Ambos chicos estaban tan ensimismados en su lujuria. En querer dominar el cuerpo del otro. Tener el cuerpo de alguien bajo el y nunca se dieron cuenta que una persona se acercaba a aquellos dos muchachos ensimismados.
-¡Jungkook!- Grito la madre del menor. El chiquillo reacciono ante la voz de su madre empujando al mayor con fuerza levantándose abruptamente.
-¡Ya... ya voy madre!- Grito el chiquillo corriendo tomando sus ropas para colocárselas con rapidez y tomar todo lo que traía desde un principio.
Jungkook le hecho una ultima mirada a lugar en donde momentos antes estaba por tener relaciones con un hombre, estaba a punto de dejar que un desconocido usurpara su cuerpo. Lo pero que pensó el fue que se sentía sucio por haber reaccionado de esa manera ante las caricias de un hombre, de una persona de su mismo sexo. Su padre estaría decepcionado por sus acciones en la laguna, quería llorar de eso no tenia la menor duda pero es un hombre y como su padre le dijo ''-Jungkook los hombres no lloran-''
Apretó fuerte mente sus ojos para que las lagrimas no salieran -Que sucede madre, les dije que no tardaría tanto.
-Jungkook que no escuchaste las campanas del templo, ya es media noche escuincle- Le reprendió su madre dándole un suave golpe en la cabeza -Anda camina que aun no has cenado- Ambas personas caminaron hasta la casa del chiquillo.
Su madre le extendió un plato con verduras, un pedazo de carne y un baso de leche. Jungkook solo observaba el contenido del plato no tenia apetito, solo quería salir corriendo al baño que se encontraba fuera y desechar todo lo que por la tarde había comido en la panadería. Se tomo el liquido blanquecino del baso para después pararse y dejar el plato intacto sobre la mesa.
Entro a su habitación cerrando tras de el la puerta de madera blanca, se dejo caer sobre la cama hundiendo su rostro entre las mantas y almohadas improvisadas. Lo único en su mente era el desconocido, Yoongi o suga cual fuera su nombre no dejaba de pensar en el, no dejaba de pensar en la suave y tierna piel del chico, aun sentía como sus dedos se pasearon por la espalda del del cabellos blancos. Sentía aun como las manos del chico tocaban su piel dejando que la zona se sintiera como si la hubiera tocado el fuego, el aliento sobre su piel. Volvió a sentir calor demasiado calor, se giro hasta quedar boca arriba viendo como debajo de sus pantalones había un bulto. Con timidez llevo una de sus manos hasta aquella zona sensible, uno de sus dedos logro rozar la zona haciendo que una corriente eléctrica le recorriera todo el cuerpo logrando que soltara un suspiro pesado.
Se estaba acalorando con solo recuerdos sucios, con recuerdos indecentes, recuerdos que debía dejar en el olvido pero aquella sensación debajo de sus pantalones lograba que hiciera recordar cada rose. Cada caricia como la saliva del de cabellos blancos se quedaba en su piel, volvió a dirigir su mano a su entre pierna metiéndola bajo su pantalón. Se sintió entraño cundo se tomo su miembro erecto, no sabia que iba a hacer pero con desconfianza coloco su dedo gordo en la punta de su pene haciendo que el dedo presionara la zona y entregándole un infinito sentimiento placentero. Cerro sus ojos haciendo su cabeza para atrás logrando que su espalda se curvara un poco, volvió a repetir la acción varias veces pero eso ya no le fue suficiente, cuando iba a acomodar su mano un poco más arriba la fricción de su mano con la piel de su miembro le dieron un mejor placer.
Comenzó a bajar y subir su mano con lentitud por todo su pene, su respiración se estaba tornando pesada, una leve capa de sudor se estaba haciendo en su frente logrando que sus cabellos negros se pegaran. Intensifico la velocidad sintiendo como un hormigueo extraño se extendía por todo su cuerpo. Tuvo que morder su labio inferior para no seguir soltando gemidos logrando saborear un sabor metálico.
