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Fisura por minima

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Notas del capitulo: Pues los invito a leer mis otros fics y a ver algunos videos que he empezado (lo que quiere decir que no son muy buenos) en youtube con el nombre de iranea barrera (son los videos con dibujos), tal vez puedan sugerirme algunas cosas también.
2

Terminando las clases normalmente los hijos de los villanos se encontrarían alegres de librarse de la escuela por la tarde, pero hoy no estaban muy felices porque tenían cierto compromiso con el rey Ben y unas llamadas piscinas.

Los hijos de los villanos no conocían la escuela en su totalidad, y esto solo lo confirmaban más con sus expresiones de asombro cuando entraron al edificio donde se encontraban las piscinas de la preparatoria.

-Es como tener tu propio lago dentro de una casa-

-Se ve muy profundo-

-¿creen que haya algún animal dentro de ella? Recuerdo que el capitán Hook siempre se quejaba de algo llamado cocodrilos, aunque mamá decía que tenían buena piel para hacer bolsos y botas-

-Chicos no se preocupen, ya les dije que sería divertido y créanme, no hay ninguna creatura más que nosotros nadando en esta agua. A menos que mi amiga otra vez haya traído alguna de sus mascotas a la escuela-

-Ben, ya te dije que eran amigos, parte de la familia, no mascotas- la voz de una joven les llamo la atención, al otro extremo de la larga piscina pudieron ver a una chica saliendo del agua.

Era alta y delgada, de cabellera negra y brillante atada en una coleta de caballo, cuando la vieron caminar hacia su grupo más de uno admitió que era hermosa, su figura, su delgada cintura, todo en un traje de baño blanco de una sola pieza, sus ojos azules y picarescos se dirigieron hacia el ex príncipe.

-Si Sebastián te escuchara decir que lo consideras una mascota seguramente te pellizcaría los dedos-

-Ese Sebastián se escucha divertido- comento Jay ganando la atención de la pelinegra quien al parecer se daba cuenta de que el rubio no estaba solo.

-Uh, hola-

-Melody, déjame presentarte a Mal, Jay, Evie y Carlos-

Melody pareció cambiar un poco su expresión de alegría a una de asombro y un deje de incomodidad, para los chicos malos de la isla de los perdidos ya era una expresión muy común de ver dentro de los estudiantes de Auradon cuando los conocían por primera vez y de hecho una de las reacciones menos ofensivas o fastidiosas.

-H-Hola, mucho gusto- saludo con una sonrisa algo tímida y nerviosa.

A pesar de que los hijos de los villanos ya no eran mirados con miedo o desprecio por la mayoría del alumnado por su acción heroica enfrentándose a Malefica, aun había algunos que no tenían su plena confianza. Melody no le gustaba pensar en lo peor de las personas, ni despreciaba a estos chicos especialmente, pero ya había experimentado en carne propia lo malvados que realmente podían ser los verdaderos villanos.

¿Qué habían capturado a todos los peores villanos en la isla de los Perdidos? Pues si, pero no habían capturados a todos tampoco, por ejemplo a la muy poco conocida hermana de Ursula, la bruja de los mares, Morgana.

Hace algunos años atrás, cuando tenía apenas unos 12 años, conoció a Morgana, la hermana menor de Úrsula, la famosa bruja de los mares que alguna vez atormento al mar y a su familia. En ese tiempo no conocía toda la historia de su familia; la mayoría de los reinos tenían fantásticas historias de héroes, villanos, valientes príncipes y princesas, pero el suyo parecía muy “normal”, y tomando en cuenta que entraba en la adolescencia, se sentía fuera de lugar, incluso un bicho raro ya que tenía dones como hablar con animales marinos, pensaba que nadie la comprendería y deseaba otra cosa, estar en otro lugar, ser algo más que la princesa tímida, torpe y que al parecer no podía hacer nada bien.

