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Unidos por las estrellas por kina_chan

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Notas del capitulo:

Hola a todos! Lamento la demora, es que este més he tenido muchas cosas que hacer para la escuela TuT

Me he dado cuenta que este fic ha tenido muy pocas visitas ultimamente y practicamente 0 comentarios en el capitulo anterior. La verdad que eso me ha desanimado bastante u.u. Sé que muchos diran "Un autor/a escribe para si mism@ y no deberia importarle eso." Sin embargo, recordemos que si bien un fic se publica en una pagina es para compartirlo, para que lo lean otras personas y de paso compartir opiniones y recibir consejos para mejorar. Asi que no tiene mucho sentido decir eso de "solo escribo para mi" cuando el autor sube el fic, a menos que lo escriba y se lo quede guardado en lo recondito de sus carpetas de word o cuadernillos.

En fin, no estoy pidiendo reviews ni hago berrinche por eso porque sé los reviews es algo que autor debe ganarse, y si son reviews para mejorar incluso seria lindo recibirlos porque se nota que alguien lee el fic y se toma la molestia de ayudar al lector y al fic a mejorar. Hasta incluso recibir reviews en fics ya finalizados es lindo, porque hace recordar a un autor la existencia de ese fic que escribio. :,3

Dejando ese tema de lado. Por fin hay conty! Este capitulo estara en el punto de vista de Noah y luego en el de Luis. Este cap se situa como unas semanas despues de lo ocurrido en el ultimo. 

Sin más que decir, que lo disfruten.

Había pasado mucho tiempo desde la última vez que Noah se sentía tan agobiado. Se encontraba sentado sobre la mesa del comedor, con sus libros y apuntes sobre la mesa, resumiendo todo lo que debía estudiar para el día siguiente.  Los días de semana le resultaban sumamente aburridos, estar solo en toda la casa solo con la compañía de un cerdito que lo único que hace es dormir, no era algo que lo entretuviera bastante.

Momentos de soledad y aburrimiento que vivía en esa casa cuando no estaba Joel, le hacían extrañar a como era vivir con su familia. Sus dos hermanitos menores que siempre querían jugar con él, ayudar a su madre a cocinar y ver novelas juntos, y su padre que siempre los hacía reír cada tanto. Era claro lo mucho que Noah amaba a su familia, y eso incluía incluso a sus primos, por eso había decidido ir a vivir allí, para estar al tanto de ellos, sobre todo de Joel.

Noah suspiro cansado, la casa estaba en absoluto silencio y el único ruido que se escuchaba era las voces que provenían de la televisión. Tanto silencio siempre lo incomodaba, por esa razón siempre dejaba la tele encendida, aunque no le prestase atención en lo más mínimo. “¿Me pregunto cómo estará Migue?” Se preguntó, al recodar que era época de parciales, y hasta donde él sabía, los parciales lo estaban asesinando lenta y dolorosamente.

“¿Por qué estoy pensando en él?” Noah negó rápidamente con la cabeza y siguió con sus estudios. Si bien su relación con Miguel había mejorado bastante, no tenía por qué estarse distrayendo pensando en él. Su celular comenzó a vibrar sobre la mesa y a simple vista, pudo deducir que era un mensaje de Javier. Sin embargo, al revisar el mensaje, se dio cuenta de que era Miguel. “Voy para allá.” Noah se sorprendió bastante al recibir ese mensaje, segundos después el timbre de la casa comenzó sonar con insistencia. Noah suspiro y se levantó de su asiento para tomar las llaves que estaban colgadas en la pared y luego salió hasta la reja de la casa hasta encontrarse con Miguel. Ni bien abrió la reja Miguel entro y lo abrazo fuertemente.

-Gracias, gracias, gracias, me has salvado, estoy agradecido. – La cara de Noah se encontraba completamente roja, ese abrazo lo había tomado bastante por sorpresa. Miguel al notar esto lo suelta y se separa un poco de él, para luego entrar a la casa. -Lo siento, pero es que de enserio me salvaste. -

- ¿Y se puede saber porque soy tu salvador? – Le pregunto Noah mientras cerraba la reja para luego ambos ir caminando hacia la puerta principal de la casa.

