Capítulo 44
Vendetta—Final
Todos se quedaron callados al escuchar como Takahiro y sus acompañantes salían azotando la puerta.
Mikhail: ¿Qué putas mierdas les pasa? Ni siquiera dejaron que se explicara…—Quiso salir pero noto que la camioneta donde habían llegado ya no estaba, en cambio Takahiro y los demás iban caminando hacia la salida, regreso a donde estaba para esperar una explicación.
Feilong: Ese cabrón sabía desde un principio quien era el que nos estaba atacando, Iason Mink, el mismo que socorrieron por el balazo que recibió.
Mikhail: ¿Ah sí? ¿Y ustedes como saben o qué?—Se cruzó de brazos.
Asami: Ahí están las pruebas. —Aventó la laptop por la mesa.
Mikhail: Aun así no le dieron el beneficio de la duda. —No volteo a ver el video pausado, Feilong se le acerco amenazante.
Feilong: ¿Por qué lo defiendes tanto? ¿Acaso te gusta? Pues vete con el pero no vuelves a ver a mi hijo jamás, no se me haría raro que estés con ellos con tal de meterte entre un par de piernas. —Mikhail puso sus manos en la cintura mientras negaba indignado.
Mikhail: Que mierdas son todos ustedes. —Vio a todos. — Si no lo recuerdas nos quieren matar a los tres. —Señalo. — ¿Por qué? No lo sé, pero acabamos de perder un testigo clave, pero ustedes por necios se dejaron llevar por su estupidez. —Asami se levantó aventando la silla que estaba a un lado, quitando a Feilong de en medio de un empujón.
Asami: ¿Muy inteligente? —Lo tomo de las solapas del chaleco. — ¿Cómo hubieras reaccionado si te tomaran de su imbécil?—Siseo, incluso estaba un poco rojo de la cara por la ira que le recorría el cuerpo.
Mikhail: Seguir su juego hasta llegar al objetivo, idiota. —Empujo a Asami.
Haruhiko: Yo soy neutral en este problema que se buscaron ¿Pero no creen que esto es demasiado extraño? ¿Por qué ahora mandar esos videos? ¿Si Misaki esta con ese tal Iason no creen que hubiera sido mejor hacer su estrategia ya cuando estuviera casado con Asami?
Shinnosuke: Misaki últimamente ha estado actuando extraño, mucho más serio de lo normal.
Haruhiko: Bueno si yo fuera el poco a poco iría forjando carácter al ver toda la mierda que rodea Asami, aunque claro no debería hacerlo pero él siempre ha pecado de empático…no me sorprendería que se haga el ser más malvado del mundo con tal de mantener a salvo a quienes ama.
Feilong: Tampoco es un maldito santo. —Su expresión era de fastidio.
Shinnosuke: Haruhiko. —Lo volteo a ver confundido.
Haruhiko: No, pero al menos fue mejor madre que tu Feilong. —Tomo de la mano a Shinnosuke, Feilong había entrecerrado sus ojos con odio. —vámonos. —Ambos salieron de la casa. —Debí defenderlo, no esperar a que lo hicieran. —Volteo a ver por un momento a Shinnosuke para después volver su mirada hacia su auto.
Asami que se encontraba serio, volteo a ver a los demás.
Asami: ¿Ustedes que esperan para irse? Lárguense de mi casa. —Algunos se levantaron, otros fueron hacia la salida. — ¡Ahora!—Feilong ni se inmuto por su tono, solo fue hacia la habitación donde estaba su hijo, en cambio Mikhail salió de la casa para ir hacia el garaje donde estaba su auto, no espero a nadie, investigaría por su cuenta, era el único que tenía su cabeza fría.
Asami oculto su cara en sus manos para después despeinar su cabello con sus dedos, mentalmente estaba exhausto, le dolía la cabeza a horrores, decidió ir a donde sería la habitación principal, se daría un baño y ya después se daría la tarea de cobrárselas a su manera, como antes lo hacía, al entrar a la habitación pateo con fuerza el par de maletas que le esperaban, ambas se rompieron, se quitó el traje a tirones para después aventarlo.
Afuera todos los asistentes que habían contratado estaban desinstalando todo los adornos, que mala suerte, pensaban, pues el día era perfecto para una boda tan bonita que iba a hacer esa.
Los Usami regresaron serios a la mansión, Shinnosuke se sentía confundido con Haruhiko no entendía porque defendía a Misaki si ante las pruebas parecía ser el culpable, en cambio él no podía sacarse de la cabeza el engaño del castaño, los videos hablaban por si solos, al entrar notaron que Ruruka bajaba con maletas bastante serio, tenía ya ropa normal y su cabello amarrado en un chongo mal hecho.
Kaoruko: ¿A dónde vas?
Ruruka: A un hotel, no voy a convivir con personas desleales como ustedes.
Shinnosuke: ¿Tú también vas a reprocharnos? Los malditos videos hablan por sí solos, justicia para quien justicia merece, Misaki me conoció así…
Ruruka: Si, pero yo no voy a juzgarlo antes de tiempo, eso debiste hacer tu.
Kaoruko: Nosotros creemos en lo que vimos.
Ruruka: A veces debemos confiar ciegamente a nuestros amigos, debió tener sus razones. —Tomo sus maletas. —Con permiso. —Tanaka fue quien le abrió la puerta.
Mizuki: Tiene razón, la cagamos. —Paso su mano por su cara con frustración. —La sorpresa, el estrés y el cansancio es quien los hace pensar así chicos, iré por un trago.
Haruhiko: Te acompaño.
Si, la sorpresa, los nervios, incluso su propia moral hicieron que tuvieran una venda en los ojos, era como decían, la justicia era ciega, hasta no ver no creer, eso es lo que les había dicho Fuyuhiko al enterarse de la situación.
Fuyuhiko: Nadie sabe la verdad de nada, no porque se defienda a Misaki quiere decir que son los buenos…
Natsuko: O al contrario, los que acusan a Misaki no quiere decir que son los buenos de la historia, todo siempre tiene un porque, nosotros no somos quien para juzgar.
Fuyuhiko: Exacto, todos tenemos cola que nos pisen, todo siempre se hace por algún motivo.
Los días fueron pasando como si nada hubiera pasado, la vida diaria se iba retomando, Asami se había refugiado en hacer lo que mejor sabia, ganar dinero que nunca acabaría de gastar, además de seguir con la investigación que tenía, Feilong como el pensaron que sería más fácil ahora al saber quién era en realidad el que los perseguía, pero no, Iason había borrado todo rastro tanto físico como electrónico, estaban como el principio, sin nada.
Asami había prohibido hablar de Misaki y todo lo referente a él, la ropa que tenía la había mandado a recoger, era como si nunca lo hubiera conocido, estaba cumpliendo con lo prometido, olvidarse de él, para cuando lo tuviera que enfrentar de nuevo no dudara ningún segundo, el nunca perdonaría una traición de tal magnitud.
Tanto Feilong como Shinnosuke se sentían heridos ante tal engaño que Misaki les hizo creer, Feilong más que nada sentía coraje al dar su total amistad y confianza a alguien que no la merecía, además no podía creer que había dejado a su bebé al cuidado de alguien tan malicioso, Shinnosuke en cierto modo se sentía cómplice al callarse el hecho de que Iason fue quien les ayudo llegar a su boda.
Varios guardias que habían empezado a trabajar habían renunciado pero fue porque le habían tomado un gran afecto a Misaki, mejor para Asami, el necesitaba personas leales que no traicionaran su confianza por alguien tan mentiroso como lo era Misaki, Kirishima se mantuvo con el pero el también sin decirlo le había dado el beneficio de la duda a Misaki al igual que Mizuki.
A Haruhiko todo el tiempo se le veía pensativo, eso hacía que Shinnosuke se irritara con él, más que nada porque quería tener la razón de su esposo en la suya. Todos al pasar las semanas fueron evitando el tema, eso hacía que por momentos se olvidara o cuando alguien sin querer mencionaba el nombre de Misaki se cambiaba de conversación.
Feilong estaba teniendo serios problemas con Yong pues muchas veces no sabía cómo calmar sus lloriqueos, algunas veces absteniéndose de gritarle, incluso se iba a dormir a otra habitación dejando a Mikhail solo con Yong.
Mikhail: Ya mi vida, shh. —Lo meció, Yong se encontraba hipando pero ya no lloraba. —Mami se siente un poquito mal, pero no te preocupes ¿Por qué lloras? ¿Te duele algo?—Yong negó mientras chupaba su mano. —Mikhail fue a la cocina con Yong en brazos. — No debes hacerle berrinches a tu mamá, ¿Quieres que se enoje contigo?—El pequeño negó. — ¿Entonces porque lloras?
Yong: ¿Papi?
Mikhail: Aquí estoy cariño. —Yong negó de nuevo.
Yong: Misaki. —Fue cuando Mikhail entendió, su hijo extrañaba a Misaki, reviso que nadie escuchara y le susurro a Yong.
Mikhail: ¿Extrañas a Misaki?—Yong asintió con una sonrisa. —Ay mi amor…como te explico. —Lo último lo susurro contra la cabeza de Yong. —Es que… ¿Recuerdas que te gustan las galletas de chocolate?—Yong asintió con fuerza mientras tomaba el vaso entrenador que su papá le daba. —Misaki fue a buscar la galleta más grande de chocolate. —Vio como los ojitos de Yong brillaban de admiración. —Así muy muy muy grande. —Estiro uno de sus brazos.
