Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Traición a la sangre por kaoryciel147

[Reviews - 294]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Los veo en las notas finales. Advertencia: Muerte de un personaje ?

 

Capítulo 21: Dolor y traición

Después del intercambio entre Obito y Kakashi, la situación parecía saldada entre ambos. Era un suceso inusual y marcaba precedente en el clan Uchiha: ¿Una pareja enlazada buscando romper el lazo? Más aún, ¿una pareja destino decidiendo que no estarían juntos? La opinión estaba dividida, muchos creían que era digno de admiración que se atrevieran a siquiera intentarlo, otros que era una aberración que solo traería problemas al clan. Para la mayoría de Uchihas adultos, la pareja elegida por el destino eran sagradas y debían de estar juntas. Para ellos, no estar juntos era como retar al Dios. En su cosmovisión, cada persona nacía unida a otra y no simplemente era algo romántico, sino que posiblemente había una razón de trasfondo, un objetivo para que esas dos estuvieran enlazadas. Esta situación les llevó a preguntarse si el motivo por el que eran destinados solo fue unir ambos pueblos…

—¡¿Qué demonios intentas hacer, Obito?!—Interrumpió una voz demandante la calma de una habitación en el castillo Uchiha.

Obito había estado paseando su mirada entre algunos libros pornográficos que había adquirido en su última salida del clan mientras con su mano sostenía una copita de sake.

Aquella imagen encendió más la ira de Fugaku. Su hermano menor estaba cada vez más hundiéndose en la pornografía y el sake. Al principio pensó que solo le hacía falta tomar un día entero hasta el desmayo para resurgir, lo toleró pues cualquier cosa era mejor que verlo llorar patéticamente en los rincones del castillo o detenerlo entre varios alfas para que no fuera por Kakashi.

—No entiendo a qué te refieres. —Soltó con fastidio el alfa menor.

—Pediste permiso para cortejar a la joven…

El gesto de Obito no cambió en lo más mínimo. Nuevamente dirigió su mirada a las imágenes del libro.

—Lo hice ¿Y qué? —Respondió hosco sin mirar a su hermano. — ¿No decías que debía de seguir el consejo de ese infiel?

Nuevamente volvían a ello. Por supuesto que le había aconsejado que buscase el amor en alguien más. Su hermano no tenía por qué seguir amando a un omega que no lo correspondía, aunque fueran destinados.

—Kakashi no te fue infiel. —Replicó cansado.

—¡Lo ha sido!

En ese instante, Obito lanzó el libro y la copa de sake al suelo. Sus ojos estaban enrojecidos.  

— Los he visto, están juntos de nuevo. Tan rápido.

Confirmó que los betas que había enviado a seguir a su hermano le habían contado la verdad: Obito se escabullía en las noches para seguir a la pareja. Era otra noticia que había sido un escándalo al completo. Un omega había rechazado a su alfa destino del cual portaba una marca para decidir tener una relación con su antiguo amante.

—Él te dijo que retomaría su relación. —Argumentó.

Se acercó lentamente a su hermano. A diferencia de Obito, a él le costaba demostrar sus emociones, lo cual era perfecto para ser líder, pero sabía que su hermano menor necesitaba a su hermano no al líder Uchiha.

—Sí, pero quise imaginar que no era verdad. —Murmuró Obito mientras sus lágrimas caían una tras otra. Se le había partito el corazón cuando los vio tomados de la mano. ¿Acaso Kakashi no sentía esa quemante desolación por no verlo? — Él no sintió nada por mí.

Para Fugaku era casi imposible asegurar que su hermano y aquel joven eran destinados. Realmente, admiraba y a la vez enojaba que Kakashi fuera tan indiferente con su hermano. Es decir, como compañero líder, Kakashi era perfecto, frío, calculador, sabía tomar decisiones rápidas, fuerte, veloz, tantas cualidades, aquel joven había nacido para ser líder de un clan shinobi sin duda.

—Tú sabias eso. Por lo que veo sigues enamorado de él. —Resopló con tristeza al ver como su hermano tenía las orejas caídas.

—Hermano, estoy enlazado a él. ¿Te has puesto a pensar qué sentirías si alguien te impidiera estar cerca de Mikoto? Peor aún ¿Qué Mikoto te rechace visceralmente? ¿Qué prefiera a otro alfa antes que a ti? Y más allá de ser mi omega, lo amo completamente.

Era muy difícil de responder. Mikoto estaba a su lado por su voluntad propia y ambos vivían en perfecta armonía. Por supuesto, algunas veces, peleaban, pero eran trivialidades. Se complementaban tan perfectamente que agradecía cada mañana al destino por tener a aquella omega despertando a su lado todos los días. Así que solo pudo desviar el tema hacia donde era urgente.

—¿Por qué estas ilusionando a una joven inocente y a una familia entonces? No es justo que uses a alguien.

Obito se quedó en silencio pues su hermano tenía razón. Había intentado aferrarse a alguien desesperadamente. Y aquella chica era joven, atrevida, era de la nueva generación que no le daba tanta importancia a la pareja destino.

—Si quieres liberarte, puedes pedirle a alguien que este contigo sin obligaciones. O puedo darte permiso para ir a un burdel. No necesitas engañar a alguien, hermano.

Su hermano estaba en lo cierto. Normalmente los Uchiha tenían relaciones libres hasta encontrar a su destinado o una pareja correcta. Pedir permiso para cortejar era indicio de querer ir muy en serio, previo matrimonio inclusive.

—Tienes razón. —Necesitaba saber. —¿Cómo está Kakashi? Solo lo he seguido un par de veces, pero seguramente siente mi presencia como yo cuando lo tengo cerca. Él dijo que lo hacía por mi bien ¿acaso no solo me estará alejando? ¿Aparentando que está con Yamato?

—Está bien. Hermano, no te ilusiones. Kakashi no ha preguntado por ti. No le importó saber que estuviste cortejando a alguien más.

La garganta de Obito se secó. Se sentía furioso y destruido.

— Se está dedicando a entrenar a Sasuke. Le ha agarrado cariño. Sasuke aprende mucho de él. Sus misiones siguen siendo exitosas, aunque las he reducido porque quiero que entrene a Sasuke.

Parecía que la vida de Kakashi iba bastante bien, más de lo que pensó. Deseó verlo, habían pasado meses sin verlo a detalle. También deseo envolverlo en sus brazos y olfatear su aroma desde su cuello. Ese ardiente deseo fue evidente para el alfa mayor.

—Ahora mismo está en la aldea. Debes controlarte, por favor.

Pero el alfa pantera interno solo se quedó con la idea de que su omega estaba cerca. Necesitaba llenarse con su imagen al menos: Detallar su hermoso cabello blanco, sus esponjosas orejas de lobo y esa cola felpuda, su porte elegante y si estaba con los niños quizás lo vería sonreír un poco.

—Puedo darte permiso ahora mismo para que te vayas, Obito.

—¿Eh?

Para Fugaku fue evidente que su hermano no iba a controlarse más. No deseaba un enfrentamiento público ni algo similar. Era menester que su hermano se alejase unos días y respirase aire nuevo.

—Es lo que haré. No hay misiones para ti por el momento y acabas de regresar a una. Te doy permiso de irte al burdel.

—No lo deseo. —Replicó. Lo que necesitaba era ver a Kakashi desesperadamente.

