Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

De demonio a ángel. por DarkSweetLady

[Reviews - 34]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola gente hermosa!! 

les traigo otro cap de esto espernado que les guste

Muchas gracias por leer y por sus comentarios, me alegran mucho nwn 

Disculpen las posibles faltas de ortografía >.< y tengo un pequeño anuncio en las notas finales uwu

-¡Tío!

Una pequeña, dulce y gritona vocecita recibió a Tooru apenas cruzar la puerta principal. La pequeña Yuki corrió cuanto pudo hasta llegar a su tío y engancharse con fuerza a su pierna mientras el castaño le acariciaba la cabeza.

-Hola princesita ¿Cómo has estado? – Le saludo Tooru alzándola en sus brazos - ¿Te has portado bien?

-Yuki ha sido una niña buena – responde con una gran sonrisa la nena.

-¡Tío!

Una segunda vocecita grita seguida de un cuerpecito más pequeño y torpe al andar aparece. Seiji corre, o mejor dicho intenta correr hacía el castaño que lo atrapa de manera oportuna.

-Él es mi tío no tuyo – le dice la niña aun en brazos del castaño y le saca la lengua - ¿Verdad tío Tooru?

Pero el castaño no tiene tiempo de contestar cuando Seiji se hecha a llorar porque Tooru solo es tío de su hermana. Y ante el llanto del nene enseguida aparece Seijuuro para ver qué es lo que pasa.

-Yuki soy tío tanto tuyo como de Seiji, porque ustedes son hermanos – le dice Tooru en forma de reprimenda, lo que hace que el peli morado menor se calme – No le digas cosas crueles a Seiji.

-Pero tío – Ahora la pequeña Yuri mostraba señales de querer llorar – Yo… yo…

-Yuki, Seiji dejen a su tío – les ordeno Seijuuro – jugaran con el después.

Tooru sonrió le dio un beso a Yuki en la cabeza y bajo a ambos nenes del suelo para seguir a Seijuuro hasta su estudio. Ahí el pelirrojo le dio un folder lleno de fotografías e informes.

-Hice todo tal cual me pediste – Seijuuro se sentó frente al castaño – Solo espero que me digas que tienes que ver tu con ese sujeto, sabía que eras un maldito cabrón, pero te creí más decente.

-Yo nada, Kagami Taiga es quien me preocupa, son socios desde hace medio año – Tooru hojeo el informe y miro con detenimiento cada una de las fotografías donde un hombre de edad avanzada gordo de barba y bigote se mostraba siempre con guardaespaldas, autos caros y ropa de marca – Es extraño que después de invertir tanto en industria petrolera ahora quiera tener acciones en los hospitales más prestigiosos de Japón.

-Kagami Taiga es un hombre poderoso ¿eh? – Seijuuro sonrió – Kazunari tiene buen ojo.

-Ja si te escuchara se pondría decir que lo que le gusta es que es un ángel y un pan de dios – Tooru le sonrió – Kazu cree que ese hombre suda agua bendita.

-No sería raro, tiene un expediente demasiado pulcro, así que tampoco me sorprende que se haya dejado engañar por esa escoria – Seijuuro suspiro – Tu protegido desprende inocencia.

-Y aun así logro embarazar a Kazu, todo un misterio – Tooru soltó una fuerte carcajada – Hasta me creería que Kazu se lo violo.

-No digas estupideces Tooru.

-Lo siento y gracias por el informe el pago se hizo en la mañana.

-Lo sé, siempre es un placer trabajar contigo.

-Eso lo dices porque soy jodidamente generoso con los pagos.

-Aka-chin ya está el almuerzo – Atsushi se asomó por la puerta del estudio – Shima-chin  también deberías quedarte a almorzar.

-Gracias por la invitación, pero tengo un compromiso así que por esta vez paso – Tooru le regalo una sonrisa al peli morado que solo se alzó de hombros volviendo a la cocina para servir, el castaño se giró hacia Seijuuro – De nuevo gracias por todo.

Akashi asintió y acompaño al castaño hasta la puerta antes de que los pequeños pudiesen escuchar que la puerta y correr a detener a Tooru.

////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////

-¿Seguro que no necesitas más vitaminas? – Pregunto Kagami por décima vez – Son necesarias para compensar todas las vitaminas pérdidas por los vómitos matutinos.

-Tai-chan no necesito más vitaminas de las que ya llevamos, y hace un mes que deje atrás las náuseas matutinas – Kazunari le quito a Kagami el frasquito que sostenía a punto de echarlo al carrito del súper – Tu escuchaste a Shin-chan, el bebé está perfecto, crece bien, que debo mantener mi dieta balanceada y tomar las mismas vitaminas.

-Está bien – El pelirrojo se rasco la nuca – Es solo que me preocupa.

-No necesitas preocuparte – Shun le sonrió al pelirrojo tomando a Kazu del hombro – Recuerda que Takao está en buenas manos. 

