Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El chico de al lado [SuKook]. por Neverislate

[Reviews - 41]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Lamento haber tardado tanto en actualizar y quiero agradecer a personas como Oh_HunHum [creo que así era el nombre] por estar siempre al pendiente de mi historia. Esto es por ti. [?]

En fin, espero que lo disfruten. ¡A leer!

He estado emocionado todo el día, ansioso por la cita que tendría con mi hermoso vecino. Bueno, no era realmente una cita, pero me gusta hacerme ilusiones yo solo. Ahora estoy fuera de la casa de al lado, fue su madre quien abrió y se sorprendió un poco al verme. Dijo que cuando su hijo le comentó que saldría con el vecino, creyó que era mi hijo, hermano menor o algo similar. Sentí que me miraba con desconfianza, me preguntó mi edad más de una vez, pero creo no ser tan mayor en realidad... Sólo unos... 17 años más que los de su hijo. Y joder, hasta soy mayor que la madre de Jungkook. Debo entenderla, esto es extraño. Pero el pequeño al que esperaba al fin salió. Se veía hermoso como siempre y sólo usaba unos jeans negros ajustados junto con una camiseta holgada. Era simple, pero lucía bien y debo admitir que había adorado aquellos pantalones, eran tan ajustados que los muslos de aquel chico se notaban a la perfección. Creo que son los más perfectos que he visto en mi vida. Él lo es.

Desperté de mis pensamientos cuando la mujer volvió a hablarme y no hice más que asentir a su pregunta, obviamente lo cuidaría, con mi vida si fuese necesario. Aproveché que tenía a Jungkook a mi lado para tomar su mano ya que quería guiarlo lejos de su madre, quien sólo sonreía de forma amplia; supongo que fue buena idea el esforzarme en llevarme bien con ella desde un comienzo. No estaba muy seguro de lo que debía hacer o decir, ni de donde llevarlo, pero sabía que pronto se me ocurriría algo. Sentía que debía impresionarlo, todo debía ser perfecto y claro, no lo haría caminar en nuestra primera ''cita''. Fue por ello que lo guié hasta el auto que estaba estacionado fuera de mi casa y abrí la puerta del copiloto para que él pudiera entrar. Sentía que iba a enloquecer, el rostro del pequeño es casi imposible de descifrar, cómo saber si estoy haciendo las cosas bien. Él no decía ni una sola palabra y creo que ningún gesto apareció en su rostro, estaba en blanco. Pero un milagro ocurrió. Mi misterioso chico sonrió, me sonrió. Lamentablemente, no duró nada ya que en un par de segundos ya estaba dentro del vehículo.

Conduje con cuidado ya que en realidad el silencio no duró mucho y no quería que ocurriera algún accidente. Jungkook era un chico que no paraba de hablar luego de entrar en confianza y eso me gustaba, pues yo era alguien muy callado, para no decir aburrido. Muchas veces me perdí en la conversación, mi vecino cambiaba de tema cada cinco segundos y me sorprendía. Me di cuenta de que él en realidad es alguien que hace de todo. Yo lo considero así. Él baila y canta muy bien, para mí eso es mucho y soy un asco en ambos casos. Sin embargo, debía decir algo, debíamos tener algo en común y de pronto recordé.

— Vaya... Yo no soy muy bueno cantando ni bailando, pero sé rapear y creo que lo hago bien.

— ¿Sí? ¡Eso es genial! También me gusta rapear, aunque no diría que lo hago muy bien... —De pronto se distrajo, fue como si se hubiese quedado congelado mirando hacia el frente y de la nada reaccionó para mirarme con una sonrisa amplia. Creo que nunca me cansaré de ver esa bella sonrisa—. ¿Qué comeremos?

— Ah... ¿Te gustan las hamburguesas?

— Soy vegetariano.

— Ay, este... Amh... ¿Y si come-

— ¡Es broma! —Me interrumpió y comenzó a reír. Joder, su seriedad momentánea me paralizó. Me sentía como un completo idiota—. Me gustan las hamburguesas, no se asuste.

— Aish, este niño. ¿Cómo pudiste hacerle eso a tu hyung, mh? Cómo es posible que un niño me ponga así. Yoongi, tú sí que estás mal —comenté entre risas, tenía la esperanza de haber sido gracioso para el menor. Era nuevo en esto.

Nuestras charlas eran así. Bromas extrañas de vez en cuando y hablábamos sobre nosotros. Pero temí que todo se acabara, pues habíamos llegado al lugar que yo mismo había elegido en mi mente. Estacioné el vehículo fuera del local y esbocé la mejor de mis sonrisas para mi acompañante mientras me quitaba el cinturón de seguridad. — Hemos llegado, mi querido vecinito.

