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I ONLY WANNA BE WITH YOU [BAEKYEOL/HUNHAN] por NaranjaSentimiento

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Notas del capitulo:

Como lo prometimo, aqui esta la segunda parte de la doble actualizacion, para los fans del hunhan, aqui esta su capitulo. AHORA COMIENZA EL DRAMA el final del capitulo es de infarto, asi que si les gusto, no se olviden de dejar su comentario

Iba por los pasillos vacíos con destino a su aula, al llegar se paró en la puerta, sintió la mirada de todos sobre él.

-pasa luhan, mañana hablaremos en mi oficina -dijo la profesora haciendo un gesto con la mano indicándole que pase.

Ya en su asiento notó que baekhyun no estaba en el aula, como siempre que tienen problemas, y tal vez sea lo mejor, no le gustaría encontrarse con él en ese momento, tal vez se había encontrado con sehun y estarían juntos -como sea, eso no me importa- se decía a sí mismo, tratando de convencerse de que no le molesta la situación -tengo cosas más importantes en las cuales pensar- luhan alzó la vista, para tratar de poner atención a clases, pero se dio cuenta de que ya clase ya había finalizado y la profesora se estaba retirando del salón.

Luhan rápidamente se levantó de su asiento, listo para salir, pues tenía que llegar rápido a su trabajo, salió del aula, pero al caminar sentía como sus compañeros de aula lo seguían, al principio pensó que era imaginación suya, pero después se dio cuenta de que era real, la mayoría de sus compañeros lo estaba siguiendo, por ellos luhan decidió cambiar de rumbo e ir corriendo a la puerta del estacionamiento, cuando pensó que ya los había perdido, camino más tranquilo hacia la puerta del estacionamiento y volteo para ver que no había nadie detrás suyo pero cuando volvió a mirar al frente se encontró con uno de sus compañeros y vio como los demás iban saliendo de detrás de los carros.

-valla, sí que eres lento Luhan, bueno, lento sólo en esto, porque sabemos que para otras cosas no -dijo uno de los chicos, quienes se comenzaban a reunir alrededor suyo con las manos detrás de su espalda.

-vamos a darte una lección, para ver si así se te quita lo zorra -dijo esta vez una chica dejando ver en sus manos un par de huevos y luego los demás chicos dejaron ver sus manos, en las cuales habían huevos, pirotécnicos, globos llenos con agua, harina, tierra, entre otras cosas más.

 

 

 

Sehun no había podio concentrarse desde lo que habló con luhan. Felizmente el día había terminado, quería descansar, pero aún no había hablado con baekhyun, recostado sobre el capo de su auto, lo esperó en el estacionamiento pues no quería ir a su salón, pero el más pequeño no llegaba, supuso que había ido a otra parte igual que la última vez, cuando do estaba a punto de entrar a su cuarto, observó cómo dos chicos que eran del salón de su novio, pasaban por delante de su carro, al reconocerlos se acercó a ellos.

-chicos, ¿saben dónde está baekhyun? -preguntó sehun, quien al estar más cerca de ellos se dio cuenta de que tenían las manos manchadas de tierra y harina y las mangas mojadas

-ah... no, digo esto… El no vino a clases -dijo uno de los chicos nervioso, con el rostro pálido al ver a sehun.

-¿de dónde vienen? -interrogó sehun al notar la extraña reacción de los chicos, sabía que algo le ocultaban -he dicho ¿de dónde vienen?- volvió a decir esta vez con un tono más alto y serio.

-yo no quise, a mí me obligaron ¡lo juró! Decían que luhan se lo merecía, yo no quise -dijo uno de los chicos tan rápido que fue casi inentendible, sehun sólo oyó el nombre de luhan y supo que algo malo estaba pasando, fue corriendo hacia el lugar de donde venían los chicos.

 

 

 

Luhan sentía miedo pero no dejaría que los demás lo supieran se paró firmemente, no se humillaría, pase lo que pase, no se dejaría caer hasta que este sólo. Fue en ese momento cuando sintió el primer huevo reventar contra su cabeza, tan fuerte que se sintió como un golpe después de eso comenzaron a tirar más, aparte de la tierra y harina aunque lo peor fue cuando uno de los chicos menos a tirar tronadores, que al chocar con fuerza contra el suelo creaban chispas que salpicaban sobre él.