En esos momentos que pensó que ya no podía estar en un lugar donde nadie la comprendía se fugó de casa, y ahí conoció a Morgana.

Fueron decisiones muy inmaduras y temerarias, error tras error a pesar de haber escuchado historias de héroes y villanos, pero ella se sentía desesperada. Primero confió en un completo extraño, luego acepto un trato sin realmente saber si le decían la verdad, puso en peligro a sus padres y abuelo, casi muere más de una vez, pero como toda buena historia el bien triunfa sobre el mal.

No fue una experiencia muy agradable su aventura en algunas ocasiones, especialmente cuando casi se muere ahogada o sentirse tan traicionada cuando supo que sus padres le habían mentido toda su vida, y luego traicionarlos a ellos con una bruja que pudo matarlos o esclavizarlos a todos, pero no todo fue malo, conoció grandes amigos, a su abuelo y familia de Atlantica.

-Estos serán tus nuevos alumnos de natación- comento un muy alegre Ben.

-¡¿Ellos?!... Digo, ok, fantástico. Vallan colocándose sus trajes de baño, la clase está por comenzar- Melody siguió con su sonrisa en su rostro haciendo una nota mental de hablar con Ben a solas más tarde, no le dijo específicamente a quienes iba a enseñar y a los que jamás pasaron por su mente fueron estos chicos, y también debía recordar poner más atención a que era lo que pasaba en la escuela.

No supo cuando Ben rompió con Audrey y mucho menos empezó a salir con Mal, cielos, era cierto lo que decían sus compañeras de equipo de natación, se la pasaba mucho tiempo cabeza bajo el agua. Aún seguía siendo una chica muy distraída.

-Y de eso me encargo yo- desde las gradas apareció saludando Lonnie con varias bolsas de plástico de compras –compre unos fantásticos modelos chicas, estoy segura que les quedaran fantástico, a ustedes también chicos- decía emocionada la hija de Mulan.

-Fantástico, tenemos casi todo listo, Lonnie ayudara a las chicas con sus trajes y yo a los muchachos- dijo Ben extendiendo la mano para que Lonnie le pasara la bolsa con los trajes de baño de Jay y Carlos.

Melody vio alejar a sus amigos y a los estudiantes de intercambio de la isla de los perdidos a los vestidores de chicos y chicas, soltó un profundo suspiro.

-Estas serán unas clases interesantes- se dijo a sí misma la hija de la princesa sirena, al menos Ben le hubiera avisado a quien iba a enseñar para prepararse mentalmente.

Dentro de los vestidores los hijos de los villanos descubrían como rayos se ponían los trajes de baño. Las chicas tenían cierto problema porque consideraban que la prenda era más una prenda interior que realmente algo con lo que la gente saldría al público y en el caso de los chicos, bueno, para ellos era más sencillo ya que eran unos shorts.

Jay no tenía problemas mostrando su cuerpo a la hora de cambiarse, pero había cierto inconveniente por parte de Carlos.

-Hey Jay, ¿Crees que sea buena idea nadar con la chaqueta?-

Jay volteo a ver al chico de cabellos blancos, ya no tenía ni calzado ni sus pantalones cortos sino el traje de baño puesto, pero en la parte de arriba aun traía s chaqueta negra con blanco y su camisa blanca con detalles rojos. Pues los colores combinaban pero no creía que las prendas en el torso fueran para eso.

-¿Acaso te bañas con ropa?-

-No-

-Entonces quítate la chaqueta y la camisa-

Carlos hiso una mueca, se notaba que no le agradaba la idea. Sabía que no tenía un cuerpo tan atlético como su amigo, no presumía brazos musculosos con camisas sin mangas y chalecos de cuero, tampoco tenía un torso tan tonificado como el de su amigo, pero eso no era lo que volvía incomodo andar sin camisa.

-Sé que la idea de aprender a nadar no es muy divertida, pero entre más rápido terminemos mejor- dijo el moreno dándole un par de palmadas en el hombro al menor.

