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Especies por pk2solitarios

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Notas del capitulo:

Holas XD

Cap. 12

Olvido primera parte

…..

Cunado Naruto abrió los ojos se hallaba en su habitación. Por extraño que le pareciera se sentía tan pesado adolorido y con un dolor de cabeza que pasaría a la historia como el peor de su vida.

-Buenos días- Dijo Kakashi al verle despertar

-Buenos días- Replico Naruto cansado y algo extrañado ¿Qué hacia Kakashi en su departamento?

-Parece que alguien se fue de farra y olvido que hoy se reincorpora a la empresa

-¿Farra?-Repuso el rubio pensativo, quizás esa era la razón por la cual se sentía molido, pero que extraño, el jamás por más que quiso pudo perder el sentido tomando. Aunque siempre hay una primera vez… Supuso.   

-Alístate. Debes ir a la oficina o tu madre se molestara

-Hi, hi…- Repuso entrando a la ducha-que aburrido era trabajar como el jefe, rodeado de mediocres humanos. Si esa raza debilucha que solo servía como mano de obra, esa especie débil, vulnerable, plaga de plagas y sobre todo de vida efímera, que ni caso tenia preocuparse en conocerles. Se reproducen como ratas y devoran todo a su paso y jamás devuelven nadan a la naturaleza. Así miraba Naruto Uzumaki a los seres humanos.

Si esos seres que odiaba tanto como a los vampiros. Después de todo ¿no eran los licántropos los seres más poderosos y sublimes del mundo?. ¿La misma manifestación de la naturaleza y su poderío?. Es decir: los vampiros eran muertos vivientes, los humanos glotones ambiciosos, los magos anomalías de los humanos, las sirenas… ¿Para qué diantres servían las sirenas? Se cuestionó… y los demás… ¿a quién rayos le importaba por lago eran la minoría?

Como era costumbre entro a su garaje y miro su colección de autos de lujo. Hoy usaría el modesto SSCUltimate Aero color azul con un precio de 654,400 dólares que adquirió hacia tan solo cuatro meses, pero no pudo evitar detenerse frente de su auto negro Aston Martin One-77… ¿Por qué diablos tenia a ese auto en el cubículo especial?… ¿qué no era ese el lugar donde se suponía debía estar el SSC Ultimate Aero color azul? Es decir el cubículo era para los modelos nuevos. De hecho ¿por qué mantenía ese auto de más de dos año de antigüedad en su depósito?, si él acostumbraba venderlos después de seis meses para comprarse otro de último modelo. Se rasco la cabeza. Acaso se le había olvidado deshacerse de ese auto… Pues que mal, eso era una mala inversión, supuso que ese auto se devaluaría y perdería una buena suma de dinero. Se acercó más al auto cuando noto algo que no el gusto. Una abolladura mal cubierta.

“¿Quién le hizo la abolladura a su coche de un millón?” renegó mirándolo como si tuviera una lupa en mano, pues podía ser pequeña la marca de la compostura, pero definitivamente estaba allí, el color del remache no concordaba con el color original y aunque esto pasara de alto para los humanos. Naruto Uzumaki no aceptaría mantener un auto deforme en el pedestal de los magníficos. Rápidamente tomo las llaves del auto lo saco del pedestal y lo publico en las redes sociales con la etiqueta: ¡Se vende auto de lujo a precio de locura!

Concluyendo su anuncio y con la foto subida, miro su celular y ya iba tarde a la oficina. Rápidamente subió a su auto SSC Ultimate Aero color azul, que por cierto casi cumplía su tiempo de vida útil a su lado y se dirigió a la empresa.  

-Hoy será un gran día- Se dijo y marcho a su empresa, hoy se publicaba en los medios de prensa su matrimonio y se anunciara la fecha de bodas. Al fin ocuparía su lugar como el Alfa oficial de la manada del norte. Rio divertido, pues ¿qué había más excitante que el poder? ¿El amor?… Ja, que se crean eso los mediocres. El amor era solo una estupidez que volvía tonto al listo e inútil al hábil. En fin… una pérdida de tiempo que no deseaba en su vida. Le hacia crucecitas para nunca tener que enfrentarlo. Prefería enfrentarse a su madre antes que esa cosa llamada amor. Pues ya veía en varios de su manada perder la dignidad y el respeto a si mismo por aquella persona amada, Increíble pero cierto incluso su madre le contaba las locuras que cometió por amor a su padre… Definitivamente el amor era una especie de karma oscuro, una droga maléfica. ¿Qué? ¿No podían omitir el amor y solo dedicarse al sexo, reproducción y punto final? Pues el comprendía que el sexo era bueno y no se podía omitir, pero de eso a dedicarle tiempo, detalles… A despertar con la misma persona todos los días… que cansador, pues si uno tenía defectos y apenas soportaba los defectos de la familia, soportar los defectos de un extraño… en fin el amor era cosa de locos.