-ay luhan, cuidado te quemas, querido -dijo una chica la cual sostenía un extintor en manos- déjame ayudarte -dijo antes de rosearlo con el extintor completamente, con tanta fuerza que lo obligo a retroceder un poco y casi caer.

Aquella chica rubia, delgada con cerquillo, era Momo, una de sus compañeras de aula, nunca le había agradado baekhyun, hablaba mal de el a sus espaldas, sin embargo estaba aquí, tratando de defenderlo.

Sentía temblar sus piernas, su visión se hacía cada vez más borrosa, con mucho esfuerzo pudo ver su reflejo en la ventana de un auto, su piel estaba embarrada de tierra mezclada con la espuma del extintor, su uniforme, que tanto le había costado conseguir, pues si bien tenía beca, el uniforme se lo debía conseguir el mismo, y después de días sin dormir por trabajar, finalmente lo consiguió, pero ahora estaba completamente arruinado. Sentía tanta rabia e impotencia que solo pudo apretar tan fuerte los puños que los sentía sangrar.

- ¿Luhan? -dijo una voz que no tardó en reconocer e inmediatamente después, todos los chicos a su alrededor, salieron corriendo y fue ahí cuando pudo ver frente a él la figura de aquella persona que había ahuyentado a todos.

-Sehun -dijo antes de que todo comenzará a dar vueltas y de pronto todo se volvió negro.

Confusión, dolor, cansancio y luego desesperación, fue lo que sintió luhan al despertar en una habitación blanca y darse cuenta de la hora que era. Se paró rápidamente y se puso los zapatos, en ese momento entró una señorita, una enfermera para ser más claros.

-No puede moverse mucho, debe descansar -dijo la enfermera tratando de recostarlo sobre la cama nuevamente.

-Gracias pero no, tengo muchas cosas que hacer -dijo luhan parándose nuevamente, dirigiéndose a la puerta la cual se abrió antes de que llegara a tocarla.

- ¿Qué haces parado? Debes descansar -dijo sehun quien entraba en la habitación.

-No, debo ir a trabajar -respondió luhan saliendo de la habitación.

- No, no te puedes ir, debes descansar, tienes anemia además de lo que pasó hoy en la salida, de lo cual también tenemos que hablar -dijo sehun quien lo agarró del brazo en la puerta, evitando que se valla.

-¡suéltame! -dijo luhan soltándose del agarre del contrario- tengo que trabajar, a mí no me llega la plata sola como a tu, tengo que ganármela.

-Bien, te dejaré ir -dijo sehun al entender la importancia de eso- pero no puedes hacer mucho esfuerzo, así que te ayudaré.

-¿tu? -soltó un suspiro- lo dudó -dijo luhan antes de irse hacia la salida del hospital, dejando a sehun atrás, quien se fue por otra dirección.

Luhan no conocía aquel hospital, pero al ver los lujoso que era, con techos altos, grandes acabados, habitaciones privadas para cada paciente, con la última tecnología, supo en cual era, era el hospital más prestigioso de todo Corea y sin duda sabía que ni siquiera trabajando un año podría pagar la consulta, así que dudó en si debía salir o no, temía que lo obligarán a pagar -estúpido sehun, ¿porque tuviste que traerme aquí?- pensó y tratando de no llamar la atención se dirigió hacia la puerta y logró salir, en ese momento sintió como unas manos lo tomaron por los hombros.

-¿tanto te demoras en salir? Pensé que estabas apurado -dijo sehun detrás suyo, hablándole cerca al oído, haciéndolo estremecer al sentirlo tan cerca; al darse cuenta de esto, luhan se separó rápidamente y volteo para verlo, la típica cara inexpresiva de sehun había desaparecido, en lugar de ella había una pequeña sonrisa que le decía, que el más alto se había dado cuenta de su reacción, ocasionando que un leve rubor apareciera en las mejillas de luhan.

