Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El amor es agridulce por HanakoTomoharu

[Reviews - 30]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

- Disculpen que los reúna tan temprano en la mañana –dijo Reiji, dirigiéndose a los otros 9 (pues Crow estaba entre ellos) que estaban sentados en la mesa del taller, pues era la más amplia y estaba en el lugar perfecto para que pudieran discutir con tranquilidad- Les pedí sus D-Pads para hacerles una última configuración. Noté que en la última misión nos separamos y no tuvimos formas de comunicarnos rápidamente; así que los agregé a todos a la lista de contactos para que puedan estar al tanto entre ustedes. Además, el servicio de comunicación estará en sus discos de duelo mientras estén activos, por lo que si necesitan refuerzos en un duelo solo tendrán que llamar a otro de sus compañeros.

- Usted piensa en todo, líder –comentó Sawatari, mientras veía su D-Pad. Los otros también tomaron el suyo de la mesa.

- También agregué el sistema de comunicación en tu disco de duelos, Hogan, espero que no le moleste.

- Para nada, pienso que es muy útil –contestó el motociclista con una sonrisa.

- Bien, ahora sin más, quisiera hablar de un tema más delicado. Hay una posibilidad de que hayan infiltrados de Academia en esta dimensión.

- ¿Qué? –saltaron Crow, Sawatari y Gongenzaka, los otros no parecían tan sorprendidos.

- Es cierto, hay un rumor de que Fusión tiene un peón en Synchro. Yuto y yo lo escuchamos de dos duelistas de Academia que capturamos –dijo Shun.

- Pensamos que podía tratarse de Yugo, ya que su nombre coincidía, pero esa idea está descartada ahora. Si Yugo fuera un aliado de Academia, ya se hubiera llevado a Yuzu, pero la salvó y la trajo hasta aquí –dijo Yuya.

- ¿Entonces creen que Yugo esté de nuestro lado? –preguntó Selena.

- Lo sabremos cuando lo encontremos –se adelantó a responder Reiji- por el momento, solo quiero que estén alerta a cualquier movimiento sospechoso en la ciudad –se ajustó los lentes, y meditando un momento prosiguió- Ya que estamos hablando de quienes trabajan para Academia; creo que es hora de aclarar algunas cosas. Selena, ¿podrías decirle a los otros la identidad del director de Academia?

La chica lo miró consternada por la petición, pero respondió al tener la mirada fija del líder, alentándola a hablar.

- En Academia quien tiene el poder es a quien llamamos el Profesor –dijo, y con una pausa agregó- Su nombre es Akaba Leo.

Los Lances se miraron entre ellos confusos y murmuraron incrédulos.

- ¿Qué significa esto, Akaba Reiji? ¿Por qué decírnoslo ahora? –reclamó Gongenzaka.

- ¿El líder de Academia es tu padre? –Yuya no salía de su asombro.

- Dificil de creer, ¿no? Solía pensar que por eso eran parecidos.

- ¿Eh? ¿Tú lo sabías? –exclamó mirando a Shun.

- Intenté ir a la Dimensión Fusión apenas supe la identidad de ese bastardo, pero acabé en Standard. Luego encontré a Akaba Reiji –se explicó- Al principio también quería acabar con él o usarlo de rehén, pero terminé trabajando de su lado. Me uní a los Lancers porque ya sabía quien era en realidad nuestro líder, él no es como su padre.

- Entonces… a eso te referías ayer con lo de Akaba… -dedujo. Supuso que entonces el odio de Shun iba dirigido al padre de Reiji.

- Akaba Leo utiliza a sus estudiantes para cumplir con su deseo de unir las dimensiones en una sola. Solía pensar que eso era lo correcto… –dijo Selena, haciendo que sus compañeros callen sus murmullos y reclamos para escucharla- pero ahora veo lo que nos ha hecho. El Profesor convierte a sus alumnos en armas para que destruyan todo a su paso como lo hicieron en Xyz. Solo cuando me encontré con ustedes pude ver la verdad, y se lo debo más que nada a Reiji y a Yuzu. 

- Es obvio, nuestro líder no tiene la culpa de lo que ha hecho su padre –dijo Sawatari- pero, ¿cómo es que se volvió el director de Academia?

- ¿Desde hace cuanto lo sabes, líder? –interrogó el azabache.