Una extraña acción se poso en su estomago llegando hasta su pene, arqueo su espalda con exageración cuando sintió como un liquido viscoso salía de su miembro, como un cosquilleo se extendía por todo su cuerpo y no puedo más había llegado a su orgasmo sin saberlo, quito su mano de su pene y viendo con la luz de la luna aquel liquido viscoso y brilloso. Quito sus pantalones y limpiándose su mano con los mismos. Tomo otro par de pantalones y se los coloco volviendo a dejarse caer en su cama.
Apenas y se acomodo en su cama se quedo dormido al instante.
Se despertó con la insistente llamada de su madre tras la puerta de su alcoba -Ya voy madre- Hablo el chiquillo con voz ronca y aun adormilado.
-Bien me iré primero a la panadería tu almuerzo esta en la mesa y tu amigo te esta esperando también- Hablo la señora para segundos después salir de la casa ante la atenta mirada de un chico.
-Que le vaya bien señora Jeon- le grito el chiquillo viendo como se alejaba la mujer.
Jungkook salió aun colocándose la camisa blanca viendo a un chico sonriéndole enormemente -Pensé que ya no vendrías- le hablo al chico que se sentaba frente a el.
-Mi madre no se quería regresar ya vez que cuando esta con la tía Min nunca quiere volver al pueblo- Le hablo el chiquillo sin importancia, ya estaba acostumbrado a lidiar con su madre cuando no quería regresar a pueblo.
-Taehyung deberías de hacerle caso a tu madre y irse al reino a vivir con su familia.
-Sabes que no soporto a su familia sobre todo a mis primos Jin y Namjoon son insoportables- arrugo su entre cejo al recordar a los primos del reino, en verdad que no los soportaba eran tan creídos, simple mente eran el opuesto de el. El era bondadoso de buen corazón, les ayudaba a las personas del pueblo a pesar de que ellas mismas se negaban diciéndole que un príncipe no podía hacer trabajos de campesinos, pero conociendo a Kim Taehyung sabían que nunca se le podía ganar y al ultimo el príncipe les ayudaba en todo.
-Y ya no has sabido nada de tu amigo de la infancia?- le pregunto comiendo su almuerzo y ofreciéndole al otro.
Taehyung parecía como si hubiera visto lo más importante del mundo sus ojos brillaron con solo escuchar la palabra amigo -Si ayer llego por la noche a casa.
-Y en donde esta tu amigo- hablo jungkook parándose de la silla e ir a lavar el plato junto con el vaso.
-Pues por la mañana me dijo que iría a correr después se ducharía y por ultimo vendría a tu casa para encontrarnos aquí- hablo el príncipe alegre.
Antes de que el menor su fuera a sentar de nuevo alguien golpeo la puerta, abrió la puerta encontrándose con un joven de cabellos rojos como una manzana, labios gruesos en forma de corazón de un color rosa pastel, nariz respingada, pómulos leve mente hinchados haciendo que su aspecto fuera adorable y sus ojos, sus ojos eran dos hermosas líneas tupidas de pestañas tan negras como las noches en verano. Jungkook se quedo impresionado por el chico frente el, era hermoso y cuando le sonrío era la cosa más adorable.
-Hola se encuentra en Joven Kim- Hablo el chico con educación y regalándole una hermosa sonrisa al chico de cabellos negros.
-E...eh si es...esta adentro... pasa- Jungkook se golpeo en su mente al estar tartamudeando.
Taehyung al escuchar la voz del recién llegado dio un salto de la silla corriendo hasta la puerta encontrándose con un chico unos centímetros más bajo que el -¡Jimin!
Jimin tuvo que dar unos cuantos pasos atrás por el gran abrazo de su amigo -Joven Kim nos acabamos de ver por la mañana- hablo el mayor. El menor arrugo su seño al escuchar como su amigo lo llamaba, no le gustaba que le dijeran Joven Kim o príncipe Kim.
