¿Cuantas horas habían pasado? ¿Tres o cuatro? No llevaba la cuenta, simplemente recordaba haber huido de aquel lugar dejando atrás a su padre y amigo, su cerebro estaba en sobre carga y necesitaba calmarse.
Después de lo que sucedió con el príncipe, Goten huyó a unas montañas, seguía en traje de baño y con la camisa que era de su padre.
Aun no terminaba de pasar el shock del momento, las palabras susurradas por el de cabellos de flama seguían en su cabeza repitiéndose.
En su cabeza no cabía que su padre y él llevaban una relación de ese tipo.
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-No logro sentir su ki aún.- el de cabellos alborotados estaba ya en su hogar, después de que Goten no regresase con las cosas, él y Trunks decidieron ir a buscarlo pero para sorpresa de ambos ni Goten ni Vegeta estaban.
Se encontraba preocupado por ambos, aunque de cierta forma más por Goten, había decidido regresar por si lo encontraba ahí en su casa, pero ni siquiera había rastro de que hubiese pasado por ahí.
Le preocupaba el hecho de que el príncipe también había desaparecido sin razón, era algo que normalmente sucedía pero últimamente le avisaba cuando se iba.
Dio un suspiro pesado y salió de aquella casa, buscaría a su hijo y al príncipe, esperaba encontrarlos.
Mientras el pelinegro buscaba a su hijo y amante, Trunks, quien también se encontraba preocupado, no se iba a quedar de brazos cruzados y decidió buscar a su amigo.
No le importaba si su madre lo regañaba por descubrir que había escapado aun estando castigado, quería encontrar y ver a Goten a salvo. Ninguna idea se le pasaba por la cabeza de la causa que pudo haber hecho que el joven se fuese, de su padre ya lo esperaba.
-¿Dónde estás Goten? - el joven peli lila volaba con desespero, buscando rastro alguno del pelinegro, se sentía preocupado. A cada segundo que pasaba su desesperación por encontrarlo aumentaba, no encontraba su presencia y eso lo enojaba.
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El cielo se estaba obscureciendo, dejando ver algunos tonos rojizos en él, Goten ya estaba un poco mejor, si es que así podría decirse ya que seguía perturbado por lo sucedido.
No quería ser encontrado por su padre, por eso había escondido su Ki, no sabía que cara poner frente a él. Ahora mismo no quería regresar a su casa, en sus pensamientos, la relación de su padre y Vegeta no debía ser descubierta por su madre, el pobre continuaba con la idea de que nadie lo sabía.
Solo había una persona en su cabeza y esa era su hermano.
-Gohan..- de inmediato se dispuso a ir donde se encontraba él, claro, lo haría sin dar pista de su presencia, iría caminando, no le importaba tardar mucho, después de todo su mente seguía perdida en algunos pensamientos y entre ellos era como decirle algo así a su hermano.
Sus pies andaban con lentitud, y su mirada se encontraba distante, como si quisiera despertar de un sueño, pero para su mala fortuna era la realidad lo que lo abrumaba ahora y no había más remedio que afrontarla.
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-"Maldita sea, ese mocoso huyó y escondió su Ki, ni siquiera me dio tiempo de decirle algo."
El príncipe, al igual que Goten, salió volando, solo que éste lo hizo para seguir al joven, lamentablemente no lo había encontrar aún, ya que casi instantáneamente después de aterrizar en unas montañas, el joven desapareció su Ki, Vegeta escondió el suyo para que no supiese que lo estaba buscando.
Estaba más que avergonzado, todavía no podía ni imaginar que fue lo que paso por la cabeza del joven al verlo descubierto, y peor aún, al haber sido tocado de esa manera.
-¿Cómo demonios sabría que era él? Necesito encontrar a ese mocoso, no vaya a confundir las cosas y me crea un pervertido.
El príncipe continuaba con su búsqueda, él también traía puesta la misma ropa que estaba usando en la playa.
Durante varias horas sintió como el de cabellos alborotados volaba cerca de su ubicación, por alguna razón no quería decirle lo sucedido, y es que no sabía cómo reaccionaría el de clase baja.
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Sus pasos por fin lo habían llevado al lugar al que deseaba, se encontraba justo frente a la casa de su hermano, estaba nervioso, sus manos sudaban frio, sus rodillas temblaban y el frio viento de la noche no ayudaba a calmarlo.
Dio una fuerte bocanada de aire y se animó a tocar, se quedó un momento esperando respuesta, pero al parecer no se la daban, dispuesto a irse dio media vuelta, pero en ese momento una voz lo frenó.
-Perdón por la tardanza.- su hermano estaba justo ahí, con la puerta abierta, su mirada era seria, por un segundo esa mirada intimido al más joven, pero no flaquearía en su decisión, le dedico una sonrisa a su querido hermano.
-Está bien, yo fui inoportuno al venir a estas horas.