- Unos meses después de que mi padre desapareciera, hace más de tres años, descubrí un portal en los laboratorios de Leo Corporation que en esos momentos habían quedado abandonados. Cuando llegué a la Dimensión Fusión, conocí a Selena y descubrí sus planes. Me enviaron a casa, y no he vuelto a verlo desde entonces, pero me he dedicado a buscar todo lo que pudiera sobre él y los movimientos de Academia.  Es por eso que hoy en día comparto mi objetivo con ustedes, quiero detener a Akaba Leo y a la Dimensión Fusión.

- Lo comprendemos, Reiji –respondió Yuya por todos, aunque sintió más empatía por el chico al conocer la situación que había vivido por su padre- Nosotros confiamos en ti.

- Has demostrado ser un líder honorable, Akaba Reiji –le siguió Gongenzaka- pero esto que dices significa que Akaba Leo descubrió antes que todos a las otras dimensiones, eso debió darle tiempo de esparcir espías por los otros mundos.

- No me cabe duda de eso, por lo que es importante que seamos cuidadosos. Es muy probable que Academia haya llegado a Synchro antes que nosotros.

- Pero, si Academia tiene espías en las otras dimensiones, ya deben haber llegado a Standard. Dejamos nuestra dimensión sin seguridad, ¿que pasaría si Academia invade a Standard de nuevo en vez de a Synchro? –preguntó con preocupación Yuya.

- Ya he pensado en eso, y no se preocupen. Aún quedan grupos de duelistas en LDS que estarán a disposición de defender a Miaimi City, y hay más uniéndose al programa “Lance Defence Soldiers” todos los días. Además, Tsukikage me tiene informado de como va todo en Standard, él va a la dimensión cada tanto.

- Que suerte que tenemos a un compañero tan dedicado –Sawatari le sonrió al ninja, pero no supo si este hizo algún gesto en respuesta porque su cara siempre está cubierta.

- Agradezco la confianza de todos –dijo entonces Reiji, con una suave sonrisa que dejó al resto mirándolo con sorpresa; pues ese gesto no era muy habitual en su líder- significa mucho que mantengamos este lazo en el equipo –miró así al pelirrojo de cabellos verde, y Yuya comprendió que era su momento. sabia que no lo estaba presionando, pero era mejor decir la verdad ahora. 

- Yo también tengo algo importante que decir –comenzó, obteniendo la atención de los otros. Tomó el coraje suficiente y continuó- Desde que Yuto me dejó su carta, he sido controlado por una oscuridad dentro de mí cada vez que la invoco. Al principio no lo comprendía porque mis recuerdos de lo que sucedía mientras era poseído desaparecían, pero luego comencé a escuchar a Yuto y supe qué… el alma de Yuto había quedado atrapada en mi cuerpo, así como esta oscuridad en su dragón. -tenía miedo de mirar directamente a sus compañeros, por lo que mantuvo la mirada baja. Sabía que lo que salía de sus labios era una locura- Desde entonces, tengo la capacidad de entrar en un estado que llamamos Berserker. Al principio era dominado por la ira de Yuto, pero ahora llego a un punto donde me vuelvo realmente violento y peligroso… He tratado de controlarlo, porque lastimé a soldados de Academia y eso no es algo que yo haría con un duelo, pero aún tengo miedo de pueda suceder de nuevo –finalizó, quitándose el peso de encima, pero fue difícil. Sintió la mano de Shun tomar la suya bajo la mesa, y eso le transmitió algo de valor. Levantó la vista a sus compañeros, que si bien parecían algo impactados con la información, no lo miraban acusadoramente o con rechazo, como recordó sentir de otras personas en su niñez- La verdad aún no comprendo porqué me sucede todo esto, lo siento.

- No entiendo mucho de qué va eso –dijo Crow- pero si sabes que no quieres herir a nadie y das lo mejor de ti para evitarlo, entonces no hay de qué disculparte.

- El odio de Yuto está justificado –dijo Selena-  pero sabemos que tú no harías daño a nadie. No te culpamos por lo que pasó.

- Todos hemos visto lo que significan los duelos para ti, Yuya –le sonrió Dennis.

- Lo lamento, Yuya. No sabía que tan grave era la situación –Gongenzaka apoyo su mano en el brazo de su amigo- Fallé al no estar a tu lado en esos momentos, pero juro por mi honor que yo, el varonil Gongenzaka, estaré para apoyarte si algo sucede de nuevo.

