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Lo que habia abajo de la cabaña por minima

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Notas del capitulo: Si algunas partes parecen subidas de tono extraño o pasadas de fumadas es porque he escrito esto en medio de la noche y he visto las películas de Hell Raiser que no encuentre muy coherentes, también creo que acabo de reprobar un examen y eso me deja deprimente. U_U
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Esto era una locura, era una pesadilla, era peor que todo eso que alguna vez pudo llegar a temer en su vida. Era algo que estaba viviendo.

La conciencia solo lo regresa a la realidad, y a un mar de sensaciones de una gama inimaginable, el dolor y el placer danzan en su piel tan estrechamente que es difícil confundirlo. Esto lo está volviendo loco.

¿Qué está pasando?

Con alguien con experiencia que ha despertado innumerables veces preguntándose donde esta o que paso el día anterior, los recuerdos caen en su mente como tormenta de truenos y relámpagos en la bruma semi consiente de su despertar.

Muerte, destrucción, la pérdida de sus amigos y el despertar de un dios antiguo más allá de su comprensión. Y sabe que ni en sus más locos viajes por la hierba o droga que alguna vez ingirió sería capaz de imaginar ello.

No quiere estar aquí, no debería estar aquí, las cosas debieron ser diferentes.

Unas pequeñas vacaciones con sus amigos, viendo los avances de ese tal Holden con Dana en un intento de Jules y Curt de hacer que su amiga olvidara su última experiencia amorosa con aquel profesor, divirtiéndose con sus amigos, compartiendo sus teorías conspirativas y filosóficas.

Pero no fue así, solo fueron a la boca del lobo como ingenuos corderos al matadero.

¿Dónde es aquí?

No es la muerte, o no que se supone que cree que es la muerte.

Se siente tan perdido pero a la vez es tan hiperconsiente de su cuerpo, es como si pudiera sentir cada hueso, musculo, nervio y fibra de el por primera vez.

Sus pulmones se expanden y contraen en su caja torácica tratando de respirar, su corazón palpita aceleradamente, incluso cree sentir como su cuerpo empieza a liberar endorfinas para lidiar con el dolor y el placer que lo sigue confundiendo.

¿Qué pasa?

Debería estar muerto, tantas veces esa noche que estuvo rosándola como un carro descontrolado patinando en una carretera cubierta de hielo, y aun así siguió vivo hasta el final.

¡Está vivo! Y que agónico puede ser esto.

Su piel se siente demasiado sensible, en realidad todo su cuerpo hasta la medula lo está, esta consiente que no tiene nada puesto, nada de ropa, su piel no soportaría una carga como en esa en esos momentos.

Ahora la duda de donde está su ropa, ¿Quién se las quito?

-Marty, Marty, y aun me sorprender muchacho. Me hubiera esperado que siguieras inconsciente un poco más, pero despiertas. Como siempre haces las cosas a tu ritmo-

Esa voz, esa que le susurro aquella noche, ya no es un susurro, es algo a su lado palpable, o sería mejor decir algo en su interior, como voces en su cabeza.

-¿Qué? Ugghhh…-

Oh, incluso hablar es un dolor punzante. Las palabras salen como cien pies desde la garganta, arañando su camino al exterior.

No puede soportarlo, no quiere soportarlo.

-Pero lo harás, lo estás haciendo tan bien- una mano se posa en su pecho y arde, como arde. Ser enterrado en brea caliente sería mucho más fresco eso –solo acepta tu recompensa- la mano se desliza a través de su pecho hacia su vientre, el trayecto aunque corto es agónico, es un camino de fuego que se propagaba por todo su cuerpo -¿Qué tal se siente?- suelta en son de burla, es más que obvio que aquella entidad sabe perfectamente cómo se siente.

No quiere suplicar, pero está a punto de hacerlo para que pare. Ya ni se molesta en preguntar por qué ya que esto no tiene lógica para él, solo quiere que pare.

-Pero Marty, esto apenas comienza- dice aquel Dios mientras parece que su ha llegado a su destino, su miembro.

Suelta un lastimero sollozo y no está seguro que clase de tortura o acoso este, solo quiere que se acabe. La mano arde en sus genitales y puede jurar que es capaz de derretir la carne si se lo propone, cosa que no hace quizás para prolongar aún más el sufrimiento.

-Es en el máximo sufrimiento donde podemos apreciar las más exquisitas sensaciones y delicias, solo déjame mostrarte Marty. Esto es el comienzo-

Locuras, eran puras locuras, y él se estaba volviendo loco.

La mano que ardía al rojo vivo parecía muy entretenida en sus partes nobles, y lo más extraño es como respondían estas. En lugar de achicharrarse cual tocino podía sentir a su pene erguirse lentamente con la dolorosa caricia, y las sensaciones seguían bailando en su cuerpo, picando, acariciando y apuñalando.

