Izaya no necesito repetir dos veces su ofrecimiento cuando una sonrisa acompañada de esos ojos carmesí apareció en los mellizos.
-vamos no sean tímidos – susurro sentándose en la cama ya sin camisa de por medio. Con un toque seductor ladeo la cabeza dejando apreciar su cuello
-yo voy primero- ataco eren mostrando sus colmillos al ver que su mellizo se acercaba a su aniwe.
-no es justo, tú fuiste la ultima vez- renegó el rubio.
-ya niños, vengan. Con los dos ‘puedo así que no se pelen- ambos hermanos satisfechos aceptaron.
Wólfram se coloco detrás de izaya sosteniéndolo de la cintura al tiempo que clavaba sus filosos colmillos en el hombro derecho del pelinegro. Eren aprovecho eso para colocarse en el regazo del mayor y morder el hombro izquierdo con fervor.
Los ojos rojos de izaya se empañaron de placer, un gemido salió de sus labios mientras sentía la sangre resbalar por su tersa piel. Era tan placentero para él, no lo podía evitar el dolor de su carne siendo penetrada le daba un morbo.
-ahh nii-chan, eres delicioso- susurro eren lamiendo la sangre que aun salía de la herida mientras con picaría movía sus caderas en busca de algo más.
- iza-nii, aliméntate de mi.. onegai- rogo wólfram desabotonándose su camisa, al tiempo que gateaba hasta ponerse al lado de eren.
-¡no, aliméntate de mi!- suplico el castaño, poniendo en un dilema al pelinegro.
-ohh ¿Qué hare~?- canturreo dramatizando- ¡ya se! ¿Qué tal si me como a los dos?- propuso con una mirada que ambos reconocían
Tanto eren como wólfram se miraron cómplice y sin dudarlo derribaron a izaya dejándolo recostado en el suave colchón con su ropa desaliñada, sus labios entre abiertos y un pequeño rubor en sus mejillas.
El rubio ataco el cuello del moreno mientras el castaño le ofrecía su muñeca para morderla cosa que el pelinegro no dudo en aceptar.
Las miradas pasaban a caricias mutuas pero sin ninguna intención mas allá que el jugar para de sofocar los instintos sexuales de los tres. Nunca pasaban de masturbación, oral o frote pues querían llegar puros al ser que tanto amaban.
-ahh nii-chan estas duro-gimió eren al sentir la erección de izaya pues como no estarlo, si este se encontraba restregando su trasero redondo encima de su intimidad.
-ahh iza-nii mas – exigía el rubio, refiriéndose al movimiento de la mano ajena sobre esa zona tan delicada.
- quien diría que tenía dos hermanitos tan pervertidos- ronroneó mordiendo sus labios ante el estimulo de eren sobre su pelvis.
-nii tócame, yo también quiero- suplico el castaño, llamando la atención de su hermano mayor.
Esa sería una larga noche para ellos.
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La tensión se notaba en el ambiente, la pobre sirvienta no sabía que decir para aliviarla por lo que suplicaba llegar a la habitación destinada a ellos para deshacerse de esa tarea.
-ahh ¡llegamos!- suspiro aliviada, el rostro de esos atractivos jóvenes no era nada amigable- si necesitan algo, no duden en llamarm.. Llamar al servicio.- corrigió, de ser por ella entre más lejos mejor.
-.. ¿Dónde está la habitación de los jóvenes amos?- cuestiono Shizuo ganándose la mirada de los demás.
-¿eh? ¡ah! No creo que sea correcto darles esa información- menciono apenada la joven.
-son nuestros prometidos, solamente queremos desearles buenas noches- intervino Yuri sorprendiendo a sus hermanos, el no era ese tipo de persona, pero el coraje que tenía dominaba sus principios.
-b-bueno, siendo así – con algo de duda la joven camino unos cuando pasos siendo seguida nuevamente por los jóvenes Lycan- es esa… la que tiene el marco de rosas negras- anuncio para después hacer una reverencia y retirarse.
Los tres se encaminaron al lugar que índico deteniéndose a unos escasos pasos, dado a unos sonidos muy bien conocidos para ellos… gemidos y jadeos.
Los tres se miraron dispuestos a ver con quienes estaban sus prometidos, y no por celos o alguna ridiculez de esas, sino por orgullo. No permitirían que nadie les pusiera los cuernos.
