Dos horas había pasado desde que el carruaje despego. Los hermanos Lycan se encontraban sumisos en sus pensamientos.
Shizuo se debatía mentalmente en lo que haría de ahora en adelante, al parecer su juego se le había salido de sus manos. Cuando se acostó con izaya y dijo que le gustaba su plan era burlarse de él a la mañana siguiente pero simplemente no pudo, verlo dormir entre sus brazos había sido lo mejor que le pudo pasar, tocar su piel, probar sus labios, sentirse dentro del mientras lo miraba delirar de placer, oler ese narcótico olor que lo enloquecía. Todo del lo había convertido en adicto a su tacto y presencia.
Pero… ¿eso significaba que lo amaba? Tal vez si, le dolía a su orgullo aceptarlo, pero sabía que para poder iniciar una relación con el moreno debía terminar primero con varona. Antes de formar una familia con el doncel, quien sabe, quizás hasta llegaran a tener hijos y ser feliz… si, no era un mal plan para un futuro no tan lejano.
Por otro lado levi repetía en su memoria un y otra vez la noche pasada, en su larga vida había tenido incontables parejas sexuales pero ninguna lo había enloquecido al punto que hacerlo en su forma animal. Debió admitir que le fascino, deseaba con gran necesidad terminar con esa estúpida reunión y volver a donde el menor para hacerlo una y otra vez hasta que este no pudiera ni siquiera sentarse. Deseaba monopolizarlo y que solo él pudiera verlo.
Pero… ¿Qué seguiría? Un te amo seamos felices, no iba con él. Admitía que eren le gustaba… vaya que le gustaba pero el mismo sabía que su atracción iba a mas allá que el simple gusto carnal. Quién sabe, quizás eren era su pareja predestinada. Algo le decía que así era. Por el momento se dejaría envolver por ese cuerpo, y cuando llegara el momento de separarse vería si era capaz de dejarlo marchar sino lo reprendía a como diera lugar.
Yuri en cambio a diferencias de sus hermanos él tenía muy claro lo que haría, amaba a wólfram y seguiría fielmente ese sentimiento. El rubio le había perdonado y se entrego a él de la manera más pura que nunca antes existió. Ahora no podía siquiera vivir sin esos labios, era la decisión correcta y él lo sabía.
Cuando descubrió lo que le había hecho a wólfram, admitía que le pidió esa oportunidad como una respuesta a reparar su error, al principio se podría decir que la culpa era demasiado fuerte y eso le llevo aceptar una relación con el rubio pero ahora… no podía negar que todo su cuerpo vibraba al recordar esa noche que lo hizo sentir como ninguna mujer lo había hecho sentir antes.
Su placer fue demasiado, pero aun mas allá de lo carnal, ver a wólfram tan jodidamente hermoso, entregado a él, con miedo pero amor en su mirada. Le dio las respuestas que siempre busco. En el momento que sus cuerpos se fundieron por segunda vez lo sintió. Sintió lo que era el verdadero amor, el verdadero placer y los verdaderos celos de pensar que alguien se lo arrebatara en un futuro. Eso le llevo a tomar la decisión que cambiaría su vida para siempre.
- chicos – les llamo seriamente, ambos hermanos voltearon a verlo - hare el boto de amor eterno - a Shizuo y levi casi se les cae la quijada.
-¡¿Qué estás diciendo?! – el azabache pareció demasiado sorprendido con la noticia.
- Yuri no comentas una estupidez, una vez que la hagas tu vida se encadenara a la de esa persona eternamente incluso en tus reencarnaciones- le advirtió el rubio sabiendo que el menor era consciente de esto.
- precisamente por eso lo hare – Yuri sonrió como solo el sabia – amo a wólfram y quiero compensarle todo el daño que le eh hecho – expuso bajando su mirada apenada – el odio me hizo lastimarlo de una forma que jamás me perdonare, pero dedicare mi eternidad hacerlo feliz- concluyo convencido de sus palabras. Ignorante del futuro que les esperaba.
- .. si es tu decisión no me opondré pero piénsalo muy bien – el menor asintió a la petición de levi.
- además, aun queda algo que resolver – Yuri pareció confundido por las palabras de shizuo - … flynn ¿Qué harás con ella?- el moreno se sorprendió por la pregunta. Había estado tan encismado en su ser que olvido a su novia…
Por un lado no sabía qué hacer, él quería mucho a flynn era su primer amor o por lo menos eso creía él. Más por otro lado lo que sentía por wólfram era demasiado fuerte.
-… terminare con ella. Es injusto que este con ella cuando no la puedo amar como se lo merece, aclarare esto antes de regresar – sentencio convencido de sus palabras.
Pobres chicos, no sabían que en este viaje se sentenciaría su destino y el de sus parejas.
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Una mujer corría por los pasillos, su peinado se había deshecho por la carrera que hizo cuando recibió ese aviso, su respiración se agitaba y su mano sostenía el vestido para apresurar su paso sin intervención de este.
-¡Grisha! – llamo la mujer fuertemente al entrar en el despacho - ¡han traído esto!- la vos de la mujer estaba desesperada.
- Carla tranquilízate mujer – el hombre abrazo a su amada esposa quien temblaba por la impresión – dame por favor – el sujeto tomo la nota que traía su mujer en manos y la leyó en voz alta:
“para mis estimados y apreciados amigos, ¿Cómo les va la vida? Espero que haya sido muy placentera porque a partir de hoy su vida se convertirá en un infierno, ¿creyeron que nos detendrían? Pobres ingenuos. Volvimos por lo que más aman y esta vez no descansaremos hasta matar a sus bastardos como ustedes lo hicieron con nuestros padres…. Atte: zeffilia”
- ¡esos malditos!- el hombre arrugo la nota, no permitiría que tocaran a sus hijos.
- ¡ellos lo saben! Mis hijos - la mujer cayó en el suelo presa del llanto – ¿hasta cuándo nos dejaran en paz?
- Carla sabíamos que todo esto pasaría, no llores – el castaño abrazo a su esposa dándole confianza – mandare un aviso a los Patterson pidiendo que los vigilen y si hay peligro los protejan. Nada les pasara amor, no están solos
La mujer hundió su cabeza en el pecho de su marido, necesitaba descargar todo su dolor en los brazos de su amado. Carla lo sabía, como madre ella sabía que sus hijos corrían un peligro del cual no podía protegerlos pero aun así quiso aferrarse a la esperanza de que todo saldría bien… pobre Carla a veces las cosas no salen bien por más que las deseemos
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- chicos, ya está el almuerzo listo – anuncio Martin irrumpiendo en la sala donde izaya y wólfram jugaban ajedrez mientras eren comía unas fresas que clara les había traído.
-¡al fin me muero de hambre!- refunfuño wólfram dejando de lado el juego.
Los cuatro se dirigieron al comedor donde les sirvieron cordero a la plancha con puré de papa.
-… agh no quiero esto - izaya hizo una muesca de asco, mientras alejaba el plato.
- pero iza-nii es tu plato favorito – alego eren extrañado. Su hermano siempre amaba comer ese platillo.
- pues no quiero – renegó con un puchero – clara, tráeme por favor un pudin, unas fresas con chocolate y un batido – solicito.
-e-enseguida- la joven salió de la habitación algo extrañada.
-¿te vas a comer todo eso? Vas a engordar oni-chan – se burlo eren mientras comía- ¿y tu wólfram por qué no dices nada?- el rubio estaba muy concentrado comiendo como si no hubiera mañana.
- jaja creo que no soy el único que engordara- wólfram miro a izaya de manera fúnebre
- cállate y déjame comer
-niños dejen de pelear – Martin le entrego a izaya lo que solicito – apúrense a comer recuerden que necesitan trabajar, no pueden defraudar a sus maridos-
Martin sabia que algo les pasaba a sus niños pero quizás solo era su imaginación.
- ellos inicia- eren no acabo de hablar cuando se encontró devolviendo toda la comida en el suelo.