Llego a su edificio y se dirigió a su oficina, pero apenas iba de salida del estacionamiento sintió una extraña melancolía, como una añoranza.

-¿Qué extraño?- dijo, pero aun así siguió adelante sin prestarle mayor atención.

Ya dentro del edificio. Muchas miradas se pusieron sobre él. Más cuando Naruto giraba a verles de forma asesina todos fingían no verlo y estar ocupados en sus cosas.

-Extraño…- Prosiguió Naruto. Y es que era muy extraño, se tomó unos días libres de la oficina ya hora que regresaba todos lo miraban tan extraño. Que tan raro era ver a una persona apuesta, joven, rica y alegre. Supuso que sí. Pues la mayoría eran simples asalariados que apenas si les alcanzaba el sueldo para vivir “dignamente” 

“Hey… ¿Y ahora qué crees que le pico al dinero andante? Esta con una sonrisa de oreja a oreja. Quizás deje de atormentarnos… es como si esas vacaciones lo curaran de su diarrea” escribió velozmente Karin a Sakura que ya se hallaba en su oficina en el departamento de ventas.

“No me importa. Por mí que se muera de deshidratación. O que se coma tunas y muera estreñido” respondió Sakura de mala gana.

“Oh. Valla así que es Santa Sakura de la devoción de Sasuke. ¿Aún sigue molesta por su despido?” escribió Ino que se unía al chat

“¡Que dices! Ino puerca” se quejó adjuntando un emoticón de enfado “Claro que detesto al jefe, pero no tiene que ver con el despido de Sasuke. Es solo que…” No supo que teclear, así que simplemente decidió ser sincera “Me dejo con todo su trabajo a medias y no logro dar con él… Maldita sea que faltan algunos informes y se nos viene una auditoria anual. ¿Qué se supone que haga?” concluyo con cuatro emoticones llorosos.

“Porque no le preguntas al jefazo sexy ¿Dónde se fue el SHB? De seguro él sabe… Hazlo antes de que se convierta en el Toro gruñón y nos despida a todos”

“Eso quiero pero…” Sakura dejo su celular, recordó las palabras de Kakashi: “Si aprecias tu pacifica vida nunca menciones ese nombre”

Sakura miro su escritorio y cruzando los brazos hundió su cara en ellos

-Pacifica…- Susurro la peli rosa. Nacer de una humana con un licántropo no fue algo grato. Saber que causaste la muerte de tu propia madre… fue un trauma de por vida ¿y ahora? Ahora vivía como humana por más de veinte años. Si era una pacífica vida… ¿Porque esa amenaza?

Entonces recordó que el Uchiha estaba emparejado con algún licántropo y dedujo lo que ocurrió.

-Los humanos no podemos relacionarnos sentimentalmente con otras especies… es un delito que se castiga con la muerte…- Se replicó. Nadie en ese edificio lo sabía pero Sasuke Uchiha había sido asesinado y la culpa por ser cómplice indirecto del crimen la estaba atormentando.

Y a todo esto: ¿Quién era Sakura? Simple. Era la media hermana de Kakashi. Una media hermana que el peli plateado jamás admitió y menos apreciaba, más cuando oyó que Sakura indagaba sobre Sasuke la amenazo de forma sutil pero contundente.

La fecha del matrimonio: 15 de diciembre. Antes de las fiestas navideñas, para así garantizar la mayor publicidad posible. De ahora en adelante simplemente debían concentrarse en que la boda quedara como añillo al dedo. Y hablando de anillos…

-¿Ya compraste el anillo?-Pregunto su madre por teléfono.

