Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Una Mala Mujer por Nina Nairashiki

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Pido una disculpa por las demoras para poder avanzar la historia pero como tengo otra cuenta (en la que llevo bastante tiempo escribiendo) pues tengo muchos mas fics ahí que debo actualizar ¬¬ lamento mucho las demoras que tengo, pero aunque me tarde mucho, prometo no abandonar mientras haya alguien a quien le guste lo que escribo n.n yo seguiré sin lugar a dudas, es una promesa que he cumplido hasta ahora XD

 

Bueno, sin más que decir ¡A leer!

-buenos días señor dragón-  sonreí apenas lo vi donde siempre, aquel gran dragón se levanto de su lugar, sacudiendo su gigantesco cuerpo y luego inclinado su cabeza para que pudiera lanzarme sobre ella a abrazarlo y llenarle el rostro de muchos besos, el dragón ronroneo suavemente y reí por esto

-nee, nee ¿adivine que señor dragón?... ¡hoy es mi cumpleaños! ¡hoy cumplo por fin 11!-  reí emocionada y triunfal, notando como la gran cola del ser se acercaba y daba ligeros golpes en mi cabeza que, aunque dolían, podía decirse que eran una caricia amable de su parte… por lo menos ya no me lastimaban

 

-bueno señor dragón, voy a mi entrenamiento del día de hoy y volveré a la hora del desayuno, nos veremos pronto-  sonreí viendo como el dragón asentía suavemente, le di un nuevo beso y salí corriendo a donde siempre entrenaba… habían pasado ya 2 años desde que lo encontré y lo ayudé, para desgracia mía, no pude ayudarlo a recuperar su vista… así que, aunque se recupero de todas sus heridas, termino completamente ciego

 

El y yo habíamos estado entrenando juntos en los atardeceres, ya que yo montaba sobre él para ayudarlo, ahora yo trataba de ser sus ojos mientras estábamos en el cielo, habíamos logrado gran habilidad para ello, pero a mi madre no parecía ser algo que le complaciera… muchas veces me dijo y trato de matar al dragón alegando que serviría mas con sus poderes impregnados en mi que como “un estorbo” en la casa… aquello siempre me molestaba y como siempre, terminaba en una terrible batalla contra ella, pero, al final yo lograba ganar de algún modo y gracias a eso el dragón seguía convida, por supuesto, trataba que él no supiera nada, no quería que la pasara mal por culpa de mi madre, ya suficiente era con que yo sufriera por su culpa como para que el también sufriera lo que yo

 

… … …

 

-bueno, mi amigo, aquí está tu favorito… tiburón recién cazado-  dije jalando una pequeña tabla donde venia el tiburón aun moviéndose ligeramente… aun me daba algo de asco verlo pero por lo menso había aprendido a calmarme, por supuesto, junto al dragón iba un balde gigante de agua para mi amigo, lo deje cercas suyo y me senté en la sombra del árbol más grueso que había en el jardín… de hecho, era el único que mi madre había dejado que se quedara, y mientras el dragón comía yo sacaba un libro para comenzar a leer tranquila

 

Así se había vuelto mi día, estaba mayormente con el dragón para estudiar, para pasar el rato, se había vuelto mi amigo y compañero mientras que entrenaba o lo ayudaba a mejorar sus acciones… mi amigo el dragón se había vuelto mas rápido, ágil y atento, ahora que no poseía la vista sus demás sentidos no solo se habían acoplado sino mejorado, así que ya era alguien peligroso aun mas de cuando llego, sonreí al saberlo, pero, algo nuevo había llamado mi atención

 

-ho no, está lloviendo… ¡vamos señor dragón, venga!-  le grite, el dragón se levanto de su lugar y siguió mis pasos, yo logre abrir la puerta en el suelo donde yo entrenaba, lo lleve conmigo hasta donde entrenaba y ahí lo deje, nos quedamos un rato ahí, por lo regular era ahí done entrenábamos, claro que, mi madre de cuando en cuando nos decía que entrenara al dragón fuera de ese lugar y, aunque lo hacía, prefería hacerlo aquí ya que no dañábamos a nadie… aun era difícil aprender a volar como un solo, ya que no llevábamos mucho tiempo haciéndolo

 

