Esa noche tuvieron una exquisita cena, cortesía de la dueña del Talon, algunos lo hacían tranquilamente mientras mantenían una animada conversación sobre lo que habían hecho y otros tenían prisa por terminar, sobretodo Draco que estaba ansioso por empezar los preparativos de lo que sería una gran noche, pues ya se imaginaba al nuevo entregándosele bajo su control y eso le encendía. Así que terminó de cenar y se fue rápidamente por el pasadizo secreto más cercano para ultimar los preparativos en la habitación secreta antes de ir a buscar al que sería su amante.
- Que bien he cenado, ¿y tú? - dijo Draco como si nada mientras fingía estar lleno nada más llegar a la habitación
- ¡Puff..!, no sabes cuanto, pero ya se me está pasando - respondió Ron al empezar a sentir que no estaba tan lleno como antes
- Por cierto.., no, no creo que te interese - iba a decirle Draco, pero cambió de idea de repente, logrando atraer su atención
- ¿El que? - le preguntó Ron sin saber que la curiosidad mató al gato
- ¿Podrías guardarme un secreto? - le preguntó Draco, fingiendo preocupación por guardar ese secreto cuando en realidad solo quería follarle
- ¿Que secreto? - le preguntó Ron intrigado
- ¡Ya lo verás..!, pero solo si confías en mi, ¿confías en mi - le dijo seductoramente Draco mientras le ofrecía la mano
Y salieron de allí para dirigirse a la habitación secreta por el camino más largo que había y sin darse cuenta de que Harry y los gemelos estaban esperando para meterse a espiar en su habitación nada más verles bajar las escaleras o eso pensaban, pues lo que no sabían era que Draco sabía de sus planes, pero poco le importaba, pues tenía que llevarle através de los pasadizos y con los ojos vendados al lugar en el que por fin lo haría suyo.
- ¿Donde estoy que es este sitio? - pensó Ronald asustado al notar que tocaba algo un tanto líquido, pues su compañero le había vendado los ojos con un hermoso pañuelo negro, impidiéndole ver que se encontraban en un oscuro y largo laberinto subterráneo, el cual parecía conducir a ninguna parte
- Ya estamos cerca... - dijo Draco como si nada mientras le llevaba por el camino más largo para ganar tiempo a la vez que provocaba que se asustara con cada paso que daban por aquel misterioso lugar
- ¿A donde vamos? - le preguntó Ronald asustado al sentir la más que fría pared mientras apollaba su mano para guiarse
- ¡Shh..!, ya lo verás queridito, ya lo verás... - le dijo Draco mientras esbozaba una maligna sonrisa la cual dejaba ver sus siniestras intenciones
Y sin decir nada más, siguió guiándole através del oscuro túnel subterráneo hasta llegar a la habitación secreta. Mientras tanto Harry y los gemelos empezaron a revolver entre las cosas del nuevo para buscar alguna pista que les indicara la forma de averiguar la causa de su parecido con los pícaros gemelos, los cuales estaban tan lejos de saber la verdad como de saber que Draco tenía un as escondido en la manga, un s que le daría la vuelta al plan en cuestión de segundos, haciéndolo más interesante de lo que era.
- ¡Guau..! esto es impresionante - se dijo Ron maravillodo al contemplar la hermosa y recién decorada sala para que pareciese más lujosa que antes
- ¿Te gusta? - le preguntó seductoramente Draco al oído a la vez que le restregaba su pequeño bulto en un más que erótico movimiento de pelvis
- Si.. - respondió Ronald sin poder dejar de contemplar anonadado aquel hermoso lugar, a la vez que sentía el contacto físico de su sensual compañero de habitación
- Bien.., por que esto te gustará más - siguió susurrándole Draco al oído
Y sin previo aviso le agarró por la nuca en un movimiento brusco y le puso contra la pared para luego acorralarle como lo haría un exquisito caballero que acorrala a su presa antes de darse gusto, aprisionándole con su musculoso cuerpo a la vez que le miraba con intensidad a los ojos, obligándole a aceptar el rudo contácto mientras echaba su aliento sobre él a escasos milímetros de su boca.
- ¿Nunca te han dicho que no debes ir a ningún sitio con el primero que te lo ofrezca? - le dijo Draco aparentemente enfadado mientras le sujetaba fuertemente de las muñecas - después de esto no estarás con nadie más que conmigo, ¿entendido? - le susurró a escasos milímetros de sus labios, echándole eróticamente su calido aliento
- Eh.. si - respondió este asustado por el tono que había alcanzado la situación
- Bien.., chupame el pezón putito mío - le ordenó Draco mientras se levantaba un lado del jersey para dejar al descubierto uno de sus pezones mientras que con la otra mano guiaba a Ron, sujetándole fuertemente de la nuca - eso es putito, eso es...