Gohan simplemente se hizo a un lado, dándole paso al menor, ambos se adentraron a la silenciosa casa, ya era de noche, bastante tarde a decir verdad, la caminata del joven había sido larga, Gohan estaba despierto porque estaba haciendo algunos trabajos de investigación, pero Videl y la pequeña Pan dormían plácidamente.
Los hermanos se hallaban en la sala, Goten tomó asiento en uno de los sofás y Gohan se quedó de pie frente a su hermano. El joven sabía que venía un sermón, era de esperarse puesto que huyó de casa para irse de paseo con su amigo y su padre y después no regresó.
-No sé dónde has estado, pero te diré que no había escuchado a mamá tan furiosa cómo lo hice esta tarde. Dime Goten ¿De dónde vienes a estas horas?- La voz era firme, no estaba gritándole ni nada por el estilo pero la mirada era severa y fija sobre el joven.
-Yo…me fui a la playa con papá y Trunks.- apenas se escuchaba un hilo de voz, pero las palabras llegaron a la perfección los oídos del mayor.
-¿Y por qué no avisaste?
-Es que mamá no me había dado permiso y…
-Y pensaste que escapar era lo mejor.- Ante esas palabras el menor agachó la cabeza, ciertamente estaba mal lo que hizo, pero en ese momento sólo pensaba en pasar un buen rato con su padre y amigo.
Gohan se fijó en cómo se puso Goten, no pudo evitar soltar un suspiro. No es que quisiera regañar a su hermano, pero también se había preocupado ya que esa manera de actuar o era común en él.
-Goten, perdón, no es mi intención darte una reprimenda, pero entiéndeme, yo también me preocupe y más al darme cuenta de que no se podía sentir tu ki.
-No, la verdad si merezco que me regañes, hice mal en irme de casa.
Gohan sonrió de lado y tomó asiento junto a su hermano. En realidad no quería ser estricto con él, después de todo cuando de casó pasaba poco tiempo a su lado, dedicándose más a su esposa e hija.
-Pero dime ¿Por qué viniste hasta aquí? Sé que mamá te regañaría al verte llegar a estas horas, pero sólo eso, no creo que pase de un castigo.
-No es por eso….yo…- el joven comenzaba a dudar, ya no sabía si era buena idea haber ido a ver a su hermano, tenía plena confianza en él, pero lo que le quería decir no era algo fácil para él.
-Puedes decirme lo que sea, prometo no regañarte.
-Bueno, en realidad, hace varias horas que también hui de la playa. Me había quedado en unas montañas durante un rato y después decidí venir aquí, la verdad no siento ganas de ver a mamá.
-Ahora que lo dices, traes puesto tu traje de baño todavía. Pero no entiendo ¿Por qué te fuiste de la playa? ¿Sucedió algo con Trunks o papá?
-No, con ellos no pasó nada. En realidad pude sentir como estaban buscándome.
-Entonces no entiendo. ¿Qué sucedió?
Los ojos del joven sin querer empezaron a hacerse llorosos, su boca temblaba un poco, simplemente no podía terminar de aceptar aquello que había descubierto.
Su hermano al verlo se preocupó, Goten solía ser un joven bastante alegre y observarlo de ese modo nole agradaba.
-Goten, por favor dime que sucede. ¿Qué pasó para que te pongas así?
-Es que yo….yo…- sus palabras ya salían entre sollozos, causando que la preocupación de su hermano fuese en aumento.
-Tranquilízate, respira hondo y dime.
-Mi papá y el señor Vegeta…ellos son más que amigos.
Gohan se quedó paralizado por un momento al escuchar esas palabras salir de los labios del menor.
-¿Estás seguro de lo que dice Goten? ¿No habrás mal interpretado las cosas?- el mayor tenía la esperanza de que el joven solo haya escuchado un comentario y con eso persuadirlo, pero la mirada de su hermano le confirmaba que estaba completamente seguro de lo que decía.
-Estoy completamente seguro…no puedo creer que nos hayan engañado.
El joven dejó caer lagrimas gruesas que rodeaban sus mejillas, admitir la relación del príncipe con su padre no era fácil, él había creído que tenían solamente una amistad.
-Pero ¿Cómo te enteraste? ¿Acaso tú los viste?- la sola idea se pasaba por su cabeza, ya era bastante malo que la inocente mente de su hermano se enterara de eso, sería peor que los hubiese visto.
El joven negó con la cabeza gacha, estaba jugando con sus manos, las lágrimas habían cesado, y un sonrojo se asomaba por sus mejillas.
-Yo…..bueno, no te dije pero también el papá de Trunks fue con nosotros a la playa. Trunks y yo estábamos jugando en la playa junto con papá, el señor Vegeta ya no estaba y bueno yo fui a buscar algo al vehículo en el que fuimos. Papá y yo sin querer llevamos un traje de baño bastante parecido y yo me puse su camisa….
-No entiendo que tiene que ver eso Goten.
-Es que….cuando estaba buscando las cosas, sentí como alguien me…..- el joven estaba tan rojo como un tomate, sentía el calor aprisionando sus mejillas- …. Yo sentí como alguien me tomó de la entrepierna, me tensé, después de eso pude escuchar un susurro, era el señor Vegeta. Al parecer me confundió con mi padre y por eso me tocó. Cuando se dio cuenta me soltó y yo hui de ahí.
