Pov Autora
Ya todos los grupos se encontraban en la ciudad, obviamente cada uno haciendo lo que se le fue designado. Estuvieron así casi todo el día y hubieran seguido, pero ya se estaba oscureciendo. El primer grupo en bajar fue el de Sanji, ya que este tenía que preparar la cena, pero igual se demoraron en llegar, ya que cierto espadachín se perdía cada 5 minutos.
Mientras que el de Nami, el segundo en bajar, llego rápidamente al barco, con bolsas llenas de ropa. Casi todas siendo cargadas por Chopper y Jean Bart, los pobres no daban más, pero al subir a la cubierta, vieron algo que les sorprendido… A lo que justo llego el grupo del cocinero, mientras que el anterior todavía encontraba en shock…
--------Horas antes en el Thousand Sunny --------
-Y bien, ¿De qué quieren hablar?- pregunto indiferente el mayor, a lo que ambos hermanos intercambiaron una mirada, por lo que el rubio se aclaró la garganta.
-Es sobre… tu relación con la de mi hermanito- dijo finalmente.
-¿Qué tiene?- Los dos hermanos se estaban controlando para no terminar rompiéndole la cara al ojeroso, quien les miraba totalmente serio, el solo quería que esto terminara de una vez para ir a ver a su Luffy.
-Bueno… -continuo el pecoso -Y supongo que tú sabes que si le haces algo a Luffy…- cada vez salía más fuego de su cuerpo –Te mataremos- el ojigris ni se inmuto, es más, una sonrisa burlona se pintó en su cara. Se le había ocurrido la idea perfecta para su pequeña “venganza”.
-Te refieres a tener sexo ¿no? Pues que pena, porque ya es tarde- Law trataba de no soltar una carcajada debido a como reaccionaron ante lo que dijo –Debieron de haberle escuchado, no saben lo…
-¡¡DE ESTA NO SALES VIVO!!- grito furioso el pecoso, elevando su puño envuelto en llamas.
-¿Acaso quieren que le diga a Luffy-ya que intentaron matarme en su ausencia?- pregunto burlón el mayor, a lo que el azabache bajo su puño mientras le miraba con odio, con ganas te hacerle sufrir como a nadie y si este le hacía sentir mucha pena acabaría con su miserable vida...
-¿Acaso Luffy no se fue enojado por tu culpa?- le recriminó el rubio con una mirada victoriosa mientras se ajustaba los guantes –Así que no creo que le importe que desaparezcas- dijo de una manera tan sádica, que se le puso la piel de gallina al menor de los morenos.
-Inténtalo- dijo mientras le levantaba el dedo del medio, causando más molestia a los hermanos.
--------En algún lugar del nuevo mundo--------
Un peli rojo se encontraba en la punta del barco envuelto en llamas mientras gritabas cosas, a lo que sus nakamas le ignoraban y seguían con lo suyo.
-¡¡LUFFY!! ¡¡TE SALVARE…SALVAREMOS DE ESE IMBECIL QUE DEBIO DE HABERTE MANIPOLADO PSICOLOGIMENTE!! ¡¡MI HIJO adoptivo NO ES TAN DEBIL COMO PARA DEJAR QUE LE ABUSEN!! ¡¡MALDITO BASTARDO!!-
-Oye, ya bájate de ahí. Pareces un idiota gritando a la nada como si él estuviera aquí, además vamos a llegar a una isla donde- Ben estaba a punto de subir y darle un gran golpe con tal que se calle, pero para su mala suerte él era su capitán.
-¡¡NI DE BROMA!! ¡¡DEBO ENVIARLE MIS ENERGIAS A Luffy Y MI ENERGIA NEGATIVA AL MALDITO DEL CIRUJANO DE LA MUERTE!!- dijo mientras levantaba su único brazo, mientras que su nakama solo suspiro pesadamente.
--------Volviendo con Law, Ace y Sabo--------
Pero antes de que ambos hermanos le atacaran, Law se estremece.
-¿Qué fue eso?- pregunto confundido el pecoso mientras miraba al otro moreno, mientras que el rubio soltó una risita burlona
-De seguro es porque tiene miedo- comento el rubio con un tono de burla, a lo que el susodicho le dedico una mirada de odio.