-bueno, por lo menso aquí no nos mojaremos… ¡ya se! ¿Qué te parece un poco de entrenamiento para bajar la comida?-  le pregunté, el dragón solo giro su rostro hacia mí, como si tratara de verme, negué un poco y subí sobre su lomo con cuidado de no lastimarlo

-¿estás listo mi amigo?-  el dragón rugió y se inclino, solo que viendo hacia el cielo

-y… ¡¡¡a volar!!!-  grite emocionada, el dragón despego con mucha fuerza, me tuve que abrazar con fuerza a su cuello para no caerme, cerré mis ojos y cuando deje de sentir que subíamos a una gran velocidad por fin volví a abrir mis ojos encontrándome ya en los cielos junto a él, sonreí un poco y extendí mis brazos

 

-muy bien… comencemos amigo-  respondí, el dragón rugió suavemente, en señal de asentimiento supongo yo, saque de entre mis ropas una pequeña libreta que cargaba de cuando en cuando y pronuncie las palabras necesarias que necesitaba… en menos de lo esperado, alrededor del cielo donde volábamos comenzaron a aparecer aros de madera lo suficientemente grandes para que el dragón pasara sin problemas, me abrace a él y sonríe suavemente

-muy bien… comencemos-  dije

 

Tan rápido como el dragón asintió comencé a darle indicaciones, al principio lo lográbamos sin problemas pero, entre mas avanzábamos, los aros se cerraban entre ellos, era más difícil maniobrar entre ellos y al final ambos terminábamos lastimados, gruñí por lo bajo al saberlo, pero seguimos intentado otro buen rato, escuchando de cuando en cuando los relámpagos del exterior, aun continuábamos nuestro entrenamiento, solo hasta que notamos una bola de fuego que logramos esquivar cuando le pedí al dragón que frenara de golpe… al bajar la mirada pude ver a alguien ocultándose en lo que ahora se mostraba como un bosque… extrañada, baje con ayuda del dragón y comencé a ver a todos lados confundida

 

-¡¿Quién anda ahí?!-  pregunté bajando por fin del dragón para ver mejor el bosque donde de cuando en cuando también entrenaba… de hecho, últimamente entrenaba ahí

-es mejor que salgas, solo existe una única salida de este lugar y no es por aquí-  respondí con algo de enfado, escuche el gruir del dragón, al parecer el ya había encontrado a quien estaba cercas, me puse en guardia, preparada para lo que fuera a suceder pero, lo único que encontré fue una sombra que me asusto

 

Sin pensarlo demasiado comenzamos a forcejar, aquella sombra era más alta que yo por una cabeza… era sin lugar  a dudas más grande pero, cuando me aferro desde atrás con sus brazos pude sentir algo suave en mi nuca… confundida me aleje para notar que estaba cubierta por una túnica… aunque… eso no negaba que se vieran sus pechos… un momento… ¿era una chica?

 

-¿Quién eres y que haces en este lugar?-  pregunte molesta, ella por fin mostro sus brazos y en ellos una daga que me apuntaba con fiereza, me aleje considerablemente y comenzamos a caminar en cirulos, esa chica, por lo que alcanzaba a ver tenía una piel acanelada, muy morena diría yo

 

-¡dame todo lo que tengas!-  me amenazo, la mire extrañada y negué

 

-lo siento mucho, no tengo nada de valor-  respondí, notando como el dragón se impacientaba, hice un gemido a manera de que entendiera que no atacara, el aun seguía gruñendo y por este descuido de observar al dragón sentí como era tirada al suelo

 

Aunque gemí adolorida, pude notar por fin una máscara que era cubierta por la capucha, pero lo más preocupante era que tenia a esa chica encima de mí y aun mas importante, la daga estaba en mi cuello haciendo presión pero aun sin crearme una verdadera herida… el dragón gruño una vez más, algo asustada, esta vez pude ver como con ayuda de su cola, el dragón había estampado a la chica contra uno de los arboles, me levante rápido, observando al dragón, bien, quería decirle que lo que hizo estuvo mal, pero el observar que el dragón seguía gruñendo suspire… también fue algo correcto, esa chica pudo haberme matado si quería

 

