La puerta fue abierta, revelando una gran habitación con un balcón integrado que dejaba pasar la luz de la luna. Ambos no pudieron evitar ver la cama, enorme a decir verdad. Minho tímidamente se dirigió a sentarse en ese mullido colchón. Era una delicia poder sentir esa textura tan suave.
El castaño vio como Minho se recostaba de forma en que parecía en gatito. Un lindo gatito que le mostraba su trasero casi con descaro. Con sigilo y después de colocar el letrero y seguro en la puerta, se dirigió hacia la cama donde Minho soltaba suspiros.
-Nunca me había percatado de tu cicatriz. – Dijo Jonghyun acariciando la mejilla del menor quien se sorprendió de tener sobre su rostro debajo de la mirada atenta del mayor.
-Según mi hermano, mis ojos saltones la hacen pasar desapercibida.- soltó una risa cuando recordó los momentos con Siwon en su adolescencia.
-Pues tiene mucha razón.- Sintió los labios del mayor sobre su cicatriz para luego pasar a sus abultados labios.
-Jonghyun. ¿No tenías que llamar a tu madre? – Dijo nervioso cuando empezó a disfrutar de los tersos labios de Jonghyun.
-Minho, mi madre espera que disfrutemos el momento. No que yo le llame hasta estas horas.- Sintió de nuevo esos labios y cuando el mayor se coloco a su lado, no pudo evitar el enredar sus dedos detrás de la nuca de este.
-Estoy nervioso. Es decir, creo que si hacemos algo mal, lo niños…- Sintió la mano de su prometido sobre sus labios en señal de que guardase silencio.
-Yo me encargare de que nada falle. No seré ningún tonto. Nuestra noche de lujuria a mi parecer fue cuando estos dos pequeños fueron concebidos.- Dijo acariciando la barriga del menor quien rio ante la cosquillas.
-¿Hablas de la fiesta de Key? Porque si mis cuentas no fallan esa fue la verdadera noche en que los niños fueron concebidos. – Dijo con las mejillas rojas.
-De hecho yo ya sospechaba de eso cuando estuvimos juntos en el departamento. ¿Aun recuerdas esa cena?- sus labios se volvieron a juntar mientras el menor asentía con vergüenza. Había sido muy arriesgado esa noche. Pero no se arrepentía de esa noche ni de la mañana que paso con su prometido.
-Recuerdo sobre todo la mañana siguiente. Te dije que me sentía diferente contigo. – Por alguna razón sentía que debía sincerarse con el más bajo.
- Yo recuerdo que cuando me dijiste eso mi corazón iba a explotar.- Jonghyun sentía como su cuerpo sentía esa adrenalina que se da cuando le dices a alguien lo que sientes por esa persona.
-Puedo decir que yo lo siento ahora.- Minho jalo a Jonghyun haciendo que sus labios se juntasen de nuevo. Haciendo que todos sus sentimientos se liberaran sin que ellos dos supiesen.
Tenían miedo de poder decir lo que sentían en su totalidad. Nunca lo habían dicho y era realmente difícil.
Jonghyun decidió tomar la iniciativa al empezar a retirar poco a poco el saco que Minho portaba.
Escucho un gemido ronco en cuanto empezó con la camisa y sus manos habían pasado ligeramente por los pezones del menor.
-¿Eso te gusta?- Su voz ahora denotaba una lujuria pasional que nunca había sentido con nadie más que con él.
Minho no pudo evitar soltar otro gemido en cuanto su pezón su acariciado delicadamente. Su cuerpo era un manojo de sensaciones en ese momento.
Jadeo con mayor potencia cuando su miembro fue acariciado sobre la tela de su pantalón. Sin darse cuenta el otro ya le había quitado los zapatos y calcetines, mientras su miembro era acariciado de forma en que ya sentía una erección grande.
Pronto sus pantalones también fueron retirados de sus largas piernas, dejándole ahora solo con sus bóxer negros y su camisa de casi dos tallas más grande.
-Te ves realmente adorable así- Escucho las palabras de Kim y simplemente el decidió aventar una almohada a su cara.- De acuerdo no comentarios, pero es realmente la verdad.-
Lo que Kim no sabía era que Minho no se molestaba por que le avergonzara sus palabras, de hecho le gustaban, pero no de la forma adecuada pues solo lograba excitarle de forma en que las caricias podían dominarle por completo.
Pronto sus genitales quedaron expuestos ante el castaño. Minho solo pudo cubrir sus ojos con sus brazos. Las caricias que Jonghyun daba a sus muslos le hacían no saber a dónde mirar.
-Déjame ver tu rostro por favor.- escucho un susurro mientras unas manos retiraban lentamente sus brazos de su rostro, dejándole ver a un Jonghyun con una sonrisa que le convenció.
Cuando el otro quedo entre sus piernas el solo pudo sentir como Jonghyun había empezado a acariciar su miembro con lentitud que le hacía delirar para después sentir como la velocidad aumentaba hasta hacerlo cerrar los ojos.
Pero estos se abrieron cuando sintió algo.
-¿Qué estás haciendo?- Dijo levantándose poco a poco, pero solo pudo gemir al sentir de nuevo esa calidez en su pene.
-Jonghyun, no es necesario que hagas eso.- toco la cabeza de Jonghyun pero este solo estiró su brazo para indicarle que se acostara de nuevo. Jadeo de sorpresa. El mayor había succionado. Porque sí; su prometido le estaba haciendo sexo oral de la mejor forma.