-Claro que no es eso, sentí como alguien en algún lugar del mundo con el poder de un younko viniera a matarme- respondió el ojeroso mirando detrás de él, confundido. Para después volver a mirarles.
-Los únicos que te mataran seremos nos…- pero no pudo terminar la frase debido a que se escuchó una explosión no muy lejos del lugar donde se encontraban, por lo que al mirar el lugar de la explosión se percataron que fue por donde se fue Luffy, provocando preocupación en los tres.
Rápidamente se bajaron del barco y comenzaron a correr al susodicho lugar.
-Malditos… si le pasa algo a Luffy-ya, ¡me va importar un carajo que sean sus hermanos!- y dicho esto desapareció, ya que utilizo su habilidad para llegar al lugar más rápido. Dejando atrás a los hermanos que se arrepentían de haber dejado solo a su hermanito.
Al llegar Law no hayo más que cuerpos tirados en el piso, algunos inconscientes, otros muertos. Pero no había rastros del azabache, pero esto no logro calmar la preocupación del moreno. Fue entonces que se dio cuenta de un sombrero de paja cerca de unos tipos, rápidamente se acercó y lo cogió, sin duda era su sombrero. Poco después llegaron el pecoso y el rubio.
-¿Qué paso aquí?-pregunto el moreno mientras se acercaba al ojeroso junto al ojiazul, el ojigris estaba de espaldas mientras se aferraba de aquel sombrero con tristeza.
-Hey ¿Qué tienes?- a medida que se iban acercando a Law, pudieron darse cuenta que estaba un poco inquieto, pero no tenían idea el porqué, hasta que este se dio vuelta. Dando a ver el sombrero de su hermano, el tesoro se esté.
-¿Por qué tienes el sombrero de Luffy?- el pecoso estaba confundido, pero en cambio su hermano capto de inmediato el mensaje, quedando en shock.
-Porque estaba tirado en el suelo- el ojeroso se sentía de lo peor, ya que por su culpa a Luffy le había pasado algo. O al menos eso es lo que intuyo el mayor, ya que el susodicho nunca dejaría tirado su sombrero…
-Oh mierda…
--------Minutos antes--------
La pequeña peli blanca quedo sorprendida al percatarse que fue nuevamente salvada, pero esta vez por una mujer, la cual estaba encapuchada, dejando solo a la vista una parte de su cara. Esta apenas se puso al frente de ellos, con un golpe rápido mando a volar a todos. Para después darse la vuelta y observar a Luffy, quien yacía inconsciente en el suelo mientras se desangraba.
La misteriosa mujer estuvo a punto de romper en llanto al ver el estado tan lamentable del azabache, se sentía culpable al no llegar a tiempo para evitar todo esto. Mientras que uno de los piratas saco una Bazooka, teniendo de objetivo a la mujer, pero esta pasó de sentirse culpable a estar totalmente furiosa. Así que cuando el pirata disparo, la susodicha hiso que el misil cayera a otro lado, para después derivar a todos usando sus propias armas contra ellos.
Después de acabar con todos, se acercó nuevamente a donde se encontraba la niña y el moreno. Su angustia volvió más fuerte que antes, así que tomo con delicadeza en brazos a Luffy, para después indicarle a la ojimorado que le siguiera. Como estaban cerca de la costa, no les costó mucho llegar al barco de los revolucionarios que transportaba a la misteriosa mujer. La mujer dejo al azabache en la enfermería del barco seguida de la pequeña, ya después de salir del lugar la mujer, ya más tranquila, comenzó a hacerle unas preguntas a la niña, pero esta se le adelanto.
-¿Quién eres tú? ¿Por qué me salvaste? ¿Eres amiga de oni-san?- la menor casi se queda sin aire por hablar muy rápido, pero pese a esto la mayor logro entenderle.
-Me llamo Junko, soy una revolucionaria. Te salve porque sería muy inhumano de mi parte no ayudarte en las condiciones que se encontraban- respondió calmadamente mientras se hincaba a la estatura de la niña -¿Y cómo te llamas?-
-Tengoku Haru, pero y ¿la última pregunta?- Junko solo rio suavemente.
