Camino a un lado del mayor viendo la pulcra estructura del edificio que componía la academia. Ambos iban en un silencio cómodo para ambos, silencio roto por una repentina voz proveniente de la espalda de ambos, al voltear ambos azabaches se tensaron notando a los gemelos Saikou acercarse, por instinto Taro escondió al menor tras suyo mientras este prácticamente amenazaba a Gakusei para que se alejara.
-¿ocurre algo? –pregunto seco el mayor viendo como el oji azul se acercaba a ambos.
-sí, ocurre algo Yamada –dijo desviando ligeramente la vista al menor, cosa que paso desapercibida por el mayor que parecíamos concentrados en los movimientos de Shinsei.
-¿Qué es?
-necesito hablar contigo a la hora de salida –levanto la mano antes de que el otro se negara –Tengo que aclarar algunas cosas contigo, solo eso.
-… está bien –acepto tras pensarlo un poco, a pesar de toda la palabrería que había soltado el de gafas contra Ayano había sido su amigo y si este quería aclarar algo, por muy pequeño que fuera, al menos le escucharía si le creía o no era otra cosa.
Ante aquella aceptación Ayano se alteró, sintió las manos sudarle y la rabia aglomerarse en su pecho mientras apretaba ligeramente la tela de la manga del mayor quien no noto aquello. Antes que siquiera pudiera hacer algo su muñeca fue tomada por el oji plata quien se agacho ligeramente besando el dorso de su mano.
-Buenos días Aishi –le guiño un ojo coqueto, coqueteo no correspondido por el menor que se soltó apresurado, el mayor azabache guio al menor a su otro lado interponiéndose entre ambos –y buenos días a ti también Yamada –saludo sin inmutarse de las acciones del contrario.
-no son realmente buenos –gruño mientras retomaba su camino junto al menor quien echaba una muy mala mirada a ambos gemelos casi soltando un gruñido.
-¡¿en qué demonios piensas?!¡Estaba cerca de por lo menos cursar más de un saludo con él! –gruño Gakusei a su hermano quien sonreía divertido.
-perdón~ pero es que es tan divertido ver como Yamada cela al pequeño Aishi y como este se reúsa a mis coqueteos –suspiro divertido, su gemelo sintió la fuerte tentación de golpearle pero se contuvo.
-si quieres aprovechar espera a que Taro se aleje de él imbécil –gruño retomando su camino mientras arreglaba sus lentes.
-¡wow! Que buena idea ¿Por qué nunca se me ocurrió~? –fingió sorpresa mientras caminaba junto al ex castaño.
-desagradable –fue lo único y último que dijo el de gafas para volver a guardar silencio y continuar con el recorrido al instituto.
.:OoO:.
Veía desde sus móvil las cámaras pasando una por una, estaba en su escritorio con una pequeña libreta a un lado, su mano diestra escribirá apresurada los puntos ciegos que encontraba mientras revisaba cada una de las cámaras, el imbécil de Saikou se había sobrepasado con el número de cámaras, eran demasiadas pero para su suerte también habían varios puntos ciegos.
-esto es tan estresante –gruño malhumorado dejando a un lado el lápiz mientras fritaba su cien bloqueando el móvil con carcaza roja.
-¿Por qué la cara tan larga? –pregunto Hayato acercándose al pelirrojo, temeroso de ser rechazado por su “amigo”
-¿Por qué? Deberías saber por qué Haruki –dijo viendo al oji verde.
-Ah…es por lo de Saikou –murmuro bajito mara no llamar la atención, el otro asintió sin prestarle mayor atención –Joho...¿es…verdad que has estado ayudando al asesino? –murmuro bajito con la mirada baja.
-¿no deberías estar con tu novio? –dijo desviando el tema.
-no, está ocupado con el inventario –dijo este sentándose frente al pelirrojo –pero…contéstame ¿es verdad?