- Yo tampoco permitiré que vuelvas a caer en la oscuridad –dijo Shun a su lado, y sin que nadie lo viera, apretó su agarre.

- Vaya, Yuya, no sabía nada de esto –Sawatari se pasó una mano por la parte posterior del cuello, sintiéndose pésimo- pero somos amigos, así que ten por seguro que también te apoyaré.

- Los compañeros estamos para eso, jamás dejaremos a un camarada solo –Yuya miró a Tsukikage, creyendo que era la primera vez que lo oía hablar, y quedó entre conmovido y estupefacto.

- Gracias a todos chicos –Yuya miró a sus compañeros con los ojos vidriosos, pero no podía evitar las lágrimas formándose al borde de sus ojos. Lo hacía muy feliz que todos lo aceptaran y estuvieran dispuestos a ayudarlo; solo deseaba no tener que haberlos involucrado en todo aquello. Bastante tenía que lidiar él solo con sus batallas internas, no quería causarles problemas. Pero entendió que eso era parte de ser un equipo, el compartir los problemas entre todos.

Entonces Reira se levantó de su asiento y caminó hasta el pelirrojo, y ante la mirada curiosa de los otros levantó su osito entre sus manos, tendiéndoselo al mayor. Yuya lo miró un momento con sorpresa, pero luego rio restregándose los ojos y aceptó al peluche.

- Gracias, Reira –le sonrió, apretando contra sí el osito blanco y morado. El pequeño se sentó a su lado, entre el espacio que había entre Shun y él (provocando que enseguida soltaran sus manos) y Reiji contepló la escena sonriendo para sí. Yuya y Reira compartieron el peluche.

- Bien, ahora que sabemos cuánto podemos confiar entre nosotros –dijo el de lentes, recuperando su postura lideral- ¿Ya saben cómo llegar a Jack Atlas? –se dirigió a Crow y los otros 3 encargados de la misión.

- Si, tenemos información de que esta tarde se reunirá con el  Consejo Ejecutivo para discutir los términos del Torneo este año –contestó Crow mirando a Sawatari.

- Yyy~ gracias a mí conseguimos un mapa del edificio donde se llevará a cabo –agregó Dennis alargando la primera palabra y señalándose en un gesto infantil.

- Mi disco de duelo ayudará a infiltrarnos –explicó Selena- En Academia los preparan para hackear la tecnología de otras dimensiones, así podremos pasar la seguridad.

- Bien, veo que se figuraron como trabajar en equipo  –dijo Reiji- Mientras tanto, el resto iremos a la cafetería. Trataremos de hacerlo breve para no perder más tiempo. No sabemos cuando Academia decidirá hacer su movimiento, por lo que debemos actuar rápido. No podemos dejar que Hiiragi Yuzu caiga primero en manos de Fusión. 

Todos asintieron con determinación, aunque Dennis lo hizo sintiendo su sonrisa flaquear; por que él tendría que actuar más rápido aún. 

 

 

 

 

- Discúlpeme, pero no lo entiendo, Profesor –Yuri miró al hombre sentado en su elegante silla con forma de trono, sobre los altos escalones que resaltaban su superioridad. 

- No serás promovido ahora, Yuri. No es el momento –negó nuevamente, y su voz resonó en el gran salón. El estudiante de cabellos rosa y violetas intentó ocultar lo molesto que en verdad estaba para hablarle con el debido respeto.

- Pero promovió a Shiun´in –replicó en su lugar- y él falló a su misión. No entiendo como él fue promovido y yo no. Jamás le he fallado en nada antes.

- Tú y Sora me decepcionaron en Standard, pero él ya estaba preparado para pasar a las líneas del frente.

- ¿Y yo no lo estoy? He logrado cosas que ningún otro Slifer ha hecho.

- Ese no es tu lugar, Yuri. Tu papel es otro.

El chico chasqueó la lengua, soportando la exasperación que amenazaba con alterar su voz.

- ¿Cuándo llegará el momento de que tome ese “papel”?

- Aún no, solo ten paciencia.

- La tuve, por años.

