----Daigo-----
Eran apenas las 10pm cuando tocaron la puerta desesperadamente, de inmediatamente fui a abrir y en cuanto lo hice me fui al suelo recibiendo un abraso de Kurama
-Que pasa?!
-Daigo!!!!! Soy libre!!!!!!
-Que?!!! –se separó de mí, estaba llorando yo estaba sorprendido-es….es enserio?-asintió.
-Luka está muerto…..y Chris me ha dicho que no me buscaran más-ahora lo abrace yo aún incrédulo.
-Oh dios!! Es enserio?-de nuevo pregunte
-Si! Si lo es
-oh, eso es maravilloso Kurama-yo también comencé a llorar y a reír-no lo puedo creer!
-Aquí está mi registro!.....no me buscara nadie…..podre tener a mi hijo lejos de ese ambiente, podremos vivir como gente normal!!!!
-Y Chris?........creo que lo juzgue mal
-Se ira….regresara con ese hombre, el jefe, a su país
-Cómo puede estar con alguien tan horrible
-Quien sabe, pero a su lado se veía muy feliz, además, cada quien encuentra felicidad en lugares distintos, quien sabe que está bien o que está mal?, quienes somos para juzgarlos?
-Tienes razón….ahora entremos si?-rio un poco y entramos-y ahora que eres libre que piensas hacer?....volverás conmigo a la escuela.
-No…..tengo que encontrar un trabajo de inmediato
-Podemos buscar uno en la tarde ambos…. Asi no te cargaras todo de nuevo
-Ya lo resolveremos ok?-sonrió
-además….que pasara con Ryo?.....yo lo he estado echando porque estaba molesto con el….pero ambos sabemos que él no es un mal tipo y te quiere
-Daigo, hubo un tiempo en el que a mí me gustaba mucho Ryo, pero ya no, además lo aprecio y no voy a cargarle un hijo que no es de él, ni una vida junto a alguien como yo, y sumado a todo eso, yo aún amo a Derek aunque él ya está muerto-agache la mirada, supongo que tenía razón, no se iba a forzar a estar con alguien, aun así yo no quería verlo solo, quería que encontrara a alguien.
------Kurama----
Aun se me hacía un imposible el no tener que regresar a ese lugar, estaba feliz, pero también era extraño, mis proxenetas estaban muertos y uno de ellos era el hombre que amaba, yo tendría un hijo, y fuese como fuese de ahí comíamos, me asustaba el que iba a pasar con nosotros, pero bueno seguramente era mejor que venderle mi cuerpo a cualquiera, eso me hacía feliz, inmensamente feliz…….creo que después de todo si iba a poder volver a sonreír….oh Derek si hubiéramos esperado un poco más…
----Daigo----
Al día siguiente como era sábado me quede todo el día en casa, estaba muy feliz, y a pesar de que Kurama seguía con sus malestares matutinos también se le veía bastante alegre, por la tarde Mikaru vino a verme, le había contado la noche anterior lo que había pasado por mensajes, supongo que el también estaba feliz.
Estábamos platicando en la sala cuando Kurama salió de la habitacion tomando a Sou de la mano y sonriendo.
-Buenas!
-Hola Kurama-Mikaru sonrió-oye podríamos hablar
-No!, voy de salida-le guiño un ojo, más tarde si quieres, pero ahora les dejare la casa para ustedes solos-nos miró con picardía, yo me sonroje, era un tonto-bueno bye-sin decir más se fue, le desvié la mirada a Mikaru.
-Lo siento, el es un tonto-me beso y me acerco a el.
-Yo creo que es un buen hermano-le correspondí el beso, estaba muy avergonzado pero pues para que me hacia menso, yo también quería y ambos habíamos captado a la perfección por qué la salida de Kurama, continuamos besándonos largo rato, empezó acariciarme un poco y a sujetarme de la cintura, lo aleje, estaba empezando a calentarme, me temblaban las manos-que pasa
-lo siento…..estoy nervioso-intente sonreír, el rio un poco y volvió a acercárseme, acaricio mi cara y me dio un beso en los labios.
-Daigo, yo no te voy a forzar a nada-me beso la mejilla-si tu no quieres hacerlo solo dilo-lo mire a los ojos por fin, estaba súper apenado.
-No….si quiero-lo bese-….es solo… es solo que tengo un poco de miedo-me beso y rio un poco de nuevo, luego me beso otra vez
-Seré cuidadoso ok?-asentí cerrando los ojos, me levanto y me llevo a la habitacion, luego me puso sobre la cama y se sacó la camisa, se puso sobre mí y me quito la mía, el solo sentir el rose de sus manos contra mi piel me hiso gemir apenándome aún mas aunque creo que ya era imposible, de nuevo comenzó a besarme, me abrace a su cuello, me sentía demasiado caliente; puso su mano sobre mi entrepierna y apretó un poco, se me escapo otro gemido, ya estaba duro.