-¿Qué haces aquí? Pensé que ya te habías ido -dijo luhan, desviando la mirada.

-dije que te acompañaría ¿no? -dijo sehun abriendo la puerta de su auto, el cual estaba estacionado frente a ellos- bien, ¿a dónde vamos?

-¿vamos? Ya te dije que no vendrás conmigo

-si no me dejas ir contigo estaré detrás de ti todo el día

-mira sehun, aprecio tu ayuda, pero seguro estas cortado con la misma tijera que byun y dudó que me seas de ayuda -dijo luhan quien siguió su camino siendo seguido por el auto de sehun, una cuadra después se dio por vencido y subió al auto del rubio.

-bien, vamos a la posta médica de Seúl -dijo luhan, colocándose el cinturón de seguridad.

-¿trabajas en una posta médica? -preguntó sehun.

-soy un ayudante, las postas no son como los hospitales, grandes, ordenados, con tecnología y sobre todo caros; las postas son apenas del tamaño de una casa o dos, sin embargo todos los días recibimos una infinidad de pacientes, quienes no pueden ir a hospitales por falta de recursos, esto es más una especie de voluntariado que trabajo, me pagan muy poco, sin embargo me gusta ayudar ahí, incluso los fines de semana que se supone que no debo trabajar, voy, pues es cuando más lleno esta y necesitan de mi ayuda- explicaba luhan mientras sehun no dejaba de mirarlo.

-eres hermoso luhan, no sólo por fuera -dijo sehun acercándose a él.

-a... a que vi..viene eso -dijo luhan nervioso viendo como sehun se acercaba cada vez más hasta estar frente a frente- no te acerques más -dijo cerrando los ojos con la cara completamente roja.

-es que no has cerrado bien la puerta -dijo sehun a centímetros de su rostro, para luego cerrar la puerta detrás de luhan, volver a su asiento y arrancar el auto.

Luhan se sintió avergonzado y se mantuvo en silencio durante todo el camino hasta que llegó a la posta, pero ya era tarde, su turno ya había terminado, sehun lo esperó fuera y no faltaba uno que otro curioso que se paraba a mirarlo, pues no era común ver a un chico de su edad con un auto tan lujoso.

-entonces ¿te llevó a casa? -preguntó sehun

-¿casa? Aún no hemos acabado -respondió luhan subiendo al auto.

Después de 20 minutos llegaron a un establecimiento de comida rápida al llegar luhan entró en para hablar con su supervisor y le pidió para que dejara que sehun trabajará ahí por el día de hoy, el supervisor no dudó en aceptarlo, pues una ayuda extra no estaría mal.

-ven sehun, tenemos que cambiarnos -dijo luhan dirigiéndose al baño- a mí me hace falta - mencionó mirándose al espejo, viendo su ropa manchada y recordó lo que había pasado.

-luhan, tienes que decirme que paso -dijo sehun seriamente

-olvidado sehun, no tiene nada que ver contigo -respondió luhan

-¿que no tiene que ver conmigo? Todo lo que pase contigo tiene que ver conmigo -dijo sehun un poco exaltado.

-¿Porque? ¿Porque haces todo esto? ¿Porque me ayudas? No lo entiendo -dijo luhan exaltado también.

-a veces ni yo lo entiendo, tampoco -dijo sehun serio antes de sacarse la camisa.

-¿Que..que haces? -dijo un sorprendido luhan

-pues me cambio -respondió el contrario con obviedad

-pero entra a uno de los cubículos

-¿porque? ¿Te molesta verme así? -preguntó el más alto algo sugerente para luego desabrocharse el cierre del pantalón.

Luhan rápidamente se metió a uno de los cubículos y oyó como sehun soltó una sonora carcajada luego de unos minutos término de cambiarse y salió y se encontró con sehun.

-¿y qué hacemos ahora? -preguntó el rubio

-sehun, nos encargáremos del autoservicio -dijo luhan llevándolo hacia un espacio en el cual había una pequeña cocina y una ventanilla.

