El pelinegro separo sus labios sin apartar la mirada de ese sujeto de cabellos llamativos deslizo su dedo indice por su mejilla derecha comprobando que no era una fantasía más de sus locos sueños, era real, esa facciones los embrujaban como en el pasado cuando se negaba aceptar sus sentimientos ¿Como enamorarse del hermano menor de tu mejor amigo? creció viéndolo como un familiar después cambiar su percepción, su cariño se convirtió deseo paso mucho tiempo luchando contra si mismo, al final cedió porque creo que valía la pena romper una amistad por salvar por un amor pero se quedo solo cuando ese niño lo abandono, una mueca se formo en sus labios.
—¡Oh! eres real .—Fue lo único que articulo para soltar aquel contrariado personaje, HimChan dio un paso al interior del departamento para enfrentar a YongGuk que miraba desde el pasillo.— ¿En que momento piensas comenzar a reírte ? —Lo cuestionó, Bang colocó a su espalda a Jun.—¿Es divertido humillarme? aquí están los estúpidos documentos que me pediste.—Lanzó la carpeta sobre la mesa a mitad de la sala.—No debes preocuparte por mi tu hermano terminó conmigo hace tiempo ahora ya tengo a alguien más.
Se dio media vuelta para salir por la puerta sin dirigirle una mirada al angustiado chico que observaba en silencio la escena, hay veces que nuestras decisiones con el tiempo adquieren un peso imposible de sostener, los intereses aumentan y ciertamente nos damos cuenta del error cometido, cuando se abandona un amor creyéndolo ya inútil, necesario en nuestra nueva vida es un desacierto que pesa demasiado, nunca se deben tomar decisiones cuando se es demasiado feliz o nos encontramos a la deriva del dolor, esas elecciones se convierten en cadenas que arrastraremos el resto de nuestra existencia, el joven de cabellos llamativos corrió hacia su habitación tratando de contener la rabia, el llano por haber observado de frente las consecuencias de su falta.
—Creo que lo he arruinado todo.—Soltó de golpe el CEO para ir a la puerta del cuarto donde su hermano ingreso.—Lo siento JongUp, yo no sabía que él salía con alguien más.
—No me importa.—Contesto el menor tratando de mantener el llanto, nunca pensó que le doliera tanto el saber que fue superado con suma facilidad.— No tengo ánimos de hablar con nadie, déjame solo por favor.
JunHong observó con un gesto de cuestionamiento incrustado en su cara, Bang dejó escapar un suspiro para sujetarlo del brazo y llevarlo a su recamara donde le contó lo perverso, cruel hermano mayor que fue, él alentó a JongUp a irse a estudiar al extranjero le apoyo para dejar atrás Corea y todo lo que representaba, la distancia suele ser el villano principal de muchas novelas rosas esta vez no fue la excepción, el menor al verse rodeado de tantas tentaciones decidió romper su noviazgo con HimChan, quería experimentar sin cargo de conciencia, ser libre peor nunca creyó en las consecuencias, cuando alguien ingresa a una sección de tu corazón, como un paracaidista con el tiempo ya esa área no perteneces a ti sino a ese intruso y aunque pase el tiempo ni toda la libertad lograras borrar la zona conquistada por el ladrón.
—Eres un verdadero idiota.—Soltó de golpe el castaño sorprendiendo al mayor.— Ellos se amaban debiste aconsejar a tu hermano que hablará con la verdad, qué le pidiera a Him esperarlo no actuar como un niño inmaduro que vota su juguete porque parece encantado con los del aparador de una lujosa tienda departamental.
—Yo incremente su soberbia, no me agradaba que ellos estuvieran juntos, HimChan es años mayor que él, era extraño verlos tomados de la mano demostrando amor no fraternal.— Bajó la cabeza por primera vez sentía vergüenza de sus actos, ante la acusatoria mirada de su amante se percibía como un bicho, una cucaracha.— Ahora veo todo con otros ojos admito que me equivoque pero estaba celoso, perdía a mi mejor amigo y a mi hermano al mismo tiempo.—Elevó la mano para sostener la del menor.— Ayúdame a resolver esta situación, tu pareces ser bueno con este tipo de complicaciones.—Besó el dorso con ternura.—Eres una clase de san Valentín uniendo parejas que se aman.
