Una semana en aquella universidad fue suficiente para que Jongdae entendiera varias cosas sobre esta. Para empezar, los más populares eran aquellos cuatro chicos con tatuajes que vio en su clase y su fama era de todo menos buena; para continuar, aquellas chicas de su clase eran populares pero por delante de ellas había una chica de segundo año llamada Taeyeon que era muchísimo más popular que cualquiera de ellas y era amiga de Baekhyun; para continuar, Baekhyun se hizo amigo de él nada más sentarse a su lado y, con eso, se hizo amigo de Kyungsoo – amigo íntimo de Baekhyun – y de Taeyeon que resultó ser seria pero amable.
Aquella universidad era, por decirlo de alguna manera, como cualquier otra, con sus nerds que se la pasaban todo el día en la biblioteca o en las salas de estudio, con sus populares y con los chicos malos del lugar. Solo esperaba que alguno de esos chicos malos no fuera como los de su universidad y se follaran al director – que sería raro – o algún profesor o profesora.
En todo caso, Jongdae lo tenía claro, si se metían con él se defendería.
Baekhyun le advirtió sobre esos cuatro chicos y le contó varias cosas que llamaron su atención. Al parecer, el líder de ese grupito se llamaba Minseok y era el de hermosas mejillas pero mirada fría; también le reveló que normalmente no buscaban pelea pero que si te metías con ellos, te burlabas o les decías algo que no les gustaba, no dudarían en ir a por ti; también descubrió de los rumores sobre vender drogas y cosas así que, por cierto, él encontraba absurdo.
¿En serio pensaban que cuatro delincuentes estarían en la universidad habiendo estudiado ya los estudios mínimos?
Por dios, había que tener un poco de mentalidad para saber que eran rumores, solo eso.
En todo caso, Jongdae encontraba aquello divertido y a la vez absurdo. Gracias sobretodo a Kyungsoo pudo ponerse más o menos al día con los deberes y la materia, descubriendo que tenía un trabajo que hacer de dibujo. Debía retratar a su mayor inspiración…
No tenía de eso, al menos, no una persona en concreta. Él solía inspirarse por cosas que sucedían en el día a día, a personas anónimas en sí, no con un nombre y apellido. Por lo tanto, sabía que lo tenía difícil, sobretodo porque no iba a dibujar cualquier persona, él se tomaba los trabajos y los retos muy en serio.
-¿Qué harás al final? –Preguntó Baekhyun en los baños mientras se peinaba sus negros cabellos, presumido lo era un rato.
-Ni idea… -Murmuró mirándose en el espejo con pereza –No tengo esa persona.
-¿Tu madre? ¿Tu padre? –habló Kyungsoo mirando el móvil como si no estuviera pendiente de la conversación cuando realmente les estaba escuchando.
-Mi padre no es mi inspiración –Protestó Jongdae –Bastante hago con escucharle hablar que la pintura es para gays y mujeres, que los hombres de verdad solo hacen carreras como medicina o abogados.
-¿No que eras gay? –Dijo Baekhyun riendo.
-Sí, aun así no es como si mi padre lo desconociera, jamás me oculté.
-Bueno ¿Y tu madre? –Insistió Kyungsoo –Ella es mi inspiración, siempre ha estado a mi lado y como madre soltera, soportando las críticas por ello, ha trabajado duro llegando a ser la subdirectora de una empresa de alimentos. Aunque no tenga nada que ver mi carrera, ella me ha enseñado que debo trabajar duro digan lo que digan.
-Tu madre es digna de admirar –Dijo Baekhyun.
-En eso tiene razón, es digna de admirar. –Habló Jongdae –Supongo que podría… Soportar a mi padre tiene que ser digno de admirar.
Los dos chicos se rieron de su comentario a carcajadas, notando apenas en aquella semana que Jongdae era un chico muy parecido a Baekhyun en personalidad solo que un poco más ácido. El humor de Jongdae era basado en bromas ácidas o sexuales, algunas de carácter soportable, otras no tanto, pero siempre sonriente.
-Bueno, es dentro de un mes ¿No?