Yong: ¿Grande?—Estiro a los lados ambos brazos.
Mikhail: Grande, grande, ¿Sabes para quien es la galleta?—Yong negó. —Me dijo que no te dijera pero. —Se acercó al oído de Yong para susurrarle. —Es para ti. —Yong iba a celebrar pero Mikhail le tapó la boca para después hacer un gesto de silencio, Yong le imito. —Shh, es un secreto, no debes decirle a nadie, sino podrían encontrar a Misaki y robarle la galleta que era para ti. —Yong frunció el ceño mientras negaba. —Entonces no le digas a nadie. —Hizo una cara graciosa de suspenso. — ¿Pero sabes? Misaki se enteró de algo. —Se vio las uñas como restándole importancia. —Puede que tarde en encontrar la galleta.
Yong: ¿Por qué?—Hizo un tierno puchero.
Mikhail: Porque se enteró que no dejas de hacer berrinche y que no alzas tus juguetes cuando te dice tu mamá que los recojas, incluso que los avientas y que no quieres comer tus vegetales, me dijo que te dijera que si ya no haces berrinche y haces lo que tu mamá te dice, regresara pronto ¿Prometes ya no llorar y hacerle caso a tu mamá?—Yong asintió, Mikhail alzo su palma. — ¿Palabra de caballero?
Yong: Si. —Junto su pequeña palma con la de su papá.
Mikhail: Bien, entonces a dormir que ya paso tu hora, entonces desde mañana quiero que cumplas lo que prometiste ¿Ok?
Yong: Ok. —Mikhail beso su mejilla al escuchar la tierna voz.
Tal como lo había prometido la noche anterior, a la mañana siguiente Yong estuvo tranquilo cuando Feilong le cambio el pijama, a la hora de desayunar, comer y cenar, Feilong ante esto dejo de tener dolores de cabeza que empezaban a una hora muy temprana, Mikhail tuvo que decirle a Yong que no le dijera nada a Feilong acerca de Misaki sino no le dejaría comer la galleta que le traería, poco a poco para el niño se le hizo costumbre recoger sus juguetes cuando terminaba de jugar, cada que le preguntaba a Mikhail por Misaki el mayor sentía cierto remordimiento al mentirle a su hijo, pero no le importaba con tal de ver los ojos brillantes de Yong, su vida de padre iba floreciendo mientras que la de pareja poco a poco se iba secando, trataba de darle su espacio a Feilong para no incomodarlo, pero lo que era cierto es que para ambos el problema con Iason los tenía con los nervios de punta.
Asami por momentos se reprochaba el haberle abierto tan fácilmente su corazón a Misaki, él no era así, pasaban años para que alguien se ganara su confianza, su mente analítica lo acusaba de no darse cuenta antes de lo que pasaba, supo que Misaki no era de fiar desde que le oculto donde estaba Akihiko en su momento pero no, él y su estúpida esperanza de que Misaki fuera diferente, él también tuvo la culpa, le había gustado desde que lo vio, si su yo del pasado lo viera ahora seguramente se reiría de su estupidez, el amor lo había cegado por completo, se rio al recordar lo que le había dicho a Misaki la última vez que se vieron, ¿Darse un balazo después de matarlo? Por favor, ese ingrato no merecía ni eso, pero eso sí, estaba ansioso por encontrarlo…encontrarlos más bien, necesitaba sacarle toda la información que tenía y darle una pequeña felicitación por embrutecerlo, nadie, ni siquiera Takaba había logrado hacer eso, se juró así mismo que eso jamás iba a volver a suceder, no volvería a caer ante nadie más, lo que no sabía es que el resentimiento y la decepción hacían que se mintiera a sí mismo.
Lo que si no podía negar es que Misaki se veía realmente magnifico en su traje de novio, parecía un ángel con ese velo, su figura parecía un sueño, cada vez que se acordaba de su aspecto tan perfecto enfundado en blanco sentía como se le cerraba la garganta.
Asami: Maldita sea, debes dejar de pensar en él, no seas estúpido. —Hablo hacia la nada.
Mikhail y Feilong notaban que Asami poco a poco volvía a hacer el de antes, el ser serio, calculador y frio que no dejaba que los sentimientos rigieran su vida, eso les ayudaba a avanzar más rápido como siempre debió ser pues el distractor principal siempre había sido Misaki, había hecho que Asami estuviera en otra dirección, por eso había tardado tanto la investigación cuando antes en menos de un mes hubieran dado con Iason, tal vez no tenían la ubicación exacta de Iason pero sabían quienes lo conocían, empezando por Misaki y Shizuku, eso se les había hecho extraño, sabían que los dos no se llevaban precisamente bien.
Feilong: ¿No creen que haya sido una trampa desde el principio?
Asami: ¿A qué te refieres?
Feilong: ¿No es casualidad que el mismo mes que venimos a Japón a pedirte ayuda para cuidar a Yong fue el mismo tiempo que Misaki perdió su empleo por culpa de Shizuku?
Asami: Yo no creo en las casualidades, deberías saberlo ya.
Feilong: Ya lo sé, desde el principio esa enemistad fue planeada para no unir cabos, todo el tiempo nos estuvo pisando los talones, además Misaki ya te traía coraje, lo hiciste acabar de abortar y ya sabes lo que dicen, las madres no olvidamos y somos salvajes si alguien lastima a nuestros hijos.
Mikhail: Pero los padres también defendemos a nuestras familias Feilong. —Mikhail se cruzó de brazos.
Feilong: Si, pero los padres no amantan ni tienen nueve meses para engendrar al hijo, así que cállate. —Dijo con tono grosero, Mikhail se levantó del sillón de donde estaba.
Mikhail: Iré por un café. —Salió dando un portazo, el despacho de Asami se quedó en silencio.
Kirishima lo alcanzó con una sombrilla para él, el día estaba lluvioso pero no tanto para que se hiciera imposible el caminar, lo cubrió con la propia.
Kirishima: A mí también me hace falta un café. —Mikhail tomo la sombrilla que le ofrecía.
Mikhail: Gracias. —Se cubrió de la lluvia. — ¿También te apetece caminar?
Kirishima: Por supuesto.
Ambos caminaron dispersos en sus pensamientos, salieron de la casa de Asami, la calle estaba desierta, a muchos les parecería un día triste pero para ellos no, necesitaban algo de tranquilidad y el atardecer junto con las nubes algo grises les regalaba una buena vista a pesar de la lluvia, al llegar al local hicieron sus pedidos junto con algunos alimentos, se percataron que Haruhiko también se encontraba ahí, alejado de las demás mesas, solo.
Haruhiko al sentir la mirada de ambos volteo a verlos, con una seña los invito a que se sentaran con él, Kirishima y Mikhail pidieron que sus pedidos se llevaran a aquella mesa.
Mikhail: Gracias por la invitación. —Se sentó, Kirishima copio su acción.
Haruhiko: De nada. —Le dio un sorbo a su taza de café.
Mikhail: ¿Apoco uno de los señores Usami tiene tiempos libres? Pensé que eras de los que tienen la rutina de ir de la casa al trabajo y del trabajo a la casa, tu rostro tallado en mármol confunde. —Haruhiko sonrió de lado.
Haruhiko: Si, bueno, hay momentos que es mejor pasarla solo.
Mikhail: Entiendo, alejado de los problemas maritales…
Haruhiko: ¿Cómo supiste?
Kirishima: Acabamos de salir de ahí, bueno sinceramente a mí se me antojaban los panecillos que venden aquí. —Haruhiko soltó una disimulada risa.
Haruhiko: ¿Así que estas en la misma situación Mikhail? Déjame adivinar, ¿Dame la razón sino estas en mi contra?
Mikhail: ¿Cómo supiste?
Haruhiko: Le atine.
Kirishima: Yo quiero adivinar la constante. —Recibieron su orden.
—Misaki. —Dijeron los tres al mismo tiempo, ante esto se rieron.
Mikhail: Mierda.
Haruhiko: Bueno creo que coincidimos el que no pensamos las cosas con la cabeza llena de mierdas. —Le llego un mensaje y al leerlo su expresión cambio. —Mierda.
Mikhail: ¿Qué? ¿Te requieren ya en casa?—Se burló.
Haruhiko: Confió en tu buen sentido común, así que te diré, contrate a un investigador privado para que investigara desde el principio a Misaki, pero al parecer otras dos personas pensaron lo mismo que yo, no puede seguir adelante sin provocar sospechas.
Kirishima: No puede ser, Mizuki y yo contratamos igual a uno.
Mikhail: Yo también. —Se rio. —Puta madre. —Hizo su cabeza hacia atrás mientras exhalaba ruidosamente. —Por algo el destino nos reunió aquí.
Haruhiko: Cálmate destino, ahora, puede que los tres investigadores tengan la misma información.
Kirishima: Desde distintos puntos.
Haruhiko: Oye eso es perfecto.
Mikhail: Haruhiko, pero dime algo, tu que conoces más tiempo a Misaki ¿Cómo es su personalidad en realidad?