Yuri no replicó nada más y con una reverencia se despidió para salir de la oficina. En el pasillo pateó una papelera, haciendo que cayera con fuerza junto con parte de su contenido, y sobresaltando a unos estudiantes cerca, que al verlo se alejaron inmediatamente. Caminó hasta el fondo del pasillo, donde estaba vacío, y se apoyó contra una de las grandes ventanas, frustrado y enojado. Dennis llegó a Obelisk Force gracias a su esfuerzo en tan solo un año, mientras que Sora había ascendido a Obelisko en unos pocos meses y era nuevo. Necesitaba saber por qué aún no era lo suficientemente bueno, por qué no lograba complacer al Profesor, por qué aún se quedaba atrás mientras los otros avanzaban.

No podía esperar para ver a Dennis. Era el único que nunca esperaba ni pedía más de él.

 

 

….

 

 

Los 6 Lancers entraron a la cafetería, habiendo pasado dos horas del mediodía.

-Buenas tardes, ¿Qué se les ofrece? –preguntó el señor de la barra, un hombre veterano y corpulento, con amplio bigote y cabello canoso. Sus mejillas regordetas enrojecían al sonreír.

- Buenas tardes –Reiji saludó, se sentó frente al cantinero y le tendió una fotografía- queríamos saber si ha visto por aquí a esta chica.

- ¿Son policías o algo? –bromeó el hombre mayor, ya que el ninja y el niño con ellos no figuraba con la idea.

- Para nada, vinimos a buscar a nuestra amiga a la ciudad.

- Pues entonces deben saber que su amiga es buscada por Security –Yuya y Gongenzaka se miraron entre sí con preocupación.

- ¿Desde hace cuanto? –preguntó el de ojos carmesí.

- Unas semanas, creo.

- Desde que llegó a City, entonces –murmuró el azabache.

- ¿Sabe por qué la persiguen?

- Fueron encontrados en una zona restringida de los tops, al parecer iba en una motocicleta con un común… -el hombre miró a Yuya un momento y lo señaló exclamando- ¡es él!

- No, le aseguro que nuestro amigo no estuvo involucrado, pero de hecho también buscamos a ese chico –afirmó Reiji- Pero diría usted entonces que el chico tenía un gran parecido físico con él, ¿verdad?

- Sí, son realmente idénticos… aunque el cabello es diferente, y los ojos, también… Le creo, no es el mismo chico –acordó con Reiji- Nunca olvidaría a ese muchacho, es cliente frecuente en esta cafetería.

- Ya veo, ¿con que frecuencia viene?

- Pues… ¿está seguro de que no son policías? –reiteró el señor, esta vez más serio, mirando inseguro la porte dura de Gongenzaka y Shun.

- No señor, solo buscamos a nuestra amiga –contestó Yuya, levantando las manos en inocencia. Con solo mirarlo a él y a Reira era suficiente para descartar la idea.

- Bien –suspiró el mayor- porque a Security no le gustaría si supiera que admito comunes en este lugar. Muchos vienen a la ciudad, y soy de los pocos que les dan servicio sin reportarlos –contestó mirando alrededor algo nervioso, y bajando la voz.

- ¿Está todo bien, papá? ¿Necesitas ayuda? –la asistente del hombre mayor salió de la cocina con unas bandejas y vio su expresión consternada.

- No, todo está bien, cariño. Yo tomo su orden –contestó con calma, para que la chica se alejara de vuelta a su trabajo.

- No se preocupe señor, no diremos nada al respecto –dijo Reiji con voz suave ante la escena-Solo queremos saber si alguno de ellos dos se ha presentado por aquí estos días.

- Sí, Yugo vino hace unos días, pero solo se quedó afuera hablando con los clientes –señaló las mesas bajo sombrilla del exterior- Estaba repartiendo carteles con la joven y comenzaron un escandalo allá afuera. Creo que estaba diciendo algo sobre que podía atravesar dimensiones con una carta o algo así, los clientes se rieron de él. 

- ¿Una carta…? ¿Tal vez sea el Clear Wing de la última vez? ¿Hace lo mismo que Dark Rebellion?

- Creí que la chica que venía con el era su amiga de siempre, pero como ví que no detuvo sus locuras supe que se trataba de alguien más.

- Espere… ¿Yugo ha venido antes con una chica parecida a Yuzu?

- Ah… si te refieres a tu amiga, sí. Se parece a la amiga de Yugo, pero hace meses que no se ha aparecido.

- Otra chica que se parece a Yuzu… -Gongenzaka quedó pensativo.

- Ruri… -Yuya se volvió a ver a Shun, quien tenia una mirada turbia.

- ¿Sucedió algo más ese día, señor? –preguntó Reiji, queriendo llegar a algún lugar con todo eso.

