La boda sería a las 2 pm así que tenía que pasar el resto de la mañana terminando de wmpacar sus pertenencias. Se saltó el desayuno e ignoro el almuerzo tambien. Eso era porque su estomago no lo soportaría. Un ridiculamente y enorme limosina fue a buscarlo para llevarlo a su nueva casa donde una estilista lo estaría esperando. Los ojos de la mujer lo analizaró de arriba hacía abajo, su cabello, su personalidad, ojos y labios.
—No necesitas maquillaje—dijo
—Por favor, no quiero que las personas de mi trabajo me reconoscan—respondió Hae
—¿Cómo arreglar un poco tu cabello y un poco de delineador como un cambio?
Hae sonrió animadamente y la mujer de mediana edad sintió su corazón golpeando.
Trabajó con él por un rato. Cuando terminó, pregunto si podía verse en el espejo pero no le dejo mover ni un poco la cabeza.
—Primero tiene que vestirse, Mr. bien parecido, ¡esto puedes hacerlo tu mismo!
Hae hizo un puchero y la mujer casi cede pero los golpes salvajes en la puerta la salvaron. Hae comenzo desabotonando su camisa.
Kyu venía con el traje. Hae miró y su mandibula se desencajó.
—oh... mi... Dios—susurro
—¿Qué? ¿Qué está mal?—Hae entró en pánico
Kyu cerro la boca y tragó.
—Hyuk es un bastardo con suerte—sus ojos ojos puestos en su cuello. Rápidamente miró a otro lado en la suit
La estilista empujó afuera al hombre y ordenó a Hae vestirse rápidamente. Hae obedecio. Luchó con los puños de la camisa pero la estilista le ayudó.
—Aish, aún eres un niño y vas a casarte ya—dijo ayudandole con los botones.
Hae se sonrojó.
—si
Ella le apretó las mejillas y el seguía vistiendose.
Hae se paro frente al espejo. Lucía bien, realmente bien. El vago sonrojo en sus mejillas eta real, no maquillaje sobrecargado. Siempre había amado las bodas y la suya la había imaginado muy diferente, una parte de él ya estaba exitada.
—Si Mr. Lee es feliz con el resultado, me hará tu estilusta permante—dijo la mujer
—creo que pudes considerarte contratada—respiró Hae
La mujer sonrió.
—Eres tan lindo, mi Señor
Hae se puso tenso.
—Por favor, llamame Hae
Ella gimió.
—Eso no es apropiado—exclamó
—cuando estemos solos, por favor. No me gustan los titulos
Ella asintió, el le suplicó con los ojos que eso era lo mejor.
Heechul no dijo ninguna palabra cuando escoltó a Hae hacía Hyuk.
—Hyung, ¿estás enojado conmigo?—Hae susurró
—Por Supuesto que no, joven amo
Hae Gimio.
—Si su señoría me lo permite, quiero estar fuera de aquí
—Yo quiero esta boda, chullie
Heechul apretó los puños.
Se detuvieron en la puerta. Heechul abrazó a Hae y luego tomó su rostro gentilmente.
—Te amo, Hae Hae—susurro y le besó la frente
Hae asintió y abrazo fuerte a su hyung.
—¡tambien te quiero!
Un carraspeo los hizo separarse.
—Hola de nuevo, Mr. Cho. ¿Está Hyukjae listo?
Kyu asintio, siguiendo como Heechul miraba y tocaba a Hae una vez más.
Hyuk estaba hablando por teléfono mientras caminaba. Giró y sus ojos fueron a un sonriente Kyu a su... casi esposo. El muchacho lucía bien, muy bien. Hyuk sonrió complacido, feliz con su nueva poseción. Hae nunca lo vio directamente.
—Vamos a hacer esto—dijo tirando del codo del joven
—Recuerda que mis padres estarán ahí y debemos actuar enamorados—le recordó Hae
Hyuk bufó.
—Si, lo sé, no te preocupes, puedes estar seguro que haré lo que quieres. La ceremonia será rápida
Entraron en la gran habitación. Los invitados fueron a sus lugares. Hae vio a sus padres y sonrió. Min tambien le dio una pequeña sonrisa. Se detuvierón frente al juez.
Cuando el hombre empezó a hablar acerca de los valores de vida, la mente de Hae se perdió. Hizó como si estuviera feliz. Rezó para que sus padres no se dieran cuenta de la mentira.
Hyuk de repente se acercó y le susurró.
—estará bien si imaginan todo lo que te haré está noche
Hae se sonrojó y desvió la mirada. Las personas en la habitación lo veián adorable.
—apreciaría si moderas tu lenguaje tan rudo—susurro Hae de vuelta
—Lo siento niño, nunca tuve la crianza que tuviste. Es mejor que se acostumbre a eso—Hyuk sonrió
Los votos fueron estándar. Hae había visto suficientes dramas cómo para saber actuar. El temblor de la mano cuando el intercambiarón anillos le dijo que todo era real. Tan real que sentía molesto por lo que estaba haciendo, y sentía miedo por el futuro. Su nuevo esposo era un extraño y el solo podía sentir miedo por las cosas malas que podrían haber en el futuro.
—Puedes besarlo—el juez pidió
Hae despertó de su ensoñación. Sus ojos destellarón. No había anticipado eso. Supo que le estaba tomando el pelo cuando el mayor sonrió sobre sus labios, tenía que ser un bastardo. Hae pensó en levantar un poco la rodilla y golpearlo cuando Hyuk de nuevo le agarró las mejillas. Lo vió con miedo. Lo ultimo que vió antes de cerrar los ojos, fue la sonrisa en el otro rostro. Hae esperó pero no sintió nada. Escuchó como reía entre dientes y un chasqueo cuando abrió los ojos. Hyuk estaba imposiblemente cerca pero sus labios se estaban tocando.
—Un poco más largo y hubieras parecido un tonto—Hyuk sonrió
Hae se quedó de pie observando la burla en sus ojos. Levantó los brazos y los pasó alrededor del cuello de su esposo. Sus dedos enredados en su cabello. Vio a Hyuk fruncir el ceño y por poco rie.
—Solo es para hacerlo más real—susurro Hae
—si esto fuera real, estarías hecho un desorden ahora—Hyuk resopló
Hae rodó los ojos.
—Eso es todo lo que quieres de di—dijo y forzó un rostro asustadizo
Hyuk abrió los ojos en shock.
—El que—susurro y lo dejó solo
La habitación aplaudió.
Hyuk se quedó de pie rigidamente.
—que clase de beso—comentó Kyu. Hyuk lo ignoró, sus ojos sobre su esposo quien abrazaba a sus amigos y familiares
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