El sonido del marcador realizo aquel tono característico que indicaba que el cuarto tiempo había llegado a su fin todos en aquel estadio estaban asombrados ante lo que había sucedido frente a sus ojos sin duda fue increíble como Kagami, al recibir el pase de Kuroko había encestado la última canasta del partido dándole así la victoria a su equipo.
-Ganamos- dijo Izuki casi en un susurró.
Después de esto el silencio que se mantenía en aquel lugar fue destrozado por los aplausos y gritos de los espectadores. Habían ganado, habían derrotado a Rakuzan, era increíble.
Todos en la banca gritaban y se abrazaban entre ellos demostrando su felicidad por haber ganado y sus compañeros que estaban en la cancha no fueron la excepción.
Kagami quien se encontraba a unos pocos metros de distancia sonreía como nunca lo había hecho se notaba en su cara la satisfacción y emoción por haber ganado.
Akashi se encontraba enfrente de Kuroko y solo pudo sonreír, Kuroko nunca había visto una sonrisa sincera por parte de él.
- Fue un gran juego, Tetsuya-
- Pienso lo mismo, Akashi-kun-
El pelirrojo sin más dio media vuelta para acercarse a sus compañeros de equipo quienes se encontraban mal por haber perdido la winter cup.
-¡¡Kuroko!!- era Kagami quien grito su nombre, inmediatamente dio media vuelta para encontrarse con aquella persona tan especial, pero lo tomo por sorpresa pues lo agarro del cuello e inmediatamente poso su mano en su cabeza revolviendo sus azulados cabellos. Este acto provoco un pequeño sonrojo en el chico sombra. Podía escuchar como el publico seguía aplaudiendo y como gritaban SEIRIN de manera muy enérgica. Kuroko estaba mas que feliz simplemente no podía parar de sonreír y entonces vio directamente al pelirrojo quien seguía con su acción de revolver sus cabellos, lo vio directamente a los ojos y supo que ese sería el momento indicado para decirle aquello que se había estado guardando desde hace tiempo.
- Kagami-kun, tu a mi...me gustas...yo te quiero.- El pelirrojo lo miro sorprendido sin embargo no se le veía molesto o como si eso hubiese causado estragos en el, todo lo contrario le dedico una sonrisa en la que expresaba lo feliz que lo hizo esa declaración, iba a decir algo pero no tuvo tiempo ya que sus demás compañeros llegaron para segur eufóricos por la victoria formando un abrazo grupal donde comenzaron a darles palma-ditas a kuroko, le revolvieron el cabello y a Kagami le dieron uno que otro golpecito.
Los dos equipos que hasta hace poco se encontraban compitiendo se formaron formando hileras cada equipo enfrente del otro, se dieron el saludo y estrecharon sus manos para dar por finalizado el grandioso partido que se había llevado a cabo.
Akashi no volvió a hablar con kuroko, había quedado afectado por perder y ahora lo que necesitaba era tiempo para estar consigo mismo.
Al salir sus compañeros de equipo se encontraron con sus familiares y conocidos que los habían ido a ver, kuroko se encontró con los integrantes de la kiseki no sedai algunos acompañados como en el caso de Midorima quien venía con un azabache, Murasakibara con Himuro quien estaba acompañado también de Alex quien sostenía a nigou.
Momoi se abalanzo contra Kuroko felicitándolo por haber ganado, Aomine la alejo de el peliceleste ya que lo estaba sofocando.
- Felicidades Tetsu, lo hicieron bien tú y tu equipo.- hablo el moreno mostrando su característica sonrisa- también tu Bakagami de alguna manera mostraste un buen juego.
- ¿Debo de tomar eso como un halago Ahomine?- y isa comenzó a discutir con el peliazul marino hasta que satsuki los separo para que dejaran de discutir. Alex y Himuro se acercaron a Kagami para felicitarlo por el grandioso juego que les mostró.
- Taiga, me has mostrado como te convertiste en el jugador número 1 de japón, ahora es mi turno de demostrarte como yo seré mejor que tú en nuestro próximo partido- comenzaron a reír los dos junto como en hace tiempo no lo hacían.
- jugaron bien-nanodayo, la verdad no lo hiciste mal.
- Shin-chan deja tu lado tsundere y mejor dile lo emocionado que estuviste por ver ese juego jajaja.
- callate Takao.