—Creo que te vendría bien. Te daré dinero para que lo gastes inclusive. Tanto como para que compres los servicios de la mejor Oiran, hermano.

Obito agachó la cabeza. No tenía idea de siquiera podría acostarse con alguien. En las noches aun acudía su memoria Kakashi para sus fantasías sexuales. Solo deseaba fundirse nuevamente con su cuerpo. A veces parecía que se encontraba con él en sueños, como si el omega le llamase y él moría por intoxicarse con su aroma.

—Gracias, hermano. —Aceptó sabiendo que estaba cerca de ir por Kakashi.

Dentro de la aldea había un pequeño prostíbulo. No era demasiado costoso, aunque más parecía una taberna que un prostibulo. Ya que algunas veces acudían personas buscando tener sexo con otras que estuvieran libres. En el caso Uchiha no había nadie en contra de su libertad, las que trabajaban ahí recibían su paga, los que iban como personas libres conseguían lo que querían y nadie se reconocía. Sin embargo, su hermano le había ordenado irse fuera de la aldea y buscar en los prostíbulos más caros. No era muy común en shinobis acudir a uno, ano ser que estuvieran recopilando información, después de todo esos prostíbulos podían costar lo que recaudaban en misiones durante un año completo.

Aceptó el dinero que le fue ofrecido. Era excesivo, como para pasar tres días completos con una oirán experimentada. Fugaku , en otras circunstancias, jamás le habría dado tanto oro para algo tan banal como aquello. Sin embargo, cuando estaba de camino hacia el exterior, el aroma de Kakashi le atrapó. 

Siguió el aroma de Kakashi. Supo que estaba en el bosque y sintió la presencia de Sasuke con él. Sonrío ampliamente, no podría escapar de él.

Quedó sobre una rama de árbol observándolos. Le estaba enseñando a Sasuke como utilizar el ninjato. Ya no eran con palos de bambú sino con ninjatos reales. Su sobrino ganaba habilidad.

Kakashi paró el entrenamiento. Sasuke cayó de rodillas agitado.

—Debes aprender a controlar la respiración, Sasuke. —Le indicó Kakashi calmada, sin siquiera haber sudado.

—Por supuesto, Sasu-chan, sino despertarás a todo el castillo que tengas que atacar. —Aportó Obito mientras se dejaba caer.

El peliblanco sabía de su presencia desde que lo tuvo en cierto rango.

—Saluda a tu tío, Sasuke. Tienes un momento de descanso para recuperarte.

Sasuke corrió hacia su tío Obito y le saludó con cierta formalidad, pero después sonrió y buscó con la mirada entre las pertenencias del mayor.

—¿No tienes algún onigiri de tomate, tio?

Obito sonrió. Sacó algunas monedas del bolso con dinero que le había dado su hermano y se la dio a su sobrino. Era necesario que estuvieran a solas con su ex pareja.

—Ve y compra algunos. De hecho, invita a Sai que ya debe estar por salir de su entrenamiento con Mikoto.

El pequeño omega asintió con una sonrisa y luego giró su cuerpo hacia su entrenador. Debía de pedir permiso. Kakashi ladeo su rostro. Estaba seguro que el alfa buscaba que ambos se quedasen solos. Suspiró pesadamente, rechazarlo era demasiado difícil, más con la marca en su cuello quemándole.

—Tío Kakashi ¿Puedo ir? —

—Puedes, pero no demores. Tómalo como tu merienda y vuelve. Debes de continuar, aún nos falta practicar con la katana media.

El pelinegro menor asintió contento, antes de salir giró de nuevo hacia su maestro.

—Cierto… el tío Yamato ¿le digo que venga?

—Si lo ves, dile que estaré en casa al anochecer. —Respondió con simpleza el peliblanco.

Ignorando por completo a Obito tomó asiento en una roca con las piernas cruzada mientras sacaba una libreta para apuntar los detalles de la práctica de Sasuke. Siempre debía de entregar un reporte a Fugaku.

—¿Por qué Sasuke le llama “tio” a él? —Preguntó Obito intentando contener su ira.

Por supuesto, había dado la propina para poder quedarse a solas con Kakashi. Y todo iba perfecto hasta que escuchó a su pequeño sobrino llamarle ¨tío¨ a quien no lo era. No le molestaba que llamase así a Kakashi. Escucharlo era perfecto pues, para él, Kakashi seguía siendo su omega. Pero sintió el subidón de furia al escuchar como su sobrinito llamaba tío a Yamato.

El maestro enfrentó con la mirada al alfa.

—Sasuke decidió llamarle así y a Yamato no le molesta.

—¿Por qué se le ocurrió llamarlo así?

—Sasuke es un niño, aun me considera su tío. Y cuando se enteró que Yamato es mi pareja decidió llamarlo como tío también. —Explicó.

“Mi pareja”, Obito quedó perplejo. Su mirada se dirigió hacia donde Kakashi tenía su marca. Esta se encontraba cubierta con un pañuelo.

—¿Te avergüenza la marca que te di?

—¿Tiene algún sentido que hablemos de esto?

Obito se acercó, le hizo soltar la libreta y tomó sus manos. La llevó a la boca para besárselas. Aunque aquella mano estuviera callosa por el manejo de la katana y un poco sucia por el entrenamiento, el alfa se las besaba con mimo. Sus ojos felinos veían fijos hacia los del lobo blanco. Kakashi supo que debía alejarse, sentía como si el otro presionase contra él.

—Por favor, Kakashi. Necesito saberlo. No puedo dejarte ir.

Olvidaría ese trago amargo. No le importaba si se habían vuelto pareja de nuevo: Kakashi tenía su marca, era su omega por sobre cualquier cosa. Estaba dispuesto a luchar nuevamente por él.

—Escuché que ibas a pedir la mano de una muchacha, bien por ti. —Interrumpió el omega temblando levemente.

—No es así. Estaba confundido.

El omega no quería aceptar que sintió una pulsación de alivio y que estaba muy cerca de abrazar al alfa.

—Entonces sigues siendo como un niño. —Soltó, liberando sus manos del toque ajeno. — ¿No pensaste que quizás lastimaste a aquella muchacha?

El alfa dio otro paso hacia él, presionando aún más con su aroma.

—Sí, pero estaba dolido. Quería vengarme de tus palabras. Hacerte ver que puedes perderme de verdad. —Le advirtió.

Había esperado que quizás funcionase, darle celos podría ayudarle, pero Kakashi seguía luciendo indiferente hasta que una sonrisa altiva se dibujó en sus labios.

—Y vienes aquí rogándome nuevamente.

—¡Estamos enlazados! —Replicó el alfa sorprendido. —¿No sufrirás nuevamente en tus celos? ¿No me llamarás?

Sabía que Obito buscaba provocarle. Y aunque esa parte más instintiva luchaba por gritar que sí se había sentido celoso, que deseo reclamar su atención nuevamente, se contuvo. También tenía miedo de los futuros celos ¿qué tan doloroso serían? Mientras se cuestionaba todo aquello, el alfa consiguió acorralarlo contra un árbol. Sentía su aliento picarle en la boca, a la vez que cuerpo se estremeció de deseo.

—Empecemos de nuevo, kakashi.

El peliblanco giró la mirada. No era capaz de verlo a los lejos y negarse a su amor.

—No.

—¿Por qué no? Te necesito, sé que tú también.

