Amber y Krystal veían una película, la primera se notaba entretenida con la trama, pero la segunda estaba bastante distraída.
-¿Qué pasa Krys? –Preguntó Amber al ver tan pensativa a su novia
-¿Qué?...no, nada, sólo pensaba… ¿Y si Taeyeon tiene razón?
-¿Cómo? No entiendo
-Sí, mira, Jess debe tener sus motivos para seguir con Yoona… ¿No? –Preguntó volteando a ver a su novia que seguía confundida –Entonces, si es así…bueno, creo que debemos dejar de intervenir en su relación, ¿No crees?
-Pero amor, tú fuiste la que insistió con eso del plan para convencer a tu hermana de dejar a esa mujer –Amber no comprendía el repentino cambió de parecer de su novia
-Sí, lo sé pero… ¿Recuerdas la primera vez que la vimos, cuando le dije que entendía a mis padres del por qué su negación a que ella estuviera con Yoona?
-Sí, ¿Y?…
-Que desde ese día recordé algo…bueno, y también porque Jess no se cansa de decírmelo a mí y a toda persona que le aconseje dejar a Yoona
-¿Y qué es eso?
-Ella repite constantemente que Im no era así, que su cambio de actitud fue justamente seis meses antes de presentarle a mis padres…y ella está segura de que Yoona va a cambiar
-Y tú ¿Crees eso?
-Bueno…no sé, pero ahora que lo recuerdo mejor, cuando yo conocí a Yoona, justo un año antes que mis padres, ella era realmente diferente, era muy cariñosa con Jess, detallista, bromista, incluso se podría decir que era mi amiga…pero no sé, después de unos cuantos meses su padre falleció…y ahí fue cuando cambió –Hizo una pausa –Tal vez simplemente no pudo superar la muerte de su padre, ¿No crees? –Miró a los ojos a Amber
-Puede que tengas razón, pero entonces… ¿Qué piensas hacer?
-Nada, definitivamente Taeyeon tiene razón, la única que puede decidir qué hacer con esa tonta, es mi hermana, no pienso discutir más con ella, cada vez que lo hago siento que me alejo más y más de su lado. Nosotras regresaremos a casa, le contaré a mis padres que ella está bien, que les manda muchos saludos y…ya…no pienso decir más
-¿Piensas mentirle a tus padres?
-Digamos que sabrán una verdad a medias –Dijo con clara tristeza –Sabrán que Jess está bien, dentro de lo que cabe, claro, tiene un techo donde dormir, no pasa hambre, vive bien, en fin, yo no seré quien los angustie más de lo que ya están, al contarles lo que vive con Yoona, suficiente han tenido con no saber de ella por casi tres años
-Está bien Krys, como tú digas –Abrazó a su novia
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A la mañana siguiente, Yuri se levantó muy temprano, preparó el desayuno, hizo algunas labores del hogar e incluso logró avanzar en su nuevo escrito, algo que no hacía desde un par de días. Cuando Tiffany se levantó, ambas tomaron el desayuno, Yul siguió con su escrito y Tiff organizó citas con nuevos clientes, las dos estaban muy concentradas en su trabajo, tanto que no escucharon el timbre hasta que la persona decidió quedarse pegada a éste por unos segundos.
-¡Demonios! ¿Qué una no pude escribir tranquila sin que la interrumpan cada cinco minutos? –Se quejaba en voz alta, dispuesta a ir a abrir, hasta que escuchó a Tiffany gritar desde la sala
-¡No te preocupes Yul, yo abro! –La pelirroja se dirigió a la puerta –Emm… ¿Te puedo ayudar en algo? –Preguntó al tener frente a ella a una azabache de tez blanca y un rostro angelical
-¿Eh? Perdón creo que me equivoqué de número –Miraba la dirección en el pequeño papel que traía en mano
-Espera, tal vez yo te pueda decir si te equivocaste o no, para empezar, ¿A quién buscas?
