En el capítulo anterior…
-No soy un plato de comida y tampoco idiota –se sintió ofendido y trato de alejarse de Jonghyun, pero el moreno besaba muy bien y realmente no tenía intenciones de parar aquello.
-No eres comida, pero tengo tantas ganas de comerte…- mordió el cuello de Jinki a la par que apretaba sus muslos- devorarte…
Las acciones comenzaban a ser sofocantes, el cuerpo de Jonghyun estaba tan caliente que la humedad de hace un rato se estaba esfumando de a poco, los jadeos en Jinki le estaba provocando una sed inmensa y debían parar ahora o claramente se arrepentirían después.
-Deberíamos… parar ahora –jadeo el mayor cuando la hábil boca del moreno le estaba marcando un chupón entre el cuello y sus clavículas.
-¿Enserio te gustaría parar?- el mayor ya ni sabía lo que quería responder y tampoco lo que era correcto, pero antes de tener que tomar una decisión un pequeño ronquido y un cuerpo ahora muy pesado estaban sobre él aplastándole y dejándolo sordo.
-Linda manera de arruinar todo lo que había logrado relajarme estas horas sin verte, perro enano desgraciado- se lo quitó de encima para confirmar que Jonghyun se había dormido –enano y borracho, linda combinación sacaste.
El moreno no pesaba demasiado, por lo menos no para Jinki quien lo tomo y lo cargo en su hombro como si fuera un saco de papas roncante. Apretó el botón en el ascensor que los llevaría a los dormitorios, eran la una y veinte de la mañana y Jinki solo quería olvidar la última media hora y que el enano dormilón también.
Tomo la tarjeta de identificación de Jonghyun para abrir la puerta de su habitación y estando dentro lo dejo caer en la cama, para luego irse a dormir a su propia habitación en donde esperaba encontrarse con una cama nueva luego del chistecito de Taemin.
-Dios mío, descanso al fin- suspiro dejándose caer de boca contra el nuevo colchón y deseando quedar inconsciente por un rato – necesito un baño.
Y gracias a todos los cielos, esos benditos baños que tenían en cada habitación tenían tina porque necesitaba relajar su cuerpo en agua tibia y tal vez jugar con burbujas a su alrededor pero eso lo vería cuando estuviera dentro del agua.
-Solo espero que este enano jodido olvide todo lo que paso- dijo sumergiéndose parcialmente en la tina – ¿que se cree que soy?, ¿comida?, ¿una prostituta?, que se joda ya que si llega acordarse de algo lo negare hasta la muerte.
**
Agua fría… eso sintió Jonghyun en su rostro el día domingo a las ocho de la mañana y toda gentileza de su primo, quien sonreía complacido por su misión de despertar al mayor.
-¿Acaso mezclaste ravotril con alcohol?... ¿estas tonto o qué?- cuestiono enojado mientras se secaba la cara con el edredón – que manera es esa de despertarme.
-Que puto descarado eres- el rubio se cruzó de brazos- hasta cuando me fui a dormir no habías llegado y Lee SooMan seguramente regaño a Jinki Hyung por tu culpa, ¿a qué hora llegaste y como entraste a tu habitación?
-Obviamente por la puerta y no recuerdo la hora y tampoco las condiciones en las que llegue- se sentó en la cama a observar a Kibum- solo recuerdo que tome mucho soju y probé el tequila… que luego se transformó en dos botellas- comenzó a reír como si fuera lo más entretenido jamás contado- supongo que luego alguien me dejo en un taxi y bueno… llegue.
-Veamos qué consecuencias trajo tu llegada supongo que en estado de ebriedad, date una ducha y a desayunar que hoy tenemos trabajo.
-Ni un poco de descanso en este lugar – se levantó a regañadientes y se metió a la ducha, cuando se pasó las manos por la cara para lavarla, sus labios dolieron – auch… - volvió a tocar su labio para nuevamente encontrar dolor y una posible respuesta - con algo debí golpearme anoche.
Cuando Jonghyun llegó al lugar que todos compartían para desayunar se encontró la típica escena de Taemin discutiendo con Minho y Key tratando de detenerlos. Jinki por su lado estaba leyendo un libro mientras comía pacíficamente su cereal, Jonghyun procedió a sentarse.