Trato de retorcerse, alejarse, levantarse pero no puede, su cuerpo agoniza pero no puede escapar de su propia piel. La mano se desliza más abajo a sus muslos y los separa, ahora hay un cuerpo entre sus piernas que irradia calor cual sol.

Su mirada que mira sin ver por fin se enfoca en ese cuerpo de lava y fuego, y de otras cosas oscuras y antiguas. Ahora la versión que tiene delante de él tiene sus cuernos de venado irguiéndose orgullosamente en su frente, sus colmillos resaltan en una sonrisa depredadora y su mirada arde tan intensamente que lo puede sentir sobre todo su cuerpo, aunque no es lo único que sus cuernos es lo que se mantiene parado en ese cuerpo.

Lo siente golpear contra su muslo, y no es necesario ser un genio o estar lo suficiente consiente para adivinar que es.

-Sí, y con mi semilla bautizare este cuerpo tuyo a esta nueva era-

No sabe si sus toques son suaves, o si expresa alguna forma de cariño, todo es confuso y doloso, tanto que bruma tanto su mente que siente que está al rojo vivo. Y si piensa que esto no puede empeorar, su carne es abierta y profanada por un fierro al rojo vivo, o al menos así se siente.

Sin preparación o cuidado ese monstruo atraviesa su cuerpo abriendo bruscamente sus paredes anales, si es posible Marty se siente aún más caliente, más doloroso, y en contra parte, lo que más teme en esos momentos, su cuerpo experimente placer.

¿Por qué?

-Mi mascota merece su premio, no solo puedo dejar que sufras en esto, también mereces algo de placer. Aunque si gustas en otro momento puedes experimentar solo dolor-

Marty niega y se retuerce. Sabe que esto apenas comienza pero imaginar otra repetición de esto ya causa más dolor dentro de él. Se está empezando a mover.

Su falo es enorme, grueso y duro como roca, quizá su cuerpo este hecho de algún mineral parecido y no de carne endeble y hueso frágil como el cuerpo que posee. Marty puede sentir el aliento jadeante sobre su rostro, puede ver los colmillos tan cerca de él que bien podría morder su cara y arrancarle la cara, por todo lo vivido lo cree muy capaz, pero en lugar de una mordida recibe un beso.

Es como el primero, dominante, salvaje, las manos no quedan atrás, toman sus caderas en un agarre que podría triturar sus huesos pero lo mantiene firme para que las caderas choquen en un ritmo frenético y animal.

Llora, ya no sabe ni porque, si por el dolor, por el miedo, la confusión y vergüenza, o porque esa punzada de placer aumenta hasta ser comparada al mismo nivel que el placer. Jamás había experimentado esto.

¿Así se siente estar con un Dios?

Con esto no creía que María o cualquier concepción virgen hubiera sido realizada en la historia del hombre por cualquier deidad, si podían experimentar esto no mantendrían sus piernas cerradas y castas.

¿Qué le está pasando? Simple locura.

Sus sollozos se mezclan con gemidos, le es difícil respirar y pensar coherentemente, el tiempo rece no tener coherencias.

Un segundo podría parecer una eternidad y un minuto un infinito en este tipo de situación, podria convertirse en polvo en esos momentos y poco le importaría.

La boca recorre su mentón y llega el cuello, puede sentir el filo de estos cortar su piel, sangre es lava, y él la bebe como agua salida de un manantial, cuando llega a la base de su cuello donde se une con el hombro es ahí cuando muerde, duro y como depredador parece que quiera arrancar un buen pedazo de carne, pero solo absorbe u sangre, se amanta de ella y lo escucha ronronear o lo que sea se ese sonido cuando lo hace.

-Oh Marty Marty, no me cansare de esto-

Las estocadas siguen, el falo ardiente parece que lo destroza desde adentro mientras que garras y dientes lo hacen desde afuera, y bien debería estar muriendo pero no pasa, ¿Por qué ese ser lo dejaría morir si se está entreteniendo tanto con él? Algo le dice que la razón que no a caído inconsciente aun es por la propia voluntad de este dios oscuro.

Y lo siente, profundo de él llenándolo con su semilla igual de ardiente que su poseedor, el Dios suelta un rugido, profundo y gutural, un ente que es más allá de cualquier comprensión humana disfrutando de los placeres de la carne con su más reciente adquisición. Inevitable como todas las otras sensaciones Marty igual llega a su orgasmo, y no ve estrellas, solo dos pozos profundos de fuego eterno en esos ojos que prometen días y noches de perdición, y una posible eternidad de cosas incomprensibles aun para este humano que ahora posee.

Más allá del cansancio pero aun consiente siente el cuerpo del dios oscuro estrecharlo, es apenas consiente que están en un lecho, es aún menos consiente si es de dia o de noche, solo sabe que ya no hay escapatoria.

El mundo dejara de existir, y él yace junto a su verdugo.

Locura, y luego por fin duerme, mientras que aquel Dios vislumbra el futuro con su nueva adquisición.

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