Haruhiko: Cuando lo conocí fue algo recio al principio, es muy predecible ¿Enserio creen que haya planeado todo este plan tan perfecto? No es por burlarme de su inteligencia o algo, pero no lo creo capaz de hacer eso.
Mikhail: ¿Pero con ayuda tal vez…? Además estar junto a un grupo de como nosotros, pasar por varias circunstancias cercanas a la muerte… de una u otra manera te las tienes que arreglar para ser inteligente.
Haruhiko: Si pero siempre hay circunstancias que hacen que se te salga algo de información, a Misaki no le dejaron decir ni pio, ya venía con nervios por la boda ahora imagínate como se confundió cuando Asami le dijo esas palabras.
Kirishima: Pero dijo que si conocía a Iason…
Haruhiko: ¿Desde cuándo? ¿Bajo qué circunstancias? Así como lo pusieron de nervioso se le hubiera salido algo pero no, solo dijo que sí ¿Si lo conozco? ¿Si me amenazo? ¿Si estoy con él? ¿Si qué? Vamos, creí que serían más inteligentes.
Kirishima: Si, pero Mikhail tiene un punto, Misaki desde que lo conocí hasta ahora si cambio algo.
Mikhail: Deberíamos preguntarle a su hermano, literal lo conoce de toda la vida.
Kirishima: No, los hermanos pelearan, jugaran y todo lo que quieras pero un hermano mayor siempre defenderá al menor bajo cualquier circunstancia.
Haruhiko: Pero tal vez podríamos obtener algo con alguien que lo conoció de la cabeza a los pies durante cuatro años. —Los tres se levantaron de sus asientos.
Mikhail: No traemos auto.
Haruhiko: Pero yo sí. —Le mostro sus llaves, cada quien dejo un billete en la mesa, Kirishima se llevó su orden de comida. —Kirishima, avísale a Mizuki que nos vea en el departamento de mi hermano, pero que no diga nada del asunto.
Cuatro hombres se encontraban enfrente del departamento de Akihiko.
Haruhiko: Por favor, sean prudentes, nadie le ha dicho a Akihiko lo que paso. —Vio a Mikhail y después a Kirishima.
Mizuki: No quisimos comentarle por la situación que está pasando con Takaba, incluso se lo trajo y contrato a un par de enfermeras para que se hicieran cargo.
Mikhail: Ok, entiendo. —Haruhiko tocó el timbre para después esperar algunos segundos, sabía que su hermano lo vería por la cámara del intercomunicador.
Akihiko: Haruhiko. —Dijo al abrir la puerta, ambos se abrazaron al verse.
Haruhiko: ¿Cómo has estado hermano?—Esperaba verlo desaliñado pero no, solo se le veía algo cansado.
Akihiko: Bien, tan bien como puedo estarlo. —Volteo a ver a los acompañantes de su hermano.
Mikhail: Oh. —Ambos se estrecharon la mano. —Mikhail Arbatov. —Un gusto.
Kirishima: Puede llamarme Kirishima. —Los dos hicieron una pequeña reverencia.
Akihiko: Es un placer conocerlos, por favor pasen. —Se hizo a un lado para que pasaran.
Mizuki: Hola me llamo Mizuki. —Akihiko revolvió sus cabellos.
Akihiko: Tonto. —Cerro la puerta tras de sí y los invito a sentarse para después ofrecer bebidas, todos declinaron. —Oigan ustedes. —Kirishima y Mikhail lo vieron. — ¿No estaban en el baile de mi padre?
Mikhail: Si, estuvimos ahí.
Akihiko: Si, ya lo recordé, y bien ¿En qué puedo ayudarles?
Haruhiko: Akihiko, primero necesito que tengas la mente abierta y no te dejes llevar por tus emociones ¿Si?
Akihiko: ¿Ok? Mira si me lo dices así es inevitable que piense que es algo malo.
Mikhail: Bien, si, si es algo malo.
Kirishima: ¡Oye!—Le regaño mientras le daba una leve palmada en el hombro.
Mikhail: ¿Qué? Es la verdad, lo estoy preparando para la situación.
Akihiko: ¿Qué situación? —Impaciente busco respuestas en los ojos de todos.
Mizuki: Bueno…—Los presentes comenzaron a contar sus versiones desde el principio, claro evitando el hecho de que Misaki tuvo un aborto, pero de ahí en fuera todo siguió como era el trascurso de la historia, tardaron al menos dos horas y media explicando quien era quien y que era qué y el porqué.
Akihiko al terminar de escuchar todo el desenlace tenía la cara cubierta con las manos para después pasarse una mano por el cabello con frustración, se sentía culpable pues si él hubiera terminado con Misaki de la forma correcta el castaño se hubiera evitado tantas mierdas en su vida, se recargo en el respaldo del sillón mientras se masajeaba el entrecejo y negaba, su mandíbula estaba apretada.
Akihiko: Que pendejos son. —Ese insulto le supo a gloria, se había mantenido callado todo el rato, solo hablaba para preguntar detalles. —Que mierdas de personas son todos aquellos que mencionaste y más Asami por cagarla tantas veces ¿Cree que él puede equivocarse pero Misaki no? Que se vaya al demonio junto con todos los demás.
Mikhail: ¿Entonces…?
Akihiko: Por favor, no me hagas reír, es estúpido que me preguntes. —Se levantó para tomar algo de su bar, Takaba le había sugerido que lo comprara, hoy más que nunca se lo agradecía, tenía un sabor amargo en la boca. —Misaki ya no es mi pareja, ni lo quiero como antes, pero no necesito pruebas para saber que él no tiene ni puta idea de lo que paso o estoy casi seguro que ha de tener una razón muy fuerte por haberlo hecho, metería mis manos al fuego solo para comprobarlo.
Mizuki: ¿Seguro que ya no lo amas?
Akihiko: Si idiota, por eso fui a impedir su boda. —Rodo los ojos mientras negaba. — ¿Y bien?—Dejo su vaso en la base de madera. — ¿Qué les dijo cuándo se disculpó?
Mikhail: ¿Disculpas?
Akihiko: Si, Misaki se disculparía por las estupideces de otros, no debería pero lo hace y dejaría de “molestar”—Hizo comillas con sus dedos.
Mizuki: Akihiko yo no he hablado con Misaki.
Haruhiko: Yo tampoco.
Mikhail: No se ha contactado con nadie.
Akihiko: ¿Qué?—Notaron como la expresión de Akihiko cambiaba de molesta a una de verdadera preocupación.
Kirishima: Bueno si a mí igual me hubieran humillado como lo hicieron con Misaki lo último que querría es comunicarme con alguien.
Mikhail: Si, si así hubiera sido Feilong no se cansaría de alardear sobre lo sinvergüenza que es Misaki y Asami le daría la razón.
Akihiko: Mierda, mierda. —Saco su celular y marco rápido el número de Takahiro. —Hola Takahiro. —Fingió no estar preocupado. — ¿De casualidad sabes cuando regresa Misaki de su luna de miel? Es que dejo algo de ropa en mi departamento y se la quería devolver, no, no supe lo que paso, ¿Se ha comunicado contigo? ¿No?—Volteo a ver a los demás con pánico. — ¿Desde la boda? Bueno ya lo conoces como es de no causar molestias, seguramente estará trabajando, sí, yo le digo, adiós cuídate. —Colgó. —¿Cuanto ha pasado desde la boda?—Su mano cubría su boca.
Mikhail: Como…—Hizo cuentas con los dedos. — Seis semanas.
Akihiko: Puta madre, le pasó algo, estoy seguro. —Escondió su rostro entre sus palmas mientras sus pies se movían rápidamente de arriba abajo. —No puede ser.
Kirishima: Tranquilo, las malas noticias son las primeras en llegar.
Akihiko: No con ese tal Iason. —Se levantó para después cerrar los ojos con frustración. —Mierda, no puedo dejar a Takaba solo.
Mizuki: No te preocupes, yo me encargo junto con las enfermeras, has lo que debas hacer.
Akihiko: Gracias. —Mizuki le sonrió. —Vamos a su departamento, rápido.
El auto todavía no se detenía completamente cuando Akihiko bajo, incluso había dejado la puerta abierta, toco sin delicadeza la puerta, todo estaba a oscuras.
Akihiko: ¡Misaki! —Intento abrir pero estaba cerrado con llave.
Mikhail: Cálmate ¿Qué tal si está durmiendo?
Akihiko: Y una mierda. —Le dio una patada abriendo la puerta, todo estaba en penumbras, intentaron prender la luz pero no funcionaba, al prender las linternas de sus celulares las partículas de polvo se veían volar. —Carajo.
El lugar los desconcertó, todo estaba hecho un desastre, Haruhiko al tocar un mueve se llenó los dedos de polvo.
Haruhiko: ¡Misaki!—Los tres subieron a los cuartos de arriba, Kirishima había subido al último pues busco en la cocina y en el baño.
Mikhail: Todo está en su lugar solo que cubierto de polvo. —Cerró el antiguo cuarto de Shinnosuke.
Akihiko: Este era su cuarto ¿No?—Al abrir dos maletas cubiertas de polvo fue lo primero que vio, además de varias cajas con sus pertenecías, listas para la mudanza, la cama estaba hecha.