-Bueno ahora que están todos diré el trabajo que tenemos para hoy- Jinki bajo el libro y todos los demás escucharon atentos- estamos a cargo de un objeto poseído.
-¿Es enserio?- cuestiono el rubio- a que te refieres con eso, Hyung.
-Que no se tratara de un exorcismo humano, sino que liberar a un ser demoniaco de un objeto ya que eso está trayendo problemas a la familia para la cual prestaremos nuestros servicios – se explicó- así que tomen un buen desayuno y traten de animarse, si tenemos suerte volveremos antes de almuerzo.
-Ya que eres el líder y todo lo sabes - comenzó Jonghyun mientras untaba mermelada en su tostada – por casualidad sabes cómo llegue a mi habitación o es más… ¿cómo llegue a la Fortaleza?
-Luego de que los chicos se fueron a dormir, subí hasta el primer piso para ver si aparecías y así fue, a duras penas abriste la puerta principal y como no planeaba cargarte ni lidiar contigo te senté en el carrito de la ropa sucia y tire de él hasta el ascensor y cuando las puertas se abrieron en el pasillo de los dormitorios tome tu tarjeta de identificación abrí la puerta y te deje allí… supongo que luego tuviste un rato de lucidez y te tiraste encima de la cama.
-¡¿EN LA ROPA SUCIA?!- grito histérico – que piensas que soy… ¿un objeto? – irónico pensó Jinki, ya que el mismo Jonghyun lo trato anoche como si fuera un simple plato de comida al cual debía devorar.
-Era eso o que te fueras a caer y golpearte con no sé qué cosa de camino a tu habitación, o encontrarte con SooMan y que tus días como cazador acabaran.
-Deja de ser tan hincha pelotas y solo agradece que volvió a salvar tu trasero, Hyung- reclamo el menor – debes aceptar que sin Jinki Hyung hace mucho que solo serias un intento de cazador expulsado por irresponsable y necio.
-Hablare luego contigo- dijo el moreno refiriéndose a Jinki, entonces dio un sorbo su café pero un giro de Jinki para mirar a Minho que de algo le conversaba, dejo ver una pequeña marca amoratada entre el cuello y la clavícula de Jinki y… todo golpeo a Jonghyun peor que el agua que le tiro Key por la mañana.
Todo lo que dijo Jinki fue mentira y ahora lo recordaba todo, como se estaban besando aunque el mayor se rehusaba de vez en cuando y como las cosas estuvieron a punto de pasar a mayores pero su ultimo recuerdo era despertando por la mañana, ¿habría pasado algo más? .Entonces escupió el poco café que había logrado consumir mojando toda la cara de Kibum.
-¡ASQUEROSO!- grito más histérico que nunca tomando un par de servilletas para limpiarse y luego correr al baño.
-¿Tienes complejo de Llama?- reclamo Minho limpiándose un poco del líquido que le cayó en la sudadera.
-Los que escupen son los Guanacos, no las Llamas – aclaro el mayor – y creo que es mejor que vayas a cambiarte de ropa o de seguro estarás pegajoso todo el día.
-Yo iré a ver que paso con Key Hyung, si el café estaba caliente hasta pudo haberse quemado – dijo preocupado Taemin desapareciendo detrás de Minho quien fue a cambiarse de ropa.
-¿Los mandaste lejos para quedarte a solas conmigo?- pregunto el moreno algo asustado de los recuerdos que venían a su mente.
-¿Se puede saber de qué demonios estás hablando ahora?- Jinki cerro el libro que estaba leyendo hace unos minutos, dejo la cuchara dentro del bol ya vacío y se levantó de la mesa con intenciones de ir a dejar su bol sucio para que fuera lavado- supongo que levantarte temprano un domingo por la mañana te pone mal.
-¿A dónde vas?- Jonghyun se puso de pie y camino siguiendo a Jinki
-A dejar mi plato a la señora que lava la loza y luego con PINee, debo agradecerle las gestiones para que mi cama volviera a estar como nueva – enarco una ceja mirando extrañado a Jonghyun, obviamente se había dado cuenta que el moreno había recordado los acontecimientos de la noche anterior pero el mismo decidió hacer como si aquello no hubiera pasado – ¿alguna otra pregunta?