-¡eren!- wólfram e izaya corrieron asistirlo el castaño no dejaba de devolver la comida.
- q-que asco – con la manga se limpio la boca cuando acabo de vomitar
- lidia limpien esto por favor – solicito Martin ayudando a levantarse al menor- creo que será mejor si descansas
- no, estoy bien. Ya paso.
-¿estás seguro?- cuestiono el moreno no muy convencido.
-sí, si vamos a trabajar.- hasta el hambre se les había quitado por lo que se dirigieron al despacho atender los asuntos del reino. Seguidos por Martin quien los vigilaría muy de cerca.
- ellos están… no, seguro estoy imaginando cosas – murmuro lidia
-¿Qué imaginas lidia?
- por un momento pensé que estaban preñados. Pero creo que son ideas mías – negó la joven rubia siguiendo su labor
-… ¿preñados?.. Quien sabe
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En una parte de las tierras Lycan la noticia de la visita de los primogénitos del clan ya se había hecho pública llegando así al oído de las hermanas.
- ¡Yuri vendrá! Tengo que ponerme hermosa, bueno más de lo que soy- flynn no cavia de la felicidad.
-.. No se te hace extraño esto – intervino Isabel seria.
-¿Por qué lo dices? Es la fiesta del renacimiento es normal que vengan- alego la peli celeste sin dejar de verse en el espejo.
- ¡precisamente por eso! No nos avisaron de su visita para vernos… esto no me gusta- si algo tenia Isabel era que conocía muy bien a los hermanos Lycan y sabia que algo estaba mal.
- estas exagerando, de seguro no quisieron arriesgarse con esos malditos a sus lados – alego la menor- no sabes cuánto los odio, si pudiera los mataría con mis propias manos- murmuro mas para ella misma que para su hermana.
- yo también los detesto pero algo no me convence… ¡¿Dónde está varona cuando la necesito?!- justamente como si la hubiera invocado la joven rubia entro acompañada de un chico con capucha- ¿A dónde fuiste y quien es él?
- mi ubicación es irrelevante, pero él es uno de los empleados de la mansión Lycan. Y nos servirá de mucha ayuda- la joven rubia sonrió con soberbia.
- ¿en que nos ayudara un simple empleado?- cuestiono flynn
- hoy en la noche llegan los jóvenes amos. Mi misión será escuchar todo lo que hablen y comunicárselos- informo el joven castaño.
- entiendo… está bien. Ve y no dudes de decirnos hasta el mínimo detalle – ordeno Isabel, el joven hizo una reverencia y salió de la alcoba con una sonrisa en sus labios. Esto sería divertido.
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De regreso en las tierras blaize, más específicamente en la mansión de los Patterson. Estos se encontraban desayudando en compañía de sus invitados conrad weller y sus primos.
- mi señor, han traído este telegrama urgente de las tierras Ross- el mayordomo le entrego la nota a shinou quien la leyó rápidamente, para acto seguido arrugarla entre sus manos con total enojo.
-¡esos malditos!- el rubio golpeo la mesa con furia asustando a sus hermanos
-¿Qué pasa shinou? ¿Qué dice esa nota?- cuestiono mikado preocupado por la actitud de su hermano.
-.. Siguen vivos… el clan zeffilia aun vive- resumió ante la mirada aterrada de sus hermanos y la desconcertada de los licántropos
- ¡es mentira!, ellos murieron junto a nuestros padres y aquellos científicos ¡es mentira!- armin cayó de rodillas llorando, el solo recordar lo que vivieron lo ponía mal.
Mikado se abrazo a su hermano menor en busca de consolarlo. Para todos era algo muy difícil de recordar.
-ellos murieron pero sus herederos siguen vivos. Me lo acaban de informar… y vienen a terminar lo que iniciaron sus padres – explico brevemente con una mirada seria.
- debemos avisarles – shinou negó a la petición de armin - ¡¿Por qué?! Si les decimos a los Lycan recordaran y-
- y el orden se romperá y con ello la maldición se cumplirá– le interrumpió con severidad – no podemos ser imprudentes.
-¿Qué está pasando? ¿Por quienes vienen?- intervino Bryan ya harto de no saber nada.
-…. Es una larga historia pero necesito su ayuda. La vida de wólfram, izaya y eren corre peligro... ¿Estarán dispuestos ayudarnos?- cuestiono el regente de manera seria.
- ¡por supuesto! – accedió conrad no dispuesto a que algo le pasara a wólfram o alguno de sus hermanos.
-… vamos a la sala, esta será una larga platica – ordeno shinou saliendo del comedor. Siendo seguidos por los chicos.
-“esta vez no se saldrán con la suya… zeffilia” pensó el rubio con determinación.
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Después de un día de viaje al fin habían llegado a las tierras que le vieron nacer. La noche reinaba el lugar junto al silencio que provocaba. El carruaje se detuvo delante de la mansión donde antes Vivian.
- que nostalgia- murmuro Yuri viendo sus tierras.
- ha pasado tiempo, desde la última vez que vinimos- comento Shizuo
- como sea, solo apurémonos para volver – levi no tenía planes de quedarse más tiempo del necesario.
- mis señores, estábamos esperando su llegada- intervino un joven empleado saliendo de la mansión – sus padres los esperan en el despacho, por favor acompáñenme – mientras ellos ingresaban dos empleados se encargaron de bajar su equipaje y llevarlos a sus antiguas habitaciones.
Al llegar al despacho de su padre el joven empleado abrió la puerta ingresando junto a ellos.
- ¡hijos! Cuanto tiempo – kuchel se levanto de su asiento depositando un beso en la frente de cada uno.
- madre, padre – saludaron con respeto haciendo una leve inclinación.
-¿Qué nosotros estamos pintados?- bromeo shinra sentado junto a sus hermanas en un sillón
-¿Qué demonios hacen aquí?- cuestiono levi frunciendo el ceño.
- ¡enanin!- hanji se aventó sobre el azabache quien le dio un golpe en la cabeza para que lo soltara
- ¡suéltame loca! Tsk, precisamente por esto no quería volver
-ohhh tu siempre tan cariñoso jaja – la castaña volvió a su lugar sonriendo como si nada.
- por ahí nos enteramos que se casaron, ¡ya era hora!-comento shinra fingiendo demencia- ¿y cómo es tu “esposita”?
- tsk es una pulga molesta – “pero es mí pulga” pensó sonriendo levemente
-vaya, se ve que lo quieres mucho – comento anissina sin sarcasmo al ver la sonrisa que puso el rubio.
- no se dé que hablas – negó desviando la mirada con enojo fingido.
- me alegra que se estén llevando mejor- intervino el padre de los jóvenes- tenemos que ponernos desacuerdo para el evento de mañana tomen asiento.
Durante gran parte de la noche platicaron sobre muchas cosas entre ellas la fiesta del día siguiente, los invitados, sus parejas y con ese tema Yuri intervino.
- padre madre. Hay algo que debo informarles- Yuri hablo tan seriamente que por un momento preocupo a sus padres.
-dinos hijo ¿de qué se trata?- cuestiono kuchel amablemente
-… hare el voto de amor eterno con wólfram, ya me decidí. Lo amo y quiero pasar el resto de mi vida con el – sentencio con una sonrisa en su rostro.
El silencio reino por un breve momento o eso fue hasta que el grito de su madre irrumpió en la estancia.
-kyaaaa ¡viste Kenny! Lo sabía. El volvería amarlo ¡era cosa del destino! Ahora sol-no acabo de hablar cuando una mano le tapo la boca. Dándose cuenta en el acto de que hablo de mas.
-¿Cómo que volver amarlo?- intervino Yuri entre sorprendido por la reacción de su madre y confundido por lo dicho.
-no le hagas caso hijo, es solo la alegría que no midió sus palabras, lo que quiso decir es que lo amarías- explico Kenny tratando de convencer a sus hijos los cuales no estaban muy convencidos
-per..
