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Capítulo Ocho
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La mañana había sido especialmente terrible para él. Apenas abrió los ojos sintió el cuerpo sumamente adormecido, su vista estaba turbia, un dolor agudísimo en la cabeza y además le ardía el estómago. Tuvo que pestañear varias veces ignorando el escozor que sentía en los ojos para poder pararse. ¿Cómo rayos había terminado en este estado tan lamentable?
Nunca antes el ruido del reloj sonó tan fuerte a sus oídos, tampoco el canto de los pájaros. El más mínimo ruido lo aturdía de tal modo que… ¡no sabía cómo describirlo! si por haber tomado algunas copas la noche anterior había quedado en ese estado, juraba ante dios no tomar nunca jamás un trago.
Encorvado, se las arregló para arrastrar su cuerpo al baño, para remojarse el rostro. Se encontraba apoyado en el mármol del lavamanos y se detuvo a ver fijamente la cara de muerto que tenía en esos momentos, solo puso sus manos en su pálido rostro y las pasó distraídamente por su cabello desordenado.
Definitivamente el alcohol no era lo suyo.
Espera un momento…
Cabello rubio, ojos azules y piel morena vinieron a su mente. Su cara se tornó del tono más intenso que jamás había visto en su vida, similar a su fruta favorita, el tomate. Y bufó ligeramente al acordarse lo que había pasado la noche anterior; luego se encargaría de saldar cuentas con ese dobe y el bastardo de Kiba.
Suspiró.
Gracias a dios hoy era domingo y no tendría que ir a su trabajo, sin embargo, ello no implicaba que no tuviera cosas que hacer en la mañana. La familia de Itachi y su madre no tardarían mucho en llegar a su apartamento.
Tras ladear la cabeza empezó a lavarse la cara con agua fría y abundante, de momento se quedaría como estaba, con una camisa de tirantes y en boxers, luego ya vería que se pondría. Se secó el rostro con una toalla y cuando miró hacia la puerta del baño se encontró unos ojos grises preciosos que lo miraban expectantes. ¡Mierda! ¿Qué hora era en esos momentos? ¿Ya era tan tarde?
-Buenos días Sasu-
-… … … … … …asu- escuchó, y sin muchas ganas miró de reojo a su pequeño sobrino en la puerta del baño, ese pequeño terremoto que siempre andaba de arriba a abajo y solo quería estar jugando todo el tiempo, nada que ver con el sereno y centrado de su hermano, era igual de risueño que su cuñada pero ello no podía evitar que quisiera al pequeño como si de un hijo se tratara. Si el pequeño Sora estaba ahí arriba, ¿ello significaba que su hermano habría llegado hace algún tiempo a su casa?
Sonrió ampliamente al ver la forma en que el niño había corrido en dirección suya para abrasarlo fuertemente y simplemente se limitó a revolver los negros y desordenados cabellos del niño, viéndolo detenidamente se pudo dar cuenta de algo, con marcadores de agua tenía pintada en su cara lo que parecía ser unos ¿Bigotes de zorro?
-… … … me los dibujó ¿Te gustan?-
Espera…
////Flash Back///
Él no podía evitarlo, estar observando de forma tan impasible la forma en que actuaba Naruto, así como el rubio tampoco podía evitar actuar de esa forma.
Sencillamente le gustaba salir, sentirse vivo, ser centro de atención a donde quiera que fuese… así era él y Sasuke con el tiempo había aprendido a aceptarlo… un poco.
-… … … … … … … …. … … … … … … … … … … …-
-… … … … … … … … … … … … … … … … …-
Es por ese mismo motivo que no pensó dos veces en subirse al improvisado escenario a participar del karaoke y bailar un poco junto a Kiba, haciendo que Sasuke lo observara avergonzado, quien por cierto se había negado a subir con él en múltiples ocasiones por esos mismos motivos, Sasuke era consciente que cantaba bien, pero sencillamente esas cosas no eran lo suyo.
-¡No seas un amargado y sube de una vez!- Naruto le tendió una mano y Sasuke se negó educadamente y con una ligera sonrisa torcida mientras continuaba bailando en compañía de Ino que se reía al ver al rubio tan animado. –Eres un aburrido- dijo Ino y sasuke frunció el ceño mientras tomaba su bebida de golpe.