-yo hare las hamburguesas y tu atiendes –dijo luhan indicándole donde debe sentarse

Así paso una hora en la cual luhan comprobó lo que había sospechado desde que sehun le dijo que lo ayudaría: No sabía hacer absolutamente nada.

-¿combo dos? ¿Ese es con papas o ensalada? – escucho preguntar a sehun a uno de los clientes

-olvídalo, esta es la tercera vez que regreso, solo dame lo que tengas – dijo el cliente algo fastidiado

A pesar de que lo retrasaba en el trabajo, a luhan le pareció gracioso el esfuerzo que hacia sehun, aunque todo le salía mal, pero la sonrisa se le borro del rostro cuando nuevamente un carro en el cual venia un grupo de chicas, volvió a pasar por cuarta vez al auto servicio, se demoraban cerca de 10 minutos en pedir una orden, mientras conversaban con sehun, preguntándole cosas como su edad, donde vive, donde estudia cosas que sehun no respondía pues estaba entretenido tratando de entender las ordenes, pero algo le decía a luhan que esta vez no se irían sin conseguirlo.

-sal de aquí, no sirves para esto, me estas retrasando – dijo un muy enojado luhan acercándose hacia sehun

-pero creo que empezó a hacerlo mejor – dijo sehun entusiasmado

-no, lo hare yo, estoy seguro de que las “señoritas” quieren su pedido rápido –dijo el más bajo enfatizando lo último dirigiendo su mirada hacia las chicas que lo veían enojadas

-está bien –respondió el rubio y se fue a la cocina.

- bien, ¿Cuál es su pedido? – pregunto muy serio luhan.

Las chicas cogieron su pedido y se fueron, después de eso no volvieron  a venir en todo lo que restaba del día.

 

 

 

 

 Eran ya las 9:00 pm y sehun y luhan salían del establecimiento de comida rápida, subieron al auto.

-ahora vamos al museo – dijo el castaño mientras se colocaba el cinturón de seguridad

-¿al museo? ¿A esta hora? – pregunto sehun

-si ¿no pensaras que ya terminamos no? –pregunto un divertido luhan, al ver la expresión del contrario.

-dime que es lo último que tenemos que hacer – dijo el más alto con notorio cansancio

-sí, es lo último, tenemos que limpiar el museo y nada mas

- ¿todo el museo? ¿Solo nosotros?  -dijo un sorprendido sehun, quien no quitaba la vista del camino.

-claro que sí, no creerás que los museos se limpian solos ¿no?

-pero es enorme –soltó un suspiro- olvídalo, limpiemos el museo lo más pronto posible y nos vamos, estoy muy cansado

-esto es algo de todos los días para mi ¿quieres venir mañana también? –bromeo luhan

-pues si – respondió sehun sin dudarlo

-¿Qué? Pero si apenas pudiste hoy ¿estas bromeando no?

-claro que no, puedo soportarlo, todo por esta contigo – respondió nuevamente sin dudarlo- digo, contigo, ayudándote, a eso me refiero –dijo tratando de corregirlo lo que había dicho- puedo ir aprendiendo poco a poco, a pesar de que rompí algunos platos, yo…

-¿Qué tu qué? -pregunto el contrario

-pero los pague, en serio, solo fueron unos cuatro

Luhan comenzó a reír -se nota que no haces nada en tu casa, ¿Quién lava los platos en tu casa? Porque byun claramente no lo hace, eso arruinaría su manicure-

-no te agrada baekhyun ¿cierto?

-¿y lo preguntas? ¿No está claro? –Dijo irónico, una cara de luhan que sehun no había visto y le gustaba, quería saber más de el- Bueno, no es que no me agrade, pero se puede decir que  hemos comenzado con el pie izquierdo, es que él es, es tan…….. princeso -ante lo dicho por luhan, ambos comenzaron a reír

-yo creo que se llevarían mejor si se llegaran a conocer

-eso no pasara, después de que ataque su hermoso rostro, no creo que le interese ser mi amigo – dijo luhan con ironía nuevamente, esto le recordó a sehun lo que había ocurrido con luhan al salir del colegio