Haruhiko: Si Misaki no sabía que Asami había comprado una casa ¿Por qué todo esta empacado para una mudanza?
Kirishima: Asami le había dicho que aguardara sus cosas en cajas pues estarían un mes de luna de miel y no quería que se estropearan, claro que fue una mentira porque en lo que ellos estaban de luna de miel nosotros vendríamos por sus pertenencias para dejarlas en la casa, después de las vacaciones llegarían allá directamente. —Haruhiko asintió.
Akihiko: Busquen sus documentos, tarjetas, identificación, si salió eso es lo primero que se llevaría.
Todos le hicieron caso, sacaron todo de sus cajas, Misaki había alistando todo para su luna de miel, Mikhail maldijo al encontrar sus documentos oficiales.
Mikhail: ¿Enserio Misaki salió sin estas cosas?—Los tres se acercaron a ver. — ¿Cómo sales sin tus documentos ni dinero?
Haruhiko: Puta madre.
Akihiko: Llamen a sus investigadores, que nos vean acá, no hay que dejar pasar más tiempo, Misaki no salió solo.
Kirishima: O lo sacaron.
En lo que llegaban sus investigadores seguían buscando más indicios sobre el paradero de Misaki, Mikhail al pasar a lado de una caja la había tirado, había varios libros y papeles sin importancia, pero lo que le sorprendió ver fue que había salido volando una de las tarjetas de Iason, la limpio con su pantalón mientras la alumbraba.
Akihiko: ¿Ese es el símbolo que dices?
Mikhail: Si, nada más que la otra luna tiene como símbolos.
Haruhiko: Yo creo que una la usa para sus negocios legales y la otra pues bueno, para los otros que no lo son.
Mikhail: Misaki dijo que ya lo conocía, a lo mejor fue cuando se la dio.
Kirishima: Además si Iason requería a Misaki para otras cosas le hubiera dado la tarjeta que tiene los símbolos. —Al mover una de las luces notaron que algo en la tarjeta brillaba, los cuatro ocultaron la luz viendo que los símbolos brillaban en la oscuridad. —No puede ser…
Mikhail: Genial ¿Misaki sabía de putas esto?—Aventó la tarjeta al suelo.
Haruhiko: Recuerda pensar con la cabeza fría, tranquilízate.
— ¿Buenas noches?—Voltearon a verse entre sí. — ¿Señor Arbatov?
Mikhail: Es el investigador, bajemos.
Al bajar notaron que los otros dos también habían bajado.
Akihiko: Buenas noches a todos.
Se sentaron en la sala de Misaki, cada uno de los investigadores comenzó a sacar la información que habían recolectado, fue como había dicho Kirishima tenían diferentes versiones pero todas coincidían en lo mismo, ante esto Akihiko se había cabreado, Mikhail negaba con frustración.
Haruhiko: No lo puedo creer. —Golpeo una lámpara que se encontraba a su lado.
—Sentimos que no sea la información que esperaban.
Kirishima: El ultimo que nos puede acabar de confirmar esta en el hospital.
Akihiko: Te pido por favor que respetes la situación de Takaba, él también se embarro en esta mierda sin tener la culpa.
Kirishima: No, varias semanas uno de los agentes que se infiltro se despertó de un coma que le provoco Misaki al pegarle en la cabeza.
Akihiko: Ah sí, el intento de secuestro.
Mikhail: ¿Por qué no le mencionaste nada a Asami?
Kirishima: El doctor que llamo dijo que podría haber sido un reflejo, que es bastante común, pero hace algunos días me volvieron a llamar, despertó por completo además quise que se recuperara para que al preguntarle no tuviera dificultad de hablar, Asami no tiene la paciencia suficiente para dejar a hablar a un recién despertado del coma, capaz se desesperaría y lo mataría o Feilong lo habría golpeado hasta que hablara.
Haruhiko: Pues vamos, ya no hay nada que perder, solo nos confirmaría lo obvio. —Dijo con decepción, era de madrugada pero no les importo ir al hospital a esas horas.
Eran las nueve de la mañana, todos en la casa Usami se encontraban desayunando en silencio, a Shinnosuke se le veía molesto.
Kaoruko: ¿Problemas en el paraíso? —Con tono burlón le mordió a su fruta.
Fuyuhiko: ¡Kaoruko!—Le regaño mientras fruncía el ceño.
Shinnosuke: Haruhiko no llego a dormir.
Natsuko: Mizuki tampoco, me aviso que estaba en el departamento de Akihiko, a lo mejor Haruhiko también, calma mi niño, ¿Qué sería de los matrimonios sin discusiones? Haruhiko seguramente se encuentras igual que tú, solo necesita calmarse, cuando lo haga veras que estará aquí, confía en él. —Acaricio el dorso de su mano, se escuchó que el timbre era tocado. — ¿Ves? Seguramente es el.
Shinnosuke: Pero el siempre trae llaves.
Tanaka: Disculpen la interrupción. —Tenía dos paquetes pequeños en ambas manos. —Llego esto para la señorita Kaoruko y para el Señor Shinnosuke. —Ambos se levantaron para tomarlos.
Kaoruko: Gracias. —Ambos tenían una expresión de confusión en el rostro.
Fuyuhiko: ¿Quién lo manda?—Shinnosuke busco por todos los lados de la caja pero no había nada.
Shinnosuke: No dice. —Puso la caja en la mesa.
Kaoruko: ¿Qué será? —Dijo emocionada, rompió la cinta con el cuchillo que había utilizado, Shinnosuke imito su acción, ambos al ver su contenido se desconcertaron al ver el contenido.
Natsuko: ¿Qué es eso?
Shinnosuke: Es la cinta que le preste a Misaki para la boda. —Al sacar la cinta azul reviso que la caja ya no tuviera nada.
Kaoruko: Son los zapatos que le ayude a escoger, ¿Por qué Misaki los mandaría?
Fuyuhiko: Que extraño, a lo mejor como ya no se casó pues ya no los necesita. —Dio las gracias por la comida y salió junto a Natsuko.
Shinnosuke: Puede ser. —Indiferente aguardo la liga en la caja donde había llegado.
Kaoruko: Shinnosuke. —Dijo mientras veía su celular. —Asami me mandó un mensaje. —Shinnosuke se acercó a ver, sintió como su celular vibraba y al revisar vio que Asami le mandaba el mismo.
Shinnosuke: Quiere que llevemos las pertenencias de Misaki a su casa que es urgente…
Kaoruko: Que raro ¿Cómo supo que llegaron aquí y a esta hora?
Shinnosuke: Seguramente Misaki no se le ha hablado y quiere rastrear de donde vienen las cosas para buscarlo, ya sabes siempre lo tenía bien cuidado, bueno según, ¿Por qué nos tiene que meter en sus tonterías?
Kaoruko: No sé, pero vamos, solo las dejamos con el portero y nos regresamos, así de paso vamos al centro comercial. —Lo último lo dijo con emoción.
Shinnosuke: Esta bien, vamos.
Kaoruko: ¡Sí!
Le pidieron a uno de los choferes que los llevaran hasta la casa de Asami, al llegar había tres guardias custodiando la entrada, bajaron con todo y los paquetes.
Kaoruko: Hola buenas tardes. —Dijo con una sonrisa.
Shinnosuke: Venimos a dejar un paquete que Asami Ryuichi nos pidió. —Se lo entrego a uno de los guardias. —Y por favor dile que no somos sus mandaderos. —El guardia le regreso el paquete con algo de brusquedad.
—Nos informó que debían pasar. —Su voz sonó agresiva.
Kaoruko: Nosotros no…
— ¡Ahora!
Kaoruko: Ay. —Chillo. —Está bien. —Ambos pasaron.
Shinnosuke: Maldito genio que se cargan estos idiotas, uno no tiene la culpa. —Caminaron hacia la casa, al llegar a la entrada tocaron el timbre, esperaron algunos segundos cuando Asami les abrió la puerta lo hizo con un gesto de desconcierto.
Asami: Buenos días, ¿Qué hacen aquí? —Les hablo serio.
Shinnosuke: No te hagas, nos pediste que te trajéramos esto. —Alzo la caja. —Que desconsiderado eres al usar a un embarazado como mensajero.
Asami: Yo no les pedí nada.
Kaoruko: Pero tu mensaje dice lo contrario. —Le enseño su celular, específicamente el mensaje, Asami lo reviso.
Asami: Yo no he enviado nada. —Los hizo pasar.
Feilong: ¿Que paso? —Se encontraba en la sala, rodeado de papeles y fotografías.
Asami: Otra vez volvieron a mandar un mensaje a mi nombre, tenían que traer esas cajas.
Feilong: ¿Qué tienen adentro?—Se levantó con nerviosismo.
Shinnosuke: Cosas que tenía Misaki el día de la boda.
Asami: ¿No tenía otra cosa adentro?
Kaoruko: No, solo tenía esto. —Sacaron la liga y los zapatos. —Un guardia entro con dos cajas.
—Señor, un mensajero dejo esto, una caja es para usted y la otra para el señor Feilong.
Asami: ¡Déjalas allá fuera! Lo más lejos que puedas y lleva esto contigo—Metió los zapatos y la liga en sus respectivas cajas. — ¡Ahora!
Feilong: ¿Serán bombas?—Dijo asustado. —Resguarda a Yong. —Le dijo a otro de los guardias.