-Mi hermana y sus amigas están en casa y créeme, es una puta tortura para alguien que está estudiando para los parciales. – Respondió Miguel, a Noah le parecía divertido ver como un chico estudioso ya de veinte años huía de un montón de chicas de secundaria. -Gritan, según Mica algunas de sus amigas se calientan al verme y se ponen a escuchar Maroon Five a todo volumen. No tengo nada en contra de la banda, pero quiero estudiar sin escuchar los gritos tan agudos del cantante, a veces no sé si está aullando como un lobo o si le pellizcaron los testículos como para que gritase. -Noah no pudo evitar reírse de ese último comentario.

- ¿Tanto así te molestan? – Al entrar a la casa Noah cerró la puerta principal mientras Miguel se dirigía a la sala.

-Son una patada en los huevos, no me dejan ni masturbarme en paz con el ruido que hacen. - Comento Miguel mientras se sentaba en una de las sillas del comedor para luego sacar del bolso que llevaba puesto su cartuchera, su carpeta y varias fotocopias. Noah no pudo evitar reírse de las estupideces que decía Miguel para quejarse. - ¿No te molesta si estudio aquí un rato hasta que se vayan? – “¿Me pregunta eso después de haber puesto todas sus cosas sobre la mesa?”

-No, claro que no, siéntete como en casa. – Respondió Noah para luego sentarse sobre su asiento y seguir con sus estudios. -Te ves un poco cansado ¿Estas bien? -

-Sí, es solo que últimos días no he hecho otra cosa que no sea estudiar y eso me está cansando un poco últimamente. – “Lo sabía, él se ve muy cansado.” -Aunque ahora me siento muy bien. – Le respondió con una sonrisa pícara. -Gracias a ti no tengo que soportar al pito de asiático y sus amigas. -

- ¿Por qué pito de asiático? - Noah no podía evitar sentir vergüenza mientras lo decía.

-Porque la tienen pequeña, y yo le digo a mi herma que mide lo mismo que el pito de un asiático. – La sinceridad y la maldad de Miguel lograban hacer a reír a Noah, aunque este sintiese pena por la pobre de Micaela, ya que ella es la que tiene que soportarlo en casa todos los días. -Hola Tepig. -Miguel saludo al pequeño cerdito que se encontraba en el sofá de la sala.

-Ahora entiendo porque te odia. –

-Oye, tú no puedes defenderla, después de todo te estas riendo de eso también porque sabes que es cierto. – Ambos se rieron y luego se quedaron mirándose el uno al otro, logrando así olvidándose del estrés de los estudios por unos momentos. Lastimosamente, el celular de Noah comenzó a sonar, rompiendo así con ese ambiente perfecto que había entre los dos.

-Lo siento, debo contestar. – Respondió Noah al ver que la llamada era de Javier, sabía muy bien que si no le contestaba luego se molestaría.

-Ve, yo iré a la cocina y nos preparare algo para tomar. – Miguel lo miro un poco más serio y le contesto con una sonrisa forzada. Ambos se levantaron de sus asientos, Miguel para ir directamente a la cocina y Noah para contestar su celular afuera. Una vez que Noah salió por la puerta principal de la casa contesto la llamada.

-Hola Javier. -

-Hola amor ¿Cómo estás? ¿Cómo te va en la facultad? -

-Bien, aunque debo estudiar varias cosas para mañana. -

-Lamento interrumpir en tus estudios, pero quería preguntarte que película te gustaría ver este fin de semana así reservo las entradas. – Al escuchar lo muy emocionado y feliz que se sentía Javier al contarle que estaba haciendo planes para pasarlo juntos, no pudo evitar sentirse culpable.

- ¿Este fin de semana? Lo siento mucho Javier, pero no creo que pueda tengo que terminar un trabajo para el lunes y el domingo estaré todo el día ocupado en casa de mi madre porque es el cumpleaños de Felipe. – Noah tenía dos hermanitos, Felipe que cumpliría diez ese fin de semana y Rubén que cumpliría ocho años dentro de unos pocos meses. El proyecto que tenía que hacer para el lunes aún no estaba terminado y el domingo estaría todo el día ocupado en casa de sus padres, con los niños en casa, está más que claro que no podría estudiar.

