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Mi Lindo Sirviente. por CielMichaelis

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Ya había pasado un poco más de un mes desde que nuestra linda pareja había empezado su vida en parís y Ciel casi cumplía los 5 meses de embarazo e irían a ver al doctor para sabes el sexo de los bebes.
Hoy era el día que Sebastián empezaba a dar clases en la universidad, Ciel le preparo el almuerzo y se lo dio en la puerta junto con un beso de despedida.
-Que tengas un buen día mi amor- se despidió Ciel de su prometido.
-Volveré Temprano nene… Recuerda esperarme para ir a ver al doctor.- dijo agachándose para besar a Ciel mientras lo tomaba de la cintura y el menor enredaba sus brazos por detrás de la cabeza del ojirojo.
-Sabes que si cariño… ¿No te vas a despedir de los bebes?-Dijo lo último haciendo un tierno puchero.
-jeje claro que si- Se puso a la altura del vientre del menor acarician y depositando un tierno beso en este-Pórtense bien mis niños no cansen tanto a mami… Los quiero.- Al decir esto recibió dos pataditas como respuesta.
-jeje ellos también te quieren… Ya anda llegaras tarde si no te vas- dijo dándole otro pequeño beso en los labios.
-mmm no me quiero ir- Hiso un puchero Sebastián abrazándose más a Ciel.
-Ja,ja,ja Seb pareces niño pequeño, anda ya vete… si no te vas ahora no te daré la sorpresa que te estoy preparando para la noche- Esto último lo dijo con un tono seductor haciendo emocionar al mayor.
-B-Bien ya me voy- Dijo emocionado dándole un último beso a Ciel para después salir emocionado de la casa.
Ya después de que Sebastián se fue Ciel entro de nuevo a la casa y se sentó en el sofá.
-(suspiro) La casa se ciento muy bacía sin el… je ni 5 minutos sin él y ya me siento solo… Creo que el embarazo me pone sensible- dijo acariciándose su vientre el cual ya estaba bastante hinchado-es solo que no nos hemos separado desde que nos conocimos…mmm- Soltó un pequeño gemido al sentir patear a sus bebes.-jeje si sé que están aquí y que también lo extrañan… Bueno creo que no estará mal que lave un poco de ropa- Dijo poniéndose con cuidado de pie.
Con Sebastián…
-Muy bien Michaelis Sensei este será su salón de clases- Dijo el director de la escuela mostrándole la entra de la aula- Dijo mientras entraba al salón.
-Muchas gracias director… creo que es mejor que entre -
Cuando entro al salón todas las estudiantes se quedaron embobadas al instante de verlo incluso algunos hombres, mientras que otros lo miraban con obvia cara de envidia.
-Bien tomen haciendo- mientras poniendo su maletín sobre su escritorio- Yo soy su nuevo profesor mi nombre es Sebastián Michaelis- dijo de una manera seria.
Entonces una alumna levanto la mano para hacer una pregunta
-¿Qué es lo que se le ofrece señorita?-
-¿Sensei es casado?- preguntó una de sus estudiantes, haciendo que todas las demás se le quedarán viendo esperas la repuesta del ojirojo.
-(suspiro) no, no lo soy...-contestó con obvia molestia - ¿alguna otra pregunta?- todos los alumnos levantaron la mano. -que no sea de mi vida personal - bajaron todos la mano -bien empecemos entonces.
Y así pasó el día de Sebastián con algunas alumnas y alumnos se le insinuaban.
Por fin término de dar sus clases. Estaba realmente cansado sólo quería llegar a su casa para besar y abrazar a su dulce niño, pero una de las profesoras lo llamó justo cuando estaba por subirse a su automóvil.
-Michaelis- Sensei -llamó una profesora de largo cabello castaño y ojos cafés
-"que molestia "- pensó mientras le dedicaba una sonrisa falsa -que se lo ofreces Sara Sensei-
-y-yo bueno-tartamudeo la mujer obviamente nerviosa y sonrojado de acercarse a aque hombre -el fin de semana las profesoras y yo queremos hacerle una pequeña fiesta de bienvenida.
-uhmmm- dijo sin darle mucha importancia
-y bueno tal vez podríamos conocernos mejor - se le insinuó acercándose más al ojirojo.
-lo siento tengo pareja -respondió retrocediendo un poco.
-Pero usted dijo que no estaba casado- dijo la mujer algo molesta
-No estoy casado, pero estoy comprometido con mi pareja...-respondió sin poder evitar que una sonrisa de felicidad al pensar es su querido niño.
-bueno pero ella no tiene por qué enterarse - se acerco
-Lo siento no tengo ni la mínima intención de traicionar su confianza - respondió molesto alejando a la mujer.
-Tsk bueno pero al menos podría ir a la fiesta -
-Claro que iré pero sólo si puedo llevar a mi pareja -sonrió
-hmp bien-molesta-"así por lo menos sabré a que me estoy enfrentando... no dudare en arrebatarle a Sebastián "-pensó la mujer mientras se alejaba del lugar.