Cruzo sus manos en su pecho haciendo un puchero con sus labios - ¡Park Jimin!- hablo el menor con voz grave - Sabes que odio que me digas joven Kim dime Taehyung, TaeTae o V como los demás me dicen.
-Lo siento jov... digo V- El chico sonrió al ver que no lo llamaría joven.
V jalo el brazo de Jungkook acercándolo a ambos chicos -Jimin el es Jungkook mi mejor amigo en el pueblo... bueno el único que tengo ya que los demás me tratan como si fuera de la porcelana más fina- Hablo el chico moviendo sus manos en forma de estar enfadado -Jungkook el es Jimin mi amigo de la infancia nunca te lo dije pero el es el hijo de uno de los duques en el reino, pero aquí no importa el estatus social.
Jimin se acerco al chiquillo sonriéndole estirando su mano y juntarla en un apretado saludo con Jungkook -Mucho gusto Jungkook espero y Taehyung no te cause problemas es un poco raro pero es una excelente persona- el nombrado inflo sus mejillas en forma de reproche.
Ambos chicos se presentaron y rápidamente ambos se llevaron muy bien, entablaron una amena platica yendo hasta la panadería de la madre del menor de los tres. Los dos mayores del chiquillo se retiraron después de decirle que lo irían a buscar para dar una vuelta por los alrededores del bosque.
Jungkook siguió haciendo sus deberes como todos los días ya pasada la tarde en donde el sol estaba de un color rojizo-anaranjado aparecieron con chicos por la puerta de la panadería alegremente esperando al menor a que saliera de su trabajo, el chiquillo se alegro al ver a los dos esperándolo sobre todo aquel chico de cabellos rojos. Hablo con su madre o más bien avisándole que saldría con Taehyung y Jimin.
-Listo! Vamos que después se hace más noche- les hablo jalándolos a ambos. El chiquillo sintió como los dedos de Jimin se entrelazaban con sus dedos uniendo sus manos con dulzura haciendo que el chiquillo se sonrojara por aquel acto del mayor.
Taehyung los llevo hasta el lago en donde los tres se quitaron sus ropas quedando solo en unos calzoncillos de tela. Jugaron, nadaron y hubo uno que otro rose por el mayor y el menor. Taehyung observaba como sus dos amigos cada que podían se abrazaban y también observaba como se daban miradas, sonrisas y sonrojos.
-Debería de ir por Hoseok mi madre ya lo debió de haber dejado descansar- Antes de que los chicos le respondieran un chico ya se encontraba corriendo y colocándose su ropa torpemente -¡Juro que regreso en un rato!- grito el chico antes de desaparecer por los arboles.
Jimin sabia como era su mejor amigo y sabia que Hoseok aun no llegaba del pueblo cercano al que se encontraba unos kilómetros del pueblo en donde vivía Taehyung. Sin más y rogando con la diosa del amor rogo por que Jungkook no se separara cuando se acerco al chico y lo beso en los labio, Jimin era bien conocido por ser impulsivo pero en ese momento le agradaba ser así. El de cabellos rojos sintió los tiernos labios del de cabellos negros esos labios esponjosos como un pan con azúcar y lo mejor es que sabían a cacao mesclado con frutas en almíbar. Tomo con sumo cuidado una de las mejillas del menor acunándola en una de sus manos, acercando el cuerpo ajeno hacia el suyo abrazando su cadera con el brazo desocupado, tardo un poco en ser correspondió pero al final sintió como el menor comenzó a aceptar el beso con torpeza y un deje de dulzura.