- jugaron muy bien kuroko-chan
- Estuvo genial como realizabas los pases kurokocchi y como te sincronizabas con kagamicchi fue asombroso.
- Gracias Midorima-kun, Kise-kun, Takao-kun.- Así siguieron conversando un rato mas hasta que debían de concluir su plática por ese día, ya que Midorima iba a acompañar a Takao a casa, Aomine y Momoi habían planeado ir a ver una película, y Murasakibara ya se quería ir al igual que Kise.
- Nee Muro-chin ya me quiero ir a comprar la golosina que te dije- se acerco el pelimorado a los dos chicos que hablaban muy animadamente.
- Adiós Taiga ne veremos pronto
- Igualmente Tatsuya- y asi Himuro se fue con el gigante de Yosen a comprar esa dichosa golosina que el le compraría ya que la condición que le había dado Murasakibara para ir a ver el partido fue que el le comprara ese dulce y bueno no se negó.
- Taiga me alegro haber sido tu entrenadora ya que hoy mostraste todas tus habilidades ademas de las técnicas que yo te enseñe.
- Para mí también es un orgullo que hayas sido la persona que me entreno desde pequeño y que me enseño todo lo que se de basket- Se dieron un abrazo fraternal y Alex volvió a hablar - Tu y Himuro siempre serán mi orgullo.- de esta manera termino el abrazo.
-Bueno te dejo con tus amigos, diviértete en especial con "el"- dicho esto le dedico una sonrisa perversa que hizo sonrojar al tigre ya que esas palabras tuvieron un doble sentido.
- ¡No se de que estás hablando!
- por favor Taiga todos nos damos cuenta que tus actitudes con el no son normales, se ve diferente el afecto con el que lo tratas a comparación de tus demás compañeros de equipo, ya no trates de ocultarlo es más que obvio- Kagami seguía con su sonrojo solo que un poco más leve pero aun así era visible.
- A por cierto Taiga hoy llegare un poco tarde, hay un restaurante nuevo que acaban de abrir hace poco y quiero probar su comida, bueno es todo, te dejo ya sabes diviértete.
- Eso haré, adiós.
Kagami se acerco a sus compañeros de equipo quienes se habían reunido para ver a dónde irían a celebrar.
-Muy bien chicos iremos a la casa de Kagami-kun a celebrar.- hablo la entrenadora de buen humor.
- ¿por qué siempre que se va a hacer algo debe de ser en mi casa?
- porque tu departamento es amplio y limpio- esta vez hablo Hyuuga apoyando la idea de ir a celebrar ahí.
- Bien si no queda de otra- acepto soltando maldiciones inentendibles.
Mientras caminaban Kagami y Kuroko iban atrás del grupo de amigos en el ambiente se había formado un silencio hasta cierto punto incomodo, no sabían que decir ni cómo actuar en este tipo de ambiente. Kagami iba a decir algo pero los chicos que iban al frente se detuvieron afuera de una tienda de conveniencia en donde posteriormente entraron, cada uno se fue a comprar diversas cosas algunos dulces, pero la mayoría botanas y golosinas, Kagami se quedo en un aparador pensando en que comprar en eso se acerco el peliceleste dándole amablemente unas cosas que eran ingredientes de cocina y unos vegetales.
- ¿Y esto?
- Riko-san me pidió que te entregara esto, ya que propuso que tu harías la cena.
- Ahhh ¿porque debo de cocinarles a todos?
- porque a todos les gusta tu comida, además yo también quisiera comerla el día de hoy.- le dijo esto mirándolo a los ojos dándole una sonrisa que pocas veces mostraba. Esto hizo sonrojar un poco al pelirrojo.
- Esta bien yo cocinare- hubo un corto silencio que fue roto por el de ojos celestes.
- Kagami-kun lo de hace rato... yo- pero en eso llego Koganei interrumpiendo la conversación de esta par sin saber que interrumpía algo importante.
- Kagami, la entrenadora quiere saber si con esos ingredientes te alcanza para cocinar algo o necesitaremos mas.
- Con esto es suficiente, se completa con las cosas que tengo en mi departamento así que no hay problema.