- Yuri... ¿qué harás con flynn?- intervino anissina a favor de los lideres quienes se lo agradecieron internamente
-eso… - el menor bajo la mirada – pienso hablar con ella mañana al termino de la fiesta… no puedo estar a su lado – sentencio el menor decidido.
- ¿y ustedes?- shinra miro a levi y Shizuo sorprenderse- vamos chicos, para que ustedes apoyen a Yuri significa que están pasando por lo mismo pero son mas necios y no quieren ceder.
- “este idiota” Shizuo frunció el ceño, sabía que su amigo lo conocía perfectamente pero no creyó que tanto - … también terminare mi relación con varona. Quiero darme una oportunidad con izaya – un débil sonrojo apareció en su rostro más por decir cosas vergonzosas que por otra cosa.
Todos voltearon a ver a levi como obligándolo hablar.
- tsk, malditos entrometidos. Solo diré que eren coge bien - eso significa que le gustaba a oídos de los presentes.
- me alegra que sentaran cabeza antes de que fuera tarde- kuchel miro a sus hijos con una sonrisa – dentro de poco sabrán muchas cosas que puede cambien lo que piensan pero estoy segura que sus sentimientos no cambiaran
-¿a qué te refieres madre? ¿Qué tenemos que saber?- cuestión Yuri. Sus padres estaban extraños. Y eso no le agradaba.
- todo a su tiempo Yuri… todo a su tiempo. Por el momento vayan a descansar debió ser un viaje largo- el líder miro a su mayordomo- Cristóbal, llévalos a sus habitaciones y manda a pedirles una merienda
- por supuesto – el castaño si dirigió a sus jóvenes amos- ¿me acompaña?
Los herederos del clan Lycan se despidieron y siguieron al empleado a sus respectivos cuartos.
- ah, siento un alivio increíble – la joven pelinegra se dejo caer en el sillón
- inesperadamente su plan salió bien y sus hijo se enamoraron de los Ross ¿Qué sigue?- cuestiono shinra una vez que salieron sus amigos.
- en una semana se cumple el plazo y podremos decirle la verdad de una vez por todas y con ello recodaran lo que olvidaron- explico Kenny – hay que estar muy al pendiente.
- bueno. Por el momento es todo lo que podemos hacer…. Chicos ¿irán?- le cuestiono kuchel a los científicos quienes asintieron – entonces les dejo el resto en sus manos. El futuro de mis hijos y sobrinos se decidirán de ahora en adelante.
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Por los pasillos del castillo Yuri y sus hermanos eran conducidos a sus antiguas habitaciones para que descansaran de tan largo viaje.
- aquí está bien Cristóbal, necesito hablar con mis hermanos – solicito Yuri delante de su propia habitación- puedes irte a descansar- el castaño asintió y se retiro doblando el pasillo.
- pasen – Yuri dejo pasar a sus hermanos.
- sucede algo Yuri, te veo nervioso – observo Shizuo. Sin entender por qué esa conducta.
- hay algo que no le eh dicho a nadie pero necesito sacarlo o me volveré loco – los tres tomaron asiento en la cama del moreno.
-¿y? ¿De qué trata?- apuro levi
-recuerdan la fiesta de bienvenida en el pueblo, aquella donde tome demasiado – ambos asintieron- hice algo horrible… sin nombre.
- vamos hermano ¿Qué te convertiste en lobo y mataste a alguien?- bromeo Shizuo mas al ver como este apretó las sabanas entre sus puños supo que era algo serio para el menor.
-… yo – por un momento dudo -…. viole a wólfram – resumió mirando la incredulidad en los rostros ajenos.
- mientes… Yuri tu no harías algo así.
-¡pero lo hice! Shizuo… lo hice, y él nunca me reprocho algo, el lo callo. Dispuesto a cargar con esa pesadilla sin nadie en quien apoyarse- Yuri golpeo su cabeza contra la pared en un acto de desesperación- fui un idiota… fuimos.
- ¿eh?
- no se han dado cuenta- el moreno los miro a sus hermanos- desde que los conocimos no hicimos más que humillarlos, despreciarlos y ellos nunca nos reclamaron, solo lo soportaron todo.
Tanto Shizuo como levi no pudieron decir nada, era verdad.
- tengo miedo, miedo de que wólfram se entere que planeábamos utilizarlos para tirarlos luego del año que se nos dios. Miedo de que nunca me perdone por haberlo engañado en nuestra noche de bodas con flynn… yo – el menor tenía sus ojos acuosos.
- tranquilo Yuri, el no tiene por que enterarse. ¿Crees que no tengo el peso encima de que le mentí a izaya? que le dije que lo amaba para llevármelo a la cama. Ahora sé lo que siento pero, si él se enterara no sé como reaccionaria.- menciono el rubio pasando su mano por su melena en señal de desesperación.
No lo diría en voz alta pero a el también le aterraba la idea de perder a izaya, ahora que se había percatado de lo que el menor despertaba en él, no podía dejarlo ir. No lo haría nunca. Antes lo ataba a una cama y lo aislaba del mundo.
- lamentándonos no lograremos nada. Yo también cometí errores, no solo me acosté con Isabel en la noche de bodas sino también en la fiesta con aquella tipa. Pero como Shizuo dijo es algo que no tiene por qué saber.
- pero levi… no puedo con la culpa- Yuri no podía vivir engañando a wólfram, era demasiado para él.
- pues tú eliges es eso. O arriesgarte a que te deje y ahí si no podrás vivir más. – reto levi ya cansado del tema.
El moreno asintió, podía vivir con la culpa pero no sin wólfram. Sin el no.
*
*
*
Fuera de la habitación un joven sonreía con malicia. Había conseguido más de lo que necesitaba, solo bastaba ver como estallaría la bomba.
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La noche había caído en las tierras blaize, después de terminar el trabajo y cenar por órdenes de Martin, los jóvenes donceles se marcharon a sus respectivos cuartos. Hoy sería la primera noche que dormirían sin compañía en dos meses y medio.
Después de un merecido baño wólfram se acostó a dormir con su respectiva bata de siempre. Mas por más que trataba no podía concebir el sueño era como si algo le hacía falta.
Una idea paso por su cabeza y con un hermoso sonrojo se coloco del lado donde Yuri solía dormir, acto seguido tomo la almohada del pelinegro y aspiro su aroma mientras la abrazaba.
- huele a él – susurro hundiendo su cabeza en el mullido objeto. El aroma del mayor inevitablemente le hizo recordar esa noche donde ambos declararon sus sentimientos y se entregaron al placer.
El rubio llevo sus dedos a sus labios delineándolos, recordando los contrarios y su dulce tacto. Ese beso que lo llevo al cielo en pocos segundos. Sus manos se deslizaron acariciando su cuello, ese donde aun yacían marcas de su fogosa entrega.
Un jadeo salió de su boca al imaginar a su Yuri junto a él tocándolo de esa manera, sus manos viajaron a su hombría acariciándola tímidamente, deseando que fuera su esposo quien lo hiciera.
Recordando su palabras y jadeos sobre él. Cuando lo tomo con firmeza y lo hizo conocer el paraíso. Pronto se vio envuelto en una masturbación apresurada. Su mano apretaba su duro falo subiéndolo y bajándolo pero eso no lo satisfacía por completo.
Con pena alzo un poco más su camisón, abriendo sus piernas lo más que pudo sin detener su masturbación llevo sus dedos a la boca auto-lubricándolos. Imaginando que era el pene de Yuri el que estaba lamiendo.
Una lujuria nunca antes experimentada por el despertó en ese instante. Necesitaba sentirse lleno. Por lo que saco sus dedos de la zona bocal llevándolos a su entrada.
- mgh yuri – gimió al introducir la primera falange, se sentía bien. Por lo que introdujo en segundo seguido del tercero iniciando unas penetraciones fuertes y lo mas profundas que los dedos le permitieran.
Las embestidas no tocaban ese punto que Yuri toco, pero al pensar en eso como la hombría del moreno, su placer crecía al igual que la velocidad de estas.
Su otra mano abandono su masturbación para pellizcar sus propios pezones. Era demasiado sentía que en cualquier momento se correría. Y así fue. En un sonoro gemido libero su esencia.
