Capítulo 31
Jongin saluda a un par de personas cerca de la entrada de su casa. Había ido por un poco de agua y estaba cansado, pero de muy buen genio. Últimamente las cosas estaban yendo de lo mejor. En el camino había visto un auto de militares no muy lejos del pueblo y eso siempre le preocupaba.
Pero, aunque sus pensamientos no fueran de lo más optimistas, este día en particular se sentía bastante bien, porque todos en casa estaban de buen ánimo. El huerto había sido todo un éxito, y algunas personas buscaban con bastante frecuencia las cosas que Baek y Kyungsoo cosechaban y la comida que preparaban, con tanta dificultad también era famosa. Chanyeol y él trabajaban bastante también y eso les daba para darse ciertos lujos.
Habían algunas personas que iban de pueblo en pueblo intercambiando o vendiendo objetos difíciles de conseguir o muy cotizados. Los chicos tenían ya varias lámparas y a veces conseguir baterías y pilas era muy caro, pero siempre les alcanzaba y nunca se quedaban a oscuras. También usaban velas, pero con mucho cuidado por miedo a un nuevo incendio. Habían conseguido más mantas, ropa, ollas para la cocina, envases, cosas para la camioneta, macetas, semillas, entre otras muchas cosas que encontraban en viajes o que los vendedores ambulantes ofrecían por ahí y por allá.
-¡Ya llegué!- anuncia Jongin y se sorprende al no tener respuesta.- ¡Estoy en casa!- repite e inmediatamente se dirige a la cocina. La olla está hirviendo algo que Kyungsoo estaba preparando pero ni él ni Baekhyun están ahí. Chanyeol seguramente estaba trabajando, pero era muy extraño que los chicos hayan dejado algo en la cocina sin supervisión.
Preocupado, Jongin empieza a recorrer la casa y su corazón se acelera cada vez más rápido cuando va de un lado a otro y no encuentra ni a Baek ni a Soo. Vuelve a llamarlos, pero no hay respuesta. Enseguida piensa que tal vez salieron por algún ingrediente y sale disparado hacia el huerto.
Su corazón se tranquiliza un poco cuando logra ver unos mechones de cabello conocido, pero su calma desaparece cuando no haya dos sino tres personas y la tercera no es Chanyeol. Jongin no disimula su cara de “¿Qué demonios haces aquí?” así que el militar sonríe descaradamente.
-Es sólo una visita- dice adivinando la pregunta que Jongin envía con su mirada asesina- Me gusta mantener mis amistades y para ser sincero tu hermano me cae bien. El muchacho recuerda sus mentiras y sabe que debe actuar como un hermano mayor sobre protector, algo no muy diferente a un novio sobre protector.
-¿Por qué viene aquí? ¿Necesita algo de nosotros?- quiere saber Jongin sin ser maleducado, pero tampoco precisamente amable.
-Bueno, no es la primera vez que les visito y tampoco será la última- responde en un odioso tono de amenaza el uniformado- pero sí es la primera vez que te encuentro aquí. Al parecer eres muy trabajador y no pasas mucho en casa.
Ahora la mirada asesina de Jongin se dirige directamente a Kyungsoo y a Baekhyun. ¿Cómo que no es la primera vez que los visita? Y para peor hacer, siempre lo hace cuando Jongin no está. Eso le da una terrible sensación de que ahora no podrá irse de casa tranquilo.
-¿Hay algo que pueda hacer por usted?- insiste en saber Jongin, buscando la manera de echarlo de la casa.
-Bueno, estos amables jóvenes me han dado de comer y quería saber cuáles eran los ingredientes, es por eso que terminamos aquí. - La expresión ensombrecida de Jongin se acentúa y Kang Dae nota que Kyungsoo empieza a temblar.
-Bien, supongo que aprovechó su tiempo libre lo suficiente, ahora a mi también me gustaría comer un poco.
-Claro, claro- acepta provocador el militar- Igual tengo que irme lo más pronto posible, efectivamente mi tiempo libre ha acabado. Espero poder regresar y tal vez verlos a todos de nuevo. ¿Verdad niño bonito?- un guiño de ojo hacia Kyungsoo termina por enfurecer a Jongin.
Cuando Kang Dae sale, Jongin camina junto a él para indicarle la salida, pero más que nada asegurarse de que se vaya. Cuando lo ve marcharse, recuerda el auto de militar que había visto en el camino de regreso a casa. Analiza al hombre y se da cuenta que tiene que hacer mucho ejercicio, porque es fornido y fácilmente le ganaría en una pelea.
Cuando entra sus celos no desaparecen porque ahora presencia a Baekhyun consolando a su novio que está abrazando sus rodillas sentado en el piso. Sin pensarlo, lo toma de la muñeca y lo obliga a salir, pidiéndole antes a Baekhyun que se haga cargo de lo que está en la cocina.
-Jongin... me haces daño- logra decir Kyungsoo y Jongin lo acorrala contra el primer tronco de árbol lo suficientemente grande que encuentra.
-¿Yo te hago daño? ¿Yo te hago daño, Kyungsoo? ¿Puedes explicarme qué es exactamente lo que acabo de ver?