-Sí, un mes y dos días y por dios, no te pongas esos zapatos con ese pantalón. –Protestó Kyungsoo.
-Como se nota que Kyungsoo quiere ser diseñador de moda –Rió Baekhyun –Como yo.
Ambos chicos estudiaban para diseñar y cogieron como asignatura optativa dibujo, queriendo mejorar sus habilidades en ese campo encontrándolo necesario entre otras cosas, por lo que la única asignatura que compartían era, de hecho, dibujo. Una triste realidad. Mientras que Kyungsoo quería especializarse en la moda masculina, Baekhyun quería dedicarse a la moda femenina, concretamente vestidos de gala y de boda.
Iban a seguir hablando cuando escucharon pasos acercarse y entrar dentro. Miraron detrás de ellos encontrándose con dos figuras con tatuajes en el cuerpo: Minseok y Luhan. El primero iba detrás con un rostro serio y el segundo iba delante con el móvil en sus manos escribiendo a toda prisa. Minseok les miró de reojo un tiempo y pasó de ellos. El nuevo, con el cual compartía todas las clases salvo idiomas, estaba ahí.
Luhan se fue al último grifo de agua, dejó el móvil encima del mueble de color blanco y mirando lo que le escribía la otra persona se lavaba las mano y se mojaba la cara y a pesar de ser invierno, apenas comenzaba diciembre, Luhan seguía siendo chico caluroso y acababan de estrenar en el equipo de fútbol de la universidad, apenas unos movimientos y ejercicios por lo que solo debían refrescarse. El problema era que las duchas y grifos de los vestuarios estaban en reparación.
-Por dios Luhan, lávate tranquilo, ese chico estará ahí igualmente. –Protestó Minseok.
Jongdae y los demás siguieron a lo suyo, hablando sobre el trabajo pero en susurros.
-Es que estoy interesado en lo que dice, quiero responderle rápido por si se piensa que no me interesa o tengo algo mejor que hacer.
-Que te tardes un poco no significa nada. –Dijo cogiendo su móvil. -¿Desde cuando escribes cosas tan cursis?
-Desde que Sehun me provoca demasiada ternura con sus apenas diecisiete años de edad.
Baekhyun, que escuchó aquello, abrió sus ojos alarmado y paró de hablar mirando a Luhan fijamente. Kyungsoo y Jongdae notaron aquello y se giraron, Luhan y Minseok seguían hablando a lo suyo.
-¿Sehun? –Susurró Baekhyun.
-¿Qué pasa? –Preguntó murmurando Jongdae.
-Sehun es mi primo por parte de madre… -Susurró Baekhyun –Espero que no sea el mismo Sehun…
-¿Cuántos años tiene? –Preguntó Kyungsoo.
-Diecisiete…
Jongdae pensó que, entonces, sí debía de ser el primo de Baekhyun, después de todo dudaba que hubiera demasiadas personas con ese nombre y con la misma edad por la zona. Claro que pobre Sehun entonces si se estaba relacionando con gente como ellos, eso es lo que debía de estar pensando Baekhyun seguramente, quien parecía tener un cierto asco hacia el grupo de Minseok por alguna razón que no entendía del todo Jongdae.
¿Sería solo su apariencia o había un motivo más oculto?
En todo caso, Baekhyun parecía furioso, lo que le hizo pensar que él y su primo eran muy cercanos y, quizás, protegía mucho al menor.
-Baekhyun, sabes que no te conviene meterte con ellos –Susurró Kyungsoo.
-¿Crees que no conozco mi posición? –Susurró saliendo del baño enfadado. –Mierda… Por mucho que quisiera no podría contra ellos, sé hapkido pero ellos aun así me mandarán al hospital de un solo golpe…
-Te preocupa que salga herido –Confirmó Jongdae, Baekhyun asintió.
-No son buenas personas, al menos a mi parecer. –Comentó él apretando sus puños –No son nada fiables.
Definitivamente, Baekhyun tenía una especie de rencor hacia ese grupo.