Asami: No sé. —Saco su pistola. —Pero lo veremos.
Shinnosuke: ¿Qué vas a hacer?—Asustado se hizo para atrás.
Asami: Asegurarme de que esas cajas no tengan nada inflamable adentro. —Salió al patio, los demás se quedaron adentro, específicamente atrás de los sillones y en suelo, el guardia acababa de dejar las cajas lo más lejos posible que pudo, al ver a Asami se apresuró a quitarse, Asami con una puntería perfecta atravesó las cajas con la bala que disparo, nada había pasado, si una caja hubiera detonado las demás la seguirían, pero solo quedo un agujero en medio de ellas, dejo salir un suspiro de alivio. —Tráelas de nuevo. —El guardia fue por ellas, Asami se metió a su casa de nuevo.
Feilong: Dios. —Se tocó el corazón. —Que susto.
Kaoruko: Mínimo hubieras dejado que nos fuéramos primero. —Ayudo a Shinnosuke a levantarse. —Aquí hay un embarazado idiota.
Feilong: Maldito Mikhail, buena hora en que no llego. —Dijo enojado, ellos con esta situación y Mikhail afuera haciendo quien sabe qué.
Shinnosuke: Haruhiko tampoco llego a dormir anoche…
Asami: Kirishima fue con él.
Feilong: Seguramente se fueron de farra. —Rodo los ojos mientras se cruzaba de brazos, el guardia entro con las cajas para después dejarlas en la mesa de centro.
Asami las abrió, era el traje de Misaki y el velo, perfectamente doblados, pero con un agujero en medio por la bala que había traspasado.
Asami: ¿Qué mierdas es esto? ¿Es alguna clase de broma de mal gusto de Misaki? ¿Para que nos envió esta basura?— Al sacarlo de la bolsa una tarjeta con el símbolo cayo, Asami aventó sin cuidado el traje blanco a uno de los sillones para agarrar la tarjeta negra, atrás tenía unas palabras en blanco.
Kaoruko: Ay, tan bonito que estaba el velo. —Lo saco para verlo mejor.
Feilong: ¿Qué dice la nota Asami?—Asami cambio su expresión de fastidio, se le veía perturbado.
Asami: Acabas de matar a Misaki.
Feilong: ¿Qué?—Le arrebato la nota para después leerla. —No puede ser. —Brincaron al escuchar cómo se abría la puerta de golpe.
Akihiko: ¡Hijo de tu puta madre!—Se abalanzo contra Asami para agarrarlo de la camisa y atestarle un puñetazo con bastante fuerza en la cara. — ¡Eres un cabrón!—Decir que Asami no estaba confundido por el golpe seria mentira, si le había dolido bastante, iba a defenderse cuando Akihiko lo tomo de los hombros con bastante rapidez y lo bajo para darle un rodillazo en la cara, eso le hizo caer y desorientarse. — ¿¡Tienes mierda en la cabeza o que pendejo!?—Le dio otros dos puñetazos en la cara antes de lo que separaran, Asami empezó a sangrar de su nariz y por la abertura del pómulo, Feilong fue a socorrerlo.
Haruhiko: ¡Ya Akihiko!—El peli plateado todavía le alcanzo a dar una patada en sus costillas, Kirishima le ayudo a retenerlo, Mikhail tenía una expresión de burla en su rostro.
Feilong: Gracias por la ayuda idiota. —Los demás guardias le ayudaron.
Mikhail: Sinceramente se lo merece por estúpido.
Haruhiko: ¡Ya basta!—Kirishima y él lo alejaron un poco para que se tranquilizara, lo soltaron pero no le dejaron ir de nuevo donde Asami.
Shinnosuke: ¿Que hacen aquí?
Mikhail: Venimos del departamento de Misaki, bueno aun que antes pasamos al hospital.
Shinnosuke: ¿Qué paso?—Mencionó asustado.
Mikhail: El agente infiltrado Satoshi acaba de morir, pero antes le preguntamos esto. —Saco su celular para dárselo a Asami, tenía un pañuelo en la nariz que poco a poco se llenaba de sangre, su cara se comenzaba a hinchar, uno de los guardias sostenía la bolsa con hielos.
En el video que fue grabado por Haruhiko se veía a Kirishima y Akihiko en la puerta mientras que Mikhail se encontraba a lado de la cama, el ex agente se encontraba conectado a un suero, tenía una venda en la cabeza, su mirada estaba algo perdida, claramente se le veía con signos de daño cerebral.
Mikhail: ¿Sabes quién soy?—El hombre se rio, incluso la saliva escurría de sus labios. —Mierda, esta todo retrasado. —Volteo a ver a Akihiko.
Akihiko: Pero parece que si entiende.
Mikhail: Oye tonto. —Le dio una palmada en la cabeza, escucho que Kirishima se reía. —No te rías, mira como está el tarado. —Tenía una expresión de burla.
Kirishima: Es que si me da risa. —Se cubrió la boca. —Ya continúa.
Mikhail: Conoces a Iason Mink. —El agente asintió, Mikhail le doblo el dedo de una mano, de inmediato el agente hizo una expresión de dolor. — ¿Me estás diciendo la verdad?—El agente volvió a asentir. —Bien, ¿Iason Mink te mando a trabajar con Asami?—El agente asintió lentamente. — ¿Él te ordeno a secuestrar a mi hijo y a Misaki?—El agente negó. —Puta madre ¿Entonces quien fue?—Dirigió su vista a los demás.
Satoshi: Regalo. —Dijo con expresión ida.
Mikhail: ¿De quién?
Satoshi: Mío.
Mikhail: Ok, mira tarado ponme atención y responde con la verdad. —Tomo a Satoshi del mentón para que lo viera a los ojos. — ¿Misaki ya conocía en ese entonces a Iason Mink?—El negó con lentitud. — ¿Iason ya sabía de Misaki?—Negó de nuevo, Mikhail lo soltó dejando caer su cabeza con delicadeza. —Bien, hay que regresar al departamento de Misaki. —Saco una jeringa de la basura para residuos médicos para unirla con la aguja, fue fácil pues la aguja tenía el protector, le quito todo residuo de medicamento que pudiera tener dentro y la lleno de aire. —Siento que nos falta algo. —Tomo el Conecto la jeringa en el punto de inyección del catéter.
Akihiko: Hey no, ¿Qué vas a hacer?
Mikhail: ¿No es obvio?—Inyecto el aire para después sacar la jeringa. —Ya no sirve, vámonos. —Ambos hermanos se voltearon a ver sorprendidos, Kirishima y Mikhail salieron como si nada, fue cuando acabo el video.
Asami: Aja si, voy a creer en la palabra de un muerto con retraso mental.
Mikhail: No nos creas estúpidos regresamos al departamento de Misaki, que por cierto esta hecho una mierda y si te lo preguntas no, no está ahí, pero están todas sus cosas y sus documentos oficiales, todo cubierto de polvo, hace semanas que alguien no se para por ahí, una vecina nos dijo algo interesante, de hecho fuimos con varios vecinos y nos dicen lo mismo, que unos hombres y un señor con bello largo y rubio se lo llevaron.
Shinnosuke: ¿Qué?
Feilong: ¿Se lo llevaron o se fue?
Mikhail: Se lo llevaron…inconsciente.
Feilong: Bueno, no me sorprendería, lo descubrieron a final de cuentas, mínimo una paliza si le tuvieron que dar.
Mikhail: ¿Pueden dejar de ser idiotas por un momento? Uno de los vecinos al escuchar tanto alboroto decidió grabarlo. —Les mostro el video, era apenas de unos segundos, claramente se veía a Misaki aun en su traje y con el velo arrastrándose, desmayado y siendo cargado por Iason para después ser subido a una camioneta. —No sé tú, pero golpeado no se ve.
Asami: ¿Entonces…?
Akihiko: Entonces maldito idiota hiciste lo que exactamente quería Iason, dejar desprotegido a Misaki para llevárselo.
Asami: ¿Cómo explicas el hecho que haya matado a mis malditos guardias?
Akihiko: Misaki ni siquiera estaba ahí cuando sucedió, estaba con un ex compañero de la universidad, se lo encontró en el parque esa vez que paso lo de los guardias, Keiichi Sumi se llama, tenemos su testimonio por video y fotografías con hora y fecha ¿Quieres verlas solo para comprobar que eres un pendejo?—Asami poco a poco iba a aclarando su mente y moviendo las piezas de ese maldito rompecabezas.
Feilong: ¿Ah sí, entonces como justificas que Misaki se acostara con él?
Ruruka: A Misaki le produce asco estar cerca de Iason. —Llego junto a una pequeña caja en las manos. —Cuando lo invito a desayunar me pidió de favor que lo llamara de emergencia para que pudiera salir de ahí, siempre quiso evitarlo, pero Asami le entrada libre, Misaki nunca quiso decirle a Asami nada sobre los besos por obvias razones y aun así lo mandaron al carajo, cada quien ve lo que le es conveniente. —Dejo la caja en la mesa del comedor. —Ahí está, no la abrí, tal como lo que pediste—Le dijo a Asami. — Yo me largo.
Asami: Yo no soy el de los mensajes. —Ruruka se detuvo.
