Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

"Seed of Life" por William Michaelis

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Muchas gracias, a las personitas que se tomaron su tiempo para dejar un review, y que le agrado la historia.

El repartidor del correo me había hecho una entrega esa mañana, y jamás pensé que fuera de aquellas dos personas. Si bien temía que algo así fuera a suceder, no lo podía creer. Rompí en llanto, en verdad nunca había significado nada para ellos, más que una simple amistad. Era cuestión antes de que ambos anunciaran algo así.

Nunca había sentido tanta frustración. Tanto dolor, nunca le había dicho lo que sentía por él, y ahora que lo veía, era mejor estar así.

Si bien solo habían pasado unas semanas desde el suceso, aún lo sentía,  y dolía, dolía verlos juntos y tomados de las manos. No sabía porque, si bien un lema mi era: “Tu felicidad, me hará feliz” Quizás, siempre había sido mentira, una mentira bien disimulada.

Makoto” Llamo mi nombre y entonces le preste atención, si bien los días de la preparatoria habían pasado, solo nosotros cuatro seguimos el camino a la universidad, a veces aún anhelaba poder nadar junto a él. “Rin y yo iremos a Iwatobi, este fin de semana.” Dijo, sonaba como una invitación, trataba de analizar sus palabras. Quizá irían a avisarle a la madre y hermana de Rin, aunque a estas alturas era inútil.

Entonces el pelirrojo apareció, ahí sin escrúpulo alguno atrajo a Haru desde su cintura y lo saludo, ambos lucían felices, y no podía evitar pensar en qué pasaría si yo estuviera en su lugar.

“¿Haru no te lo había dicho? Sousuke está desparecido y él y yo creemos que esta en Iwatobi” ¿El amigo de Rin? Desde cuando… Tenía razón, habían pasado varias semanas en las que no asistía a la universidad, era raro, ya que siempre estaba con Rin, y rara vez llegábamos a cruzar palabras.

“¿Cuándo desapareció?” Le pregunte, no era que me interesara, simplemente podía ver la preocupación en el rostro de un amigo mío.

“Unos días después de que asistiera a que le diéramos la noticia.” Dijo Haru con total deje alguno de sentimientos. Entonces lo pensé, quizá, se sentía igual que yo.

Las pocas veces que cruzamos palabra, el miraba de la misma forma que yo miraba a Haru, quizá, eso le había afectado. En todo.

No era estúpido, quizás ellos ni si quiera se habían dado cuenta de lo que habían cometido, Yamazaki podría haberse suicidado. Seguía cavando en mis pensamientos.

Los días comenzaban a hacerse pesados y agobiantes, al final termine accediendo a ir con ellos a Iwatobi, si bien me gustaba ayudar a las personas, y siendo la única en estos momentos que podía ayudar a Yamazaki, ¿Qué más daba?

Pero como acercarse, como acercarse a alguien que seguramente este dolido. ¿En verdad nunca se dieron cuenta que los queríamos más que aún amigo?

Recibí el mensaje de Rin que estaba en el lugar del encuentro, aprovecharía estar en Iwatobi para ver a mis hermanos pequeños, y a mi familia también, tan solo unos años y este lugar seguía igual.

Mis pensamientos se enfocaron en Sousuke de repente, ¿A dónde iría tan lejos con una carrera no terminada?

Vi llegar a Rin y a Haru, ahí estaban los dos tomados de la mano como siempre, y a paso lento se acercaron, Rin dijo que checaríamos primero por la playa, a lo que me hizo recordar viejos tiempos con Haru, no era la mejor idea posible, menos en primavera.

El pelinegro resfriaría. Hubo un momento donde ellos siguieron caminando por la playa de Iwatobi, yo estaba atrás mirando el mar, miraba a aquel enorme y vasto azul.

Lo amaba, de alguna manera, el pasado era pasado, y me reconfortaba ahora. Pare en un local solo para pedir agua, compre lo que necesitaba, me había separado de Haru y Rin, la verdad, no quería seguir soportando tanta miel, tanta cosa…

Mis pensamientos fueron interrumpidos al chocar con alguien a la entrada del autoservicio. Lo mire, ofreciendo una sincera disculpa, y entonces, avergonzado. Mire a aquellos ojos turquesa.

“Tachibana”  Lo escuche musitar para después entregarme la botella de agua que yacía en sus manos. Que cálido. “¿Qué haces aquí?” Pregunto para después ambos salir de la tienda y descansar en la banquita de fuera.

Él nunca había sido así. Por lo que sabía, era casi, o igual que frio que Haruka.

“Vine de visita” Dije un tanto cortante cuando realice mi verdadero motivo, ¿Por qué mentía? “Con Haru y Rin…” Los ojos del pelinegro se abrieron de manera instantánea y frunció el ceño.

“Era obvio” Ligeramente sonrió entonces miro al cielo. “No creí que fueras masoquista Tachibana.” ¿Masoquista? ¿Yo?

“No, tu no entiendes, no estoy aquí por ellos dos…” Había accedido, quizá por…

“¿Entonces por qué? ¿Huyes igual que yo? ¿Por qué te arrebataron a alguien que era tuyo?”  Su tono de voz, sarcástico, molesto, entonces, estaba igual de dolido o frustrado que yo. Que desgracia. Esa ‘inocente’ sonrisa que tenía se desvaneció, él lo conocía.

Si, Yamazaki, huyo igual que tú.”  Admití sin delicadeza alguna, por alguna razón, sentí alivio, me sentía igual de  perdido que él.  Era un sentimiento tan delicado ni si quiera me negaba a reconocerlo. Era verdad, estaba celoso de no ser el futuro esposo de Haru,  y que desdicha la mía.

Entonces el me miro.

“Te propongo un trato,  si sobreviven a nosotros dos,  no nos meteremos en sus vidas. Nunca más. “Dijo cortante, yo me puse a pensar, y en algún momento le di el sí. Le dije que si a tan tonta propuesta. ¿Cuándo aquel lema se desvaneció?

Cuando en el mismo día, que le confesaría mis sentimientos, recibí una carta con motivo de invitarme a su boda.

Él se levantó de la banca y yo solo lo mire. “¿Volverás a Tokio, Yamazaki?”  Pregunte con simpleza. El solo se limitó a asentir.

“Al fin y al cabo lo que quiero se encuentra ahí.” Dijo para después empezar a caminar. No sabía si debería de hablar con Rin y Haru al respecto, no sabía qué hacer. Quería a Haru, pero poner en juego su felicidad, me costaba demasiado, ¿él nunca le importa la mía, cierto?

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).