Haru, Chrome, Kyoko y Nana estaban muy contentas. Durante todo el tiempo en el que estuvieron en Italia, mimaron y ayudaron en todo a Prisma, quien al principio se sentía un poco incómoda, pero luego les fue tomando confianza.
A los 3 meses, la pareja y Prisma fueron al consultorio de Verde para averiguar el sexo del bebé, y se alegraron mucho al saber de qué se trataba de un niño.
Pasó bastante tiempo… Prisma ya cumpliría los 9 meses de embarazo y tanto Hibari como Tsuna no podían estar más felices… muy pronto tendrían a su hijo entre sus brazos.
El 12 de setiembre fue el día en el que Mizuki, como habían decidido se llamaría su hijo, decidió venir al mundo.
Tsuna, Hibari, Reborn y los demás guardianes se encontraban en el hospital, donde unos quince minutos antes se habían llevado a Prisma a la sala de parto.
El castaño estaba muy nervioso, caminaba de un lado a otro, por lo que Hibari lo abrazo y le dijo un “Todo va a estar bien” para tranquilizarlo. El castaño no pudo hacer más que acurrucarse al cuerpo de su pareja y aspirar su aroma para calmar su ansiedad.
Pasaron diez minutos más y Verde llegó para decirles que el bebé ya había nacido y que podían ir a la habitación de Prisma ya que en unos minutos llevarían al “futuro heredero Vongola” allí.
Tsuna y Hibari entraron a la habitación e inmediatamente el castaño le preguntó a Prisma el cómo se encontraba. Esta le indicó que bien y unos instantes después llegó una enfermera con su bebé en brazos.
Estaba por entregarle el bebé a Prisma cuando esta se lo impidió.
-Ellos son los padres de esta criatura, entrégueselo a ellos por favor – habló
-¿Ehh?- la enfermera estaba un poco confundida- e-está bien… aquí tienen, es un lindo bebé - dijo para luego entregar en los brazos de Tsuna al recién nacido
-Mizuki- Habló Tsuna observando al bebé quien tenía la cabellera negra como su padre, pero que había sacado sus ojos color avellana- eres hermoso… te esperamos tan ansiosos- Tsuna no pudo evitar llorar al ver a su hijo, se sentía sumamente feliz
-Es un lindo herbívoro al igual que tú- habló Hibari, quien se encontraba al lado de Tsuna y acariciaba los cabellos y el rostro de su hijo
-Puedo ver en sus rostros la felicidad que ahora sienten- habló la peliazul llamando la atención de la pareja -me alegra en verdad haber podido ayudarlos a traer a esa hermosa criatura al mundo, todo este tiempo la he pasado muy bien a su cuidado, les agradezco por todo
-No- Tsuna negó con la cabeza- es todo lo contrario, no sabes lo infinitamente agradecido que estoy contigo, muchas gracias, Prisma-el castaño le dedicó una gran y dulce sonrisa
-Yo…- habló esta vez el pelinegro- te agradezco por todo
Prisma sonrió como casi nunca hacía- mañana dejaré la mansión y regresaré a mi tribu
-P-Prisma, si quieres puedes…
-No, yo ya cumplí mi misión aquí, es hora de que vuelva a mi mundo- dijo decidida la peli azul
-E-Está bien, entiendo- respondió el castaño
Al escucharse unos ruidos fuera de la habitación, Prisma habló nuevamente dirigiéndose a Tsuna.
-Creo que están ansiosos por conocer al bebé, será bueno que vayas a presentárselos
-S-Sí- el castaño se paró del asiento donde estaba con su hijo en brazos
-Vamos- dijo Hibari para luego salir de la habitación junto a su pareja
Agradezco el haber conocido a personas tan buenas como ustedes, estoy seguro que aquella criatura crecerá rodeada de amor y hermandad en una familia tan unida como lo es Vóngola-pensó la mujer antes de rendirse antes de caer profundamente dormida.
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Habían pasado dos semanas desde el nacimiento de Mizuki. Tsuna nunca pensó que Hibari pudiera ser tan amoroso con su hijo, siempre estaba pendiente de él y del bebé, prácticamente no dormía por las noches… en pocas palabras un excelente padre.
-Ahh- suspiró el castaño- por fin se durmió- dijo mirando la hermosa luna llena junto a su amante en el balcón de su habitación
-Sí, es tan testarudo como su padre- habló Hibari abrazando al castaño de la cintura
-Estoy muy contento, Kyoya
-Desde que nació Mizuki no hay nada que cause que la sonrisa en tu rostro se esfume
-Sí, es nuestro tesoro- los ojos de Tsuna brillaron- pero también estoy contento por mis guardianes
-¿A qué te refieres?
-El bebé de Squalo ya tiene cinco meses
-Aquel espadachín será una madre muy gritona
-Jaja- el castaño sonrió por lo dicho por Hibari- tienes razón
-Tengo entendido también que Yamamoto y el entrometido peliplata que siempre nos interrumpe cuando…
El castaño se apresuró a taparle la boca a su pareja para que no siguiese dando “detalles” que lo avergonzaban.
-Sí, Gokudera-kun y Yamamoto planean muy pronto tener un bebé al igual que Mukuro y Byakuran
-Uhm- Hibari tomó las manos de su herbívoro y las retiró de su rostro- una razón más para molestar a la piña
-Kyoya…- sonrió- nunca cambiarás
-Aun así me amas
El sonrojo en el rostro del castaño se hizo notar y se giró a observar el hermoso paisaje iluminado por la luz de la luna que se dejaba observar esa noche.
-Tsunayoshi…
-Vóngola está en época de paz- volteó su rostro para mirar fijamente al mayor- te tengo a ti y a nuestro hijo a mi lado ¿Qué más puedo pedir?– acercó sus labios a los del contrario y depositó un casto y dulce beso en estos
Tras unos segundos se separaron.
-Me siento muy feliz también, Tsunayoshi- Hibari observó fijamente a su pareja- nunca pensé en formar una familia como la nuestra, y todo fue gracias a que te conocí... tenía razón cuando te dije alguna vez… “Es el cielo el que permite que la nube se mueva libremente”- sonrió- todo este tiempo he sido yo mismo, nunca te ha molestado mi actitud fría o solitaria, me amas con todos mis defectos… me amas tanto como lo hago yo contigo… te amo herbívoro
Tsuna sonrió alegremente y rodeó con sus brazos el cuello de su amante- Y no me dirás “Pero algún día al mismo cielo lo morderé hasta la muerte”- dijo divertido recordando las palabras que alguna vez le dijo Kyoya
-Uhm…- Hibari sonrió de medio lado tomando de la cintura al castaño y apegándolo más a su cuerpo- No, no lo haré porque a ese herbívoro- lamió el cuello del castaño- yo ya lo saboreé de todas las formas
Tsuna se sonrojo fuertemente- pervertido- dijo para luego dejarse llevar por Kyoya hacia la cama de su habitación, esa noche sería mágica como todas las demás, porque estaría con a persona a la que más amaba.
“Hoy quiero jurarte amor eterno porque he comprobado que solo a tu lado puedo ser feliz y también quiero darte las gracias por darle sentido a mi vida y enseñarme lo maravilloso que es este mundo cuando se ama de verdad”
FIN