Luffy vio salir de entre los arboles a dos criaturas que nunca había visto nunca.
Luffy torció el labio intentando comprender que eran esas dos cosas.
-Te hemos estado esperando durante mucho tiempo- Hablo misteriosamente una de las extrañas criaturas
-¿¡Habláis!?- Grito sorprendido, y con una sonrisa radiante entusiasmado al descubrir una criaturas raras nuevas- ¿¡Que es lo que sois!?- Pregunto directamente sin delicadeza, con los ojos como estrellitas por lo alucinante que eran esas criaturas.
-Perdón por nuestra descortesía, yo me llamo Kei- Se señalo la criatura a si misma. Tenia aspecto de perro, tenia el pelaje blanco, pero lo que lo diferenciaba de un perro era en las puntas de las orejas, ojos, patitas y alas, estilo como las de un hada, que eran de un color verde agua oscuro que llamaba mucho la atención- Y el es Yui- Señalo a la criatura aun mas rara que el que se acababa de presentar.
Si Kei tenia algo de aspecto de perro, este otro apenas tenia nada que se le pareciera a uno.
Poseía el pelaje de una mezcla azul y blanco, poseía una gran cola, marrón-blanca con rayas azules, que era estilo al de un tigre, poseía también como una especie de cuernitos sedosos al tacto y unas alas que parecían ser de ángel.
- Y somos lo que nos dominan Shiroi tamashī (Almas blancas)- Siguió explicando Kei con una voz suave e inocente, como si se tratara de un niño pequeño.
Luffy puso un gesto en la cara que demostraba claramente que no entendía nada de lo que le habían dicho.
-¿Shiko tsudi?- Pregunto confundido, sin acordarse del verdadero nombre- ¿Y que se supone que hacéis? ¿Tenéis poderes?- Volvió a preguntar esta vez con ojos con estrellitas sin importarle ya la primera pregunta.
A las dos criaturas les resbalo una gota por la sien, por la estupidez de Luffy y por que no hiciera una de las preguntas mas importantes.
-Veras Luffy ¿Puedo llamarte así?- Dijo Yui, con una voz todavía mas dulce que Kei y que casi parecía melódica, a lo que Luffy asintió con la cabeza- Gracias, Luffy nosotros somos como una especie de espíritus que ayudan y guían a las almas que tienen un corazón puro.
-Ya veo- Comprendió milagrosamente- ¿Entonces sois como fantasmas?- Siguió interrogando.
Las dos criaturas asintieron mas o menos de acuerdo con esa declaración.
-Algo así somos- Prosiguió esta vez Kei- Ya que por lo general los humanos no pueden vernos, y somos incorpóreos para ellos.
-¿Entonces por que os puedo veo y hablar con vosotros? ¿Entonces mis Nakamas no os pueden ver?- Pregunto con el ceño fruncido.
Las dos criaturas sonrieron porque pregunto al fin aquella pregunta.
-Como ha dicho Kei, guiamos y protegemos a los que tienen un corazón puro, y solo aquellos que tienen ese corazón pueden vernos, tocarnos, hablar con nosotros y usar nuestras habilidades especiales. Obviamente no somos los dos únicos Shirois que hay, si no que hay cientos mas que ayudan a esas personas- Explico Yui con tono suave.
Luffy se cruzo de brazos mientras su cerebro echaba humo para intentar comprende lo que estaban diciendo.
Si hubieran estado sus nakamas ahí presentes, se hubieran asombrado de la pregunta tan inteligente que iba a preguntar a continuación;
-¿Si existen mas de vosotros como es que nadie lo ha descubierto?- Pregunto volviendo a fruncir el ceño.
Yui y Kei se sonrieron cómplices.
-Esa si es una muy buena pregunta, veras nosotros hacemos como una especie de contrato con nuestro protegido, si esa persona desvela quienes somos a las personas que esta prohibido contarles, se les borra la memoria tanto a los que han escuchado la confesión como al protegido, y claro esta, esa persona ya no podrá tener a ningún guardián con el, ademas el hecho de que somos inmateriales e invisibles para el resto de los humanos hace que se imposible ser descubiertos ¿Lo has comprendido?- Explico lo mas compresible que pudo para alguien tan despistado como el azabache.
Para sorpresa de las criaturas Luffy asintió.
-¿Eso quiere decir que vosotros seréis mis guardianes?- Pregunto/afirmo con una gran sonrisa.
Las dos criaturas se sonrieron entre si para luego mirar a Luffy sonriente.
-En un principio si- Dijo Yui alegre
-¿En un principio?- Pregunto confuso Luffy.
Kei miro con reproche a Yui, y este bajo la vista apenado por haberse ido de la lengua.
