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Vas a llorar por mi por Macarena-chan

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    Capítulo 40
       Falaz
 
Asami decidió acompañar a Takaba hasta la salida, ambos recorrieron el pasillo en un silencio un poco incómodo, se escuchaban las risas Kirishima y Misaki en la sala.
 
Asami: ¿Y…que piensas hacer con el anillo?—Takaba sonrió al ver la cajita en su mano para después guardarla en su bolsa.
 
Takaba: Oh que te importa. —Aún se sentía el ambiente algo incómodo.
 
Asami: Uh perdón, solo era un pregunta ¿Se lo darás a tu aun esposo?—Takaba soltó una risilla.
 
Takaba: Por supuesto. —El sarcasmo era palpable. —Se lo pondré en su pene para que cuando lo vea me acuerde de ti. —De una u otra manera quería acabar con aquella incomodidad, ambos se rieron más fuerte al instante, las risas de la sala de repente se dejaron de escuchar.
 
Asami: ¿Enserio? Vaya que gran honor. —Takaba aun riendo negó.
 
Takaba: Claro que no, era broma.
 
Asami: Si ya lo sé. —Ambos sonrieron y al salir del pasillo varios pares de ojos se posaron en ellos.
 
Takaba: Bien…—Jugo con sus manos mientras veía al techo. —Entonces nos andamos viendo. —Dijo un tanto incómodo, mientras se mordía el labio y veía hacia otro lado, Asami conocía esa mirada de “Estoy a punto de hacer una travesura”
 
Asami: Si… 
 
No tuvo tiempo para detener a Takaba, el rubio se había acercado tan rápido… lo beso, lo había besado y no solo fue un rose, le acaba de robar un beso pero no lo había correspondido, lo tomo de los hombros para separarlo de él, Takaba se había separado sonriendo, el en cambio lo veía con enojo.
 
Takaba: ¿Qué?—Pregunto como si fuera obvio, tenía una sutil sonrisa de ironía mientras se lamia los labios— Mi esposo también tiene fama de andar robando besos a personas con pareja así que si lo piensas bien ya estamos a mano.
 
Asami: ¿Cómo que roban…?
 
Takaba: Nos vemos. —Sonrió con cizaña—Tengo que leer varios libros de símbolos, por lo que veo a ustedes idiotas no se les había ocurrido eso. —Puso sus manos en su cintura.
 
Asami: Tengo a muchas personas ocupadas en diferentes cosas y respecto a lo otro, ¿Sabes que me acabas de causar un problema?—Hablo entre dientes, señalo con discreción a Misaki que los estaba mirando bastante serio y con sus manos juntas en su regazo.
 
Takaba: Si. —Dijo sonriendo— Tú me causaste varios también y no por mi culpa, así que esta es mi forma de cobrármelo, además ya no pienso meterme contigo ¡ay!—Hizo un ademan de que no era para tanto. — Fue una pequeña venganza. —Susurro, no dejo de sonreír, le causaba gracia la cara de Asami, asomo su cabeza para ver a Misaki y decirle adiós abriendo y cerrando la mano. —Hasta luego, adiós muchachos. —Al cerrar la puerta dejo de sonreír, había sido difícil contener su llanto en frente de todos, suspirando rodo los ojos tratando de que las lágrimas no salieran, se puso los audífonos para después bajar las escaleras, debía concentrarse para ayudar a Asami pues tenía un gran cargo de conciencia, en la noche hablaría con Akihiko.
 
Asami vio la puerta cerrarse, volteo hacia la sala donde Misaki al verlo entrecerró más los ojos, tenía los ojos entrecerrados, esperando que Asami dijera algo inteligente.
 
Asami: Bien, seguiré trabajando. —Se metió al pasillo, si no quería cagarla diciendo algo pero al parecer lo había empeorado, Misaki se levantó aun con los brazos cruzados y lo siguió.
 
Kirishima: Arca de la alianza…
 
—Ruega por él. —Pronunciaron en coro los guardias para inmediatamente seguir con sus actividades.
 
Entro a la oficina y cerró la puerta detrás de sí, vio a Asami viendo la ciudad mientras bebía.
 
Misaki: ¿Estas bien?
 
Asami: Estoy buscando la manera de decirte que no esperaba aquel beso. —Volteo a verlo mientras dejaba su vaso en el escritorio. —Por favor no vayas a pensar que nosotros…aquí. —Misaki lo abrazo por el cuello mientas lo besaba, Asami se sorprendió pues en aquel beso se podía sentir la posesión, lo tomo de la cintura y dejo a Misaki guiar por el momento, todo el desastre que sentía en su cabeza se esfumo al oler el perfume de su amado.
Misaki se separó, se rio al escuchar que Asami se quejaba por haber terminado el beso tan abruptamente.
 
