Era mi ex. Era mi ex. Era mi ex. Era mi ex. Era mi ex. Era mi ex. Era mi ex. Era mi ex. Era mi ex. Era mi ex. Era mi ex. Esas palabras quedaron resonando en la cabeza del pelirrojo, se quedo mirando a Furi casi como si hubiese visto a algo deforme y extraño.
-Es… ¿Es en serio? ¿Y lo besabas?
-Pues si pero pocas veces ¡Espera! ¿Qué tiene eso que ver?
-Por lo impresionado que te veías cuando yo te besé la primera vez, pensé que era tu primer beso.
-Bueno es que…nunca pensé que alguien como tu tan impresionante se fijara en algo como yo.
- Lo dices como si fuera una persona inalcanzable, quizás no eras lo que tenía planeado para mí, pero yo estoy feliz que seas mi prometido. Sé que eres mi elección correcta.
-Sei…
-Hay algo que quiero saber ¿Ya no eres virgen?
- ¡Sei! Aun lo soy por suerte.
-¿Sabes que casi terminas siendo un omega? ellos tienen genes que convierten a su pareja de turno en un omega ¿Lo sabías? Son una especie de Alfas que pueden convertir a cualquiera en un omega, incluso a la clase S que es versátil como nosotros.
-Si, aunque en ese momento no, pero nunca me acosté con él.
-¿Cómo te hiciste novio de esa persona? Digo si es que puedo saber.
-Lo conocí cuando hace dos años, en ese tiempo lo veía jugar básquet en una cancha y le pedí que me enseñara pues parecía muy hábil y quería impresionar a una chica, el lo hizo, pensé que era una persona buena pero algo arrogante y me declare después de un tiempo de conocernos. Sin embargo apenas nos hicimos pareja siempre quería que tuviésemos sexo y…-El pelirrojo trago saliva.-Yo siempre me negaba pues sentía que algo mal había en el rubio, por lo cual terminamos, además al final me di cuenta que siempre era muy abusador con los que a su parecer eran inferiores, incluso a mi me trataba de poca cosa, no lo note hasta que me separe de este.
-Lo siento si alguna vez te e hecho sentir presionado.-
-No Sei, contigo no es presión, supongo que es normal que sientas ganas, digo tenemos un compromiso aun más fuerte.
El pelirrojo lo abrazo suavemente.
-El asunto es que quiero matar a ese degenerado que se atrevió a tocarte sin permiso, como se atreve…
-Créeme no eres el único, yo lo detesto, me da asco y terror…y –Cerro la boca de manera brusca-Bueno olvídalo.
-¿Qué cosa?
-En el pasado él y sus amigos trataron de violarme.
Lo dijo tan rápido que quien tuviera un oído común no hubiese escuchado una mierda, pero Akashi sí que había escuchado. Su ojo cambio y la otra personalidad del pelirrojo salió mirando al castaño sorprendido y enfurecido por esa información.
-No te preocupes Kōki, me encargare de ello-El castaño se asusto al ver a Bokushi, sin embargo este lo tomo del mentón y lo beso de manera apasionada, lamiendo su lengua, explorando su boca mientras lo pegaba a él, en un principio Furi no supo cómo reaccionar, pero sin embargo no se había negado, aunque no había correspondido del todo.-No me temas, jamás lastimare a mi prometido otra vez.
-Akashi-sama.
-Solo dime Seijūrō-Delineo los labios del chico con uno de sus dedos-¿Exactamente en qué tipo de metal se convierte esa persona?
-Oro…
-¿No me digas que es Nash Gold Jr? –El castaño asintió- Bien, me encargare de que ese metal quede bien fundido, nadie tocara a Kōki de nuevo, te lo aseguro.-
-Pensé que me odiabas Aka…digo Seijūrō.
-No, te ganaste mi respeto y además tu olor me fascina-Le da un suave beso muy cerca de sus labios- Pero hoy no, hueles mucho a ese metálico, te pego su olor.
-Me iré a bañar así que no te preocupes. ¿Te bañas conmigo?-Ofreció de manera amable al heterocromatico que solo lo miro sonriente.
-No, si voy contigo voy a tentarme demasiado al verte.
-Lo dices como si fuera alguien muy atractivo.
-Lo eres para mi, basta con eso. Eres mi sexy prometido. –
Se relamió los labios tentado por la invitación, pero no, ya lo disfrutaría en el momento en que a este le llegue el celo, será aun más placentero.
Realmente Furi está empezando a creer que tuvo suerte al haberse topado en la vida de Akashi. Con él se sentía valorado, deseado, querido, era bonito sentir eso.
-¿Kuro-chin estas bien?
-Si ¿Por qué la pregunta Murasakibara-kun?-Pregunto el peliceleste algo confundido.
-Porque estas medio transparente desde que hablaste con uno de los chicos de la tienda, siempre e visto que Kuro-chin hace eso cuando se pone nervioso ¿Ese tipo te molesto? ¿Quieres que lo golpee Kuro-chin?
-¡No! Digo, estas equivocado, fue todo lo contrario…-El peliceleste se puso más transparente aun, en vez de mostrar emociones o sonrojarse solía desaparecer de manera involuntaria pero no completamente así que simplemente parecía un fantasma.