Jun se sentó en el regazo del mayor lo rodeo del cuello con ambos brazos acercó sus labios para besarlo, era la primera vez que ese hombre le solicitaba ayuda, no en algo mundano o vago sino en una situación interna, familiar, lo guardó en su pecho, amar no es el hecho de expresar una palabra en voz fuerte sino la capacidad de sentirlo, transmitirlo con gestos mudos, verse reflejado en esas orbes marrones era saber un secreto escondido, era correspondido todos sus sentimientos eran bienvenidos por ese receptor quien descansaba la mejilla en su pecho, ahogándose con su aroma, asintió lentamente a su petición sería capaz de bajar una estrella del mismo firmamento con tal de verlo sonreír, él le daría todas esas emociones que le hacen falta para llenar su mundo de colores, sería la luz en las penumbras, no contaba con objetos materiales pero si con una voluntad capas de mover montañas y atravesar mares.
—Ya me las ingeniaré para ayudar a tu hermano.—le susurro depositando un beso en esas hebras negras.—Yo lo voy arreglar ese amor roto, querido amo yo cumpliré todas tus fantasías, en el sentido que sea.
JunHong se armaba de valor para tocar aquella puerta de madera dejo escapar un suspiro aunque se encontraba decidido a cumplir su promesa no olvidaba el enorme error que cometió en la mañana, rasco su cabello con nerviosismo inseguro de como iniciar una conversación intima con un completo desconocido al cual no le agradaba, cerró los ojos para recordar la dulce petición de su amo, la esperanza impregnada en sus besos.
—JongUp ¿Quieres que te pida algo para comer ? ya pasan de las 3 de la tarde y no haz salido de tu habitación todo este tiempo.—Titubeo después que Bang confesará sobre la broma su valor desapareció junto con su odio al nuevo personaje.—¿Te sientes bien? Creo que HimChan—hyung miente sobre tener a alguien más lo he visto quedarse hasta muy altas horas en la oficina, siempre come solo.
El jovén de cabellos llamativos se puso de pie fuera de la cama donde descansaba, no le agradaba ese niño perverso que gemía sonoramente y recitaba obscenidades cuando le hacían el amor, lo tenía catalogado como un vulgar sujeto pero le interesaba la información que tuviera sobre HimChan, su efimero corazón no se hacia a la idea de haberlo perdido regresó a Corea con la firme idea de recuperar el tiempo perdido, era un tonto egoísta, un desalmado soberbio que merecía no ser recibido pero debía intentarlo, caminó a la puerta y giro la perilla para dejar ingresar a ese castaño quien usaba una sudadero y un pantalón de mezclilla roto, los moretones, mordiscos continuaban siendo visibles a los ojos de cualquiera.
—He pedido algo de comer espero te guste conozco los gustos de YongGuk ¿Son similares ?—Up asintió invitándolo a sentarse en la cama a su lado.—Creo te importa más la información que tengo del director Kim.—Recibió un movimiento afirmativo.— He pasado muchos días hasta altas horas en la oficina de YongGuk.—Sus orejas se enrojecieron al notar la mirada acusatoria del chico, Up mantenía su semblante serio continuaba desacreditando esa inusual relación.— No es bueno conversando con otras personas solo les dirige la palabra cuando es estrictamente necesario, es amable y caballeroso con las chicas pero no coquetea, es como si no tuviera inclinación por alguien en especial, pasa la mayor parte del tiempo en su oficina trabajando duro, no creo que tenga una relación nadie soportaría ser relegado a segundo termino.
—Cuando iban al colegio él y mi hermano tenia una fuerte base de fans, en San Valentin recibían cajas y cajas de chocolates al igual que notas de amor, confesiones en cartas, un par de veces hasta fotografías de chicas en poses sugerentes.—JongUp miraba a otro punto de la habitación como si las palabras se transformaran en imágenes que él era capaz de ver dibujarse en las paredes.—Him era amable escuchaba sus confesiones pero se negaba a corresponderles debido a que su corazón pertenecía a alguien más, mi hermano era todo lo contrario las ignoraba dejándolas con la palabra en la boca a veces no entendía como las mujeres podían sentir cariño por alguien tan cruel.—Un suspiro escapo de sus labios apretados.—Yo fui quien se confesó a Him, fue en mi cumpleaños èl me dijo que cumpliría cualquier capricho egoísta, le pedí besarme, me cuestiono la razón porque pedía algo tan tonto, confesé amarlo y sin esperar respuesta lo bese, salté sobre él como un animal en celo.—Una sonrisa tonta surco su rostro húmedo por lagrimas antes limpiadas.— Él me correspondido el beso y supe que sentía lo mismo.