-Anillo- susurro Naruto sintiendo un dolor punzante en el cerebelo- No, no aun no, pero esta tarde voy- Concluyo sin escuchar las quejas de su madre. Solo se sentó sobre su sillón. Que dolor de cabeza por todos los cielos.

Sin darse cuenta al abrir los ojos ya eran las seis de al tarde. Asustado por su descuido salió rápidamente de la oficina y corriendo por los pasillo choco con Karin.

-Mil disculpas- Dijo Karin aparentando sumisión. Naruto que no tenía ni cinco centavos de intención de disculparse con la pelirroja solo la ignoro. Pero antes de que su evidente acto fuera descubierto por Karin se detuvo y dijo:

-¿Karin tienes tiempo?- La chica asintió afirmativamente, pues había esperado su momento entre las sombras para tal acercamiento, su plan era simple: atrapar a un tío rico y darse la gran vida.

-Si- dijo quitándose los lentes, para acercarse sugestivamente a Naruto, el cual la miro de arriba abajo. Pues la humana no estaba nada fea y tenía buen cuerpo- Necesito que me ayudes a elegir un anillo para mi prometida y si quieres luego vamos para un motel- dijo sínicamente, pues ¿no era lo que pedía la humana?… Sexo a cambio de favores monetarios.

-De acuerdo- Soltó Karin sin pelos en la lengua. Primero debía hacerle ver a Naruto que la mercancía valía la pena y después buscaría la forma de sacarle el máximo provecho. Todo era un negocio de sexo.

Rápidamente entraron aun tienda. Probaron el primer anillo que les pareció lindo, Karin pidió otras joyerías y se dirigieron a un Motel de cinco estrellas.

Rápidamente Karin salto sobre Naruto besándolo y el correspondiendo sus besos con la misma pasión. Ambos dirigiéndose a la cama, más cuando estaban en la mejor parte Naruto simplemente se detuvo y la contemplo. Algo en su cabeza repudiaba la acción, mas otra parte le animaba. 

-¿Qué ocurre?-Pregunto Karin echada sobre la cama, con las piernas abiertas, que dejaban ver esas bragas de color negro, en fin en una posición que daba a entender lo dispuesta que estaba para el coito.

-Olvide el condón-dijo Naruto ignorando sus contradicciones. Para alejarse de Karin y buscar alguno en su cartera, pero no tenía ninguno y eso le extraño, por lo general siempre tenía dos o tres condones en su billetera- Mierda…- Se quejo

-si quieres puedes hacerlo sin condón- Sugirió Karin albergando al esperanza de un posible embarazo y el monto que pediría por el niño o por el aborto y su silencio.

-Ni que estuviera loco. ¿Quién sabe qué pestes me pegarías?- repuso Naruto molesto “¿Yo arriesgarme con una humana? Ni en tus mejores sueños” concluyo en sus pensamientos.

-me estas acusando de ser portadora de alguna enfermedad-dijo ofendida Karin, que aún mantenía las piernas abiertas

-digo… si el traje te queda- dijo Naruto acercándose a la cómoda, por lo general los moteles dejan condones de cortesía en las cómodas. Sip. Allí estaba el maldito condón.

-Puf- bufo Karin, pues no podía alegar pureza y su frase sugerente no le hacía méritos a sus quejas- ¿encontraste el condón?-Le cuestiono y Naruto lo mostro como si se tratase de un trofeo.

No hacen falta palabras para describir lo que hicieron en esa habitación por dos horas, solo concluir que al terminar Naruto simplemente se levantó y acomodo la bragueta, lanzo sobre la cama de forma frívola un bollo de dinero, escribió una nota rápida y se largó de la habitación. El sexo era divertido, pero esta vez… Esta vez no se sentía igual.

Karin simplemente despertó cansada y el rubio ya no estaba. A su lado vio un fajo de dinero y una nota:

“no me llames.” Decía la nota.

-¿Y eso que significa?-repuso Molesta- Por lo menos esto alcanza para  ir de shopping- dijo resignada y es que ni siquiera pudo tomarse una foto con el jefe para extorsionarlo con su novia. Simplemente Naruto… no le dejo tiempo para nada y fue ella quien acabo dormida por el cansancio. Tuvo que admitir que era un buen amante. Quizás el más vigoroso que jamás conoció, pues se comportaba como una bestia aunque se quejaba mucho sobre tonterías.