Misaki: Confió en ti Ryuichi. —Junto su frente con la del contrario. —Sabía que tenías que hablar con él. —Asami suspiro. —Además no me preocupe al ver que Takaba tenía su cara algo hinchada por haber llorado ¿Te sientes mejor ahora? Te ves más tranquilo, me asuste un poco, tenías tus ojos algo rojos—Asami tomo su mano y le beso el dorso.
 
Asami: Es por la luz que lastima…el caso es que pensé que no necesitaba esto, pero vaya que es aliviador, yo... —Al ver la sonrisa aliviada del menor supo que ya no quería ver otra, necesitaba esa sonrisa por el resto de sus días…no podía ser cierto…esa palabra que empieza con M acababa de cruzar por su mente, y como dicen, si lo piensas es que estas listo, sonrió de solo imaginarlo.
 
Misaki: ¿Qué?
 
Asami: No, nada solo recordé algo de anoche. —Lo atrajo hacia él, Misaki le dio un ligero beso en los labios.
 
Misaki: Espero que algo importante. —Le acomodo un mechón rebelde que estaba en su frente, Asami lo vio fijamente con una sonrisa.
 
Asami: Tratándose de ti todo es importante. —Misaki escondió su rostro sonrojado en el pecho del contrario.
 
Misaki: Eh…ah… ¿Quieres algo especial de comer? Ya es tarde y no hemos comido. —Tenía su mirada hacia otro lado.
 
Asami le apretó un glúteo tan fuerte que lo hizo avergonzar demasiado además el gemido que se le había escapado no ayudo.
 
Asami: Si tengo bastante hambre, pero de postre. —Hundió su cabeza en el cuello de Misaki, sabía que con eso era difícil que le dijera que no.
 
Misaki: Ryuichi… ¡Ah!...no, espera. —Mordió sus labios pero los jadeos se escuchaban, Asami se restregaba descaradamente contra él. —Espera por favor, me preocupa que no estés comiendo a tus horas. —Con muchísima fuerza, mental y física separo a Asami de él. —Oh comes bien o no duermo contigo esta noche. —Dijo no muy seguro de sí, los besos en el cuello lo atontaban demasiado.
 
Asami: ¿Quieres que te ayude en algo? Lo que sea que tú prepares me lo comeré mi amor. —Misaki rio mientras negaba.
Misaki: Cuando esté listo te llamo.
 
Asami: ¿Estás seguro? —Misaki asintió, caminando hacia la salida se quedó en la puerta.
 
Misaki: Además… no quiero nadie nos escuche comiendo postre. —Le guiño el ojo a Asami mientras salía.
 
Asami se mordió el labio mientras apretaba los ojos y después los abría.
 
Asami: Fue una mala idea traer a todos aquí. —Dijo mientras veía una  protuberancia en su pantalón.
 
La comida había estado relativamente tranquila, Misaki había hecho suficiente para todos, pues no pretendía comer y que los guardias estuvieran ahí viendo, por primera vez el comedor de Asami se había llenado que incluso algunos tuvieron que traer otras sillas para no comer parados, Asami sentía algo de celos al compartir la comida que había hecho su Misaki, al su parecer solo unos cuantos deberían tener el privilegio de probar aquellos manjares, los guardias deseaban probar esos alimentos por el resto de su vida, pero solo tendrían suerte cuando Misaki los invitara a comer.
 
A las 10 de la Asami había agarrado de sorpresa a Misaki tomándolo en la sala, para después llevarlo a la habitación que ahora no solo de él, sino de ellos, 20 minutos antes se habían ido los guardias, prácticamente los había casi corrido, así que no había perdido el tiempo, le molestaba que ese día Misaki le hubiera dicho que iba a traer sus cosas de apoco si por el fuera hubiera llevado todas sus cosas de una sola ida, pero al final Misaki lo convenció, al menos su closet iba combinándose de apoco con la ropa que Misaki a veces dejaba.
 
Todo el asunto de Takaba se le había olvidado, estaba tranquilo ahora, era como si le hubieran quitado un gran peso de encima, ahora veía porque las personas se desahogaban, era por esa paz que sentían después de tanto.
 
Era la una de mañana, justamente hace 15 minutos había dejado a Misaki respirar un poco después de ponerlo en algunas posiciones que se le ocurrieron, solo había sido un descanso pero el menor había sucumbido al sueño y al cansancio, le gustaba como se veían sus besos en aquella delicada y sensual espalda, Misaki tenía una expresión de paz absoluta, obviamente el castaño iba a estar así después de los orgasmos que le había brindado.
 
Con cuidado de no despertarlo se levantó para después ponerse un pantalón de pijama, toda la ropa se la habían quitado en la sala, cerro con delicadeza la puerta de habitación para después ir a la sala, se sirvió un vaso de ese licor ámbar que combinaban con sus ojos, revisando que estuviera solo y no hubiera nadie tomo su celular para hacer una llamada, salió al balcón, las luces de la ciudad lo iluminaron y le acabaron de dar el coraje para lo que iba a hacer, selecciono el nombre, y espero a que tomaran la llamada, después de unos segundos contestaron.
 
