Quiero tenerte.
Siempre entre mis brazos.
De día sueño despierto.
Y de noche.
Sueño nuevamente contigo.
Al despertarme sentí un dulce aroma y una calidez que no había sentido antes. . . ¿Qué paso anoche? Aun mi ojos no se adaptan, aun me mente no se despierta al observar bien, mientras la luz de la ventana se cuela a la habitación, miro a mi lado allí esta Kaito-san. . .
-“¿Qué?” –Pienso por un momento para luego acordarme de lo que ocurrió anoche –“casi lo hago con él. . . con quien ha estado importunando mi sueños todos estas noches” “con quien he soñado despierto” –Mire como la luz bañaba su piel color crema, como hacia iluminar su cabello parecía un hermoso ángel – “anoche no pude hacerlo con él....” “comenzó a llorar de repente aunque él fue el de la propuesta”
-Mh... –Se quejó entre sueños abriendo sus hermosos ojos mares no pude evitar sonreír, al verlo abrirlo e iluminarse, nos miramos fijamente un rato –
-Buenos días –pronuncie acariciando su mejilla las cual obtuvieron un ligero rojo –
-B. . . buenos días –Respondió algo nervioso – ¿Qué horas son? –Me pregunto –
-No lo sé –Contesté encogiéndome de hombros –Hace poco desperté
-oh. . . ya veo –Respondió para levantarse – ¿lo de anoche?
-Ya sé. . . solo fue una noche. . . está bien. . No tienes por qué repetirlo –Contesté –
-¿no…estas molesto? ¿Te sientes asqueado? ¿Algo? –Yo solo negué –
-. . . Kaito-san si sintiera tal cosa, te fuera sacado de mi habitación, no te fuera besado. . . no lo fuéramos casi hecho. . . y sobre todas las cosas. . . no te habría dejado dormir conmigo. . . todo está bien así que por favor cálmate –Respondí –
-. . . esto. . . ¿cambiara algo entre nosotros? –Me pregunto, le mire un momento. . . estaba nerviosos su cuerpo lo delataba. . . sabes a veces eres como un libro abierto para mí –
-¿quieres que algo cambie? –Pregunte, él bajo la mirada un momento –
-No. . . No quiero –Me pregunto a quien le dolió más esas palabras… a ti… ¿o a mí? –
-Entonces. . . nada cambiara –Respondí –
-Y…yo… me iré a mi habitación –Yo solo asentí, pero ansiaba sujetarte del brazo y decirte que no te fueras –
-Que no se te olvide tu camisa –Respondí, se sonrojo nuevamente para tomarla y ponérsela y luego marcharse… y otra vez. . . me sentí solo y vacío –
Entre tu fragancia yo me quedo dormido.
Como mancebo ante ti he caído.
Me levante de la cama algo perezoso no quería hacerlo estaba inundada de su aroma a vainilla, solté un suspiro aun sintiendo el vació en mi pecho. . . me pregunto por qué… desde hace tanto siento este vació… pero. . . cuando él está a mi lado ¿no lo siento?
Tomo una ducha, aunque quería seguir sintiendo ese aroma a vainilla, intente secar mi cabello lo mejor que pude pero aun así quedo un poco húmedo. . .tome unos pantalones de mezclilla negros con una camisa sin mangas de color blanco unas pulseras en mis muñecas algo simple… me deje el cabello suelto esperando que se secara un poco más y hacerme mi típica cola.
Al salir él está allí con unos pantalones de mezclilla azul marino unos tenis blancos una camisa azul sin mangas y su típica bufanda sencillo pero hermoso en él. . . sonreí al verlo, él se ruborizo y miro hacia otro lado.
Y me estuvo evitando. . . y eso me molestaba porque yo estaba empeñado en algo. . . porque él a mí me gustaba demasiado. . . eso yo lo había comprendido esa noche en donde dormimos juntos. Pude haber tenido a muchas mujeres en mis sabanas… pero solo él me hizo sentir completo sin necesidad de nada más. . . solo sus brazos. . . solo su calidez reconfortante nada más. . . solo él.
