El Clan III
Sasuke suspiro resignado y derrotado al sentir la mirada de muerte de Hinata sobre su nuca. No quiso ni voltear, solo siguió fingiendo estar muy ocupado revolcando algunas cosas de su hija. Maldijo a su suerte. ¿Quién le diría que esos dos niños se llevarían bien? Pues ambos jugaban sobre el suelo con algunas semillas y ramitas. Miro con cara de pocos amigos a Sarada que ni comprendía lo que ocurría. Solo estaba feliz de encontrar un amiguito con quien jugar. Tanto Sasuke como Hinata podrían arder en las llamas de la incomodidad, pero los soportarían después de todo sus hijos parecían muy felices. Ambos soltaron un suspiro de resignación. Pero la tregua no duro mucho. Hinata que no aguantaba más, simplemente camino en dirección de Sasuke y se puso frente a él para enfrentar sus miradas.
-¿S, Si?-Interrogo Sasuke tratando de no mostrar su nerviosismo.
-No lo culpo…-Dijo Hinata dejando a Sasuke descolgado- Eres muy apuesto…-Se acercó y lo tomo de su mentón. Quizás evitar el contacto era lo mejor, pero estaba tan avergonzado con Hinata que le toleraría uno que otro atrevimiento. Después de todo… Era el maldito amante-Tienes rasgos muy finos, pero no dejas de ser varonil… y tu piel…- Acaricio Hinata su mejilla-Es muy suave… mejor que la piel de muchas mujeres que conozco…-Con leve sonrojo y vergüenza admitió lo inevitable- Eres hermoso… Es un maldito desperdicio…
-No se toca- De la anda como un rayo aparecía Naruto tomando a Hinata de sus muñecas con esa mirada amenazante- Es mío…-Concluyo y Hinata aun impresionada se echó a reír. Esos ojos recelosos que la miraba con amenaza de muerte. Realmente Naruto amaba a ese hibrido una sensación de gracia y rencor la invadieron, estaba entre soltar ponzoña destacando los deslices amorosos que tubo Naruto con otras mujeres aun estando casados. Estaba más que seguro que el hibrido no sabría nada. Después de todo si encajaba las fechas en ese tiempo aún estaba mal herido en medio de la nada. Al diablo se dijo.
-! Estas celoso!- se burlo
-No. Claro que no…-dijo Naruto acalorándose, podría decirse que si era muy celoso, pero jamas le gustaba admitirlo, no le gustaba mostrar ese lado vergonzoso y menos delante de la más vergonzosa chica que jamas había conocido. Maldición porque no solo se ponía llorar en la cueva como siempre. Maldijo el reciente cambio en la personalidad de Hinata.
Sasuke arque las cejas, se sintió fuera de sitio, pero aliviado de ya no ser el punto de atención de Hinata. Lentamente tomo a su hija en sus manos y se preparó para escapar del lugar y dejar a esos dos resolver sus asuntos pendiente cuando sintió la manito de alguien jalando de su pantalón.
-Quien lo diría. Si eres capaz de enamorarte- Hinata se acomodó el cabello para mirar a su hijo que se colgaba del pantalón de Sasuke. Negó con la cabeza, cuando Boruto se encaprichaba con algo no lo dejaba ir, supuso que heredo ese aspecto de su padre- Naruto-Llamo Hinata ablandando su expresión- Renuncia a ser el alfa-soltó cual blande de agua fría- Rompiste todas las reglas habidas y por haber. Has dado la espalda a tus propias creencias. La manada te importa una mierda…
Nuevamente comenzaban a discutir.
Sasuke miro al suelo y no pudo con esos ojitos de perrito que gritaban “Devuélvemela” Ese niño le exigía la compañía de Sarada, ser el único cachorro era aburrido y pese a que le gustaba estar con su madre, jugar se había convertido en su prioridad del momento. Para colmo Sarada parecía estar en la misma onda que el menor. Sasuke alzo la mirada y vio como Naruto y Hinata discutían cosas de los clanes, lo que se diría en la reunión, algo sobre su divorcio y lo que ello conllevaría. En fin muchas cosas. Supuso que no los extrañarían si simplemente desaparecían.
