espalada cargaba una enorme mochila y en su mano una pequeña maleta, suspire con desagrado ante la imagen convenciéndome de darle una oportunidad.

“Buenos días soy Onodera Ritsu, hablamos por teléfono” Declaro el menor haciendo una reverencia la cual fallo al tener mucho peso en la espalda, la mochila termino por empujarlo al frente obligándolo a caer de cara en el suelo de mi entrada, eso solo una primera impresión, repetía mentalmente como si se tratara de un mantra, necesito el dinero y el muchacho se ve decente no lo desprecies aun.

“Hiroki Kamijou” Declare intentando no sonar tan irritado ingresando a mi departamento, al notar que el más bajo no me seguir me voltee molesto para regañarlo “¿Te vas a quedar todo el día ahí o vas a dignarte a honrarme con tu presencia?” El joven reacciono intentando levantase equilibrando el peso que llevaba.

Lleve mi mano a mi frente masajeándola para poder relajarme, necesito tener paciencia al menos no parece un vago, si he aprendido algo todos estos años es que no se debe juzgar el contenido por la portada, muchos de los libros más interesantes son los que se ven más despreciables en el exterior por el diseño.

ME dirigí a la cocina sirviendo dos vasos de té caliente para ofrecerle uno a mi molesto invitado el cual no despegaba su mirada curiosa de mis movimientos, me molesta que me miren mucho tiempo porque siento que me están juzgando en cada uno de esos instante, resople irritado apuntándole el pequeño vaso para que reaccionara.

“Onodera tengo algunas preguntas que hacerte, espero que no te moleste” Proclame sacando una libreta que tenía oculta en el cajón de la cómoda que se encontraba al lado del sofá en el que estaba sentado.

“Puede preguntarme lo que usted desee” Confeso apenado con una tímida sonrisa que le dio un aire de inocencia.

“¿Qué tantas comidas sabes cocinar?” El más bajo me miro confundido ladeando la cabeza suspire inquieto aclarándole las dudas “Necesito saber esto para que acomodemos los horarios del almuerzo, el desayuno y la cena”

“Es que yo no sé cocinar” Susurro apenado soltando una pequeña risa nerviosa evitando que entrelazáramos nuestras miradas.

“¿Y cómo sobrevivías cuando vivías solo?” ¿Qué clase de ser humano no es capaz de freír un huevo? ¿Cómo se supone que me pueda llevar bien con él sí solo me causara más problemas de los que ya tengo?

“Es que antes de venir acá yo vivía con mi mejor amigo Shinobu, él me cocinaba todo el tiempo para que me alimentara hasta que conoció a su pareja; Miyagi You con quien se mudó dejándome el apartamento para mí, en estos últimos meses lo que hice pues fue comprar mucha comida preparada de las tiendas u ordenaba por teléfono de algún restaurant cuando me sentía muy débil como para salir” Arquee una ceja observando fijamente al más bajo apoyando mi cara entre mis manos cansadas.

“¿Sabes manejar por si surge alguna emergencia y yo quedo incapacitado?” Lo interrogue ojeando la pequeña agenda entre mis manos con la enorme lista de requisitos que necesitaba mi compañero perfecto.

“Se supone que tomaría el curso de manejo el verano pasado, pero al final me entretuve tanto tomando fotos de la cuidad en la que vivía para mi novio, que lo deje de lado por eso solo me muevo en metro o en taxi” Inhale con tranquilidad intentando sacar adelante esta desastrosa junta en la cual yo ya no tenía ninguna expectativa puesta, nuestra relación no funcionaría jamás ante tan irresponsable y despistado adolescente.

“¿Tu fumas?” El más bajo negó con la cabeza en el papel anote un punto más en contra de los once que lleva ante las impresiones negativas que me ha dejado “Tus horarios para el trabajo, necesito saber cuáles son para acomodarlos a los míos” El castaño comenzado a juguetear con sus manos ignorando mis palabras.

“Aún no he conseguido empleo porque acabo de llegar hace algunas horas, tampoco estudio en la universidad” Con la goma borre el punto que le había anotado para restarle otros diez, no quería vivir con un vago bueno para nada, al menos si fuera esforzado y deseara ser mejor las cosas podría llegar a tomar su lugar, no obstante, aquel joven que tenía al frente mío era alguien que tendría una vida mediocre.

“Básicamente eres un inútil” El castaño palideció ante mi fría y honesta declaración, es por esta razón que las personas tienden a escapar de mi lado porque yo no me molesto en suavizar la verdad, no por adornar las cosas estas van a cambiar, por eso pienso que es mejor dar a conocer la situación en todo su esplendor para que si existan cambios.