Ellos avanzaron con rapidez por los pasillos hasta separarse hacia sus respectivas clases, sin saber que fueron observados por Minseok y Luhan que les extrañó verles salir tan rápido. Por supuesto, ellos conocían a Baekhyun a pesar de que no le hablaran.
-¿Crees que debamos decirle? –Preguntó Luhan, Minseok se encogió de hombros.
-Es cosa suya, no nuestra –Dijo fríamente –Hasta que no se salga de las manos no tenemos por qué intervenir entre la relación de esos dos.
-Bueno, como sea no es cosa mía. Bueno, por donde iba… A ¿Qué te parece si quedo otra vez con Sehun?
-¿Y por qué me lo preguntas a mí? –Rió Minseok –Por mí como si lo metes en tu cama en la segunda cita, pero solo te informo que tengas en mente que es menor de edad y te pueden denunciar si quieren sus padres, tu aspecto no es confiable para nadie, menos como novio.
Luhan rió.
-Eso lo sé, Baozi, eso lo sé.
-Yo solo digo, aun así, haz lo que quieras. –Dijo él –No es asunto mío tu vida amorosa o sexual siempre y cuando no te haga daño de nuevo.
Luhan sonrió contento.
-Si no fuera porque me darás un puñetazo ahora mismo te abrazaba.
-Tienes suficiente con ese abrazo que te di hace meses.
-Perdona pero fue solo hace un mes y fue cuando borracho me puse a recordar viejos tiempos –Le recordó él como si aquello no doliera, Minseok le miró de reojo y suspiró.
-Te tengo mal acostumbrado… -Susurró abriendo sus brazos y Luhan le abrazó con fuerza. –Solo me gustaría conocer personalmente a ese Sehun, es un mocoso, puede no saber lo que hace realmente y hacerte indirectamente daño.
-Gracias, Baozi.
-No hay de qué, y ahora suéltame antes de que te dé un puñetazo de verdad.
-¡Mal amigo!
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Después de las clases de la mañana se reunieron los tres chicos con Taeyeon y sus dos amigas, Tiffany y Jessica. Se sentaron con la bandeja de comida – muy mala, por cierto – y comenzaron a hablar de lo que harían dentro de tres semanas cuando comenzaran las vacaciones de invierno. Jongdae, sentado al lado de Kyungsoo y sentado de manera informal, comía pensativo. ¿Qué persona podría dibujar?
No tenía una persona que fuera su mayor inspiración y no creía que su madre contara por ser capaz de aguantar a semejante marido.
-¡Tú, pedazo de idiota! –Se escuchó un grito por el enorme comedor, todos los alumnos presentes miraron hacia la dirección del grito, encontrando sus miradas en la mesa donde Minseok y los otros tres estaban sentados comiendo tranquilamente.
-Como no… -Murmuró Taeyeon –Busquen problemas o no, siempre son los que causan escándalo.
-¿Qué está pasando? –Preguntó Jongdae observando como un chico muy alto y maquillado se levantaba y caminaba lentamente hacia la persona que le gritó, un chico más bajito pero con músculos bien formados.
-Ese es Jongguk, es el capitán del equipo de balonmano del instituto y tiene una enorme rivalidad con Chanyeol, el chico más alto. –Explicó Kyungsoo a Jongdae –La chica de la cual está enamorado Jongguk le gusta Chanyeol, eso explica todo, básicamente.
-Ah… -Jongdae susurró –Patético. Yo jamás me restregaría así por nadie.
-Yo mucho menos –Dijo Baekhyun mirando la escena como si no le interesara.
-¿Quieres pelea, enano? –Se escuchó decir a Chanyeol cuya sonrisa se había perdido mostrando ahora un intimidante rostro serio.
-¡Voy a despedazarte! –Gritó Jongguk –Apártate de Hyuna.
Jongdae observó como Chanyeol sonrió de lado, como si aquello le divirtiera y se cruzó de brazos en una pose chulesca, mostrando que se creía superior al otro. Bueno, no era para menos, era más alto y musculoso, el chico de un puñetazo debía mandarlo a China como mínimo.