-Venga pues-Dijo en un susurro para no distraer a esos dos.
Tanto Naruto como Hinata se percataron que Sasuke se llevaba a ambos bebes. Hinata iba a alegar algo, más al ver a Naruto callo. Como el costaba ir en contra de su verdadera personalidad. Aparentar ser venenosa fuerte, cuando por dentro solo deseaba seguir llorando y escondiéndose en las faldas de Tsunade. Pero bueno algún día debía sacar las garras.
Con ambos niños en brazos Sasuke miraba algo asombrado como el resto de los clanes llegaban. Eran dos por cada clan según recordó cuando Naruto le explicaba sobre las reuniones. Pero esto lo dejo perplejo. Allí aparecía una manada entera.
Si, Kiba venía muy furiosos con Shikamaru detrás de él pidiéndole que se calmara. Y detrás de Shikamaru la manada entera.
-Como me pides que me calme. ¡Rayos parece que no confían en mí!-Grito enfurecido
-No, no confiamos en ti-dijo Shikamaru acompañando el coro del resto de la manada. Como si fuera lo más obvio del mundo
-Vez. Hasta tú. Que se creen se supone que el alfa y el beta deben asistir a esta reunión. Por qué diantres todos se vinieron-giro apuntando a su manada con el dedo
-¿Por qué será…?-Dijo Shikamaru poniéndose en su pose pensativa-Quizás porque la última vez te fugaste del nido y… ¡casi te matan, sin mencionar que lograste que mataran a cuatro de nuestra manda!- Trato de recuperar la compostura. Que problemático que era Kiba, odiaba perder el control por su culpa. Calmándose dijo con suavidad- Quizás por eso. Sin contar que me costó mucho conseguirte una maldita cura. ¿Cuándo se ha visto que un chiguagua trate de matar a un tigre? Que rayos pensabas al atacar a Kaguya…
-¡Cómo que chiguagua!- Comenzó a gritarle frente de todos. Ya estaba bien, si había cometido un error lo lamentaba pero se supone que lo perdonaron, no tenían que echárselo en cara todo el maldito tiempo -¡váyanse a la mierda!- Dijo caminado lo más rápido que pudo antes de detenerse en seco logrado que Shikamaru chocara contra su espalda al tratar de detenerlo. Kiba tanto como Shikamaru que estaban tan absortos en su discusión recién se percataron al igual que su manada de las rarezas presentes en el nido del clan del Norte, el clan del ultimo nueve colas.
-¿Y aun te quejas de mí?-Reclamo Kiba con una sonrisa malosa y listo para sacar las garras al ver al infante Vampiro que inmediatamente era puesto detrás de Yahiko que lo miraba con cara de pocos amigos
-¡Oye!-Se quejó Nagato al ver obstruido su recorrido hacia Sasuke que tenía otro bebe en brazos
-Quédate detrás mío- Ordenó Yahiko.
-Comienzo a odiar este lugar-dijo Nagato haciendo un puchero de disgusto-No solo apesta, sino que también no me dejan hacer lo que yo quiero… Hasta parezco que soy prisionero político… -Concluyo Nagato mientras sentía la presencia de Menma detrás suyo junto con Konan.
Solo Shikamaru cuya mirada se posó en el recién llegado y reconoció al enmascarado que le dio la semillas para salvar a Kiba tranquilizo su expresión su empujo a Kiba para seguir adelante.
-Supongo que no eres tan molesto como Naruto-concluyo Shikamaru- Muévete. Debemos entrar a la cueva. Allí nos dirán que diantres pasa aquí.
Danzo por su parte ya dentro de la caverna miraba fijamente a Shikamaru y este le devolvía la mirada, para luego ver a Iruka y sentarse en su respectiva posición. Alfa delante y el beta detrás.