Pudo ver la forma en que una chica alta y morena se subía al podio con el rubio, haciendo que el azabache pusiera todos sus sentidos alerta.
Ino soltó unas cuantas carcajadas mientras le daba unos cuantos golpecitos a Sasuke en el hombro, solo para intentar animarlo.
Continuaron bailando, viendo como esa chica y Naruto acercaban sus caderas, danzando al ritmo de la música.
-Bastardo…- El azabache soltó entre dientes y observó fulminante a la chica que estaba cortejando descaradamente a su pareja, ¿Y quién podría culpar a Naruto?… el mentecato había nacido para llamar la atención, era guapo, fornido, extrovertido, eufórico…y bailaba…dios… "A la mierda con todo…”
-…. … … … … … … … … … … … … … … …-
Él sabía que haber venido a este lugar era una pésima idea ¡Maldición! Él sabía que tuvieron que haber rechazado esa condenada invitación. Pero también sabía y aceptaba que había sido su error ¿Por qué? Sencillo, por responder que si a todas las proposiciones que le hacía el rubio y descerebrado de su novio, aun cuando él no podía entender sus preguntas ni aquello a lo cual estaba respondiendo que “si”.
Por ese mismo motivo, ahora se encontraban en la despedida de soltero de Kiba, uno de los técnicos veterinarios que trabajaba junto a ellos, al igual que Naruto, era un idiota sin remedio, sin embargo debía admitir que al igual que el rubio también era una persona de muy buen corazón, sin embargo eso no podía evitar que él aún pidiera que dios se apiadara de la chica que se casaría con él.
No todo era malo, pensó él, al menos se había llevado una agradable y grata sorpresa al llegar a la discoteca en que se realizaba el evento, y esa fue encontrarse con nada más ni nada menos que con Ino, su trabajadora social quién había resultado ser una gran amiga de Naruto.
El destino era algo muy curioso.
-Ve y protege tu propiedad-
-… … … tege tu propiedad- Soltó Ino guiñándole el ojo a Sasuke que negó con la cabeza.
-… … … … … … … … … …-
-… … …-
Repentinamente, ella vio la forma como el Uchiha subió al escenario y de golpe casi echa a empujones a esa chica que se encontraba cortejando a Naruto. -¿Hasta que por fin te decidiste a subir?- Naruto miró divertido al azabache que lo golpeó fuertemente en el hombro.
-¡Idiota! -
-Encantado- sonrió Naruto acercando su rostro y besando levemente al Uchiha en la mejilla mientras le pasaba otro micrófono y casualmente ponía la canción que cantarían. –Suerte-
Casi sufre un mini infarto al dirigir su vista al público y ver la enorme cantidad de personas que los miraban.
Él suspiró lentamente intentando resignarse y aceptar aquello en lo cual se había involucrado, mientras dirigía su mirada nerviosamente hasta la pantalla del karaoke ¡Rayos! ¿Acaso no pudo haber escogido una canción más horrible y cursi? Al menos él conocía la canción, es decir, a pesar que era una canción de niña, era la canción del momento cuando eran jóvenes, motivo por el cuál suponía que no debería tener problema alguno en cantarla de memoria.
Él sabía que se la pagarían todos y cada uno de ellos cuando esto terminara.
(Sasuke)
“Quiero hacerte un regalo
Algo dulce, algo raro. . .
No un regalo común
De los que perdiste o nunca abriste
Que olvidaste en un tren o no aceptaste”
-¿Sabías que esos dos siempre actuaron de esa forma desde que estaban en la secundaria?- Mencionó Kiba mientras se acercaba a Ino pasándole un trago.
(Naruto)
“De los que abres y lloras
Estas feliz y no finges
En este día de septiembre
Te dedicaré el regalo más grande”
-Ya lo suponía- sonrió divertida mientras miraba a los dos muchachos cantando sobre el escenario, especialmente al pelinegro, porque a pesar de estar completamente sonrojado, cantaba hermoso. Todas las mujeres en el lugar estaban suspirando por él.