-luhan ahora me dirás que fue lo que paso en el estacionamiento de la escuela – dijo el rubio más como hecho que como pregunta

-¿qué quieres que te diga? Tú lo viste

-eran tus compañeros ¿Por qué demonios hicieron eso? Dime quienes fueron –dijo con molestia, apretando fuertemente el volante del auto- tuve que llevarte al hospital de lo mal que te dejaron, yo…

-¡cierto! – Dijo luhan como si hubiera recordado algo- me llevaste a ese hospital tan caro ¿Cómo se te ocurre? No sabes lo asustado que estaba de que me obligaran a pagar

-pero si yo page la cuenta –respondió sehun

-¿tu pagaste? Porque no me dijiste eso antes –dijo dándole un pequeño golpe en el brazo- me hubiera ahorrado el susto, pensé que me detendrían en la puerta y no me dejarían salir.

-¿por eso demoraste en salir? – sehun comenzó a reír mientras seguía manejando

-sí, no sabes que susto me lleve, trate de salir sin que nadie me viera –decía luhan mientras comenzaba a reír al recordarlo

-pero yo que sepa las personas asustadas gritan, no estremecen ante el tacto de alguien más –dijo sehun sugerentemente.

-yo, yo puedo explicarlo – respondió el contrario nervioso- es que…. Lo que pasa es…. ¡hacia frio!

-pero si el sol estuvo muy fuerte el día de hoy

-ya estamos cerca, vamos, apúrate, no  dices que quieres terminar lo más pronto posible – dijo luhan tratando de cambiar la conversación

Sehun se estaciono frente al museo y entraron, donde luhan le indico lo que tenía que hacer, a pesar de que había sido un día largo y de lo agotado que estaba, todo se le olvido una vez que se puso a limpiar con luhan, no fue tan malo como pensaba, todo lo contrario, tener un lugar tan grande solo para luhan y el, fue lo mejor, ambos comenzaron a jugar a las carreras con los carritos de limpieza, hablaron mucho mientras limpiaban, pudieron conocerse más, a cerca de sus gusto, hobbies, cantantes favoritos, actores, entre otras cosa, pero sin duda, ver sonreír a luhan cada vez que el hacía algo mal, fue lo mejor. Al terminar, dejaron los utensilios de limpieza en el almacén y al salir vieron como una grúa se llevaba su auto, sehun se acercó hacia el policía y le pregunto qué fue lo que pasaba, a lo que el policía le respondió que estaba estacionado en el lugar equivocado y se lo devolverían mañana.

-me lo darán mañana ¿Qué hacemos ahora?

-tendremos que viajar a mi manera –dijo luhan- en tren.

Cuando luhan menciono lo del tren, lo que sehun pensó era en el tren como el que veía en televisión, no espero que hubiera tantas personas que apenas podía caminar entre ella, apenas llego el tren, todos se abalanzaron para poder ingresar, luhan lo cogió de la muñeca y lo comenzó a jalar para que lo siguiera y pudieran entrar dentro, una vez dentro, el lugar estaba repleto de personas y tuvieron que ir parados, el rubio observo un lugar cerca a la puerta del tren que no estaba tan lleno, así que tomo a luhan por los hombros y lo llevo a aquel lugar poniéndolo frente a él y de espaldas a la pared del tren.

-aquí no nos empujaran tanto –dijo el más alto dándole una sonrisa

 

 

Teniéndolo tan cerca y desde la posición en la que estaba, le era muy fácil observar el rostro de sehun, el cual por primera vez se puso a ver detenidamente, el rostro de Oh sehun era tan blanco como el resto de su cuerpo, sus cejas no eran gruesas pero tampoco delgadas y sus ojos, esos penetrantes ojos negros que parecen perderse en algún lado todo el tiempo y que al igual que todo en él, encaja a la perfección, irresistible para cualquiera que lo mire -¿en que demonios estoy pensando?- pensó y comenzó a mirar el piso.