Ese chico dio inicio a un conjunto de anécdotas graciosas, de historias que avergonzarían a los protagonistas si supieran que sus propios secretos fueron expuestos en una par de burdas bromas, la tensión en los dos personajes desapareció cuando se soltaban a reír al recordar ese
JunHong descubrió lo agradable que era ese nuevo individuo, amable, sonriente cuando olvidaba la relación que su hermano mayos sostenía con el castaño, pasó la tarde escuchando historias sobre la niñez del CEO, su primera cita, novia formal, siempre fue un ser excepcional en el colegio, la vida, el trabajo, llenando de orgullo a su Familia, a sus antepasados pero perdiendo su identidad, su propio deseo personal, las relaciones pasaron a segundo, tercer y hasta último termino, no poseía atracción sentimental a otro ser humano, la necesidad carnal la satisfacía cuando se le presentaba con una pareja casual que conquistaba en cualquier club nocturno, de igual manera escucho en silencio la historia de amor desarrollada entre el Director Kim y ese universitario quien se encontraba perdido, sin rumbo, llevaba en la mano el corazón expuesto con una enorme herida incapaz de sanar.
—Hay veces que cierro los ojos y claramente escucho su voz, recuerdo su presencia a mi lado, el calor que me inundaba sentirme amado pero entonces vuelvo a la realidad.— Susurró mirando el horizonte avergonzado de sus propios pensamientos.—Admito que me equivoque pero solo quiero hablar con él, tener el valor de pedir su perdón y confesar que aún continuo amándolo si esta enamorado de alguien más lo aceptaré pero antes de cualquier decisión debo escuchar de su boca las respuestas de todas las preguntas que quiero hacer.
JunHong prometio organizar una treta para que ambos personajes tuvieran oportunidad de conversar sin interrupciones, JongUp continuaba sin confiar en ese extrovertido sujeto pero debía admitir que le encantaba ver a su hermano actuar como una ser que tiene calor en la sangre, la forma que sus mejillas se sonrojan, acto tan inocente, poco probable en expresar en ese rostro de piedra pero que Jun lograba sacar con suma facilidad, ellos eran algo más que compañeros de sexo algunas noches ni siquiera mantenían relaciones los escuchaba conversar en la sala de sus actividades cotidianas, como si fueran una ¿Pareja? ¿Matrimonio? esos días fueron reveladores, saber que pronto Guk se casaría le causo conmoción, de igual manera compredío el extraño juego que se libraba.
Bang YongGuk tomaba asiento en un sillón en una pequeña sala de espera observaba por los enormes ventanales los salones de entrenamiento que se encontraba en el piso inferior, sorpresivamente el CEO había tomado como hábito el recorrer el edificio en ciertos horarios, celebrar reuniones en salas alrededor de la zona de ensayos, muchos empleados quedaron en shock al notar que visitaba los estudios para observar las actividades que ejecutaban sus subordinados la mayoría creía que el hombre cambio su esquema de trabajo para integrarse más al ámbito profesional, convertirse en un líder en lugar de un jefe pero todo era especulación la única persona en conocer la verdadera razón era él, Bang chasqueo la lengua al notar que nuevamente ese chico caminaba a un lado de su amante, parecía llamarse Kibum, era uno de los candidatos más fuertes para ser lanzado como modelo y actor de la empresa, dejó escapar un gruñido al notar que el hombre posaba su brazo encima de los hombros del castaño en sus ojos se notaba el deseo secreto de un depredador apunto de atacar a su víctima, saco su móvil para marcar.
—Hola, he terminado mi reunión ¿Quieres salir a comer fuera?—Cuestionó sin apartar la vista de su objetivo quien se alejaba un poco de su “cariñoso” amigo que le molestaba por averiguar con quien hablaba.— Tengo antojo de ir a comer algo de pasta ¿Qué te parece si vamos al restaurant Italiano que tanto deseabas ir ?
—La idea suene genial pero quede salir con un amigo ademas debo volver temprano ya que tenemos ensayo en la tarde.—Se excuso separo el celular de su oído para murmurare a su compañero que lo dejara contestar.—¿estas ahí?