Mientras tanto Harry y los gemelos seguían buscando con cautela entre las cosas del nuevo o eso creían, pues en realidad el cuaderno de diseños y lo que parecían unas bragas normales, eran los fetiches sexuales de Draco, el cual habí estado creando esos jugetes en secreto basandose en la ropa intima que solía usar para excitar a su morboso padre, los cuales pretendía usar con el nuevo.
- Mierda, ¿donde estará la puta pista? - se dijo Harry pensativo al no encontrar la susodicha pista de los cojones
- ¿Buscáis algo? - les preguntó Cedric enfadado nada más pillarlos en plena faena
- Cedric yo.. - intentó excusarse Harry mientras escondía las sujerentes bragas color rosa palo al verse pillado infraganti por su compañero de habitación
- Tu y yo ya hblaremos luego, ¡pervertido..! - le dijo Cedric al oído nada más pasar a su lado - decidme, ¿que estabais buscando?, tal vez os pueda ayudar - le dijo a sus amigos, provocando que tuvieran más miedo del que y sentían
- ¡Cedric, amigo mío!, estábamos buscando alguna pista sobre el parecido de Ron con.. nosotros - dijo Fred intentando parecer tranquilo y amistoso para ver si podrían salvarse de la severa reprimenda de su amigo
- ¿Y por que no lo habéis dicho antes?, dejad que os ayude, oh por favor, si ni si quiera estabais buscando en el lugar adecuado - les dijo Cedric con total amabilidad y se puso a ayudarlos como si nada hubiese pasado
- ¿Ah no? - se dijo Harry confundido por lo que acababa de oir - ¿entonces de quien..? - pensó antes de atar cabos y descubrir al verdadero dueño de esas porquerías
Mientras tanto en la habitación secreta Ronald había terminado de lamer y mordisquear los pezones de su seme hasta dejarlos tan duros como él quería. Así que decidió recompensarle acercando su boca a la de él, obligandole a aceptar el beso, un beso que enseguida notó como empezaba a volverse cada vez más lento, llegando hasta sus más profundos sentidos, haciendole comprender el amor que aquello escondía, provocando que su corazón empezara a palpitar por aquel chico que volvía a besarle violentamente, pues en realidad solo lo veía como su esclavo sexual o tal vez no. Y sin previo aviso fue bajando hasta llegar a su cuello, el cual devoró lentamente, provocando que su compañero se excitara más de lo que ya estaba.
- ¿Te gusta? - le preguntó sensualmente Draco unos segundos después, mientras le pellizcaba los pezones con extrema agilidad, provocando que se endurecieran por completo
- ¡Ah..! - es lo único que pudo soltar Ron al sentir como la boca de Draco aprisionaba uno de sus pezónes, humedeciendolos con la lengua para excitarle
- Bien, esto ya está, ahora.. quítate los pantalones como solo sabe hacerlo un putito como tu - le dijo autoritariamente al que sería su esclavo sexual tras bajarle el jersey con total formalidad - eso es putito, muevete así.. - dijo Draco excitado mientras le agarraba de la cintura para guiar sus sensuales movimientos de streptease
- ¡Ah..! - volvió a gemir Ronald al sentir como su compañero sexual le bajaba el pantalón con brusquedad nada más terminar de desabrocharlo como el obediente esclavo que era
- Bien.. - dijo dijo Draco satisfecho al ver que su uke cooperaba sin oponer resistencia alguna - ven, vamos a jugar a un juego que.. te va a gustar - le susurró al oído antes de guiarle hacia el fondo de la sala sin importarle que tuviera que ir dando saltitos
Y sin decirle nada más estiró su brazo derecho y cogió un extraño DVD, el cual pretendía poner en el portátil que allí había, despertando la curiosidd de Ronald, pues aún no sabía de que iba el peculiar juego que su compañero tenía en mente. Así que Draco se acercó al portátil con extremada lentitud y sin importarle lo que aquello despertaba en su esclavo, el cual estaba cada vez más asustado de solo ver la maligna sonrisa que esbozaba su compañero sexual.