Yoongi quería sonar un poco más agradable para su menor y creyó conseguirlo, pues se ganó una sonrisa de parte de él. Ambos ya estaban fuera del vehículo y caminaban en dirección al restaurante. Todo siguió igual, eran tal vez los típicos amigos comiendo hamburguesas y hablando de cualquier tema, puras tonterías en realidad. Yoongi lo disfrutaba, se sentía en un sueño, pero no lo era y no lo podía creer. ¡Era real! Él, un pedófilo adicto a espiar a su vecino adolescente... Estaba allí, comiendo y hablando junto a su ''amor platónico''. La emoción era demasiado grande. Los típicos trances de Min seguían. Se distraía por todo. Si Jungkook sonreía, miraba a otro lado, lucía serio, arqueaba una ceja, arrugaba la nariz o reía a carcajadas, no importaba lo que hiciera, todo llevaba a Yoongi a una parálisis momentánea. Todo era muy agradable y por primera vez para el de ojos felinos, la comida era lo que menos importaba. Casi ni comió, a decir verdad, estaba más concentrado en contemplar el precioso rostro de su menor. Pero el tiempo corría y en un abrir y cerrar de ojos ya habían pasado dos horas desde que ambos salieron de sus casas. Pronto anochecería, que era lo peor y Suga se vio obligado a pagar la cuenta antes de lo que hubiese deseado.

Sin embargo, decidieron salir a pasear un momento antes de regresar a sus casas; de todas maneras aún no oscurecía el cielo. Estaban tomados de la mano mientras caminaban, ninguno de los dos se percató de en qué momento ocurrió, sólo sucedió y Suga irradiaba felicidad.

— Jungkook...

— ¿Sí?

— Hay un parque por aquí cerca, ¿te parece si vamos allí? Luego te llevaré a tu casa, ¿bueno?

— Me parece bien, hyung.

Tras oír la respuesta de mi pequeño, entrelacé los dedos de nuestras manos. No podía creer que él aún no deshacía dicha unión... ¿Significará algo? Sigo creyendo que me estoy haciendo falsas ilusiones, pero no lo puedo evitar. Es tan hermoso, demonios. Seguía estando algo distraído, pero no del todo ya que muy pronto llegamos al parque que le había mencionado. Era un lugar que me gustaba demasiado en realidad, gran parte de mi tiempo me lo pasaba allí, especialmente a esta hora, pero sólo cuando Jungkook no estaba en casa; espiarlo era primordial. A veces creía que me sudaban las manos y sentía pánico por ello, no quería que mi vecino recordara nuestra primera cita sólo por mis asquerosas manos sudorosas, pero creo que sólo era mi mente.

La entretenida plática continuaba, pero de pronto algo inesperado surgió y una sensación extraña apareció en mí. Era algo totalmente nuevo, pero no me gustaba como el resto de cosas nuevas que hoy habían ocurrido. Ahora entiendo cuando dicen que tres son multitud. ¿Por qué? ¡Joder, por qué! Un chico estaba allí, parado con una sonrisa de idiota frente a nosotros. Justo hoy debía pasar por este mismo parque... Nunca antes lo había visto en mi vida, por eso lo digo. Pareciera que es amigo de Jungkook, porque yo no lo recuerdo. Acerté. Ese mocoso que nos interrumpió era amigo de mi acompañante. Simplemente... Me dolió que Jungkook soltara mi mano cuando él apareció en nuestro camino.

— ¡Jungkookie! —exclamó aquel chico de mejillas algo gorditas.

— ¡Chimchim hyung! ¿Qué hace por aquí, eh? ¿Acaso me seguía?

— Por supuesto, debo cuidar de mi pequeño bebé.

Y fue eso. Tres simples palabras fueron las que consiguieron que todas mis ilusiones se esfumaran. ''Mi pequeño bebé''. ¿Quién era él? ¿Acaso son pareja? ¡Qué rayos son! No lo podía creer. Me sentía como un completo imbécil. ¿O tal vez los celos me estaban cegando? Eso era lo peor, sólo soy el vecino y no tengo ningún derecho de sentir celos. Ojalá que sólo haya mal interpretado, pero cada vez que trato de despertar de mi trance están ellos dos jugando, riendo o abrazándose. Desearía ser yo quien lo abrazara de esa manera, pero no. Sólo soy el estúpido vecino pedófilo y en la friendzone. Me siento algo lastimado, pero no sé por qué y no puedo enojarme con Jungkook, sería muy tonto... Aunque siento que odio a ese ''Chimchim''. De vez en cuando prestaba atención en lo que hacían o decían; puras tonterías. Eran unos niños... Aunque a pesar de la estatura del recién llegado, luce mayor que mi vecino. Pasó tal vez media hora. Caminamos los tres por el parque, pero yo sólo los seguía desde atrás. Creo que nunca antes me sentí más incómodo, pero creo que mi tortura al fin había acabado.

— Jungkookie, debo marcharme, me esperan en casa.

— Oh, entonces será mejor que corra.

— Amh... Ha sido un gusto —dijo dirigiéndose a mí y me extendió una mano, a lo que respondí estrechándola con bastante firmeza y/o brusquedad.

— Ajá.