-Ah!....Mikaru…..-me beso el cuello y con una de sus manos desabrocho mi pantalón y lo bajo un poco, sonrió.
-Ya estas mojado-me acaricio, moví la cadera inconscientemente en busca de más contacto
-Ah….cállate-le desvié la mirada y en ese momento termino de desnudarme, me cubrí con las manos, moría de vergüenza, pero también estaba muy excitado, jamás había estado así con alguien, ni siquiera algo similar, nunca había pasado de los besos, ahora estaba tan nervioso, sin embargo quería más-no te cubras, quiero verte-aparto mis manos y me observo unos momentos para luego volverse a lanzar a mis labios-eres hermoso Dai-comenzó a masturbarme y no pude contener mi voz, cada vez gemía más fuerte, pero no podía quedarme atrás, el también necesitaba atención, puse mis manos en sus pantalones, que por cierto me temblaban, lo desabroche y yo también comencé a tocarlo tímidamente.
-Mmmg- gimió en mi oreja levemente, el también ya estaba duro, sonreí un poco y seguí hasta que el mismo fue quien se deshizo del resto de su ropa y por dios, cuando lo vi por completo desnudo creí llegar a la cumbre de mi calentura, aunque al recordar las palabras de Kurama, el hecho de que dolía, me asustaba un poco, sin embargo estaba jodidamente excitado, continuo masturbándome y yo a él, mientras besaba mi cuello y mi pecho luego puso tres de sus dedos en mi boca, comencé a lamerlos, pronto la vergüenza se me paso, ahora estaba concentrado sintiendo su cuerpo contra el mío, su lengua en mis clavículas y nuestras pieles calientes rosándose, no creí que se sintiera tan increíble, ah, pero luego me tense demasiado al sentir uno de sus dedos rodeando mi ano, instintivamente hice hacia atrás la cadera al sentirlo.
-Relájate-susurro en mi oído, cerré los ojos e intente relajarme, lo sentí entrar y volví a tensarme.
-Aaaahhhh!!!!-grite, dolía, comenzó a moverlo lentamente en mi interior, y luego a meterlo y a sacarlo, era tan extraño e incómodo, me acostumbre en poco rato, introdujo el segundo y nuevamente gemí un poco de dolor, me beso.
-Necesito que te relajes Dai, estas muy tenso…..
-Mmmmgh…..si…..-continuo moviendo sus dedos mientras nos besábamos y posteriormente introdujo el tercero, aun se sentía extraño y algo doloroso, pero también estaba empezando a sentirme muy bien-ahg…aaaaah!!! Mikaru! mmmmgh-yo mismo había empezado a mover la cadera en busca de más contacto, luego de un ratito saco sus dedos de mi, me queje un poco al sentirme vacío, quería más, lo mire a los ojos casi suplicante, me tomo de las piernas y me jalo hacia el, esta vez mi reacción fue de susto.
-Estás listo-afirmo, luego me beso, volví a tensarme un poco y me sujete de sus brazos mientras él se posicionaba.
-aaaah….Mikaru….espera….-me beso
-No puedo…..estoy en mi limite-se posiciono entre mis piernas y comenzó a penetrarme.
-Ahhhh!!!!-grite con fuerza al sentir entrar la punta, era muy diferente a tener solo sus dedos, me mordí el dorso de la mano
-Shhhh…tranquilo-me agarro de los brazos para que lo abrazara, continúo introduciéndose dentro de mi, grite otra vez y me aferre a su espalda.
-Mikaru!!!! Ahhhhh!!!! Sácalo, duele!!!!!!!, me duele mucho-unas lágrimas se derramaron de mis ojos-me beso
-Aguanta un poco amor…..pronto pasar-comenzó a moverse despacio, yo seguía gimiendo escandalosamente aferrándome a su espalda mientras nos besábamos para distraerme un poco del dolor, luego de poco esos gemidos de dolor fueron reemplazados por otros de placer, comenzó a moverse con más rapidez y yo junto con él, aun dolia, pero tambien era jodidamente increíble, y más increíble fue cuando toco un punto dentro de mi que me hiso delirar durante varios segundos.
-Aaaa!!!!! Mikaru!!!!! Ahí!!!!!!-Grite-de nuevo!!!! Ahí!!!!! aaaaahhhH!!!!-eche la cabeza hacia atrás con los ojos cerrados, volví a sentir esa increíble sensación una vez más y luego me corrí, no podía más, tenía la respiración agitada, sentía que la vista se me nublaba, el continuo moviéndose hasta correrse lo cual no tardo mucho luego de que yo lo hiciera, me beso de nuevo y luego me abrazo acostándose junto a mi.
-Te amo Daigo-me abrazo
-yo….yo también te amo-sonreí y lo abrace aun con la respiración agitada, me recargue en su pecho y oí su corazón latir, parecía como si estuviéramos sincronizados, sonreí ante esto, él era increible….me hacía sentir increíble