Bajo rápidamente hacia la entrada para comprobar que lo que había visto era cierto. Al llegar observo a una chica de piel pálida, su cabello era bastante largo y de color azabache atado en una coleta, se encontraba hablando con uno de los empleados. Miré su ropa, traía una camiseta negra y un pantalón corto verde.
Cuando miró en mi dirección pude ver mejor su rostro, sus ojos cafés me miraron por unos minutos y luego mostró una gran sonrisa.
Y sí, es mi hermana menor.
-¡Andrea!- Corrió hacia mi y me abrazó
-Hola- Fue lo único que pude decir. y yo que creía que ya me había librado de ella…
-¿Qué? ¿Librarse de quién?- Preguntó inocentemente
-¿Ahora también puedes leer mi mente?- ¿Luego que sigue?
-¿Leer la mente?- Inclinó ligeramente su cabeza hacia un lado- No sabía que podía hacer eso- se puso pensativa- No, no fue eso. Siempre piensas en voz alta- recordó con una gran sonrisa. Tiene sentido…
-¡Melanieeeeee!- Escuché un grito atrás de mi. Verónica se acercó a nosotras con tanta felicidad que su rostro brillaba
-¿Hmm?- Se separó de mi y la miró unos segundos, apartó su mirada y la regresó a mi- Me alegra verte de nuevo Andrea- Dijo emocionada
-Melanie…- Se tiró al suelo dramáticamente
-Levántate- Le dije a Vero al verla llorar en el suelo. Mi hermana me sonríe ignorándola
-¿Vamos adentro?- Agarró mi mano y empezamos a caminar hacia adentro pero Vero no se movió
Me da bastante curiosidad saber que hace aquí, se supone que tendría que estar en casa de mis abuelos (de parte de mi padre) hasta… ¿Hoy? ¡¿Qué?! ¡Lo había olvidado! Con todo el problema con la profe y… ¡¿Por qué justamente hoy?! No podía venir por ejemplo… ¡Nunca!.
Sueno bastante cruel pero simplemente no la soporto. Es tres años menor (Actualmente tiene trece) Melanie es idéntica a mi padre, yo a mi madre y está también la mayor de las tres… pero esa es otra historia.
Melanie siempre ha sido la más consentida, mis padres siempre están cumpliendo todo lo que ella quiere.
También está la otra, esa que es perfecta y que “nunca ha cometido errores” NUNCA.
Y ¿Yo? Soy la de en medio, no tengo nada especial.
Di un fuerte suspiro. La verdad no me importa, hace mucho me di cuenta que no importa que tanto me esfuerce para ellos siempre seré “la defectuosa”.
-¿Andrea?- la miré con desprecio
-¿Qué quieres?- Respondí fríamente
-¿Estás bien?- Como es más pequeña que yo tuvo que pararse de puntitas para tocar mi frente comprobando si no tenia fiebre
-Aléjate- Le di la espalda y empecé a subir a mi habitación
-¡E-Espera Andrea!- Empezó a correr siguiéndome pero le cerré la puerta en la cara
Alexandra me mira curiosa.
-¿Eh? ¿Seguías aquí?- Me senté en mi cama
-Si, acabo de terminar esto- Señaló su libro- Gracias por haberme ayudado- Le Sonreí
-No fue nada- Ella observó la puerta
-Aún no cambian- Alcé una ceja- Pero no te juzgo, debes tener tus razones… supongo- mostró una media sonrisa
-Claro- Ambas nos quedamos en silencio
-Bueno, ya me tengo que ir- Se levantó con sus cosas
-Te acompañaría pero no me quiero topar con gente no deseada- señalé la puerta
-Ok, nos vemos el lunes- Se despidió y luego salió de la habitación. Me acosté con cansancio, había sido un día bastante largo. Sin darme cuenta después de un rato me quedé dormida.
*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*
El lunes por la mañana, cuando termino de arreglarme para ir al colegio bajé a el comedor.
-Buenos días…- Mis padres no respondieron. Me senté y empecé a desayunar tranquilamente
-¡Buenos días!- Entró alegre Melanie
-Buenos días hija- Respondieron ambos al mismo tiempo
-Tsk- Me levanté de la mesa y cogí mis cosas
-¿Eh? ¿Ya te vas?- Preguntó
-Si…- Se acercó a mi
-Entonces me voy también- ¿Qué? Noté que llevaba puesto el uniforme del colegio
-¿Qué haces vestida así?- No pensará en…
-Me trasladé al mismo colegio al que vas tú… así pasaremos más tiempo juntas- Dijo con esa sonrisa tan desagradable
-Entonces vamos- Dije resignada, no es como que pudiera hacer algo para impedirlo después de todo…
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*Narra Karen*
Hoy en el primer receso recibí un mensaje de Andrea, mencionó algo así como: “Tenemos problemas de nuevo, la nueva no me deja en paz y apenas me dejó ir al baño sola… creo que necesito tu ayuda”
Al leer el mensaje mis reacciones fueron las siguientes: Leer miles de veces la parte “Necesito TU ayuda” aunque era extraño (Algún día me acostumbraré) era bastante lindo de su parte no cambiar de opinión sobre lo que habíamos hablado antes pero… al leer el mensaje completo me di cuenta que decía “La nueva no me deja en paz y apenas me dejó ir al baño sola” esa frase se repetía en mi cabeza miles de veces ¿La nueva? ¿Cuál nueva? ¿Y estaba junto a Andrea? ¡¿Cómo podía ser eso posible?! Es MI Andrea ¡No puedo permitir que una chica nueva venga a quitármela como si nada!. Bueno quizás esté exagerado.