-Oh, entiendo. No importa, lo dejamos para…-

- ¡Noah! ¿Cuántas cucharadas de azúcar le pongo a tu té? – Justo en ese momento la voz de Miguel lo interrumpió, quien estaba cerca de la entrada principal.

-No te preocupes, yo después le pongo. – Contesto rápidamente. “Por favor díganme que Javier no…”

- ¿Estas con Miguel? – La voz de Javier se escuchaba bastante molesta y seria. “Ya me lo venía venir.” - ¿No era que estabas estudiando? ¿Qué haces con él? -

-Javier, basta. Ya te dije que entre él y yo no hay nada, solo vino a casa porque en la suya no podía estudiar tranquilamente. – Noah suspiro molesto, ya le estaba cansando tener que explicarle contantemente eso a Javier.

-Claro ¿Y tú le crees esa excusa tan tonta? Es más que obvio que fue hasta allí con esa excusa para verte, estoy más que seguro de que está interesado en ti, dile que se vaya. –Noah no podía creer las cosas que se le ocurrían a Javier.

- ¿Qué? No voy a hacer eso, es descortés. Mira, él y yo solo estábamos hablando ¿Si? -

- ¿Entonces el sí puede ir a interrumpir tus estudios, pero a mí me cancelas el único día a la semana en la que podemos vernos? – Con eso último, Javier logro enfadar de verdad a Noah. Nunca antes había visto a Javier tan celoso y actuando como un niño pequeño.

-No es eso. ¿Sabes qué? No tengo ganas de discutir contigo ahora, hablaremos luego cuando se te pase lo idiota, adiós. - Termino por responder molesto para luego cortar la llamada.

Luego de eso, puso en modo avión a su celular, realmente no quería hablar con él hasta que estuviese seguro de que se le pasara lo idiota. Noah entro a la casa y fue directo al comedor, donde Miguel se encontraba colocando sobre la mesa una bandeja que tenía dos tazas y el azucarero. Ambos se sentaron en sus respectivas sillas y colocaron sus tazas enfrente de ellos. La expresión del rostro de Noah probablemente delataría lo muy molesto que se encontraba.

-Sé que no debería meterme en asuntos personales y me disculpo por escucharte, pero se notaba como si estuvieras molesto. – Respondió Miguel para luego agarraba su taza de café y beber un sorbo de ella.

- ¿Cuánto escuchaste de mi conversación con Javier? – Pregunto Noah mientras también tomaba su taza de té con leche.

-Desde que le dijiste que no somos nada hasta que le dijiste idiota. Sé que no debo escuchar conversaciones ajenas, pero estabas gritando. – La cara de Noah enrojeció al instante en que escucho la respuesta de Miguel. Noah ni siquiera pudo darle un sorbo a su té que sintió la necesidad de primero explicarle las cosas para estar más tranquilo.

-Lo siento, es que Javier te escucho y cuando supo que estaba contigo se puso celoso. Ya le expliqué tu y yo somos amigos, pero creo que él aun no lo entiende. – Miguel se quedó callado por unos segundos luego de que Noah terminase de hablar, para después tomar otro sorbo de su café. Noah por su parte, aprovecho para ponerle un poco de azúcar a su té y darle un sorbo.

-Noah, eres el novio perfecto, cariñoso, lindo, atento, amable y te comprometes de verdad en una relación, es imposible que sean infiel. Si ese chico no puede confiar en ti es porque es un imbécil. – Aquel comentario casi había logrado que Noah se atragantase con su té. Escuchar como Miguel lo llama como “el novio perfecto” era sumamente vergonzoso, pero a la vez, le hizo feliz escucharle decir sus virtudes. -Incluso yo fui un imbécil al dejarte ir. –

-Migue… - “No puede ser, Javier tenía razón. ¿De verdad Miguel aún sigue interesado en mí?”