Asami: Señor Fuyuhiko—El patriarca de los Usami tuvo que alejarse de los demás para poder hablar con calma, le dio una sonrisa a Takaba que se encontraba a lado de Akihiko, estaban jugando algún tipo de juego de mesa con los demás miembros y su esposa, fue hacia su despacho.
 
Fuyuhiko: Asami, tú nunca me llamas ¿A qué se debe este extraordinario evento?
 
Asami: Espero no importunar. —Eran contadas las veces en las que se ponía nervioso y ese momento era uno de esos.
 
Fuyuhiko: No, claro que no, ¿Qué paso?—Escuchó como Asami exhalaba aire.
 
Asami: Necesito que me haga un importante favor. —Fuyuhiko vio con duda su celular ¿Qué estaba ocurriendo?
 
Después de unos minutos había salido de su despacho con una cara de estupefacción, al llegar a la sala todos lo quedaron viendo.
 
Ruruka: ¿Señor se encuentra bien?—Fuyuhiko asintió.
 
Fuyuhiko: ¿Cariño puedes subir a la habitación? Por favor, quiero hablar contigo sobre el baile de beneficencia que se viene, surgió algo importante.
 
Natsuko: ¿Bueno o malo? ¿Estás bien? Mira la cara que traes. —La señora se levantó para ir enseguida a tomar el brazo de su esposo.
 
Fuyuhiko: Es…bueno…nos lo ganaron.
 
Natsuko: ¿Qué? ¿De qué hablas?—Los demás miembros de la familia lo ignoraron, sabían que el señor le encantaba dramatizar todo, además se le veía normal a cuando realmente se enojaba, los mayores subieron a su habitación, los menores a ellos se les veía aquel espíritu competitivo, y más entre los hermanos.
 
Después de platicar de lo que le había dicho Asami, Natsuko se veía muy pensativa.
 
Fuyuhiko: ¿Qué piensas del favor que me pidió Asami, querida? —Los patriarcas Usami estaban ya listos para dormir.
 
Natsuko: Deberíamos tener una segundo luna de miel. —La dama se encontraba desenredando sus largos cabellos con los dedos de las manos, al parecer no le había hecho caso a su esposo.
 
Fuyuhiko: ¿¡Qué!?
 
Natsuko: ¿Qué?—Dijo muy quitada de la pena, se quitó la bata que le cubría aquella fina pijama, Fuyuhiko supo lo que quería.
 
Fuyuhiko: Recuérdame no dejarte tomar alcohol antes de dormir. —Se quitó su camisa como si realmente le costara trabajo.
 
A la mañana siguiente Misaki que estaba muy bien acurrucado en el pecho de Asami se despertó más temprano de lo que quería, pues su celular comenzó a sonar.
 
Asami: mmm déjalo en buzón. —Con tono adormilado abrazo al castaño.
 
Misaki: mmm. —Asintió y escondió su rostro en el cuello del mayor.
 
Aunque eso no duro demasiado pues también empezó a sonar el celular de Asami, pero al no contestar rápido empezaron a sonar los demás teléfonos, haciendo que ambos se levantaran.
 
Asami: ¿Pero qué mierdas?
 
Misaki: ¿Y si le pasó algo a Feilong? No puede ser, Yong…—Iba a levantar la bocina del teléfono.
 
Asami: No, contesto yo. —Al tomar el teléfono se escucharon golpes fuertes en la entrada.
 
Ambos se pusieron alertas, Asami tomo una pistola que estaba escondida de bajo de su cama, Misaki se cubrió rápido con la parte de arriba de la pijama de Asami y lo siguió.
 
Asami: No vayas, ya sabes por donde bajar. —Le señalo con la mirada el closet.
 
Misaki: No te voy a dejar solo. —Se adelantó mientras Asami lo seguía enojado, con determinación fue hacia la entrada y abrió, Asami sin ninguna duda apunto hacia su objetivo.
 
Shinnosuke: No puede ser. —Entro deprisa a la casa, ni siquiera tomo en cuenta que le estaban apuntando con una pistola, Misaki lo siguió y Asami reviso que no hubiera nadie fuera.
 
Misaki: ¿Por qué tocas así? ¿Eras tu quien llamaba?—Ambos se sentaron en los sillones mientras Asami también hacia lo mismo, estaba algo irritado.
 
Shinnosuke: ¿Qué? Yo no fui… ¡no puede ser Misaki! —Se recargo en sus piernas mientras las movía rápidamente.
 
Misaki: ¿Qué está pasando?—Dijo algo desesperado, otra vez volvió a sonar el teléfono, pero sin esperar a que sonara otro segundo más Asami contesto, ambos menores lo voltearon a ver.
 