Para Gohan escuchar esas palabras fueron demasiado, ignoro por completo lo demás, dejando que en su cabeza retumbara < el señor Vegeta me tocó>
Sus ojos echaban chispas, sin darse cuenta su ki fue incrementándose, ya de por si no le agradaba mucho Vegeta, esto fue la gota que derramó el vaso.
-Ese maldito….¿Cómo se atrevió?
Gohan se levanto de su asiento, pensaba ir de inmediato donde el príncipe aun sin darse cuenta de que no podía sentir su presencia.
-Gohan ¿Qué haces?
-Iré a buscar a Vegeta, esto no se puede quedar asi.
Su hermano al escuchar eso se asusto, ya sabia que Gohan no tenia tan buena condición como antes, temia que le sucediera algo.
-No, espera por favor Gohan, no vayas. No quiero que te haga daño.
-No puedes pedirme eso Goten, ese maldito se atrevió a tocarte.
-Si, pero si vas, él sabrá que te dije sobre la relación que tiene con papá y entonces si nos matara a ambos.- las palabras del joven eran algo exageradas, pero quería persuadir a su hermano.
Pasó un rato tratando de convencerlo hasta que lo logró, sin embargo no Gohan no se quedaría así, pensaba hablar en la mañana con su padre.
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-¡No puedo creer que me hayas desobedecido! ¡¿Tan siquiera tienes idea de que hora es?!
El joven peli lila estaba en su habitación, su madre se hallaba dándole una reprimenda. Bulma estaba hecha una furia.
-Mamá si me dejaras explicarte...
-¡¿Explicarme?!- la mujer bajo un poco su tono pero seguía siendo severo. - Te fuiste aun estando castigado, te llevaste uno de los vehículos de la corporación y le quitaste el localizador y para colmo regresas a estas horas como si nada. No hay nada que explicarme. No se que sucede contigo, has desafiado mi autoridad y roto mi confianza. No me importa la razón del porque lo hiciste, mañana mismo hablaré con tu padre, el tiene que intervenir tambien, no se a que lleguemos pero mereces un escarmiento.
Con eso ultimo la mujer se retiro a tratar de dormir. La verdad es que el joven ya se esperaba ese regaño, no le sorprendía.
Antes de acostarse, decidió tomar un baño. Se despojo de sus ropas y se metió bajo el chorro caliente de la regadera.
Sus pensamientos aun rondaban en su amigo, a pesar de la búsqueda ardua no encontró pista de él. Incluso pensó que se hallaría en su cada, pero al ir a buscarlo tampoco lo encontró, solo vio a una pelinegra enfurecida.
Terminó de darse el baño y solo se coloco unos boxers, se recosto en la cama dejando que poco a poco sus ojos se cerraran, teniendo como último pensamiento a Goten.
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Daba vueltas en aquella cama, la sentía demasiado espaciosa y la noche la sentía mas fría que de costumbre sin ese cuerpo de su amante junto a él.
El de cabellos alborotados había resignado la búsqueda de su hijo pensando que estaría bien y pensó tambien que el príncipe solo se fue a entrenar en solitario.
La casa estaba demasiado silenciosa y la verdad buscaba los brazos q del de cabellos de flama.
Estaba cansado, y sus ojos estaban dejándose llevar por morfeo.
-Vegeta...regresa pronto....- ya estaba apunto de dormirse, pero aquel irritante sonido del teléfono lo abrumó.
Pensó en ignorarlo pero sonaba sin cesar. No le quedó mas remedio que responder.
-Waaa...¿Bueno?
-#Papá, perdón por llamar tan tarde#
-¿Gohan? ¿Sucede algo hijo?
-#Iré al grano, necesitamos hablar mañana de algo importante#
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-Ugg....
-¿Quieres que continuemos donde nos quedamos?- esa voz gruesa y seductora susurraba al oído del joven para después lamer su oreja.
-No...de..tengase...ahh...- Goten estaba temblando, podía sentir como el calor en su cuerpo incrementaba.
-Esta parte no parece querer que me detenga.- aquella mano estaba posaba en el miembro del joven, sobándolo un poco.
-Ahh...ah...- su cuerpo dejaba recorrer una corriente eléctrica, sua rodillas temblaban demasiado, se sentía extraño, pero no era desagradable del todo. - Yo...yo...ah...
Poco a poco los ojos del joven se fueron abriendo, al principio estaba confundido porque no reconocía la habitación. Pero recordó que se había quedado a dormir en casa de su hermano.
Se rascó un poco los ojos, pero al momento de moverse sintió una incomodidad, después se dio cuenta de que su cuerpo estaba empapado en sudor.
Retiró la daban que cubría su cuerpo, sus ojos se abrieron al verse, era algo que jamas le había sucedido al joven, no sabia cómo sentirse.
Estaba excitado.