- Que yo recuerde… Fui a pedirle que dejara de alterar a mis clientes, ya que Yugo en general es un buen chico, pero siempre causa algún que otro problema por la ciudad. Fue hace solo unas semanas que unos niños robaron una tienda vecina, y el chico los ayudó a escapar. Me sorprende que recientemente seguridad lo esté buscando, ni siquiera es la primera vez que huye de las patrullas. En fin, lo que sucedió fue que Security llegó primero y tuvieron que marcharse enseguida. No los he vuelto a ver desde entonces, pero como sus rostros aún están en la lista de buscados asumo que lograron escapar.

- Entiendo, muchas gracias por la información –Reiji se ajustó los lentes, comprendiendo que el hombre sabia tanto como ellos sobre su paradero.

- ¿Van a tomar algo? –preguntó entonces. 

- Sí, algo caliente estaría bien. Y amargo –contestó Reiji, luego miró a su hermano y agregó- Y un chocolate caliente –se volvió a sus compañeros en cuanto el señor tomó la orden- Lo lamento Yuya, supongo que esperabas escuchar más.

- Ahh… -el nombrado se sonrojó por el hecho de que el lider lo hubiera llamado por su nombre frente a los otros- N-no pasa nada, ha sido muy útil –sintió los ojos interrogantes del azabache y del peli-verde en su espalda pero trató de ignorarlo- Ahora, si Yuzu y Yugo vuelven a aparecer, solo tenemos que hacerles saber que hemos estado aquí. De esa manera será mas facil que lleguemos a encontrarnos.

- Podríamos dejarle un mensaje al cantinero para que se los de… pero no sabemos cuanto tiempo tarden en venir a la cafetería, así que no servirá –descartó enseguida Gongenzaka.

- Debemos hacer algo que llame la atención, algo que les haga saber desde cualquier rincón de la ciudad que estamos aquí –dijo Shun.

- Pero sin rebelar nuestra ubicación –recalcó el líder.

- ¡Un duelo! –exclamó Yuya, haciendo que sus compañeros lo miraran- Si tenemos un duelo de entretenimiento que llame la atención, ¡Yuzu de seguro sabrá que se trata de nosotros y podrá encontrarnos!

- ¡Excelente idea, Yuya! –Gongenzaka le palmeó la espalda en aprobación.

- Sería lo mejor, pero no creo que nuestro líder quiera que mostremos nuestras invocaciones tan pronto –dijo mirando al nombrado y esperando con antipatía su desaprobación.

- No, de hecho, estoy de acuerdo –dijo Reiji, dejando sorprendidos a los otros. - He pensado que, si queremos actuar más rápido que Academia, ya debería ser hora de mostrarnos ante la ciudad. Un duelo de entretenimiento es perfecto. Será inofensivo, y las personas no nos tomarán como amenaza. Ablandará las cosas para cuando les expliquemos que somos de otras dimensiones.

- Genial, ¡vamos a hacerlo! –exclamó el pelirrojo con entusiasmo- Ah, pero… Reiji, ¿no crees que deberíamos hacerlo todos los Lancers juntos? Porque, ya sabes, somos un equipo y no veo la razón por la que debamos actuar solo nosotros –juntó sus manos en un gesto suplicante, esperando que el líder olvidara por esa vez sobre la sanción de los otros 3.

- Tiene un punto –argumentó el ninja de azul- todos nuestros rostros deberían presentarse a la ciudad, de esa manera el Consejo Ejecutivo sabrá mejor quienes son los Lancers.

- Supongo que tienes razón –consideró el de lentes- Pero tendrá que ser antes de que los otros vayan en busca de Jack Atlas. Hagámoslo esta misma tarde.

- ¿A-ahora?

- Sí, llamaré a Selena para que les comunique a los demás –Reiji sacó su D-Pad y se sentó en una de las mesas. Comenzó la llamada mientras esperó a que la asistente de la barra les sirvió las tazas. Tsukikage tomó asiento junto al líder, tendiéndole a Reira su chocolate para que se sentara a tomarlo. Gongenzaka los acompañó en la silla libre y Shun se sentó en una de las mesas de la lado. Yuya tomó asiento con él, notando la mirada consternada que tenía desde hace un rato.

- ¿Crees que la chica con la que estaba Yugo antes era Ruri?