-Siento decirte que yo no me acerco a ella, es ella quien se acerca a mí –Corrigió sonriendo de lado –No me interesan las chicas como ella, así que tú y tus celos pueden irse de vacaciones por un tiempo si no quieres que te destroce la cara.
-Chanyeol –habló Minseok mirándole fríamente, Jongdae se encontró queriendo saber que iba a decir –Si vas a hacer algo solo hazlo rápido, su voz me da dolor de cabeza.
Jongdae alzó una ceja. ¿En serio? Chanyeol, por otra parte, se rió para después poner una expresión de seriedad.
-Como quieras, solo no quiero ser yo quien responda ante el director, Minseok.
-Como si pudiera expulsarte… -Murmuró Luhan escribiendo en el móvil algo.
Jongguk se lanzó encima de Chanyeol, comenzando así la pelea, y Chanyeol le empujó dándole después un puñetazo en su estómago. El más bajito se quejó para después querer lanzarle un golpe a Chanyeol, quien lo esquivó sin problemas y le dio otro puñetazo, esta vez en la cara.
-Cuando puedas golpearme ven a mí. –Se burló –Es aburrido enfrentarme a perdedores.
Jongdae frunció el ceño. Le caían mal las personas que se metían con otros, los que se burlaban de los demás en serio, no en broma como él hacía. Jongguk era patético, para que negarlo, pero no era como para dejarle en ridículo delante de toda la universidad ¿No era mejor irse al patio, a la parte trasera, y pelear allí donde pocos vieran?
Al menos así hacía las cosas Jongdae, a la antigua.
-No sé ahora mismo quien es más idiota de los dos –Comentó Jongdae en voz alta sin cortarse ni un pelo, haciendo que Minseok le mirara de reojo con frialdad, pero Jongdae lejos de asustarse le devolvió la mirada con la misma intensidad y después, sonriendo, le sacó el dedo medio.
Minseok se quedó con la boca abierta, igual que Luhan que dignándose a quitar la vista del móvil, vio aquel gesto e hizo una mueca. Ese chico iba a meterse en grabes problemas. Minseok frunció el ceño, chasqueó su lengua y se giró para seguir mirando la pelea entre Chanyeol y Jongguk.
Nadie salvo Luhan vio la sonrisa que puso Minseok después de girarse.
Una sonrisa traviesa que le mandó varios escalofríos.
-El más idiota es Chanyeol, por supuesto. –Comentó Baekhyun también en voz alta.
En ese momento Jongguk consiguió golpear a Chanyeol tirándolo al suelo y todos los espectadores se taparon las bocas con sus manos asustados. Nada bueno salía de golpear a Chanyeol. El más alto sonrió sentado en el suelo.
-Yo te mato… -Murmuró.
-¡Chanyeol! –Gritó Minseok -¡Detente! Lo que quieras solucionar hazlo después, sea lo que sea estás distraído, así no conseguirás nada.
Chanyeol rió y se tapó la cara con una de sus manos.
-En eso tienes razón… Me distraje por un momento.
Jongguk, golpeado en casi todo el cuerpo, salió de allí frustrado porque Minseok de nuevo intervenía. Siempre que comenzaba a alargarse una pelea intervenía porque le aburría o porque simplemente quería. No solía haber un motivo en específico.
Después de aquello Chanyeol se levantó del suelo y se sentó en su sitio como si nada pasara, con una enorme sonrisa en su rostro y se puso a comer. El resto de la comida pasó sin problemas, por lo que los estudiantes pudieron seguir con sus conversaciones y sus risas sin que nada les interrumpiera, ya fuera una pelea o algún grito dirigido a la mesa donde se sentaba el grupo de Minseok.
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Después todos volvieron a sus clases. Jongdae caminaba acompañado de Baekhyun y Kyungsoo por los pasillos hasta que se topó con una escena delante de sus ojos que no le gustó para nada. Minseok miraba fríamente a un chico que temblaba, pidiéndole algo al parecer que Minseok no le concedía.
-Por favor, prometo que intentaré no temerte… -Dijo.