-Bueno ahora ya te lo tendremos que contar todo. Como ves somos dos. Pero lo normal es que solo uno de nosotros sea tu acompañante, el cual seria Yui, yo tengo a otra persona a la que proteger y guiar- Comento Kei, pero obviando el tema de quien era esa persona.
-¿Y entonces por que tu...?- Pero no pudo continuar la frase, ya que Kei le interrumpió.
-Lo siento de momento no puedo decirte mas, lo único que puedo decirte es que esta conectado contigo- Explico, mientras se rascaba el cuerpo con una de sus patitas.
Luffy escruto con la mirada a las dos criaturas cuando se acordó de algo que tenia muchas ganas de saber;
-¿¡Y que poderes tenéis!? Me habéis dicho de que tenéis poderes ¡Enseñármelo!- Exigió con los ojos brillantes.
Las dos criaturas se rieron por el entusiasmo del humano.
-Lo sentimos Luffy, no te los podemos mostrar...- Luffy hizo un puchero de decepción y empezó a protestar sin dejar acabar a Yui.
-¿¡Eeeehhhh...!? ¿¡Por que no!?- Se quejo mientras inflaba los mofletes como un niño pequeño molesto.
-Porque no es el momento, nuestros poderes solo podemos mostrarlo en determinados momentos y este no es el momento- Luffy hizo un puchero pero asintió desganado- Pero tenemos una habilidad aparte, que es la de conceder un deseo, a cada uno de nuestros protegidos, por lo que yo el deseo no te lo puedo conceder, pero Yui si, y puedes pedir lo que sea hasta lo imposible de conseguir se puede hacer realidad- Le explico serio, mientras lo miraba fijamente a los ojos, intentando que comprendiera la indirecta.
Pero Luffy era un idiota y no se percato de su indirecta, ademas de eso de que su deseo no estaba en caminado a su corazón, si no a su estomago.
Sus ojos se trasformaron en dos trozos de carnes, mientras que de su boca se le resbalaba la saliva, imaginando el comer carne ilimitadamente.
-¡MI DESEO ES TENER CARNE INAGOTABLE!- Grito sin pensar por que se dejo llevar por su estomago.
Las dos criaturas se quedaron de piedra ante el deseo de Luffy, hasta que al fin Kei reacciono y se enfado con el azabache.
-¿¡QUE!? ¿¡TE DECIMOS QUE PODEMOS CUMPLIR CUALQUIER DE TUS DESEOS Y LO QUE PIDES ES CARNE INFINITA!? ¿¡ERES TONTO!?- Le grito muy enojado.
Luffy que mostraba una amplia sonrisa divertido, se le sustituyo por una expresión indescifrable.
A las dos criaturas les sorprendió lo rápido que cambiaba de emociones. Unos instantes estaba completamente extasiado y un segundo después estaba completamente diferente, se encontraba como triste y pensativo...
-Ummmn... ¿También podríais traer de vuelta a Ace?- Pregunto con voz neutra mientras miraba con aire ausente hacia el cielo de color rosa-purpura.
Kei se sorprendió de la pregunta. Sabia que Luffy deseaba eso, pero aun así no se esperaba aquella pregunta tan repentinamente, el creía que tendría que dar mas rodeos para que lo entendiera o decírselo directamente. Le sorprendió mucho, ya que al parecer Luffy era mas despierto en coger las cosas de lo que el resto del mundo imaginaba.
Kei iba a explicarle sobre su deseo pero Yui se le adelanto;
-Si, podemos hacerlo, pero no sera fácil, si de veras quieres que Ace este vivo tendrás que luchar por ello nuevamente aunque esta vez no estarás tu solo ya que tus Nakamas, nosotros y alguien mas estaremos allí- Explico con voz dulce pero llena de seriedad.
Luffy también tenia una expresión seria, que pocas veces se le veía, excepto cuando peleaba contra un enemigo o le pasaba algo a uno de sus nakamas.
-Con luchar nuevamente ¿Te refieres a volver a ese lugar de hace dos años?- Pregunto directamente con voz completamente seria.
Yui asintió con la cabeza.
-Si quieres cambiar las cosas y salvarlo de ese destino tan injusto puedes hacerlo. Ahora tienes el poder hacerlo. Ademas esta vez como te he dicho no estarás solo. Sabes lo que , así que puedes evitarlo. Solo tienes que desearlo y nosotros haremos realidad tu deseo. ¡Desealo desde el fondo de tu corazón!- Exclamo Yui enérgico.
Las palabras de Yui pegaron fuertemente en el capitán de los mugiwaras, que tenia los ojos cerrados y los puños furiosamente apretados.
Recuerdos de aquel día volvían a inundar su cabeza, pero luego se le vino el recuerdo de cuando el, Sabo y Ace hicieron la promesa de volver a reunirse los tres en el mar.
