En el capítulo anterior
-¿Lo tomas o lo dejas?
-Agg... yo...
-Se calmó un poco de su reciente estado de shock y bajó levemente sus orejitas. Se estaba replanteando en si aceptar o no, pues obvio le costaba aceptar la ayuda de los demás y más si se trataba de Sonic. Pero, para el azulado, se tardaba una eternidad con sólo eso-.
-Creo que es un no -interpretó el silencio ajeno con las orejas caídas y fatigado, dispuesto a marcharse-.
Continuación
Aunque, claro, sólo estaba montando una escena. El corazón del azabache no podría estar tan plagado de sierpes, aunque, por supuesto, jamás lo persuadiría con tal táctica, la de calar un sentimiento: provocar lástima. No. No podría.
-Agg... No tengo otra opción- pensó el bicolor, aún con la inseguridad colgando en su mente-.
¿O quizás sí?
Shadow levantó la mirada y la dirigió hacia Sonic, quien estaba a unos seis metros de distancia alejado de él, y de espaldas. Pero de todos modos, le pronunció una palabra, una sola palabra que fue casi desvanecida por el sonido potente de la lluvia. Palabra que alcanzó dificultosa a los oídos del ojiverde por trabarse en un gran nudo situado en la garganta del moreno, quien no estaba muy dispuesto a repetir lo dicho. (Se sentía rebajado, ¿lo único que deseaba?: mantener intacto el orgullo.)
-¿Qué dijiste? -preguntó el joven héroe con una sorpresa que ni se molestó en ocultar, moviendo únicamente su cuello para llevar su vista y pasearla en la cara del otro-.
... Había mencionado que Shadow no quería repetir lo dicho. Sin embargo (aún con el "nudo" hostigando su garganta), pareció neutral y pensativo pero con ninguno de aquellos adjetivos a la vez. Parecía divagar en un lugar remoto, mientras su cuerpo permanecía en tierra, su "yo interno" vivió un mundo distinto por un breve momento. -El de esta mañana no fui yo y es todo. -Su tono, su timbre... Vaya que podía resultar encantador (nótese el sarcasmo)-.
-¿Eh? ¿A qué te refieres? -preguntó dando media vuelta sobre su eje, con una evidente curiosidad plasmada en el rostro-.
-¿Lo que pasó hoy, día, te pareció común de mi parte? -señaló, y se puso de brazos cruzados. De repente, un tinte opaco de odio y exasperación devoró su atmósfera-.
-Pues obvio que no. -Colocó sus dos extremidades superiores tras la nuca. Por la expresión en su cara pareció pensárselo.
-Y ahí lo tienes... ¿que quedaste sordo o qué? Y lo de tu propuesta... sólo será por esta noche; luego me conseguiré otro lugar.
-Oh, vaya, ya creía que ibas a preferir quedarte bajo un puente y que yo tendría que llevarte a regañadientes a mi casa. -Cerró los ojos ante imaginar esa escena que le dio gracia. Sus labios se curvearon en una sonrisa de lado "algo bastante" seductora-.
Pero por lo recién dicho, al franjeado se le tiñó la frente de morado y frunció un poco más el ceño. Sólo se le surgió una pregunta, y esa era: ¿desde cuándo Sonic se preocupaba tanto por él? Tal vez desde hace un buen tiempo, pero siendo tan notorio ya no le daba mucho crédito y...
Un rayo lo cegó arrancándolo de "sí mismo" (por lo que instintivamente cerró los ojos), recordando que estaba en medio de la muestra de la verdadera tormenta que llegaba, y enfrente suyo, Sonic, quien lo veía un poco impaciente pero con la curiosidad renacida. Enseguida, se oyó el rugido del trueno.
-Quedaste varado en tu propio mundo -comentó irónicamente-.
El callar de ambos. El fondo rebelde del aguacero.
Un ceño imposible de profundizar...
Los erizos, que ya habían conectado sus miradas, con ese simple gesto y una sonrisa por parte del azulino... se esfumaron del lugar a velocidad supersónica, juntos, dejando estelas paralelas.
_En la residencia de Tails_
El producto del golpear (desde el exterior) en la puerta, se hizo presente, pero dentro no había movimiento alguno. Por ende, el sonido aquel se potenció e hizo más incesante hasta que el propietario del hogar pudo oír algo.
-¿Sonic? -se preguntó en un jadeo al doblar un pasillo, sujetándose de la pared para únicamente asomar la cabeza y hombros-.
Ninguna respuesta mas que un "toc-toc".