-Si lo se… hey, Jay ¿Qué haces? ¡espera Jay! ¡Puedo hacerlo solo!-

-Pues al paso que vas tardaras cien años-

En rápidos movimientos algo bruscos aprovechando su fuerza superior y estatura arranco las prendas que cubrían el cuerpo del joven De Vil. La chaqueta voló a un lado de los vestidores, la camisa de botones la agarro por la parte de abajo y en un rápido movimiento la jalo hacia arriba pasando por la cabeza y brazos de un aturdido y sorprendido Carlos, antes de que arrugara más la prenda quitada el menor se la arrebato.

-Al menos no tires al suelo mi ropa- dijo el hijo de Cruella. De todos los hijos de los villanos era el que menos cosas había tenido al crecer en la isla, por lo que trataba de cuidar sus cosas, como su ropa.

-Ahora estas listos, vamos con Ben y los demás- afuera los había esperado Ben quien había sido el primero en terminar de cambiarse.

Sintiéndose algo derrotado se dejó empujar por el más alto hacia la salida sintiendo el sonrojo en su rostro crecer, cada vez le gustaba menos esta idea de clases de natación.

Unos minutos después de espera los chicos malos ya estaban vestidos con sus trajes de baño para comenzar la clase.

-Estos trajes son muy ajustados- comento Mal acomodando los tirantes de sus hombros de su traje morado.

-Los nuestros son cómodos- dijo Carlos amarando el elásticos de su traje negro y blanco con toques de rojo.

-Yo creo que tienen estilo- Evie se miraba en su espejito observando lo bien que se pegaba a su figura este nuevo traje de baño resaltando sus partes buenas, las cuales eran todas.

-Es casi como andar desnudos- Jay sentía el traje de baño rojo muy ligero, no sabía si sentirse cómodo por esto o no.

-¡Se ven fantásticos chicos!- elogio Lonnie sintiéndose muy satisfecha con su elección de trajes. Ella traía puesto un traje de baño rosa.

Las reacciones del par restante, Ben y Melody, no eran tan animadas como la chica asiática. Las chicas se veían geniales, pero se habían sorprendido por ciertas cosas que descubrieron en los cuerpos de los varones del grupo, específicamente cicatrices. Lonnie que había crecido prácticamente en medio de un ejército, ya que su madre y padre pertenecían a este así como varios de sus tíos de cariño, no le sorprendía ver una que otra cicatriz en los cuerpos de las personas, su madre tenía una por aquella batalla que casi la mato contra sus enemigos en la guerra de China, y la portaba orgullosa, no se sentía incomoda al estar en presencia de estas en sus compañeros.

No eran enormes o cubrían sus abdómenes o espalda, pero algunas parecían preocupantes.

Jay tenia estas delgadas líneas de piel de tono más claro, líneas rectas que en un tiempo fueron piel cortada y húmeda de sangre en un enfrentamiento en donde hombres habían atrapado a un pequeño ladronzuelo que trataba de quitarles las pocas pertenencias de valor que habían conservado en su estadía en la isla en un intento de agradar a su padre.

Una cruzaba su pectoral derecho, un par abajo del omoplato izquierdo, esas eran las más largas, había unas cuantas más pequeñas en su abdomen. No eran muchos, pero cada uno de esos cortes le dieron una valiosa lección en su tiempo, debía ser fuerte, debía ser rápido, debía ser ágil al robar, debía saber defenderse y aprender que método era mejor al tratar de obtener algo, no simplemente entrar a una casa y esperar que no te descubrieran.

Carlos tenía en su pálida piel marcas muy diferentes a las de su amigo, no eran líneas y en contraste con su piel en vez de verse pálidas sus cicatrices se mostraban ligeramente oscuras. Si vieras de lejos quizás confundirías el patrón en la piel como lunares o pecas, de las cuales estas últimas el joven peliblanco tenía varias, pero estas marcas no era ni lo uno ni lo otro, y ni siquiera habían aparecido en su piel de manera natural.