Luffy abrió los ojos de golpe, mientras unas lagrimas traicioneras resbalaban por su mejillas, y grito desgarradoramente su deseo mas anhelante que tenia pegado en su corazón;
-¡Y-YO..! ¡YO DESEO QUE VOLVAMOS A ESTAR JUNTOS LOS TRES!- Grito con rabia contenida, mientras sus lagrimas seguían cayendo por sus mejillas.
Las dos criaturas se sonrieron entre así antes de mirar nuevamente a Luffy.
-Bien dicho- Dijo orgulloso Kei.
-Tu deseo sera concedido- Dijo Yui con una sonrisa amistosa.
Y a los pocos segundos de que Yui dijera aquello, una luz muy brillante cubrió entero el cuerpo de Luffy.
En otra parte de la isla....
Se encontraba Zoro sentando en una gran roca con los ojos cerrados, mientras intentaba recordar por donde estaba el Sur, ya que se suponía que ahí estaría anclado el barco.
Suspiro pesadamente al ser imposible para el recordar por donde se encontraba el Sur.
Abrió los ojos mientras se incorporaba de golpe sobre la roca a la vez que maldecía a los dioses y se quejaba sobre sus compañeros de que nuevamente se habían perdido.
-Tsk mira que son problemáticos, mira que perderse siempre... Y tener que buscarlos siempre es otra molestia- Suspiro con resignación, como si el tuviera razón en lo que decía para si mismo.
-¡Eres tu el que se pierde maldito marimo! ¡Y la molestia la causas tu! ¡Que siempre tengo que buscarte yo!- Grito una voz, detrás suya, que sonaba muy enfadada y muy conocida para el espadachín.
Al ver a Sanji hizo una mueca fingida de asco al verlo allí.
-Ahhaaahaa.... Y yo que creía que te habrías perdido para siempre, que lastima- Suspiro con una fingida voz de desilusión.
A Sanji le salio una vena en la frente por la rabia de aquel comentario.
-¡Estúpido marimo! ¡TU...!- Empezó a retarle enfadado, pero no pudo acabar la frase ya que una luz los envolvió completamente.
-¿¡Que mierdas esta pasando!?- Grito enfadado porque estaba sucediendo algo muy extraño.
Zoro saco sus katanas y se puso en pose defensiva, por si se trataba de algún enemigo, pero antes de que pudieran hacer alguna otra acción, la luz los envolvió aun mas haciéndolos desaparecer de aquel lugar...
Con el resto de la tripulación...
Estaban tumbados en la arena tomando tranquilamente el sol cuando la luz brillante los cubrió a todos ellos también.
Usssup y Chopper se asustaron en seguida ante el suceso misterioso que estaba sucediendo.
-¡N-N-N-NAMI! ¿¡Q-Q-Q-Que esta sucediendo!?- Pregunto con miedo claramente visible.
Nami negaba rápidamente asustada también, porque esto de la luz brillante no venia en lo de los libros que había estudiado.
-¡No lo se! ¡No entiendo lo que esta sucediendo!- Comento muy preocupada, mientras se encontraba paralizada en su sitio sin saber como actuar.
-Jujuju ¿Acaso habremos muerto y es la luz que nos llevara al mas allá?- Pregunto con una risita Robbin.
-¡KYAAAAAA NO QUIERO MORIR!- Gritaron Ussuf, Chopper y Brook a la vez.
-Ahhhh pero yo ya estoy muer..- Empezó a decir la broma Brook, incapaz de acabarla por que la luz que los envolvía se hizo mas intensa y los cubrió a todos totalmente, incluido al Thousand Sunny, a lo cual, instantes después, todos ellos desaparecieron, sin dejar ni una huella de que antes habían estado en aquella isla.
En otra parte del nuevo mundo...
Sabo estaba apoyado en la barandilla del barco mientras observaba con rostro pensativo el ancho y pacifico océano que lo rodeaba, cuando de pronto sintió el también que una brillante luz lo envolvía.
-¿Eh? ¿Por que estoy brillando? ¡Waaaa me voy a quedar ciego!- Empezó a decir, mientras se tapaba los ojos con una mano, ya que la luz era cada vez mas cegador, pero sin poder decir nada mas, ya que segundos después el también se había desvanecido en el aire sin dejar rastro alguno tampoco...
La rueda del destino había comenzado a girar rápidamente... Si Luffy conseguía su objetivo de salvar a Ace esta vez, todo el destino de el y de los que le rodeaban iban a cambiar dramáticamente... Y no solo eso, gracias al deseo de Luffy, recuerdos olvidados en el azabache y en Sabo empezaran a salir a flote...