-¿te cansaste de mirarme? –dijo sehun con la mirada en otro parte

-¿Qué? yo no te estaba mirando – se defendió luhan

-¿enserio? ¿Entonces me lo imagine? –dijo irónicamente, mirando directamente al contrario

En ese momento las puertas del tren se abrieron dejando entras a mucha más gente de la que había, provocando que sehun pegara aún más su cuerpo al de luhan, aprisionándolo contra la pared del tren, lo tenía cada vez más cerca, luhan volteo el rostro, evitando el contacto pero sehun aprovecho esto para acercase más, lo tenía tan carca, podía sentir podía sentir su cuerpo contra el suyo y su aroma, fue como si en ese momento todo el mundo desapareciera, solo estaban ellos dos.

-luhan -susurro en el oído del más bajo, sabiendo el efecto que tendía en él, y no se equivocó, el cuerpo de luhan tembló al sentirlo.

-no hagas eso -decía luhan mientras rezaba porque sehun no se diera cuenta del rápido latir de su corazón

-¿hacer qué? -preguntó sehun, fingiendo inocencia, descendiendo hasta rozar sus labios en el cuello del contrario, el cual tenía la respiración entrecortada, en ese momento el tren paro, anunciando la estación en la cual debían bajar, ambos se separaron inmediatamente, empujando al resto de pasajeros intentando salir del tren. Una vez fuera del tren, el ambiente era de un incómodo silencio, el cual fue sehun el que rompió.

-ponte esto -dijo entregándole su sacó

-no lo necesitó -respondió un frío luhan

-lo necesitas, ¿no piensas llegar así a tu casa? ¿No? -dijo señalando el arruinado uniforme del contrario- además hace frío.

-ya te he dicho que no lo usaré.

-y yo he dicho que lo usarás ¿o quieres que te lo ponga yo? -dijo firmemente

 

 

 

Luhan lo miró con rabia, pero a los pocos segundos y de mala gana, cogió el sacó y se lo puso, el castaño no entendía porque siempre terminaba haciendo lo que sehun decía, él tenía algo que lo dominaba y eso lo preocupaba -¿Que me está pasando?- pensó.

-no tienes que acompañarme hasta mi casa

-ya estamos aquí ¿no? Sólo son unas cuadras más

-sí, pero... tengo otra cosa que hacer, así que puedes irte

-te acompañó, ¿qué tienes que hacer?

-no quiero que me acompañes, así que vete.

-ya deberías saber que no me voy a ir, por más que me lo digas, así que dime ¿a dónde vamos?

-tengo que recoger a mi madre, a esta hora debe estar en la cantina de la esquina, tan ebria que ni siquiera puede volver sola -dijo luhan, sabiendo que era inútil discutir con sehun, pues terminaría haciendo lo que quería.

 

 

 

Entraron en la cantina, pero no encontraron a la madre de luhan. Sehun notó que en una de las mesas esta un hombre que no dejaba de observar a Luhan.

-tu madre no ha venido hoy, querido lu -dijo el cantinero, un señor de aproximadamente 60 años, quien parecía tener confianza con luhan- también me parece extraño que no viniera hoy.

-tal vez se fue a casa -dijo luhan algo dudoso y al voltear cruzó miradas con a que hombre que no dejaba de mirarlo, y abrió los ojos muy grandes.

-¿quién es? -preguntó sehun con clara molestia.

Luhan no respondió, sólo salió corriendo de la cantina y sehun lo siguió. Al salir de la cantina, vio que luhan se alejaba lo más rápido posible de aquel lugar, sehun corrió detrás de el hasta que recién pudo alcanzarlo en la puerta de su casa, lo tomó de la muñeca y lo jaló, haciendo que lo viera cara a cara, los ojos de luhan estaban cristalinos, era evidente que quería llorar.

-luhan, ¿porque... -en ese momento una horrible idea se le paso por la cabeza- no será el quien intento....

Las palabras de sehun fueron interrumpidas cuando la puerta de la casa de luhan se abrió, dejando ver a la madre de luhan con unas maletas en mano.

-¿mama? ¿Qué pasa? Te fui a buscar pero... ¿Y esas maletas? -preguntó luhan confundido.