Como un infante me encuentro perdido.
Anhelando aquel dulce.
Que me han prohibido.
Me quede en el patio sentando cerca de las rosas azules por cada vocaloid había una rosa de su debido color. . . y yo estaba con las de su color mirándolas a tomar una me piche un dedo. . . dejando que la sangre fluyera. . . él es una bella rosa. . . pero tiene sus espinas. . . Por más hermosa que sea. . . defenderá su corazón ¿no es así?
Solté un ligero suspiro para levantarme de donde estaba y dirigirme a la mansión nuevamente allí estabas sonriéndole a los demás ignorándome bajando la mirada yo creo que no puedo soportar esto más… siempre me he caracterizado por ser alguien paciente… ¡Pero me cabrea cada vez que le sonríes a ella! Y solo quiero gritarle ¡Maldita perra él es mío! Pero no puedo. . . odio que le sonría con ingenuidad haciendo que se ruborice y luego lo trate mal. . . él es hermoso, él merece el mejor de los tratos. . . él es una bella rosa… cuyo pétalos evitara que se caigan o marchiten… él es mi rosa.
-Kaito-san. . .yo necesito hablar contigo a solas –Pronuncie interrumpiéndolo a ustedes dos –
-No es posible Kaito-kun y yo saldremos juntos ¿verdad que si? –Le sonrió y eso me molesto aún más –
-Si. . . lo siento Gakupo-san pero. . . – No le deje terminar y me lo lleve arrastrado hasta mi cuarto –
-¡Gakupo-San! ¡Qué cree que hace deje a Kaito-kun! –Me grito comenzando a perseguirme también, metí a Kaito-san a mi habitación y le cerré la puerta en la cara escuchando como la pateaba –
-Gakupo-san ¿pero qué te pasa? –Sus ojos me miraba desconcertados mientras se encontraban encerrado en mi habitación –Déjame salir, le prometí que –Y no lo deje hablar cuando ya lo estaba besando, lo tome de la cintura apegándome fuerte a su cuerpo, al separarnos solo pude sentir una fuerte bofetada – pero ¿Qué demonios te pasa?
-A ti que rayos te pasa. . . primero me dices que quieres dormir conmigo. . . luego me ignoras. . . ¿acaso jugaste conmigo? –Pronuncie mirándole dolido – dijiste que nada cambiaria pero cambiaste, te apartaste de mí… ¿Tratas de volverme loco? ¿Crees que no me duele? Toda mi maldita vida he sentido un vació. . . en mi pecho y cuando al fin no lo siento es porque tu estas a mi lado. . . y luego te apartas así sin más. . . ¿qué crees que soy Kaito-san? ¡¿Tú maldito juguete acaso?!
-Y…yo tengo una relación con ella. . . y no planeo arruinarla –Me dijo viéndome a los ojos. . . sentí que algo se quebraba dentro de mí. . . como mi pecho dolía. . . como mi garganta… se desgarraba. . . ¿Qué es esto que brota de mis ojos? ¿Lágrimas? –Gakupo-san. . .
-Lárgate de mi habitación –Pronuncie toco mi hombro y solo lo aparte – ¡Lárgate ahora mismo! ¡No soy el maldito juego de nadie me entiendes Kaito Shion! –Le grite completamente dolido – ¡Quieres estar con ella! ¡Bien! ¡Hazlo! ¡Q. . . quédate a su lado! –al parecer no se quería ir y solo lo saque de allí al cerrar la puerta no pude evitar caer de rodillas… las lágrimas no dejaban de correr por mis ojos… me tape la boca intentado ahogar aquel grito que quería provenir de mi garganta… aquel dolor desgarrador que me atravesaba –
Yo. . . solo quería tenerte… entre mis brazos.
Quiero tenerte
Siempre entre mis brazos
Tu suave calidez
Tu ternura y tu pálida tez
Quiero tenerte
Amándonos
Juntos los dos tomado de la mano.