Por el camino de regreso, un halcón hablaba y hablaba pero un rubio y pelirrojo andaban muy callados, y ni siquiera cruzaban miradas no sin antes ponerse rojos ambos, había gato encerrado pensó Takao.
-Kise chan
-dime Takaocchi
El halcón se acercó mucho al oído del rubio y le hablo muy bajito
-Paso algo entre Kagami chan y tu anoche.
Como respuesta obtuvo aun rubio muy pero muy rojo, que intentaba darle una respuesta balbuceando.
-¡Que puede pasar entre nosotros dos! Takaocchi, solo somos amigos nada más.
-¿Así? Y yo sigo siendo virgen
-¿Aun lo eres?
-¡Claro que no! Aunque de eso solo hace 2 días, y anoche casi de nuevo, pero eso no viene al caso.
-No levantes la voz Takaocchi.
Lástima, que un búho ya lo había escuchado.
-¡Bakao! de que estas hablando
-Nada Shin chan
El peli verde volteo para seguir mostrándole el camino al pelirrojo
-Ya sin bromas Kise chan, no le puedes engañar a mi vista, algo paso entre ustedes.
-Yo…no quiero recordarlo, mejor pensar que no pasó nada.
-¡Acaso ese tigre te hizo algo malo!, espera que ahorita lo destajo.
-¡No!, no es eso es solo que, (el rubio se tapó las manos con la cara para luego llevarse el cerquillo hacia atrás con una mano y suspirando)
-Es solo que no puede pasar otra vez.
El halcón se le quedo mirando, a decir verdad, el halcón y su pareja ya se había percatado de algunas cosas, y esa noche saliendo del baño, solo afirmaron sus sospechas.
-Lo siento menciono el halcón
¿Eh? de que te disculpas.
-¡De nada! como tú dices, solo que lo siento y punto.
Kise no pudo dejar de recordarlo y no quería hacerlo, porque si lo hacía sentía que su sangre bullía, las orejas le quemaban y seguramente su cara estaría tan roja como un tomate, se puso la capucha argumentado que hacia frio y fingió que dormía.
Takao solo le siguió la corriente y no dijo nada más
Pero…como olvidar lo que paso horas atrás si por culpa de ello no pudo pegar ojo, como olvidar que probo los labios de Kagamichi y este lo abrazo hasta casi asfixiarlo y él, sobre todo él, no hizo nada para apartarse, lo intento, pero sus intentos fueron muy débiles ante el aura de aquel tigre que se había vuelto salvaje.
Estaba avergonzado y mucho, primero porque no pudo controlar a Kagamicchi, después de todo el tigre era un alfa y tenía sus necesidades y de seguro se dejó llevar por el ambiente, el momento, gritaba mentalmente el rubio escondiéndose cada vez más entre sus ropas para que nadie vea su desesperación, y se sentía mal porque se supone que también él es un alfa y debió darle pelea por la falta de respeto, pero sabía cómo eran las personas con él, después de todo era modelo y muchos lo admiraban, tanto omegas como betas y algunos alfas. Kagamicchi seguro se confundió, ¡debería estar muy enojado con él por lo que le hizo!, lo beso y toqueteo descaradamente, aunque fue muy delicado y cariñoso pero ¡no!… le faltó el respeto, pero no estaba enojado, ¡que rayos le estaba pasando!, pero no quería perder su amistad, pensó el pobre rubio.
Por otra parte el pelirrojo aunque escuchaba la perorata que le estaba metiendo Midorima, sobre el camino, las velocidades, el cómo debe conducir etc. No estaba atento a ninguna palabra del peli verde, es más ¡¡¡ hasta no debería estar conduciendo!!! Porque su mente divagaba en otra parte en ese momento.