Tratando de no hacer ruido abrieron la puerta que no tenía puesto el seguro. Los jadeos se intensificaron. La oscuridad no fue problema para ellos, mas no esperaban ver a los hermanos Ross en semejante posición: los tres abrazados mientras se auto complacían jadeando con sus mejillas sonrojadas sin ninguna clase de arrepentimiento.
Rápidamente Yuri cerró la puerta sin hacer ruido. Tan solamente esa visión había logrado poner su erección al máximo, con disimulo el menor miro la entrepierna de sus hermanos viendo que en ellos también había surtido el mismo efecto.
-¿buscaban algo jóvenes Lycan?- cuestiono Martin, el mayordomo de la familia y un segundo padre para los donceles- es muy tarde para visitas.
-¿eh? Ah es que… no perdimos- objeto el rubio tratando de ocultar su erección con su mano
-permítame acompañarlos- el hombre de cabello canoso los dirigió hacia donde dormirían, no sin antes notar el estado de “ahí abajo” de esos licántropos- buenas noches- Sin más se retiro a terminar sus tareas
Después del susto afortunadamente su “problema” está resuelto
-y bien… ¿Qué haremos?- cuestiono Shizuo acostándose en la cama que le pertenecía a él.
-¿Qué podemos hacer? Solamente nos queda aceptar, sabes que nuestra madre no dejara que escapemos de esto- sentencio Yuri con algo de resignación
-¡a la mierda todos! No me casare con ese mocoso preciso. Ja bien que se hizo el duro conmigo ahora entiendo todo- la vos de levi denotaba desprecio.
-explícate no tengo paciencia- ordeno el rubio.
-tsk, por sus caras, parece que también tuvieron un encuentro con esos mocosos- ambos jóvenes asintieron- ¿no se le hace raro? Ese niñato sabía mi nombre. Y que casualidad que me casare con el… están jugando con nosotros. Eso no lo tolerare.
-¿y qué haremos?- cuestiono Yuri sin verle solución a esto.
- les mostraremos el verdadero infierno. Luego simplemente disfrutaremos de sus cuerpos para cuando acabe el año tirarlo como las basuras que son- sentencio el azabache.
-me agrada esa idea- apoyo Shizuo- quiero ver a esa maldita pulga, tsk se atrevió a despreciarme esto le costara caro- ambos hermanos voltearon a ver a Yuri quien no se veía muy bien convencido.
-no lo sé chicos… esto demasiado- musito no muy conforme con lo dicho.
- oi, no olvides que gracias a ellos, no podrás estar con tu amada flyn, lo más seguro es que sabía que teníamos pareja pero le importo un puto comino… así son todos los vampiros
-yo… - las palabras de levi habían llegado muy hondo dentro del, él quería a su novia, y odiaba a las injusticias si ese bishonen quería jugar con los sentimientos de los demás ¿era justo que él se “defendiera” ¿no?- está bien. Pero no me acostare con él, aunque sea un doncel saben que no me van los chicos- sentencio.
-de acuerdo… no puedo esperar porque estemos casados- una sonrisa perversa se apodero de su rostro… nada bueno les esperaba a esos pobres.
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A la mañana siguiente el sol hizo su típica aparición entre el horizonte, todos comenzaron sus diarias tareas. la noticia del compromiso sería anunciada con una clamorosa cena en el castillo y enviadas la invitaciones para la boda que sería en 6 días… mas faltaba un pequeño e insignificante detalle: avisarle a los donceles.
-madre ¿nos mando llamar?- cuestiono izaya entrando al salón familiar acompañado de sus dos hermanos que se morían de sueño, en especial wólfram.
-hahaue, es muy temprano- se quejo acurrucándose en el pecho del moreno,
-nada de temprano, la noticia que les tengo que dar es…. ¡otro chupete! – reprocho Carla observando el cuello de eren
-pero madre tú fuiste quien-
-¡nada de peros eren! Ahora que se van a casar no pueden dar este tipo de ejemplos, que van a pensar… sus… prometidos- susurro aterrada al darse cuenta de lo que había dicho.
-¡¿Qué?! ¡¿Boda?!- gritaron los tres donceles aterrados.