Buscó besarlo, pero el omega se rehusó. Así que e sujetó de las manos, llevándolas hacia arriba. Lo sintió pelear, pero solo ardió de deseo al tenerlo acorralado.

—Podemos acompañarnos en los celos y volver a salir como en esa semana. —Le propuso.

Sintió a Kakashi agitado, incluso tenía un leve rubor en sus mejillas. Por un instante sintió esperanza.

—No…Obito, deja de usar tu aroma en mi contra. ¿acaso no puedo decidir?

—Kakashi, ahora mismo estoy desesperado. ¿No puedes entenderlo? Eres mi omega y estas resistiéndote a mí. Solo dime que lo intentaremos: Déjame enamorarte de nuevo. Antes de todo lo sucedido, en esa semana ¿acaso no me dijiste que tus sentimientos por mi habían cambiado?

Todo se lo decía en voz baja, grave y casi sobre la piel de su cuello. El omega comenzaba a calentarse. Si no se alejaba iba terminar por besarlo y entregarse a su alfa. Y con ello aceptaría toda esa irreal propuesta. Kakashi estaba convencido que solo se harían daño si siquiera lo intentaban.

—¿Me has perdonado sobre lo del cachorro?

El agarre de Obito sobre las muñecas ajenas vaciló.

—¿Estás dispuesto a tener una pareja que siempre anteponga el bienestar de su gente a nuestra relación? ¿Qué no desea tener cachorros?

—Yo… puedo intentarlo.

El omega vio la inseguridad en los ojos del alfa y le dolió. Pero esa era su realidad: el destino se había encargado de unir a dos personas tan distintas.

—No es cuestión de intentar. Tú no estás capacitado para ello. Yo necesito una pareja que me apoye, me sea leal, estable, que no intenté manipularme con su aroma como lo haces ahora.  Déjame en paz, Obito.

—¿Qué harás en tus celos? No podrás …nadie más podrá tocarte, solo me llamarás a mí.

—Mikoto me ha dicho que hay posibilidades para romper nuestro enlace.

De solo imaginarlo, Obito tembló desesperado. ¿Alguien iba a romper su lazo con Kakashi? No, no podía permitirlo. Ese enlace era lo único que le daba esperanza de que ellos volvieran.

—No me ha dicho nada. —Replicó.

—Aún no hay nada seguro, pero estoy seguro que lo encontrará. Mikoto es muy sabia, sabrá como romper esta maldición, Obito. Porque para mí, tu marca es solo una maldición. La odio.

Cada vez que se acercaba a  Kakashi, desde que se conocieron, solo obtuvo dolor y rechazo. Fue solo en aquellos días que fue un sueño el de vivir juntos, compartir tiempo y amarse. Kakashi no le aceptaba. Era casi irreal y ridículo que pudiera resistirse a él, que no pudiera comprenderle, que pudiera dañarle, pero lo hacía. Y lo amó por eso, tanto su lado instintivo como su lado racional, ambas partes habían amado a Kakashi por completo. Cuando se pelearon luego de la pérdida de su cachorro, sentía su lado racional e instintivo pelear uno contra otro y eso no había cambiado hasta ese instante porque ambas partes coincidieron: Kakashi no merecía su amor. La parte instintiva deseaba castigar al omega con su indiferencia y la parte racional no deseaba seguir sufriendo.

Apretó el bolsito de monedas que su hermano le había dado: Quizás, perderse en un prostíbulo no era una mala idea.

—Mi hermano me dio permiso de ir a un prostíbulo. —Comentó, alejándose del tentador cuerpo de Kakashi.

—Bueno, no es lo que esperaba, pero bien por ti. —Replicó Kakashi sobándose las muñecas.

El pelinegro sonrió con amargura.

—Estamos enlazados, me pregunto si podré hacerlo.

—Podrás.

—¿Cómo lo sabes?

—Estuve con Yamato y pudimos hacerlo sin problema.

—¿Cómo?

—Se le pregunté a Mikoto. Mientras no esté en celo o tú en calor, podemos hacerlo. No tenemos demasiado apego emocional y afortunadamente la marca no fue hecha en celo.

Si algo de sí tuvo alguna duda de su camino a seguir, se acabó: Lo mejor era dejar al omega ingrato que nunca le había correspondido a pesar que arriesgó su vida una y otra vez por él.

—Entonces creo que gastaré todo este dinero en la cortesana más bella o bello para que me satisfaga.

—Bien pensado, Obito. Date la oportunidad, disfruta.

Incluso le sonreía en apoyo. Obito supo que no tenía nada más que hacer ahí.

Cuando lo sintió a buena distancia, Kakashi dejó caer sus defensas, su aroma salió fuerte intentando llamar a su alfa, pero ya estaba demasiado lejos.

—Cálmate—Se dijo así mismo.

En poco tiempo escuchó a Sasuke regresar y se recompuso para continuar con el entrenamiento.

“Es lo mejor para él. Estará bien. Pronto encontrará alguien especial y Mikoto encontrará una cura para este enlace”.

..

Obito viajó hacia uno de los poblados más grandes donde se encontraban los burdeles más caros y elegantes del reino de Fuego. Usó sus habilidades shinobi para parecer un señor de algunas tierras lejanas y desconocidas. De todas maneras, nadie preguntaba realmente.

Estaba decidido a pagar el tiempo de la Oiran más cara y experimentada. Se decía que eran la más bellas y que incluso podían hacerte olvidar de tu pareja más amada o de tu pareja destino. Eso era lo que desease, alguien tan bello que eclipsara el sabor de los labios de Kakashi y su atrayente figura.

Cuando llegó con sus ropas nuevas y elegantes, los sirvientes del local le atendieron rápidamente, dándole buen sake y acomodándolo en unos cojines de seda. La música sonaba festiva. Y se dio paso a las primeras principiantes. Eran muy bonitas, pero en su menta seguía apareciendo Kakashi. Estaba impaciente, quería que se diera paso a las oiran mayores

—¿Por qué hay tanto preludio? —Preguntó impaciente a una de las sirvientas que le atendía.

—Mi señor, ha llegado justamente en la presentación de nuestra nueva estrella. Ella es muy talentosa, suave y tierna. Es la venta de su debut como cortesana.

Las aprendices para Oiran, llamadas Kamuro desde que eran compradas por la casa de placer, debían de debutar para convertirse en yuujo, el estrato más bajo de una oiran. Solo siendo una Yuujo podía iniciar su ascenso en busca de convertirse en la flor líder, la cortesana más hermosa y deseada que sería capaz de cautivar el corazón de cualquiera. Para poder dejar de ser Kamura debía de vender su primera vez al mejor postor. No eran consideradas piezas caras sino dejaban de ser vírgenes. Y es que las Oiran más caras, poderosas y cotizadas eran omegas y en pocos casos betas con una gran experiencia de amantes, sabían todas las posiciones del amor creadas e incluso inventaban nuevas. Eso las hacía populares y subían sus precios, tanto que a los servicios de una Oiran solo podían acceder los líderes más acaudalados de la Tierra de Fuego. Así que comprar a una virgen era mucho más barato, pero importante para la debutante.

No le dio demasiada importancia. Pues estaba ahí para comprar a una omega de su edad, no a una chiquilla sin experiencia. Estaba seguro que solo la Oiran de la casa podría absorber su mente.