-Aah creo que entendí. ¿Qué tal si me acompañas mañana también Kuro-chin?
-Hecho.- No sabía porque pero se estaba sintiendo muy atraído a esa persona. ¿Sera que los instintos saben cuándo es el indicado? El peliceleste no lo sabía.
Y una semana después estaba esperando allí en el centro de la ciudad de los cambiaformas animales llamada la ciudad Sakura, el chico pantera aguardaba a que el modelo saliera de la sesión de fotos.
El rubio se tardó en salir pues muchas chicas le habían pedido autógrafos y más de alguna se le había insinuado, aunque amable a Kise no le atraía ninguna, simplemente el olor de ellas no era suficientemente atractivo. Hasta que por fin el chico perro fue a reunirse con la pantera quien ya estaba perdiendo la paciencia.
-¡Por fin! Con lo que tardaste quizás lleguemos cuando Akashi ya haya ganado.-Mencionó el moreno caminando con rapidez al estadio donde se celebraba el torneo.
-Lo siento… ¿Eh? ¿Akashicchi? ¿No que jugaba Furihatacchi?-Si, el rubio le tiene respeto al chihuahua por vencer a Akashi aunque fuese por accidente.
-Es porque Akashi puede tomar el lugar del otro ya que están comprometidos ¿Recuerdas? –El moreno sonrió de lado-Ese Akashi es astuto, no es como si hubiese perdido en verdad.
-No creo que sea por eso, aunque bueno, quizás sí. A Akashicchi no le gusta perder.
-Por cierto Kise, sé que has estado investigando sobre los clanes de animales ¿Podrías averiguar un poco del mío, el clan de las panteras? La verdad la información que tengo es escasa, pero creo que tengo que hacer un ritual especial, aunque no sé específicamente de qué.
-Oh, cuando gustes Aominecchi, no hay ningún proble-
-¡Cuidado con el agua!- Grito alguien pues bomberos estaba por ahí usando agua para un incendio y acto seguido el rubio termino mojado y convertido en perro de pelo amarillo.
-¡Tsk! Kise no nos retrases.-Tomo la ropa mojada del rubio y camino más rápido, esperando a que el perro Golden retriever lo siguiese.
Y en el enfrentamiento, quién diría que justo le tocaría jugar contra este sujeto, pero Akashi pensaba que era una buena oportunidad para demostrarle su lugar a aquel infeliz.
Todo había empezado normalmente parecía un juego normal, pero Nash no era un rival fácil para hacerle frente, a pesar de todo ambos se terminaban robando el balón constantemente, encima que ambos podían lograr que el otro cayera, era una cosa casi equivalente.
-¿Así que tu eres el prometido de Little pet? -Dice mirando de reojo al chihuahua que miraba directamente al pelirrojo, pues prefería no hacer caso del rubio solo estaba preocupado-¡Ja! Un gato sin garras, un monito rojo, un…
-Cállate, no me interesa lo que alguien como tú me tenga que decir- Trato de atajar el balón, pero el rubio convirtió su cuerpo en oro empujándolo peligrosamente cerca del límite.
-¡Hey! ¡Eso es trampa! –Reclamo el castaño.
-No, no lo es.-Dijo el árbitro-Pueden usar cualquier cosa mientras estén allí.
Furihata apretó los dientes molesto, luego una angustia se planto en él: ¿Qué pasaba si Akashi perdía de nuevo? ¿Tendría que comprometerse con Nash?
Akashi miro a su pareja y le sonrió con suficiencia aunque fue por solo unos segundos Furihata lo supo; Su prometido ganaría de eso estaba seguro.
Había observado bien los movimientos de su oponente, aunque su potencial era fuerte y su fuerza más allá de cualquiera de los cambiaformas comunes, típico y exclusivo de los metálicos, tenía una debilidad, podría haber sido el tiempo si se tratase de un combate simplemente, pues este tipo de personas solo se podían transformar un par de veces en su vida si no esta se acortaría más. No era otro tipo de debilidad, Akashi corrió corriendo en forma de zigzag , sin embargo le hicieron caer con un ankle break, cuando el rubio estuvo de anotar el pelirrojo salto y le quito el balón de un manotazo atrapándolo con rapidez con su otra mano y anotando por su lado. Había ganado.
Fue golpeado fuertemente por el rubio en el estomago. El árbitro descalifico a Nash pero este solo quería lastimar al pelirrojo, no le importaba nada más. Furi se interpuso mostrando los dientes y gruñéndole fieramente al rubio, su instinto de perro le decía que debía proteger lo suyo como fuese a pesar de la clara desventaja de ser un pequeño perro. El pelirrojo aparto a su novio suavemente sonriendo amplio.
-Te e demostrado que soy superior a ti Nash Gold ¿Quién es el inferior ahora? Tus golpes no demuestran nada más que no sabes perder.
El hombre de oro que había vuelto a la normalidad aun tenía ganas de golpear a esa persona, sin embargo solo hizo una mueca incomoda.
