Después de un tenso silencio en la habitación, el primero en hablar fue Billy Black.
-De acuerdo, si esto es una broma, los tres están en serios problemas.- declaró, serio.
-No es ninguna broma- dijo Embry, hablando por primera vez. -Seth es un chico que no jugaría con algo así y ustedes lo saben bien.-
-Escuchen- dijo Jacob -Esto fue tan impactante para nosotros como lo es para ustedes. Aun así, tenemos que tomar en cuenta que no podemos elegir de quien nos imprimamos. Es algo que pasa y ya está.-
-Jacob, sabemos lo que la imprimación significa pero esto que están diciendo es tan… Tan irreal. No podemos creer que alguien como nosotros se imprimo de un frio.- dijo Billy.
-Miren -dijo Sue -Ustedes aún no han entendido de lo que se trata la imprimación en sí.-
-¿Qué quieres decir mamá?- le preguntó Seth.
-La imprimación no es sólo para encontrar pareja- dijo Sam.
-También es para transmitir el gen lobuno- dijo el anciano.
-¿Cómo?- Embry preguntó, sin entender a qué se referían.
-Verán, ustedes saben que hubo un tiempo en que nuestra tribu se vio afectada porque no habían muchos licántropos- explicó Billy a los chicos. -Así que nuestros ancestros realizaron un antiguo ritual con la esperanza de que funcioara. Éste consistía en que el muchacho en cuestión se imprimara de la persona que fuera más propensa a transmitir el gen lobuno. Y, por si no se han dado cuenta, todos ustedes tienen padres que en su momento también formaron parte de esta manada. -terminó, haciéndoles reflexionar.
-Pero… Pero… Pero esto no puede ser… - Seth tartamudeaba, sin creerlo todavía.
-Es por esa razón que nosotros no podemos creer que te hayas imprimado de un vampiro, Seth. -sentenció Billy, con la mirada seria pero compasiva que siempre tenía.
-No te has transformado desde que sucedió ¿verdad Seth? - preguntó Sam, a lo que Seth negó despacio.
-No lo he hecho porque quería esperar a hablar sobre lo ocurrido con ustedes antes de que todos lo vieran.- bajo la mirada tímidamente.
-De acuerdo.- Sam dió una mirada a Billy y a Sue, antes de continuar:- Nosotros vamos a discutir esto más a fondo y te llamaremos, pequeño. De mientras ve a casa y descansa un poco, y por el momento no te transformes, ¿de acuerdo?
-Sí. - respondió el aludido.
-Muy bien; pueden irse, chicos. -Billy habló.
Los tres chicos se retiraron de la sala, iban callados y cada uno sumido en sus propios pensamientos. Jacob fue el primero en hablar.
-Tranquilo, Seth -pasó un brazo por sus hombros cariñosamente- Todo estará bien, tú sólo confía.
-Jake tiene razón. Si ese chup… Aaam… Tipo. Si ese tipo es tu imprimación, el consejo no te alejara. No pueden hacerlo y lo sabes. -le dió fuerzas el mayor.
-Muchas gracias, chicos. -les sonrió tímidamente Seth.
Finalmente, los tres se despidieron entre sonrisas para irse cada uno a sus respectivas casas.
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Ya en su habitación, Seth se puso a recordar lo acontecido “ese” día e inconscientemente sonrió.Tenía que admitir que imprimarse no
estaba del todo mal pues se imprimó del chico que le gustaba, y aunque nunca habían hablado, imaginaba que podían tener un futuro prometedor. Así, empezó a fantasear con citas, cenas, paseos tomados de la mano caminando por la playa o simplemente dando vueltas por el bosque. Pero la sonrisa se desvaneció un poco al darse cuenta que primero tendría que conocer a Emmett un poco más. Pero más importante: Emmett tendría que desear pasar tiempo con él.
No podía ser tan malo ¿verdad? La imprimación no sólo servía para encontrar pareja, también era para proteger a esaquerida persona. Él podría ser cualquier cosa que Emmett quisiera; lo que necesitara, él estaría ahí para dárselo. Sería feliz con tansólo pasar tiempo junto al alto. Definitivamente, debía darle tiempo al tiempo. Sus amigos tenían razón: todo estaría bien. Con ese pensamiento, sonrío más de nuevo.
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Más tarde Jacob, Embry y él estaban de nuevo reunidos en la sala que usaba el consejo para las juntas especiales. Sam, Billy y su madre se encontraban sentados frente a ellos en un silencio algo incómodo.
- Bien -hablo Billy- Hemos discutido minuciosamente la situación y a pesar de que no sabemos cómo es que esta imprimación fue posible, hemos tomado la decisión de que Seth tiene todo el derecho de estar con Emmett Cullen.
Los tres chicos se miraron sorprendidos por las palabras del jefe.
- ¿De… de verdad? -dijo Seth, aún asombrado.
- Sí -contestó Sam.- No podemos sólo interponernos en la imprimación de alguien, aunque esta persona sea de un clan ummm.. Diferente.
- ¿Pero? – Seth sabía que había algo más.
- Tienes que estar consciente de lo que estar imprimado de Emmett Cullen significa. – contestó su madre.- Hasque saber que no va a ser algo fácil, y que, probablemente él necesite un poco de tiempo para asimilarlo todo.
- Así es - interrumpió Billy.- Iremos a hablar con los Cullen mañana, temprano, y trataremos de llegar a un acuerdo con ellos.
- Esta bien. -contestó Seth aliviado porque todo hubiera salido bien.
- Pasaremos por ti y por Sue a las 9 de la mañana. -dijo Sam.- Ya pueden retirarse.
Los tres chicos salieron de la sala en silencio, aún pensando sobre la situación.
- Así que... No fue tan malo, ¿verdad? -Jacob fue el primero en habalr.
- No, no lo creo -contestó Embry.- Después de todo, Seth consiguió poder ver a su “Hombre”.
- ¡Oh! Cierra la boca – amonestó Seth y le dió un golpe suave en su hombro, siempre jugando entre ellos.
- ¿Qué? -replicó Embry.- Es la verdad.
Ambos chicos sólo se limitaron a reírse y siguieron camino a sus respectivas casas, con un sonriente Jacob detrás.