-Tks, sabes bien que ofrezco mi servicio a quien de un buen precio –dijo tan bajo que apenas se escuchó un murmullo.
-p-pero…es un asesino… -comento al mismo tono que el de gafas.
-con sus motivos, como yo tengo los míos y tú los tuyos, no te hagas en santo Haruki, estuviste un buen tiempo acosando a Sosuke pidiendo su dirección y datos personales hasta que este te tomo en cuenta sorbió –gruño bajo, el oji verde desvió la mirada apenado –no tienes nada que preocuparte, créeme ni tú ni tu novio tienen algo de qué preocuparse…
-¡que estas murmurando! –dijo uno de los guardias que pasaba vigilando, el par levanto la mirada viendo al hombre uniformado.
-Nada –respondió el pelirrojo, con los ojos entrecerrados el hombre continuo su camino sin creérselo del todo –dejemos el tema zanjado, tu vive tu vida yo la mía.
-pero el problema es que son parte de mi vida –fue lo último que dijo antes de levantarse eh irse a su lugar dejando con un mal sabor de boca al pelirrojo que continuo con su trabajo de recopilar datos y puntos ciegos.
.:OoO:.
-hasta el receso –se despidió el menor entrando al salón, el peli verde le saludo desde su asiento mientras el de gafas se centraba en su móvil.
-buenos días Aishi-Kun –dijo Hayato animado viendo al azabache tomar asiento.
-Buenos días Haruki –saludo este dejando sus cosas a un lado del banco.
-se siente raro hablar y ser observados –dijo entre risas sintiendo a los guardias que pasaban verles.
-supongo, abra que acostumbrarse –comento mientras sacaba sus cosas de su bolso.
-eso creo…en fin ¿Cómo van las cosas con Yamada? –dijo alegre.
-van bien –comento sonrojado pasando un mechón de cabello tras su oreja –si todo sigue bien, estoy seguro que este viernes podre… -callo al sentir la vergüenza ganarle.
-que tierno –comento abrazando al oji negro –espero que todo esté bien~
El timbre resonó marcando el inicio a las clases de ese día. Con el ambiente denso los estudiantes atendían las tres primeras clases, los maestros quienes parecían ser los que más rápido se habían acostumbrado. Durante las clases Ayano no presto atención, estaba más concentrado en ingeniarse algo, un plan, necesitaba una distracción ¿no es como que podría hacer una bomba para llamar la atención?...¿o si podía…? Tendría que hablar con Info-Kun de eso cuando llegara a casa.
.:OoO:.
Bufo molesto al ver el quinto estudiante entrar en su oficina seguido de un guardia mientras este reclamaba que no había hecho nada ¡claro que no habían hecho nada! Con conducta sospechosa jamás se le llego a ocurrir que levantar un lápiz del suelo se volvería sospechoso ¿Quién demonios entreno a estos idiotas? Tras cinco minutos dejo ir al joven que agradeció y se fue a su salón, vaya día, apenas empezaba y ya tenía trabajo, mucho trabajo. Dejo sus lentes sobre el teclado de su notebook mientras masajeaba su sien, esto debía ser un muy mal chiste. Casi grita al escuchar un toque en su puerta y la voz de un guardia y los reclamos de un adolecente, odiaba al mocoso de Saikou.
.:OoO:.
-¿Por qué te llamaron? –pregunto Hayato a su novio quien venía de la oficina del conejero.
-Me quede más tiempo del previsto ordenando en el club –soltó un suspiro –no pensé que me demoraría tanto con la utilería –suspiro el peli cian.
El grupo de amigos se encontraba en la plaza central, Inkyu se quejaba por que le habían quitado una pinza esa mañana por ser algo “peligroso” mientras que a Sakyu le habían dado una advertencia por labial ¡un labial! Nadie estaba cómodo, era difícil estarlo, cuidando de cada movimiento para no ser “sospechoso”. A penas había gente en la plaza, era demasiado la incomodidad como para tener una charla a gusto entre amigos al aire libre, es más ahora mismo estaban llamando la atención de unos tres guardias que no apartaban las miradas de sus personas.