Ruruka: ¿Entonces? —Todos guardaron silencio pues todos los celulares comenzaron a sonar, los revisaron, era un mensaje el que había llegado.
“Por favor tomen asiento”
Todos se voltearon a ver pidiendo explicaciones mudas, incluso buscando cámaras pero no las vieron, más bien no se les hacían visibles.
“Les conviene hacerme caso, no quiero despertar al lindo bebé que está durmiendo en el cuarto de Asami, así todos que por favor tomen asiento, menos tu Asami”
Al terminar de leer los mensajes, con algo de temor lo hicieron, los guardias salieron y estuvieron atentos ante cualquier perturbación exterior.
“Asami no seas grosero y ofréceles de beber algo fuerte, claro menos al embarazado, sírvele algo de jugo”
Haruhiko ante esto toco la panza abultada de su esposo, protegiéndolo de lo que no podían ver, Asami con gran dificultad se levantó e hizo lo que se le indico por texto, todos estaban atentos a los mensajes que les llegaban.
“Gracias, eres muy amable, ahora siéntate y enciende la plasma, que buena suerte que se conecte internet”
Asami tomo el control remoto y encendió la televisión, después de unos segundos un link comenzó a cargar, se sorprendieron cuando en la pantalla un video que estaba en vivo, estaba Iason sentado y atrás de el una habitación que era ocultada por su silla y por su cuerpo.
Iason: Es un gusto verlos de nuevo.
Kaoruko: ¿Nos escuchara?
Iason: Por supuesto que si querida.
Asami: ¿No crees que es demasiado infantil esto? ¿Por qué tanto afán en hacer todo este alboroto Mink?
Feilong: ¿Qué quieres de nosotros maldito bastardo?
Mikhail: Ya deja este tonto juego de una vez.
Iason: Quería tener a ustedes tres reunidos, con la ansiedad y estrés en sus cabezas, bueno también quería testigos y estos son los mejores. —Los señalo a todos como si estuviera ahí.
Akihiko: ¡A mi vale una mierda el asunto que tengas que arreglar con estos! ¿¡Donde esta Misaki!?
Iason: Ay. —Hizo una expresión de aburrimiento. —Qué mal educado es señor escritor, por favor siéntese si no quiere que me apresure con lo que voy a hacer.
Asami: ¿¡Qué...!?—Se levanto
Iason: Shh, no grites, a mí no me hables así, por favor siéntate. —Exhalo fuertemente. —Bien, no quiero alargar esto, ustedes tres crearon a un demonio que no dejo de perseguirlos todos estos años.
Mikhail: Yo no recuerdo nada ¿Y tú Feilong?—Dijo con tono burlón.
Feilong: Nada.
Asami: Seguramente no fue importante, solo son exageraciones. —Los presentes se desconcertaron al escuchar reír a Iason.
Iason: Claro. —Junto sus manos en su regazo. —Solo quiero devolverles lo que con gusto me dieron.
Asami: De nada.
Feilong: Fue un gusto.
Mikhail: Basta, déjense de tonterías. —Dijo con impaciencia.
Iason: Gracias Mikhail.
Asami: Déjame adivinar, ¿Quieres matarnos? ¿Sabes que eso es imposible?
Iason: ¿Asesinar?—Hizo una mueca. —No, claro que no, solo estaba esperando un evento especial, ese fue por supuesto tu boda que no se pudo hacer Asami, uhh. —Su tono afligido era bastante falso. —Quiero quemarles el corazón, con Asami ya lo hice, solo faltan ustedes Mikhail y Feilong.
Asami: Por supuesto que no.
Feilong: Ni siquiera tenemos.
Mikhail: No tengo ningún remordimiento a decir verdad, siempre hice lo que quise, así que cuando quieras. —Levanto ambos brazos.
Iason: Por favor Asami, todos sabemos que Misaki te movió todo desde el principio. —Se burló. —A que todo se derrumbó cuando te enteraste que trabajaba para mi ¿No es cierto?
Ruruka: Eso no es cierto, le causas asco a Misaki.
Iason: ¿Eso es cierto? —Estiro su brazo invitando al otro a sentarse en sus piernas.
Misaki: Lo siento Ruruka, pero no sabes lo divertido que fue causarle un coma a Takaba. —Se abrazó al cuello de Iason.
Iason: Mira, mira, ve la cara de Asami. —Misaki se estiro a ver a través de las cámaras el rostro lleno de coraje de Asami.
Misaki: Pobrecito.
Feilong: Eres un maldito bastardo Misaki. —Misaki hizo una expresión triste para después reír.
Akihiko: Déjate de farsas. —Misaki se puso serio. —Tú no eres Misaki.
Iason: ¿Por qué cree eso señor Usami?
Akihiko: A Misaki no se le hace un hoyuelo cuando sonríe. —Ambos guardaron silencio. —Él tiene una cicatriz en la ceja, tu no, las tienes perfectas. —Iason empezó a aplaudir el otro se alejó confundido.
Iason: Vaya eso si es ser observador, pero si, este es un completo inútil. —“Misaki” lo volteo a ver enojado. —Ya déjate de tonterías, quítate eso. —El otro suspiro, se quitó la peluca dejando ver sus cabellos negros, pero aparte se quitó una malla muy delgada de su rostro para entregársela a Iason. — ¿Les gusta? —Estiro la malla electrónica. —Yo la invente, solo necesitas el rostro fino de alguien, configurarla a tus gustos y ponerla.
Asami: No puede ser. —Comenzó a respirar un poco más rápido, los nervios hicieron que su corazón palpitara con rapidez.
Feilong: ¿Cómo explicas lo de la voz?—Iason le quito un collar grueso de color negro.
Iason: Solo necesite grabar la voz de Misaki para meter el tono de aquí. —Se puso el collar por encima. — ¿Ahora lo escuchan? ¿Qué sería de mi empresa si no supiera hacer estas cosas? Hackear cualquier producto inteligente conectado a internet es un juego de niños para mí —Se escuchó como si Misaki hubiera hablado.
Asami: Maldito bastardo.
Iason: Eso les pasa por meterse con personas que no debían, es como dicen, jamás se metan con la familia.
Mikhail: Si son igual que tu entonces que desperdicio de oxígeno.
Iason: Eran, y no, no eran igual que yo, por eso me sentía dichoso de tenerlos.
Feilong: Nadie es indispensable en la vida, muchas personas se largan.
Iason: Asami. —Asami levanto la mirada, sentía que los nervios comenzaban a consumirlo, pero aun así no quiso dejarse amedrentar. — ¿Lo secundas sobre lo que dijo?
Asami: Por supuesto.
Iason: Esta bien. —Quito a Shizuku de sus piernas de un empujón. — ¿Ya escuchaste querido? Asami acaba de decir que nadie es indispensable, aunque si lo creo capaz de todo después de haberte humillado de la forma en que lo hizo en tu boda y enfrente de todos. —Movió su silla dejando ver el resto de la habitación. —Un jadeo colectivo le hizo sonreír, Misaki estaba sentado en la una enorme cama con ambas manos encadenadas hacia arriba, su rostro tenia moretones y la parte del cuerpo que se dejaba ver también se veían manchas rojizas moradas, incluso algunas estaban verdes, vestía un pants negro al igual que una camisa. —Salúdalos, no seas mal educado. —Se acercó a el junto con la cámara para grabarlo.
Shizuku: ¿Qué? ¿Estas sordo?—Tomo su mandíbula con fuerza.
Misaki: Vete a la mierda. —Le escupió en el rostro, Shizuku se limpió para después darle una cachetada que hizo que se volteara, Misaki respiro profundo para después enderezarse.
Iason: Al investigar sobre Misaki me entere de algunas cosas bastantes sorprendentes. —Volvió a poner la cámara en su lugar pero ahora nada estaba oculto. —Una de ellas era que este inútil. —Señalo a Shizuku con la mirada. —Lo odiaba, fue fácil convencerlo para que me ayudara ¿Saben que es lo gracioso? Misaki no tenía ni puta idea de que alguien igual que él estaba por ahí ayudándome en el mundo malvado, lo decepcionante es que Shizuku no quiso acercarse a Yong.
Shizuku: Ni aun que me maten te ayudaría con algo así, no dañaría a un niño.
Iason: Que doble moral eres, como dijo Mikhail, ya no sirves. —Saco su pistola y con rapidez le disparo en la cabeza.
Misaki: ¡No!—Shizuku cayó arriba de sus piernas. — ¡Eres un maldito loco!
Iason: ¡Eso pasa cuando te quieren quitar del camino!
Asami: Déjalo, él no tiene nada que ver en esto.
Iason: Debiste defenderlo así cuando te llamaba para que lo rescataras. —Se burló. — ¿Te acuerdas como lo echaste como un perro de su propia casa? Ah, sí, Misaki. —Se volteo a ver a Misaki que lo miraba con cansancio pero sin quitar su expresión seria. —La casa donde está viviendo Asami la puso a tu nombre, se la puedes quitar si quieres. —Volteo su vista hacia la cámara. — Como quiero hacerte sentir miserable. —Le dijo a Asami. —Quiero que veas esto. —Al apretar una tecla un video se dejó ver en la pantalla.
Misaki tenía su rostro escondido en sus brazos, estaba recargado en el sillón.