-No, pero te acompaño por que debo hablar con PINee – Jinki siguió su camino y luego de salida cortésmente a la señora que lavaba la loza del desayuno, siguió su camino hasta al ascensor con Jonghyun detrás de el – ¿puedo ser imprudente y saber que le paso a tu cuello?
-¿Mi cuello?- Jinki se observó en el espejo del ascensor – oh…si – sonrió- anoche mientras leía antes de dormir, una araña me estaba caminando por el cuello y en vez de pegarme un manotazo quise aplastarla entre mis dedos y me pellizque… ¿porque?
-Me pareció raro… - ese cuento no se lo creía ni por un segundo – pero es bastante grande como para ser un pellizco de tus dedos.
-La araña era grande – contesto Jinki por fin llegando al piso en donde estaban las oficinas – ¿no piensas salir del ascensor?
-Si… solo estaba distraído – dejo salir primero al mayor para luego salir el, e inevitablemente se coloca a observarlo, la figura del mayor era tentadora, una espalda ancha, cintura estrecha, trasero prominente y unas piernotas deliciosas – exquisito… - comento en voz medianamente alta.
-¿Dijiste algo?- Jinki se volteo para mirar a Jonghyun justo antes de llegar al lugar de trabajo de PINee.
-Nada, no es nada – prefirió callar antes de meter la pata y tal vez lo que él creía recordar eran solo parte de su imaginación o parte de un sueño húmedo del cual su líder era el protagonista.
-Amaneciste raro hoy día… menos desagradable diría yo- y antes de que el moreno pudiera responder se encontraron de frente con el menor al que estaban buscando.
-Hyung - dijo muy alegre abrazándose de Jinki con mucha confianza y a Jonghyun le molesto de una manera poco usual, como si la imagen en frente de él fuera un chico aprovechador tratando de ligarse a su novio… pero nada de eso existía, solo era el líder que tanto odiaba con el chico cuyo nombre se asemejaba a una fruta y un inocente abrazo- ¿en qué puedo ayudarte?- la voz del chico era alegre y Jinki le sonreía.
-Esta vez en nada, solo venía a darte las gracias por ayudar a que mi cama estuviera como nueva, supongo que Taemin tuvo que haber jodido mucho, ¿no?- el chico asintió para luego sonreír- y también decirte que lo que necesites yo estaré a tu disposición, si quieres aprender algo de seres sobre naturales o incluso puedo ayudarte con tu tarea de la escuela, a mí me iba muy bien.
-Eso sería genial, lo tomare en cuenta Hyung - y recién en ese momento reparo en la presencia de Jonghyun – señor Kim, no lo había visto… buenos días – dijo formal e inclinándose noventa grados.
-No debes ser formal – Jonghyun lo relajo un poco –sé que no soy tu persona favorita pero tampoco es para tener una conversación con tantas formalidades.
-Claro – se sonrojo- ¿desea algo, Hyung?
-Si… necesito hablar contigo, pero… a solas – miro a Jinki quien entendió el mensaje rápidamente.
-Entonces los dejo solos y Jonghyun no demores mucho, en media hora salimos al trabajo – le advirtió autoritario, para luego cambiar de semblante cuando se despidió de PINee – adiós pequeño, y ya sabes… cualquier cosa solo me dices.
Ambos vieron a Jinki alejarse por el pasillo y luego la atención de Jonghyun era completamente hacia el muchacho.
-Entonces… ¿qué necesita?
-Quiero saber si hay cámaras en el salón en donde está la mesa de billar- el menor lo pensó un poco y luego asintió – ¿podría ver la grabación de anoche?
-No se me está permitido mostrar las grabaciones ya que podrían ser alteradas o borradas y quien recibiría el regaño seria yo – dijo un poco aproblemado – pero ¿porque la urgencia?
-Dado que debes saberlo si o si porque si no jamás me mostraras las grabaciones, creo que hice algo anoche y no lo recuerdo, necesito saber que fue y como paso para poder disculpas si lo requiere.
-Entiendo… - se quedó meditándolo un rato- se lo mostrare si promete no ponerme más sobre nombres y ser más amable conmigo.
-Te lo juro, sé que he sido desagradable y quiero disculparme pero en verdad necesito saber que paso anoche.