-¿acaso somos raro? –Soltó Hayato al aire –digo, pareciera que el asesino y los cómplices fuéramos nosotros –ante las palabras Ayano casi se atora con su propia saliva, Inkyu soltó su móvil y Sakyu le quedo con los ojos abiertos ante la sorpresa –¿Qué ocurre? Pregunto notando el ambiente que se había formado entre esos tres.
-n-no es nada Haruki, creo que exageras, somos el grupo más grande reunido en este momento es normal que nos vean así –dijo la peli morado tratando de pasar desapercibido.
-hum…puede ser, realmente si somos el grupo más grande reunidos cerca de una esquina, es algo que se podría mal interpretar fácilmente –comento Sora apoyando su mentón en el cuenco entre el cuello y hombro de su novio.
-tienes razón –rio Inkyu –es algo raro, pero es como así que aprovechemos antes que toque el timbre –murmuro echándose en el regazo de su hermana quien tranquilamente la acepto peinando los cabellos sueltos de la chica.
El ambiente, al menos entre ellos, se había calmado hasta el momento en que el timbre resonara. Todos se fueron a su salón siendo Taro el escolta de Ayano y de paso Hayato quien se había despedido de Sora antes. En el salón el oji verde se fue a su puesto notando la ausencia del pelirrojo.
-espero que no se meta en problemas –comento Hayato mientras el menor se acercaba tras despedirse de Yamada –¿Por qué crees que falte tanto a clases?
-no lo sé Haruki –suspiro pesadamente sintiendo su pecho oprimirse, sabía que su madre esperaba recibir la “buena” noticia con respecto a Kojin, además no ayudaba el hecho que Taro haya aceptado hablar a solar con Gakusei ¿Dónde hablarían?¿qué hablarían? Un chasquido frente su persona le trajo nuevamente a la realidad.
-¿estás bien Aishi? –pregunto Hayato viendo preocupado al peli negro menor.
-Oh, sí, no hay de qué preocuparse –se apresuró en responder mientras tomaba asiento seguido de Hayato mientras el maestro entraba al salón.
Las ultimas clases el menor trato de prestar un poco, siquiera una milésima de atención, pero nada, simplemente estaba demasiado desconcentrado con todo. El timbre finalizando la jornada de ese día y dando paso a las actividades extracurriculares del instituto. Con suma pereza Ayano comenzó a guardar sus cosas, Hayato se había despedido de su persona, iría directo a la alberca a esperar a Taro que terminara sea lo que sea que hablara con el cuatro ojos.
-¿Por qué la cara larga? –escucho provenir de la entrada trasera del salón, vio con el ceño fruncido al presidente sonriendo de manera arrogante.
-desagradable –murmuro mientras tomaba sus cosas y se dirigía asía la otra puerta, pero a medio camino fue detenido por el agarre del peli plata quien tomo su muñeca atrayéndolo a su persona –suéltame –gruño forcejeando con el otro.
-¿Por qué? No es muy educado dejar a alguien hablando solo Aishi –se acercó peligrosamente al rostro del más bajo con su ya típica y desagradable sonrisa egocéntrica.
-¿podrías soltarme de una vez? No tengo nada que hablar contigo, así que suéltame de una vez –gruño con el ceño notablemente fruncido.
-¿Por qué te resistes tanto? –Murmuro tomando la cintura del otro con su mano libre –tantas personas les encantaría estar en tu lugar, ser el objeto de mi atención y tú simplemente me rechazas, que cruel de tu parte Aishi~
-Quédate con ellos y déjame a mí en paz, no me interesas ¿no lo entiendes o qué? A mi tú no me gustas, no me atraes, no me interesas –dijo con la voz cargada de odio asía el plateado –Tengo suficiente con uno, no necesito a otro –murmuro por lo bajo recordando al de gafas.