Eran como puntos, pequeñas manchas no tan grandes como monedas de a centavo, ahora que Ben lo pensaba era la primera vez que veía a Carlos sin su chaqueta o camisas, normalmente después de practicar en el campo o después de los torneos este se quedaba un rato más en el campo con Dude y las chicas y no se metía en las duchas, había veces en que lo vio ir directamente a los dormitorios en lugar que ir con el equipo a asearse, pensó que era porque era tímido pero no era eso, ahora ya veía porque, ya que en sus hombros, pecho y espalda, especialmente los hombros, se encontraba la mayoría de esas marcas, esas cicatrices que no fueron cometidas por el filo de una navaja o vidrios rotos, sino por la quemadura de un objeto sumamente caliente con una punta pequeña y redonda.

Ben trago amargo, sabía que la situación en la isla era mala, por eso quería ayudar a todas esas personas que no tenían la culpa de estar ahí, su único crimen había sido nacer de padres villanos. Viendo las cicatrices de sus ahora amigos se dijo que volvería a poner esfuerzo en su resolución de hacer que los hijos de los villanos tuvieran mejores oportunidades de vida.

-Solo falta algo de seguridad- dijo retomando el tema por el que habían venido, sus clases de natación.

Carlos soltó un suspiro, nadie había hecho algún comentario sobre sus marcas.

-¿A qué te refieres?-

-Flotadores- respondió a su pregunta Melody trayendo con ella desde chalecos salvavidas a tablas de espuma –empezaremos en la parte de la piscina menos profunda, aun así usaran un par de estas cosas por seguridad-

Seguridad, siendo sinceros era algo en que no tenían mucho cuidado los chicos de la isla de los perdidos. A ellos no les enseñaron con “Ten cuidado o te pasara algo malo”, “Te dolerá si haces eso”, tenían padres negligentes y ellos aprendieron con prueba y error, si habían sobrevivido hasta ahora era en su mayoría por su propia fuerza y astucia, también un poco de suerte, no por tener cuidado con normas de seguridad.

Miraron con desconfianza y hasta burla aquellos artefactos que había traído la mitad sirena, ¿estas cosas los ayudarían a evitar a ahogarse?

-Sé que no parecen gran cosa, pero les ayudara a flotar en el agua-

-Sí, lo deducimos por el nombre- comento Mal mirando unas cosas muy abultadas y redondas que parecían de esos panes que daban en el desayuno.

-¿Llego tarde para la lección?-

-¡Doug! ¡Cariño!- Evie se mostró inmediatamente muy contenta al ver a su novio acercarse a ellos, este ya venía vestido con un traje de baño verde con toques en morado y con una camisa blanca.

-Sabes que me encanta enseñarte nuevas cosas, tu primera clase para aprender a nadar no me lo perdería- dijo el hijo del enano Dopey acercándose a su novia y posando su brazo en sus hombros.

Al contrario de Mal y Ben ese par de novios era mucho más expresivo y cariñoso que príncipe y hechicera.

Jay y Carlos no pudieron evitar como un par de niños empezar a hacer caras y muecas arremedando en burla las muecas de afecto de ese par de tortolos, Ben y Mal solo sonrieron un poco ante los gestos graciosos de ese par, ya acostumbrados a las caras burlescas que hacían cuando Evie y Doug se portaban acaramelados, pero los que no pudieron evitar la risa fueron Melody y Lonnie a pesar que eso era grosero.

-¿De qué se ríen chicas?- pregunto el de lentes al ver tan animadas a sus amigas.

-Que inmaduro chicos- rodo los ojos Evie al notar que estaban haciendo sus amigos a sus espaldas.