-¡tranquilos hijos!- intervino Grisha al ver que su esposa aun no cavia en su error- sé que es difícil pero en una semana se casaran con sus primos, los herederos del clan Ross- anuncio mientras daba vueltas por el lugar.
-c-con... ellos… - wólfram dejo caer su mandíbula, no podía procesar lo escuchado.
-¿c-con los hijos d-de mi tia k-kuchel?-cuestiono el castaño recibiendo un asentimiento de sus padres
-madre… ellos están de acuerdo- indago izaya, por la actitud de ayer no parecían saber algo.
-p-pues… ¿sí? Ahh… ok no, pero hijos. Esta boda significa mucho para ambos clanes… es su deber. Por favor entienda- Carla estaba tratando de no entrar en pánico. Ella imaginaba a sus hijos saltando de alegría no esas caras de tristeza.
-no hahaue.. No quiero que Yuri este conmigo por una obligación… yo prefiero que sea feliz a infeliz por mi culpa- rogo el rubio con el alma quebrantada.
- pienso igual, madre… no quiero ser odiado por levi. Para mi es suficiente sabiéndolo feliz… aunque no sea conmigo- secundo eren bajando su mirada hacia la alfombra.
-creo que es nuestra última palabra madre... Padre… no nos obliguen a esto- suplico seriamente izaya.
-Carla… no quiero ver llorara a mis hijos- todos miraban a la castaña quien no sabía ni que decir.
-izaya, eren, wólfram. Entiendo su sentir pero esta decisión ah sido tomada… véanlo como una oportunidad para ganarse su amor. Ustedes saben que no es un imposible. Recuperen lo que les pertenece- sentencio la mujer marchándose del lugar.
-lo lamento mis tesoros… saben que siempre contaran con papa.. Si los llegan a lastimar, yo los protegeré- prometió Grisha dándole un casto beso en la frente a cada uno.
-… ¿Qué haremos?- se preguntaban los jóvenes donceles ahora solo les quedaba aceptar lo que el destino les deparara.
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El resto de la tarde su madre no les permitió hablar con sus ahora prometidos hasta que la cena donde presentarían el compromiso se daría a conocer.
Entre preparativos para el comedor, invitaciones para la boda, arreglos para su ropa de esta velada se les fue el día. Para los tres no era algo fácil de aceptar que después de 30 años amando a una persona de pronto les digieran “hey se van a casar”.
Dejando de preocuparse y tratando de ver el lado positivo. Esto les ayudaría a conquistar a sus amados, esta vez nada los separarían… después de todo estarían juntos hasta la muerte. O eso creía los jóvenes que desconocían el tratado.
El sonido de la puerta les hizo despertar de su mundo de ensueño. Ya era de noche y estaban terminando de arreglarse para la cena.
-adelante- accedió izaya cepillando su sedoso cabello.
-mis amos, ya es hora. Los están esperando en el salón- anuncio el mayordomo viéndolos con tristeza. El sabia que sus niños no serian felices- … chicos. ¿Están seguros de esto?
- Martin, estaremos bien, somos fuertes soportaremos- respondió wólfram aferrándose a ese gran cuerpo- gracias por tu preocupación.
- no duden en acudir a mi si necesitan algo, solo soy un mayordomo pero por ustedes daría mi vida- anuncio viéndolos como un padre a sus hijos.
-¡Martin!- los tres chicos se abalanzaron sobre el pobre hombre abrazándose- te queremos- susurraron. Tratando de grabar ese momento.
-yo también…. Bueno llego la hora
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El comedor en el que se encontraban reunidos era de tamaño extraordinario. Adornado por ventanales que daban al patio, hermosas cortinas rojas de seda. Una lámpara colgaba desde el centro iluminado la hermosa decoración de la mesa y arreglos en ella.
En el lugar el ambiente se sentía tenso. Como si ahí no estuviera reunida una familia sino unos negociantes de tratados. Los jóvenes licántropos esperaban a sus prometidos mientras sus padres y tíos solamente se dignaban a mirarlos de reojo.
La gran puerta del comedor se abrió mostrando a los donceles quienes eran escoltados por el mayordomo de la familia, el cual los situó al lado derecho de su padre quedando frente a sus respectivos prometidos. Quienes solo los miraban como analizando la situación.
-sirvan la cena- ordeno Grisha a la servidumbre la cual coloco una sopa famosa del lugar acompañado de carne de la mejor ternera y vino.