-¿suficiente con uno? –Dijo mientras estiraba levemente la mano en la que sujetaba la muñeca del menor y le guiaba con la mano en la cintura del más bajo –con otro ¿te refieres a Yamada o hay alguien más? –sonrió sabiendo que la respuesta sea cual sea se podía mal interpretar.
-no es tu asunto –trato por alejarse pero le era difícil.
-hum, puede que no y puede que sí, en estos momentos mi hermano y él están hablando ¿Qué crees que estén hablando? Recuerdo que mi hermano gustaba de Yamada –rio al ver como el otro se tensaba –hum ¿eso te molesto? –no recibió respuesta más que un fuerte puñetazo en su estómago por parte de la mano zurda del menor liberándolo de su agarre.
-deja de molestar de una puta vez –dijo con los ojos filosos y carentes de brillo mientras se marchaba en dirección a la alberca rodeado de un aura siniestra.
Shinsei rio mientras sujetaba la zona afectada por el golpe, sentía una extraña emoción por aquello, le parecía divertido ver a ese lobo disfrazado de oveja ¿Qué más podría hacer?
.:OoO:.
-¿Qué querías decirme? –dijo al verse solos en el salón, el de gafas bajo la vista con un ligero rubor que pasó desapercibido.
-quería disculparme –murmuro arreglando sus anteojos –nunca quise…que las cosas terminaran así “aunque no me arrepiento de llamar puta a ese enano ¿Por qué demonios eres tan ciego?” –pensó lo último mordiendo su lengua para no decirlo.
-no veo el por qué disculparte, ahora y conmigo –dijo el azabache mayor.
-por qué no quiero arruinar nuestra amistad, por eso Taro, porque te aprecio como mi único y verdadero amigo –el oji azul levanto la vista decidido –por eso, por eso es que quiero pedirte disculpas, sé que mis palabras te molestaron y no eran mi intención…es solo…que tenía miedo que ese chico te alejara de mí, eres mi único amigo Taro… “si estaba celoso, estoy celoso Taro pero no puedo decirlo porque somos amigos…”
-Gakusei –Yamada suspiro soltando una suave carcajada –eres un necio, esta bien no puedo enojarme por mucho tiempo, al fin y al cabo somos amigos ¿no? –el corazón del oji azul dio un vuelco ante aquellas palabras aflorando en su rostro una sonrisa genuina de alegría.
-claro, amigos –estrecho su mano sintiendo el tacto de la piel del otro tibio, algo que le encantaría poder sentir mucho más que solo un simple apretón de manos.
-bien, ahora debo irme a la práctica, espero no haber dejado a Aishi esperando por mucho tiempo –comento animado haciendo que el otro sitiera todas aquellas sensaciones agradables desaparecer en un instantes remplazadas por los celos más que puros.
-si…que te…vaya bien “y que esa enano del demonio se ahogue” –gruño ante su pensamiento con el ceño fruncido y marchándose encontrándose a su gemelo subiendo las escaleras con su mano en su estómago. Taro paso de largo ignorando al oji plata.
-hola ¿y cómo te fue?¿ya son novios y podre quedarme con esa cosita? –dijo divertido recibiendo una mala mirada del oji azul.
-no, al menos puedo cruzar más que saludos con él ahora, pero esta tan idiotizado por ese enano –gruño.
-Está enamorado –rio recibiendo un golpe por parte del de gafas –¡oye! Suficiente tuve con la fierecita.
-¡No está enamorado!...¿fierecita?¿y por qué demonios estas así?
-bueno, déjame decirte que Aishi tiene una fuerza que no encaja con su pequeñito cuerpo –comento incorporándose.
-Hum, ese enano aparenta más de lo que es –gruño marchándose junto a su gemelo a la sala del concejo.
.://Continuara//:.