Asami: ¿Quién habla?—Su voz sonó más grave de lo normal, tenía su rostro serio para después pasarlo a uno de total confusión. — ¿Haruhiko?—Volteo a ver a Shinnosuke pero este le hizo señas para que dijera que no estaba ahí, Asami al comprender que todo ese circo eran problemas maritales rodo los ojos con fastidio. —No, no está aquí…Misaki está conmigo…no tengo idea de donde está tu esposo y por favor no vuelvas a llamar así, con una vez es suficiente. —Colgó— ¿Por qué tu esposo y tu interrumpieron mi mañana?—Shinnosuke volteo a ver a Misaki para después tomarlo de las manos.
 
Shinnosuke: Misaki todo termino.
 
Misaki: ¿Qué?
 
Shinnosuke: Haruhiko encontró el folder donde están mis exámenes de embarazo.
 
Asami: Ay no puede ser. —Se levantó con fastidio. —Iré a ducharme, realmente lo que estuviera sucediendo no le importaba, tenía bastante cosas importantes en mente.
 
Misaki: ¿Y…Y que paso? ¿Le diste la noticia? ¿No lo tomo bien, verdad? Amigo mira no importa lo que pase, yo siempre voy a estar para ti y…
 
Shinnosuke: Gracias Misaki, pero no sé si los haya visto ya, me volví loco cuando saco el folder del cajón donde lo había escondido, me pregunto que era, pero yo estaba bastante nervioso y se lo quise quitar pero él no me lo quiso dar, se enojó al no tener una explicación y yo también me enoje por verlo enojado y me vine para acá.
 
Misaki: Dios…—Suspiro al saber que eran problemas normales y nada relacionado con mafias.
 
Shinnosuke: No se voy a hacer, quería decírselo con calma, pero…—Estaba bastante pálido por los nervios, Misaki trato de tranquilizarlo.
 
Misaki: Pase lo que pase, tú debes demostrar estar seguro de tu decisión, si Haruhiko llegara a rechazarte. —Shinnosuke empezó a llorar, se había contenido todo el camino. —Entonces no era el indicado.
Shinnosuke: ¿Y si no lo hace?
 
Misaki: Entonces formaran una gran familia, tranquilízate, el no ya lo tienes, ahorita solo pensaras en cosas desagradables…ni siquiera le explicaste la situación, creo que se enojó al verte nervioso y no entender la situación, ¿Por qué te fuiste de ahí?
 
Shinnosuke: No sé, sentí demasiada presión, necesito pensar, quería decírselo con calma.
 
Misaki: Lo sé. —Le sonrió para después abrazarlo fuertemente, pues veía en su mirada que necesitaba un largo y gran abrazo.
 
Shinnosuke: Necesito tanto a mi madre en estos momentos…pero no quiero asustarla, ni siquiera le he dicho a ella.
 
Misaki: Sea lo que sea a tu madre le dará gusto que le des nietos, te va a apoyar y créeme por el poco tiempo que hablamos sé que no se va a querer despegar de ti cuando se entere. —Se separaron. —Si quieres ve a acostarte un rato a la habitación en donde me quedaba, necesito ducharme y cambiarme, después haremos el desayuno ¿Si? —Shinnosuke asintió, ambos se levantaron y fueron hacia la recamara.
 
Shinnosuke: Oye ¿Ya vives aquí o qué?—Misaki le sonrió con algo de pena. —Vaya, por fin, pero porque todas tus cosas siguen el departamento, es que fui hacia allá primero pero no había nadie.
 
Misaki: Le dije a Asami que traería mis cosas de apoco…además—Se inclinó hacia Shinnosuke para susurrarle. —Quiero tener un lugar a donde llegar por si sucediera algo. —Shinnosuke asintió entendiendo.
 
Shinnosuke: Si, creo que sería lo mejor. —El castaño se quedó en la puerta viendo como Shinnosuke se acostaba.
 
Misaki: Te llamare cuando esté listo todo ¿Vale?
 
Había sido mala idea compartir el baño con Asami, a pesar de haber entrado al último había salido primero, había terminado jodidamente caliente y no se refería al agua, tuvo que ir a cambiarse a otra habitación pues cuando Asami estaba irritado se lo hacía sin importar quien estuviera al otro lado de la habitación, eso sí le gustaba la rudeza con la que lo tomaba pero uno de los dos tenía que tener algo de recato.
 
Ese día se sentía algo extraño, como si dijeran “Ten tus precauciones, que ahí viene la tormenta y no va a parar hasta que quiera” y si se sentía bastante calma, tanta que empezaba a sentir cierta ansiedad al respecto.
El desayuno fue bastante silencioso, Shinnosuke apenas si picaba su comida, Asami estaba enviando bastantes indicaciones a través de su celular y él no quería interrumpir a ninguno de sus pensamientos, además la ansiedad lo tenía algo distante.
 