-Bien, sígame – se metieron a un cuarto oscuro que tenía en medio muchas pantallas pequeñas, el joven le explico a Jonghyun que todo el lugar poseía cámaras, menos sus habitaciones y los baños- ¿y que veremos?
-Ni siquiera yo lo sé- dijo el moreno y la grabación comenzó llamando la atención de ambos.
Jonghyun se vio a si mismo teniendo una conversación con Jinki, más bien parecía una discusión pero no había manera de saberlo porque los micrófonos no estaban encendidos. Pero todo se tornó vergonzoso y algo ardiente cuando vio junto a PINee toda la escena de la mesa de billar, los besos salvajes compartidos con su líder, los toqueteos, los mordiscos, el chupón que le hizo en el cuello al mayor y luego verse caer desmayado.
-WOW…- fue el primer comentario de PINee – no sabía que usted y Jinki Hyung eran novios.
-Ni siquiera yo lo sabía… espera… ¡NO! NO SOMOS NADA –grito alterado – yo estaba borracho y Jinki tuvo que haber estado muy cabreado y bueno…
-Esa explicación carece de coherencia Jonghyun Hyung – el chico se rio – bueno supongo que es asunto de ustedes, yo no abriré mi boca y si te parece… podemos borrar ese pedazo.
-Juro que soy capaz de comprar tu almuerzo todos los días durante un año si prometes borrarlo y no decir nunca nada a nadie.
-Lo prometo y no es necesario lo del almuerzo… solo cobrare esa palabra de vez en cuando –Jonghyun lo abrazo emocionado – solo espero que si solucione sus problemas o sea lo que sea que tenga con Jinki Hyung.
-Si… supongo que debo hablar con el –se quedó callado unos minutos- bueno me voy o el líder va a matarme por llegar atrasado.
-Antes de que se vaya, Hyung – PINee borro el video delante de sus ojos – cuentas claras conservan la amistad.
-Gracias muchacho, te debo la vida.
Se fue corriendo hasta el ascensor, debía ver también como había dejado a Kibum luego de escupirlo sin querer, no tuvo que esperar mucho para que el ascensor se abriera en el primer piso y el rubio lo recibiera con un zape en la frente que llego a tirarlo hacia atrás.
-¿Sabes lo asqueroso que es que te caiga baba mezclada con café?- dijo muy enojado- me debes una buena explicación de por qué hiciste algo como eso.
-Y te lo diré pero no ahora… - miro a los demás que simulaban no escuchar pero de todas maneras lo hacían- juro que te contare después.
-De todos modos qué asco –hizo gestos de desagrado y como si temblara por el asco que el recuerdo de la mañana –ahora súbete al auto.
-¿Puede manejar?- dijo emocionado el menor – no es lejos y… por favor, Hyung.
-Está bien pero yo seré tu copiloto- advirtió.
-Pero Hyung… se supone que dios es mi copiloto o en caso extremo Jesús – se ganó un zape por chistosito.
-Andamos chistosos ¿no? – Le cuestiono- ahora ponte el cinturón y maneja.
La casa a la que debían ir estaba a media hora de la Fortaleza y además era por carretera, nada complicado para Taemin y la pobre gente que se le pudiera cruzar en frente. Jonghyun por su lado pensaba en lo visto en el video y como Jinki podía seguir tan campante por la vida, como si nada hubiera pasado y entonces pequeños flashback de los besos de la noche anterior vinieron a su mente.
-¿Vas a decirme porque me escupiste esta mañana?- pregunto el rubio aprovechando que iba sentado al lado del moreno.
-Recordé algo que hice ayer estando borracho y me sorprendí – era la verdad pero no le diría lo que seguía en la historia- siento mucho haberte mojado con café y más aún porque salió de mi boca, pero fue debido a eso.
-¿Y qué recordaste?- mientras el rubio pregunto, Jonghyun se dio cuenta que el dedo meñique de Minho estaba enganchado al de su primo –Jonghyun… ¿me estas escuchando?
-Es intimo no puedo contarte detalles y… ¿qué les pasa a ustedes dos que andan tan cariñosos?- de inmediato se alejaron.
-Estas imaginándote cosas – dijo Minho mirando por la ventana del auto –Taemin acelera un poco, pareciera que vamos sobre una tortuga.