- ah… ah… Yuri, vuelve rápido – musito cansado por lo resiente. Mas no 100% satisfecho necesitaba a su Yuri para ser uno en cuerpo y alma.
******************
*día siguiente*
En una de las habitaciones de la casa Vernet una acalorada discusión se llevaba a cabo entre un informante y sus sobornadoras.
-¡eso no puede ser verdad!- grito flynn enojada ante lo que Cristóbal les había dicho.
- yo mismo lo escuche señorita, el joven Yuri dijo que planeaba hacer el boto de amor eterno con su actual esposo y sus hermanos también planean iniciar una relación formal- informo el joven castaño.
- ¡varona! No podemos permitir que nos dejen, sin levi prefiero morirme –amenazo la pelirroja, desesperada.
- guarden la calma,¿ escuchaste a en qué momento circunstancial planean terminar con nosotras? – cuestiono varona con una idea en mente.
- al termino de la fiesta – respondió sin entender que mas daba la hora.
- perfecto – la joven sonrió victoriosa, se levanto y camino hasta su closet – planifique que esta situación podía llegar a ocurrir, así que tome mis precauciones- del mueble saco una botella de vino.
- ¿vino? Que plenas hacer con eso – interrogo flynn un poco más calmada si varona tenía un plan aun quedaban esperanzas.
- luego les explicare bien, pero confíen en mi. Nadie nos arrebataran lo que tanto luchamos por obtener – sentencio varona- sírveles esto poco antes de que termine la fiesta. No falles – le ordeno entregándole el paquete.
- si esos son sus deseos – el joven tomo la botella de contenido rojizo y salió sin que nadie lo viera.
- ¿Qué es eso hermana? – cuestiono la peli celeste.
- es nuestro pase al éxito. Con eso nos aseguraremos de atarlos de por vida – los ojos de varona no tenían ninguna pisca de culpabilidad por lo que estaba por hacer, sino que deseaba que pronto anocheciera
-¿y si tu plan falla?- cuestiono Isabel no muy convencida.
-en ese caso – la sonrisa de la rubia se ancho – solo tendremos que matarlos.
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En las tierras blaize, mas especifico la casa de los Patterson tres jóvenes de raza licántropo se preparaban para llevar a cabo su encomienda.
- ¿tienen todo listo?- cuestiono shinou agradecido por que aceptaran ayudarlos.
- si, en caso de que algo ocurra emitiremos un aullido de emergencia – aviso conrad cargando una bolsa con un cambio de ropa y provisiones.
- se que no tienen obligación alguna que los vincule hacer esto pero… gracias – dijo el rubio con una sonrisa de agradecimiento.
- ellos también son nuestros amigos, si lo único que podemos hacer es vigilar de cerca su territorio. No dudes que los protegeremos – menciono Bryan dispuesto a cumplir su palabra.
- tengan cuidado. En la noche mandare otros guardias para que vengan a descansar – aviso el regente.
- no es necesario, entre nosotros haremos turnos ¡todo saldrá bien!- alego keyan sonriente.
-… bueno es hora de irnos. Pasaremos la tarde con ellos y después nos alojaremos en el bosque que rodea la propiedad – informo conrad haciéndoles una señal para marcharse.
- suerte
Los tres jóvenes tomaron cada uno, un caballo y cabalgaron rumbo a la mansión blaize. Sabían muy bien su misión en este juego y la llevarían a cabo a la perfección.
- ¿crees que todo saldrá bien?- le cuestiono keyan a su hermano y primo.
-… tiene que salir bien. De eso nos encargaremos nosotros – le respondió Bryan confiando en sus palabras.
- bueno, esto será mientras llegan sus maridos. Si lo que shinou dijo es cierto, dentro de una semana se rompe el plazo. Así que los del clan zeffilia no se quedaran con los brazos cruzados.
-¿crees que intenten atacarlos ahora que están solos? Conrad- le cuestiono el peli verde preocupado por los involucrados.
- es lo más probable. Esto puede que se ponga peligroso- advirtió el castaño a sus primos.
- eso ya lo sabíamos pero – el pelirrojo pareció pensar algo antes de decirlo- keyan - le llamo – prométeme que si te digo que huyas lo harás – Bryan no soportaría que por esto, algo le pasara a su hermano.
- ¡estás loco! No te dejare nunca y menos si hay peligro – negó el peli verde claramente alterado- ¿es que no me crees capaz como a conrad?
- ¡entiéndelo! ¡Es porque no soportaría perderte idiota!- grito el mayor sin medir sus palabras.
- B-Bryan – keyan inevitablemente se sonrojo por las palabras de su hermano- … no huiré… pero estaré bien- reafirmo desviando la mirada.
-¡pero..!
- Bryan, entiéndelo. Tú tampoco lo dejarías – intervino conrad tratando de calmarlos. Sabía que ambos estaban preocupados pero aun así tenían una deuda con los Patterson y ahora era hora de pagarla- ya llegamos – advirtió antes de que el oji rojo renegara.
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En el salón de la mansión blaize los jóvenes Ross jugaban naipes para distraerse, apenas era medio día y ya habían acabado los deberes, ahora mientras ellos jugaban Martin les preparaba una merienda ligera dado que no hace mucho habían desayunado.
-¡ya me aburrí!- dijo wólfram tirando sus cartas al aire mientras se desparramaba en el sillón.
- ¡yo también!- eren se sentó al lado de su hermano.
- bueno chicos. ¿Qué quieren hacer?- le cuestiono izaya, la verdad el tampoco tenía muchas ganas de jugar.
- ¿y si vamos al pueblo?- propuso el castaño.
-¡ah no! está haciendo mucho calor – negó wólfram con un puchero.
- ¿entonces qué propones?- le reto eren sacándole la lengua.
- niños dejen de pelearse- intervino Martin con una bandeja de postres - ¿están seguros de comer todo esto?
-¡sii!- afirmaron cada uno con la cuchara de pastel a medio camino.
- creo que será mejor hacerles un chequeo me preocupa- antes de poder terminar el timbre de la mansión sonó- iré a ver quién es – aviso antes de salir de la habitación.
El hombre se dirigió a la entrada principal abriendo la puerta para recibir a sus invitados.
- oh joven weller y compañía que sorpresa – saludo el mayo mientras los dejaba pasar a la mansión.
- Martin buen día, venimos a ver a los chicos ¿se encuentran?- solicito conrad con una sonrisa amable.
- claro, pásenles. Llegaron en buen momento.- con una señal Martin les indico que los siguieran.
-¿Por qué dice eso Martin?- le cuestiono keyan mientras los dirigían al salón.
- llevan días comportándose extraño- menciono el de cabellera plateada
-¿de qué manera extraños?- le cuestiono conrad cuando estuvieron junto al salón.
- de esta forma- dijo Martin mientras abría la puerta.
Dentro estaban los tres donceles relajados en un sillón y al lado una montaña de platos vacios. Los licántropos casi se van para atrás de la impresión.
-¡¿ellos comieron todo eso?!- Bryan no sabía cómo era posible eso.
- sí, y en la noche es peor – advirtió el mayor – chicos tienen visitas – anuncio el mayor dándoles un empujón a los jóvenes dentro de la sala- suerte
-¡espera…!- era tarde Martin se había ido.
- ¡bry-can!- izaya le salto en cima abrazándolo con cariño - no habías venido a verme!– debido a la cercanía ambos recordaron el beso accidental que tuvieron y se alejaron sonrojados.
- ¿y… donde están los ogros de sus parejas? no vaya a ser que nos corran – cuestiono Bryan bromista, recordando la última vez que estuvo ahí. Aunque la respuesta el ya la sabia por shinou.
- fueron a un evento en su tierra – explico wólfram acomodando el tablero de ajedrez.
- ¿y no te sientes muy solo?- le cuestiono conrad sentándose a su lado mientras acariciaba su melena rubia con cariño.
