Habían pasado unas cuantas horas, y el tigre seguía pensativo, tenía que asimilar lo que había visto, y sobre todo escuchado, no sintió el pasar del tiempo, ¿Cómo tratar a Kuroko de ahora en adelante?, eran compañeros de equipo, y también de aula, tendrían que verse nuevamente.
-A ver ¡centrémonos Taiga!, en sí, tú no tienes nada que ver, si lo vemos de manera realista, son problemas de pareja y terceros, pero…
Estaba tan concentrado que no sintió que alguien había llegado hasta su lado y le ponía una manta sobre los hombros, la acción le hizo dar un brinco en su sitio.
-¡Magui san!
-Calma tigre, estabas tan concentrado que ni sentiste mi presencia ¿te encuentras bien?
-sí.
Solo un sí, secamente, que no convenció a la mujer.
-ya es muy tarde, puedes quedarte a dormir aquí, pero si deseas te puedo llevar en auto hasta tu casa.
- no se preocupe, tiene que quedarse a cuidar de Kise, yo puedo irme solo.
-Taiga -la mujer hablo muy seria- sucede algo ¿no es así?, desde que paso “eso” me has estado ocultando el rostro niño.
-Kagami no supo contestar, pero era cierto que estaba ocultando algo.
Magui suspiro, se acomodó el chal que tenía puesto, y se sentó en una silla de la cocina frente a la que estaba sentado Kagami, él inmediatamente se levantó y se puso a preparar té para ella.
-eres gracioso Taiga kun puedo sentir claramente que quieres escapar de mí, pero aun así me preparas un té, o así demuestras tu nerviosismo.--termino diciendo eso con una sonrisa-
-supongo que es la costumbre
-¡costumbre!- la mujer enarco una ceja
-soy mestizo, mi madre es japonesa, y cuando me retaba, recordaba sus costumbres y me hacía prepararle un té, después fue Alex quien me hacía hacérselo.
-Ya me has contado algo sobre Alex, es tu maestra y “apoderada” y aunque quisiera saber más, en este momento quiero que me expliques que es eso de “retarte” porque debería hacerlo Taiga kun.
La mujer seguía con la mirada los movimientos del pelirrojo, no sé porque, pero le había agarrado cariño a ese muchacho, y en ese momento se encontraba muy perturbado, no podía dejarlo así, tenía que ayudarlo al igual que él hizo por ellos.
-Taiga kun, es por lo que acaba de pasar ¿no?
Silencio
-Tú, Daiki kun y Kuroko kun (pudo ver que el chico crispo un poco cuando escucho el nombre del peli celeste) son amigos ¿no es así?
-No tengo mucha relación con Aomine pero jugamos juntos a veces, es un gran jugador de básquet. Y en cuanto a Kuroko, ya le dije que estudio y entreno con él y se nos ha catalogado como la sombra y la luz, yo soy su luz y él mi sombra.
-La luz y sombra ¿eh? Si creo que anteriormente ese par también fue catalogado así cuando estaban en Teiko. ¿Sabías que Aomine salía con Kise?.
-Sí, casi todos sus allegados como la generación de los milagros lo saben, yo hasta fui invitado a la fiesta por el principio de su relación.
-Te parecía raro también ¿no?
-No, como decirlo, tal vez sea porque he vivido mucho tiempo en el extranjero y no me acostumbro a las tradiciones japonesas, o porque fui criado por Alex, que es un tanto libertina (en el buen sentido de la palabra) y ser muy torpe y no me doy cuenta de algunas cosas a veces hasta yo mismo me olvido de mi espíritu animal, y (esto lo dijo en un murmullo para él) me gustaría no tener un espíritu animal.
Magui lo escucho, pero sabía que ese tema era de cuidado después de todo solo se trataban de jóvenes que apenas dejaban la adolescencia, pronto dejarían la escuela para enfrentar su futuro iría con cautela para entender el corazón del tigre. Lo dejo proseguir.
-Ambos se veían felices, aunque ellos mismo no declararon su relación, fue takao el omega de Midorima quien los descubrió y luego Momoi, asi que se hizo conocido y aunque mucho se sorprendieron, Akashi fue el primero en felicitarles, sirviendo como ejemplo , es extraño a pesar de todo, cuando nos encontrábamos para jugar, Kise y Aomine se llevaban bien, a Aomine se le veía un semblante alegre y Kise ni que decir, a pesar de no poder jugar por su lesión; si hubiera dicho que estaba sorprendido hubiera sido por la unión de ese par tan diferente, y no lo digo por lo de alfas, sino bueno, Kise es meloso y exagerado en demostraciones de afecto mientras que Aomine es serio y tosco, de verdad creo que el apodo de luz y sombra le hubiera caído mejor a ellos, pero Kise sería la luz y Aomine la sombra. En ese tiempo admire y respete mucho a Aomine dejo de lado el que dirán y se aferró a su pareja.
Kagami le había servido él te a la mujer y se sentó frente a ella también con una taza para él, ambos cruzaron las miradas, Magui san le sonrió, le estaba dando la confianza para que pudiera seguir hablando, ¿debería hacerlo? Pero necesitaba desahogarse con alguien.
Magui san lo siguiente que diré no será de su agrado, es por ello que después de contarlo me alejare de ustedes, si desea destajarme con sus garras estará en su derecho me lo merezco.