Sin embargo, cuando la joven se presentó con esa inusual mirada cálida e inocente su corazón se estremeció. Sus cabellos eran de color castaño y sus ojos brillantes del mismo tono, de piel blanca y apariencia pequeña llamó la atracción de un grupo. Y es que la mayoría ahí estaban para disputarse el precio de las cortesanas más experimentadas o de alguna novata que se viera apasionada y no inocente como ella.

Obito estaba fascinado. Su corazón fue devorado lentamente por el sonido del shamizen, por esa pequeña sonrisa y el tintinear de las horquillas en su cabellera. La acompañó con su mirada y aplausos en todo su debut, mientras cantaba y tocaba el shamizen.

Al finalizar, se retiró y la puja por su compra de esa noche inició. Solo el grupo que se había quedado fascinado empezó. Obito no se quedó atrás. Olvidando su primera idea de comprar una Oiran experimentada se decidió por ella. Le apodaban “Ai” pero se preguntaba cuál sería su nombre verdadero. Deseaba oírlo, su corazón latió asustado ante la perspectiva de no lograr comprarla para él.

En esos momentos el precio por la muchacha subió rápidamente, pues Obito no se rendía. Se entercó firmemente en obtenerla. Finalmente, pagando una inusual suma, ganó la puja. Sonrió ampliamente y fue felicitado por las sirvientes que le habían asistido. Se retiró con ellas y dejó la cantidad de monedas que había ofrecido.

Luego, le señalaron un camino cubierto de pétalos rojos, le acompañaron hacia la habitación. Dentro de ella, el aroma del incienso era poderoso. La encontró con un aroma temeroso. Era una omega preciosa e inocente. Se suponía que las omegas desde los diez años eran entrenadas en el acto sexual, se mantenía su virginidad de cuerpo, pero en su mente ya se sabían el kamasutra completo. Aun así, el alfa supuso que era muy diferente saberlo en la mente a experimentarlo.

—No tengas miedo. Yo...si deseas no hagamos nada—Se apresuró a decir.

Sin embargo, rápidamente comenzó excitarse producto del incienso. Ella también pues tenías las mejillas sonrojadas. De esa manera, los dueños de la casa de placer se aseguraban que ella cumpliese con su trabajo y no tuvieran que devolver el dinero.

—Debo escalar…—Susurró ella.

Se refería a su rango. Seguir siendo virgen en su mundo era deshonroso. Y ser dejada intacta por su primer cliente sería burlado por sus compañeros.

Obito le besó en la boca y se dejó llevar por el mágico y dulce mundo de la inexperiencia de ella. Nunca había estado con alguien virgen de hecho. Su prometida había sido muy experimentada y ni hablar de Kakashi. Ella era todo lo contrario a ambos y aquello le fue satisfactorio. Su alma finalmente encontraba un refugio cálido.

Aquella noche la adoró con su boca y mano cada parte de su pequeño cuerpo. Le enseñó lo que era yacer con un alfa, fue paciente y dulce, cariñoso como no podía serlo con su omega destinado. Y no rememoró a Kakashi. Comenzó a plantearse que su hermano tenía razón.

Habiendo tenido el corazón destrozado se refugió con ella. Por dos semanas pagó su precio diario. Y no siempre terminaban encamados. Algunas noches solo conversaban, tomaban el té y ella le bailaba.

—¿Cuál es tu verdadero nombre, Ai?

Ella pareció dudar, pero aquel cliente le había dado una experiencia sin igual. Había hablado con sus compañeras y compañeros, para la mayoría su primera experiencia había sido pésima.

—Mi nombre real es Rin.

………

 

Dentro de su boca se removieron sus lenguas. Los colmillos de Sasuke estaban presentes. Los suyos también, en medio de aquel beso Sasuke terminó por morderle la lengua sacándole sangre.

—Esto me recuerda a lo poco cariñoso que eras antes.

Sasuke solo respiraba agitado, le abrazó con más fuerza e inclinó su cuello. Sin pensarlo, el alfa aspiró con mayor fuerza el aroma que brotaba de aquel lugar. Deseaba tanto morderlo, pero primero debía aparearse a él.

—Al fin serás mío.

—Naruto, Naruto…

Su pareja repitió su nombre varias veces, y le abrazó con una fuerza que desconocía. Sintió su nariz olfatear fuertemente por todo su cuello. Sonrió por las cosquillas que le producía sus mechones de cabello.

De repente, no pudio reír sino gritar de dolor: ¡Sasuke le había mordido en el cuello hasta sacarle una herida! Le separó de inmediato.

—Eres demasiado salvaje, gatito. Yo queriendo irme despacio y tú me acabas de morder. Con razón dicen que eres una pantera.

El omega se separó, sus mejillas estaban sonrojadas. Se veía hermoso y tierno.

—Está bien, gatito, puedes morderme cuanto quieras.

—¿De verdad?

—Por supuesto, soy tu alfa y pronto seré yo quien muerda ese bonito cuello que tienes…

En segundos, sintió su lengua un tanto adormecida. Esta parecía hincharse y ya no pudo articular palabra. La herida que Sasuke le había hecho en el cuello picaba y dolía. Además, sintió nauseas. Sus piernas no pudieron sostenerle más. La vista se le hacía nebulosa. Quiso gritar por ayuda, pero de su garganta no salió sonido. Y solo escuchó:

—Eres un idiota, Naruto Namikaze.

Alzó débilmente la vista hacia su consorte. Este ya no tenía rubor en sus mejillas, ni su mirada lucía acuosa. Es más, nunca había visto en un par de ojos una mirada tan fría, ni siquiera en el campo de batalla.

—¿Qué?...

Su lengua estaba entumecida, solo se escuchaban balbuceos. Se preguntaba que sucedía ¿por qué Sasuke le miraba de aquella forma?

—Namikaze…—Murmuró el pelingro. —¿Eres un alfa? Ni siquiera puedes notar que no estoy en celo de verdad.

Sasuke se acomodó su ropa. Siseo a un tono casi imperceptible y fuera de sus aposentos escuchó un débil quejido. Sus guardias que se habían apostado para asegurarse que nadie ingresase a la habitación de su amo, cayeron de la mano de los sirvientes Uchiha.

Las puertas fueron abiertas y por estas ingresaron Mikoto, Sai, Orochimaru y Karin, la cual tenía a su cachorro en brazos.

—Vaya, casi le sacas un pedazo de cuello. Recuerda que aún lo necesitamos vivo. —Bromeó Sai.

Tantas preguntas en la mente de Naruto que se sentía aún más nauseabundo. Todos los presentes iban vestidos de negro al completo, solo sus rostros estaban a la vista.

Sasuke soló alzo la mano y Sai le tendió una bolsa de ropa. El omega se cambió frente a todos sin expresar emoción alguna; mientras tanto, Orochimaru y Mikoto alistaban una serie de objetos que Naruto solo había visto en los templos sagrados, pero a los cuales no había prestado mayor atención. De pronto sintió un corte en su hombro. Quien debió convertirse en su omega le había clavado un puñal en este.

—Dense prisa. —Ordenó Sasuke.

Karin continuaba cargando al cachorro y repartió algunas órdenes a dos sirvientes Uchiha mientras Sai vigilaba el exterior.