-Hago lo que puedo… vamos en carretera y se nos puede cruzar cualquier animalito –contesto molesto por lo desconsiderado que podía ser Minho –hay que cuidar la fauna.
-Ya dejen de pelear – Jinki los calmo- y ya estamos llegando y por favor… no quiero situaciones tontas cuando estemos dentro de aquella casa, es serio lo que iremos hacer.
-Entendido- contestaron los cuatro.
Taemin se estaciono cerca de la casa pues no quería llegar tan directamente allí, no querían irrumpir en el hogar como si fueran una especie de fuerza policiaca, eso no era una buena idea.
-Ya que se trata de un objeto poseído sería recomendable que se colocaran algo que este bendito, es por seguridad- comento Jinki a lo que Taemin levanto su dedo en el cual tenía un denario y su muñeca que tenía un mini rosario –muy bien, Tae.
-Yo uso el rosario de mi abuela así que cero peligro- comento el rubio –Minho anda trayendo un denario en el tobillo – el más alto se subió el pantalón mostrando que era verdad.
-Fue un obsequio de mi hermano antes de venir a la Fortaleza, dijo que me protegería y que jamás me lo quitara – dijo orgulloso de aquel regalo y de que Kibum lo haga notado en su tobillo.
-Jonghyun… ¿tú no tienes nada que te proteja? –pregunto con precaución cosa de que el moreno no se alterara por cualquier motivo y empezara a pelear.
-Tengo la imagen del sagrado corazón en una cadenita que me regalo mi madre, esta bendecida así que eso ayudara, de todos modos gracias- todos lo quedaron mirando sorprendido por la actitud tan pacifica que tomo el más bajo.
-Bien, supongo entonces que ya podemos entrar.
Los cuatro siguieron al mayor, cuando estuvieron finalmente en la puerta principal de la casa tocaron el timbre. Una anciana les abrió la puerta, llevaba unos anteojos enormes y un bastón del cual se afirmaba, era muy bajita y cuando pudo distinguir algo les sonrió a todos por igual, detrás de ella se asomó una joven de cabellos castaños de mediana estatura y ojos con doble parpado, parecidos a los de Minho.
-Ustedes deben ser los cazadores ¿no?- dijo la chica haciendo espacio para que entraran cuando Jinki asintió- ella es mi abuela y yo soy Nym –se presentó la muchacha.
-Ellos son: Jonghyun, Kibum, Minho, Taemin –presento el mayor a sus compañeros- y yo soy Jinki –finalizando con su propio nombre, nuestro jefe dijo que estaban teniendo problemas con un objeto poseído.
-Así es, una muñeca que pertenece a mi abuela desde que es pequeña, el otro día mi hermano menor trajo a sus amigos mientras mis abuelos y yo estábamos en una celebración familia y… se colocaron a jugar con la Quija, desde esa noche han comenzado a pasar cosas extrañas, escalofriantes y en verdad tengo mucho miedo por mis abuelos, ellos viven solo con mi hermano y conmigo y nosotros casi no pasamos en casa.
-Lamento decirle señorita que su hermano tiene el cerebro del porte de un maní, ¿acaso jamás le enseñaron que con esas cosas no se juega? –Reprocho Taemin- un verdadero bruto tiene usted en la familia.
-Taemin- le regaño Key, para luego ganarse una mirada de Jinki.
-Él tiene razón- la chica calmo los ánimos- mi hermano hizo una idiotez y ni siquiera es capaz de lidiar con ella –a Jonghyun le pareció extraño e incluso molesto que aquella chica mirara a Jinki como lo estaba mirando, como se mordía el labio de manera disimulada cuando el mayor no estaba mirando- espero puedan ayudarnos – comento ella al tiempo que le agarraba el brazo a Jinki.
-Para eso nos pagan niña, para deshacernos de toda cosa sobre natural que moleste –interrumpió Jonghyun interponiéndose –también le recomiendo que evite el contacto con cualquiera de nosotros, usted ha estado conviviendo con sea lo que sea que tiene poseída a aquella muñeca y puede ser perjudicial para el proceso de limpieza que haremos.
