El aire era tenso y se podía romper en cualquier momento.
Guardianes Vongola y Guardianes Varia estaban sentados en una misma sala viendo a fui a jefes sentados en un sillón doble (Ya estaban vestidos) pero lo que más les daba mala espina a todos era la mano de Xanxus en la cadera del castaño y este no se inmutaba, lo dejaba ahí, de hecho el tenía una de sus manos en la pierna del ojirojo.
—Chicos como ya les había dicho a Yamamoto y a Gokudera, Xanxus y yo somos pareja.
Sólo un cri cri sonaba por parte de un animal ya que las personas que estaban dentro estaban serios pero se notaban sorprendidos.
_¿Qué? ¿El ratón se comió sus lenguas? Ya la basucoff.
Un puño se había estampado en el estómago del jefe Varia y después mató con la mirada a su pareja pero este estaba sonriendo inocente.
—Omnivoro... ¿Cómo fue que llegaste a escogerlo a el como tu pareja?
Un aura de terror estaba sobre el cuerpo de la nube más fuerte mientras veía a su jefe al cual quería como hermano menor.
—De alguna forma me enamoré de el y ya está...y ahora estamos juntos.
Los integrantes de los dos equipos se veían que saltarian a la yugular del jefe contrario y eso no se hizo esperar pero se empezaron a gritar y ofender entre ellos hasta que empezaron las peleas.
Bombas explotando, choque de espadas, puños golpeando otros puños, ilusiones que matarían a cualquiera, tonfazos, cuchillos volando, rayos por la sala... era lo que se veía por todo el salón de la mansión Vongola ya que todos se habían reunido ahí.
Tsuna veía a todos pelear pero una sonrisa demasiado feliz se posaba en si rostro al ver como los muebles dejaban de serlo, vidrios quebrados por todo lado, los sillones ahora servían de escudos....Una vena grande estaba en su frente.
Xanxus que estaba viendo todo sonreído ladeado y empezó a tomar vino al ver que su pareja se levantó y se ponía los guantes encendiendo sus llamas al mismo tiempo.
Hielo fue lo que se empezó a ver por todo el salón hasta los guardianes de ambos bandos habían quedado congelados por la llama de el jefe mayor.
—se que me están escuchando, no lo repetiré...arreglarán toda la destrucción USTEDES, los ingenieros sólo verán si lo están haciendo mal y si no terminan hoy mismo la verán conmigo.
Los dos salieron de ahí dejando que los guardianes se fueran descongelando poco a poco
Al ser las 11:59 de la noche Tsuna fue a verificar todo y milagrosamente tenían todo a como estaba antes y claro se veían un montón de cuerpos sin energía tirados en el piso.
—justo a tiempo, se merecen ese descanso.
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Gokudera junto a Yamamoto y Hibari acompañaban a su jefe y amigo a una reunión de varios capos.
La mentada reunión paso sin retrasos excepto de que se alegraron de llegar temprano ya que cierto caballo rubio apenas vio al prefecto salto encima de el pero se vio noqueado por una tonfa.
Los capos salieron de la sala donde estaban y como uno de ellos vio al bello joven que era el capo Vongola solo trato de llevárselo para el en una misión suicida.
Balazos y llamas se veían en el edificio, no había alguna baja todavía pero si habían heridos por parte de las diferentes mafias que habían ahí, se les hizo fácil penetrar a la mafia atacante cuando se descuidaron y todo terminó.
—¡¡¡Juudaime!!! Estar herido, debemos llevar a que lo curen.
—yo estoy bien Gokudera, debemos priorizar a que revisen a los heridos de profundidad y después a los demás.
La orden por el capo más fuerte fue acatada por todos así que empezaron a moverse rápido;después de unas horas vieron sobre los daños y todo lo demás, el culpable debía pagarlos y sumarle que perdería muchas de sus pertenencias y pasarían a las demás mafias.
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Llegaron los cuatro a su hogar y notaron unas maletas enormes en el salón juntos a otras cosas.
—¿Qué es todo esto?
Pregunto dudoso el castaño a su mayordomo principal y este solo suspiro cansado.
—Bueno...
—Son nuestras pertenencias, de ahora en adelante nos quedaremos aquí basura.
—¿¿¿¿EHHHHHHH????
Fue el grito colectivo que se oyó por toda Italia asustando a más de uno.