-…Busco a mi hermana, pero no, déjalo, seguramente yo estoy mal, mi hermana vive sola y…
-¿Cómo se llama? –Interrumpió
-Yuri, Kwon Yuri –Contestó, sonriendo al mencionar el nombre de su hermana
-¿Qué? No sabía que Yuri tenía una hermana –Se asombró un poco
-¿La conoces?
-Por supuesto, bueno…de hecho ella sí vive aquí, sólo que…
-Vaya –Interrumpió –Veo que mi hermana no ha cambiado nada, apenas tiene unas semanas aquí y ya tiene novia viviendo con ella –Sonrió divertida
-¿Eh?...no, yo no…
-¿Quién es Tiff? –Salía de tras de ella, la chica que tanto buscaba la azabache – ¿Qué? Pero ¿Cómo?... ¡Seohyun! ¿Qué haces aquí? –La pelinegra se asombró al ver frente a ella a su pequeña hermana
-¡Yul! –Corrió a abrazarla evidentemente feliz –Te extrañé mucho
-Y yo a ti, pero… ¿Cómo me encontraste? ¿Cómo llegaste hasta aquí?
-Le llamó a Hyo y… –Eso fue suficiente para que la joven entendiera todo
-¡Ay! Esa tonta me va a escuchar, le he dicho una y mil veces que no me gusta que viajes sola, y menos si es hasta el otro lado del mundo –Dijo exagerando la situación
-Yuri, ya no tengo cinco años, puedo viajar sola, no me va a pasar nada, además vine porque te tengo una excelente noticia –Sonrió emocionada
-¿Cuál es esa “excelente” noticia? –Preguntó divertida por la actitud infantil de su hermana
-¡Mamá se casa!
-¿¡Qué!?
-Como lo oyes, nuestra madre se casara de nuevo, ¿No es genial? –Volvía a decir emocionada
-Pues si ella está segura y es lo que quiere…sí, me alegro por ella, pero ¿Con quién? ¿Cómo se llama? ¿A qué se dedica? –Pidió ansiosa
-Tranquila que ya lo conocerás, ellos llegan en una semana, al parecer él también quiere presentarnos a su familia, bueno…en realidad sólo tiene un hijo o algo así, la verdad es que no ha hablado mucho del tema
-Entonces, ¿Su familia vive aquí?
-Sí, eso creo
-¿Cómo? –No entendía
-Ya te dije que cuando venga lo sabrás todo
Ambas hermanas volvieron a sonreír, estaban muy contentas de volverse a ver, tanto que por un momento olvidaron la presencia de la persona que se encontraba con ellas, y para que le pusieran atención, carraspeó un poco.
-Oh claro, perdón Tiff, mira, te presento a mi hermana, Seohyun...Seo, te presento a Tiffany, ella…
-Ella es tu novia –Interrumpió
-¿Qué?...no, para nada, Tiff es la novia de…bueno, ya te explicaré luego
-Hola, un gusto –Saludó la pelirroja
-El gusto es mío –Devolvió el saludo
-Ahora hay que pasar, ¿Quieren? –Volteó a ver la maleta que traía consigo la azabache –Por lo visto piensas quedarte conmigo en lo que llega mamá, ¿No?