-Eres un pesado –Habló Minseok –Dije que me dejaras en paz o te golpearé, no te amo ¿De acuerdo? Pudiste conseguir que te amara, pero eres demasiado cobarde, la frustración de tener que rebajar mi carácter hizo que lo poco que me gustaba de ti se fuera de vacaciones para no volver.
-Pero…
-¡Dije que dejaras de joder! –Gritó Minseok.
-Chico, hazte un favor a ti mismo y piérdete –Habló Luhan –Minseok te dejó, acéptalo. No le interesas, no eres digno de su amor.
-¡No te metas!
-Me alzas la voz de nuevo y no dudaré en partirte los huesos –Dijo Luhan.
Minseok suspiró.
-Piérdete.
-¡Pelea conmigo! –Dijo el chico –Si gano me darás una oportunidad.
Minseok, entonces, sonrió. Lamió sus labios y le dio un puñetazo en todo el estómago, suficiente para tirarlo al suelo y dejarlo en shock. Movió su cuello a ambos lados y alzó el brazo para golpear de nuevo cuando sintió que alguien le empujaba hasta tirarlo al suelo donde de la misma sorpresa de quedó.
Jongdae, ignorando el grito de Baekhyun intentando detenerle, fue hasta allí y le empujó. No pudo evitar meterse.
Cogió al chico que estaba tirado en el suelo y le dijo que se fuera antes de perder la poca dignidad que le quedaba. Minseok se fue levantando lentamente, mirando a Jongdae con frialdad.
-Va a morir –Susurró Luhan.
-Le compadezco, es guapo –Dijo Yixing.
-Le dije que no se metiera… -Murmuró Baekhyun mordiéndose las uñas.
Minseok quiso darle un puñetazo a Jongdae pero este lo esquivó sin problemas y le pateó, aunque Minseok pudo detener la patada a tiempo.
-Gente como tú es lo que más odio –Dijo Jongdae sonriendo como si nada.
-Gente como tu es lo que me encanta follar –Respondió él también sonriendo, aunque la tensión se veía en el ambiente. Jongdae apartó su pie ligeramente sonrojado.
-Que te jodan.
-Te joderé yo a ti.
-Eres molesto –Dijo Jongdae, Minseok sonrió.
-Tú y yo, a la salida de la universidad en el patio trasero, solo presentes mis amigos y los tuyos –Habló Minseok –Como no asistas haré tu vida tu peor infierno.
Jongdae rió.
-Perdona, pero dudo que alguien como tu pueda molestarme. –Dijo –Y da por hecho que te ganaré, sanguijuela.
Jongdae se fue de allí ignorando las miradas de todos dejando atrás a Minseok y sus amigos. Minseok permanecía quieto mirando a Jongdae fijamente, hasta que Luhan le tocó el hombro preocupado.
-¿Minseok?
-Luhan… -Susurró –Creo que me he enamorado.
Se hizo un silencio sepulcral hasta que alguien gritó.
-¡¡¿Qué?!! –Gritó Luhan –Os habéis golpeado y eso ha bastado para enamorarte después de años buscando…
-No sé… -Murmuró –Pero me he enamorado, ese chico no me teme, es hermoso, su sonrisa es como la de un lindo gatito… Y mi corazón late extrañamente rápido… ¿No está el chico brillando?
-Odias los gatos. –Le recordó.
-Ya no.
-Odias las cosas lindas.
-Ya no.
-Ese chico tiene el culo muy hermoso.
-Le miras el culo y le diré a Sehun cuando le conozca que miras el culo de otras personas.
-Pobre de ti que le digas eso y sí, el chico te gusta, aunque dudo que te hayas enamorado a primera vista, primero comprueba que realmente es tú tipo. –Rió Luhan –Aunque también deberás de comprobar que realmente no te tema, después de la paliza que le darás no sé yo…
-Si después de eso sigue sin temerme juro que entonces ese chico será mío… -Murmuró. –Ese chico nuevo… Sabía nada más verle que sería interesante.
Y por primera vez en mucho tiempo, sus tres amigos vieron sonreír a Minseok de verdad. No una sonrisa de medio lado, tampoco fría o sarcástica, era una sonrisa que iluminaba su rostro.
Bueno… Los próximos días serían interesantes.