Naruto sentía el pie de Sasuke presionar sobre la herida con saña y fuerza. Estaba confundido, nauseabundo y adolorido, sus fuerzas habían sido drenadas de una manera irreal. ¿Acaso lo habían envenenado?

¨Son shinobis…¨

Era demasiado tarde, intentó removerse entrando en pánico mientras intentaba captar el aroma de Sasuke, pero no encontraba nada de él. Luego el de su cachorro, este parecía nervioso. El cachorro inició a llorar desconsoladamente.

—Sasuke, creo que quiere que lo cargues. —Interrumpió Karin.

—A esa pequeña bestia mantenla alejada de mí.

Incluso Karin pareció sorprendida, pero solo asintió, alzando la voz para que se terminase de armar el altar.

—Cómo puedes…—Naruto quizo reclamar, sus ojos lucían llorosos, sus venas casi estallaban en sus cuencas.

El alfa se sintió espantado ¿Qué cosa quería hacerle a su cachorro? No entendía nada de lo que sucedía, solo que su cría le necesitaba urgentemente, rugió rompiendo el silencio. Pero, antes de poder levantarse, Sasuke le clavó otra puñalada.

—Naruto-kun está reaccionando al llanto de Memma. Karin, duérmelo.

Karin murmuró algunas palabras desconocidas para Naruto y el llanto de Memma se hizo menor hasta que desapareció. Se asustó aún más. Deseó girarse hacia Sasuke pero este no dejaba de presionar su pie en la herida de su hombro. Memma también era cachorro de Sasuke, entonces ¿por qué lo lastimaba?

—Está todo listo.

Sasuke sujetó a Naruto y le volteó barriga arriba.

—Necesitamos su sangre. —Pidió Orochimaru.

El shinobi omega sacó su daga y cortó sin piedad de la palma de Naruto. Luego le lanzó la daga a Orochimaru, quien la atrapo y la clavó en el suelo, en el medio de un dibujo, el cual era una espiral parecía al símbolo de los Uzumaki.

Orochimaru y Mikoto se tomaron de la mano, sus energías fueron liberadas mientras Karin dirigía el altar. Primero reverenció hacia el altar dedicado a Kurama saludando y luego comenzó a llamarlo y concentrarse en sumergirse en las cadenas que mantenían atado a Kurama.

Naruto sintió un dolor punzante en el vientre, grito desesperado entre balbuceos. Sasuke tomó una venda y se lo metió a la boca, ahogándolo y callándolo en el proceso.

¿Dónde estoy?, se preguntó hundido en la oscuridad de su mente.

—Mocoso idiota. Al fin podré ser libre. Madara Uchiha, has cumplido tu promesa.

El joven alfa no comprendía, solo deseaba ver a su cachorro, salvarlo del desalmado Uchiha.

—Memma.

—Él está bien.

—No lo está, Sasuke va a asesinarlo´tebayo. —Luchó en medio de ese vacío.

—No lo hará. Es nuestra cría después de todo.

—¿Su cría?

—Por supuesto, mocoso. Un omega como él es demasiado para un mortal como tú. Solo fuiste un medio.

 

Su mente colapsó en ese instante. Su parte animal tomó el control y gruñó fuerte: ¨¡Sasuke!¨ Abrió los ojos y se topó con una imagen de horror: De su propio cuerpo fluía una energía entre naranja y amarilla que viajaba hacia su cachorro. Este gorgoteaba débilmente en medio de aquel extraño dibujo. Quienes habían sido su familia política rezaban concentrados, mientras que su prima era quien les lideraba. Sasuke seguía inamovible en su sitio como guardián, sus orejas se removían seguramente buscando señal de guardias. A lo lejos escuchó rugidos y llantos. El castillo de su familia estaba siendo tomado, el olor a sangre llegó.

Y entonces le vino a la mente que Itachi, el esposo de su padre, debía de ser parte del plan. Forcejeó a mas no poder, gruñendo como bestia adolorida. Aquella rara energía comenzaba regresar a su cuerpo. No sabía que era, pero si con ella buscaban debilitarlo y dañar a su cachorro, Naruto decidió no permitir que se la extrajeran, así que desesperadamente intentó atraerla hacia sí nuevamente, aunque no sabía cómo hacerlo. Sai avisado por Sasuke la lanzó una aguja directa al cuello, aquel  pinchazo le adormeció. Un poco de oscuridad ingresó a su vista. Sin embargo, el llanto inquieto de su hijo le despertó nuevamente.

—¡No! —Gritó encolerizado.

Una honda de energía golpeó a Sai que terminó chocando contra la pared. A pesar de ser primo cercano de Sasuke, este solo verificó que estuviera vivo tomando el pulso en el cuello. Luego lo dejó ahí y le dio una patada en la cara a Naruto, apresuró a los demás.

—Kurama, te voy a dar la libertad que quieres, tranquilízate. —Habló finalmente Sasuke dirigiéndose hacia Naruto aunque no le hablaba a él sino al zorro de nueve colas.

“Kurama”

Eres Kurama ¿no eres mi yo alfa?”

Mocoso ¿crees que podrías tener un yo alfa tan poderoso? No me hagas reír. Vamos ríndete para poder irme de una vez con mi cachorro y mi omega

Y entonces finalmente pudo distinguir a su yo animal del zorro de nueve colas.

Es mi omega” Gruño su yo alfa.

Es el mío también. Y soy superior a ti” “Una vez en Memma podré salir libremente y formar mi propio cuerpo. Cuando eso suceda, Madara Uchiha cumplirá su promesa por completo”

Tanta información era abrumadora. Decidió no pensar en todo al mismo tiempo y concentrarse en ponerse de pie, derrotar a los que le retenían y proteger a su cachorro.

—Karin, apresúrate.

La energía continuó fluyendo hacia su cachorro. Gruñó fuerte, furioso. Y entonces la energía dejó de fluir para sorpresa de todos. Naruto logró retenerla.

“¡Oh no! tu maldita bestia no me vas abandonar”, pensó para sí mismo, gruñéndole a Kurama.

— Sasuke, tampoco me vas a dejar’tebayo

Se dio la vuelta con pura fuerza de voluntad de su yo animal intentando doblegar al zorro de nueve colas.

—Sasuke…. maldito traidor. Eres un gatito que merece castigo.

El joven alfa con toda la energía borboteando a su alrededor logró ponerse de pie resoplando. Sentía como el veneno que le habían puesto intentaba roer sus energías, sus piernas se les hacía pesadas de mover.

—No está funcionado, Sasuke. —Comentó Karin. — Solo hemos podido robar una parte de la energía.

De repente, un cuerno que los Uchiha reconocieron como desconocido resonó en el lugar.

—Maldita sea…—Murmuró Sasuke sintiendo sudor frío caer por toda su espalda.

—¿Ahh nos creían tan tontos? —Comentó Naruto riendo aun agitado. — Papá mantuvo en reserva a Ero-sennin. Mi padrino siempre sospechó y nos convenció de callarnos su paradero.  Aun no entiendo bien todo esto, pero es evidente que acaban de traicionarnos.

No pudo ver la expresión en el rostro de Sasuke, pero este emitió un chasquido. Apretó sus puños, temblando de furia ligeramente. Esa energía alrededor del alfa no le pertenecía, era de Kurama. ¿Cómo era posible?

—¡Kurama! —Le llamó con fuerza.

—Ahora mismo estoy sometiendo a Kurama, así que no te molestes en llamarlo. Tú te quedas.