- algo, pero estas aquí. Gracias – el rubio le sonrió con ternura. Siendo correspondida por el castaño.
- ¿y ustedes que los trae por acá?- interrogo izaya algo extrañado. Le gustaba tener a sus amigos en casa pero era raro que vinieran por si solos.
- ah, este lugar es aburrido así que venimos a ver si aquí había algo interesante- respondió keyan sentándose junto a eren
- bueno entonces, ¡juéguenos!- propuso el castaño y los demás asintieron.
Durante gran parte de la tarde, platicaron jugaron comieron en la mansión todos se divertían pero el peli verde se percato de que no estaban solos.
- Bryan – le llamo levemente - ¿lo viste?
- si – asintió – ya no están pero lo sentí fuera. Debemos hacer vigilancia exterior será más fácil impedir que se acerquen – explico para después hacerle una señal a conrad el cual asintió comprendiendo la indirecta.
- ¡miren la hora! – Menciono algo fuerte el peli verde.- ya es tarde
- keyan aquí no hay reloj – aclaro izaya sarcásticamente
- bueno, ¡tenemos que irnos!
- noo, quédense otro ratito-pidió eren con ojitos suplicantes mientras se colgaba al brazo de keyan.
- lo lamento, le prometimos a shinou que lo ayudaríamos con algo – explico conrad aunque no mintió.
Después de despedirse de los chicos, se ocultaron cerca de la casa en medio del bosque que rodeaba la propiedad, los caballos fueron amarrados al pie del campamento de vigilancia improvisado.
- necesitamos estar alerta, tomaremos turnos. Ustedes dos duerman. Yo vigilare- ordeno conrad, mirando el cielo que comenzaba a oscurecer – esta será una larga noche
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La noche había llegado a las tierras pertenecientes al clan Lycan. Y con ello la tan esperada celebración del renacimiento.
Todo se encontraba glamuroso. Desde la entrada alumbrada por velas y candelabros además de guardias correctamente posicionados para recibir a los invitados de la manera más cordial posible
Adentro los adornos eran hermosos. Candelabros de oro que iluminaban las esquinas de la enorme estancia, esas mesas con seda color crema y arreglos florales en el centro. Una enorme pista de baile acompañada por una orquesta reconocida entre el clan.
Todo siendo iluminado por una hermosa araña de cristal que colgaba del techo central.
*
*
Los lideres recibían a sus habitantes y familias importantes mientras la música de fondo era leve y los invitados que tenían rato en la fiesta, bailaban o conversaban con otros invitados. En una plena armonía, todos celebrando y disfrutando el ambiente.
-¡ya estoy harto! Mañana a primera hora nos regresamos – ordeno Shizuo molesto.
Desde que llegaron a la dichosa celebración no habían hecho más que platicar con conocidos de clase alta, los cuales al parecer no tenían otro tema que su matrimonio. Eso y también las chicas que los acosaban. Si hubiera sido hace unos días le daría igual acostarse con ellas. Pero el solo pensar en izaya llorando era suficiente para detenerse. Quien lo diría.
- no hace falta que lo digas, no tolero esta hipocresía, míralos todos sonríen pero en el fondo son la misma porquería – desprecio levi mientras bebía un sorbo de su vino.
- por primera vez estoy de acuerdo con ustedes, extraño demasiado a wólfram eso y sin contar que ese esta allá – dijo esto último en un tono receloso agudizando la mirada.
-¿ese? Te refieres a conrad - el pelinegro asintió ante la suposición de Shizuo- te comprendo. Sé que ese lobo sarnoso – refiriéndose a Bryan - está enamorado de MI esposo – comento receloso recordando el beso accidental que hubo entre ellos.
- tsk, nosotros aquí en medio de esta mierda, y de seguro esos deben estar tratando de conquistarlos – levi bebió su copa de un trago. Apretando el recipiente hasta hacerle una grieta. No sabía porque pero la idea de que keyan viera a eren como solo EL lo ha visto. Le hacía despertar sus más bajos instintos
- jajaa y dicen no quererlos – se burlo Yuri de los evidentes celos de sus hermanos – yo reconozco lo que siento, deberían hacer lo mismo eh
- cállate – levi lo miro fulminante pero antes de iniciar un debate la mama de los tres se acerco a ellos con unos señores.
-¡hijos! Qué bueno que los encuentro –kuchel les hizo una señal mientras se acercaba - miren, deje les presento a la señora y señor Kasttiel.
- un gusto príncipes- saludaron con respeto la pareja.
- el gusto es nuestro – tanto levi como sus hermanos hicieron una breve reverencia con respeto.
- hijos, ellos vienen desde un lugar muy lejos. ¿Cómo dijo que se llamaba?- cuestiono algo apenada la pelinegra.
- Gambatt, no se preocupe no es un lugar muy conocido – explico la señora con amabilidad.
- ¿Gambatt?- susurro Shizuo tratando de recordar de donde había escuchado ese nombre.
- es un poblado algo retirado de la naturaleza, muchos dicen que el lugar perfecto para esconderse- bromeo el hombre
-¿por dónde queda?- pregunto con curiosidad el Yuri.
- es difícil llegar esta en una región deshabitada en medio de un bosque espeso y llanuras de montañas, por el este – explico lo mejor que pudo el señor kasttiel.
- ¿de casualidad conoce a keyan y Bryan o conrad weller?- cuestiono el rubio recordando que en una ocasión habían mencionado que pertenecían a esa región.
-¿eh? – La mujer se sorprendió un poco - ¿conoce al joven conrad? – le cuestiono y el rubio asintió- él es el regente de esa zona, pero después de la muerte de su madres él y ahora sus primos abandonaron el clan- explico con un deje de tristeza.
- es necesario que vuelvan. Por favor si saben donde están dígannoslo – suplico el hombre
Los hermanos Lycan se miraron entre si y sonrieron cómplices, tal vez el destino se encargaría de quitar a esos pequeños estorbos de sus vidas.
- no se preocupe sé donde los pueden hallar….
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*tierras blaize*
En la habitación de izaya este mismo se encontraba listo para dormir pero un sentimiento no le dejaba tranquilo. Era como si un miedo dentro de sí aflorara y le advirtiera que algo malo pasaría.
El moreno algo confundido camino hacia el balcón donde solo se observaba un hermoso bosque en el fondo, y estrellas en el cielo acompañadas de una hermosa luna que iluminaba quedamente el paisaje.
-Shizuo – le llamo sosteniéndose del balcón mientras veía la luna - ¿puedo confiar en ti verdad?- un leve mareo lo hizo sostenerse del barandal, era como si todo le diera vueltas.
El moreno miro por última vez a la luna quien ahora estaba siendo ocultada por una nube negra. Eso no le gusto al menor quien entro y cerró las puertas del balcón además de correr las cortinas.
- estoy exagerando – se decía a si mismo tratando de convencerse de que sus ideas eran erróneas. Pero este sentimiento no lo dejaba en paz.
- ¿oni-chan?- escucho la voz de eren fuera de su cuarto sobresaltándolo un poco- ¿sigues despierto?- volvió a preguntar.
- ¡sip~! Dame un segundo – izaya miro por última vez el balcón negando quedamente, para después abrir la puerta encontrándose no solo con eren sino también con wólfram.
Ambos usaban su pijama, en una mano traían una almohada y en la otra una sabana.
-es tarde, deberían estar dormidos- menciono el moreno recargándose en el borde de la puerta
- iza-nii, ¿podemos dormir contigo? El cuarto se siente muy solo – wólfram apretó su almohada contra sí.
- por favor, no molestaremos – rogo eren mirándolo con sus ojitos de chantaje.
- ohh~ que hare~ - el mayor fingió pensarlo un poco para hacerlos sufrir – ah, está bien tontitos, pasen.
Los oji verde en cuanto escucharon esto sonrieron y corrieron a la cama siendo seguidos por izaya quien los arropo. Quedando eren, izaya en medio y wólfram en la otra orilla.
- mañana regresan ¿Verdad? – pregunto eren mirando el techo con nostalgia. Vaya que extrañaba a su malhumorado esposo.