(Sasuke)
“Quiero entregar tu sonrisa a la luna y que
De noche que la mire pueda pensar en ti
Porque tu amor para mí es importante
Y no me importa lo que diga la gente porque”
-Sabes, yo también conocí a Sasuke cuando era pequeño, solo que no hablamos nunca, sin embargo su hermano mayor es una persona muy agradable con la cual salgo de vez en cuando a tomar un café-
-Nunca imaginé que Sasuke había sido amigo de Naruto- Añadió -Me alegra mucho que se hayan reencontrado y ahora estén juntos… aunque nunca esperé que de esa forma jajaja-
(Naruto)
“A mí en silencio sé que me protegías y sé
Que aún cansada tu sonrisa no marcharía
Mañana sale de viaje me llevaré tu presencia
Para que no se vaya y siempre vuelva
El regalo más grande.”
(Sasuke)
“Yo quiero que me regales
Un sueño escondido
O nunca entregado
De esos que no pueda abrir
Delante de mucha gente
Porque el regalo más grande
Solo es nuestro para siempre”
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Estuvieron bailando y divirtiéndose hasta elevadas horas de la noche, Sasuke estaba muy afectado por el alcohol y estaba comportándose de forma un tanto extrovertida y jovial rotundamente distinto a su actitud calmada y meditativa, cosa que sorprendió a todos los presentes.
El trago que le había dado Kiba se llamaba “four loko”. Tenía un amargo sabor que le quemó la garganta, pero a medida que iba ingiriendo otro y otro trago del mismo se sintió alegre, ligeramente mareado y con ganas de festejar.
Antes de darse cuenta ya había bebido la mitad del vaso y estaba bailando en medio de la pista, tambaleándose de un lado a otro. Por alguna razón no sentía la eterna vergüenza e inhibición que siempre lo caracterizó, tampoco le importaba cantar en voz alta. Qué más daba, se sentía feliz. La música partía sus oídos en dos de lo fuerte que estaba.
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-… … … … … … … … … … … … … … …-
-¿T… ...os a casa?- escuchó
-¿Te llevamos a casa?- le preguntaron Naruto y Kiba mientras intentaban sacarlo fuera para que pudiera tomar un poco el aire.
-…-
-¡Rayos Kiba! ¿Qué mierdas le diste a Sasuke para que quedara tan mal?-
-No es mi culpa, no tenía idea que Sasuke fuera de esas personas que no toman nunca-
-No te diré nada solo porque somos amigos-
-¿Nos vamos ya?- Sasuke pasó sus brazos alrededor de Naruto, besando sus labios y riéndose ligeramente entre cada beso. Naruto estaba muy asombrado por la actitud tan desinhibida del moreno, sin embargo ello no pudo evitar que le agradara esa parte de Sasuke.
-Si quieren yo los puedo llevar a ambos a casa, no creo que llevar a Sasuke en moto sea muy seguro que digamos - ofreció Kiba mientras se rascaba la nuca y los miraba a ambos, Sasuke estaba colgando del cuello de su amigo, dándole besos cortos en el cuello mientras su amigo acariciaba el pálido pecho del azabache pasando sus manos por debajo de su camisa. Aparentaban estar a punto de armarse semejante espectáculo frente a la vista de todos.
-Ehm.. Ehm- Fingió toser intentando llamar la atención de ambos.
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Una vez llegaron al apartamento de Sasuke y habiéndose despedido del castaño, ambos procedieron a entrar.
-¿Qué te parece si continuamos con lo que habíamos comenzado?-
-¿Qué... parece… continuamos… … … … habíamos comenzado?- escuchó a Naruto mencionando de forma picara.
Luego de decodificadas las palabras y luego de pasados los cinco segundos de costumbre, Sasuke se había estremecido ante el comentario de Naruto, simplemente lo había tomado desprevenido, poniéndolo tan rojo como su fruta favorita, el tomate.
Naruto se le acercó a él y lo agarró de la cintura, acariciándolo con una de sus manos.
-Naruto...para...- le sujetó la mano, apartándole un poco.
-Solo déjate llevar...- dijo Naruto mientras acorraló a Sasuke contra la pared, besándolo profundamente y hundiendo su lengua, acariciando el miembro del azabache por encima de sus pantalones ajustados que ya comenzaba a erguirse. -¿Ves?-
-Ahn...eso lo p-provocar tu...pervertido- dijo Sasuke, mientras su novio lo volvió a besar.