Kyungsoo no responde y eso lo enoja más y más. No quiere ser grosero, no quiere ser hiriente, no quiere lastimar a Kyungsoo, pero está increíblemente enojado. ¿Por qué le oculta cosas? ¿Por qué ese militar horrible entra y sale de su casa con tanta naturalidad y familiaridad? Si le esconde eso ¿qué más estará escondiendo?
-¡Responde!- exige en un potente grito Jongin, haciendo que su novio se sobresalte por el susto. Sus lágrimas empiezan a acumularse en sus enormes y adorables ojos, pero Jongin no piensa ser dulce en ese momento.- Kyungsoo, quiero que me digas qué hacía ese militar en nuestra casa y quiero saber por qué dijo que no era la primera vez.
-Ha venido con cierta frecuencia en los últimos días... siempre mientras no estás- susurra Kyungsoo, porque sabe que si habla normalmente se va a poner a llorar.
-¿Por qué no me lo dijiste?- quiere saber el menor, pero esta vez su voz ya no asusta a Kyungsoo.
-Porque tenía miedo- admite el chico, todavía temblando.
-¿Miedo de mi?- inquiere preocupado Jongin.
-No... miedo de él. Creo que nos espía, espera que te vayas y hace preguntas de si hay seguridad, dónde compramos las cosas y por el estilo, como si fuera parte de su trabajo... pero luego intenta ser amigable. Siempre estoy con Baek... él... él me ha dicho que te diga, pero yo no quería. Sabía que te ibas a poner como un loco y que tal vez le ibas a reclamar o algo... pero siempre está armado y no parece tener miedo de usar su arma.... por eso tenía miedo.
Jongin lo piensa por un momento. ¿Cuántas veces habían hablado de eso? Habían prometido no meterse en problemas y no llamar la atención, había prometido cuidarse y protegerse. Jongin estaba herido por la falta de confianza de Kyungsoo, una confianza que él pensó que se había ganado. ¿Acaso no había demostrado que podía no hacer algo estúpido que pusiera sus vidas en riesgo?
-Estoy decepcionado, hyung. Estas son el tipo de cosas que causan problemas cuando se esconden. Si has notado que viene cuando no estoy, podíamos tenderle una trampa, hacerle estar inseguro de cuándo voy a estar y cuándo no. Evitar las rutinas, ir por otros caminos, regresar enseguida ¡qué se yo!- Jongin mira a su novio y a pesar de que tiene muchas ganas de abrazarlo y consolarlo, sigue herido- No me escondas estas cosas... no lo hagas. No soy un tonto, creo que puedo controlarme, sobretodo si es para mantenerte seguro. ¿Acaso no te sientes seguro conmigo?
Kyungsoo inmediatamente se acerca para abrazar a su novio y este se lo permite, pero no le corresponde el gesto. Asustado, el mayor intenta besar sus labios, pero tampoco puede y eso hace que entre en una crisis de ansiedad.
-Jongin, por favor... - Kyungsoo está asustado. Nunca, jamás en esta vida se acordaba que su novio le haya negado un beso y era la peor sensación que había tenido en toda su relación.
-Ahora no, hyung... ¿sabes? Tengo hambre y estoy un poco cansado, así que comeré algo rápido e iré a tomar una siesta.- Kyungsoo, aferrado al cuerpo del otro no se movía y no pensaba hacerlo mientras Jongin no lo besara.
-Por favor, sólo un beso... no voy a estar tranquilo si no lo haces... jamás en toda nuestra relación me habías negado un beso.. yo...
-Jamás en nuestra relación pensé que me negabas la verdad, Kyungsoo, pero ahora yo no sé.
Kyungsoo se quedó ahí parado por un buen rato, como esperando que Jongin regrese, pero evidentemente no lo iba a hacer. Tuvo que dejar de llorar y ahogar sus sollozos antes de entrar, para encontrarse que ya había comido y ahora estaba recostado, durmiendo.
-¿Estás bien?- son las palabras de Chanyeol. Había llegado en medio de la discusión y Baek había tenido que explicarle lo que estaba pasando. Kyungsoo asintió un poco con la cabeza y se puso a arreglar cosas por ahí y por allá, sólo para tener algo con qué ocupar su tiempo.
La tensión de la que Chanyeol y Baekhyun eran testigos era la primera en todo el tiempo que vivían juntos y era una sensación extraña, poco familiar y desagradable, pero ese no era el problema.
El verdadero problema es que había un tercer testigo de la pelea de los novios, alguien que no se había ido y que los estaba observando, escuchando y analizando.
* *
Kyungsoo se despertó tiritando, muerto de frío a pesar de las mantas. Su frío se debía a que Jongin estaba lejos. Habían dormido en el mismo lugar, pero no le había abrazado, apenas si le había dirigido la palabra y Kyungsoo jura haber escuchado un sollozo ahogado.
Sin otra opción, decidió que podía levantarse para hacer el desayuno, sorprendiéndose al ver que era mucho más tarde de lo que pensaba. Como la mayoría de las mañanas, era el primero en despertar. El ambiente del invierno se estaba acercando y Kyungsoo agradecía estar más o menos cerca de la costa, porque en su situación, sin calefacción podrían morir de frió.
Se da la vuelta sobre su propio eje para regresar a buscar algo más caliente y se lleva las manos a la boca aterrado cuando se encuentra con Kang Dae sentado en una de las improvisadas sillas que los chicos habían puesto por la casa
-Hola, niño bonito.
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