Misaki: Ya no lo soporto más. —Sollozo, sentía que se ahogaba cada vez que respiraba.
Iason: Oww, pobrecillo. —Misaki brinco al escuchar su voz, tarde noto que se encontraba rodeado por los hombres de Iason, se limpió las lágrimas.
Misaki: Lárgate. —Le aventó un adorno de la mesa. —Sal de mi casa.
Iason: Lo hare, pero tu vienes conmigo. —Lo jalo de la mano para levantarlo.
Misaki: ¡No! ¡Suéltame!—Comenzó a defenderse. — ¡No me toques!—Iason lo tomo de ambas manos. — ¡No! ¡Déjame en paz! ¡Suéltame!
Iason: Inyéctenlo. —Misaki trato de zafarse, tres hombres lo tomaron con fuerza, mientras que otro preparaba el calmante.
Misaki: ¡No! ¡No! ¡No! ¡Por favor! ¡Ryuichi!—Su grito se escuchó desgarrador. — ¡Ryuichi! No dejes que me inyecten ¡Por favor!—Sollozo. — ¡No! ¡Suéltenme! —Por más fuerza que hacia no podía zafar sus brazos. — ¡Ryuichi ayúdame! ¡Mi amor ayúdame!—Los hombres lo inmovilizaron de un brazo. — ¡Mi amor! ¡No lo permitas Ryuichi!—Cada palabra que decía terminaba en un sollozo, al sentir el pinchazo en su brazo supo que nadie iría por él. —No…—Poco a poco el calmante empezó a recorrer su sistema, sus ojos los comenzó a sentir pesados. —…Mi amor…Ryuichi. —Lentamente comenzó a dormirse. —Ryuichi…
Los presentes al ver el video no sabían que hacer, Shinnosuke tenía lagrimas que no dejaban de salir, Asami estaba agitado al escuchar los gritos de Misaki, cerro con fuerza los ojos cada vez que escuchaba su nombre ser gritado con esperanza.
Al acabar de nuevo se pudo ver en la pantalla a Iason y Misaki, Misaki se encontraba volteado para que no lo vieran pero era inútil, todos lo vieron con lágrimas, tenía apretados sus labios para que no le escucharan llorar, se percataron que Misaki tenía marcas rojas en la muñecas por los grilletes que tenía.
Feilong: ¿T-Todo este tiempo tenías a Misaki contigo?
Iason: Por supuesto que sí, Misaki ¿Sabes lo que pasa cuando quieres exportar tu mercancía pero le estorbas a la competencia?
Misaki: No, y me importa una mierda. —Sorbió por la nariz, Iason hizo una mueca.
Iason: Entonces ve esto, entérate como Asami, Feilong y Mikhail retiran a la competencia, esto fue hace unos cinco años. —Su mirada se volvió seria. — Hubo muchas disputas entre estos tres pero cuando se trata de quitar a alguien son buenos para juntarse. —Puso un video para que Misaki y los demás en la sala lo vieran, la pantalla se dividió en dos, una donde solo apuntaba a la cara de Misaki y otra donde se mostraba el video, tomo con fuerza la cara de Misaki para que lo viera a los ojos. —A esos malditos bastardos tal vez no les suene el nombre de Iason Mink, bueno entonces recordara mi nombre clave. —Volteo a la cámara con una sonrisa. —Recuerden que le mandaron el día de su aniversario de bodas y en el cumpleaños de su hijo mayor a ese que hacían llamar Blondie.
Mikhail cerró los ojos con frustración mientras apretaba la mandíbula, ahora recordaba perfectamente lo que habían hecho, Asami maldijo varias veces, la había cagado al no recordar ese nombre, Feilong se cubrió la boca con ambas manos para ocultar sus jadeos de pánico.
Akihiko: ¿A qué putas se refiere?—Se dirigió a Asami. — ¿Qué mierdas le hicieron para que Misaki tenga que pagar por sus estupideces?
Iason: Debería agradecer a Misaki, Akihiko, gracias a el Takaba ni Yong están en su lugar, mi plan primero fue secuestrar a Takaba pero pues que suerte que Misaki y Asami se hayan enamorado ¿No?
Akihiko: ¿Y por qué no te llevas a estos idiotas en vez de personas inocentes?
Iason: Porque ellos también se metieron con personas inocentes, ojo por ojo. —Hizo correr el video que había puesto no dejo que Misaki dejara de verlo. —Te presento a mi esposo Riki y a mis dos hijos.
Al comenzar el video se escucharon gritos infantiles llamando a su madre, Riki se encontraba bastante golpeado y lo mantenían hincado pero no dejaba de sonreír a sus hijos, los niños se veían de 5 a 7 años, ambos tenían su cabellera clara y eran de piel blanca, idénticos a su padre pero con el color de ojos de Riki, cualquiera que viera a los niños moriría por abrazarlos y cuidarlos toda su vida, eran la imagen viva de la inocencia y ternura.
Riki: Todo estará bien mis amores, papá vendrá por nosotros. —Había tres sicarios con ellos, uno que lo tenía amarrado de las manos y muy bien agarrado de los cabellos negros, los otros dos tenían a los niños en sus brazos, atrás de ellos un poco más alejados se encontraba Feilong, Asami, y Mikhail, este último se encontraba compartiendo cigarrillos con los otros dos, se encontraban expectantes por lo que iba a pasar.
— ¡Mamá!—El niño que se veía más mayor pataleaba contra el cuerpo que lo mantenía preso.
— ¡Mami! ¡Mamita!—Se encontraba estirando sus brazos hacia Riki, a ambos se les escuchaba la garganta ya desgarrada por el llanto que los consumían, ellos lo único que veían era a su madre golpeada, imagen que ningún niño soportaría.
Riki sabía que ya no saldrían de esa situación, lo único que podía hacer era sonreír a sus hijos y decirles que todo estaría bien, los niños no dejaban de gritar ni llorar.
—Los señores nos encargaron que te dijéramos, Blondie. —Hablo el que tenía a Riki. —Que esto te pasa por no hacer caso a las dos advertencias que te dieron, te metiste en la ruta equivocada.
— ¡Mamá!—El mayor hipaba al ver a su madre con un cuchillo en la garganta.
— ¡Mamá!—Gritaron con fuerza al ver como el hombre pasaba con rapidez el cuchillo atravesó de la garganta, llenando de inmediato el piso con sangre.
—No te preocupes. —Le dijo al oído el hombre que tenía al niño menor. —Ahora mismo veras a tu madre.
— ¡Mama! ¡Mamita!—Ambos lloraban a Riki que se encontraba ya en el piso, desangrado. — ¡Mami!
Ambos hombres cargaron a los niños en uno de sus brazos y con la mano que tenían libre la pusieron en el cuello de los menores, al escucharse un crujido Misaki grito, notaron como la expresión de Misaki se distorsiono a uno de completo terror, todos en la sala se quedaron pasmados, Kaoruko se había desmayado fue socorrida por Akihiko, Shinnosuke y Ruruka estaban en lágrimas.
Misaki: ¡NO!—Sollozo. — ¡NO!—Su voz estaba temblorosa. — ¡Son unas mierdas! ¡MATARON A SUS HIJOS! —Se lamentó mientras agachaba la cabeza al llorar, sus jadeos sacaban el dolor que sentía en el corazón, incluso gritaba al gimotear. — ¡No!—Incluso su le fue la voz, no podía ni siquiera respirar.
Iason: El dolor no ha desaparecido. —Tenía lágrimas en sus ojos. —Y no creo que lo haga, dime Asami ¿Qué hago?
Los tres tenían una cara de total arrepentimiento, se sentían realmente unos malditos, Feilong y Mikhail ahora que tenían a Yong podían entender a Iason por eso no pudieron evitar que las lágrimas los invadieran.
Iason: Cierto, Asami quiero darte una última sorpresa. —Se limpió con un pañuelo mientras hacia una seña a alguien, entraron dos hombres, uno con bata y otro le ayudaba con su equipo. —Creo que Misaki no sabía tampoco de esto.
Misaki: ¿A qué te refieres?—Se comenzó a poner nervioso cuando el doctor puso gel en su vientre.
Iason: Que a lo mejor ya estabas embarazado cuando te traje aquí o tal vez no tengas nada, quien sabe, todo depende de la calidad de semilla de Asami.
Misaki: E-Eso es imposible, no he tenido síntomas. —Veía atento la pantalla.
Iason: Obviamente, al encontrarte en una situación de riesgo tu cuerpo se adaptara a la situación, aunque no sé, te he alimentado, vestido y bañado todo este tiempo.
Misaki: A base de amenazas. —Se quedó callado al notar dos manchas en su útero, de inmediato se empezaron a escuchar pequeños latidos. —No…
—Son gemelos señor, tienen 8 semanas. —Termino rápido su trabajo y se fue enseguida junto con los demás guardias que se encontraban en ese lugar, se fueron lo más lejos que pudieron.
Iason: Premio triple, es perfecto, dale las gracias Feilong, ya no iré por Yong.
Asami: No, no, por favor, déjalo ir, por favor. —Dejo que las lágrimas cayeron por sus mejillas. —Déjalo, mátame, has lo que quieras conmigo pero déjalo en paz.