-Expulsarlo sería lo correcto-dijo Iruka-Pero Naruto es lo que menos importa ahora- señalo Tsunade y el resto asintió
-Cuantos creas que sean-Repuso Tsunade a Shikamaru que la miraba comprendiendo que ella sería la que representaría tanto a la manada de Naruto como a la de Hinata
-Quizás unos quinientos, no estoy seguro, pero tardarán un día entero para poder llegar. Debemos atacar e impedir que sigan.
-¿Hablas de matar humanos?- Dijo Danzo con una sonrisa complaciente. Hace mucho que deseaba volver a la lucha y acabar con los malditos humanos y vampiros. Los licántropos debían estar en la cima del mundo y el resto de las especies obedecerlos.
-…- todos guardaron silencio. Desde la guerra por los híbridos decidieron que matarlos estaba prohibido. La idea de romper esa regla daba rienda suelta a que también se rompieran la de juntarse con humanos y crear más híbridos y con estos los diez colas… Se imaginó a los vampiros alzándose en su contra, la imagen de la masacre y la crueldad sin límites de lo que implicaba una guerra significaba. Nadie supo que decir a Danzo. Estaban en una encrucijada, ¿Porque los malditos humanos debían atacar justamente ahora que se hallaban dispersos en sus decisiones? Y más ahora que tenían al nuevo guardián de los vampiros presente resguardado por unas diez colas, una bruja y nada más y nada menos que el padre de especies Menma, sin mencionar que Naruto había roto las reglas y había asesinado a su propia madre el alfa anterior de su clan.
-Primero lo primero- dijo Tsunade mirando a Kiba e Iruka- Es hora de poner en orden las cosas. Es obvio que los dos últimos alfas que tenemos presentes en esta reunión son incapaces de hacer frente a la situación que se nos viene encima. Naruto no puede liderarnos… Nos ha traicionado. Hinata no tiene la fuerza suficiente y sin un líder capacitado serremos derrotados aun cuando rompamos las reglas y acedamos a ir a una guerra. No tenemos un líder capacitado.
Tanto Kiba como Iruka deseaban alegar algo a su favor y dejar de ser tratados como incompetentes. Pero no se les dio tiempo para hablar.
-Está claro que la tradición no sirve, todos los alfas no cumplen con lo requerido para desempeñar ese papel- Dijo Shikamaru dejando a un Kiba anonadado.
-Alto-Gritaron Iruka y Kiba, sin aguantar más ser ignorados- se suponía que esta reunión era para tratar el tema de Naruto y sus idioteces
-Esta reunión es para destituirlos de sus cargos y designar un nuevo alfa-Remato Danzo con vos seria mirando asesinamente a Iruka que volvió a guardar silencio, hasta que otro temor recorrió su cuerpo… “Un solo alfa” se dijo.
-Eso. Eso significa que ¿seremos desterrados?-Cuestiono temeroso Iruka, maldiciendo a Naruto
-No. El único que posiblemente sea desterrado es Naruto, pero en cuanto a ustedes…- la pausa que hizo Danzo fue tan larga y agobiante que Iruka y Kiba sintieron la presión destrozar sus cabezas- Son demasiado débiles para ser alfas, y nuestras manadas no pueden seguir diversas en cuatro clanes. Para normar nuestro poderío es necesario unificar a los cuatro clanes si deseamos controlar nuevamente a los humanos. Por eso se asignaran un nuevo alfa que unifique a las cuatro mandas y un beta. Serán los líderes definitivos. Sobre sus hombros recaerá el poder de los cuatro clanes, superara aun diez colas con ese poder y posiblemente a Indra y juntos podremos contra Menma si el llega a ponerse en contra nuestra.
-Entonces dices que tu serás el alfa-Dijo en tono de burla Kiba mirando fijamente a Danzo- el más viejo de todos.
-No. dijo Danzo con el semblante serio- ese puesto debe ser para alguien más joven. Yo seré el nuevo Beta. Tengo más experiencia en estrategias que Shikamaru, mas conocimiento del mundo y sus rarezas que Tsunade- Los betas actuales se miraron mutuamente, su edad era su ventaja para analizar la situación y mantener la calma en todo momento, cosas que ambos perdían por culpa de sus alfas. Asintieron aceptando su derrota.