-Sigues siendo un genio
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-Yoong…Yoona despierta –Soo que ya se encontraba bañada, arreglada y desayunada, trataba de despertar por quinta vez a la castaña
-¿Qué? –Decía algo adormilada
-Vamos, levántate, ya vamos muy retrasadas –Pedía molesta
-No pienso ir a ningún lado, mucho menos a trabajar, además ¿Con está resaca? Olvídalo –Volvió a tumbarse en la cama
-Yoona, por favor, si vuelves a faltar injustificadamente te van a correr, y de pasó a mí por llegar tarde, de nuevo…por tu culpa
-Pero de ¿Qué hablas? Si tú eres la presidenta de la empresa, no te puedes auto despedir –Seguía sin levantarse
-Precisamente por eso, no puedo dar el mal ejemplo a los demás empleados…y con respecto a ti, los socios están empezando a presionarme, dicen que no puedo tener al frente de la empresa a una vicepresidenta tan desobligada de sus funciones
-Ok, tú ganas –Se levantaba de la cómoda cama –Peor dime genio, ¿Qué me voy a poner? –Señaló la pijama que traía –De seguro mi ropa huele a cantina y no pienso ponérmela –Habló aun estirándose para despertar mejor
-Mmm…ponte algo mío
-Ni loca, me va a quedar enorme
-¡Por Dios Yoong! Soy más alta que tú por tres centímetros –Dijo irritada
-Ok, me pondré algo tuyo, no te enojes –Entró al baño –Y cuéntame, ¿Cómo vas con tu amorcito Hyoyeon? Así se llama ¿No? –Hablaba desde la ducha
-Sí, y lo nuestro va bien, supongo –Ni ella se creía esas palabras
-Eso significa que ya olvidaste a la zo…
-No te atrevas –Trató de sonar lo más tranquila posible
-Vale, vale, a Sunny
-Yo…no sé, además ella no me quiere ver ni en pintura –Sonó triste –No me dirige la palabra a menos que sea para hablar de trabajo
-¿Y eso por qué? –Decía saliendo del baño
-¡Wow! Vaya que eres rápida
-Sí, como sea, no me cambies el tema y dime ¿Por qué?
-…La bese
-¡Oh! Pero eso es bueno, ¿No? –Preguntó confundida
-No, porque después de besarla, Hyoyeon me habló interrumpiéndonos…y al otro día yo actué como si nada hubiera pasado, y para colmo le conté a Sunny que estaba saliendo con ella –Dijo desesperada –Soy una idiota
-Algo así –Respondió empezando a vestirse
-Cuanto apoyo amiga –Dijo sarcástica
-Lo siento, pero Soo…si realmente estás enamorada de ella, no sé por qué demonios te complicas tanto las cosas, corta con Hyoyeon, pídele a ella que salga contigo y listo, fin del problema –Habló simple
-No es así de fácil, Sunny me dejó bien claro que no quiere saber nada más de mí, le dolió mucho lo que le hice
-¡Oh, vamos! Esa pequeña rubia es muy fácil de atrapar, sólo un par de palabras bonitas y la tienes comiendo de tu mano –Ya se encontraba maquillándose, está chica sí que era rápida
-¡Oye! No hables así de ella, no es tan ingenua como crees, además ya te dije que no quiere nada conmigo, dice que no va a volver a caer en los juegos de nadie. Créeme, si tú la hubieras visto aquel día, me entenderías, la Sunny que conocíamos ya no existe
-Si tú lo dices –Respondió sin darle mucha importancia al asunto –Sólo te digo una cosa: el que no arriesga, no gana, y si tú realmente la quieres y ella a ti, te va a perdonar –Revisaba en el espejo los últimos detalles –Listo, vámonos
-Ok, toma –Arrojó unas llaves
-¿Las llaves de mi auto?
-Sí, ayer que fui por ti, pensé en llevar mi auto pero preferí tomar un taxi y regresamos en el tuyo –Explicó, sonriendo a la castaña
-Ya veo –Vio cómo su amiga volvía a entristecer –Vamos Soo, cambia esa cara, ya te dije: el que no arriesga, no gana –Dio unas palmaditas al hombro de la azabache
-Claro, la que da consejos y se queda sin ellos, ¿No? –Trató de cambiar su ánimo molestando a la castaña
-¡Tonta! –Dijo fingiendo molestia
-¡Ja! Vale, vámonos o nos corren a ambas
-Ya te dije que no te puedes auto despedir
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¡Ding, dong!
-Van –Gritó –…Krys, pasa
-Hola hermanita –Le dio un fuerte abrazo
-¿Y Amber? –Buscaba con la mirada a la susodicha
-No vino porque… –Sonrió divertida
-Porque… –La mayor sabía que algo tramaba
-Hoy pasaré todo el día con mi linda hermana, ¿Qué te parece? Como en los viejos tiempos
-Krys…
-¡Oh! Vamos Jessie, no me puedes decir que no –Puso ojos de cachorrito
-Ok, hoy pasaré el día con mi hermanita –Aceptó feliz con la idea
Un día juntas; para las Jung era como la mayoría de salidas que puede tener una chica con sus amigas, primas, hermanas, etc., ir al cine, de compras, comer y tal vez después ir por un helado. Jessica se arregló y en quince minutos estaba lista, dispuesta a pasar un gran día con su pequeña hermana.