-¡Luhan! Qué bueno que llegas, no quería irme sin decirte nada, pero demorabas mucho y no te iba a esperar para siempre -dijo su madre con un tono alegre y falso- ¡oh¡ estas con este chico otra vez – dijo mirando a sehun

-¿irte? -decía luhan aún más confundido que antes

-lo que pasa es que un hombre millonario quiere que me mude con él ¿entiendes?

-¿nos mudáremos?

-ahhhhh sobre eso -dijo la madre de luhan, exagerando sus gestos- yo me mudaré.

-¿te iras sin mí? ¿Me dejarás sólo? ¿Porque?

-¡ay luhan! Dejaré de preguntas tontas -dijo su madre fastidiada- he cuidado de ti por mucho tiempo, deberías estar agradecido ¡tú arruinaste mi vida! Desde que naciste debí saber que nada bueno vendría, eras un fenómeno y por tu culpa tu padre se convirtió en eso y nos dejó, ¿aun así me reclamas que te deje? Debí abandonarte o venderte, sin embargo te mantuve conmigo, deberías agradecérmelo ¡Entiende! -dijo golpeando con sus dedos la cabeza de luhan.

-largase de una vez -dijo sehun tratando de controlar su ira, tomándola de la muñeca para que dejara a Luhan, no podía creer aún todas las cosas que le había dicho a su hijo ¿cómo una madre puede ser así? Él no tenía la mejor madre del mundo, sin embargo jamás lo trataría así.

-sí, ya me voy, mañana regreso por mis cosas -dijo la señora antes de recoger sus maletas y salir.

Luhan se deslizó por el marco de la puerta, hasta llegar al suelo y comenzó a llorar desconsoladamente, sehun se arrodilló y lo abrazo con fuerza y el castaño correspondió al abrazo llorando sobre el hombro del más alto como si fuera un niño, el rubio cogió con sus manos el rostro de luhan limpiando sus lágrimas, las cuales no dejaban de salir.

-ya no llores más, por favor -decía sehun mientras limpiaba el rostro de luhan, le dolía tanto verlo así que creía que en cualquier momento se pondría a llorar el también -no soportó verte así- seguía diciendo mientras observaba su rostro, sus ojitos entrecerrados mientras lloraba, sehun le dio un beso en la frente y lo volvió a abrazar, dibujando círculos en su espalda mientras seguía besando su cabeza hasta que este se quedó dormido abrazado de el en la puerta de su casa, pero sehun no podía dormir aún, se quedó mirando el cielo, pensando en lo que estaba sintiendo, ese día había luna llena. Luego de unos minutos, tomo el cuerpo de luhan y lo llevo cargado hasta su cuarto, dejándolo recostado en su cama, se veía tan indefenso, ahora que su madre se fue, estaría solo en su casa y aquel tipo de la cantina no le daba buena espina así que saco su celular e hizo una llamada

–hola, te tengo un trabajo, necesito que cuides a alguien, pero sin que este se dé cuenta, no creo que le guste ser seguido- dijo sehun al hombre con quien hablaba en el teléfono y después de unos minutos hablando con él, colgó, salió de la casa de luhan y tomo un taxi hasta su casa.

Al llegar  su mansión observo a baekhyun en la ventana de su habitación y se dirijio de frente ahí.

-¿Qué paso con tu auto? – pregunto el chico de cabello cobrizo con una expresión seria aunque con un poco de preocupación

-me lo devolverán mañana porque me estacione en un lugar que no debía – respondió sehun con su típica seriedad

-¿Qué? ¿Dónde te estaciones? Mejor dicho ¿Dónde estuviste todo el día? ¿Acaso no sabes la hora que es? ¿No crees que deberías darme una explicación? –dijo baekhyun muy enojado

-¿Por qué me reclamas? ¿Acaso ya te olvidaste cuando tú también legaste tarde? –respondió el rubio

- Si, llegue tarde ¿y debo hacerte acordar que tu también te enojaste conmigo? –Ante estas palabras sehun se quedó callado así que el más pequeño continuo- así que no me cambies el tema ¿dónde estuviste?

-por ahí –respondió desviando la mirada

-¿por ahí? Solo respóndeme una cosa ¿estuviste con luhan?