- No, estoy de que no es ella. Pero… me enfada como no tienes idea –dijo apretando los puños sobre el mantel, arrugando la tela- saber que Fusión sigue secuestrando niñas inocentes…

- Tranquilo –posó su mano sobre uno de los puños de Shun, aliviando un poco la tensión en el otro chico- Vamos a traerlas de vuelta, no importa qué pase. Es una promesa.

Se quedaron callados un momento, y la música del ambiente llenó sus oídos. Era una especie de rock suave, y resultaba agradable de escuchar. Le tomó unos segundos luego de ver a Shun mover sus labios levemente para darse cuenta de que estaba tarareando.

- Te gusta esta canción –fue una afirmación, más que una pregunta, y el más alto lo miró viéndose descubierto.

- Es buena –contestó haciendo un gesto con los hombros, como desinteresado en el tema, pero una pequeña sonrisa asomó en la comisura de sus labios- A Ruri le gusta ese estilo. A veces, en los recreos dela escuela de Heartland, Yuto y yo nos recostábamos en la terraza a escuchar música mientras almorzábamos, y…

- Compartían los audífonos –dijo Yuya, con la imagen del recuerdo vívida en su mente. Ambos se miraron un momento.

- Sí, eso hacíamos –dijo Shun- A veces repetíamos varias veces la misma canción, porque…

- Era la favorita de Yuto –volvió a completar la oración, sintiendo un nudo en su estómago al ver los ojos del mayor.

- Sí…

El silencio volvió entre ellos, dejando la música de fondo. 

- Yuto… sé que estás ahí. Tienes que hablar con él.

El aludido no dio señales de aparecer.

- Creo... creo que él se siente de la misma forma sobre ti –sintió una angustia embargarlo y supo que era la presencia del otro chico en su interior- Le gustas, Yuto.

<<No… >> la voz del azabache hizo eco en su cabeza al fin <<Hubiera dicho algo cuando nos besamos la primera vez, pero actuó indiferente>>

Para Yuya, la voz de Yuto no sonó tan segura.

- ¿Y acaso no es así siempre con sus sentimientos? Solo míralo, Yuto. Hay algo en él que… no sé como explicarlo, pero Shun cambia cuando está contigo. Te mira de una manera distinta, y veo esa misma mirada cuando piensa en ti.

<<Somos amigos muy cercanos, es normal que sea distinto conmigo>>

- Pero los dos se ven como algo más, lo sé. ¿Por qué te habría besado sino? Incluso llegaron a más que eso, y tú estabas convencido de que Shun no lo hacía por jugar contigo.

<<Por supuesto que no lo hizo por eso, pero tampoco es por lo que tu crees. Hicimos eso porque… ambos lo necesitábamos. Shun y yo teníamos todas estas frustraciones dentro, y de alguna manera fue como una forma de liberarnos de ella. Al menos, así lo sentí yo. Estar entre los brazos de Shun es como estar en casa, y lo dos necesitábamos recordar cómo era eso>>

- Tal vez tengas razón, pero yo sigo creyendo que hubo algo más. Sentí la forma en la que te tocaba, Yuto. 

<<No estás seguro de lo que dices>> 

- ¿Y tu lo estás? ¿Cómo puedes estar tan seguro de que él no siente lo mismo que tú? 

<<Incluso… Incluso si lo que dices fuera cierto, ya es tarde para saberlo. Ya no estoy en mi cuerpo, Yuya, y saber lo que siente Shun por mi no nos llevará a nada bueno mientras tú y yo estemos unidos. No quiero volver a involucrarte entre nosotros, lo mejor es que evitemos el tema>>

- Pero Yuto…

- Voy a tomar algo mientras los otros llegan, ¿quieres algo?

- Ah, no, así estoy bien. Gracias.

- Debes decírselo, Yuto. Ambos deberían confirmar lo que sienten por el otro –le dijo mentalmente mientras observaba a Shun levantarse para ir hasta la barra. Los dos estaban solos en la mesa y podrían hablar en esos momentos, además era prácticamente la primera vez que Yuya quería voluntariamente que Yuto tome control de su cuerpo; ¿por qué iba a desaprovechar esa oportunidad? De seguro era porque Yuto aún se sentía culpable por lo que pasó la última vez.

El mayor de cabello verde volvió a tomar asiento mientras esperaba su orden y Yuto no volvió a hablar, por lo que ninguno dijo nada más al respecto.