-Alto- Grito Kiba- como pueden permitir tal cosa. Ustedes son los betas. Son los segundo al mando de nosotros sus alfas-remarcaba suponiendo lo que eso con llevaría. Quizás a Iruka no le afectaría tanto, pero a Kiba sí. Si Shikamaru renunciaba a ser el beta como daba a entender, ya no podría estar junto a él fuera o no fuera el alfa. Shikamaru seria llevado lejos de su lado pues dudo que las intenciones de Danzo fueran seguir socapando sus traumas infantiles. Se mordió la lengua cuando miro la cara de Shikamaru mirándolo seriamente, lanzándole ese mensaje convincente de “Cállate de una maldita vez”
-Y… ¿Quién será el nuevo alfa que unificara todas las manadas?-cuestiono Iruka mirando como posibles candidatos a Tsunade o Shikamaru. Ambos si tenían buenas notas en cuanto a combate y liderazgos. Supuso que eso aterraba a Kiba, pues según los rumores el chico rudo no podía dormir solo y Shikamaru no solo era el beta, sino era como su madre que siempre velaba por Kiba. Recordó los últimos chismes sobre la casi muerte de Kiba y como Shikamaru tuvo que ir en busca de una cura. Negó con la cabeza… Casi sintió pena por Kiba. Era difícil superar la mamitis aguda.
-Es difícil decir quién. El único con capacidad de liderazgo y fuerza era Naruto, pero resulto ser de lo peor, no solo asesino a Kushina, sino se emparejo de un hibrido y rompió las reglas, trajo un vampiro y el padre de especies…-Guardo silencio todos se miraron comprendiendo que eso era un problema ¿Qué hacia el padre de especies en ese lugar? ¿Qué tenía entre manos?. Es decir de él no supieron desde cientos de años atrás. Solo Danzo conto las historias de los padres de especies a las nuevas generaciones y lo hizo porque su padre le conto esas historiar y ahora aparecía uno de la nada.
-Tsunade se levantó del suelo y miro a todos
-Es lógico que solo una persona está capacitada para dicha posición-Kiba miraba a la mujer nervioso. Que diría la bruja esa. Suplico que se atribuyera el puesto. Que se decidiera que ella fuera el nuevo alfa, pero cuando la miro dirigir su mirada a Shikamaru e Iruka, nuevamente sintió la sangre congelarse.
“Mierda. Uno comete un error y lo pierde todo” se dijo maldiciendo su imprudencia pasada. Quizás de no haber cometido ese error, el sería nombrado el nuevo alfa y Shikamaru podría seguir a su lado aunque no como su beta. Sintió su mundo derrumbarse y el vacío en su estómago, quizás la muerte no era tan mala, supuso, pues sentía un vacío que le hacía abrazar al posibilidad de morirse si Shikamaru era alejado de su lado.
-Quizás no sea el más fuerte de todos y le falte la capacidad de liderazgo y confianza en sí mismo, pero… En los pocos combates que eh visto eh descubierto que su razonamiento analítico han salvado a su clan de la extinción a pesar de ser simples cachorros. Shikamaru. Creo que tú serias un gran alfa
-SIIII!-Gritaba Iruka contento del librarse de tal responsabilidad. Mientras Danzo se olvidaba de su postura y le mordía la cola de pura rabia.
-¡NOOOOO!-Grito Kiba mostrando su clara frustración.
Tanto Tsunade como Shikamaru miraron a los ex alfas y negaron con la cabeza. Seriamente debieron hacer esto desde hacía mucho. Esos dos no estaban capacitados para liderar un clan.
Ambos elegidos pasaron al centro de la cueva y miraron a los representantes de las otras manadas.