-Oh… lo siento mucho, en verdad no lo sabía –ella se sonrojo y Jinki volvía a estar molesto con el moreno, mientras los otros tres susurraban como viejas chismosas- entonces les mostrare el cuarto en donde están las muñecas de mi abuela.
La chica comenzó su recorrido escaleras arriba y los tres menores la siguieron primero. Jinki detuvo a Jonghyun un momento comenzando con más susurros.
-¿Qué demonios fue eso? –Lo jalo del brazo- ¿porque debías ser tan hostil con la pobre chica? ella está asustada.
-¿Asustada? No me hagas reír –medio gritó y Jinki lo empujo contra la pared poniéndole la mano en la boca y susurrando un “shhhhh”
-Habla más bajo –mientras Jinki le pedía silencio a su mente vinieron las imágenes de la grabación, los besos y los mordiscos una vez más y por dios… solo quería comérselo a besos estando sobrio – ¿siquiera me estas escuchando?
-Sí, bueno ya no diré nada más y mejor subamos, entre más rápido averiguamos que pasa, más rápido nos vamos.
Estuvieron en la casa por lo menos hora y media, recaudando información de aquella noche en la que se jugó la Quija, primeramente debía saber con qué tipo de espíritu posesivo estaban lidiando y si este no era en el peor de los casos un demonio. Todo parecía indicar que el espíritu no era peligroso pero si muy juguetón, deberían volver al día siguiente pues debían estudiar la historia de aquella casa que les diera antecedente de que espíritu podría estar tan interesado en hacer contacto.
-Nym, tendremos que volver mañana por la mañana, por el momento te dejare unas cuantas oración que pueden hacer hasta que volvemos para que tengan una noche más tranquila, mañana ya no tendrán más este problema, estamos comprometidos en hacer todo lo posible hasta que esta casa este en paz- la chica miraban con atención a Jinki mientras le explicaba todo eso.
-Yo digo que la chica quiero comerse a nuestro Líder- comento Taemin cuando ya estaba arriba del auto, esperando por Jinki para marcharse a la fortaleza.
-Taemin, cállate- dijo Jonghyun molesto- quien en su sano juicio estaría interesado en Jinki, nadie.
-Y tu estas un poco loco ¿no? –comento Kibum dejando a Jonghyun paralizado e iba a contestarle pero apareció Jinki en el auto.
-¿Podrían dejar de gritar en el auto? Logran escucharlos hasta un kilómetro más allá – reclamo el mayor –ahora vamos a casa, porque tenemos que averiguar la historia de esa casa y nos tomara algo de tiempo.
-Relájate un poco, te dará un ataque al corazón si sigues así de estresado – le dijo el menor –podrías ir a sesiones de acupuntura.
-Ni una masaje Tailandés me quitaría el estrés en este momento, no tienen idea la noche que pasé ayer y hoy no ha sido mejor.
Jonghyun se sintió un poco alarmado, ¿sería que hablaba de lo que paso entre ellos anoche? Pero de todos modos no se lo había mencionado en todo el día y cuando pregunto por el chupón le conto una mentira poco creíble, ¿sería que Jinki no estaba interesado en guardar ese recuerdo?
Iba camino a la fortaleza cuando Taemin freno dejando a todos casi pegados en el vidrio de parabrisas, con el cuello medio torcido y los nervios de punta.
-QUE DEMONIOS CRES QUE HACES –gritaron ambos Kim.
-¿Acaso no lo vieron? – Pregunto antes de bajarse del auto – ¡ESTA VIVO!
-Ahora tiene complejo de Doctor Frankenstein- comento Jinki cuando también se bajó del auto – Taemin ¿qué paso y quien está vivo?
-Este osito –hizo un mohín tomando en sus manos una animalito que saco casi debajo de las ruedas- está vivo, no alcance a atropellarlo, pero… ¿qué es exactamente?
-Déjame verlo –pidió el mayor con los otros tres detrás de el para ver al animalito.
-¿Un mapache?- pregunto Jonghyun.
-Un Panda Rojo –explico Jinki – pero es muy raro que ande en plena carretera, de seguro lo abandonaron aquí, tiene una patito quebrada.
-¿Fui yo? ¿Se lo provoque yo?- Taemin estaba preocupado, el pobre animal parecía no reaccionar.