Una vez elegido lo que iban a comprar, se dirigieron al mostrador para pagar las botanas, refrescos y demás que habían comprado. Al salir agradecieron al vendedor y fueron directamente a la casa de kagami, este al llegar abrió la puerta, encendió las luces y dejo pasar a todos quienes se instalaron el suelo de la sala de estar, sacaron las botanas y refrescos, algunos como Furihata, Fukuda y Kawahara fueron a la cocina por unos tazones y platos que ocuparían para servir lo que habían comprado, no sin antes pedirle permiso a Kagami de tomar sus cosas. Kuroko ayudo a servir refresco en los vasos y una vez terminada su labor se dirigió a la cocina en donde se encontraba el pelirrojo echando ingredientes y demás cosas en una cazuela.
- ¿puedo ayudarte en algo Kagami-kun?
- si ¿podrías lavar esos vegetales que se encuentran en la bolsa?- kuroko afirmo y en el fregadero lavo muy bien los vegetales, el no era bueno cocinando pero por lo menos podía ayudar en la cocina. Cuando termino se los entrego a Kagami y este los empezó a cortar y posteriormente los hecho en la cazuela en donde se estaba cociendo lo que comerían.
- ¿Qué vamos a comer Kagami-kun?
- Fideos - el peliceleste se acerco hasta quedar junto a kagami y poder ver lo que estaba cocinando, este acto causo un poco de incomodidad en el pelirrojo ya que sus cuerpos estaban demasiado juntos, podía oler la fragancia de kuroko tan característica de él, vainilla, olía...
- Delicioso- comento Kuroko, poniendo de los nervios a Kagami, acaso podía leer sus pensamientos o era acaso que él había pensado en vos alta.
- ¿A-a que te refieres Kuroko?
- Hablo de los fideos, huelen delicioso, ¿de qué otra cosa estaría hablando?- le cuestiono el peliceleste.
- Nada sólo olvídalo.
- Oigan ustedes dos dejen de coquetear en la cocina, y tu Kagami prepara la comida rápido, todos estamos hambrientos- apareció de la nada Riko con su clara desesperación por comer, y es que sin darse cuenta llevaban un buen rato en la cocina solo que ninguno lo noto.
- Kuroko, si quieres puedes ir con los demás en una rato estará la comida.
- De acuerdo kagami-kun- salio de la cocina para ir con sus compañeros y amigos quien lo esperaban, comenzaron a hablar de lo grandioso que fue el partido de hoy, de la canastas que metieron Hyuuga, Kiyoshi y de como Furihata había enfrentado al capitán de Rakuzan, pero en especial del esfuerzo que todos hicieron para llegar a donde estaban. Minutos después Kagami grito que la cena ya estaba lista, parecía una situación clásica de una madre llamando a sus hijos lo que ocasiono una gran risotada por parte de todo el equipo, Kagami no sabía porque reían así que lo dejo pasar, los chicos fueron hasta donde estaba Kagami y ayudaron a servir en tazones la sopa de fideos que había preparado Taiga, cada uno tomo asiento en el comedor y se dispusieron a comer alabando la grandiosa comida del pelirrojo, este solo se avergonzaba y agradecía los cumplidos, continuaron comiendo y entonces a Kagami le dio curiosidad del porque de las risas de hace unos minutos.
- ¿De que reían hace unos momentos?
- Eso es porque Kagami-kun parecía una ama de casa- hablo Kuroko
- ¿Quieres pelea Kuroko bastardo?
- Bueno ya no inicien una pelea y continuemos disfrutando de la cena
Y así continuaron hablando entre ellos y disfrutando de su compañía, sin duda kuroko sabia que este era un gran equipo, nunca se había divertido tanto siendo parte de un equipo, nunca había disfrutado tanto de una victoria nunca había conocido un equipo tan asombroso en donde todos se apoyaban mutuamente como si se tratase de una familia, y es cuando se queda pensando en cómo sería su vida si hubiese dejado el basket, tal vez en estos momentos continuaría con una soledad en donde nadie le podría salvar, no habría disfrutado de tantas emociones que sólo sentía en las partidos, y tal ves nunca le hubiese conocido a él, la persona más importante en su vida, aquella que lo acepto tal y como era. Tal vez si no le hubiese conocido nunca habría salido de aquella obscuridad eterna. Era en estos momentos en lo que reflexionaba que desde que entro a seirin vivió cosas que jamás creyó vivir y ha disfrutado de cada momento bueno o malo que había vivido con sus compañeros de equipo y ahora amigos. Así concluyó la noche para este equipo, ya eran altas horas de la noche y todos debían ir a sus respectivas casas, el primero en irse fue Furihata quien preocupado por la hora se despidió y salió corriendo del lugar, los demás en grupo decidieron irse.