Cuando Asami estaba a punto de irse a la oficina Misaki lo beso bastante apasionado, por supuesto que Asami no le molesto nada, al contrario, había dejado caer su maletín para tomar con ambas manos aquella cintura que tanto amaba para después atraerlo hacia él.
 
Misaki se separó solo para darle bastantes besitos alrededor de su cara, Asami sonrió ante esto y se dejó hacer.
 
Misaki: Te amo. —Vio a los ojos de Asami, vaya como le encantaban esos ojitos que se cargaba su novio, le encantaba todo de él.
 
Asami: Que mal, yo solo amo a mi novio ¿Lo conoces?
 
Misaki: Mmm no, pero si nos besamos no creo que se enoje. —Acaricio los cabellos de su nuca
 
Asami: No quiero correr riesgos, a veces una fiera. —Lo beso de nuevo pero ahora con algunas mordidas incluidas.
 
Misaki: ¡Ah!...creo que la fiera es otra. —Le dio otro beso. —Cuando regreses…bésame mucho. —Le dio un pequeño beso en los labios mientras le sonreía.
 
Asami: ¿Cómo si fuera esta noche la última vez?—Misaki se rio al ver que Asami le había seguido la canción.
 
Misaki: Ya vete, llegaras tarde.
 
Asami: Soy el jefe, me lo puedo permitir. —Le devolvió el beso a Misaki.
 
Misaki: ¿Es así jefe? Bueno si llega tarde, tal vez no tengamos junta esta noche. —Le acomodo la corbata que se había movido al rosarse entre ambos cuerpos.
 
Asami: Eso es trampa.
 
Misaki: No lo creo, llega temprano a tu trabajo y puedes hacer lo que quieras con los artefactos que encontré en cierto cuarto…—Con tono sugerente acarició la cara del mayor suavemente.
 
Asami: Ya tengo que irme. —Beso con rapidez a Misaki para después meterse en el ascensor.
 
Misaki: Te adoro.
 
Asami: Yo te amo. —Vio cerrarse las puertas.
 
Shinnosuke: Ay que ternura—Misaki dio un pequeño brinco además de gritar un poquito.
 
Misaki: ¡Santa Madre! No me asustes así. —Dijo mientras se tocaba el pecho.
 
Misaki trato toda la mañana de distraer a su amigo que se veía bastante decaído, sabía que estaba buscando valor él lo más recóndito de su ser y tenía sus pensamientos hechos un desastre, después de la comida estaban tranquilos sentados en la sala con la televisión prendida cuando Misaki recibió una llamada, al leer el remitente se levantó.
 
Misaki: Ahorita vengo. —Shinnosuke asintió sin ponerle atención.
 
Se apresuró a llegar al despacho de Asami y se encerró en él, atendió la llamada.
 
Misaki: ¿Qué quieres?
 
Akihiko: Misaki deja ese tono para otro momento.
 
Misaki: ¿Entonces para que me llamas?—Escucho como Akihiko suspiraba, además se escuchaba algo de ajetreo al otro lado.
 
Akihiko: ¿Sabes porque Haruhiko hizo trámites de divorcio?
 
Misaki: ¿¡Qué!?—Se cubrió la boca por la sorpresa.
 
Akihiko: Creo que no sabes, quiero aclarar que los mi matrimonio ya están listos, así que no son esos.
 
Misaki: Lo tuyo me da igual …¿Pero qué sucedió?—Se sentó en la silla que estaba detrás del escritorio tratando de asimilar lo ocurrido.
 
Akihiko: No sabemos, Shinnosuke salió temprano, sé que está contigo, el caso es que Haruhiko bajo después bastante enojado con un folder y llamo a los abogados de la familia, nadie sabe que está sucediendo, estamos intentarlo detenerlo porque tiene maletas aquí abajo.
 
Misaki: No, no, no dejen que se vaya, Shinnosuke tiene que explicarle algunas cosas y…oye Haruhiko abrió el folder.
 
Akihiko: No sé, no ha querido explicarnos ¿Misaki que sucede? ¿Qué contiene el folder?
 
Misaki: No puedo decirte, pero vamos para allá, distrae a Haruhiko lo más que puedas, no dejes que se vaya, muchas gracias por avisarme. —Se levantó y fue de inmediato a la sala.
 
Shinnosuke: ¿Qué pasa Misaki?—Se enderezo.
 
Misaki: Necesitamos ir de inmediato a la casa de los Usami. —Shinnosuke se levantó.
 
Shinnosuke: ¿Qué paso?
 
Misaki: Vamos no hay tiempo. —La verdad no quiso decirle pues tendría un colapso y eso sería peligroso para el bebé.
 
Al salir del edificio tomaron un taxi, varios guardias los vieron extrañados, pero no se preocuparon.
 
Misaki iba comiéndose las uñas y Shinnosuke se ponía cada vez más nervioso al verlo, aparte de que no quería ver a Haruhiko, pero pensaba que probablemente se encontraba trabajando.
 