Iason: Esto es para que aprendan que cada acción buena o mala tiene consecuencias. —Volteo a ver a Misaki, se encontraba pasmado. — ¿Lo entiendes verdad?—Misaki agacho la cabeza mientras cerraba los ojos, irónicamente se sentía al igual que el joven del video, resignado, siempre pagaban justos por pecadores.
Mikhail: Déjalo, no te detendré si me matas, te lo juro.
Iason: No, esto es lo justo, Misaki creo que yo si te daré la oportunidad de despedirte, hazlo. —Misaki volteo a hacia la cámara, su vista estaba hacía en frente, Asami podía sentir que lo veía como si estuviera ahí con él, sus ojos trataban de retener las lágrimas pero eso solo hacía que sus ojos se pusieran rojos, el verde era lo que resaltaba a pesar los múltiples golpes que le había dado Shizuku, sus labios se encontraban rojos por los golpes y por las mordidas que se había hecho al sentir ansiedad, Iason se acercó y saco una daga que tenía en uno de los cajones.
Asami: ¡No! ¡Iason! ¡NO LO HAGAS! ¡NO!—Apuñalo sin dudarlo a Misaki en la parte alta de su abdomen, eso le daría tiempo para despedirse.
Misaki: ¡Ah!—Su expresión era de completo dolor, gimió al sentir ardor en sus entrañas.
Iason: Despídete. —Siseo, Misaki respiraba con fuerza, gimoteaba de dolor.
Misaki: A…—Tomo fuerzas de donde pudo. —A-A
Asami: Mi amor, aquí estoy, por favor, resiste, no te despidas, iremos por ti. —Los guardias que encontraban ocultos estaban a nada de encontrar la ubicación de Misaki, se habían puesto en marcha cuando el recibió el primer mensaje de Iason. — Aquí estoy mi vida, dime.
Misaki: Akihiko. —Asami se desconcertó, Akihiko se puso en su lugar. —…Gracias por creer en mí hasta el final. —Su expresión era de tristeza, era la imagen más tristemente bella que habían visto.
Akihiko: Misaki, tranquilo, dímelo cuando estés aquí, frente a mí, no a través de una pantalla. —Misaki negó con resignación.
Misaki: Perdóname, fue también mi culpa cuando me terminaste, una relación es de dos, no de uno, te deje toda la carga a ti.
Akihiko: Misaki no, por favor. —Se lamentó, no se quiso quitar las lágrimas, sentía que en cualquier momento que cerrara los ojos, la imagen de Misaki ya no iba a estar.
Misaki: Fuiste y serás siempre mi primer amor, gracias por amarme como lo hiciste, soy una mala persona al hacer que todos te ocultaran un secreto.
Akihiko: Misaki, vas a estar bien…
Misaki: Pudimos haber sido una hermosa familia, hubiera preferido mil veces eso, cuando nos dejamos yo…yo estaba embarazado.
Akihiko: ¿Qué?
Misaki: Tenia a tu hijo en mi vientre, no lo supe en su momento, pero como ya te imaginaras soy Doncel. —Su voz sonó temblorosa por el llanto. —Íbamos a hacer padres, pero mi embarazo no se logró, me entere de mi situación cuando tuve un aborto espontaneo.
Akihiko: No, Misaki, perdóname. —Ambos tenían lágrimas, la tristeza de un futuro que no pudieron lograr. —Fue mi culpa que todo esto pasara.
Misaki: No es culpa nuestra. —Le sonrió triste. —Gracias, gracias a ti pude ser madre por unos momentos.
Akihiko: Pero de nuevo lo eres, vendrás a casa, todo estará bien, yo te apoyare siempre, tendrás a la familia que siempre deseaste y eso es lo que importa y ya. —Su dolor emocional era tal que no le importo que lo vieran llorar como un bebé.
Misaki:… Tal vez deje de amarte, pero no de quererte, gracias por enseñarme amar, gracias por amarme.
Akihiko: Misaki...
Misaki: Cuida a Takaba, cuídate mucho por favor, no dejes solo a mi hermano. —Comenzó a cerrar los ojos poco a poco, luchaba por mantenerse despierto.
Haruhiko: ¡Misaki!
Misaki: Y ustedes, Feilong y Mikhail, cuiden a Yong así como no pudo cuidar Iason a sus hijos por culpa de ustedes, no lo merecen, no merecen tener a Yong como su hijo. —Su mirada poco a poco se opacaba, su cabeza iba cayendo. —Asami.
Asami: Mi amor, por favor resiste, iremos por ti.
Misaki: Cuida a Yong por mí y perdón por ser la persona que más odias. —Ya tenía sus ojos cerrados pero con un último suspiro se despidió. —Te amo. —Su cabeza cayo sin fuerza, Iason le quito los grilletes de sus manos.
Todos en la sala se encontraban llorando, no podían con eso, todo parecía irreal, pero no, era la más pura realidad.
Iason: Hubiera dado lo que sea por despedirme de mi esposo.
Asami: Te matare. —Tenía una mezcla de emociones, ira, miedo, tristeza, desesperación, resentimiento hacia él.
Iason: No, ustedes me mataron el día que me mataron a mi familia. —Saco un control remoto de su bolsillo y lo apretó, un cronometro se dejó ver en la pantalla con exactamente 60 segundos. —Ahora ya puedo ir a verlos. —Tomo la pistola que se hallaba debajo de la almohada donde ya descansaba Misaki, las sábanas blancas ya eran rojas por la sangre, y sin dudar un segundo puso la boquilla de la pistola en su sien, para luego dispararse, su cuerpo cayó como un costal al suelo, la habitación estaba en completo silencio.
—Señor, lo encontramos, están en las lejanías de Siberia, aquí están las coordenadas. —La cámara que grababa la habitación ahora había cambiado a una que grababa desde lejos una especie de fábrica abandonada. —En ese lugar están. —Señalo la pantalla, el cronometro llego a ceros y pudieron ver como todo se volvía rojo, el lugar había explotado.
Asami se dejó caer de rodillas, con terror se dio cuenta que ya no podía hacer nada, había perdido todo en menos de 60 segundos.
Akihiko: Jamás mereciste tener a Misaki. —Salió de ahí para ir al jardín, se hinco pues sus piernas ya no lo sostendrían más, Ruruka lo alcanzo, lo abrazo con fuerza, ambos lamentaban la perdida, todos lo hacían en esa casa, Kirishima se encontraba llorando también, estaba recargado en una columna.
Shinnosuke era abrazado por su esposo, todos necesitaban un hombro en que apoyarse, Feilong y Mikhail pusieron de rodillas para alcanzar a Asami, ambos lo abrazaron parecía que se derrumbaría en cualquier momento, y así fue, no pudo dejar de llorar, por primera vez se dejó consumir por la tristeza, todo el mundo lo sintió gris.
Nada había quedado en pie en esa fábrica, todo se había derrumbado, los cuerpos ahí se hicieron cenizas que volaban junto con el viento.
En honor a Misaki habían enterrado su traje de novio, su argolla de matrimonio y su anillo de compromiso, estaban en un cementerio, en la lápida se leía su nombre, fecha de nacimiento y muerte, con la frase “Amado hermano, amigo y confidente” Takahiro estaba desecho, los demás se entristecían al escucharlo llorar, las rosas blancas rodeaban la lápida.
Poco a poco la gente comenzó irse del lugar, Takahiro no quería ver a nadie, a su parecer todos eran culpables por la muerte de su hermano, le agradeció a Akihiko y Ruruka por siempre creer en su hermano, Minami trataba de ser el pilar de su esposo, desde la mañana que había sido el funeral no se había despagado de él.
El último en irse fue Asami, no dejaba de ver la lápida, como si entre más viera Misaki iba a llegar a tocarle el hombro, llamándolo para que se fueran a casa, en su mano izquierda, específicamente en su dedo anular estaba la argolla de matrimonio que desde ese día nunca más seria quitada.
Mikhail: Asami, ya es tarde, debemos irnos, está a punto de anochecer.
Asami: No, le prometí a Misaki que jamás dejaría de esperarlo.
Mikhail: Amigo…—Apoyo su mano en el hombro de Asami.
Asami: Váyanse ustedes, Yong no debe enfermarse, después iré, déjame estar unos momentos más aquí. —Mikhail lo dejo solo, pero no se alejó. —Te espero en nuestro hogar mi amor. —Las lágrimas comenzaron a rodar por sus mejillas. —Cuidare a nuestros hijos por las noches para que tú descanses después de jugar todo el día con ellos. —Trago saliva. —Cada fin de semana iremos a lugares diferentes para que se diviertan, irán a las mejores escuelas y te prometo que nada les va a faltar, sé que serás una buena madre. —Su voz se volvió llorosa. —No llegues tarde a nuestra boda.
Se alejó con lentitud, Kirishima lo esperaba de pie junto a uno de sus autos, el dolor que le envolvía no le dejaba siquiera respirar, no tenía sentido vivir, pero se abstuvo, pues si moría Misaki ya no iba a hacer amado como él lo hacía con la intensidad que sentía, tal y como lo prometió se había alejado del bajo mundo y comenzó a cuidarse, por él lo haría, Misaki lo regañaría si se dejara descuidar, además le había encargado cuidar a Yong, recordaría cada momento con él pues era lo único que lo hacía sentir vivo. A veces es duro, pero hay que volver…
Fin
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