No pudo evitar empezar a morder la manga de la camisa que traía puesta pues el placer era inmenso. Solo sentía como su miembro entraba y salía de la boca de Kim.
Cuando el otro abrió más sus piernas para que el las subiera a sus hombros, ese fue el momento en que su cerebro le indicaba parar. Pese a eso solo pudo gemir por más. Jonghyun le estaba volviendo loco.
Pero este simplemente no paraba de subir y bajar su boca por toda la extensión de Minho.
Jonghyun disfrutaba de esos sonidos que el menor expulsaba por su boca. Eran lo único que el necesitaba para tener una erección tan grande como su lujuria.
Antes de que Minho llegara decidió empezar a prepararle. Era enserio el no querer lastimarle.
Llevo dos dedos a su boca. Ahora maldecía no haber pasado a la farmacia. No tenía nada. Era mejor decirle a Minho.
-Minnie, no tengo condón ni lubricante.- Dijo apenado pues el chico protestaba al no recibir caricias.
-Jong~, si no te diste cuenta, estoy embarazado. No puedes volver a embarazarme y mi cuerpo está más dilatado con esto. Así que continua.- las palabras le sorprendieron al mayor puesto que Minho siempre era penoso en cuanto a su cuerpo, pero eso era bueno.
-De acuerdo. Ya es hora de que te prepare.- Dijo para llevar sus dedos de nuevo hasta que se humedecieran los suficiente.
Minho jadeo. Era cierto cuando decía que estaba más dilatado. Sus estúpidas hormonas. Pero frunció el ceño pues cuando el segundo entro fue cuando empezó a sentir las pequeñas punzadas.
-Tranquilo.- Escucho un susurro que le puso en calma. Cuando llego el tercer dedo no pudo evitar quejarse.
Eso era doloroso, pero cuando Jonghyun volvió su boca hacia su miembro le tranquilizo hasta hacer que su cuerpo se relajara.
Jadeo de placer cuando sintió algo húmedo. ¿Qué mierdas hacia Jonghyun?
Gimió cuando uno de los dedos alcanzó su ahora delicada próstata. El menor toque era un placer inmenso que le hacía casi gritar.
Siguió jadeando ante las caricias de Jonghyun. Pronto el mayor se retiro.
-Ya esta pequeño. No te quiero lastimar y si lo hago en la postura en que estas lo haría. Tendrás que cabalgarme.- trago saliva. Hacía tiempo que no hacía eso. Su mente solo recordaba haberlo hecho cuando tenía 15 años.
-No lo he hecho en mucho tiempo. La última vez, fue cuando… hace 4 años.- susurró para luego sentir los labios de su prometido.
-Yo te guiare.- su frente también fue besada. Después, cuando Jonghyun estuvo recostado en la cama fue su turno y lentamente fue subiendo con cuidado. En el trayecto el miembro de Jonghyun había chocado con su trasero y su perineo.
Ambos se dirigieron una mirada de lujuria puesto que sus miembros se rozaban.
El menor fue el primero en hacer que sus partes de juntaran al acercar su entrada hacia el glande de Kim.
Pronto empezó el vaivén lento que les hizo suspirar de forma candente y lujuriosa.
Cuando Minho empezó a llegar a su clímax no espero a que Jonghyun abriera su camisa para empezar a acariciar sus pezones.
-Jong~- Gimió cuando los movimientos se hicieron precisos. Pero gritó cuando Jonghyun acerco su boca hacia estos. Succionando así todo lo que ellos habían hablado en el auto.
-Hablaba en serio cuando dije que esto me excitaba.- Jonghyun miro la carita de placer que el menor puso en esos momentos. La quería memorizar perfectamente.
Pronto el placer de ambos fue irreversible. Todos sus cuerpos se tensaron al sentir el orgasmo llegar.
Jonghyun acuno a Minho quien cayó con cuidado a un lado. Ambos tenían los cuerpos sudorosos, pero no importaba eso. Aunque si tenían que darse un baño.
-Minho. Tenemos que bañarnos.- Dijo acariciando la mejilla del menor quien negó en un principio pero luego asintió.
-Pero que este calientita el agua.- Kim besó ese lindo puchero mal hecho. Si algo sabía ahora era que Minho sobornaba con sus pucheros para que la gente le hiciera caso con tal de que lo dejara de hacer, pero a sus ojos ese era un gesto que le encantaba.
-Todo lo que quieras. Andando.
Cuando Minho entro en el baño después de un rato él miró el balcón a esperar. Realmente estaba perdiendo la cabeza con ese chico.
-Jong… la bañera es grande y cabemos los dos.- escucho una vocecita a sus espaldas. Era el menor quien aun traía la camisa. Sonrió.
-¿Quieres que nos bañemos juntos? – Vio asentir al menor a lo que el sonrió con dulzura. Cuando Minho quería, podía ser una cosita muy linda. Aunque podía ser una fiera cuando se lo proponía.
Asintió mirando de nuevo la luna que ya estaba próxima a irse, para luego mirar al chico. Amaba ese chico.
¿Momento? ¿Amaba a Minho?
Carcajeó por lo bajo al darse cuenta de eso. Amaba a Minho y era eso lo que sentía. Se levanto de la cama para dirigirse al baño junto a Choi.
Eso significaba grandes cambios a partir de ahora.