Capitulo 11
Tres semanas habían pasado. Minho aún no podía encontrar trabajo.
-Animo Minho, sé que podrás encontrar algo rápido. Mientras sabes que contaras con Amber noona – la chica trataba de dar palabras de re confortamiento.
-No quiero causar molestias, solo me siento algo mal por todo.- dijo Minho.
-¿Por qué no le pides a Jonghyun que te ayude? – la voz de Sulli se hizo presente.
-No quiero que crea que le busco para aprovecharme. – Minho aún se sentía algo mal. No había terminado muy bien el asunto con Jonghyun.
- No creo que piense eso. Digo no es como si hubiera pasado algo grave entre ustedes- Sulli solo hablaba pero Minho solo podía ponerle la etiqueta “INOCENTE” en la frente. Ella no estaba enterada de lo ocurrido en la fiesta con Kibum.
Aun recordaba el cómo había dejado a Jonghyun con la palabra en la boca, saliendo rápidamente de su auto. Era ya casi un mes desde eso. Y solo podía rezar por que el mayor hubiera usado protección o algo. De mientras no diría esas dudas.
-Ya llegue- la voz de su primo se hizo presente.
Una mueca de desagrado se instaló en el rostro del chico más pequeño.
-Huaag hyung que es lo que traes en esa bolsa- señalo la bolsa pequeña de papel que su primo traía.
-Lo de siempre. Pollo frito- e inocentemente el mayor saco una pieza de pollo, haciendo el olor mucho más intenso para el pelinegro.
Tanto el mayor como las dos chicas se sorprendieron al ver correr a Minho hacia el baño.
-¿Qué le pasa?- dijo Sulli una vez se tranquilizo el ambiente y su amiga hubiese ido a atender al pelinegro.
- Espero no sea lo que yo pienso.- se limito a decir Jinki.
-De acuerdo- por alguna razón la menor solo empezó a atar cabos.
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-Jonghyun deja de dar vueltas como león- dijo Kibum desde la cama mullida en al que se encontraba sentado.
-No me trago el que usáramos protección. Carajo. Ni siquiera ha querido hablarme. Ni siquiera ha ido a la universidad.
Para Jonghyun el no ver al pelinegro le estaba haciendo tirar de su cabello. Se quedaría calvo a ese paso.
-Pues vete calmando. Porque los lee vendrán a cenar. Jonghyun tienes que decidir. Te casas con Taemin o….
-Lo hare. Pero necesito decírselo a nuestros padres. Sabes cómo se ponen. Pero primero tengo que hablar con Minho sobre el asunto.
-Bueno, pero la cena es en unos minutos tan solo.
-Tendré que salir de improviso. No me importa dejar a los Lee arrumbados.
Kibum se limito a asentir con la cabeza. Su hermanastro estaba loco pero ni modos si él sería feliz al no casarse con Taemin, solo le quedaba apoyarlo.
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Amber solo miraba como su casi hermano devolvía el estomago. Eso no era normal. Supuso que la comida de la universidad no era buena.
-Minho ¿Te encuentras mejor?- dijo Jinki al ver a su primo casi cayéndose al salir del baño.
-Sí, solo estoy algo cansado. Todo este mal rato me tiene exhausto.
Jinki asintió.
El sonido de un puño tocando con insistencia sobre la puerta del pequeño apartamento de Amber y Sulli; interrumpió el silencio que se había formado.
Sulli se levanto de su asiento no muy segura de abrir o no la puerta, pero el brazo de Jinki la detuvo. Él camino hacia la puerta tomando la chapa para abrir la puerta.
Un puño fue el que entro a la casa dando directo a la mandíbula de Jinki que solo pudo tocar su labio roto. Sulli solo pudo abrir los ojos grande, al igual que todos los demás en la sala. Minho solo pudo correr hacia la habitación en cuanto vio a la persona parada en la entrada.
-¿Dónde está Minho?- la voz de Changmin sonaba ruda.
-¿Changmin que estás haciendo aquí?- Amber solo podía esconder el temor con palabras igual de rudas que el jira fon que tenía enfrente.
-Respóndeme Amber- Changmin parecía sacar chispas de los ojos.
-No sé donde está. No lo he visto desde hace semanas.
-¿Esta con su dichoso prometido cierto?¿Esta con el padre de Yoogeun?- eso tomo por sorpresa a Amber. Pero vio que esa era la única solución.
-Sí, está con él desde hace una semana. Tanto el como el niño se fueron a vivir con él. – la voz algo aturdida pero segura de Jinki hizo que Changmin volteara a verle.
-¿Y lo dejaron ir así como así? Minho no pudo ir con ese enano de pacotilla. Su lugar es a mi lado.
-Changmin no estás razonando. Engañaste a Minho hace casi tres meses.
-Me vale una mierda Sulli. Su lugar es a mi lado no al de ese Kim.- Los puños cerrados alertaron a Amber y a Jinki.- ¿Dónde está ahora?
El silencio reinaba en la casa. Minho solo podía ver como Changmin estaba volviéndose loco. Cogió el celular enviando un mensaje de ayuda a la persona que podría solucionar ese problema.
No tardo mucho para que Changmin saliera de la casa de Amber y se dirigiera hacia la suya. Eran pequeñas casas pero lo suficiente para dos personas, eso si Changmin no hacia añicos el lugar.
Veía que el mensaje no era contestado. Pese a sentirse mal por su cansancio decidió enfrentar al mayor. Salió de la casa de Amber y se dirigió a la propia sin importar los reclamos de sus amigos.
-Estoy aquí Changmin- la voz de Minho hizo que el mayor volteara a verle
-Creí que estarías con tu estúpido prometido…
-El está en su casa. Yo solo he venido por mis cosas…Pero lo mejor será irme y volver mañana.
-Tú no te irás a ningún lugar Minho- antes de que Minho pudiera cruzar la puerta los dedos fuertes del más alto le detuvieron, aferrándose a su brazo.
-Suéltame idiota, me estas lastimando.
-Suelta a mi prometido en este mismo instante….- la voz gruesa y molesta de Jonghyun alerto al mayor de los tres.
-Qué me dices enano. Por lo visto este puto ya se metió entre tus sabanas. Dime algo ¿Contigo si aflojo rápido? ¿Cuánto le pagaste?
Y una patada fuerte fue a parar al estomago de Changmin. Quien solo gimió de dolor.
-Eso es para que no te vuelvas a meter con mi familia. Te recuerdo que yo soy el padre de Yoogeun.
-Claro, para eso te vas a casar. El niño rico vuelve después de casi cuatro años y casándose lo resuelve, tú nunca has dado un solo peso por Minho o el niño.
-Para eso he vuelto, porque amo a Minho y no dejare que un imbécil como tú le lastime ni a él ni a mi hijo- el pelinegro solo permanecía en shock ante las palabras del más bajo.
-Escucha idiota. Minho es mío y de nadie más. – al parecer la patada de Jonghyun había sido fuerte como para que Changmin se retirara. El alto atravesó la puerta antes de dar una mirada fría a los dos menores y desaparecer rápidamente.
-¿Estás bien?- la voz de Jonghyun fue la primera en romper el incomodo silencio que se había formado.
-Perdón por meterte en este aprieto
-Sigue en pie mi trato…resolvería muchos problemas de ambos.
Minho tardo en reflexionar pero cuando Jonghyun estaba dispuesto a irse el mas alto le detuvo y hablo.
-Habla ahora mismo.