Mikoto y Orochimaru le donaron más de su energía a Karin, quien aplicó más de su poder espiritual y logró doblegarlo, logrando que la energía volviera a fluir hacia Memma.

—Orochimaru, vete. Estás preñado no puedes dar más energía a Karin o será peligroso. —Dijo Mikoto.

Orochimaru asintió, luego de unas murmuraciones la conexión con Mikoto y Karin se rompió. Salió agitado, tosiendo sangre. La cría que tenía en su interior succionaba su energía, por lo que no estaba en todo su potencial y enfrentarse a Naruto podría matar a su propio cachorro.  Por lo cual, Mikoto resistió el peso sola. Drenó toda su energía y se la envió a Karin para lograrla mantener en pie mientras continuaba sudando a mares para seguir robando la energía de Naruto.

—Tu hermano… no puedo responder por él —Siseó Naruto—Mi padre va a matarlo luego de hacerlo suyo.

Una risa maligna escapó de Sasuke. No pudiendo soportar más la ansiedad de oír a su gente muriendo, se desquitó con Naruto: Le dio un puntapié directo al rostro, logrando tumbarlo, luego sacó un kunai y se lo clavó sin piedad en la espalda.

—Tú no nos conoces ni por asomo, Namikaze.

Vaya que no lo conocía. Aun una parte de él creía que todo era una pesadilla.

—Más te vale que nos des a Kurama.

Naruto resoplaba intentando lograr lo anterior. ¿Dónde estaba su esposo? Ese ser que le amenazaba con un kunai no podía serlo. ¿Dónde estaba ese gatito gruñón que se entregaba a él con pasión? No podía ser Sasuke, su Sasuke. ¿o acaso alguien lo controlaba? Solo podía ser eso. Aunque su padrino les había repetido que debían de tener cuidado de todo el poder que los Uchiha habían acumulado, nunca esperó un golpe de estado, una traición tan baja. Además, no comprendía que era exactamente lo que sacaban de él ¿Por qué lo depositaban en su cachorro? ¿Qué cosa era el ser que contenía?

—¿Tú te comunicabas con él´tebayo?

La sonrisa maliciosa de Sasuke se amplió.

—¿De quién crees que es hijo Memma? No es tuyo en absoluto, Naruto. Es hijo del zorro de nueve colas. Lo engendró en mí usándote. Tú eres estéril, por eso no pudiste embarazar a Hinata ni a ninguno de los amantes y prostitutos con los que te has acostado. No podrás embarazar a nadie.

—¡No es cierto!

—Lo es. ¿No es extraño que tengas tantas amantes y ninguna te haya brindado un hijo? Yo fui escogido por Kurama para darle un hijo. Es gracias a él que Memma llegó al mundo.

Naruto clavó sus garras en el tatami. Observó al niño y rugió de furia. Sasuke aprovechó la distracción para clavarle un nuevo puñal en la espalda y tumbarlo.

—Madre, Karin, dense prisa.

Sai seguía en la puerta derrotando a quien se asomaba por la esquina.

—Sai, ve a vigilar que todo hay salido bien para Itachi y Sihisui. —Ordenó Sasuke.

El aludido asintió y marchó con el pequeño grupo sobrante a limpiar el camino.

—Quien debe preocuparse eres tú, Naruto. Shisui jamás dejaría que toquen un cabello a su prometido.

—¿Eh?

Más nombres, más dudas. Este no parecía un plan hecho a último momento, solo guiado por la ambición. En primer lugar, sus armas y vestimenta eran como la de los shinobi. ¿Entonces desde el comienzo todo fue un plan elaborado? ¿Cómo es que un clan shinobi se había mantenido oculto? ¿Cómo es que dejaron ingresar a seres tan miserables y desalmados?

—A mi hermano le daba asco el toque de tu padre. Tiene un prometido que lo espera. Igual que…igual que yo. Esta solo fue una misión

Diciendo aquello clavó con más fuerza el kunai que le había clavado. Naruto gritó, pero de un zarpazo se libró de la pierna de Sasuke. Gritó y su energía se liberó impactando en Karin y Mikoto. Ambas no pudieron mantener la conexión y cayeron al suelo tosiendo sangre. Memma estalló en llanto.

De prisa, Sasuke cargó a Memma y luego lo depositó en brazos de Karin.

Naruto resoplaba apoyado en sus manos y rodillas. Estaba luchando contra el nueve colas.

—Creo que es la mitad de le energía, Sasuke.

En medio de la desesperante situación, otro cuerno resonó. Este era el pedido de reagrupamiento del líder. Así que solo podía tratarse de Fugaku o Itachi.

El joven omega se erizó al completo. Su madre y Karin arriesgarían su vida si lo intentaban de nuevo y probablemente no podrían someter a Naruto de nuevo. Esa había sido una única oportunidad: le habían confundido usando un incienso de jazmín, mientras que él liberó su aroma lo mejor posible. Al ser destinados, el alfa se había concentrado en el aroma del omega y en sus deseos lujuriosos. Solo había un camino por tomar.

—Necesitamos reagruparnos. Itachi o padre nos están llamando. —Miró hacia Naruto que luchaba para ponerse de pie. — Quizás si lo mato pueda ser liberado Kurama

—Hijo, es muy peligroso.

Lo era ciertamente. Si Kurama no volvía tomar el poder de Naruto, podría ser fatal.

—Karin, madre, llévense a Memma ahora. Pónganse bajo cuidado de Itachi y no dejen que venga a buscarme. Yo los seguiré se los juro.

Mikoto asintió, Karin Uzumaki apresó más al niño

—Sé que es tu deber cuidarlo. Lo vas a cuidar mejor que yo inclusive. —Confesó el pelinegro a la sacerdotisa Uzumaki.

Karin se tragó sus preocupaciones. Sin embargo, Memma era su responsabilidad y ahora que había absorbido parte de la energía del nueve colas debía examinar su condición. Junto a su madre, salieron siendo escoltadas por dos miembros betas Uchiha. Solo dos se quedaron a su lado y Sasuke les ordenó ir a liberar a los restantes Hyugas: Hinata, Hanabi y Neji si decía seguir a los Hyuga.

Sus subordinados asintieron. En la habitación que había sido destinada a ser compartida en medio de interminable placer, solo quedó las dos personas que juraron amor y lealtad esa misma mañana.

—Nadie va a irse de aquí, Sasuke Uchiha, te voy a enseñar quien manda.

Era casi seguro que no saldría con vida de ahí, pues Naruto parecía poder controlar medianamente el poder del nueve colas, pero al menos moriría combatiendo por su clan. Estaba seguro que su hermano sí tendría éxito y que de esa manera los Uchiha vencerían.

—Vamos, Naruto, demuéstrame que tienes.

……………….

 

Dejó a Minato totalmente turbado, escéptico de haber escuchado bien. Cualquier otro alfa se enfurecería de que su omega grite el nombre de otro, pero Minato no lograba entender que el omega en el cual estaba insertado gritase un nombre que jamás había escuchado.

—Minato Namikaze.

Itachi le acarició el cabello como si fuera un niño, la respiración del omega seguía siendo agitada, tenía rubor en sus mejillas pero sus ojos ya no eran sumisos ni tampoco apasionados, cargaban con una frialdad que nunca había visto en otro ser humano.