-hijos. Ya vieron la belleza de prometidos que tienen- menciono kuchel tratando de romper la tensión. Los mencionados se tornaron de rojos mientras que los licántropos solo los barrieron con la mirada y asintieron.
-madre… ¿cuándo será la b-boda?- cuestiono eren sintiéndose intimidado por la mirada del azabache… para luego recordar cierto chupete que traía en el cuello.
-en 6 días- respondió Carla haciendo que todos se atragantaran.
-¡¿tan pronto?! ¡Es una locura!- bramo Shizuo levantándose de golpe-
-esa decisión ya está tomada- sentencio kuchel mirando a todos- después de la boda, los seis se irán a las tierras Blaize, a partir de ese momento ese será su lugar. Tómenlo como un regalo de mi hermana y mí- anuncio la castaña con tono firmé.
-¡madre! Sabes que tenemos nuestras vidas hechas en las tierras Lycan. Esto es inaceptable. Que se vengan con nosotros si quieren- propuso Yuri viéndolos con desdén y algo de molestia. No abandonaría todo lo que amaba por ese cualquiera.
-tsk, hazle como quieras eso no pasara.- sentencio levi cruzando sus brazos con postura firme.
-… levi no estoy pidiendo tu opinión, es una or-den- siseo Kenny con determinación. Ya era hora que sus hijos maduran
-padre, yo no creo que-
-wólfram- con su mirada le mando callar, los jóvenes donceles solo veían dolidos el desprecio de sus futuros maridos… cuanto dolía, pero su corazón era fuerte… aun quedaba mucho por superar.
- veo que no me invitaron- una vos ajena se adentro en el gran lugar dejando apreciar a una hermosa mujer de cabellera rubia y ojos esmeraldas, su esbelto cuerpo bien proporcionado era cubierto por un vestido muy escotado.
-¡madre ancestral!- saludaron con sumo respeto. Todos se levantaron e hicieron una reverencia al reconocer esa voz
-mo~ vamos chicos. Quiten esa actitud tan rígida. Kyaaa~ wolfy – el nombrado no alcanzo a correr cuando era apresado contra esos voluntariosos pechos- ¡siges tan guapo! Oh mis amores no se quedan atrás- refiriéndose a izaya y eren- kyaa~ es la época del amor
-¿Qué la trae por acá? Si se puede saber- cuestiono con respeto Kenny.
- vine a ver si era verdad lo del compromiso- anuncio mirando a los otros jóvenes que no se movían de su asiento
-“ cuidado con lo que hagan, todo en esta vida ser regresa” creyeron oír los jóvenes licántropos.
-buenoo~ los veo luego, por supuesto yo oficiare la ceremonia- sin decir mas así como apareció esa hermosa mujer desapareció del lugar.
******** 6 días después*************
Después de la “gran cena” por decreto de las tradiciones ninguno podía verse hasta la ceremonia así que enviaron a los donceles al templo sagrado del lugar.
Los días pasaron rápidamente, hasta que el momento decisivo había llegado
La ceremonia que se llevaría acabo consistía en hacer un juramente cerca de la cascada del nacimiento cada pareja bebería el agua de la unión, donde murió el primer ser que peleo por su amada: lucían.
Todos se encontraban reunidos en una especie de prado. Decorado con sillas y lazos. Los arboles podados. El agua de la cascada tan clara que se veía el reflejo. Solamente faltaban los donceles y todo comenzaría.
-¡shibuya!- llamo un joven amigo de Yuri, este era un doncel licántropo de cabello negro azulado al igual que sus ojos y una sonrisa tan hermosa como su conocimiento y astucia - ¡con que te casas eh! Picaron
-tsk, no bromees. Esto es lejos de una boda para mí- repudio el moreno, viendo con asco toda esta farsa.
-… ¿entonces por qué lo haces?- cuestiono el joven mientras acomodaba sus lentes- tu y yo sabemos que si no quisieras nadie te obligaría
-y-yo… ¡murata deja de confundirme! Yo odio a ese tipo. - negó el moreno revolviendo su melena.
-Hmp me suele a que si sabes esa respuesta, solo ten cuidado… que puedes lastimar a un inocente- sin más el joven de lentes tomo su lugar junto a su familia entre la audiencia
-“¿p-por qué será?... es que acaso quiero ser mas de el…¡no! tsk, maldito murata solo me vino a confundir” pensó mirando a lo lejos.