Naruto nada más pudo guiñarle un ojo, con otra sonrisa pícara.
-Solo terminar lo que comenzaste- Sasuke se rio alcanzando los labios del rubio, perdiéndose en esa boca. Sorprendiendo agradablemente a Naruto que correspondió efusivo al beso, sintiendo la lengua traviesa del pelinegro dándole juego, quien estaba acariciando con sus manos el fuerte cuerpo del rubio.
-Cómo tú ordenes…- Naruto volvió a abalanzarse encima del azabache, rodeándolo con sus brazos… profundizando el beso.
Las fuerte manos de Naruto acariciaron con fuerza el abdomen del Uchiha, parándose en el borde del pantalón, acariciando por encima de la tela la erección del moreno, quién seguía suspirando contra sus labios al separarse, buscando otra vez su lengua, volviendo el beso húmedo y excitante.
Las delicadas manos del azabache lo agarraron del cuello de la camisa, haciendo que cayera encima de él contra una pared; comenzó a desabrochar la camisa de Naruto y acariciando su trabajado pecho, sintiendo la excitación recorrer su cuerpo.
Abrieron la puerta del cuarto torpemente, quitándose las camisas nerviosamente, dejándolas olvidadas en el camino mientras se dirigieron a la cama.
El rubio sentó a Sasuke en la mullida cama, subiéndosele encima en cuatro patas. El azabache estaba sintiendo la mano de su novio metiéndose por dentro de sus jeans ajustados, desabrochando con nerviosismo el botón y facilitando el acariciarle.
Sintió como Naruto se separó de sus labios tras haberlo mordido en ellos, sacándole un sonoro gemido a la vez que Naruto notó como su pantalón comenzaba apretarle.
-Me vuelves loco Sasuke…- lo agarró fuerte de las caderas quitándole los pantalones, y desabrochándose los suyos, estuvo unos segundos viendo el cuerpo expuesto de Sasuke, sintiéndose más excitado que nunca.
-… … … …loco Sasuke-
Se puso encima de él, acariciando su pecho blanco, pellizcando sus pezones, escuchando sus débiles gemidos, dejando un camino húmedo desde su cuello blanco, mordiendo la piel que encontraba a su paso, llegando al borde de sus boxers negros. Lamiendo por encima de la tela la erección del pelinegro, sintiendo las manos de este acariciar sus cabellos rubios, tirando eróticamente de ellos.
Una parte suya odiaba enormemente mostrarse tan sumiso ante Naruto, pero no podía evitarlo, la personalidad de ese dobe era simplemente avasalladora, aparte que una parte suya deseaba sentirse amado y protegido en los brazos de otra persona y digamos que el alcohol tampoco ayudaba.
-Ahn…no me tortures…- se mordió el labio inferior al sentir como Naruto le quitaba lentamente su ropa interior, sintiendo la respiración del mayor en su parte baja, arqueándose levemente al sentir el contacto caliente y húmedo de la lengua en su miembro erguido, gimiendo sin pudor, la lengua de Naruto recorriendo toda su extensión hábilmente, metiéndoselo de golpe en la boca, succionándolo y haciéndole desvariar. -…¡Ahhn!-
-D-éjalo…ahhn…o me-me correré…- se mordió el labio, respirando fuertemente.
Naruto sonrió internamente.
Se limitó a bajar hasta la entrada del azabache, lamiendo sensualmente aquella zona tan sensible y arrancándole fuertes gemidos a esa voz que tanto le gustaba, excitándose tanto que su entrepierna le comenzaba a doler.
-… … … … … … … … … … …-
-… … … … … …-
-no aguanto- dijo mientras subió para besar los labios de Naruto. Podía sentir la forma en que el azabache movía las caderas, volviéndolo loco. -Rayos, Sasuke…eres tan delicioso- dijo el rubio, pero cerró los ojos al sentir la mano del azabache jugando tímidamente con su miembro erguido y excitado, sacándole roncos gemidos que hacían eco dentro del apartamento. -…voltéate…ahh…- acarició el rostro de Sasuke, mordiendo esos labios carnosos. Este asintió y se volteó elevando sus caderas, sintiendo las manos de Naruto agarrando fuertemente sus caderas.