Mientras tanto con Ciel, el menor se encontraba preparando la cena para su prometido. Entonces escucho la puerta abrirse y se dirijo hacía ella.
-Bienvenido mi amor- dijo al ver a su prometido entrar.
-Estoy en casa...-Lo besa- mmm huele muy bien. ¿Que estas cocinando?
-Estofado-respondió con una sonrisa - anda a comer, tenemos la cita con el médico en una hora
Ciel se acercó a servirle de comer pero cuando estaba volteado Sebastián se acerco lo abraso por la espalda.
-Qué lindo te ves así, serás la esposa perfecta cuando nos casemos- le da un beso en la majilla.
-cállate, no seré tu esposa seré tu esposo- Respondió algo sonrojado.
Los 2 se sentaron a la mesa a comer mientras platicaban de su día.
-Estuvo delicioso mi amor has mejorado mucho-
Abrasando a Ciel mientras lavaba los trates sucios.
-he estado practicando un poco- al terminar se volteó para abrazar a su futuro esposo recargándose en su pecho- Seb no sé si deberíamos ir a esa fiesta el fin de semana aun me da un poco de pena que me vean así, me veo extraño.-
Ciel se sentía extraño por la ropa que tenía que usar ya que la mayoría de su ropa ahora consistía en ropa de embarazo y era básicamente imposible algo que no fuera para mujer.
-Te ves hermoso- Abrazándolo
-Estoy gordo- Dijo haciendo un puchero
-jeje no estás gordo nene- Se agacho a la altura del su vientre y se recargo suavemente en este para tratar de oír a sus bebes- Lo que tiene aquí dentro es algo hermoso que nos harán aún más felices- le dio un tierno beso a Ciel en su pancita de ya 5 meses de embarazo.
Al levantarse le da otro beso al menor en los labios el cual corresponde gustoso enredando sus brazos por detrás de la cabeza de Sebastián.
-Te amo Seb-
-Yo también te amo nene- Lo vuelve a besar.
-Ya es hora de irnos o llegaremos tarde con el doctor- Le recordó Ciel, separándose un poco del mayor.
Al llegar al médico los pasaron a la sala de espera.
-Seb ¿seguro que es un buen doctor? No quiero que les pase nada malo a nuestros bebés-
-Si nene no te preocupes William y Grell me lo recomendaron dijeron que era de los mejores –
-mmm Bueno-
Depuse de un rato la enfermera los llamo para que pasaran, a los pocos minutos que entraron apareció el doctor, era un hombre alto de cabello gris largo el cual le cubría los ojos.
-jiji así que usted es Ciel Phantomhive el pequeño doncel del que me hablo Will jiji-
Ciel al verlo se asustó y se escondió detrás de Sebastián.
-y usted debe ser su prometido Sebastián Michaelis… mucho gusto mi nombre es Adrián pero pueden llamarme Undertaker jiji-
La pareja lo vio desconfiando de ese extraño personaje.
-¿P-Porque lo llaman así?- Pregunto Ciel algo nervioso
-En un podo que se me quedo de la universidad-
-Tranquilo nene- Le acaricio la cabeza al menor.
Después de un rato de hablar con él le tomaron más confianza.
Ciel se acostó sobre la camilla que tenía en el consultorio para que revisaran los bebe con el ultrasonido, poco a poco una imagen apareció en la pantalla mientras que Undertaker pasaba un aparato por el vientre del menor, mientras Sebastián estaba parado junto al menor tomándolo de la mano.
-Bueno veamos según se ustedes quiere saber el sexo de sus bebés-
-si ¿Qué serán?- pregunto Ciel impaciente y emocionado
-jiji bueno al parecer son mellizos una niña y un niño, felicidades- respondió mirando a la pareja.
Los ojos de Ciel se hicieron acuosos y Sebastián lo abrazo
-Gracias nene- Fue lo único que dijo Sebastián sin poder evitar que también escaparan lágrimas de felicidad de sus ojos.
Ya de vuelta en su casa ya era de noche y Sebastián estaba en la cama recostado esperando a que Ciel saliera del baño ya que según él le daría una sorpresa.
-nene ¿Qué estas planeando?- dijo Sebastián emocionado
-Pronto lo veras… cierras los ojos- El mayor izo lo que el ojiazul dijo cerró los ojos y sintió como alguien comenzaba a trepar por la cama y se colocaba sobre él, al abrir los ojos lo que vio lo dejo totalmente pasmado Ciel estaba vestido con babydoll de color azul el cual dejaba ver perfectamente su vientre hinchado.- ¿Te gusta?- Pregunto el menor sonrojado.
Sebastián asintió lentamente mientras que literalmente babeaba al ver al peli azul así vestido.
Los 2 se comenzaron a besar de una manera apasionada mientras que sus manos se acariciaban con lujuria.

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