Al llegar a la mansión Misaki le aventó varios billetes al señor para después bajarse junto a Shinnosuke, los guardias al verlos les abrieron rápido pues también estaban al tanto de la situación, caminaron por el largo camino lo más rápido que pudieron, a lo lejos se podía ver discutir a Haruhiko y Akihiko que no le dejaba subir su maleta a uno de los autos.
 
Kaoruko estaba tranquilizando a la señora Natsuko junto a Fuyuhiko, los demás miembros de la familia no querían intervenir pues se notaba que Haruhiko estaba a nada de pegarle a Akihiko.
 
Misaki: ¿Qué sucede aquí?—Akihiko al ver a Misaki dejo la maleta haciendo que Haruhiko se tambaleara.
 
Shinnosuke: ¿Haruhiko que rayos estás haciendo? ¿Tienes un viaje y no me avisaste?
 
Haruhiko: Contigo no quiero hablar. —Shinnosuke no supo que contestar pues se había quedado en shock, Misaki de inmediato lo tomo de la espalda para que no cayera.
 
Akihiko: Haruhiko ¿Qué te pasa? Estas exagerando todo, trata de pensar con la cabeza fría, tú no eres así.
 
Haruhiko: Y tu deja de meterte en lo que no te importa. — Takaba jalo a tiempo a Akihiko pues estuvo a nada de ser golpeado, el golpe había caído hacia el aire, Fuyuhiko se interpuso para que sus dos hijos ya no discutieran.
 
Misaki: Haruhiko, todo esto es un mal entendido, deja que…
 
Haruhiko: ¿Mal entendido? Entonces que me explique qué mierdas es lo que hay en este folder. —Había aventado el folder a los pies de Shinnosuke que al verlos tirados los recogió y después los protegía con sus manos, en su mirada se veía que no sabía qué hacer. —Ahora veo porque te has comportado tan raro estas semanas, mira en primera si no querías estar conmigo desde el principio me hubieras dicho, sabes que ahora mismo me voy para que no te preocupe mi presencia—Tanto Misaki como Shinnosuke se quedaron a ver con duda en los ojos, ahora los que no entendían eran ellos, la familia estaba igual que al principio. 
 
Shinnosuke: ¿Re-revisaste los documentos que hay aquí adentro?—Empezó a sollozar por los nervios que lo consumían.
 
Haruhiko: No hace falta revisarlos, has estado raro todos estos días, has salido mucho, me hubieras pedido que yo gestionara el divorcio, así no esconderías los trámites de divorcio con tanto cuidado.
 
Shinnosuke: ¿Qué?
 
Misaki: Shinnosuke es mejor que le expliques lo que está pasando. —Haruhiko lo vio con enojo.
 
Haruhiko: ¿Tu sabias de esto?—Misaki se asustó un poco al ver a Haruhiko así y más al verlo acercarse con violencia, Akihiko se interpuso entre ellos protegiendo a Misaki detrás de él.
 
Akihiko: Cálmate, todo tiene una explicación lógica, te dije que te estabas apresurando.
 
Misaki: Y sí, yo sé lo que está pasando, fui yo quien lo acompaño al hospital. —El rostro de Haruhiko cambio complemente a uno de total preocupación, volteo a ver a su esposo hecho un mar de lágrimas y camino rápido hacia el tomándolo del rostro.
 
Haruhiko: ¿¡Qué!? ¿Fuiste al hospital sin avisarme que te está pasando? ¿Qué es lo que tienes? ¿Es grave?—Se asustó más al ver que Shinnosuke gimoteaba. —Mi amor por favor perdóname. —Lo abrazo, Shinnosuke también correspondió el abrazo. —Pensé que lo que escondías era el divorcio, como saliste tan de repente pensé que mis sospechas eran ciertas. —Por favor dime lo que ocurre, ¿Es algo grave verdad? No te preocupes ahora mismo saldremos a buscar a los mejores e importantes especialistas de Japón, y si es necesario iremos a buscar a otros países…
 
Fue callado por los labios de Shinnosuke que lo tenía bien sujeto del cuello, mientras ellos se besaban Takaba se acercó a Akihiko y Misaki, había sentido algo extraño cuando Akihiko protegió a Misaki del golpe de Haruhiko, no entendía lo que estaba ocurriendo si el mismo había dicho que no podía dejar de pensar en Asami, aunque con el beso que le había dado ayer no había sentido ya lo mismo, en cambio cuando Akihiko lo ve…no, no, estaba confundiendo todo, si, todo era porque ayer había pasado por un fin de ciclo en su vida, no era porque Akihiko se había convertido en un gran amigo y confidente, es más, hasta se alegraba que estuviera tan junto con Misaki, sentía felicidad por su amigo y nada más…bueno al menos el mismo se convencía de eso.
 