“Se podría decir eso, pero si puedo regar las plantas sin problemas” Por alguna razón esas palabras que salieron con tanto orgullo de la boca del menor solamente reforzaron aún más mis primeras impresiones.

“No te intentes ayudar a ti mismo, solamente suenas peor” Confesé irritado por lo inepto que lucía mi candidato en ese instante “Dime al menos eres bueno en la limpieza ¿Cierto?” El menor se tensó ante mi pregunta.

“Por supuesto que soy muy bueno en la limpieza” Se defendió con la mirada gacha y un sonrojo en sus mejillas mientras su voz se quebraba al final de cada oración, así supe que Onodera me mentía, este chico es fácil de leer, como si de un libro se tratase, por eso no es difícil adivinar cuando me dice quién es en realidad.

“¿Enserio vas a hacer eso?” Pregunte arqueando una ceja con desinterés, arrojando mi cuaderno a mi lado al haber resultado completamente inútil.

“LA verdad es que” El oji verde soltó un cansado suspiro para apoyarse en el respaldo del sillón negro “Soy un completo desastre en la cocina, no se de limpieza, compre un cactus y se me murió a los dos días, trabaje medio año como profesor particular pero lo deje todo para venir a conocer a un extraño en la capital sin si quiera tener idea de donde podría vivir” Su historia me sorprendió bastante.

“NO entendí eso de que lo dejaste todo por un extraño” Susurre para mí mismo en un apenas audible sonido que el más bajo percibió.

“Es que yo hace medio año conocí a mi pareja por una página de chat anónimo y estoy muy enamorado de él, Haitani es el hombre de mi vida, por eso lo abandone todo, a mi familia, mis amigos, mi empleo para que nos pudiéramos conocer e iniciar nuestra historia de amor, porque nosotros somos almas gemelas” El castaño suspiro como una adolescente enamorada sacando su teléfono celular “Mira esta es una foto de él” Observe a un sonriente peli rojo en la diminuta pantalla del celular el cual Ritsu después abrazo cariñosamente “Lo sé, es demasiado guapo, soy tan afortunado”

“Mocoso me parece que estas siendo muy imprudente con todo este viaje” Confesé temiendo a que esta fuera una broma bien planificada y él terminara divagando solo en las calles del centro a mitad de la noche.

“Claro que no, yo escucho su voz todos los día, es tan varonil” Las brillantes orbes verdes del menor resplandecieron ante el recuerdo de una persona que ni si quiera conoce, esa acción me pareció bastante inocente.

“Pero no por escuchar su voz quiere decir que no te ha mentido” Onodera sonrió con nostalgia entrelazando nuestras miradas por primera vez, logrando que un escalofrió recorriera todo mi cuerpo al notar su amable expresión.

“Puede que si me haya mentido, pero esa es la base de una relación, cuando nosotros nos conocimos solamente queríamos hablar no buscábamos nada más y al no tener que dar nombres pude serle sincero a alguien por primera vez sin temor a que me juzgara, por eso sé que lo nuestro es real porque esa noche fue la primera en que abandone cada uno de mis miedos para expresar todo lo que me atormentaba en mis pesadillas” Esas palabras eran las misma que yo utilizaba para describir lo que significaba leer una novela, quitar las paredes que te rodean para que el resto vislumbre tus nuevas verdades hasta convertirlas en una nueva religión que adorar con lo más profundo de él espíritu.

“Me parece admirable que lo dejes todo por tus pasiones pero es algo tonto e ingenuo de tu parte esperar lo mejor de una persona que no conoces” Me defendí sonriendo con más confianza sintiéndome extrañamente cómodo ante sus ojos verdes, como si estos en lugar de calificarme y criticarme intentaran comprenderme.

“Lo sé todo de él” Musito alegre con un semblante cálido “Haitani tiene 25 años, es un editor de una revista muy importante, tiene a sus dos padres juntos, creció en la ciudad, su color favorito es el rojo, quiere formar una familia, mide como 1.83, tiene a su mejor amigo de la infancia cerca de él, no había tenido ninguna relación seria hasta que yo llegue a su vida y me ama, me lo dice todas las noches” El más bajo ante sus propias palabras dejó escapar un gran suspiro recostando en mi sillón con los ojos cerrados.

“Enserio eres un niño iluso” Declare divertido levantándome de mi lugar para darle la mano en señal de que se parara.

“Supongo que sí, se puede decir que soy un niño iluso pero uno bastante enamorado de la persona más maravillosa del mundo” Con una cálida risa tome la mano del castaño el cual me miro con confusión reflejada en esa robes.