¡La había fregado!, ¡cómo pudo tirársele encima, así como así a Kise!, ¡es que era tan bestia!, aunque el rubio se veía muy, demasiado provocativo, ¡no debería haber hecho eso!, lo admiraba, ¡claro, que había aprendido a admirar a ese rubio!, pero en ¿qué momento, esa admiración se volvió en eso?, porque si Takao no hubiera llegado, estaba pensando, en arrancarle ese yukata que le estorbaba para seguir viendo esa piel suave y de color de la leche con aroma a almendras, si hasta ya le había metido mano por debajo, tocando sus firmes pero suaves muslos, le estaba mordiendo los labios, y había colocado la otra mano por el pecho tratando de pellizcar sus pezones aunque más quería ver los rosados de ellos,! pero que animal!, si hasta llego el momento en que pensó apararse con él, acomodarse entre sus piernas, quería saber que se sentía, si por fuera el rubio era suave, ¿cómo sería por dentro?, y ver esos ojos dorados mirarlo con miedo, rogando que parara, ¡lo excitaba aún más!,! quería tomarlo! ¡Necesitaba hacerlo!, quería marcarlo, hacerlo suyo. Sus marcas de tigre empezaron a aparecer en sus hombros y en partes de su piel, sus orejas estaban comenzando a salir, si se hubiera transformado totalmente hubiera hecho algo indeseable “otra vez”, hubiera violado a Kise.
Afortunadamente para él, justo en ese instante Midorima y Takao salían de los baños, y el pelinegro salió gritando, llamando el nombre de Kise y quejándose que Midorima había sido muy rudo con él. Por suerte salió gritando, así le dio tiempo para volver en sí y soltar al rubio, que lo miraba con miedo y temblando igual a aun inocente y desamparado conejito.
Se golpeó la frente contra el timón en ese momento.
Kagami, ten cuidado, si tienes sueño solo dime y yo manejo.
No, no es nada déjame manejar, lo necesito, además no tienes licencia, si te atrapan sería una mancha para tu historial de futuro médico.
El peli verde lo miro pero asintió sin decir más.
Por su parte el rubio de tanto pensar se había quedado dormido, pero en sus sueños recordaba cuando Takao grito llamándolo, y Kagami reacciono soltándolo, vio esos ojos de asombro y reproche en el tigre, de hecho que recién se había dado cuenta de lo que estaba haciendo y de seguro se asqueo, Kise lo comprendía bien, no era normal un alfa con otro, ya había pasado por ello, así que no le dijo nada a Kagamicchi, en vez de eso se levantó acomodándose rápido el yukata antes que los otros se dieran cuenta, y corrió chocándose con Takao y Midorima por el camino.
***
Ahora era el halcón quien recordaba cuando estaba gritando buscando al rubio…
-Kise chan, Shin chan me… espera ¿estás bien? te veo muy rojo y estas sudando mucho.
-No, es solo que estoy cansado, mejor me voy a dormir de una vez.
-¡Eh!, no tomaras un baño ¡se siente genial!
-¡No, mejor no!, creo que me quiere dar la gripe, mejor me voy de una vez, nos vemos mañana.
Y así prácticamente huyo un rubio alejándose de ellos.
El peli verde se puso los lentes acomodándoselos, ya que se los había quitado para tomar su baño, haciendo una mueca.
-¿Shin chan?
-Veamos a Kagami le ordeno
Encontraron al tigre a solo unos pasos, aun estaba sentado con las manos apoyadas en su frente, sin duda muy preocupado o arrepentido por algo.
-Kagami chan
-Kagami.
Nada, el pelirrojo seguía sin responder o reaccionar
-¡Kagami channnn ¡ grito más fuerte Takao.
Esta vez, el tigre reaccionó
-¡oh! ¡Takao, Midorima! ¿Cómo les fue su baño?
-¡Muy bien! ¡Porque no entras también! Kise chan no ira, porque se siente mal y tiene principios de gripe, estaba muy rojo.
-Kise…yo…
-Estabas con Kise, no es así, Kagami
Otra vez silencio sin duda alguna, el tigre no podía mentir. Se levantó de pronto
-Iré de una vez a los baños, ya es tarde nos vemos mañana Takao, Midorima. -Y desapareció muy rápido.
-Midorima se quedó mirando el lugar donde desapareció.
-Qué opinas Shin chan
-Sobre que Takao
-No es fantástico, al parecer esos dos, superaran sus heridas juntos, Kagami san me cae bien.
-No es tan fácil bakao
-¿Porque dices eso Shin chan? no seas aguafiestas.
-(Suspiro) te lo explicare para que no causes problemas o malentendidos.