Shinnosuke: Jamás, jamás, jamás vuelvas a pensar que te dejaría mi cielo. —Junto su frente con la de su marido.
 
Haruhiko: Lo sé, perdóname, tuve un exabrupto, me asuste al no saber qué haría sin ti—Tomo ambas mejillas para ver a los ojos al menor. —Por favor explícame que es lo que está sucediendo.
 
Shinnosuke: Misaki tiene razón, el me acompaño al hospital, y si me tuve que hacer varios análisis para estar seguro de mi condición. 
 
Haruhiko: ¿Condición? ¿Cómo que condición? ¿Lo que tienes es incurable?
Shinnosuke: Desde que nací al parecer, pero apenas empezó a mostrarse ¿Pero sabes? Me alegra tener esto. —Le sonrió aun con ojos llorosos.
 
Haruhiko: Mi amor me estas confundiendo.
 
Shinnosuke: Soy un doncel, igual que Misaki, igual que Mizuki. —Haruhiko lo quedo viendo con bastante sorpresa, se separó asimilando la noticia.
 
Haruhiko: E-Eso quiere decir… ¿Qué podremos tener hijos?—Shinnosuke negó, Haruhiko frunció el ceño no entendiendo.
 
Shinnosuke: No podremos…tenemos…
 
Haruhiko: …—Haruhiko movió la cabeza a un lado como si de un perrito se tratase.
 
Shinnosuke: Mi cielo. —Entrelazo sus dedos de las manos con las del mayor. —Tengo un bebé tuyo en mi vientre ahora mismo…me embarazaste. 
Haruhiko. —Empezó a reír mientras las lágrimas de felicidad caían.
 
Haruhiko: ¿E-Estas embarazado?... ¿Te pude hacer un hijo?... ¿Me vas a hacer papá?—Preguntaba como si ese momento no estuviera pasando, en cada una de las preguntas Shinnosuke asentía con una gran sonrisa, sin esperarlo Haruhiko lo cargo mientras le daba varias vueltas. —¡¡Me has hecho el hombre más feliz del mundo!! ¡Voy a hacer papá!
 
 Varios gritos de dicha se escucharon alrededor de ellos y más por parte de la señora Natsuko que abrazo fuertemente a su esposo al saber que su linaje iba a continuar, Mizuki, Ruruka y Kaoruko empezaron a gritar un gran felicidades mientras aplaudían, Misaki sin esperarlo recibió un pañuelo por parte de Takaba para que se limpiara las lágrimas.
 
Akihiko: ¿Esto es lo que estaban ocultando? —Misaki asintió mientras se limpiaba delicadamente las lágrimas.
 
Misaki: Si, es que Shinnosuke quería planear algo en grande para decírselo, pero la fiesta la hizo solito Haruhiko.
 
Takaba: Ahora entiendo por qué Haruhiko también ha estado raro últimamente, tiene el síndrome de Couvade al parecer. —Misaki al escuchar esto se rio, eso era bastante obvio que iba a pasar pues Haruhiko estaba muy apegado a Shinnosuke.
 
Misaki: ¿Cómo qué raro?
 
Akihiko: Ah comido pizza—Misaki no oculto la cara de asombro.
 
Misaki: Wow.
 
Akihiko: Si…wow. —Todos los presentes no perdieron de vista a la pareja que se daba miles de besos por todo su rostro, emocionados.
 
Al entrar a la mansión los mayores vieron con ternura como Haruhiko prácticamente cargaba a su marido al subir las escalinatas, fueron hacia la sala para que Shinnosuke y Misaki se explicaran mejor como había sido su experiencia al enterarse, Haruhiko agradeció a Misaki por cuidar a Shinnosuke y apoyarlo en su decisión y también por apoyar a Mizuki en lo que él había decidido.
 
La señora Natsuko les conto que ella ya tenía algunas sospechas al respecto pues jamás había visto a Haruhiko de la manera en que lo hacía, además de sospechar del brillo que últimamente desprendía Shinnosuke.
 
Misaki: Jajaja Asami y yo ni siquiera estamos despiertos cuando de repente. —Empezó a hacer señas con sus manos— Empezaron a sonar todos los teléfonos de la casa, el mío, el suyo, Dios, pensamos que era otra cosa, cuando Shinnosuke empezó a tocar bastante fuerte la puerta de la entrada, al abrir estuve a punto de darle un golpe al que estuviera tocando tan feo la puerta.
 
Shinnosuke: Perdón, estaba bastante espantado. —Todos los presentes en la sala se comenzaron a reír por el tono que había utilizado Shinnosuke, menos Akihiko por supuesto, Takaba que estaba a lado de él le sonrió tratando de quitar los pensamientos que tenía, le palmeo delicadamente la espalda mostrándole su apoyo y después se recargo en su hombro para seguir escuchando la plática de los dos amigos.
 
Misaki: Haruhiko, espero que no te molesta la elección de Shinnosuke respecto al padrino de tu hijo. —Se señaló.
 