“La entrevista se acabó, muchas gracias por tu tiempo” Ritsu me vio de frente dándome un cálido e infantil abrazo.

“Muchas gracias por aceptarme como compañero prometo no defraudarte” Proclamo sin vergüenza logrando que esas palabras me cayeran como un balde de agua fría, eso no era lo que yo quería dar a entender.

“Un momento mocoso” Dije separándome bruscamente de él “Te estoy echando con amabilidad de mi casa, no quiero que te quedes más tiempo” El más bajo me miro impactado sin poder dejar de tartamudear.

“¿PERO PORQUÉ? CREÍ QUE NOS ESTÁBAMOS LLEVANDO BIEN” Grito desesperando negándose a tomar sus cosas.

“PORQUE ERES UN INÚTIL, TU NO SABES NI DE COCINA NI DE LIMPIEZA SOLAMENTE ME CAUSARAS PROBLEMAS ISA QUE MUCHAS GRACIAS POR VENIR, YO TE LLAMO” LE respondí entregándole su pesada mochila, la cual se colocó en la espalda tras muchas protestas inútiles que decidí ignorar al sentirme irritado.

“Pero Hiroki prometo aprender a cocinar, prometo que seré un buen compañero, que ni si quiera me escucharas, yo conseguiré un buen empleo es solo hasta que me vaya a vivir con mi novio y luego nos casemos, por favor no tengo a donde más ir, no busque otro departamentos al sentirme confiando en este” Aunque el joven me daba pena ante la ingenuidad con la que contemplo al mundo, no estaba dispuesto a tener que cuidarlo como si se tratara de un pequeño niño que no logra hacer nada por su cuenta.

“Ya te dije, yo te llamo si me interesas” En nuestro forcejeo por sacarlo de mi casa el cierre de mis mochila se comenzó a abrir dejando caer varios libros enormes de esta, resonando en el suelo de madera.

Bufe molesto agachándome para tomar aquellos textos sorprendiéndome al leer mis títulos favoritos, unos bastante extraños que no creí que alguien más amaría tanto como yo, mire con una tímida sonrisa al oji verde el cual los acunaba entre sus brazos con cuidado como si se trataran de valiosos tesoros.

“¿Son tus favoritos?” Pregunte por inercia sintiendo vergüenza de lo ansioso se escucharon mis interrogantes.

“Si, yo amo la literatura” Contesto el menor sin despejar la mirada de los textos “Leo desde que soy muy joven porque ese es mi escape a la realidad, la verdad en lugar de traer ropa o muebles llene mis maletas con miles de libros fueron bastante pesados para cargar en todo el camino hasta tu departamento” LE entregue con una gran calidez el manuscrito de portada azul al más bajo el cual los metía con cuidado en el interior de su mochila.

“Yo tengo la segunda parte de este, fue muy difícil de encontrar” Confesé con orgullo colocando mis manos en mi cintura.

“¿ENSERIO?” Grito emocionado sin ser capaz de ocultarlo “Eso es increíble yo también lo he buscado sin tener éxito” Los dos nos miramos extrañados por la rara atmósfera que habíamos logrado crear.

“Bueno, si tu prometes ya sabes dejar de ser un completo vago y ponerte a trabajar para pagarme la renta supongo que te puedes quedar como un buen compañero de habitación” Antes de que Onodera me abrazara nuevamente dije “Pero con la condición de que los dos compartamos los libros”

“Lo prometo” Susurro con una tierna sonrisa logrando que una nueva calidez se posicionara en el centro de mi pecho, quizás este ingenuo hombre de impulsivo actuar sea quien cambie mi vida, sea el primer amigo real que tenga aquel que no me mire por las frívolas declaraciones que dejo caer como filosas dagas sino por el oculto significado que hay incrustado en esa cuchilla ansiando que alguien lo lea para que mis lamentos se detengan.

Notas finales:

AL menos Ritsu tiene un techo que vivir y Hiroki un amigo que comprende de la pasion con los libros.

Quieren saber de los semes?? Pues lo lamento no saldran en este capitulo!! Okey no, tenia planificado ponerlos en dos mas pero en una de esas aparecen en el proximo aun debo arreglar ese pequeño muy grande detalle.

Por cierto lo de la mochila, lo que le paso a Ritsu los dos casos cuando se abre y te bota, creame que pasa T_T por eso yo prefiero los bolsos de mano las mochilas me odian.

Espero que les hay gustado, ojala comente y muchas gracias por leer


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).