Naruto se marchó de mala gana del motel, definitivamente estaba fastidiado. Quizás por el momento de placer olvido sus extrañas molestias, pero después, después miro a Karin y le dio nauseas. Antes ya tubo sexo con humanas, pero, pero… Acaso era tan desagradable el tacto con esa especie.  

-Qué demonios pasa contigo Uzumaki- dijo mirando a su pequeño yo escondido en sus pantalones- No eras tan mezquino…- Le sonrió- ya hora somos selectivos… ¿Acaso el matrimonio es el culpable?-Concluyo.

-quedo todo roto…- Dijo Nagato mirando el cuerpo deforme.

-Sí, ya ni parece quien conocí- repuso Konan.

-Pero de qué demonios hablan- se quejó Yahiko- todos están igualitos- Señalo el resto de las cenizas y cadáveres de humanos regados por toda la isla-Porque se sorprenden tanto de ese humano-concluyo mirando los restos de Deidara.

-See. Pero los humanos apestan. Ni siquiera pueden tener una muerte digna. Su cuerpo se descompone, se hincha, abandonan su forma original y se convierten en globos a punto de explotar… globos cargados de metano… Asco total.

-cambiando de tema…- Susurro Yahiko- no deberíamos ir a por él

-Calma, calma. Aún tenemos tiempo- miro al suelo para luego ver su isla destruida- aún debe conocer el sabor del infierno…-concluyo.

Yahiko miro a Nagato dudoso. Pues si era verdad que las predicciones de Konan se cumplían lentamente, también era verdad que las visiones de una bruja no siempre eran acertadas, es decir sus sueños premonitorios algunas veces se mezclaban con simples sueños.

Hinata miraba emocionada cada uno de los vestidos de novia. Podía ser un matrimonio por conveniencia pero aun así era su día especial. A su lado tenia a Kushina y Tsunade que animadas seguían con la selección de vestidos.

Kushina no pudo evitar saltar de emoción al ver un vestido de color rojo transparente, con unos pliegues que sobresaltaban la figura femenina, y pese a ser algo largo… podría asegurar que Hinata se vería encantadora y a su vez seductora.

-¡Es este!-Grito Kushina alzando el vestido como si se tratase de la cura para el cáncer. Todos en la tienda la miraron curiosos

-¿Ese es…?-susurro Hinata con la cara colorada, ese vestido era demasiado para ella. Más bien todos eran demasiado escotados y provocadores.

-querida, serás la esposa de mi hijo, no creas que con timidez podrás retenerlo. Debes ser decidida, debes ser atrevida, saber cómo sacar las garras… Después de todo puede que él sea el Alfa, pero tú serás la esposa del Alfa y eso es mucho más que un alfa, claro si sabes usar tus cartas-Señalo los pechos de Hinata.

La pobre estaba tan… tan… avergonzada que sentía desvanecerse.

La duda surgió en su cabeza después de tanto tiempo y es que… Si no puedes ver nada, ni sentir nada… ¿aun sigues vivo? ¿Lo había estado alguna vez?

Ese era el dilema de un pensamiento que vagaba en medio de la oscuridad. Cuantos días quedo allí atrapado. ¿Aún seguía vivo? ¿Estaba sano?, ¿estaba herido?… quizás todo era aun sueño. Quizás el jamás existió o quizás aun dormía placido en algún lugar.

¿Tenía ojos? ¿Tenía boca? ¿Tenía manos?… ¿tenía cuerpo? ¿Qué demonios tenia? Ese ser no lo sabía.

De pronto un dolor agudo hizo temblar aquel universo suyo. Un dolor que no lo toco, pero pudo divisarlo, eran pequeñas líneas rojas que aprecian y desaparecían como destellos de luz. Pudo escucharlo, al fin sintió algo de calma, nuevamente ese molesto sonido de pum, pum comenzaba. Supuso que podía calmarse… El universo parecía volver a la normalidad aunque no con la misma intensidad.

En fin. La vida de cada quien seguía su ritmo, todos por su lado. Todos lanzando al olvido el pasado, unos con intención de olvidar, otros sin intensión, pero todos con el mismo camino. 

Notas finales:

Sigientes capítulos:

Olvido II

Remembranzas 

...


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