-A la próxima si te venceré, aunque me reiré mucho cuando te frustres porque ese bastardito, ese perro no tenga jamás copulación contigo, porque es una puta frígida. – Hizo un gesto de escupir solo para asustar solamente y se volteo hacia sus compañeros.
Akashi quería matar a ese imbécil, nadie insultaba a su novio enfrente de sus narices no, nadie lo hacía, así que fue hacia este porque realmente esa escoria necesitaba conocer su lugar. Furi iba detrás de el pelirrojo tratando de evitar una locura, pues escucho el rugir del pelirrojo nada bueno saldría de ello.
Y así paso que de nuevo la torpeza del castaño hizo lo suyo en una escala del cuadrilátero principal este no la piso y empujo sin querer a Akashi quien empujo a Nash quedando en un romántico beso con Silver su amigo y compañero.
El chico de oro y el de plata se quedaron mirando un momento ¿Acaso un nuevo sentimiento había surgido en ellos? Sin embargo…
-¿Por qué me besaste idiota? No recuerdas que soy un Alfa ¿Acaso eres anormal?
-¡No soy anormal! Tienes cara de omega, putita.
Y empezaron a golpearse entre ellos al combate se metieron otros cambiaformas metálicos que en realidad los iban a detener y terminaron peleándose también.
-Vayámonos Kōki, creo que al final se terminaran matando entre ellos.
-Al parecer así es…
Caminaron a la salida con los pocos espectadores que aun quedaban y vieron llegar a un moreno con el perro rubio.
-¿Ya acabaron? ¿Lo ves Kise? ¡Te demoraste demasiado!- El perro ladro y luego hizo un aullido lastimero.
-Supongo que ganaste tu Akashi ¿No?
-Obviamente. Bien, un gusto verlos Daiki y Ryōta, pero ahora me retiro con Kōki a casa.
-Nos vemos.-Dijo el castaño dando una reverencia y siguiendo a su prometido con dirección a su hogar.
Y en casa después de unas horas Akashi estaba jugando al ajedrez con su pareja de manera tranquila aunque el pelirrojo apenas podía le ganaba de inmediato a Furi quien se frustraba rápidamente por perder y terminaba gruñendo.
-Ya no quiero jugar más.-Se cruzo de brazos el chihuahua molesto-¡Soy malo en esto!
-No te enfades cariño, si quieres puedo enseñarte a hacerlo bien.
-¿Lo harías?
-Por supuesto- Lo abrazo- Me gusta cuando tu olor solo tiene rastros del mío, al parecer ese ex tuyo solo quería fastidiar, esa forma de hablar de ti fue despreciable no creo que seas frígido ni nada parecido.
-¿Y si lo fuese?-Pues la verdad ya estaba pensando en que quizás las palabras de ese sujeto eran ciertas.
-No lo creo simplemente te metiste con un sujeto que ni sabia como tratarte. –Cerró los ojos y luego miro al castaño-Por cierto me pareció temerario que le hicieras frente, pero me gusto eso.
-No pensé, solo fue mi instinto, um Sei ¿Estás bien del estomago? ¿No deberíamos ir al médico?
El pelirrojo negó.
-No, estoy bien.
-Espero que no te estés haciendo el fuerte solo para no preocuparme.
-Eso sería una estupidez. Te lo diría, aunque quizás si vaya después, solo para que estés tranquilo.
-Gracias.
-Gracias a ti Kōki por preocuparte ¿Sabes? Me gusto lo salvaje que te ves enojado y estoy un poco "emocionado"-Su interlocutor lo miro preocupado- Tranquilo, no haré nada que no quieras, pero al menos déjame compensarte la preocupación por mí. Te demostraré que no eres lo que ese sujeto dijo.
-¿Qu…?-Pero antes de que Furihata dijera algo sintió las manos del pelirrojo en su entrepierna y cuando lo quiso detener sintió la húmeda y caliente boca ajena en su intimidad, lo cual le hizo sacar un ruido placentero, de a poco iba creciendo y expandiéndose en cada movimiento que su pareja hacia para estimularlo, la forma en que movía su lengua y lo delicioso de aquella sensación…
…Le gustaba, demonios que le gustaba. No quería mirar pero no podía dejar de ver a Akashi haciéndole sexo oral, estaba disfrutándolo, pero no era suficiente su cuerpo le pedía un estimulo mas fuerte todavía, aunque por ahora se estaba dejando llevar totalmente, jadeaba, sus piernas se tensaban al igual que su cuerpo, iba a llegar al orgasmo podía sentir las succiones con más energía al igual que las lamidas, sin querer había empezado a mover las caderas dejándose llevar empujando hacia la boca ajena con cada vez más velocidad y entonces…acabó. A diferencia de lo que pudiese pensar el castaño, Seijūrō siguió allí tragándose el espeso líquido que seguía saliendo con cada movimiento. En ese momento la puerta se abrió mostrando a un hombre con el mismo tipo de mirada que Akashi.
-¡Vine a hablar contigo Furihata Kōki!
Al ver la escena el hombre mayor se quedo mudo…El pelirrojo se separo tragándose el resto de semen para poder hablar.
-¿Qué haces aquí papá?-
Continuará…