- sí, ahorita debe estarse celebrando la fiesta en su clan- informo izaya algo incomodo la idea de que Shizuo y varona estén juntos le daban unos celos que no creyó sentir.
- iza-nii… crees que hicimos bien al dejarlo ir – wólfram se aferro a su almohada – tengo miedo que Yuri dude de lo que siente por mi con esa cerca
- yo también – confeso eren.
- ah~ así que ambos también lo contemplaron – el moreno les paso un brazo por sus nucas atrayéndolos hacia si mismo – les digo un secreto – los dos asintieron – Shizu-chan~ me dijo que terminarían con ellas.
-¡¿enserio?!- el castaño se sentó en la cama de la emoción
-¡claro! No tendría por qué mentirles – tanto eren como wólfram se abalanzaron contra su hermano abrazándolo- ya, ya ahora a dormir sino mañana tendrán unas ojeras que parecerán pandas – bromeo el mayor.
- gracias oni-chan – ambos se acostaron y al poco tiempo quedaron profundamente dormidos.
Izaya los observo con profundo amor pero también algo de tristeza.
- solo espero estar equivocado… Shizuo – susurro antes de tratar de dormir. Tal vez solo era su imaginación… eso debía ser.
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*clan Lycan* *fiesta de renacimiento*
Cerca de una de las mesas se encontraba un joven mesero de la ocasión observando desde lejos a los tres hermanos. Espero un tiempo pero la fiesta no faltaba mucho para terminar así decidió hacer su último movimiento.
Colocando sobre la mesa una charola sirvió la mitad de vino y lo otro de él liquido que se le entrego. Por un momento dudo de si hacerlo, no sabía para que sirviera ese contenido pero ¿a el que le importaba?
- es muy poco – murmuro sirviendo más de la cuenta, pero no le tomo mucha importancia. Y serrando el embase lo guardo celosamente. Para después dirigirse a donde sus jóvenes amos – disculpen mis señores- les llamo interrumpiendo la plática.
-¿se te ofrece algo Cristóbal?- pregunto Yuri amablemente.
- les traje un poco de vino ¿gustan?- ofreció con una sonrisa.
- ah, no gracias -negó Shizuo ya había tomado mucho.
- perdonen que insista, es de una reserva especial. Y en la ocasión seria perfecta – por un momento los Lycan dudaron
- yo tomare una – Yuri tomo una de las copas.
- tsk dame una – Shizuo le paso una copa a levi y tomo la ultima.
Los tres bebieron del líquido ante la sonriente mirada del mayordomo.
-¿les gusto?- cuestiono el castaño.
- esta algo dulce – levi hizo un gesto de desagrado pero bebió todo el contenido al igual que sus hermanos.
- ¿gustan más?- pregunto el chico retirando las copas vacías.
- no gracias, puedes retirarte- ordeno el rubio.
- como ordenen – el chico hizo una leve reverencia y se alejo no sin antes mirarlos curiosos ¿Qué es lo que les pasaría?
-bueno como les decía. Entonces shinra se entero que murata había sido besado por otro chico y casi me mata para descargar su ir – Shizuo cayó abruptamente. Algo estaba mal- que calor – con algo de incomodidad se desabrocho un par de botones.
- tienes razón, está haciendo mucho – Yuri se deshizo de la corbata y levi del saco.
- ¿te sientes bien levi?- cuestiono el rubio al ver a su hermano masajear la zona de los ojos.
- sí, es solo que me siento algo cansado – informo mirándolos. Con algo de pesar al enfocarlos.
- debe ser el cansancio – trato de justificarlo el pelinegro menor.
- Yuri – una voz muy conocida lo hizo levantarse aterrado seguido de unos labios sobre los suyos, tal fue la sorpresa que ni siquiera se movió para alejarla – mi amor.
- flynn- susurro algo sorprendido. La chica se separo de él mirando dulcemente.
- Shizuo no me informaste que vendrías – menciono varona sosteniendo su brazo con fuerza.
- fue algo de último minuto- trato de explicarse.
- está bien los perdonamos por que ya están aquí – Isabel le dio un pequeño beso a levi y sonrió.
- flynn… yo… tengo que hablar contigo – solicito Yuri.
- tu dirás amor – la peli celeste sonrió causándole un mal sentimiento al pelinegro.
- todos nos están mirando no creo que sea e- antes de acabar el rubio sintió nuevamente esa onda de calor. Sentía que su cuerpo aumentaba unos cuantos grados.
- ¿sucede algo Shizuo? Mejor vayamos a los cuartos de arriba así podremos hablar sin que nos interrumpan – sugirió con fingida preocupación la rubia
-si… creo que es lo mejor – levi tampoco se sentía tan bien así que aceptaron y siguieron a las chicas quien sonrieron con malicia. Todo iba tal y como lo planearon
*
*
*
El molesto sol se colaba por la ventana de aquella habitación. Llegando directo hacia su somnífero rostro. Con pesar pestañeo un poco tratando de acostumbrarse a la poca iluminación.
-¿Dónde estoy?- Yuri miro la habitación tratando de reconocerla. O eso hacia cuando sintió como una mano se posaba en su cintura.
- amor, aun es muy temprano para que despiertes duérmete un poco mas – musito la chica que se encontraba desnuda a su lado.
-¡flynn!- Yuri cayó de la cama con terror absoluto. Miro su ropa y la de ella regada por toda la habitación. – ¿Qué hice?– susurro aterrado, sentía tanto miedo a pensar siquiera en lo obvio.
-¿Yuri? ¿Pasa algo?- la peli celeste se sentó en la cama dejando ver su desnudez absoluta.
Yuri no contesto solo tomo su ropa interior y demás prendas y se encerró en el baño. Donde se detuvo enfrente del tocador, viéndose en el espejo. En un hombro había varios chupetes y marcas de mordidas. Como prueba de la bajes que nuevamente había cometido.
- le volvía a fallar – no lo podía creer, se sentía el ser más miserable del planeta. Se había acostado con ella mientras al que amaba era a él.- no me puede estar pasando esto – Yuri se dejo caer deslizándose por la pared hasta quedar sentado en el suelo – wólfram… perdóname.
Una lágrima salió de sus ojos, ¿Cómo se lo diría? ¿Cómo le explicaría lo que paso, si ni él lo recuerda? Quería gritar, llorar, regresar el tiempo para n cometer ese error pero ya estaba hecho.
Sus ojos miraban al vacio tratando de recordar pero era inútil, ¿Qué haría? ¿Podría ver a wólfram a los ojos sin decirle la verdad? No lo sabía, solo quería estar con su amado y no pensar en nada, que este no se enterara nunca de esto y ser feliz con él.
- ¿Yuri? Te sientes bien amor – la vos de flynn lo saco de sus pensamientos.- sabes ayer fuiste tan apasionado, estoy maravillada.
-¡cállate! ¡Estas mintiendo! Yo no pude…. No pude..- grito el pelinegro fuera de sí. Sin saber que más hacer se vistió rápido y salió del baño.
-¿Qué tienes? Estas muy alterado – el moreno solo la miro con indiferencia y dolor y salió de la habitación sin contestarle – ahh~ Yuri perdóname pero por ti hare lo que sea – juro viendo el lugar por donde su amado “novio” se había ido.
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Yuri caminaba rápidamente por los pasillos sin importarle que su ropa y sus cabellos estuvieran aun desordenados. En su mente lo único que pasaban eran pensamientos de su amado rubio. Debía tomar una decisión y rápido.
Los sirvientes que iniciaban sus labores se detenían para saludarlo como correspondía pero este los pasaba de largo sumido en sus problemas, debía hablar con levi y Shizuo rápido. Tal vez ellos sabían que fue lo que paso anoche.
Con esa idea en mente se encamino hacia la recamara de su hermano mayor, pero este no se encontraba en la alcoba por lo que dirigió su rumbo hacia la de levi mas este tampoco se encontraba, en ambas alcobas parecía no haber rastro de que ellos durmieron en ella.