YongGuk finalizó la llamada sin darle respuesta, ¿Porqué prefería ir a comer con ese sujeto? ¿Porqué comer en un negocio de quinta categoría cuando podría acompañarlo a un establecimiento de primer mundo? ¿Porqué ese tipo antes de él? chasqueo la lengua molesto, se puso de pie para dirigirse a su oficina si continuaba observando esa escena terminaría con un terrible dolor de cabeza como otros días, odiaba sentirse relegado por otro individuo golpeo la pared al verse solo en el elevador ¿Qué era esa sensación?¿Porqué le faltaba aire? si fuera más débil de voluntad en ese momento hubiese salido corriendo para alcanzar a la pareja golpear el fino rostro de ese sujeto y prohibirle a Jun volver a acercarse a otro ser humano, llevo una de sus manos a su frente ¿Qué clase de pensamientos retrogradas tenía? esa era la forma de actuar de primitivos que no saben dominar sus instintos, él siempre fuer recto, pulcro con sus acciones sin tener que recurrir a comportarse como una bestia pero su corazón latiendo a varias revoluciones por segundo le incitaban a dejarse liberar de ataduras moralistas y reclamar los suyo, abrió los ojos sorprendido al encontrar el significado de ese ahogamiento mental a eso llamaban ¿Celos, él conocía la definición porque los vivió con su hermano pero esta vez era diferente, las facciones de su rostro se contrajeron, una sutil brisa golpeo su rostro para traerlo a la realidad caminó hacia su oficina, él no seguiría el papel de un cavernícola, él era más sutil, más cruel, nunca iniciaría una pelea con su amante de frente pero si le enviaría un mensaje.
JunHong se despedía con un fuerte abrazo de su amigo Kibum, le agradaba ese sujeto, era amable, dulce, caballeroso y gracioso bastante contrario al carácter tosco y orgulloso de su “amo”, por sus aprisionados labios se deslizo un suspiro habían pasados dos días desde la vez que Bang le colgó el teléfono aunque después se disculpo por su falta de educación, el CEO no volvió a llamarlo a la hora de la comida, de igual manera escucho que debutarían un grupo razón por la cual se encontraba bastante entretenido a eso le añadía el escándalo de uno de sus actores el hombre pasaba la mayor parte de su tiempo entre reuniones, conversaciones y citas con su futura esposa, ingreso al elevador descubriendo que el aparato se detenía en el segundo piso donde ingreso HimChan, el pobre hombre llevaba un par de bolsas negras debajo de sus hermosos ojos.
—¿Que rayos haces?.—El hombre grito al notar que Jun apretaba un botón y detenía el movimiento ascendente de la cabina.—Niño tonto ¿Qué pretendes?
—¿porqué no hablas con JongUp? ¿Porqué cada vez que logramos tenderte una trampa lo ignoras? .—Le pregunto de golpe sus intentos habían fallado terriblemente cuando lograba que ese hombre y Up compartieran habitación sin interrupciones el director simplemente guardaba silencio y evadía los ruegos del menor.—¿En verdad no lo amas? Habla de frente dile todos las maldiciones que haz guardado en tu alma, destrozado, escupe el veneno pero no lo sigas almacenando, no lo acumules hasta podrirte porque no solo te dañas a ti sino a él también.—Le grito frustrado, el enfermaba ver como un individuo pisoteaba los sentimientos de su “cuñado”.—Créeme que lo estas lastimando, lo he escuchado llorar todas las veces después que lo abandonas si ya no sientas nada por él deja que te supere, habla de frente pero no sigas con este estúpido juego que día a día lo desarma, lo rompe y se queda sin un pedazo, ten el valor de enfrentarlo.
El mayor quitó la mano del castaño del tablero de control para dejar que el aparato siguiera su curso tenía miedo, estaba furioso, ¿Con qué cara JongUp aparecía de la nada ? si, lo admitía ser frío con él era su forma absurda, tonta de vengarse, de desquitar esa rabia contenida por el tiempo de soledad, intento olvidarlo, sacarlo de su cabeza con otras personas pero fue imposible cada nuevo pretendiente era comparado con él, con su forma de ser, cada una de sus citas fallaba catastróficamente porque su orgullo le requería olvidar pero su alma no, esa sección de él continuaba atada al recuerdo de un malagradecido , continuaba amándolo, las puertas de elevador se abrieron en el último piso, JunHong dio un par de pasos hacia afuera después de cruzar el umbral fue detenido por un brazo.
—YongGuk ha decidido anular el debut de tu amigo Kibum, piensa sacarlo de la empresa—Habló seriamente.— ¿Up esta sigue quedándose con ustedes?.—Jun asintió para sacar unas llaves y entregárselas al hombre.— Gracias, Guk no es bueno cuando siente celos.
Jun se giró para observar al mayor pero las puertas se habían cerrado, YongGuk estaba ¿Celoso? miro su teléfono que no paraba de sonar era sin duda su amigo, leyó los mensajes enviados previamente, en ellos le confirman la información dicha por el director ¿Qué diablos pasaba con su amante?