-Aquella vez cuando ese idiota te estaba molestando, yo iba enserio cuando dije que me gustabas. Pero sé cuál es mi posición ahora, tú tienes pareja y si tú eres feliz, me gustaría seguir a tu lado como tú dices, como amigos. – Miguel tomo unos segundos de silencio y luego le sonrió de manera picara. -Aunque si dejas al idiota de tu novio, tomare eso como una oportunidad para conquistarte. De momento no haré nada que te haga sentir incomodo, soy feliz con el simple hecho de verte y hablarte. –

- ¿Desde cuándo te volví a gustar? – Fue lo único que pudo decir y lo había dicho sin siquiera pensarlo. No sabía que decir ni que hacer, estaba muy confuso en ese momento, sobre todo cuando comenzó a emocionarse debido a las cosas que Miguel le decía.

-Creo que nunca deje de amarte. – Miguel miro por unos segundos la bandeja que tenía el azucarero y se levantó de su silla.  -Maldición, me olvide traer las masitas que están en la heladera, ahora regreso. – Hablo mientras se dirigía a la cocina.

“¿Cómo es que lo haces? ¿Cómo puedes? ¿Cómo puedes confundirme? ¿Cómo haces para actuar tan normal después de lo que me dijiste?”

Después de eso, nadie dijo más nada del tema, simplemente terminaron de tomar sus tazar para luego seguir estudiando hasta que Miguel se fue a su casa. Noah estaba insultando a Miguel internamente después de que se fuera, porque por su culpa, no podía calmar los latidos de su corazón y la emoción que sentía debido a lo que este le dijo. Momentos después de que Miguel se fue, Noah tomo su celular y quito el modo avión, para encontrarse con mensajes de Javier pidiendo disculpas por lo idiota que había sido.

“¿Qué diablos se supone que debo hacer ahora?”

*-*-*-*

Si había algo a lo que Luis se había acostumbrado, era a la falta de sueño y eso en su mayoría de veces, era provocado por las pesadillas que tenía constantemente. Siempre había sido así desde la muerte de Federico, pero llevaba tiempo pudiendo descansar bien desde la última pesadilla. Durante todo ese tiempo estuvo buscando una respuesta a ese extraño acontecimiento. Al final, había llegado a una conclusión.

Se encontraba jugando vóley en el club deportivo. Y a pesar de que debería estar más concentrado en donde cae la pelota, su mirada siempre se desviaba hacia otro lado, hacia una persona que se encontraba del otro lado de la red para ser más exactos. Podía ver la emoción de sus ojos, la piel blanca de su rostro enrojecerse por el calor, las gotas de sudor que caían de su frente y como de vez en cuando corría los mechones húmedos de cabello que caían sobre sus ojos hacia un lado porque le estorbaban en su visión.

Luis sabía desde un principio que prestarle más a atención a Joel que al partido en sí, terminaría por cobrarle con un pelotazo en la cara. Y como era de esperarse, exactamente eso fue lo que le ocurrió. El pelotazo le dio directamente en el ojo derecho, ni bien el entrenador vio eso, inmediatamente le pidió a Luis que saliera de la cancha.

- ¿Estas bien? ¿Necesitas un hielo o algo? – Le pregunto el entrenador quien se encontraba sentado en una de las bancas.

-No se preocupe, no fue un golpe tan fuerte, estaré bien. – Luis mantuvo su ojo derecho cerrado por un buen tiempo hasta que pudo abrirlo ya menos irritado. El entrenador suspiro y le señalo la banca para que se sentase.

-Bueno, pero quédate sentado hasta que acabe la hora, no falta menos de cinco minutos. Te vi muy distraído durante la práctica, trata de al menos prestar la suficiente atención en la banca como para evitar otro pelotazo. –

-Sí, lo siento. – Respondió muy avergonzado por lo ocurrido. Justo antes de que la práctica continuara, Joel lo miro desde la cancha y le sonrió antes de que el silbato sonase. Sonara extraño y tonto, pero ver su sonrisa hizo que el poco dolor que quedaba en el golpe que recibió desapareciera.