Shinnosuke: O hija.
 
Haruhiko: Por supuesto que no, todo lo que diga mi esposo voy a estar de acuerdo. —Se le veía más joven al quitarse los lentes y aquella expresión de emoción que no se le quitaba. —No puedo creerlo. —Se recargo en el respaldo del sillón— ¡¡Voy a hacer papá mundo!!—Al alzar sus manos había aventado sus lentes, todos estaban contentos al ver la dicha de los futuros padres.
 
Ruruka incluso había estado haciendo bocetos para la ropa del bebe, Kaoruko dando ideas de decoración para la habitación que tendrían, incluso Mizuki se unió a la plática dando ideas y demás.
 
Al dar las 5 de la tarde Misaki se disculpó con todos, tenía que volver a su ahora departamento pero quería pasar por unas cuantas cosas antes, Takaba se había ofrecido y a Akihiko llevarlo hasta su departamento, todos lo quedaron viendo con una enorme duda, Misaki internamente rodo los ojos, sabía que Takaba solo quería tener la oportunidad de ver a Asami, en la mente de Takaba era otra cosa la que pasaba, quería que Akihiko tuviera oportunidad de hablar con Misaki de algo que no fueran peleas o antiguos rencores, era su deber de amigo acompañarlo.
 
Misaki: No gracias, tengo que pasar por algunas cosas antes, pero se los agradezco—Dijo ahora refiriéndose a los mayores que le habían ofrecido un chofer.
 
Al salir de la mansión camino hacia la estación del subterráneo más cercana, hace bastante que no salía a pasear como cualquier adulto joven a disfrutar un poco el ambiente, al caminar veía su reflejo en los cristales de las tiendas a lado suyo, le gustaba aquella parte de su vida después de tanto, con calma llego a un parque para disfrutar del frappe que se acababa de comprar, se sentó en una banca para disfrutar el atardecer que estaba a nada de suceder, el viento mecía sus cabellos con delicadeza, puso una de sus manos en el respaldo de aquella banca para estar más cómodo, pero se asustó al sentir una mano arriba de la suya.
 
—Hola Misaki. —Misaki sonrió negando para después suspirar, quería llegar temprano a su departamento.
 
Eran las 8 de la noche cuando Misaki estaba en el estacionamiento del edificio, sacando algo de su auto, Asami le había dado uno de sus lagares para poner automóvil, cerró la puerta al ver que se acercaban unos guardias de su novio.
 
Misaki: Hola chicos, ¿me podrían ayudar con algo?
 
—Por supuesto.
 
—Claro no hay problema.
 
Misaki: ¿Apoco también hacen guardia aquí en el estacionamiento?—Se burló un poco mientras iba hacia la cajuela del auto y la abría, haciendo que le cubriera la cara, los guardias se quedaron recargados en las puertas.
 
—Sí, ahorita que las cosas están un poco tensas el señor Asami hace que demos rondas hasta en las bodegas del edificio.
 
Misaki: Bueno, todo sea por nuestra seguridad.
 
—Bueno nuestro deber ahora es cuidar de usted. 
 
Misaki: Aww chicos muchas gracias, son tan tiernos. —Los guardias discretamente hicieron una seña de victoria. —Lástima que su servicio termine hoy.
 
— ¿A qué se refiere?—Caminaron hacia donde estaba y al verlo recibieron una bala en la cabeza, cayendo sus cuerpos al instante.
 
Ambas manos cayeron a su costado, ambas pistolas tenían silenciador pero eso no quitaba que se había escuchado, suspiro con algo de cansancio, al sonar su celular dejo ambas en el maletín que le había dado Iason, contesto mientras limpiaba los rastros de pólvora de sus dedos y se aseguraba que el gorro que traía no se hubiera desacomodado, eso evitaría que alguno de sus cabellos cayera.
 
Iason: Vaya desde las cámaras no se ve tu rostro, lo supiste esconder bien, ese es un buen punto estratégico.
 
Misaki: Agh no es para tanto, solo son las columnas. —Cerro la cajuela para después cerrar con seguro, les dio un pequeño salto a los cadáveres para no tocar nada. —Dime que ya no hay videos en las cámaras.
 
Iason: No, eso se borra…—Apretó una tecla de su laptop— Ahora.
 
Misaki: Wow, gracias —Dijo indiferente.
 
Iason: No, gracias a ti por comprender mis razones.
 
Misaki: Después de lo que me has mostrado no tengo ninguna duda en ayudarte.
 
Iason: Gra…
 
Misaki: Pero que te quede una cosa en claro Mink, yo no mato a niños, y no permitiré que lo hagas ¿Entendiste? Yo no soy partidario del ojo por ojo.
 
Iason: Por supuesto…rikura. —Misaki rodo los ojos ante el apodo, bien ahora tenía que salir y hacer parecer que iba llegando.
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