-Lo sé – Kagami respiro profundamente - ¿Por qué no ha venido Ôshima esta vez?

-No lo sé – Izuki se alzó de hombros – Supongo que tiene trabajo en la universidad.

-¿En domingo?

-Es que tu no lo conoces Tai-chan – Kazunari se paró al lado de Izuki – Tooru-chan puede parecer muy desobligado con su trabajo, pero a veces le entra la espinita de ser responsable y ni quien lo separe de lo que hace.

-Pareces conocer muy bien a Ôshima – dijo Kagami casi en susurro – ¿En qué dices que trabaja?

-Es profesor de algo en la universidad de Tokio – Kazunari sonrió – Aunque nunca lo he visto dar clases.

-Es muy bueno – reveló Shun – No conozco a nadie que no esté a gusto en su clase. Imparte Química orgánica.

-Así que Tooru-chan le sabe a la ciencia ¡Quién lo diría! – Kazunari hecho una bolsa de plátanos fritos al carrito – Creí que enseñaría algo más…. ¿social? ¿Económico? No tengo idea, en primera jamás me lo imagine dando clases.

-Takao deja de echar dulces en el carrito – Kagami lo regaño apartando las bolsitas de gomitas enchiladas – Midorima dijo que debes mantener dieta balanceada.

-Pero Tai-chan qué haré si por la noche tengo antojos... No quieres que tu hijo nazca con cara de gomita ¿verdad? – Takao lo miro con ojitos grandes y brillantes – Por favor…

-Tu ganas – Kagami pone las golosinas de vuelta en el carrito y gira la cara avergonzado porque aquel gesto le ha causado más ternura de la que esperaba – Vamos a pagar.

Los tres se dirigen a la caja, gracias a la notoria panza de Takao los atienden mucho más rápido, después de pagar Kagami junto con Izuki se hacen cargo de las bolsas hasta el auto del pelirrojo que se ofrece a llevarlos hasta la casa de Takao.

Kagami se sabe el camino a la perfección, ha pasado un mes desde que Kazunari lo ha dejado acercarse y cada vez es más frecuente que reciba sus visitas, sobre todo si es en fin de semana. Kazunari se ha acoplado a eso, y a que cada vez que el pelirrojo termine en la puerta de su casa diez minutos después aparezca Tooru o Tatsuya o Izuki. Tal y como ha pedido Ôshima nunca deja que se quede mucho tiempo a solas con él y en este punto no sabe qué tan bueno es, porque entre más pasa más desea esa privacidad y cuando se da cuenta de sus deseos se golpea mentalmente porque es justo lo que quiere evitar.

“Tooru tiene razón, soy bien idiota… cuando quiero” – piensa mientras se encarga de cerrar las ventanas de su departamento, sin embargo se queda congelado cuando va a cerrar la ventana que ve a la calle y lo ve – No puede ser.

Cierra tan rápido como puede, se siente descubierto, ha visto a Kuroko en la calle mirando a su ventana, incluso le ha sonreído cuando sus miradas se han cruzado y eso solo significa una cosa: que los ha visto, que sabe de su embarazo, que sabe que el padre es Kagami y que el tipo debe estar furioso.

El también estaría furioso con el chico que te ha quitado una fortuna de dinero andante como lo es Kagami y Takao sabe a la perfección que así es como Kuroko ve al pelirrojo.

-Oye Takao – le llama Izuki y se voltea para verlo, el pelinegro está mirando por le otra ventana, la que da a la otra calle - ¿Ese de ahí no es Himuro?

Kazunari se acerca y revisa por la ventana comprobando que ese es su amigo, quien va lento por la calle vestido con un pants y sudadera negra apenas puede reconocerlo, aunque Tatsuya no trabaje como oficinista ni nada parecido es bastante preocupado con su aspecto. Kazunari saco su celular y comprobó la fecha solo para estar seguro.

-Se ve muy raro, tal vez deba ir – Shun se dio la vuelta para ir a la puerta, siendo enseguida detenido por Takao - ¿Qué sucede?

-Hoy no es un buen día para Tatsu-chan – Kazunari le sonrió – Justo ahora no creo que quiera hablar con nadie, es más puedo apostar a que esta ebrio o fumado.

-¿Fumado? – Izuki giro el cuello para ver por la ventana aunque no alcanzo a ver a Himuro – Con más razón debería ir.

Kazunari no tuvo tiempo de detenerlo, simplemente Shun había salido corriendo para alcanzar a Himuro. Takao soltó un suspiro, no había tenido tiempo de nada y solo esperaba que Tatsuya no le hiciera alguna grosería a Izuki. No sabía cómo estaba y justo ese día las cosas no podrían salir bien, Himuro se volvía especialmente voluble, podría estar solo triste, tal vez melancólico y si Shun tenía mala suerte estaría furioso.

-¿A dónde fue Izuki? – Pregunto Kagami cuando regreso a la sala después de poner las bolsas en la cocina – Creí que se quedaría hasta que llegara Ôshima.