Durante los pocos minutos que quedaba de juego, Luis siguió con su labor de observar a Joel. Se sentía como un idiota, pero no podía evitarlo, después de todo, Joel era la razón por la cual sus pesadillas dejaron de atormentarle. Desde aquella noche en la que Joel lo despertó y lo abrazo hasta que se calmara, pudo dormir plácidamente durante las noches, con el calor de ese abrazo grabado en su mente y cuerpo.

Sabía que sonaba estúpido decir que gracias a Joel sus pesadillas desaparecieron, ya que era tan solo una posibilidad estúpida que nació de relacionar lo sucedido después de su última pesadilla hasta entonces. Pero, no podía evitar aferrarse a esa idea, ya que después de todo, incluso durante el día pensaba en él.

“Soy un imbécil.” Fue lo que pensó al darse cuenta de que Joel le estaba comenzando a gustar. Quizás se sentía atraído a lo que este había provocado en él y nada más, pero eso no cambiaba lo hipócrita e irónico que parecía esa situación. Por culpa de su homofobia había rechazado y humillado a su mejor amigo, para luego darse cuenta de lo estúpido que había sido al ver que lo último que le dijo antes de que este muriera fuese un “me das asco”. Sonaba muy irónico que años después se empezase a interesar en un chico que en un principio le recordaba a su viejo amigo fallecido, siendo que en un principio había rechazado a este porque era un estúpido homofóbico. Había una respuesta a todo eso y era simplemente una, karma.

-Luis ¿Estas bien? – Le pregunto Joel. Luis se sorprendió al verlo tan cerca que se sobresaltó. Al notar eso, Joel se rio un poco. Se había perdido en sus pensamientos por un largo tiempo pensado en lo idiota que era.  -La hora ya termino Luis, vámonos. –

- ¿Qué? ¿Enserio? ¿Tan rápido? – Pregunto confundido, el entrenador al escucharlo suspiro y fingió como si no hubiese escuchado nada, mientras que todos sus compañeros, incluyendo a Joel, se reían de su reacción.

-O estas muy distraído o ese golpe te dio en algo más que el ojo. – Comento burlándose de él.

-No es gracioso. – “Es todo por tu culpa para empezar.” Luis tomo su bolso y luego se paró de la banca para despedirse del entrenador y luego ir caminando hacia la salida junto con Joel.

-Dime ¿Qué fue eso en la cancha? Tú no eres así Luis, te he visto jugar y no eras tan despistado como fuiste hoy. ¿No será que acaso estas en las nubes porque estás enamorado? – Pregunto con una sonrisa burlona dibujada en sus labios. Luis al escucharlo se ruborizo y desvió la mirada. Los dos se encontraban caminando juntos para ir a la parada de autobús.

- ¡No fue por eso! -

-Tranquilo, solo te estaba molestando, aunque si te lo tomas tan enserio debe ser porque es cierto ¿no? – Siguió insistiendo mientras se reía.

-Que no, no fue por eso. – Contesto ya un poco más tranquilo para no parecer tan sospechoso.

- ¿Volviste a tener pesadillas otra vez? – Pregunto Joel esta vez con un tono de seriedad en su voz. Luis se sorprendió un poco al ver que Joel todavía se acordaba de eso, se veía como si de verdad se encontrase preocupado por él.

-Increíblemente, deje de tener pesadillas desde hace un tiempo. – Luis al terminar de decir eso, recordó que aún no le había dicho lo sucedido en sus pesadillas, por lo que decidió contársela en esos momentos. -Todavía no te conté que era mi pesadilla ¿cierto? Siento que debería decírtelo después de que me vieras llorando y abrazándote como si fuese un niño. -

-No te preocupes, creo que fue normal tu reacción. –

-Yo, estaba soñando con el día en que Federico murió. Mis pesadillas eran siempre iguales, yo como un idiota tratando de evitar que él suba a ese tren, mientras él no me escucha ni me veía, como si fuese un fantasma. – Las manos de Luis comenzaron a temblar un poco, se notaba a simple vista lo muy nervioso que estaba.