-Es difícil de explicar, pero en poca palabras somos “familiares”- dicho esto la encapuchada se paró y le tendió la mano a Haru-¿Eres la princesa de la isla no? –La pequeña asintió mientras le tomaba de la mano -Entonces será mejor que te lleve al palacio, tus padres deben de estar muy preocupados- y con esto emprendieron el viaje, el cual no tardo casi nada…
--------No muy lejos de la isla--------
Pov Shirahoshi
¡Qué alegría! Keimi-san nos dijo que la isla que viene se encuentra Luffy-san y ¡ya la puedo ver! Siento como las lágrimas quieren salir de mis ojos por la felicidad que siento. Espero que no se haya estropeado lo que le tengo que mostrar a Luffy-san, después de todo es por esto que principalmente le vengo a ver, además Jimbei-san me dijo que esto es muy importante y necesitamos que Luffy-san nos diga que si lo que está en el papel es verdad. Ya que de ser así, podría haber grandes cambios en el mundo.
Keimi-san también está muy contenta y eso me alegra más aún. Pappaga comenzó a decir que empezaría a diseñar ropa para bebes después de que volvamos a la isla gyojin, también hace unas horas habíamos hablado con mis hermanos a través de un den den mushi, desde hace una semana que no dejan de llamarnos para saber cómo nos encontramos.
Estábamos hablando muy animados, cuando de pronto vimos un barco extraño no muy lejos de nosotros, el cual le seguían otros barcos. Por lo que tuvimos que nadar más rápido para que no nos vieran. Y ya estando lejos de esos barcos, Keimi-san estaba sorprendida.
-¡¿Vieron que en uno de esos barcos había una figura de Luffy-san en la parte delantera?!- me sorprendí, eso quiere decir que ¿Es su barco? O ¿Son sus amigos?
-Que yo sepa Luffy-kun no ha cambiado de barco…- Jimbei-san se quedó un momento pensativo –¿Pero no que Keimi nos había dicho que los peces dijeron que habían visto el barco de Luffy-kun en la isla?- comento mientras miraba a Keimi-san, la cual puso una cara un tanto cómica.
-¡¡Es verdad!!- dijo mientras levantaba las manos, Pappaga-san le regaño mientras pedía disculpas. Jimbei-san solo suspiro y dijo que mejor nos apresuremos. Mientras esquivábamos unas rocas, pude divisar un barco, tenia un sol en la proa…¡¡Es el de Luffy-san!!
-Etto… chicos…- estoy tan nerviosa que apenas puedo hablar, así que solo apunte hacia donde estaba el barco, solo se alegraron aún mas y comenzaron a nadar más rápido, a lo que rápidamente les seguí el paso. Ya casi no falta nada para llegar…
--------Con Junko y Haru--------
Pov Junko
Mientras subíamos rápidamente la colina, que según Haru es donde se encuentra la ciudad, pude divisar que se acercaban unos barcos, bueno son muchos. Solo espero que no sean enemigos de mi hijo… Pero fue entonces que escuche a unas personas no muy lejos de donde nos encontrábamos. Rápidamente nos escondimos en unos arbustos y comencé a examinar con la mirada a los tipos, eran soldados, eso quiere decir que ellos pueden llevar a Haru al palacio.
-Hey Haru, ellos son soldados, de seguro te deben de estar buscando, ve con ellos- ella solo me miro e hiso una mueca de disgusto.
-Pero yo quería pasar más tiempo contigo y si voy con ellos, pensaran que ellos me salvaron cuando en realidad fuiste tú y oni-san…- puso un puchero, lo cual me causo un poco de gracia. Le acaricie el cabello suavemente mientras le miraba.
-Entonces diles la verdad a tus padres- le dije con una sonrisa, ella solo suspiro resignada y se paró para dirigirse hacia los hombres, no sin antes abrazarme y despedirse. Solo le mire desde los arbustos para asegurarme de que está en buenas manos, después de que estuviera muy lejos me dispuse a irme.
Al llegar al barco, fui directamente hacia la enfermería para saber de mi hijo. Al entrar, pude observar que todavía se encontraba durmiendo, no me queda de otra que esperar hasta que despierte. Así que acerque una silla cerca de la camilla para poder estar a su lado, después de tantos años… solo quiero estar con él. Le comenzó a acariciar la mejilla suavemente, mientras que cada vez más le ganaba el sueño, hasta que se quedó completamente dormida…