- Kuroko ¿no vienes con nosotros?
- No, me quedare un rato más a limpiar las cosas con Kagami-kun
- Sentimos no ayudar esta vez solo que ya es muy tarde y debemos irnos- hablaba Koganei
- No se preocupen no es mucho, terminaremos pronto- hablo el pelirrojo apoyando a su sombra ya que deseaba quedarse a solas con el para hablar seriamente.
- Bien, nos vemos en el entrenamiento del lunes Kagami-kun, Kuroko-kun- hablo la entrenadora despidiéndose de los dos chicos y partiendo con sus compañeros para irse a su hogar.
- Si nos veremos luego- hablo Kagami cerrando la puerta.
Fue a la cocina por unas bolsas de plástico para meter la basura y otros desechos que quedaron en su sala. Después de meter toda la basura a las bolsas, el pelirrojo se dirigió a su cocina seguido por el de ojos celestes para depositar por el momento ahí las bolsas y posteriormente lavar los platos y vasos que habían ocupado.
Esto hizo que los dos tuvieran que lavar en el mismo fregadero lo que significaba que estaban muy juntos, así estuvieron ambos sin romper el silencio que se les estaba formando desde hace varias horas entes. En algunas ocasiones rozaban sus manos húmedas con las contrarias lo que hacía que una corriente recorriera sus cuerpos, en ese momento el pelirrojo dejo de lavar los trastes abruptamente, se acerco más al peliceleste, puso su barbilla en los cabellos del contrario y finalmente le abrazo por detrás cosa que sorprendió al más bajo.
- ¿Kagami kun?- le nombro aun dándole la espalda.
El nombrado se estaba dejando llevar por el ambiente de alguna manera romántico, se inclino hasta llegar a su oreja y susurrarle - Kuroko ¿es verdad lo que dijiste? ¿en verdad me quieres?.
- Nunca eh dicho algo tan enserio Kagami-kun.
- No sabes lo feliz que me hace oír eso.
- ¿Y tu que sientes por mi Kagami-kun?
- Ninguna palabra puede describir lo que siento por ti.
Kuroko sintió sus mejillas arder, se dio media vuelta para continuar con el abrazo, escondió su rostro en el pecho del contrario cosa que hizo enternecer a su luz. Le alzo el mentón, quería ver su rostro, pero al ver su cara nerviosa adornado por esas mejillas sonrosadas al último el que termino más sonrojado de los dos fue el as de seirin, le encantaba la idea de que sólo el pueda provocar ese tipo de reacciones en su sombra.
-Te amo Kagami-kun- pronuncio viéndolo a los ojos, el nombrado poso su mano en su cabeza revolviendo suavemente sus cabellos, volteó el rostro para que kuroko no viera que su cara tenía el color de su cabello.
- Ya sabes que también te amo.
- Eso me alegra.
- No soy bueno en esto pero ammhh Kuroko ¿saldrías conmigo?- el peliceleste soltó una pequeña risita apenas audible pero que su acompañante logró escuchar.
- ¿De qué te ríes Kuroko? Sabes que esto no es fácil para mi, de hecho ni siquiera sé como fui capaz de decírtelo.
- Es que Kagami-kun hace preguntas de las cuáles ya sabe la respuesta.
- Es sólo que... ahh ya olvídalo.
- Dímelo Kagami-kun, di lo que ibas a decir.
- Que lo normal es pedirle a la persona que te gusta que salga contigo.
- ¿Nada más eso?- Kagami no era buen mentiroso no se le daba y ahora que trataba de engañar a su sombra no podía.
- Ahh es sólo que nunca eh tenido pareja y no sé de estas cosas, nunca tuve tiempo para pensar en eso, mi vida sólo giraba alrededor del baloncesto, pero ahora...
- ¿pero ahora...?
- Kuroko ¿nunca te dijeron que eres una persona muy interrogadora?
- No evites mi pregunta Kagami-kun, pero si ya me lo han dicho varias veces, en fin quiero saber el porqué ahora el baloncesto ya no es lo más importante para ti.
- Pues es p-porque te conocí a ti y ahora eres lo que más quiero- y ahí volvía el enorme sonrojo por parte de los dos.