- ¿dónde estarán? – se pregunto dentro de sí, una idea en mente le paso fugazmente por lo que corrió al jardín trasero. A ese lugar donde iban cada vez que se sentían mal.
Sin perder tiempo llego a una sección donde los empleados no podían ingresar, en la cual había un pequeño campo de flores junto con una mesa y sillas de acero adornando el lugar.
- chicos… sabia que los encontraría aquí – tanto levi como Shizuo voltearon a verlo. En este momento lo supo - ¿ustedes también?- pregunto con confusión.
- si… no sé que me paso – el rubio tallo su pelo con desesperación se sentía una escoria una basura.
- esta mañana desperté al lado de Isabel pero no recuerdo lo que paso ¡yo nunca me emborracho!- grito levi desesperado. El jamás perdía la razón por más que bebía.
- ¿Qué haremos?- Yuri miro a sus hermanos pidiendo una respuesta.
- callar, esto no se tiene que saber- sentencio levi con un tono severo.
- pero…
- nada Yuri. ¿Crees que ellos nos perdonaran si se enteran?- intervino Shizuo a favor de la idea de su hermano menor.
- tienen razón – eso sorprendió a sus hermanos – nadie dirá una palabra de esto. Callaremos y de ser necesario no pisaremos un pie en estas tierras nuevamente – tanto como levi y el rubio estuvieron de acuerdo.
- tenemos que marcharnos ya – dicto el azabache.
- tienes razón mientras sigamos aquí corremos el peligro de que algo mas pase – advirtió Shizuo.
- le pediré a los empleados que alisten el carruaje y vayámonos de aquí – los tres estuvieron de acuerdo pero ¿cuánto tiempo callarían la verdad?
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Muy lejos de todo en las tierras humanas, abandonadas por la mano de dios. Más específicamente en la mansión embrujada como muchos le decían un joven de cabellera negra revisaba unos documentos cuando un estruendo seguido de la interrupción de sus hermanos le interrumpieron
- hermano ¿Cuándo atacaremos? ¡Esto es desesperante!- grito la joven molesta por la inactividad.
- ella tiene razón. Hermano es hora de hacer el primer movimiento – indico el de cabello largo con una sonrisa.
-… está bien. Hoy en la tarde les haremos una pequeña visita – los ojos del pelinegro resplandecieron en un color dorado – preparen todo. No podemos cometer un error ¿me entendieron? – los dos jóvenes asintieron.
- según me informaron están vigilando la propiedad – informo el joven pelilargo
- tsk… pues solo tenemos que quitarlos de nuestro camino – dijo como si nada el pelinegro.
- iré a preparar lo necesario - sin más la chica salió de la estancia dejando solos a los dos hermanos.
- ¿qué planeas hacer oni-chan?- el pelilargo se sentó en las piernas del moreno quien desabrocho la camiseta del contrario para acceder a su cuello y besar parte de este.
- por el momento disfrutare de ti – su mano se adentro en la túnica del menor acariciando muy lentamente sus piernas hasta llegar a la ropa interior la cual con un leve movimiento la bajo mientras subía la túnica lo mas que podía- luego… nos encargaremos de darles una advertencia a ellos.
- mgh ahh~ que indecente eres hermanito – el oji dorado levanto un poco su trasero permitiendo que su hermano frotara su ya erecto pene en su entrada - apresúrate ella puede volver ahh~ - de una sola estocada arremetió entre sus entrañas sacándole un par de gemidos al pelilargo
- no lo olvides, aquí las ordenes las doy yo. Tu solo abre estas hermosas piernas y déjame amarte- ordeno apegando el cuerpo del menor a la mesa mientras lo penetraba con rapidez.
- ahh si así~ lléname de ti hermano mgh ahh~
- no lo dudes… te llenare hasta el final de tus días
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*clan Lycan*
En las afueras de la mansión se encontraban los líderes, kuchel y Grisha despidiendo a sus hijos quienes al parecer tenían mucha prisa por partir.´
-¿están seguros que no quieren quedarse unos días más?- cuestiono la pelinegra algo decaída
- lo lamento madre, izaya y los demás nos esperan – explico Shizuo tratando de que esta comprendiera.
-vaya vaya y decías no sentir nada por el –comento murata apareciendo junto con kida y Farlan.
- vaya hasta que se aparecen – bufo levi.
- ¿tanto me extrañaste?- Farlan hizo un corazón con sus manos para rápidamente esquivar el golpe - ¡qué violencia!
- oigan, saben algo de los Patterson – cuestiono kida muy interesado, mientras que ken se puso algo nervioso por la mención de estos.
- sigue todo igual. Si es lo que querías saber- informo el pelinegro- ¿murata tienes algo? Estas muy rojo – dijo Yuri viéndolo raro – ahh recordaste el beso que mhg
- cállate – ordeno el doncel tapándole la boca – shinra no se puede enterar de eso – menciono sin saber que su prometido ya lo sabía.
-¿De que no me puedo enterar?- cuestiono una vos a sus espaldas
Todos voltearon su atención hacia los hermanos von Farnety quienes venían cada uno con un equipaje.
-¡de nada!- gritaron Yuri y murata al mismo tiempo.
-¿Qué diablos significa eso?- grito levi rogando no fuera lo que estaba pensando.
- ¿no es obvio enanin? ¡Nos iremos con ustedes!- explico la castaña con una sonrisa de oreja a oreja.
-oh no… eso no – negó el rubio, si ellos iban adiós a sus momentos de intimidad.
- eso no pasara – negó levi dispuesto a no ceder.
- estos hombres no tienen sentido de la hospitalidad – comento anissina ofendida por las negativas.
- ¿Por qué quieren ir allá?
- tengo curiosidad de saber cómo son sus amados espositos – explico shinra sin dar muchas vueltas “eso y conocer a ese tal shinou”
-vamos hijos dejen que los acompañen. Tienen que ser hospitalarios – ordeno kuchel con firmeza impidiendo que sus hijos se negaran.
- a la primera que hagan los quiero fuera- ordeno levi subiéndose a la carroza.
-genial, adiós tranquilidad – Shizuo y Yuri se subieron al vehículo seguido de sus amigos quienes estaban sonrientes.
- que emoción ¡pronto conoceremos a sus amorcitos! – hanji estaba que no cavia de la felicidad mientras que anissina solo la miraba con una sonrisa.
- tsk, este será un largo viaje- levi miro por la ventanilla el paisaje comenzar a cambiar estarían por allá en la tarde.
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*Tierras blaize*
El cielo comenzaba a teñirse de un color anaranjado rojizo sobre la mansión blaize, en los espesos bosques el silencio sepulcral hacia su acto de presencia inquietando a los jóvenes que se encontraban en el.
- no me gusta nada esto – murmuro conrad tocando las ramas de los arboles. El bosque estaba demasiado quieto eso nunca significaba nada bueno.
-el bosque tiene miedo – dijo keyan entendiendo el mensaje de la sabia naturaleza.
- ¿deberíamos ir a la mansión? Haya estaremos más cercas por si algo pasa – propuso Bryan mirando la mansión a lo alto.
Conrad pareció considerar la propuesta del pelirrojo pero aun no podía realizarse. Si ellos se equivocaban echarían todo el plan a perder. Debían ser más cuidadosos.
-… no, si estamos aquí podremos impedir que siquiera se acerquen – explico el castaño, después de todo con su gran olfato podrían sentir cualquier presencia viva en un radio de 100 metros.
- si tu lo dices – el pelirrojo tomo asiento en la rama donde se encontraban. Mas su cuerpo aun se encontraba alerta la sabia que algo pasaría. Su instinto nunca le fallaba.
Conrad solo miro al horizonte, empezaba atardecer y eso no le gustaba. Sabía que Bryan era bueno para los presentimientos pero aun así no podía actuar imprudentemente.
“wólfram” pensó con cariño antes de apretar su puño. Nadie lo lastimaría mientras el viviera.