-Imagina, ¿qué pasaría si yo fuera un omega como tú?
-¿Eh? pero Shin chan
-¡Solo imagínalo bakao!
-Pues… yo creo que igual me hubiera enamorado de ti por tu forma de ser.
-¿Te enamorarías igual de otro omega?
-¡Claro que no!, solo haría esa distinción porque eres tú, sino ¿porque me metería con otro omega?
-Y si yo, no pienso igual que tú y después, me enamoro de un alfa
-Sabía que sentías algo por Akashi
-¡Bakao ¡concéntrate que esto es serio.
Pues … si me dijeras que amas a un alfa, yo … creo que te mataría y después cometería suicidio.
-¡Bakao!
-Bien, bien, te dejaría ser feliz, porque te amo y desearía lo mejor para ti, pero no te librarías tan fácil de mí, me volvería tu amante y…
-Bakao , ¿buscarías otro omega?
-No, tu serias el único porque te amo.
-Ahora entiendes por lo que Kise está pasando, en el remoto caso que sienta algo por Kagami. Kise sacrifico mucho, su orgullo y cuerpo entregándose a Aomine, y pensó porque era por el amor que sentía hacia él, y que él sería el único alfa que lo tomara de esa manera, ahora si hablamos psicológicamente, para poder vivir, en la lucha interna constante con su lado animal alfa, él puso como excusa el hecho que Aomine sería el único alfa a quien se someta, porque él no era raro o enfermo, solo amaba y no amaría a ningún alfa más. Esa regla se ha grabado en el sub consiente de Kise para seguir adelante.
-Ahora si empieza a sentir algo por otro alfa, el animal alfa interno ¿ cómo lo tomaría? Temo que Kise pueda caer en alguna crisis y se empiece a odiar a sí mismo.
El halcón lo había comprendido, su mundo no era tan fácil ni sencillo, la sociedad de seres con anímales en su interior era muy pequeña, ellos se estaban extinguiendo y para perpetuar la especie, había leyes, leyes que nacían innatos al pequeño cachorro, para poder proseguir su especie, no solo era una lucha contra su sociedad sino también interna.
Takao derramo unas lágrimas, le dolía, le dolía mucho lo que le pasaba a su amigo.
-Entonces para que Kise chan sea feliz, tiene que buscar un omega.
El peli verde comprendió el malestar de su pareja porque el también lo sentía, sabía que su rubio amigo sufrirá aún más.
NO, Kise será lo que quiere ser, y estaremos a su lado para apoyarlo, si sucumbe a una depresión estaremos a su lado para levantarlo, Akashi ya se percató de eso también, está de acuerdo además él todavía está en dudas con el animal interior de Kise, me dijo que comenzara una investigación, hoy en día no conocemos mucho de los zorros dorados porque se creían extintos, tal vez , solo tal vez podríamos encontrar algo, pero al final la decisión será del mismo Kise y no hay que dejar que se sienta solo.
-Y sobre Kagami chan.
-No conozco bien a Kagami, y tengo que admitir que aún le guardo recelo, no soy como tu Takao que eres confianzudo y solo ves lo bueno en la gente. Pero si de verdad es como tú dices y siente algo por Kise, espero que sepa manejarlo bien y comprenda sus sentimientos. De antemano manejar a Kise sería muy difícil. Temo que tal vez caiga por lo mismo que le paso a Aomine y eso ¡sí!, mataría a Kise, si es que intentara algo con él, ¿valdría un tiempo corto de felicidad o engaño, por tu vida?
-Ser feliz un poco, es mejor que morir si ella Shin chan.
-Temo que no puedo coincidir contigo en eso.
Y es mejor así, como pareja, ya que yo soy el idealista y tú el realista, nos complementamos con eso. Tú pondrás mis pies sobre tierra cuando lo necesite.
-Mejor te corto las alas de una vez.
-¡Shin chan!
-Vamos a dormir Takao y entendiste ¿no?
-Sí, Shin chan tenemos que apoyar a Kise chan, si no queremos perderlo.
Y ese fue el recuerdo de la noche anterior del pelinegro, que ahora miraba como su rubio amigo dormía plácidamente a su lado, para contagiarse de su sueño y caer también rendido.
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