A causa de la incertidumbre, el niño se encaminó a la puerta, seguro de que el que la golpeó era Sonic tratando de jugarle una mala pasada. -Sonic, sabes que no caeré.
El mismo resultado: repetición de golpes. -¿Te lo tengo que repetir?
-"Toc-toc."
-Agg. Ya qué. Te abriré a la maldita. -Giró la manija y semi abrió la entrada, como se esperaba: no había nadie mas que el grisáceo y lluvioso paisaje. De seguro el cobalto se le lanzaría encima en cualquier momento... En cualquier momento-...
¡No había nadie!
Hizo una mueca y fue otra vez hacia la habitación para esperar a su amigo.
-No pude estar alucinando, ¡no pude! Eso de allá afuera se oyó tan real -se dijo afilando el entrecejo a la vez que entraba a su alcoba-.
Apenas pasó un tiempo, el impacto de un portazo allanó el lugar. Un estornudo, y otro, y otro.
Pov Tails
-Utiliza el antebrazo y no las manos, lo que haces no es muy higiénico que digamos. -Esa voz-.
-Agg... Só... Sólo necesito un pañuelo. ¡Achúg! -¡Y esa!-. -Dagh, ¿el mocoso que tienes por amigo no te enseñó nada? -Definitivamente debían ser Sonic y Shadow, así que me dirigí hacia ellos-. Ya al estar frente a ellos, les dije:
-¡Hola, colega! Hola... Shadow. -Me resultó extraño que este último viniera aunque ya le escuché entrar, pero de todos modos le ofrecí una leve sonrisa-.
-Hola -respondieron al unísono con sus peculiares maneras de ser-. Pero después de ver a "Sombra", no pude evitar sentirme extraño. Y no, aquí no sucederá el cliché de que me voy a enamorar de él cuando ya es el "blanco" de mi mejor amigo. Sentí un escalofrío, y no por temor a él o por el frío. -Bueno, eh... Enserio no creí que vendrías -dije dirigiéndome a Shadow-, pero lo que pasa es que yo duermo en la misma habitación que Sonic. -Vi cómo el de púas negras miró de reojo, sin pizca de gracia, al de azul-. Pero no te preocupes, Sonic dormirá en el sofá y te dejará dormir en su cama, ¿cierto? -pregunté entre dientes al cobalto y éste me miró como diciéndome "¡¿disculpa?!", estaba a punto de abrir la boca pero se lo impedí repitiendo-:
-¿CIERTO? -Lo reproché con la mirada como si fuese su encargado, de hecho, hasta coloqué mis manos en jarra para demostrar determinación-.
-Está bien -me respondió con claro disgusto-.
(...)
Como estaba por llegar la noche, y el cielo seguía en el mismo estado y la energía eléctrica se fue y el agua venía más poco, los erizos con los que tendré que convivir fueron a bañarse (pues estaban ceñidos de barro), primero el uno y después el otro pero a puro apuro antes de que "acabase" el agua. Claramente, tuve que alejar al lascivo de mi "hermano" del baño mientras lo ocupaba su "alma gemela", u opuesto, mejor dicho.
(...)
-Buenas, Shadow -le deseé, aunque cierto erizo ya me contó que sólo se quedaría por hoy-.
-Como sea -me respondió (acurrucándose entre las sábanas) desde la otra cama-.
Yo hice lo mismo; me acomodé, y mirando hacia el techo me puse a meditar.
La "todopoderosa" razón por la que no permití que Sonic durmiera en la misma habitación con Shadow, creo, que es más que obvio.
No permitiré que el exterminador de chilidogs se vaya a violar a la forma de vida perfecta, o siquiera intente algo estúpido.
End Pov Tails
Sucedió un tiempo sumergido y, sin darse cuenta, el pre-adolescente cayó dormido.
De a poco se apaciguaba la lluvia.
_Al día siguiente_
Pov Sonic
Desperté temprano como es costumbre. Fui hacia mi habitación, aquella que no pude ocupar esta tormentosa noche, y encontré a Tails extendiendo sus mantas. En cambio, a "él"... A "él" no.
-Buenas, colega. Shadow ya... ¿se fue? -Me sentí dolido, no lo pude disimular tan bien-.
-Estoy detrás tuyo. -Enseguida di media vuelta en un acto reflejo, un sobresalto-.
-Vaya, ¡Shadow! Creí que solamente esta noche te...
-Sí, sí; lo que sea -me interrumpió-, si tanto lo deseas, ya me voy.
-¿Qué...? ¡No! No quise decir eso...