-pero no es como lo estás pensando

-solo dime si estuviste con el

-sí, pero fue porque hubo un problema en la salida, tus compañeros lo atacaron así que tuve que llevarlo al hospital y después…

-sehun –baekhyun respiro hondo y trato de calmarse- ¿sabes cómo me siento? Dices que no tienes nada con el pero siguen pasando este tipo de cosas, se completamente sincero ¿aún me amas?

Hubo un completo silencio por al menos 10 minutos,  sehun no sabía que responder, estaba casi tan confundido como baekhyun, pero hay algo en lo que no podía mentirse y era que no podía alejarse de luhan aunque eso ponga en peligro su relación con baek –baek, tu sabes que te quiero mucho.

-eso no es lo que te he preguntado

-no – dijo bajo pero aun así el contrario pudo escucharlo- te quiero mucho, demasiado, en estos tres años has traído alegría a mi vida, estaba tan solo en esta casa y tu pudiste llenar aquel vacío, siempre serás mi familia, pero esto que estoy sintiendo – dijo apretando en un puño su camisa a la altura de su corazón- no puedo controlarlo, es más fuerte que yo – decía con los ojos acuosos pues le dolía tanto o más que el contrario herirlo de esa forma, pero no podía seguir así, tenía que ser sincero- eres de las personas más importantes en mi vida, pero no puedo seguir así, solo nos estamos dañando y digo estamos porque yo sé que tú tampoco sientes amor por mí.

-¿Cómo puedes decir eso? – decía el más bajo con la voz entrecortada y con lágrimas en los ojos.

-sabes que es verdad, tu también debes sincerarte contigo mismo ¿realmente me amas?

 

Baekhyun pensaba que sehun diría que si lo amaba y todo volvería a ser perfecto, como siempre, estarían juntos y así seria, pero todo se desmorono en el momento que dijo que no, no sabía cómo reaccionar, se suponía que estarían juntos, aun no podía entender lo que estaba pasando, pero todo empeoro cuando le pregunto si lo amaba –lo amo- se dijo a sí mismo, pero había una vocecilla dentro suyo que le decía que era mentira - ¿lo amo?-  se dijo esta vez en pregunta, desde que sehun lo saco de aquel burdel, y lo trato como si fuera una persona digna, algo que nadie nunca había hecho con él, supo que estaría atado a él para siempre, toda su vida estaba planificada pero si sehun se iba ¿Qué sería de él? No sabía qué hacer, no conocía el mundo más allá de la vida con sehun, es verdad que la relación ya no era lo mismo que hace años, incluso en ese tiempo no era algo tan profundo, pero era normal ¿no? Ese tipo de amores grandes y profundos que se clavan en el corazón solo existen en los libros y en las novelas, eso era lo que pensaba – yo… -dijo baekhyun pero se quedó callado, pues aun no sabía lo que iba a decir – lo que siento por sehun es amor… tiene que serlo- trataba de convencerse, es verdad que cuando estaba con sehun era más costumbre que otra cosa, cuando estaba con el no sentía nada especial, se sentía como un muñeco vacío y monótono, pero eso estaba bien ¿no? ese tipo de sentimientos que se supone que debería  sentir cuando estas cerca a la persona que amas, esa opresión en el corazón y el estómago, como cuando esta con chan… -¿en qué estoy pensando?- se sorprendió a si mismo –no, eso solo son tonterías, yo amo a sehun- se dijo a si mismo como si fuera una obligación – yo si te amo sehun –dijo en voz alta aunque no tan seguro.

-te conozco muy bien, estas mintiendo, no trates de engañarte, lo mejor será que terminemos, dormiré en el cuarto de visitas –dijo sehun saliendo de la habitación, dejando al pequeño llorando.

Notas finales:

Espero que les halla gustado el capitulo, actualizaremos esta semana, lo prometemos. tenemos una pregunta para ustedes: ¿tienen algun nombre especial para los personajes? por ejemplo, nosotras le decimos "chiqui" a baekhyun, porque es chiquito y muy lindo Esperamos sus comentarios xd


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