- Ya que eres el experto en esto del espectáculo, ¿qué exactamente planeas que hagamos? –le preguntó llamando su atención.

- Oh, solo tenemos que hacerlo divertido. Tener duelos con emoción, esa es la esencia de un duelista de entretenimiento –contestó el pelirrojo sonriendo.

- No sé bien qué es lo que esperas, pero voy a tener duelos a mi manera. No iré saltando por ahí con brillo de estrellas como tu amigo de LDS.

- ¿Cuál? ¿Sawatari o Dennis?

- Los dos, en todo caso.

Yuya rio al imaginarse a Shun imitando los movimientos artísticos de Dennis y las poses engreídas de Sawatari, ganándose una mirada interrogante del otro, pero de todas maneras el de cabello verde sonrió también.

- Hablo enserio, no lo haré.

- Está bien.

El pelirrojo de cabellos verdes sentía que su resentimiento por Shun casi se había esfumado, ya que habían empezado con el pie izquierdo, pero ahora podía ver lo fácil que era entablar una conversación con el otro chico. Solo quería que Yuto y él pudieran arreglar las cosas, y mirando aquellos ojos dorados que ocultaban melancolía y dolor, comprendía que ninguno diría nada hasta que el otro lo hiciera primero. Aquella terquedad de los dos lo frustraba.

Yuya se sintió mal por ambos, porque sabia que por eso ninguno iba a ser honesto con lo que sentía, y aquello le provocaba tristeza. Ambos eran solo dos chicos que habían tenido que enfrentarse a una guerra, y a la pérdida de su gente y seres queridos, a una edad en la que ni siquiera tendrían que preocuparse por tantas responsabilidades. Yuto, Shun y Ruri fueron fugitivos de Academia en su propia ciudad, perdieron su hogar, y tuvieron que ayudar a otras personas en su misma situación. Tuvieron que defender a esas personas, buscando comida para las familias que resguardaba la Resistencia, dando protección a todos esos niños perdidos. Yuto y Shun eran realmente jóvenes como para enfrentar todo aquello, y cuando Ruri se fue, la figura casi “maternal” que había representado para los dos había desaparecido. Quedaron solos. 

Los tres eran una familia, y como todas tenían problemas. Como tres chicos huérfanos, crecieron juntos, así que por más discusiones que tuvieran siempre se mantuvieron unidos. Las pelean eran más que nada entre Yuto y Shun, ya que las discusiones entre Shun y su hermana eran simples tonterías y Yuto rara vez le llevaba la contraria a Ruri; pero Shun y él eran más complicados, sobre todo debido a sus personalidades. Sin embargo, Ruri era el pilar entre los dos, y ella siempre lograba que hicieran las pases.

Pero ahora Ruri no estaba, y el soporte entre ellos se había desequilibrado. Ya no peleaban con la frecuencia de antes, eso estaba claro. Sabian que la ausencia de Ruri los había afectado a ambos, y que si querían seguir adelante y encontrarla, tenían que estar tan unidos como antes. Más aún, de hecho. Y lo hicieron.

Yuto continuó molestándose con Shun debido a sus acciones, por ser tan impulsivo; y éste se frustraba con Yuto al no compartir su paciencia, porque el más bajo prefería tomarse su tiempo antes de actuar, era más precavido. Pero los dos seguían ahí, actuando juntos, y era lo que importaba.

Yuya sabia todo eso porque había sentido gran parte de los recuerdos de Yuto, y sabia también que con todo lo que había pasado no tuvieron tiempo de pensar en sus sentimientos. Antes de todo aquello, ellos eran solo adolescentes con sentimientos confusos, con sueños y metas. Ahora, esas metas habían cambiado y se habían vuelto una prioridad: acabar con Academia. Entonces todos aquellos sentimientos quedaron guardados. A veces los dejaban salir, en esos momentos en los que ambos actuaban como apoyo mutuo, pero ninguno se animaba a decirlos en voz alta. Se quedaban con aquel calor en su pecho, disfrutando la compañía del otro, pero nunca avanzando. Porque, precisamente, eran el apoyo del otro. El único que tenían, irremplazable; y temían perderlo.

Y Yuya pensó que ambos no lo sabían, pero solo se perdían más el uno al otro al ocultarse lo que sentían.  

Notas finales:

Por favor, ya el capítulo 10 y todavía no llego al encuentro con Sora! Dx bueno, ya falta poco.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).