-gracias-  susurre, observando como ahora la chica se quedaba tirada en el suelo, desvié mi mirada, tal vez el golpe del dragón había sido mucho, así que me acerque con cuidado, quitándole la daga de las manos y lanzándola lejos, aparte la máscara del rostro de la chica encontrando por fin una piel verdaderamente morena, cabellos cortos y desordenados de un vibrante color turquesa y aunque al principio realmente parecían desordenados, cuando su cuerpo se hizo algo más hacia adelante pude ver que tenía una larga cola de caballo que, por la forma en la que se encontraba ahora, no podía ver que tan larga era en realidad

-¿estará bien?-  me pregunte en cuanto la moví suavemente para tratar de llamar su atención… aunque, sorprendida escuche un rugir suave de tripas

 

Gire a ver a mi amigo el gran dragón, pero él estaba también observando a la chica, aunque no pudiera ver, su rostro se encontraba en la misma dirección, yo observe otro poco más a la chica, suponía que tenía hambre entonces porque mi estomago no había rugido… entonces, la razón por la que nos ha atacado es por eso… tenía hambre

 

-señor dragón, espéreme aquí, cuide que la chica no se mueva, iré por comida para ella-  respondí rápidamente, corriendo sin mirar hacia atrás para poder llegar hasta la casa, notando de paso que había parado ya de llover, llegue corriendo lo mas sigilosamente que pude, entre a la cocina y tome varias piezas de pan, queso, agua, un poco mas de fruta y unos panques para llevarle a la chica… una vez tomando lo que supuse sería suficiente para poder acabar con su hambre, corrí de regreso a donde entrenaba, corriendo tan rápido podía, encontrando una situación complicada pero que llegue a imaginar de cierto modo que pasaría…

 

-¡Señor dragón, no la ataque!-  grite, después de todo, el gran dragón ya tenía a la chica atrapada en una de sus garras contra el suelo, gruñendo y casi queriendo mostrar que la mataría con un solo bocado, aunque, gracias al cielo, el dragón dejo de intentar matarla comiéndosela para alejarse un par de pasos, camine ahora más tranquila hacia la chica que ahora que veía mejor tenía unos ojos igual de turquesa aunque mas claro, además de que su pupila era rasgada como la de un felino

-mira… te traje un poco de comida, has de tener hambre-  susurre dejando la comida frente de ella quien, aun me miraba con desconfianza

 

-por favor, come, no está envenenada si es lo que te preocupa-  sonreí divertida, ella sin dejar de verme comenzó a acercarse lentamente, arrebatando primero el pan, al probar un poco, su mirada desconfiada cambio a una de sorpresa, olvidándose de mí y del dragón, se acerco a la comida para comer un poco, yo, más tranquila, también me senté en el suelo, observándola comer con esa avidez… tal parecía, si que tenía mucha hambre por que se acabo todo, apenas dejando un panque medio comido y un racimo de uvas casi por acabarse

-¿satisfecha?-  pregunte tranquila y contenta de ver que ya se veía con una mejor cara

 

-sí, gracias por cierto-  responde recargándose gustosa en un árbol, sonreí contenta de verlo y me levante

 

-bueno… ¿sabes dónde está la salida? No quisiera que terminaras perdida en este lugar-  reí un poco y observe al dragón

-yo debo volver a mi entrenamiento… ha cierto, me llamo Nadeshiko Kaiser mucho gusto-  sonreí divertida, haciendo un leve silbido con mi voz, el dragón se inclino un poco y se acerco hasta mi, subiendo con algo de trabajo aun, logre llegar hasta su lomo, lista para subir, aquella chica me seguía observando calladamente

 

Y aunque no me dijo nada, el dragón alzo el vuelo antes de que se lo dijera, así que, para cuando trate de decirle algo, ya me encontraba en el cielo volando… respire derrotada y comencé mi vuelo de entrenamiento una vez más, al parecer, al dragón no le había agradado la chica nueva

 

-a entrenar señor dragón-  sonreí notando como el dragón aumentaba aun mas su velocidad…

Notas finales:

A decir verdad, la chica ladrona me gusto como me quedo su apariencia, se me hace linda y salvaje XD, y aunque no lo crean, será una pieza importante para el futuro mismo de Nadeshiko XD bueno… perdonen una vez más mis demoras, pero juro que no pienso abandonar esta historia…

 

Que tengan un buen día n.n

¡besos!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).