Le respondí intentando tranquilizarme “¿En donde está?” miré el mensaje ¡Si sigo con idioteces como estas la voy a perder! Veamos… “Perdón, el auto corrector” Mucho mejor, solo espero que me conteste.
…
…
…
…
“No metas al auto corrector en tus estupideces” Auch…. “No importa, ya me acostumbré. Estoy en el patio trasero con ella ya que me pidió que le enseñara el colegio” me llegó otro mensaje pero no lo leí ¡No había tiempo para eso! Tenía que llegar lo antes posible, tenía que ser algo grave si Andrea pedía mi ayuda.
Caminé tan rápido como si mi vida dependiera de eso.
Cuando llegué miré a mi alrededor y el lugar estaba solo… bueno, no.
En una parte estaban sentadas dos chicas, pude reconocer a una de ellas pero a la otra no la reconocía. Eso no fue lo que más captó mi atención, las dos estaban tomadas de la mano y… la chica junto a ella tenía la cabeza apoyada en el hombro de Andrea…
Sin razón alguna me sentí mareada, estaba tan pálida que parecía haber visto algún ser sobre natural o algo. Me apoyé por unos minutos en la pared mientras me preguntaba porque esa chica parecía tan cercana a Andrea… ¿Por qué lo digo? Pues porque no es normal que alguien a quien acabas de conocer esté tan cariñoso contigo.
Talvez ya se conocen, quizás sea su amiga… ¿y si son algo más?... ¡No digas esas cosas Karen! Es imposible. miro a la misma dirección de antes esperando que aún no me hayan visto.
Al ver hacia esa dirección solo estaba la chica nueva que me miraba preocupada, miré a mi lado y estaba Andrea observándome.
-¿Se siente bien profesora?- desvié mi mirada
-Yo…- Que vergüenza- Creo que me siento un poco mal, iré a la enfermería- Intenté alejarme y ella me tomó del brazo
-La acompaño- Me guiñó un ojo- Melanie, cuando toquen el timbre regresas a tu clase por donde te enseñé- Le dijo a la chica
-Nos vemos hermana- Se despidió la hermana de Andr…. ¡¿Qué?!
-Vamos, camina idiota- Me susurró
-Ella…ustedes- Mi cabeza va a estallar, camino siguiéndole hasta que en algún momento llegamos a el aula vacia
-Excelente actuación- Dijo riendo ¿Qué?
-Eh…- ¡Era su hermana!- Claro, actuación…
-No fue el plan que acordamos pero igual resultó, que bueno que llegaste… no soportaría estar un minuto más con ella- ¿Eh?
-¿Entonces escuché mal?- pregunté confundida
-¿Qué?
-Pues me pareció haber escuchado que al despedirse ella le… te llamó hermana- Asintió
-Sí, te dije en el último mensaje que “la nueva” era mi hermana- Me dijo extrañada
-Ah, cierto…- Respondí nerviosa
-No lo leíste ¿verdad?- Me descubrió
-No…
-Bueno, no me sorprende. No importa- dijo restándole importancia
-Pero ¿Por qué… no la soporta?- Rápidamente la expresión de su rostro cambió
- donde sea que vaya siempre me sigue y nunca me deja en paz, es bastante molesta- Dijo cansada
-Se nota que ella te tiene mucho cariño- Rodó los ojos
-No me importa, sigue siendo insoportable- No pude evitar reír por su actitud
-Jaja está bien- Está claro que no le molesta solo por eso...
-Me duelen los pies, tuve que caminar por todos lados con ella. Odio las escaleras- Se cruzó de brazos- ¿De qué te ríes?- Me miró como si fuera el ser más extraño del universo
-Nada…- ¿Acaso no se da cuenta cuando piensa en voz alta?- ¿Quieres sentarte?
-¿Si?- Aceptó dudosa
-Ven- Me senté en una silla y le extendí mi mano
-¿Qué quieres?- Dice extrañada
-Toma mi mano- Tomó mi mano con miedo y de un tirón atraje su cuerpo hacia mi provocando que quedara sentada en mis piernas
-¡¿Qué?! ¡Suéltame!- Su cara está completamente roja
-Hueles delicioso- Susurré a su oído
-¡M-Maldita pervertida!- La sujeto fuertemente para que no escape
-¿Vainilla?- Reí
-Sí, ¿Algún problema?- Ignorando sus palabras moví su cabello dejando al descubierto su cuello. Me acerqué lentamente y pasé mi lengua por él- M-Me hace cosquillas- Subí a su oreja y di una pequeña mordida- No hagas eso…
-¿Por qué?- pregunté
-Se siente raro…
-¿Raro?
-Si, pero no se siente mal- Dijo con extrañeza
-Andrea…
-¿Qué?- Giró un poco su cabeza para poder verme. Sujeté su barbilla y acerqué mi rostro al suyo, la miré fijamente a los ojos
-Me encantan tus ojos- Tenía que decirlo, ella se sorprendió y luego el sonrojo regresó a sus mejillas
-¿D-De verdad?- Se veía extremadamente linda… como siempre
-Si…- Mostró una sonrisa tímida
-Ya veo…- El timbre sonó, se levantó rápidamente
-Que lástima- Me levanté yo también- Nos vemos lueg….- Me dio un beso rápido interrumpiéndome
-¡Nos vemos!- Se fue rápido antes de que pudiera decir algo
Comencé a reír, sin duda es la chica más perfecta que puede haber.