-Sí… pero surgió algo, un asunto con Tatsu-chan y ha ido a buscarlo – Kazunari le sonrió – Ya que el no está ¿Podrías ayudarme a acomodar las compras?

-Claro – Kagami le sonrió – Me alegra que por fin nos quedemos solos.

-¿Eh?~~ Tai-chan si lo dices así podría malpensarlo – Kazunari le guiño un ojo y le sonrió de forma picara – Recuerda que tu hijo te escucha.

-N-no quería que lo malpensaras… es solo… yo – Kagami se sonrojo hasta las orejas – Yo… mejor te ayudo.

Kazunari soltó una carcajada y se dirigió a la cocina. En silencio se dedicaron a ordenar las cosas recién compradas en donde debían ir. Kazunari se alzó de puntillas para colocar el sazonador en una de las estanterías arriba, sin conseguirlo pues la panza le impedía acercarse más.

-Déjame yo lo hago

Taiga tomo a Kazunari por la cintura moviéndolo a un lado, tomo los frascos con una mano y sin soltar a Takao los coloco donde debían ir. Kazunari sonrió por el contacto con un pequeño sonrojo formándose en sus mejillas, casi imperceptible.

El sonido de uno de los frascos cayéndose resonó por la cocina, gracias al cielo era de plástico y no de vidrio. Kagami miro a Takao preocupado al notar como el pelinegro se tocaba la panza con los ojos muy abiertos.

-¿Qué sucede? ¿Estás bien? – Pregunto preocupado Taiga.

-Creo que acaba de patear – Kazunari lo miro sorprendido y luego tomo las manos del pelirrojo para colocarlas sobre su vientre – Creo que fue por aquí.

Kagami coloco las manos donde el pelinegro indicaba y no tardo mucho para sentir lo que pensó era una muy leve patadita. Al ver la gran sonrisa de Takao supo que no se había equivocado. Sonrió aún más y se agacho a la altura de la barriga donde no hizo nada más que darle un beso.

////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////

Había corrido por más de diez minutos pero por fin había podido alcanzar a Himuro. Al parecer el mayor ni siquiera se había percatado de su presencia aun cuando solo estaba a un par de metros de distancia. Izuki acelero un poco el paso para por fin tocar el hombro ajeno y hacer que Tatsuya volteara.

-Himuro – Izuki hablo con dificultad por la falta de aliento, analizando al del lunar, se veía pálido, ojeroso con los ojos rojos, pero no dilatados, lo que significaba que no se había drogado ni nada parecido. Shun tomo aire – Ven conmigo.

Tatsuya no respondió y para alivio de Izuki se dejó arrastrar hasta un pequeño y abandonado parque, donde el pasto y las hierbas crecían desordenados y los juegos estaban rotos y oxidados. Se sentaron en una de las bancas de ahí.

-Shun, eres un chico inteligente ¿verdad? – Hablo por fin Tatsuya para sorpresa del menor – Ya que eres un chico inteligente deberías irte, antes de que decida atacarte.

-¿Vas a atacarme?

-Quien sabe – Himuro miro al cielo – Podría terminar violándote aquí mismo – Luego miro Izuki – O tal vez golpeándote.

-No me importa – Shun se alzó de hombros – Pareces muy débil justo ahora.

Himuro soltó una carcajada y en menos de lo que Shun pudo esperar ya se encontraba en el suelo con Himuro encima de él y entre sus piernas. Izuki espero ser atacado, pero lo único que paso fue el puño de Tatsuya al lado de su cabeza golpeando con fuerza el suelo.

-No estoy de humor Shun, solo lárgate, es un mal día.

-Todos tenemos malos días – Shun salió del pequeño trance – Y cuando tenemos malos días, lo mejor es estar con alguien, porque solos podemos cometer tonterías.

Shun pasó sus brazos alrededor del cuello de Tatsuya para jalarlo hacia sí mismo y abrazarlo. Himuro parpadeo con confusión y segundos después correspondió el abrazo, tan cálido que no lo merecía. Entonces pensó que la vida le daba otro regalo y no pudo evitar preguntarse esta vez cómo lo pagaría, ¿qué le quitaría la vida a cambio de Shun?

Notas finales:

Hey espero que les haya gustado el cap nwn 

Y pues el anuncio es que recorrere las actualizaciones a fines de semana, eso porque ya el luner entro a la escuela y aunque esta semana son solo examenes y capacitaciones todo indica que se pondra muy pesado, o bueno no sé, mi carrera tiene fama de ser pesada, así que tampoco se que tan puntual seré con las actualizaciones (de por si que me he vuelto muy impuntual y siento mucho eso) pero tratare de hacerlo semanalmente, bueno eso es todo, si me ven desaparecida por mucho tiempo es porque mi alma esta siendo consumida por la uni xD 

Nos leemos!! 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).