-Lo dijeron claramente. Carezco de confianza y liderazgo, pero siempre he puesto a mi manada como prioridad. Espero no decepcionar su confianza, pues ahora todos son mi manada. Dare todo de mi para reestablecer el orden de nuestra especie y aplicare la ley a los que rompan las reglas-Dijo Shikamaru aceptando el puesto de alfa
-Me conocen y saben quién soy. No necesito decir nada mas- concluyo Danzo. Y ambos elevaron las manos, y al mismo tiempo los otros representantes elevaron sus manos y sintieron como un nuevo poder recorría sus cuerpos, como dentro de ambos seres se unificaban la fuerza y la voluntad no de un clan, sino de los cuatro clanes. Esa sensación superaba todas sus expectativas. Cada pensamiento, cada emoción, era todos como un libro abierto para Danzo y Shikamaru que se miraron y comprendieron el significado de poder.
…
Fuera de la cueva Naruto simplemente se tambaleo al sentir que sus fuerzas le eran arrebatadas, no lo suficiente para caer y perder el conocimiento, pero si para sentirse débil
-Naruto-Dijo Hinata algo preocupada cuando ella también sintió tal pérdida y cayó inconsciente al suelo. Fueron despojados del poder adicional que se les dio al ser alfas.
-Hinata-Llamo Naruto sujetándola entre sus manos
-Naruto…-Llamo la joven aun mareada-Ellos… Ya no somos nada-concluyo soltando lágrimas. No era Naruto el que le arrebataba lo único que creía que valía la pena luchar. Tsunade le había arrebatado el futuro de su hijo. Le arrebató el puesto de alfa y se lo dio a Shikamaru.
-Todo estará bien-Dijo Naruto a la desesperada mujer
-¡Cállate! Para ti puede que todo este bien. Aun tienes un diez colas como hija. Pero para mí y Boruto… no queda consuelo… ¿Que seré de hoy en adelante? solo una mujer soltera con un hijo… Ya no podre enorgullecerme de ser la madre del futuro alfa, ya no podre levantar la cabeza al verte destituido y expulsado… ya no seré el alfa, solo seré nada… Nada… solo una patética mujer despechada con el recuerdo permanente del hombre que causo su desgracia. Y aun así…-Se levantó- Tu serás feliz, dentro o fuera de la manada. Acaban de romper las cadenas que te ataban y limitaban para tener una vida al lado de ese hibrido… No hay justicia en este mundo.
-Hinata-Llamo Naruto sintiéndose culpable por el sufrimiento de la chica de ojos blancos
-Me lo quitaste todo Naruto. Todo… ¿Qué culpa tuve yo de las decisiones de tu madre? Yo solo obedecía el acuerdo que tú conocías bien desde años atrás. Yo solo… Solo quería cumplir con el sueño de mi padre y ahora todo se fue a la basura por tu culpa. Ni siquiera mi hijo contara con el poderío de un alfa- empujo a Naruto para comenzar a caminar, lo mínimo que deseaba era que este la sujetara entre sus brazos y al hiciera sentir tan estúpida.
Naruto miro como lentamente a mujer desaparecía de su rango visual detrás de esos otros cuerpos que aun esperaban a los nuevos líderes, algunos con expresión de sorpresa, otros con alegría, otros simplemente les daba igual.
…
Entre el follaje de los arboles rápidamente corrían Temari y Garra seguidos de un gran número de personas todas ellas con máscaras de zorros y armas de diferentes formas y tamaños. Su gran agilidad los hacia ver como jaguares en caza. Al divisar las cuevas de los licántropos y ver a estos girarse para hacerles frente. Se vieron algo molestos y sorprendidos, se suponía que solo lucharían con la manada del norte y los representantes de las otras manadas, pero es ese lugar se contemplaban a más de doscientos lobos.
-Tks- Chasqueo Temari la lengua suponiendo que el número de bajas superaría el estimado.
-Temari-Llamo Garra dándole la orden para recurrir a la estrategia establecida Por Fugaku, después de todo ellos solo eran el primer grupo de ataque, después llegaría Fugaku con el segundo. Solo debían resistir hasta que llegara el segundo grupo de ataque.
Sin hacerse esperar más la joven lanzo las bombas de Gas mostaza lo más cerca que pudo de las cuevas. El ataque químico era lo mejor contra esas bestias que dependían tanto de sus sentidos.