Ambos se separaron por la falta de oxigeno fijando sus miradas en cada uno, Jungkook se sonrojó al ser observado con aquellas pupilas café oscuro, sin pro ni contra volvió a unir sus labios con los del mayor. En verdad los labios de jungkook se estaban haciendo una adicción para Jimin, con solo darle un segundo beso ya los estaba devorando con ansiedad impregnada, dejo la mejilla del chico bajando su mano hasta la cadera del chico aferrándolo más a su cuerpo. Jungkook necesitaba más, necesitaba más cercanía no solo quería besarlo quería devorarlo, devorar esa hermosa piel tan suave como la seda más fina. Sin conocimiento de el mismo enrollo sus piernas en la cadera del mayor provocando que el rose de los miembros de los chicos hiciera que ambos soltaran un gemido. Los jóvenes estaban que desbordaban lujuria, deseo, un deseo por poseer el cuerpo ajeno. Jimin bajo su manos hasta los glúteos del menor apretándolos con fuerza recibiendo un gustoso gemido de la boca ajena.
Yoongi decidió dar un paseo por los alrededores del pueblo antes de ir a la panadería y volver a ver a aquel chiquillo, se sentía de alguna manera extraña atraído por el mocoso y eso era absurdo viniendo de Min Yoon Gi el chico que solo se acostaba con hombres o mujeres para controlar sus deseos carnales. Camino hasta que el sol decayó por las montañas dejando una tenue vista del cielo color anaranjado, el aire de los bosques era tan reconfortante, un dulce olor a tierra mojada junto con el olor de las plantas.
Vio como un chico corría por el bosque colocándose su ropa escuchando como le gritaba a alguien que regresaría después. La curiosidad le gano y camino por donde el chico anterior mente corría, se encontró por el mismo camino por donde anterior mente el había llegado hasta el lago y lo que observo no le agrado para nada, se le hizo el momento más amargo en su vida. Ante sus ojos se encontraba la viva imagen del chiquillo siendo devorado por otro chico.
Quiso caminar hasta ambos y jalar al otro para llevárselo pero se detuvo al ver que ambos se separaban quedándose viendo fijamente, vio como el menor volvió a besar al otro y eso lo puso furioso sin saber porque se enojaba al ver aquel acto con los chicos, vio como el de cabellos negros daba un saltito enrollando sus piernas en la cadera del desconocido.
Se acerco con sigilo hasta llegar y tener una distancia prudente ante los chicos acomodo sus ropas sentándose en una piedra -Supongo que te encanta besarte con cuan desconocido- hablo el mayor con ira impregnada en cada una de sus palabras.
El menor se asusto al escuchar la voz de Yoongi, se alejándose de Jimin y encaro al mayor viendo como tenia el seño fruncido y los puchos cerrados haciendo que sus nudillos estuvieran de un color blanco -Que haces aquí?- Le pregunto después de recobrar un poco el aliento.
Yoongi abrió los ojos con asombro al ver con quien se besuqueaba el menor. Podría ser con otro pero con el no, porque el, porque tenia que ser ese chico. Se paro con brusquedad caminando hasta el lago sin importarle que su pantalón se mojar llego hasta el chico de cabellos rojos y le propino un fuerte golpe en la mejilla izquierda.
-¡Tu maldito hijo de mierda es mejor que te alejes de este chico!- Hablo el mayor con odio, un odio que el menor pudo sentir ante las palabras del mayor.
-¡Deja de hablarle así a Jimin! ¡Quien te crees para hablare de esa manera!- Hablo Jungkook parándose entre ambos chicos.
-¡Yo hablo como se me pega la puta gana! ¡Sobre todo a este maldito traidor!- Su garganta comenzaba a cerrarse, sus ojos comenzaban a picotearle por las lagrimas retenidas -¡Eres un maldito Jimin! ¡Eres lo peor, ojala y nunca te hubiera conocido! ¡Eres lo peor que me pudo haber pasado en mi puta vida!
-¡Yoongi espera!- Grito el chico de cabellos rojos -¡Déjame explicarte lo de hace tres años!- Corrió por donde el mayor se había ido antes.
Jungkook se quedo solo observando como ambos mayores se alejaba.
Estaba confundido, ¿Qué rayos había pasado entre los dos mayores? ¿Qué paso hace tres años? Se preguntaba el mismo.