- ¿Para que es eso? - le preguntó angustiado Ronld, cayendo en la trampa del rubio, pues eso pretendía, que se impacientara y le preguntse de que iba el juego
- ¿Esto?, te propongo un juego yo pongo esto mientras tu terminas de desnudarte, te sientas entre mis piernas y... - fue explicándole Draco mientras dejaba el disco y empezaba a desabrocharse la cremallera del pantalón, para acto seguido liberar su pene, el cual quedó colgando como si nada
- Mm.. ¿y no sería mejor que mientras vemos el dvd me hicieras... spanking? - le preguntó pícaramente Ronald para ver su reacción - quiero decir, anoche oí lo que decías en sueños y gracias a eso sé cuanto te gusta hacer spanking, ¿o acaso no? - dijo para provocarle sin saber las consecuencias de sus actos
- Yo que tu me andaría con cuidado, ¿o acaso no tienes miedo de que te pueda hacer daño? - le amenazó Draco con una exquisita maldad
- No te tengo miedo Draco Malfoy - le dijo Ronald aparentando seguridad, pues sabía que con eso le estaba retando aún más
- Mm.. me gusta, tiene arrestos para retarme - pensó Draco maravillado por la actitud de su esclavo sexual - está bien, tu lo hs querido.. - le dijo amenazadoramente antes de agarrárle violentamente de la cintura, atrayéndole hacia él con brusquedad
- ¿Que piensas hacer? - le preguntó Draco asustado
- Esto - respondió Draco antes de besarle apasionadamente en la boca a la vez que se restregaba contra él para luego empezar a desvestirse mientras sonaba...
Quémate con mi amor, quémate con mi fuego
no te muevas cariño, mi vida, de placer yo me muero..
Mientras tanto en la habitación de Draco.., Harry, Cedric y los gemelos seguían buscando la dichosa pista que creían que les llevaría a descubrir el secreto de Ronald, pero esta vez lo hicieron con un plan de Cedric, pues gracias a su amigo Draco sabía muy bien donde buscar y eso hicieron.
- Veo que se te da muy bien buscar secretos, ¿y guardarlos? - le preguntó Cedric como si nada mientras este buscaba sin parar entre las cosas del nuevo
- ¿Que dices? - le preguntó Harry aparentando confusión por su pregunta cuando en realidad sabía de lo que estaba hablando
- Bueno espero que la próxima vez no inicies una busqueda así antes de consultarme, te dejo, tengo que ver como les va a los gemelos - le dijo Cedric con una mirada penetrante, la cual dejaba ver su evidente enfado - ¡ey chicos!, ¿que tal os va, habéis encontrado algo interesante? - les preguntó con amabilidad
- La verdad es que no, hemos mirado en su diario, su maleta y nada, ¿y Harry? - respondió Fred con sinceridad antes de preguntarle a su amigo, recibiendo una clara seña como respuesta
- Tiene que estar por aquí, espera, tal vez en su maleta.. - pensó Harry harto de buscar por los cajones para luego empezar a mirar en la maleta del nuevo - no puede ser, esto es.. - se dijo tras buscar y palpar durante un tiempo - ¡ey chicos!, aquí hay un compartimento secreto - les llamó eufórico, despertando su curiosidad al instante
- ¿Que es, que has encontrado? - le preguntó Cecric con extrema curiosidad, recibiendo como respuesta unos documentos que cayeron en sus manos - pasaporte, documento de nacimiento, carnet de identidad - fue enumerando las cosas que había y que tenía en la mano para poder ver más de cerca
- ¿A ver..? - dijeron los gemelos mientras le quitaban de la mano el carnet de identidad - ¡no puede ser..! - se dijeron anonadados al ver lo que en él ponía
Mientras tanto en la habitación secreta Draco y Ron seguían besandose y acariciandose apasionadamente, tan ensimismados estaban que no se dieron cuenta de lo avanzados que iban, pues ya estaban completamente desnudos y se preparaban para el sublime momento que era la penetración anal, pues por lo excitados que estaban se podía ver que iba a ser algo apoteósico, ¿o tal vez no?
- ¡Ah...!, espera Draco, espera.., antes tengo que decirte una cosa - le dijo Ron entre gemidos de excitación, provocando que este dejáse de hacer lo que le estaba haciendo en su más que redondeado culo
- ¿El que? - le preguntó Draco indignado
- Que sé la verdad, sé que mientras estamos aquí, los chicos están en mi habitación registrando mis cosas y que posiblemente estas alturas sepan la verdd, así que no tengo otra opción que contarte mi secreto - empezó a confesarle el pelirrojo
-¿Cual es tu secreto? - le preguntó Draco intrigado
- Mi secreto es.. que os engañé, no me llamo Ronald Saratini, mi verdadero nombre es.. Ronald Weasley Saratini - terminó de confesar Ron mientras sonaba una intensa melodía típoca de escenas de misterio y mientras se terminaba el capítulo