29 de Octubre
-¿Quiénes fueron sus asesinos?-pregunto Hiroki mirando a su novio
Nowaki no respondió solo veía las tumbas ante de contestar-Mi papa y el papa de Kotaro
-¿Qué?-pregunto Hiroki sin poder creer en lo que había dicho el peliazul-¡¿Cómo?!
-No te lo puedo decir aquí- respondió Nowaki sin apartar la mirada de la tumba- Además, necesito de Kotaro para poder contarte
Hiroki no dijo nada solo miro a su novio que rezaba frente a la tumba, se acercó a él para poner su mano sobre uno de los hombros del peli azul. Kotaro miraba la fotografía con furia para tomar un encendedor que estaba a su lado. Viendo como la foto se consumía entre las llamas del fuego, hablo.
-Nunca debí haber sabido de ti
Hazuki miraba a su padre mientras este leía el periódico atentamente, indeciso, suspiro captando la atención de su padre, Sasuke miro a su hijo antes de hablar-Sucede algo de que me quieras hablar
-Papa tu distes clases en Nakamura antes de tomar la empresa- Contesto Hazuki sin ver a su progenitor- En la biblioteca, encontré esto
Hazuki puso sobre la mesa el anuario, Sasuke al ver el anuario, lo tomo sonriendo nostálgico, lo abrió encontrándose con las fotografías de los grupos.
-En aquel tiempo, tu madre te esperaba- hablo mirando las fotografías- Yo me encontraba a cargo de tres aulas
-Cuáles eran?
-3-2 B, 2-2 B- contesto recordando- el 1-1 A
Tsukishima cortaba los vegetales, dejo de hacerlo al sentir como las lágrimas bajaban por su mejillas. Aun no podía sentir aquellas heridas del pasado, a pesar de ya haber pasado 17 años, le herida aun no cicatrizaba.
Kotaro bajaba de las escaleras para tirar la ceniza cuando escucho un sollozo provenir de la cocina, preocupado se dirigió hacia allí para encontrar a su papa con los brazos sobre la barra de la cocina. Con pasos lentos se acercó el para quedar frente a él para abrazarlo.
-Perdóname-escucho decir el mayor de los dos ojiverdes- perdóname
-Por que debería perdonarte?-pregunto dudoso Kotaro
-No fui buen papa- hablo Tsukishima- perdóname por las cosas que te dije, nunca debiste haber sabido sobre eso
-Papa- llamo el menor a su progenitor- eso ya fue hace 10 años, ya lo olvide
-Sabes que eres lo más importante para mí- contesto Tsukishima para abrazar a su hijo- de no haber sido por ti me hubiera consumido en esa locura
-Lo que hiciste era por que estabas dolido- respondió Kotaro- yo haría lo mismo
El timbre de la puerta los había sacado de a ambos de sus pensamientos, Tsukishima beso la frente de su hijo para levantarse dejando al menor arrodillado, Tsukishima camino hacia la entrada, abrió la puerta dejando ver a tres adolescente.
-Nowaki, Hiroki, Hazuki ¿qué hacen aquí?-pregunto dudoso el mayor hasta que vio a su mejor amigo detrás de ellos- ¿sucede algo?
-Ya lo sabe Hiroki- declaro Yokozawa mirando serio a su amigo
Minutos antes
Yokozawa leía tranquilamente su libro, suspiro dejando el libro en la mesita a su lado, levantándose del sofá donde se encontraba camino hacia su habitación, al llegar a su habitación cerró la puerta con seguro para sacarse una cadena de su cuello, en esta mantenía una pequeña llave, camino hacia la mesita de noche para abrir el cajón encontrando un joyero viejo y desgastado.
-No puedo creer que ya han pasado 17 años- susurro tomando el cofre- porque no puedo olvidarte, Zen
‘‘-Yokozawa- exclamo sorprendido Zen al ver al doncel frente a el, habían pasado 5 meses desde que el peliazul había abandonado la escuela, el recién iniciaba la universidad- Valla no te había visto, como se encuentra mi hijo- dijo observando el vientre de 6 meses del menor
Takafumi no respondió, se mantenía con la mirada baja mientras escondía atrás de él, su mano, Zen sonrió tratando de acercarse a el menor- sabes, no me importaría tenerte aun después de que me case con Sakura, a pesar de que te use, siempre me gusto como eras en la cama
Yokozawa no emitió ningún sonido, Zen sonrió burlón- sabes, creo que lo mejor para ese niño, será dejarlo en un orfanato
Takafumi miro directamente hacia el castaño que a un mantenía su sonrisa, el rostro de Takafumi era serio, sin ninguna emoción, sacando su mano de su espalda revelo una pistola.
Zen retrocedió asustado- Que haces con eso?
-Lo que debí haber hecho- respondió disparando hacia la pierna del castaño
Zen cayo al asfalto, adolorido, cubrió con sus manos la herida hecha por la bala, Takafumi miraba al castaño para mostrar una sonrisa- Sabes, Zen, si nunca hubieras hecho eso, no estarías sufriendo
-¡¿Por qué lo hiciste?!-grito Zen al peliazul
-¿Por qué? ¡¿Por qué?!- grito Takafumi con lágrimas en los ojos- Yo te amo, te amo, pero te no importo, me utilizaste para una simple venganza de tu querida Sakura pero sabes ahora ya no me importa porque me desharé de ella como lo hare contigo
Un grito resonó en las vacías calles junto a dos disparos en aquella noche oscura’’