No pudo prevenirlo, sintió los brazos de alguien levantándolo y lanzándolo de lado con fuerza avasalladora.

Este ser vestido de negro le tendió la mano a Itachi quien la tomó, entre ambos se dirigieron miradas difíciles de comprender, confusión, celos, perdón, tristeza, furia, pero detrás de todo ternura.

—Luego arreglaremos cuentas, mi omega. —Susurró la voz masculina y ronca.

Itachi le envolvió con sus brazos sin dudarlo y le dio el beso más apasionado que Minato había visto o disfrutado en su vida, el alfa le apretó desde la cintura correspondiendo.

—Espera, Itachi. —Shisui estaba acorde al estímulo del aroma de su omega en celo. Pero conteniéndose, le tendió una botellita de la cual el omega tomó sin dudar. El aroma a celo fue descendiendo poco a poco. Itachi recobró su entereza y su raciocinio sobre sí mismo.

Shisui giró hacia sus compañeros con quienes había limpiado el recorrido hacia la habitación nupcial.

—Ni una palabra de lo que observaron a nadie bajo pena de muerte por mi propia mano.

Todos los subordinados clavaron una rodilla en el tatami y asintieron jurando.

Minato seguía sin comprender, casi en estado catatónico.

—¡¿Qué demonios? No.… ¿líder?

Izumi ingresó con algo de ropa y ayudó a Itachi a vestirse con rapidez para cubrir aquella vergonzosa desnudes. Mientras que todos tenían amenazado a Minato con sus ninjatos.

—Namikaze-sama, vístase y tome su espada le voy a dar un duelo de honor. Soy un shinobi y pensé que mi pareja lo maté por la espalda, pero le voy a permitir defenderse. —Indicó Itachi serio.

Incluso le parecía más alto y grande del hermoso omega que había tenido en sus brazos.

—¿Qué? ¿Tú? ¿Contra ti? Eres un omega.

El alfa del grupo sonrío ampliamente.

—Este hermoso omega es mi prometido y nuestro líder.

Aun con la vergüenza, el rubio vomitó hacia un lado no pudiendo soportar el mareo que le dio tanta información.

—¿Qué? Fugaku ¡¿qué demonios sucede aquí?! ¿Acaso me has engañado con este joven, Itachi?

Los demás shinobis se miraron entre ellos.

—Parece, líder de la gran Alianza, que aún no lo entiende. Soy Itachi Uchiha, el nuevo líder del clan shinobi Uchiha, y está a punto de enfrentarse a mí por su vida. Tome esta espada y tengamos un duelo, le prometo que mi prometido no va a interferir.

Minato se acomodó la yukata que traía puesta. Se puso de pie, pero no tomó la katana ofrecida. Aún estaba comprendiendo la situación. De pronto comenzó a escuchar estruendos por varios lados, gritos, chillidos y el inconfundible olor a muerte y sangre le llegó: Estaban siendo invadidos en su propia noche de bodas.

—Bueno ya que no desea pelear le daré otro estimulo: Su castillo está siendo devorado, de hecho, creo que el castillo de la alianza ya está bajo nuestras manos y su hijo Naruto está a punto de ser asesinado por mi hermano menor, Sasuke Uchiha.

—Pero…él tuvo un hijo de Naruto …—Comentó mareado, incrédulo.

—Exactamente, nunca fuimos un clan neutral, somos shinobi desde la generación de Madara Uchiha.

El alfa mayor tomó la katana con fuerza y se preparó para atacar. Si era cierto que eran shinobis entonces no merecían ni siquiera que les prestara atención, solo debía asesinarlos y rescatar a su hijo.

—Me disculpará que use métodos shinobi en nuestra pelea, mi hermano es más ávido con la katana.

Shisui se hizo a un lado con los otros subordinados. Era una pelea que por el bien de la reputación de Itachi, este debía de ganarla solo.

La espadas chocaron. Minato no podía creer que el diligente y frágil esposo que estaba tomando fuera quien contrarrestara su espada con igual fuerza. Intercambiaron impactos de espada por algunos minutos que llenaron de tensión a los shinobis.

A lo lejos se escuchó un cuerno que sorprendió a Itachi al no reconocerlo como alguno de sus aliados. Minato, por su parte, sonrío y aprovechó para darle la vuelta a Itachi tumbándolo al suelo, pero Itachi cogió un kunai del cinturón que le había dado Izumi, logrando defenderse a tiempo. Sin embargo, Minato ya no iba con juegos, así que le lanzó una patada en el estómago, para luego apretarlo en el suelo con su pie.

—Veras, pensé que quizá tu padre podría pasarse de listo, así que lo mantuve vigilado por Jiraiya. Nunca lo envíe a la frontera con los Inuzuka. A esos perros los pueedo destruir en cualquier segundo. —El rostro de Minato tenía tanta malicia que Itachi lo desconocía. — Sabrás que mi padrino le tiene muchas ganas. Ante cualquier sospecha le ordené asesinarlo. Claramente, no esperé que tú fueras parte de sus hombres de pelea. Te veías tan hermoso y delicado. De igual forma, no podría haber dejado a tu padre demasiado tiempo vivo. No podía permitir que él te usará como el viejo Hyuga usó a su hija y su sobrino.

Itachi normalmente peleaba con el rostro sereno, pero en ese instante su corazón se aceleró de preocupación por su familia, frunciendo el ceño.

—Shisui, ve por mi padre.

—Itachi

—Es una orden, Shisui. Debo ser yo quien venza a Minato y tú debes dirigir que se extermine a todos. Si no son aliados, asesínenlos a todos. Esta noche no habrá prisioneros. Esa es mi orden. Luego debes ir por Sasuke, protégelo.

En contra de sus instintos, Shisui abandonó junto a sus betas la habitación que apestaba a sexo y ahora a sangre. Le dolía lo que había tenido que sacrificar Itachi, pero más le dolía tener que dejarlo enfrentar a Minato solo. Sin embargo, nada serviría si le daban vuelta a la situación. Tenía una orden e iba a cumplir: sería una guerra sin cuartel.

—Puedes engañar a tu noviecito, pero sé, Itachi, que deseaste mis besos algunas veces.

Itachi no respondió. Dio un giro hacia atrás mientras le daba una patada certera en el mentón.  Era ágil, incapturable y elegante. En un solo parpadeo dio una voltereta hacia arriba para esquivar su espada y a la misma vez le había lanzado un kunai que se le clavó en el muslo. Gritó.

Minato se apoyó en su katana para volver a levantarse. El alfa esquivó los siguientes kunai con su katana, pero el que había sido clavada le escocía de una manera anormal. Estaba seguro que el kunai estaba envenenado. Itachi soltó la katana y solo tomó una espada corta llamado ninjato. La sujetó con ambas manos, se veía como un ejecutor, como un espectro maligno a punto de llevarse un alma.

Chocaron espadas nuevamente, la katana tenía más filo, pero la soltura del ninjato le permitió romper el bloqueo de ambas fuerzas, girarse rápidamente y darle una asestada en toda la espalda. El dolor escocía aún más, cada arma ninja estaba correctamente envenenada y la cura solo la sabían los propios shinobi.

—No puedo creer que metí a los enemigos a mi hogar y al enemigo número uno a mi lecho. —Escupió sangre negra por la boca. El veneno estaba destruyendo su cuerpo internamente. No habría un día siguiente para él, supo con certeza Minato.