-…quédate así a gatas…- dijo Naruto mientras sonrió de forma pícara. Sasuke estaba nervioso, pues pudo predecir lo que venía…pudo sentir la forma en que uno de los dedos de Naruto entraba en él.
-Du-duele…bastardo- gimió débilmente, mientras sus ojos de pusieron llorosos y intentaba encestarle un fuerte golpe en la cara.
-Te aseguro que te va a gustar-
-… … … … … te va… gustar- masturbó fuertemente el miembro de Sasuke, haciendo que se olvidara de ese dedo, pudiendo introducir otro, moviéndolo lentamente, sintiendo como los gemidos de dolor de Sasuke se volvían en unos de puro placer. -¿Ves? Te está encantando…-
Se lamió los labios.
Sasuke le volvía completamente loco…
-Ahh métela yaa…- gimió entrecortadamente, haciendo que el deseo de Naruto creciera a más no poder, sintiendo el miembro duro contra su entrada, -Ahhn…- gimió anticipadamente al sentir como su novio presionaba su miembro contra su entrada.
Sintiendo las manos de Naruto agarrar erótica y fuertemente sus nalgas. Entrando en él poco a poco, haciendo que gimiera fuertemente, sintiendo una corriente recorrer por completo su cuerpo, tensándose y atrapando deliciosamente el miembro del mayor.
-Dios…ahn…eres tan estrecho y caliente…- besó y mordió la nuca de Sasuke, moviéndose lentamente dentro de él, sintiendo su miembro completamente atrapado y apretado, acariciando al ritmo en que entraba y salía de dentro de ese cuerpo el miembro de Sasuke, empezando a moverse más rápido al escuchar los fuertes gemidos de placer del azabache y los ruegos por más, y él le daría mucho más. -… ¡aaah!-
Así estuvieron por lo que había parecido una eternidad, cuando en la habitación inundada por gemidos se pudo escuchar la voz de uno de ellos.
-Me-me corro…- arremetió contra el trasero de Sasuke, sintiendo como llegaba al clímax, gimiendo fuertemente, sintiendo como Sasuke también llegaba derramándose entre su mano. Mordiendo eróticamente la nuca del azabache, cayendo exhausto encima de él, respirando fuertemente. -…ah…-
Salió de dentro de él poco a poco.
Naruto se había dejado caer completamente agotado y exhausto sobre su cama; el suponía que esas eran las consecuencias de haber tenido una ronda de buen sexo salvaje y descontrolado con la persona que amaba, luego se volteó a mirar a Sasuke, el cual estaba todavía jadeando y todavía sintiendo los espasmos del orgasmo recorriendo toda la extensión de su cuerpo, y le dedicó una sonrisa satisfecha.
-¡Sasuke, contigo el sexo es perfecto!-
-¡… …, conti… el sex… es perfecto!- escuchó
(Nota del autor: Ahora ya todos saben cómo es que sucedió aquel “Incidente”)
////Fin del Flash Back///
Sonrió ampliamente al ver la forma en que el niño había corrido en dirección suya para abrasarlo fuertemente y simplemente se limitó a revolver los negros y desordenados cabellos de su sobrino, viéndolo detenidamente se pudo dar cuenta de algo, con marcadores de agua tenía pintada en su cara lo que parecía ser unos ¿Bigotes de zorro?
-… … … me los dibujó ¿Te gustan?-
Espera…
Antes que pudiera haber sido capaz de preguntar algo, el niño se había ido corriendo de su cuarto, bajando las gradas de dos en dos.
-… … … … … … … … … … … … … … … … … … …-
-¿… … … … … … … … … … …? -
-… … … … … … … … … … … … … … … … … … … … … … …-
-… … … … … … … … …-
-¡… … …!-
Escuchó una gran cantidad de voces provenientes del piso inferior ¿Qué estaba pasando? Con nerviosismo, decidió salir de su cuarto y dirigirse a la sala de estar, tímidamente bajó las gradas encontrándose con toda la familia ahí reunida que lo miraban detenidamente, su hermano, su cuñada, su sobrino, su madre y… Naruto… ¡Naruto!
Sonrió ligeramente.
Sin duda alguna él sabía que le tocaría dar un gran número de explicaciones.