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-se casa el Casanova ¡pobres chicas!- dramatizo un joven acercándose al peligroso levi quien solo quería alguien a quien matar… perfecto.
-cállate Farlan. ¿Qué mierda haces aquí?- su amigo era un joven de melena castaña casi rubia y ojos color dorado, un galán sin remedio.
-¡que más! Mi mejor amigo se casa jaja esto no me lo pierdo-se burlo esquivando el golpe del azabache.
-tsk idiota
-ehh dime.. ¿Esta bueno tu prometido? Mira que para atraparte debe ser un bombón- alago sin saber las circunstancias.
-hmp – por un momento la imagen de eren jadeando y gimiendo le llego a su mente más rápidamente fue desechada- es un asqueroso mocoso sin nada en especial
-ohh que aburrido cuidado que esos son los más peligrosos, - bromeo retirándose, la ceremonia estaba por comenzar.
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-¡shizou-san! Que cara más horrible tienes ¡kyaa~! Que miedo das- dramatizo un joven rubio de ojos dorados y piel blanca.
-tsk cierra la boca kida, o acaso quieres morir-sentencio liberando el humo del cigarro que fumaba.
- ¡que cruel! Tu fiel amigo viene desde las tierras las peligrosas a verte y tú me tratas así ah eso me dolió- el rubio fingió limpiarse unas lagrimas con un pañuelo.
-idiota, te viniste de colado con murata y Farlan- acuso sabiendo que los tres eran hermanos por lo tanto el menor siempre se les pegaba en los viajes- no necesito que presencien esta farsa- menciono destilando ira
-shizuo tu…- antes de poder terminar el sonido de las carrosas llegando llamaron la atención de todos los presentes, kida volvió a su lugar mientras los semes se colocaron a la derecha de la madre ancestral que estaba al pie de la cascada.
De la carroza descendieron tres hermosos donceles. Por tradición los jóvenes debían usar una túnica blanca tallada con detalles dorados y un cinturón que les hacia una hermosa silueta, así como un broche de dos rosas que representaba a el clan Ross.
Con cuidados los tres jóvenes caminaron algo nerviosos y con un sonrojo adorable hacia sus parejas quien por primera vez desde que los conocieron estaban anonadados por la pureza que aparentaban.
-“¿Cómo que un tipo normal? ¡esta que se cae de bueno!” pensó Farlan observando la belleza del castaño…
Al llegar sus respectivas parejas los tomaron de la mano como debía ser y se posicionaron frente a la rubia quien deposito un casto beso en la frente de cada uno.
-por favor tomen un tarro- ordeno la rubia dirigiéndose a los donceles, cada uno tomo un tipo vaso redondo y lo sostuvo entre sus manos- introdúzcanse en la cascada y lléguenlo con esa agua- pidió
Los jóvenes donceles alzaron su túnica hasta un poco mas debajo de los muslos y con cuidado se adentraron al lago para llegar a la hermosa cascada cristalina.
Obedeciendo a la rubia llenaron los tarron y al volver su vestimenta se mostraba casi transparente dejando al descubierto su esbelta y hermosa figura. Las miradas para disgusto de algunos estaban posadas sobre los jóvenes donceles quien no cabía de la vergüenza
- dénsela a sus parejas- cada joven paso el objeto a los licántropos quienes bebieron todo el contenido- esto representara que la voluntad de mi amado lucian vive en ustedes. Solo el podrá romper esta unión..-sentencio la mujer para después proseguir.
-ahora Para ustedes será el comienzo de una vida espero que llena de alegrías… representantes del clan Ross ¿aceptan el destino que les ha impuesto?- cuestiono con vos severa
-si… aceptamos- contestaron aun con dudas
-representantes del clan Lycan, ¿aceptan desposar a estos jóvenes?
-…- por un momento parecieron vacilar, pero al final asintieron sin muchas ganas.
-si nadie se opone a esta unión los declaro-antes de poder terminar una voz firme sonó por todo el lugar
-¡yo me opongo!
Todas las miradas se voltearon hacia la persona proveniente de esa melodía, mientras que los jóvenes Lycan abrían sus ojos desmesuradamente… esto no podía estar pasando.
Continuara….