-Pues claro, aveces mi hermano dice cosas y "la caga" -intervino el genio diciéndole a mi amor secreto no tan secreto-. Puedes quedarte el tiempo que te plazca. Nada mas debo hacer remodelaciones a este lugar para que tengas tu propia habitación -le aseguró volviendo a mirarme como madre sobreprotectora cuando yo soy su mayor-.
-¿Harían eso por un ex enemigo? -preguntó dudoso-.
-Ex enemigo suena feo, te consideraremos a como un amigo; después de todo, ya no eres tan malo -comentó el zorro-.
-Hmpt, ¿es un halago o un insulto?
-Calma, erizo emo, tómalo como quieras pero en buen sentido -dije sonriente, dándole unas palmadas en la espalda-.
-Está... bien -me dijo en tono desconfiado, se le notaba hasta en la mirada-.
End Pov Sonic
_Horas después_
Pov Shadow
Pasó la mañana. Sonic no pudo salir a correr gracias al niño sobreprotector que tiene de amistad, por el hecho de pescar un resfriado. Pero "por alguna razón" al cobalto no le molestó, ni a mí, aunque ya sé que lo traigo "babeando" (pues más obvio no me lo podía poner) lo cual aveces me parece molesto pero algún día podría sacarle provecho (aunque ese día no será hoy ni mañana, tal vez pronto).
Sin embargo, por otro lado, la razón de quedarme en esta casa (y no ir afuera en un lugar tranquilo) fue por deber. Me puse a vaciar un cuarto plagado de artefactos en desuso y cajas sin importancia para convertirla en mi habitación.
End Pov Shadow
_Con Tails_
__Antes del mediodía__
El rubio había ido a un Snack Bar junto a Rouge para aclarar mejor las cosas sobre la fiesta sorpresa de Sonic, ambos estaban en una mesa cerca del ángulo de unas paredes, alejados de las demás mesas y ventanas. Era una zona algo apartada y privada. El Snack Bar era algo grande.
-Egg... Anoche... Ya sabes por qué no pude contactarte.
-Oh, no te preocupes, ¿sólo por eso me llamaste esta mañana? Me resultó penoso el que justo a Shadow le fingieras que yo era "tu cita". -Aunque no exactamente-.
-¡No tengo la culpa! Es demasiado... ya sabes.
-Nisiquiera te preguntó -aclaró-.
-Mejor déjate de eso -se sintió avergonzado- y dime: ¿qué tienes planeado para Shadow que aún no le dices nada? -cambió de tema-.
-Sé perfectamente que a Sonic le gusta mi amigo -no debía sorprender al ojizafir el que ella supiera de eso sin que alguien le dijese- pero sobre "eso" yo me encargaré.
-Ejém, está bien.
-Bueno, prosigamos con lo que quedamos la otra vez.
-De acuerdo. -Seguidamente, sacó unos planos del artefacto que construía (desde luego, estaba en proceso, y los planos, enrollados)-. No hace falta que te explique más.
Desde luego, Rouge ya sabía qué hacer, sólo necesitaba ese "pedazo de papel". Lo tomó y lo guardó dentro de su escote, a lo que Prower se sonrojó a full y volteó la mirada.
Ella sonrió agraciada.
Para aparentar, ambos pidieron algo para beber y luego se fueron a sus respectivas residencias.
_Horas después_
-Primero lo primero -susurró en aire de misterio-.
La murciélago estaba cerca de la vivienda de Amy Rose. Un traje azul modelaba su cuerpo. Y algo llevaba entre las manos. Arreglaría unos asuntos y luego se ocuparía de Eggman.
_Días más tarde_
-¡Qué fastidio! Este diminuto invento me llevará lo que queda de la semana y aún me falta lo otro. -Se sintió frustrado, abrumado-.
El zorro de dos colas (en su taller y sentado en una mesa) se la pasaba trabajando arduamente con un reloj más que sofisticado. Las apariencias engañan, lo bueno viene en frascos pequeños, ¿me equivoco?
_Con Sonic_
¿Qué era lo insólito que sucedía? En el parque (a la luz del mediodía), tal atrocidad no podría estar pasando, es decir... era... ¡inaudito!
Tanta bipolaridad expuesta en el menos indicado.
-¡Sonikku! ¿Por qué te alejas? ¡¿Adónde vas?! ¡Llévame contigo o te enseñaré a nadar! -Lo abrazó llegando a asfixiarlo-.
¡Por Chaos! Era un horror.
-¡No! ¡Déjame! ¡Este no eres tú!