—Vuestro error fue acumular enemigos que luego nos ayudaron. Sus antepasados asesinaron a toda la familia de Orochimaru, su aliado cercano Senju acabó con muchos de nuestros clientes, el mundo se cerraba para nosotros. Destrozó a los Uzumaki, Karin Uzumaki nos ayudó, y usted no sabe que su ancestro Hashirama Senju les ocultó que guardaban el poder de kyubi el zorro de nueve colas.

—¡Malditos perros traidores!

Itachi se arrodilló y se acercó al oído del líder Namikaze.

—Es una lástima. Sabe, le mentí a mi prometido, no le estoy concediendo esta batalla por lástima o por su honor, sino porque una vez me protegió de un pervertido hace muchísimos años cuando era un niño y mi prometido también lo era.

Minato recordó a un joven de ojos negros, un niño precioso que había llamado la atención de muchos de los concurrentes. El destino los había presentado hace tanto tiempo, quizás él mismo había cavado su tumba. Si hubiera dejado que hicieran lo que quisieran con aquel niño, si se hubiera tragado su moral y lo hubiera tomado para sí…

—¿Mi hijo que tiene? —Se concentró en ello.

—Tiene a un dios en su interior, el zorro de nueve colas que antes de él lo contenía  Kushina Uzumaki,  la primera en contenerlo fue Mito Uzumaki.

—Kushina jamás me ocultaría algo así.

—Lo hizo porque no confiaba en usted, porque a pesar de ser su omega destino, ella era fiel a su clan y su secreto como sacerdotisa de los Uzumaki. Nagato Uzumaki también lo sabe y la heredera de todos ellos, Karin está de nuestro lado.

—No es posible.

—Es hora del final.

Itachi se acercó con el kunai desenvainado, sin dudarlo, con una frialdad y rapidez increíble se lo clavó en su pecho. No conforme con ello, apretó con más fuerza, enterrándolo al completo hasta que el mango de este quedo enterrado. Escuchó a lo lejos un grito, era su hermanito. Sabiendo que no le quedaría mucho tiempo al gran líder abandonó la estancia. En el camino destrozó a todos los enemigos que se le interpusieron.

 

Notas finales:

Hola!!!! Pues aquí estoy de regreso con una actualización. Wow creo que este capítulo se hace corto , pero pasan muchas cosas. Aun así logré actualizar dos días después de lo prometido en mis redes. El plan es actualizar en quince días, cualquier cambio avisaré por mis redes Kaory-Madness y mi IG del mismo nombre. 

Tuve que investigar algunas cosillas para este capítulo, en especial para la parte de Rin. Algunos atinaron a la idea de que Rin iba a ser ese personaje nuevo que iba a aparecer. Que por qué dije que a Obito le depara un mayor sufrimiento? ¿Por qué creen? Ya sabemos que lo contado ahí es el pasado y que en algún punto del futuro se casa con Kakashi y que en el presente ambos están casados pero su relación no es buena. ¿Será que Rin muere o simplemente no ha aparecido en el presente? ummmmm quiero leer teorías!! Esta primera parte llegará en el pasado hasta cuando Kakashi y Obito se casan, pero no veremos como finalmente termina esta relación si tendrán su happy end o no. 

¿Ustedes creen que Kakashi y Obito al final deben quedarse juntos?

¿Que creen que pasó entre Rin y Obito? ¿Qué hará Obito? ¿Que har Kakashi cuando se entere?

¿Como es que aun con todo se casaron?

Pasando al otro lado de la historia, avise que habría sangre y cosas crueles y pues aquí estamos ¿Minato ya se nos fue?

¿Podrá Sasuke vencer a Naruto? Recuerden que todo lo que ha hecho ahora estuvieron presentes su familia y Karin. 

¿Que porque Karin les ayuda? Su deber como sacerdotisa va mas allá de las decisiones de su clan. Además,sabrán que los Uzumaki no están muy felices con el trato recibido por los Namikaze. Recuerden que Kushina aquí tuvo un hermano alfa llamado Makoto, pero que ha sido relegado aunque su derecho es liderar a los Uzumaki, Minato puso de líder a su primo Yahiko, esposo de Nagato y Konan. Y que Karin es hija de Yahiko y Konan. 

¿Neji se pondrá de lado de los Uchiha cuando comprenda todo o le será fiel a Naruto?

¿Que pasrá con Hinata y sus cachorros?

¿Naruto podría matar a Sasuke?

Por cierto, Memma sí es hijo de Naruto, pero también de Kurama, solo que Sasuke se lo dice para debilitarlo ya que sabe que está enamorado de él y que su ilusión más grande era tener un cachorro, así que adora a Memma. 

¿Qué pasará con Memma? 

¿Qué pasará con Kurama?

En lo personal me gusto escribir a Sasuke siento tan hdpt porque amo esa faceta de él. Igual que Itachi, en general amo a los Uchiha siendo lo que son shinobis. Y pues quería escribirlos tal cual eran los shinobi. Ellos eran fríos, calculadores y su misión estaba por encima de todo. 

Así que espero no odien demasiado a Sasuke e Itachi. Y pues hasta ahpra no hay bajas en los Uchiha ¿las habrá?

En el siguiente capítulo veremos toda la masacre que hay afuera y la pelea entre Naruto y Sasuke. Esta primera parte tendrá hasta el 25, pero los cap 24 y 25 serán especiales hashimada. Así que técnicamente debería acabar en el 23, si no hay algunos cambios. 

Esta historia surgió al estudiar historia japonesa y está inspirada en la era Sengoku o de los estados combatientes con algunos cambios adaptados al mundo de Naruto. Así que esta primera parte esta centrada en esa época, la siguiente parte será en otra. Y se verán las consecuencias de este golpe de estado, de esta traición. Y es ahí donde veremos el memmachara y el mitsuboru. Pero no se centrará solo en ellos sino en los adultos también. 

Memma ya sabemos quien es. Charasuke ¿de donde creen que venga? Mitsuki está creciendo en el vientre de Orochimaru ¿de donde saldrá Boruto?

Nos leemos!!! quiero saber todas sus teorías locas!!  No se olviden de compartir la historia, darle en votar y dejar muchos comentarios. Y siganme en mis redes para estar atentos a las próximas actualizaciones. 

Por cierto, si son fans de mdzs, estoy escribiendo muchos fics de este fandome.

También retomaré mis fics de yuri on Ice Entrenador espartano y Reyes y reinas del patinaje. También retomaré de kuroko no basquet el fic omegaverse De presentes, pasados y futuros. 

Encima de todo ello, voy a subir una historia original omegaverse, histórico. Escribir TS me inspiró en crear mi propia historia original llena de traiciones, intrigas de corte, reinos, batallas y omegaverse. La historia se llamará Crónicas de amor y guerra. 

También quería anunciarles que tengo un proyecto de youtobe enfocado en el mundo friki pero sobre todo en los boyslovers y la cultura japonesa en general. 

¿Podré con todo? Pues espero que sí. Ando muy animada por todas las cosas que aprendo en mi carrera y quiero ponerlas en práctica. Además que hay una linda fan que me está ayudando mucho con la parte de diseño. Ya verán su nueva portada en Traición a la sangre segunda parte y en mi historia original. 

Nos vemos pronto!!

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).