Una Gran Historia de Amor por Nehemia

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○Pov kili○○ Pasamos el día juntos, fili me dejo trenzarle el cabello y juntos nos recostamos un rato en la plaza central, estábamos felices por nuestro tío, después de todo, el siempre luchaba por nuestra felicidad y la de nuestra madre, siempre anteponiendo nuestros deseos a los suyos. Pues desde la muerte de nuestro padre años atrás, el se convirtió en un segundo padre, nos enseñó a luchar y a Fili le educó para ser su sucesor, jamás pensando en que llegaría a casarse o tener un hijo propio para ocupar el lugar. Recuerdo claramente el día en que le dije que mi tio que estaba enamorado de mi hermano, recuerdo haberle preguntado si algo estaba mal conmigo, pero el me contestó con cariño que amar a alguien jamás sería algo malo, aunque ciertamente no planeaba declararle mi amor a mi hermano jamás, pues el que mi tío estuviese deacuerdo no significaba que mi hermano también lo aceptara, yo pensaba que jamás aceptaría mis sentimientos y que además comenzaría a odiarme. Pero un día, después de un pequeño viaje en el cual sólo mi hermano me acompañaba, una joven se le acercó, era una humana, bastante linda y que le coqueteaba a Fili con descaro y el no parecía oponerse, no le importaba que yo estuviese ahí, yo no existía en ese momento y eso me enfureció. Me levanté empuje a la mujer lejos de mi hermano, el pareció molesto y parecía dispuesto a reprenderme, pero no le permito decir nada pues ne si un fuerte golpe en el rostro. -¡ERES UN IDIOTA!- le habia gritadi furioso. -Kili, ¿que te pasa?- me dijo exaltado por el golpe, pero extrañamente tranquilo, lo cual sólo logró enfadarme más. -¡NO puedo creer que estas tan ciego!- las lágrimas comenzaron a bañar mis mejillas, estaba tan dexepcionado y enfadado qué no pense antes de gritarle-¡¿que no puedes darte cuenta que te amo?! Al instante después de decirlo me arrepenti, tape mi boca con las manos y mire la sorpresa en sus ojos, el me miraba como si me hubiese vuelto loco y para mi sorpresa me empujó lejos de el, mientras me miraba con asco y odio, justo lo que más temia. -Me das asco- susurro. Mi corazón pareció romperse y poco a poco el se alejó sin decir nada mas. Esa noche no volví a la habitación que compartía con el, me aleje hacia los establos de aquella posada, me subi a mi poli y me aleje, llege a casa muy entrar a la tarde de el día siguiente, me topé a mi madre a mitad de un pasillo cuando Me dirijia hacia la habitación que compartía con mi hermano, ella me sonrió y se acercó a mi, pero pareció ver algo en mi que le alarmó, puesto que me abrazo y yo sólo pude llorar, lloré ahí a mitad del pasillo entre sus brazos, ella no pregunto nada, sólo me sostuvo contra su pecho susurrando palabras cariñosas en mi oído, tarde un rato en dejar de llorar y pero mi madre no me reclamó, sólo me llevo a mi cuarto y me recosto, se retiró unos momentos y luego volvió con una taza de te y acompañada por mi tío. -¿paso algo Kili?¿donde está tu hermano?¿porque no volvieron juntos?- me preguntaban preocupados. -tío, fili se enteró, el me odia- sin darme cuenta comencé a llorar nuevamente- el... Me dijo que le doy asco, y yo... yo me fui... No quería.. no queria que el me viera de esa forma, fui un tonto al creer que el podría corresponderse.- tardaron unos minutos en comprender y cuando parecieron entenderlo me miraron tristes, con lástima, yo no quería que me miraran así por lo cual me fui, corrí por los pasillos y me encerre en uno de los cuartos para invitados, y trabe la puerta para que nadie pudiera pasar, me rexiste y llore hasta caer dormido, estuve varios días encerrado, sin comer, sólo llorando y durmiendo, el variadas ocaciones intentaron abrir la puerta sin mucho éxito, golpeaban la puerta y gritaban, pero al pasar de los días comencé a debilitarme, pero no podía importarme menos, pues sabía que Fili había llegado hace unos días, lo se porque el también intentó abrir la puerta, el dijo que quería hablar, estuve tentado a abrir, hasta que recordé su mirada y sus palabras, estuvo horas golpeando la puerta e incluso gritando, había vuelto en varias ocaciones, me llevaban comida, pero yo no tenía hambre, no tenía ganas de nada y ese día en particular era pesado hasta abrir los ojos, escuchaba ruidos fuertes y voses, pero se oían lejanos, cerré los ojos y volví a abrirlos topandome con un par de ojos verdes durante unos instantes antes de caer en la inconsciencia. Cuando desperté nuevamente no estaba en aquel cuarto de huéspedes sino en mi cuarto, aquel cuarto que compartía con fili, no podía levantarme y sentía mi cuerpo pesado, unos minutos después entro mi madre por la puerta llevando un poco de comida, una sopa solamente y me hizo comerla en silencio para luego irse, no me dijo nada, parecía preocupada. Después entro mi tío y se sentó a mi lado, me abrazo con fuerza. -lo siento- susurro para después retirarse rápidamente. Luego de el entro, parecía demacrado y me miraba triste, se sentó y mi lado, pero yo me aleje de el de forma instintiva, tampoco le miraba a los ojos, nisiquiera le miraba más bien, hasta que escuche sollozos, el estaba llorando, se levantó de la cama y golpeó la pared con fuerza, parecía estar frustrado y triste, pero yo no le podía decir nada, no queria que el volviera a drespreciarme. Salió de la habitación y quede sólo durante un rato hasta que regresó con una jarra y un vaso, el cual lleno para después pasárselo,yo lo tome en silencio y después se lo regrese. Esa era nuestra rutina, estuve en reposo durante días, y mientras tanto dormia en el mismo cuarto que Fili, pero no hablamos ni nos mirábamos, poco a poco iba recuperando mis fuerzas pero ya no sonreía, no tenía una razón para hacerlo. Hasta que un día Fili entro al cuarto y me miro. -Lo siento, no tienes ni idea de como lamentó haberte lastimado de esa forma, se que me odias, después de todo te lastime, pero necesito decirte que yo también te amo, se que probablemente no me cres, pero es cierto, pero espero que puedas perdonarme, si, reaccione mal, lo se, pero no quiero perderte,no puedo perderte, estuve a punto de hacerlo hace un par de días y no puedo perdonarme a mi mismo, pero puedo prometerte que te cuidaré de todo a partir de ahora y me encargaré de que no te falte nada.- entre lágrimas me abrazo y yo también le abrazo. No le perdone imediatamente, pero le Di otra oportunidad y ahora no me arrepiento, pues mucho por ganar mi amor y mi confianza nuevamente, se alejó de todos y se dedicó exclusivamente a mi, me trataba con cariño y al tocarme parecía tener que me rompiera. Y yo lo perdone Pues cumplió su promesa. Ya no necesito más. Antes este no era un amor que quisiera, pero la vida me demuestra diariamente que es el que necesitaba. Ahora el y yo somos felices y lo mejor de todo es que estamos juntos hoy y siempre.

Notas finales:
Lamento la tardanza.
Espero les gustará el capítulo.

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