-Bueno, ya que estamos todos presentes, empecemos la clase- dijo Melody tratando de llamar la atención de todos los presentes.

Lo mejor cuando se comienza a aprender a nadar es empezar a sentirse cómodo en el agua, lo cual se inicia primero metiéndose en esta. Los hijos de los villanos no se mostraban muy dispuestos a comenzar con esta primera lección.

Todos alineados en la orilla, viendo el agua con desconfianza, como esperando que en cualquier momento algo les saltaría encima o algo por el estilo.

-No se preocupen, el agua no está fría, está encantada para que siempre se mantenga a una temperatura agradable- trato de animar Melody a sus nuevos estudiantes, estaban en la parte menos profundas de la alberca, el agua le llegaba a la cintura y a Ben, que trataba de darle confianza a su novia metiéndose después junto a la maestra tenía el agua en las caderas.

-Vamos Mal, no te pasara nada- el príncipe, digo, el rey de Auradon extendía su mano a su novia quien a pesar de su mejor juicio acepto la oferta siendo la primera de los chicos en meterse en el agua.

-Bueno, al menos se ve más seguro que ese lago- menciono Mal una vez al lado de su novio.

Viendo que su líder ya se había animado y dado el primer paso al meterse en la piscina cada uno de los BK (Bad Kids, creo que empezare a abreviar de esa manera cuando me refiera a ese grupo) siguieron el ejemplo de Mal. Antes de que se dieran cuenta se formaron parejas para comenzar las lecciones, Mal y Ben, Evie y Doug, Carlos término con Melody y Jay con Lonnie.

En realidad la clase no fue tan mala, hasta llego a ser un poco divertida y en cierto punto, porque los BK no podían evitar hacer travesuras especialmente Jay y Carlos, hubo una pequeña batalla de salpicarse unos a los otros en que en algún punto fue hombres contra mujeres, nunca subestimes a una sirena o a una mitad sirena en su elemento déjenme decirles, y con eso pueden concluir que el lado de las chicas gano.

Los BK aprendieron que estar en el agua podía llegar a ser divertido, aprendieron a flotar un poco en ella sin flotadores, también que flotar con ellos, como las llamadas “DONAS” podía ser muy relajante. Pero ellos no fueron los únicos en aprender algo, Melody aprendió con la convivencia que estos chicos realmente podían ser agradables, algo traviesos, revoltosos, un poco groseros, pero no realmente malos, de hecho eran muy divertidos.

-Debo admitir que esto de nadar no es tan malo-

-Carlos tiene razón, hasta podría repetir-

-Flotar en esas cosas redondas fue divertido-

-Fue una primera clase satisfactoria-

Melody podía sentirse orgullosa por sus avances ese día, de hecho los BK habían demostrado ser buenos estudiantes, divertidos, un poco traviesos, de hecho son mucho más entretenidos que varios de los hijos de princesas y príncipes que asisten en la escuela, no solo porque son un poco “Exóticos”, por decirlo de una manera, sino también por sus modales que no son necesariamente los más refinados ni los más corteses pero muestran realmente quienes son.

Ya todos se encuentran secándose cuando alguien entra al edificio, que Melody supiera no hay practica a esa hora del equipo de natación o de clavados, por eso había aprovechado este horario para sus clases sin otras personas distrayendo a sus nuevos estudiantes.

-No me digan que hicieron una fiesta y no nos invitaron- más de uno al escuchar esa voz sabe que solo vendrán problemas.

-Chad, Audrey ¿Qué hacen aquí?- Ben pregunta al ver al par llegar, atrás de ellos nota a un par de chicas que reconoce pertenecen al club de natación al igual que Melody.

-Nosotros deberíamos hacer esa pregunta- Dijo Chad posicionándose enfrente del grupo.
Notas finales: weee otro cap mas
alguien más odia a Chad y Audrey? solo yo? bueno, de una vez les aviso que ese par no es digno ejemplo de sus padres en este fic

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