-Al parecer la tenía así desde antes, llevémoslo a la Fortaleza y le pedimos a PINee que llame al veterinario, ahora suban al auto, Kibum tu cuidaras del animalito mientras Tae conduce.
-Pero Hyung… ¿te refieres al panda rojo o a esta rana y este perro?- se ganó una mirada acusadora por parte de los mencionados- ok, yo lo cuido.
Por fin podían continuar su camino tranquilo a casa. Jinki prefirió mandar a los tres menores con PINee y el panda rojo para que vieran que tenía y si se le había perdido a alguien, por otro lado tuvo que obligar a Jonghyun a seguirlo a la biblioteca para averiguar cosas sobre las casas de la zona en la que estuvieron durante el día.
-Tu eres el sabelotodo ¿porque me arrastras a algo que no quiero hacer?, tengo sueño y quiero dormir- fueron unas de las tantas quejas por parte del moreno – es tarde… ya debería estar en mi cuarto.
-Ya me canse, no pienso seguir gastando ni saliva ni mi ánimo contigo, si quieres irte a dormir pues ándate, yo me quedare averiguando lo necesario, aunque esto debería ser un castigo por haber llegado borracho anoche- le reprocho el mayor ya más que cabreado –haz lo que se te pegue la gana, solo te pediré que no seas desagradable con la gente que vamos ayudar.
-¿Lo dices por lo que le dice a la chica de la muñeca poseída?, creo que a ella le quedo claro que no es bueno andar coqueteando cuando algo tan oscuro asecha tu casa y tu seguridad.
-¿Sabes algo? Creo que el que se ira a su cuarto por un momento a su habitación soy yo, no te soporto, Jonghyun- tomo rumbo al ascensor siendo seguido por el moreno –tan solo déjame tranquilo un rato, llevo todo el día discutiendo contigo, más el show que te mandaste anoche.
-¿Y por qué no me dices lo que realmente paso?- salieron del ascensor y Jinki camino hasta su cuarto tratando de cerrarle la puerta en la cara al moreno pero este lo detuvo – llevas enojado todo el día por algún motivo, ¿es por algo que hice o por algo que no recuerdo?
-No es nada –insistió el mayor tratando de sacarlo de su cuarto, pero Jonghyun entro cerrando la puerta detrás de el –sal de mi cuarto… que te salgas, o acaso no te basto con casi gritonear a esa pobre chica por la tarde, ¿ahora la cosa es joderme a mí?
-Esa “pobre” chica estaba como perra en celo mirándote y tratando de que la tomaras más en cuenta que al problema que tenía en casa- escupió enojadísimo.
-Y a ti que te importa si alguien me coquetea o no, tu solo preocúpate de tus conquistas que de las mías me preocupo yo.
-Claro que no- lo empujo contra la puerta –PINee me mostro el video de la sala en donde está la mesa de billar – Jinki lo miro sorprendido- creo que mi líder es un asqueroso mentiroso – Jinki estaba perdiendo el aire con el cuerpo de Jonghyun apretándolo –vi que no te rehusaste a los besos de un borracho y tampoco a mis mordiscos y el lindo chupón que te deje.
-Eres de brazos fuertes, no pude alejarte de mí y… -Jonghyun lo miraba tan intenso, como un puma asechando a un conejo-además ya paso, eso quedo en el pasado y no lo volveremos hablar.
-Entonces no lo hablemos, pero yo si quiero sentirlo -atrapó el labio inferior del mayor entre sus dientes para luego pasar su lengua por donde antes estuvo mordiendo, sacando un quejido de Jinki que le dio una vibración exquisita para seguir adelante, comenzando un beso salvaje acariciando al mayor –ahora… tampoco te niegas.
-Sola cállate –siguió el beso cada vez más húmedo, Jonghyun había comenzado arrastrarlo hasta la cama –muy rápido…no…
-No voy hacer nada de eso… no ahora –le robo otro beso –es más cómodo recostarnos allí.
De pronto la voz del jefe SooMan se escuchó por el pasillo, haría una revisión de las labores echas el día de hoy, problemas número uno: Jonghyun no estaba en su habitación y después de cierta hora no se podían estar en cuartos ajenos y problema numero dos: ambos tenía un problema en proceso entre las piernas…