-¿Y Amber estuvo de acuerdo en que pasaras todo el día conmigo? –Preguntó a su hermana mientras se dirigían al centro comercial
-Sí, la verdad es que ella también aprovechó para pasar el día con su padre –Explicó sonriente
-Entiendo
-Jessie
-¿Mmm?
-Mañana…mañana regreso a casa –Confesó con tristeza
-¿Tan pronto? –Entristeció junto con ella
-Sí, la semana entrante comienzan las clases y Amber y yo no queremos faltar para nada, tú sabes, muchos trabajos, tareas, exámenes –Explicaba
-Claro, entiendo –Era obvio que estaba triste, su hermana a la cual no veía por casi tres años regresaba tan pronto a casa –Krys…
-¿Si?
-Te pido que no le cuentas a mis padres sobre…
-Tranquila, no les diré nada, sólo sabrán cosas buenas: que estás bien, que tu novia es exitosa –Reconoció con fastidio –Y que a ti no te falta nada –Terminó con una amarga sonrisa
-Gracias Krys –Decía con lágrimas en los ojos
-No tienes que agradecer nada Jessie –Abrazó fuerte a la castaña, ella también estaba a punto de llorar –No llores, hoy venimos a divertirnos y no a llorar como Magdalenas, ven –La tomó del brazo –Ya quiero comer palomitas –La arrastró consigo hasta el cine
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-Ya Yul, no me regañes, mira que si no te dije nada, fue porque Seo quería darte una sorpresa–Se excusaba la rubia que hablaba por teléfono con su amiga
-Y te lo agradezco, pero piensa… ¿Qué hubieras hecho si a mi hermana le pasa algo? –Reprochó la pelinegra
-¡Por Dios! ¿No crees que estas exagerando un poco? Seo ya está bastante grandecita como para poder cuidarse sola
¿¡Y que acaso tú no ves las noticias!? Tanto tratante de blancas, asesinos seriales, depravados sexuales que andan sueltos por las calles… –Vale, creo que sí estaba exagerando un poco
-Ok, ok, pero llegó bien ¿No?–Soltó una leve risita al imaginar los gestos y ademanes que hacía la morena al otro lado del teléfono
-Sí –Se tranquilizó un poco
Después de que la rubia logró calmar a su amiga, escuchó atenta todo lo que ésta tenía por contarle; sobre Wooyoung, lo que pasó entre Tae y Tiffany, y claro, que su hermana se quedaría con ella hasta que su madre llegara de Corea.
-Pero mira nada más, yo no queriendo vivir contigo para no invadir tu espacio y ahora tienes a dos inquilinas contigo –Decía, procesando todo lo que Yuri le había contado
-Quién lo diría, ¿No? –Oyó a la pelinegra dar un gran suspiro
-Yul, dime… ¿Tae sí engañó a su novia?
-No lo sé, Taeyeon dice que no, que fue un malentendido –Explicó simple
-¿Y tú le crees?
-La verdad sí, Tae siempre ha hablado de Tiffany como el gran amor de su vida, no creo que la quisiera perder por una simple calentura con una compañera de trabajo, además ella jamás fue de las personas a las que les gustara jugar con las demás
-Tienes razón –Dijo sincera, escuchó un “bip” en su celular –Oh… luego seguimos charlando Yul, tengo otra llamada, bye
-Bye Hyo –Colgó
-¿Diga?
-¿Hyoyeon?
-Hola Soo, no me fije que era tu número –Sonrió al sólo escuchar la voz de la azabache
-No hay problema…te hablaba…para ver si nos podemos encontrar ésta tarde –Era evidente el nerviosismo de Sooyoung
-Claro, pero… ¿Pasa algo? –La rubia lo notó de inmediato
-No…para nada
-Ok, entonces nos vemos en la tarde –Contestó no muy convencida
-Sí…bye
-Ciao