 

***

 

Con Jungkook todo se volvió algo incómodo luego. Se había hecho tarde, pero parecía que ya no teníamos temas de conversación. Era eso o estaba tan encabronado que ya no podía pensar con claridad. Pero de todas maneras no me duró, podía sentir los tímidos roces de la mano de mi adverso con la mía y me decidí por tomarla, entrelazando nuestros dedos al mismo tiempo que una sonrisa volvía a aparecer en mis labios. Aquel chico de ojos sombríos estaba sacando una nueva faceta conmigo, una que nunca había visto o imaginado, aunque tal vez sí había soñado con algo así. Se fue volviendo más cariñoso, más tierno. Ahora no reía a carcajadas, pero solía sonreír dulcemente para mí cada vez que lo miraba y ya saben, yo lo miro todo el tiempo. Quizá también se sentía incómodo y ya no quiere que esté molesto. O tal vez sabe lo que siento por él y es por eso que juega con mis sentimientos, quizá disfruta de ilusionarme. Sea lo que sea, no me molesta. Esto es lo más hermoso que me ha pasado, pero ya estábamos dentro de mi auto listos para partir. Un par de minutos bastaron para que llegáramos a la calle en la que vivíamos y nos quedamos dentro del vehículo, estacionados fuera de mi hogar mientras nos mirábamos. Ya ninguno tenía el cinturón puesto y pude notar un ligero rubor en las mejillas de mi adverso, creo que nunca antes lo había visto tan hermoso. Él enamora sin necesidad de hacer o decir algo... Me tiene loco. Lentamente me fui aproximando a su rostro y él no retrocedió, permanecía quieto mientras me miraba, yo me perdí en sus ojos. Nuestras narices se rozaban y llevé una de mis manos a su mejilla, acariciando la zona con el pulgar sin deshacer nuestro contacto visual. No lo quería incomodar, pero... ¿por qué no hacía o decía nada?

— Yoongi hyung... Lamento lo de recién...

— Tranquilo, bebé. Me divertí hoy, pero... ¿Se repetirá?

— ¿Repetirse?

— Sí... ¿No quieres salir conmigo de nuevo? —Y de pronto el nerviosismo me invadió nuevamente.

— Oh, claro, tal vez... Me divertí también. —Ese lado serio suyo estaba volviendo y se fue distanciando de mi rostro con algo de lentitud, planeando bajarse del auto. Pero no, no lo podía permitir y al tomarlo del brazo, lo detuve.

— ¿Te gustan las películas?

— Así es, pero...

— ¿Pero qué?

— Nada. Sólo que me debe una cosa.

— Entonces vayamos a ver una otro día, ¿bueno? Es cierto... ¿Qué tal si aceptas salir conmigo de nuevo y te doy lo que quieras, mh? —Rápidamente dejé un beso en su mejilla y lo solté para poder bajarme del auto, así como él lo hizo. Prácticamente corrí hacia él y lo acompañé hasta la casa de al lado a paso lento—. Podemos planificarlo desde la ventana, ¿no?

— ¿La ventana? Oh, claro... Pero, trate de no mirarme mucho esta noche. Le cobraré mi deseo, eso no lo dude. —Sabía que bromeaba, su rostro y risa me lo decían, pero sentí tanta vergüenza ante la idea de que lo haya descubierto que puse tal vez la cara de imbécil más grande del mundo. Luego sólo revolví su cabello y lo dejé ir.

— ¡Buenas noches, bebé! —Exclamé antes de que ingresara a su casa y al fin me dirigí a la mía, sonriendo como estúpido.

 

***

 

Hoy decidí no espiarlo. Puede que haya sido porque él mismo me lo ''pidió'' hace unos minutos, pero eso es lo que menos importa. Cuando entré a mi casa fui a bañarme de inmediato y al ir a mi habitación pude ver que el cuarto de Jungkook tenía las luces apagadas. Sólo cerré la cortina y me acosté sólo con ropa interior y una camiseta holgada, como de costumbre. Eran ya las doce de la noche ya que me tardo siglos en la ducha, pero no me interesaba, quería contarle todo a mi mejor amigo. De inmediato tomé mi celular y llamé a Hoseok, él contestó luego de cinco intentos y por su voz pude notar que lo había despertado.

— ¡Tuve una cita con él!

— ¿Sabes qué hora es, Suga? ¡Déjame dormir, joder! Me cuentas mañana.

— ¡Espera, espera! Creo que saldremos de nuevo... No puedo esperar a mañana para decirte.

— Bien, hazlo. Pero que sea rápido.

— Hoy todo fue perfecto, a excepción de un tipo que se apareció.

— ¿Un tipo, Suga?

— El amigo.

— No te pongas celoso antes de tiempo o lo espantarás.

— Tienes razón... Gracias, Hobi.

— Buenas noches, Yoongi.

— Buenas noches.

 

Notas finales:

¿Les gustó? Díganme que sí, porfis[?]. No, en serio, dejen sus reviews y nos vemos en el siguiente capítulo~.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).