Deseaba esfumarse, convertirse en polvo.
Estaba consciente de varias cosas...
-¡Quiero que estemos juntos por siempre! -Su agarre se hizo más poderoso y el aire ya no llegaba ni a la garganta del carismático erizo. Sin embargo, al joven, en otras circunstancias le hubiera agradado oír lo recién dicho, en otras...-.
-Agg, ¡pero por favor! ¡¿Qué te pasa?! Jamás me apartaría de ti ¡pero no es como para que me ahorques!
-Está bien, mi "Blue". -Lo soltó y le dedicó una mirada y sonrisa tiernas en demasía que ocultaban la psicosis-.
-Ehh... ¿Se puede saber por qué actúas tan raro?
-Sólo tengo ojos para ti -dijo cambiando radicalmente su compostura, lo miró serio-.
Un silencio se instaló y el azulado se puso nervioso, comenzaba a creer que Shadow no era Shadow desde que comenzó la mañana.
_Al día siguiente_
Sin muchas ganas de volver a ver a su amor platónico por el estado que éste tuvo el día anterior, se hizo un café (pues estaba en la cocina). Pero la vida puede resultar tan dulce... el azúcar que lleva puesto es la ironía. Al escuchar unos pasos, volteó vertiginosamente y vio a Shadow, con los ojos abiertos de par en par.
-¿Qué me miras? -Sonó frío-.
-N-Nada, nada -musitó-...
(...)
Al terminar de hacer el café y servirlo en las tazas, se propuso a beber de ella, no sin antes sentir una profunda mirada paseándose encima de él (así que levantó la cabeza)... era la de Shadow, quien estaba sentado enfrente suyo pero que ni había tocado su desayuno.
Dudas, a pesar de que él conocía de sobra esa mirada lujuriosa en conjunto de la sonrisa pretenciosa que se curveaba de lado. Pero viniendo de Shadow, se replanteaba de que, seguro, el mayor sólo estaba planeando algo (por lo que no debía ilusionarse por nada)-. ¿Necesitas algo?
-¿Qué piensas que necesito? -Apoyó los codos sobre la mesa y entrecruzó los brazos. Sonrío socarronamente.
-¿Sabes? No deberías jugar conmigo. -Frunció el ceño y los labios-.
-Aún no estoy "jugando". -Se levantó de la silla, fue a donde Sonic y se sentó de frente entre sus piernas, en su regazo mejor dicho (mirándolo cara a cara). Enseguida colocó sus manos en los hombros del menor, dejándolo perplejo-.
-¿Pero qué...? -susurró con los ojos de par en par-. ¿Tú quieres...? -Es más que obvio -le susurró al oído, Shadow a Sonic-.
-Esto no tiene sentido -pensó algo desconfiado, afilando el entrecejo y entrecerrando los ojos-.
Pero, como si le diese igual, el franjeado comenzó a pasear su lengua en la mejilla del aún quinceañero de una forma tan lenta y sensual que sorprendía al chico. Sus ojos también se entrecerraron. Como en cámara lenta, entre caricias cogió los brazos de Sonic y los llevó a su espalda en forma deslizante.
Condució su lengua a por encima de los labios del, curiosamente, estático héroe que no quería dejarse llevar... por una amenaza. Una amenaza de Tails llamada "Lo tocas <<así>> y te mueres" que tenía que ver en todo con sus chilidogs, carreras y hombría.
Sin embargo, las manos de Shadow obligaron a las de Sonic a bajar más. A pasearse por sus glúteos y acariciar su rabo de erizo negro.
Pero el menor, por muy tentado que se veía a hacer con lo suyo, sólo atinó a soltar un gruñido de frustración.
Shadow bajó sus besos al cuello de Sonic, ocacionándole escalofríos al sentir aquella respiración chocar contra su piel...
-¡Pero por favor! ¡¿Lo harán EN LA COCINA?!
Los ex enemigos se separaron y de un sobresalto observaron a Knuckles más rojo que de costumbre, parado cerca del marco de la puerta.
-¡Qué tal, cabezón! Todo va bien por acá... P-Puedo explicártelo -dijo Sonic, sudando nervioso-.
Knuckles miró hacia atrás (por la puerta).
Shadow puso los ojos en blanco.
Una voz se escuchó alertando a ambos erizos sobre quién llegaba.
-Hola, Sonic. Hola, Shadow -saludó Tails entrando desde el mismo lugar que lo hizo el rojizo-.
Todo estaba normal: Sonic y Shadow tomando café batido tranquilamente.