- ¿Todas las noches? Pero si cada mañana te veo con una sonrisa en la facultad. – Joel estaba un poco triste y preocupado al ver como se veía Luis en ese momento.

-Estoy acostumbrado a soñar con eso, no importa cuántas veces sueñe con eso, siempre es lo mismo. Por eso trato de que esas pesadillas no me afecten totalmente. – Luis sonrió y continuo. -Aunque estoy bien ahora, como te dije hace un tiempo que he dejado de soñar con eso. –

- ¿Te sientes culpable de su muerte? – La pregunta de Joel extraño bastante a Luis, era como si este supiese realmente que es lo que ocurría. -Digo, pienso que la razón por la cual sueñas con eso es porque te sientes culpable por ello. Y la razón por la que murió no fue culpa tuya, fue solo un accidente. –

-Lo sé, pero yo me siento culpable por otra cosa en realidad…- Luis negó con la cabeza, no tenía planeado contarle más detalles de su pasado a Joel, no era un tema del cual estaba muy orgulloso. Justo antes de que Joel abriera la boca, su celular comenzó a sonar, este lo sacó del bolsillo de su pantalón e hizo una mueca de disgusto al ver de quien se trataba, para luego ignorar el mensaje. - ¿Paso algo?

-No, nada, era un recordatorio, tengo que ir a casa de mi madre ahora. Antes de venir al club le compre una remera a mi hermana con el símbolo de Nigthwing y estaba pensando en dársela hoy. – Sabia que Joel mentía con lo del recordatorio, ya que Luis pudo ver que claramente era un mensaje, aunque no viese exactamente de quien fuese. Sin embargo, decidió seguirle la corriente.

- ¿Tu memoria es tan mala que necesitas una alarma para eso? – Luis se rió al recodar lo muy olvidadizo que era Joel.

-Me ha pasado peores, la última vez me olvide del cumpleaños de Belén, y eso que su cumpleaños lo pasamos en mi casa todo el día, la felicite por su cumpleaños cuando vi la torta con velitas rosas en la mesa a las nueve de la noche. –

-Okey, eso sí es ser despistado. –

Después de eso, ambos siguieron caminando tranquilamente. Luis se entretenía viendo lo feliz que era Joel hablando sobre su hermanita, aunque la veces que este le preguntaba por su madre, notaba como si se sintiera incomodo al hablar de ella. Con eso quedaba claro que aún no conocía del todo a Joel, quería saber que era lo que le preocupaba y que lo que le molestaba. Pero no sabía cómo preguntarle por esas cosas, de momento solo se conformaría con saber las cosas que lo hacen feliz.

Continuara…

Notas finales:

En este fic Miguel dice "Me has salvado, estoy agradecido" Obvia referencia a Toy story.

Cuando Miguel dice eso de que Adam Levine canta como lobo aullando o que parece que se pellisca un testiculo cada vez que canta... lo digo en broma, por favor no se ofendan los que les gusta Maroon 5 que yo tambien los escucho un poco xD y por eso mi hermano se burla de mi diciendome esas cosas. 

Bien, en este capitulo las cosas iran avanzando. Miguel le confenso a Noah lo que siente por él, pero se conforma con solo ser su amigo de momento :3 Aunque al ver que Noah parece molesto con Javier, admite que si su relacion termina intetara conquistarlo otra vez. ¿Que hara Noah a partir de ahora?

Mientras que por otra parte tenemos a la cosita kawaii de Luis perdido en sus pensamientos y distraido por culpa de Joel. Deduciendo que Joel esta empezando a gustarle. Fuera de eso ¿Porque Joel mintio con respecto al mensaje? Proximamente lo sabremos en el siguiente capitulo, esta historia continuara... *Voz de narrador de pokémon*

En fin, Bay neee besos y abrazos. Ya saben que si tienen alguna duda, quieren darme su opinion o ayudarme a mejorar, pueden dejarme un review que por más pequeño que sea me anima a seguir publicando esta historia. Hasta luego!


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