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En la mansión blaize los hermanos Ross se encontraban en el patio de su hogar, después de que wólfram y eren le rogaran a Martin que le preparan un pastel de chocolate, ese que solo les hacía en su cumpleaños, El hombre derrotado acepto prometiéndoles llevárselos al jardín.
- los consientes demasiado – se burlo izaya cuando su mayordomo al cual quería como un padre les serbia a cada uno una generosa rebanada de ese delicioso pastel.
- soy débil a sus suplicas- dijo el hombre a su favor.
-¡te queremos Martin!- gritaron los mellizos mientras probaban el pastel. Extasiándose del dulce sabor a chocolate que en ese día les sabía a gloria.
- y yo a ustedes, saben que son mi adoración – Martin veía a ese trió de “niños” como sus hijos, el nunca encontró el amor por lo cual tampoco tuvo descendencia. Mas su compensación fue encontrar un hogar que lo trato como parte de la familia y ahora daría su vida por ellos sin dudarlo.
- Martin ¿está todo listo? Levi y los demás llegan hoy, y ya sabes cómo es de estricto – cuestiono eren sin dejar de devorar su pastel, por alguna razón sentía que por más que comía no se llenaba.
- lidia y clara ya limpiaron las habitaciones y los papeles están en orden – informo el mayor.
- gracias~
Por un buen rato estuvieron platicando sobre el regreso de los Lycan, Martin veía la ilusión de volver a verlos en sus “hijos” hacia mucho que no los veía tan felices, tenían un especie de brillo en su mirar que le hacía tranquilizarse.
Quizás ya había pasado la época de amarguras y tristezas para ellos. Ya era hora de que sus niños vivieran su amor, y fueran felices como se los merecían.
- disculpen ¿podemos retirar los platos?- solicito lidia con una sonrisa mientras clara les servía un poco de agua para pasarse el dulce sabor del chocolate.
- gracias puedes retirarlos – dio permiso izaya.
Antes de que las jóvenes pudieran hacer lo cometido, una fuerte explosión cayó sobre ellos. Seguido del breve grito de las empleadas quienes solo se abrazaron, el silencio cayo rápidamente en el lugar. Dejando el patio trasero y parte del castillo en ruinas mientras el humo que cubría todo el lugar ascendía hasta los cielos.
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En el bosque conrad y sus primos se encontraban sentados conversando entre ellos para decidir las guardias nocturnas cuando un fuerte temblor retumbo por todo el bosque seguido al instante de una explosión en la mansión blaize.
Los licántropos se sorprendieron con demasía, ¡era imposible! ¡¿En qué momento pasaron?! Ni siquiera en ese momento los olían pese ha ya haber sido detectados… acaso serian…. No podía ser…
-¡andando! No tenemos tiempo que perder- grito conrad sacando a sus primos de ese estado de shock.
Ambos sacudieron la cabeza levemente volviendo en sí, y sin dudarlo junto a conrad se convirtieron en su forma canina destrozando sus vestiduras en el proceso.
Conrad poseía un pelaje café oscuro como su cabello, sus ojos cafés claro resplandecían en ira mientras su gran boca gruñía mostrando ese par de blancos colmillos que atemorizarían hasta el más valiente.
Keyan a diferencia de conrad, resplandecía en un pelaje de colores combinados entre azul, negro y blanco sus ojos azul cielo resaltaban de su hermoso ser. Bryan poseía un pelaje entre negro y blanco adornado por esos ojos rojos llenos de ira.
“Bryan avísales” ordeno conrad en un gruñido que sobreentendió el oji rojo.
Un fuerte aullido salió de su hocicó, el sonido retumbo por los arboles haciendo eco. Complaciendo al lobo sabía que shinou lo escucharía y los apoyaría por si lo necesitaban.
“andando”
Los tres sin demora se dirigieron hacia la mansión sobre sus cuatro patas, no permitirían que nada se interpusiera en su camino. Tenían que salvarlos.
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El humo comenzó a disiparse poco a poco. Mostrando así los daños ocasionados en el lugar. Unas voces comenzaron a toser en un intento de expulsar el humo que ingirieron por la repentina explosión.
Afortunadamente izaya y Martin reaccionaron más rápido, el moreno se abalanzó sobre sus hermanos alejándolos mientras que Martin hacia lo mismo con las empleadas poniéndolas en un lugar seguro lejos de las ruinas causadas por la explosión.
-¿están bien todos?- grito izaya aun aturdido para el sonido de la explosión.
- estamos bien – respondió Martin.
Las chicas estaban aterradas y llorando por el susto mientras que eren y wólfram aun no comprendían muy bien qué pasaba.
-o no…
Cuando el humo se disipo por completo. Izaya se aterro al ver que frente a ellos había cuatro hombres totalmente enmascarados su atuendo negro como la noche cubría toda su presencia impidiendo ver sus rostros, pero lo que más alerto al moreno es el hecho de que esos sujetos apuntaban sus espadas hacia él y sus hermanos.
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-¡Martin! Lleva a mis hermanos y las chicas a un lugar seguro – ordeno izaya tomando una postura de ataque a lo que sus atacantes hicieron lo mismo.
-¡estás loco! Nunca te dejaremos solo- grito wólfram enojado por la propuesta de su hermano.
-¡wólfram tiene razón! Estaremos juntos en las buenas y las malas- secundo eren tomando la mano de su hermano mayor
-… Chicos- izaya los miro, no se dio cuenta en qué momento sus hermanos ya habían crecido, él sabía que si luchaba solo perdería era un homicidio hacia su persona pero la idea de poner a sus amados hermanos en peligro ¡era impensable!
- confía en nosotros- suplicaron mirándolo con dolor.
- si la cosa se pone fea ¡se irán! – ordeno el moreno derrotado, después de todo siempre estuvieron juntos esta no sería la excepción -¡Martin lleva a las chicas adentro!
El hombre tomo a ambas chicas y se adentro en la mansión donde las dejo ocultas, el tenía que volver ayudar a sus niños. No por nada era el mayordomo de la familia Ross
-¡quédense aquí!- ordeno el hombre antes de volver al jardín no sin antes tomar dos pares de espadas para el combate que se enfrentaría. Nunca dejaría que lastimaran a sus niños.
*
*
*
-¡¿Quiénes son y que quieren?!- cuestiono izaya furioso, esos seres no se movían pareciera como si estaban esperando una orden para atacar.
-¿Por qué nos hacen esto?- grito wólfram mostrando sus colmillos y ojos rojos.
Los tres habían iniciado su metamorfosis haciendo que sus colmillos crecieran, sus ojos se tornaran rojos como la sangre y sus uñas se alargaran con un filo capaz de cortar hasta un árbol sin dudarlo.
Mas con todo eso seguían en desventaja esos sujetos eran 4 y ellos solos 3 eso sin contar que venían armados y aun no sabían cuál era su origen.
El ruido de pisadas seguido del llamado de su mayordomo les hizo voltear alcanzando a tomar una espada que les había lanzado.
-¡izaya! Tomen- Martin les lanzo a cada uno una espada para poder estar parejos mientras el también tomaba posición a lado de ellos.
-¡¿Qué haces Martin?! ¡Vete a esconder!- grito el moreno enojado.
- estas mal si crees que los abandonare, esta será una pelea que planeo ganar, estoy viejo pero aun tengo mis secretos- el hombre movió un poco su espada haciendo que la luz la reflejara.
Izaya chisto sabía que no lo convencería, y con él en la batalla tendrían más posibilidades de ganar.
-¡no mueras porque te buscare y te volveré a matar yo!- ordeno el mayor de los Ross con su rostro angustiado tratando de decir un “cuídate” que el mayor supo interpretar a la perfección.
“mátenlos”
Como si un interruptor hubiera sido encendido aquellos seres se enderezaron y sus ojos brillaron en un tono amarillento, sin vacilar esos sujetos alzaron sus espadas y se abalanzaron sobre los vampiros. Quienes detuvieron su ataque con la arma que tenían iniciando así una confrontación de espadas
Continuara….